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Comentario de texto: hecho por Zouakia Bouchra S5, 2023

Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Pablo Neruda
Puedo escribir los versos más tristes esta noche es el vigésimo y penúltimo poema en el
poemario Veinte poemas de amor y una canción desesperada, escrito por el poeta chileno
Pablo Neruda y publicado en 1924. Neruda es uno de los representantes del vanguardismo y
uno de los poetas más conocidos y más apreciados del siglo XX. Ganador del premio Nobel
de literatura en 1971, Neruda empezó a escribir muy temprano, y este poema fue escrito al
principio de su carrera literaria, cuando el autor tenia veinte años de edad.
Esta creación lírica es un poema de amor triste, que trata del dolor que padece el amante
tras la pérdida de su amor.
En este poema, el autor se encuentra en un estado de tristeza y desolación porque perdió
a su amor. Asimismo, es un poema de reminiscencia y añoranza, como el poeta recuerda a lo
largo de las estrofas todos los momentos felices de su amor, comparándolos con su estado
actual de tristeza.
El poema se puede dividir en tres partes. La primera habla de la tristeza del amante y
de su nostalgia (desde el primer verso hasta el verso 20). La segunda parte trata del
sufrimiento padecido por la ausencia y los celos que siente el autor y abarca versos desde la
línea 20 hasta la línea 26. La última parte es como una conclusión y una reflexión sobre el
futuro de esa relación de amor.
Desde el principio, el poeta puso las cartas boca arriba. Es decir que desde la primera
línea “puedo escribir los versos más tristes esta noche” nos damos cuenta de su estado de
ánimo, y de la agitación emocional en la que está. El autor nos informa también que es un
poeta y nos presenta el ambiente general (la noche) que es claramente símbolo de su
infelicidad. Esta línea se repite tres veces en el poema por una razón (versos: 1, 5, 11). Es
altamente significativa porque establece una relación íntima entre la aflicción del poeta y su
arte. Entendemos que este estado de ánimo no es totalmente negativo, sino que hace activar
su genio poético dándole poder (puedo escribir) de escribir versos sobre astros azules que
titilan a lo lejos. Esa lejanía y ese color azul símbolo de frio y de soledad, también acentúan
el ambiente de tristeza. Y para darnos una idea aún más completa de esta noche triste, el
viento es tan violento que se escucha como si fuera una voz humana cantando.
Inmediatamente después de escuchar ese canto penoso, el autor lo recomienza todo, y se
repite la primera línea, como para enfatizar ese ambiente sombrío. El yo poético aparece
desde el principio del poema (puedo escribir), pero por primera vez el poeta lo expresa de
una manera explícita en ese sexto verso (yo la quise, y a veces ella también me quiso). El uso
de a veces, a mi parecer, es un poco raro porque se aplica al amor de la amada por el autor, y
se contrasta curiosamente con las tantas veces que la beso el poeta, como si las (tantas veces)
viene para negar el (a veces) de la amada, como el (a veces) de su amor para ella (verso 9)
“Ella me quiso, a veces yo también la quería”. Aquí se sustituye el pretérito perfecto por el
pretérito imperfecto (quise, quería) a lo mejor para insistir en la duración y la intensidad de
su amor por ella, por contraste con el amor de la amada que no es tan fuerte como el suyo. La
imagen de la mujer en este poema es siempre ligada con la oscuridad (noche, ojos negros), es
una imagen evocada de una manera ambigua: está lejos y pertenece al pasado, pero también
está en el presente, con él en sus pensamientos. A continuación, y como para justificar su
amor duradero y largo, el poeta nos sumerge en sus recuerdos deliciosos en los que se
deleitaba de este amor durante noches como está, deteniéndola en sus brazos y dándole besos
tiernos. Ese querer intenso se explica con la belleza de sus ojos profundos (cómo no haber
amado sus grandes ojos negros infinitos). A partir del siguiente verso empezamos a sentir
más la aflicción del autor por la ausencia de la amada, a través de su incapacidad de
guardarla. Al principio el poeta nos habla de poder y voluntad de escribir. Ahora, se habla de
impotencia (no pudiera guardarla, pensar que no la tengo, sentir que la he perdido, ella no
está conmigo). El impacto de la inmensidad de la noche es aún más difícil de aguantar sin su
presencia, y el poeta de hecho se vuelve nada más que un receptor pasivo cuya alma recibe
totalmente resignada ese verso de amor triste, como recibe la tierra el roció. El alma, incluso,
se contenta de haberla perdido. (Eso es todo) dice el poeta, como si fuera poniendo fin al
poema. A mí me suena como una conclusión antes del final. La línea viene al medio del
poema y nos da la impresión que debe quedarse ahí, debe terminar. Pero no, el autor sigue
sufriendo y (eso es todo) no quiere decir que se acabó, sino que es una especie de resumen a
su situación desesperada. El poema XX es también presentado por el autor como una
canción, un verso cantado. Así que existen dos referencias a esa música que resuena, en el
verso 4 y el verso 17 respectivamente: (el viento de la noche gira en el cielo y canta, a lo
lejos alguien canta). El poeta con estas dos referencias a lo mejor quiere recordarnos que este
es el último texto del poemario antes de llegar a esa canción triste y desesperada con la que
acaba la obra.
A continuación, llegamos a la segunda parte del poema, en la que se expresa el clímax
de nuestro texto lírico, porque en esa parte no se habla ya de versos que puede escribir el
artista, o de su reminiscencia y nostalgia, sino de sus sentimientos más profundos, de su
