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SEMINARIO TEOLÓGICO CENTROAMERICANO

LA SOBERANIA DE DIOS EN JOB

Tarea: Monografía
Presentada en cumplimiento parcial de los requisitos de la materia
406.S Bibliología y Teología Propia

Silverio Efraín González Jorge

18 de abril de 2018
LA SOBERANIA DE DIOS EN JOB

La presente investigación, trata de desarrollar y comprender la soberanía de Dios

en el libro de Job. Aunque estudiaremos el caso de Job, su vida, los sucesos que lo

rodean, la causa de los acontecimientos, tendremos siempre presente que haremos el

estudio por la causa de encontrar y extraer, la soberanía de Dios. En este sentido el

estudio estará girando en torno a Dios y su soberanía, utilizando los acontecimientos en el

libro de Job como medio de investigación.

Asuntos introductorios

Cuando pensamos en la soberanía de Dios, es necesario indagar un poco acerca de

la relación y profundidad significativa que eso conlleva, puesto que al pensar en Dios, no

podemos hacer una separación entre ambos, decimos que Dios es soberado por Él ha

permitido que sepamos eso de Él, en nuestro intento de conocer a Dios, no podemos

sobrepasar el limite de conocerlo y saber de Él, mas de lo que Él mismo ha permitido, en

otro sentido Él se ha revelado a si mismo a la humanidad, por eso conocemos que es

soberado, porque Él mismo a dado evidencia de su soberanía. Y como el hombre no

puede comprender a Dios, mas que en su propio lenguaje, Dios se revela al hombre con

atributos que el hombre puede comprender, por eso decimos que Dios es un ser personal

y junto con ello mencionamos sus atributos y empleamos “expresiones de relaciones

humanas interpersonales, tales como Dios es amor, es fiel, es justo etc.”.1 Es de esa

manera que el hombre puede reflexionar acerca de Dios.

1
“Dios”, Diccionario Manual Teológico, ed. Justo L González (Barcelona: Clie, 2010), 84.

1
En cuanto a la soberanía, el diccionario describe que el que tiene soberanía es “el

que tiene y ejerce la autoridad suprema”2 entonces cuando decimos que Dios es soberano,

estamos diciendo que Él ejerce control total de toda su creación, cuando hablamos de la

soberanía de Dios, estamos hablando de su autoridad absoluta sobre todo lo que existe,

así como está escrito, “Tuya es, oh Jehová, la magnificencia y el poder, la gloria, la

victoria y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas.

Tuyo, oh Jehová, es el reino, y tú eres excelso sobre todos”. (1 Cr 29:11) 3. Con esto

ampliamos el horizonte acerca de la soberanía de Dios puesto que ser soberano es ser

supremo, es ser Rey de todo lo existente, donde nadie puede refutar y contradecir su

voluntad, la soberanía es un atributo de autoridad total, que humanamente lo podemos

comprender, porque es un atributo humano, grabado en el lenguaje y el pensamiento del

hombre para describir a alguien cuya autoridad es suprema a la de todas las demás

personas, entonces por eso es que entendemos que Dios está sobre todas cosas, porque lo

que sabemos decir de alguien que esta sobre toda autoridad, ahora Dios es soberano

porque todo está en sus manos, todo lo gobierna, sobre todo tiene control, todo este sujeto

a Él. Tal como dice A. W. Pink “La soberanía del Dios de la Escritura es absoluta,

irresistible, infinita. Cuando decimos que Dios es soberano, afirmamos su derecho a

gobernar el universo, que ha hecho para su propia gloria, según le agrade”.4 Por eso

decimos que Él es el absoluto, el eterno, el que gobierna todo lo que hay dentro y fuera de

la tierra. El que decide qué hacer con su creación, pues es el único que lo gobierna a su

voluntad. Sobre Él no hay nadie más, puesto que todo fue creado por Él. Así que todo lo

2
“Soberano” Diccionario Básico de español, http://www.educar.org (SEVP abril 2009), 1110.
3
Todos los textos bíblicos serán tomados de la Versión Reina Valera, revisión de 1960, salvo en los
casos cuando se indique de otra forma.
4
A. W. Pink, La Soberanía de Dios (Edinburgh: El Estandarte de la Verdad, 1995), 25.