corazón buscando la amada que no encuentra. Asimismo, el autor evoca en esta parte este
cambio brutal que ocurre en los dos amantes, aunque todo alrededor nunca ha cambiado. La
noche y los arboles siguen siendo los mismos, pero los protagonistas han sufrido cambios
drásticos. (nosotros los de entonces ya no somos los mismos, ya no la quiero). Ese cambio
que siente el poeta le acompaña tanta nostalgia que solicita al viento para poder acercarse de
ella y tocar sus oídos. Aquí el uso del verbo tocar no es arbitrario. Tocar puede ser también
en el sentido de afectar y conmover a esa amada que se alejó, y que solo el viento puede
alcanzar. En esta segunda parte, el relato ya no es en el pasado, pero en el presente. El amor
perdido y los sentimientos de amargura son sustituidos por otros, y el autor da rienda suelta a
sus celos. La palabra (nosotros) con la que se habla de la pareja ya no se puede sostener, no
solo porque ellos han cambiado, pero también porque aparece la sombra de este otro
desconocido al que pertenece ahora la amada. Entonces, el poeta se lamentó que la amada, su
voz, su cuerpo claro, sus ojos infinitos, ya no serán suyos, serán del otro. Ese (otro) destrozo
el (nosotros).
En la estrofa siguiente llegamos a la tercera parte de este poema con una línea mítica que
es la más citada de todo el poema. Una línea que lo resume todo. Resume el dolor, el olvido,
el amor perdido y la nostalgia. Se analiza el amor y se nos da une afirmación cierta. Nos
dice Neruda (es tan corto el amor y es tan largo el olvido). Y así, el poema se acaba con una
conclusión amarga. Es verdad que el poeta ya no la quiere, o a lo mejor sí, él mismo no lo
sabe. Pero sí que esos son los últimos versos que iba a escribir para ella, como si quisiera
olvidarla y así dejar de sufrir. Por lo tanto, yo diría que este poema es como una terapia para
curar heridas profundas, como quien pasa por un proceso de duelo a fin de zanjar el
problema de una vez por todas.
Este poema fue escrito cuando el poeta era muy joven. Esto quiere decir que no es
todavía este poeta cumplido y maduro de los años cincuenta y sesenta. Entonces, Se explica
el estilo bastante sencillo y el lenguaje comprensible de Neruda. Se explican también los
sentimientos fogosos, apasionados y tremendamente tristes del poema, con los que cada uno
puede identificarse, especialmente los jóvenes.
El tiempo en este poema es variable y bidimensional. Primero, se evoca (esta noche)
muchas veces a lo largo del texto, y refiere al momento presente. Por otro lado, se nos
presenta la otra dimensión temporal, el pasado en el que el poeta era feliz. Entonces, yo creo
que el tiempo es un componente tremendamente importante porque define una línea
fundamental clara que distingue un estado feliz pasado y otro presente y triste. En cuanto al
espacio, no se precisa concretamente un lugar determinado en el que se estrena la historia,
pero entendemos que es un lugar bajo un cielo estrellado, inmenso. Un lugar ventoso y
sombrío, para constituir el ambiente adecuado por los sentimientos penosos del autor.
En cuanto a los aspectos formales, el poema está construido con 32 versos alejandrinos
distribuidos en 15 estrofas en pares y dos versos sueltos. Todos de arte mayor, de catorce
sílabas, salvo dos versos que constan trece sílabas y los dos últimos de 15. La rima es
asonante y el patrón libre.
En cuanto a los recursos literarios de forma, el poema está repleto de varias figuras
retoricas. A nivel del sonido el poema empieza con una aliteración que se reitera varias veces
a lo largo del poema. (Puedo escribir los versos más tristes esta noche), (Nosotros, los de
entonces, ya no somos los mismos). En el plano morfosintáctico destacamos varias figuras.
Muchas personificaciones son presentes en el poema 20. “El viento de la noche gira en el
cielo y canta”, “…tiritan, los astros azules,”, “Puedo escribir los versos más tristes esta
noche”, “Mi corazón la busca”, los astros son comparados con seres humanos que tienen
sentimientos y pueden titilar de miedo, de frio o de excitación. Asimismo, los versos son
tristes y el viento canta. La verdad es que los versos solo transmiten la tristeza de poeta, y el
viento rugiente se vuelve una canción para alcanzar a la amada. Existen también en el poema
algunos paralelismos, como el primer verso que se repite tres veces, y el verso (Yo la quise, y
a veces ella también me quiso ) y (Ella me quiso, a veces yo también la quería). (Mi corazón
busca, mi voz buscaba) (En las noches como está la tuve entre mis brazos, (versos 7 y 29).
Se usan también otras figuras retoricas como el símil (el verso cae al alma como al pasto el
roció), asíndeton con el que se suprime la conjunción “y” para dar más fluidez al verso, (Su
voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.) antítesis con la que se usan dos palabras opuestas en
la misma frase. (es tan corto el amor y tan largo el olvido), pleonasmo, con el que se repiten
palabras o expresiones para expresar la misma idea (Pensar que no la tengo. Sentir que la he
perdido.)
Como hemos visto, el poema veinte de Pablo Neruda es sumamente rico a nivel del
contenido, tal como a nivel de la forma. El poema es tan sencillo de leer, pero no es tan fácil
de analizar. A mí me ha gustado mucho la riqueza de los sentimientos expresados con los
que se puede fácilmente identificarse, así como el valor lingüístico de sus versos, su
ingeniosa sencillez y su profundidad al mismo tiempo. Aunque este poema fue publicado por
primera vez hace un siglo, queda el poema más conocido y más apreciado del gran poeta
Pablo Neruda.

refuerzan la melodía del alejandrino y le dan más ritmo al poema.


El Reloj :3

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