2
hace conforme a su voluntad. Él es el único que se merece toda la gloria, la alabanza,

puesto que todos somos su creación.

La soberanía de Dios en Job

Ahora que hemos visto que Dios es soberano, porque tiene señorío sobre todo lo

existente, y que nadie tiene mayor autoridad que Él, nos adentramos al tema de su

soberanía en el relato de Job. De ante mano en el relato, el tema central es el sufrimiento

de Job, como también la providencia de Dios como signo de su soberanía.

como todos los seres humanos que experimentan el sufrimiento, el libro resulta
atractivo para todos. Su mensaje es atemporal y para todas las culturas. Mas en concreto,
el protagonista del libro sufre, aunque al parecer él no es la causa de su sufrimiento. Sus
dolencias físicas, por esta misma razón, se agravan con su angustia mental: ¿Por qué yo?
¿Qué he hecho para merecer esta suerte?5

Se dice que el tema central es el sufrimiento, por el relato de la historia de un

hombre que según la Escritura era un hombre recto, piadoso delante de Dios, sin

embargo, eso no impide que Dios en su soberanía decida el futuro de su vida. Y respecto

a los sucesos en la vida de Job, parece ser más lógico a la mente humana, que, por ser un

hombre piadoso, todas las cosas debían caminar bien y que las dolencias y las

calamidades no tocarían esa vida, puesto que es temeroso de Dios. Sin embargo desde el

inicio del libro, vemos a Dios como el único soberano, que gobierna a todas las huestes

celestiales, es decir todos los seres celestiales pasan a ser sus sirvientes, podría tomar

cualquier decisión sobre todo ser viviente tanto en el cielo como en la tierra, y Job no

estaba exento de la soberanía de Dios, porque al final de cuentas era su creación, como

dice la escritura “En el principio creo Dios, los cielos y la Tierra” (Gn 1:1) y más

5
Dillard. Raymond B, y Longman, III Tremper, Introducción al Antiguo Testamento (Grand
Rapids: Desafío, 2007), 271.

3
adelante leemos que el hombre es creación de Dios “Y creó Dios al hombre a su imagen,

a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.” (Gn 1:27) De esa manera Él podría

tomar cualquier decisión sobre su creación según sea su voluntad, porque es el Señor de

todo, Dios podría cambiar el curso de la vida de cualquier hombre, sin importar que sea

un hombre justo delante de Él. Para comprender de mejor manera el desarrollo de la

soberanía de Dios y los acontecimientos en el relato de Job, Tremper y Raymond nos dan

un sencillo bosquejo del libro de Job:

Prologo en prosa que introduce a los protagonistas y la trama. Job 1-2


Diálogos de Job con sus tres amigos. Job 3-31
Lamento de Job. Job 3
Tres siclos de diálogos. Job 4-27
El poema sobre la sabiduría divina. Job 28
Ultimo discurso de Job. Job 29-31
Monologo de Eliú. Job 32-37
Yahvé habla desde la tempestad. Job 38-42:6
El epilogo en prosa que pone fin a la acción. Job 42:7-176

De Job se dice que era un hombre con muchas posesiones, y que a la vez era un

hombre piadoso, el perfil que el texto le da Job es la de “…un hombre perfecto y recto,

temeroso de Dios y apartado del mal” (Job 1:1) de otra manera la Escritura dice que Job

era “…un hombre recto e intachable, que temía a Dios y vivía apartado del mal” (Job 1:1

NVI). A manera introductoria y perfilando a Job, en los siguientes versículos se dice que

Job tenía múltiples riquezas. Para su época nombrar la cantidad de su riqueza, era

considerado como una riqueza enorme, se dice que “era dueño de siete mil ovejas, tres

mil camellos, quinientas yuntas de bueyes y quinientas asnas, y su servidumbre era muy

numerosa” (Job 1:3), incluso para nuestros días tener una magnitud de riqueza como la de

Job, sigue siendo grande y la persona que lo posee siguen siendo visto como una persona

6
Dillard. Raymond B, y Longman, III Tremper, Introducción al Antiguo Testamento (Grand
Rapids: Desafío, 2007), 274.

4
muy acaudalada. La referencia que sigue acerca de Job relata a un hombre exitoso que

celebraba la vida constantemente, como también se dice de él, que “era el hombre mas

influyente de oriente y que al mismo tiempo hacia la función de sacerdote en su familia,

al presentar sacrificios de manera preventiva por los pecados de su familia” (Job 1:3-5).

Ahora al ver el perfil de Job, rápidamente podríamos decir que es la vida de todo hombre

exitoso, con una vida recta y piadosa delante de Dios, por lo tanto, lo lógico sería que, en

respuesta, Dios le bendecirá, lo prosperara y lo cuidara para tener una vida feliz, libre de

toca calamidad, problemas y pruebas, todo esto como recompensa de ser un hombre fiel y

temeroso delante de Él. Pareciera absurdo que el regalo de una vida piadosa sea pagado

con dolencias y miserias. Al respecto José Ignacio comenta que Tomas de Aquino aborda

el tema “que los justos sean afligidos sin motivo, parece minar totalmente el fundamento

de la providencia de Dios”7

Sin embargo, el tema no es el hombre sino la demostración de la soberanía de Dios,

puesto que se explica mas adelante en el libro de Job, que Dios mismo tiene el control

sobre los seres vivientes del cielo, entre ellos al acusador. Desde el inicio de libro vemos

que el agente que actúa es Dios, es Él quien tiene el centro de la acción en todo el libro.

Podríamos resaltar el hecho de que los seres celestiales acuden a su llamado, y que, en

ese modo, Dios tiene el control de los seres celestiales, puesto que los reúne, incluso

también se acerca el acusador, a quien Dios también controla. De modo, que podríamos

proponer que en eso radica la soberanía de Dios, puesto que es el que gobierna en el

cielo. La Escritura dice que Dios reunió a sus servidores “…vinieron a presentarse

delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también satanás” (Job 1:6),

ahora respecto a dicha reunión, se vuelve trascendental y llama la atención el hecho de


7
Saranyana. José Ignacio, reseña de Santo Tomas, comentario al libro de Job: 3

5
que en esa misma reunión también llega Satanás, sin embargo, hay una referencia que

dice que el personaje que se presenta no es Satanás, sino el Satanás.

“el Satanás, no es el diablo personal sino uno de los siervos de Dios (nombre
significa “adversario”). El Satanás es ciertamente el adversario de Job, pero en esta
escena no es un enemigo de Dios; porque todo lo que hace es aprobado por Dios, y no
puede actuar sin su autorización. Su tarea normal es actuar como los ojos y oídos de Dios
en la tierra”8

Sin embargo, hay otra referencia que se inclina más a que el adversario que se

menciona en Job ciertamente es Satanás, el mismo que hizo cae a Adán, el adversario.

“La aparición de este nombre, fue relacionada con la extensa y divulgada


tradición de que Satanás había sido el agente en la tentación de Adán, por tanto, se da el
nombre aquí sin comentario, el sentimiento con que contempla a Job es similar a aquel
con que miraba a Adán en el paraíso: animado por su éxito en el caso de uno aún no
caído en pecado, él esta seguro de que la piedad de Job, quien pertenece a la raza caída,
no resistirá a la prueba.”9

Vemos que tanto en la tierra Job un hombre piadoso se presentaba delante de Dios

con sacrificios para purificar su vida, también en el cielo, los hijos de Dios se presentaban

delante de Él. En esa conversación se dice que “Dios comienza con el proceso al llamar

la atención de Satanás sobre Job”.10 La importancia de este suceso es que es Dios quien

incita a satanás para fijarse en su siervo Job, es Él quien de alguna manera está orgulloso

de la rectitud de Job. En esta escena queda revelada la soberanía de Dios, al ser Él quien

permite actuar a satanás, de no ser por Dios, Satanás no podría tocar a Job, porque “las

aflicciones de Job comenzaron por la maldad de Satanás, con el permiso del Señor. Sin

embargo, la acusación es que Job es un hombre temeroso de Dios, porque Dios mismo lo

ha protegido y prosperado, en ese sentido Satanás propone que al quitar Dios “la valla de

8
G.J. Wenham, J.A. Motyer, Nuevo Comentario Bíblico Siglo Veintiuno (Mundo Hispano, 2003),
1025.
9
Jamieson. Roberto, Brown. David, Comentario Exegético y Explicativo de la Biblia Tomo I: El
Antiguo Testamento (El Paso: Casa Bautista, 2003), 457.
10
“Job” Nuevo Diccionario de la Biblia, ed. Alfonso Lockward (Miami: Unilit, 1999), 584.

6
protección a su alrededor maldeciría a su Creador en su presencia”11después de eso Dios

permite las aflicciones de Job, en esa escena Job pierde a sus hijos y toda su riqueza,

representaba en la cantidad de animales de su propiedad, una inesperada prueba invade a

Job, y lo deja en la banca rota, sin poder siquiera refugiarse y consolarse con sus hijos,

puesto que también los ha perdido. La apuesta del acusador era que con eso él daría la

espalda al Creador, sin embargo, en las escrituras dice “Entonces Job se levantó, y rasgó

su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró,” (Job 1:20) en lugar de

maldecir a Dios, Job lo acepta diciendo “Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo

volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.” (Job 1:21) la

asombrosa respuesta de Job queda escrito, donde dice que Job “En todo esto no pecó, ni

atribuyó a Dios despropósito alguno.” (Job 1:21). Sin embargo, esta respuesta no deja

satisfecho al acusador, Dios en su soberanía permite que se intensifique la prueba,

tocando su cuerpo, pero preservando su vida. De esa manera Job fue alcanzado con una

enfermedad que cubrió todo su cuerpo, a pesar de ello y sin tener el apoyo de su esposa,

él no peca contra Dios. La apuesta seguía en pie, el resultado esperado por el enemigo era

que Job maldijere a Dios con su boca, parece ser que hasta la mujer de Job sabe maldecir

a Dios acarrea la muerte al decir “…maldice a Dios y muérete” (Job 2:9), maldecir a Dios

eran tan delicado, el pecado más esperado por el enemigo para que fuera ejecutado por

Job, el relato resalta “…En todo esto no pecó Job con sus labios.” (Job 2:10).

Son tres cosas las que hacen tan “grande el dolor de Job: sufre sin culpa, su

sufrimiento viene inesperado, cae de gran altura”. 12 a pesar de ellos, Job hace duelo por

su desgracia, pero no quita su mirada en su Creador.

11
MacDonald. William, Comentario Bíblico de William MacDonald obra completa (Barcelona:
Clie, 2004), 477.
12
Peters. Benedikt, El Libro de Job ¿Por qué tienen que sufrir los justos? (Dillenburg, 2002), 31.

7
Con su grandiosa confesión, Job demuestra que no sirve a Dios, porque eso le trae
ventajas. Con ello queda refutada la mentira que Satanás había expresado delante del
consejo celestial reunido. Y Job demuestra además otra cosa: él sabe que la vida del
hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee (Lc 12:15), sino en algo
infinitamente más sublime: en la relación correcta hacia Dios (Jn 17:3)13

La aflicción de Job fue tan grande que el deseo no haber nacido, sin embargo, al

retomar el tema de la soberanía de Dios, vemos que durante todo este tiempo Dios tuvo el

control y después de ello, siendo Dios mismo el que dio el visto bueno para la prueba, es

el mismo quien restaura la vida y devuelve doblemente la salud y las posiciones de Job.

“Y bendijo Jehová el postrer estado de Job más que el primero; porque tuvo catorce mil

ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas, y tuvo siete hijos y tres

hijas.” (Job 42:12-14)

Conclusión

Dios es el creador y sustentador de todo lo existente, todos los hijos de Dios

habitantes de cielo, a quienes podríamos llamar ángeles, están bajo el control de Dios,

incluso Satanás se presenta delante de Dios y es controlado por Él. Al mismo tiempo en

la voluntad maravillosa de Dios, estamos todos los seres habitantes de la tierra, todos

estamos sujetos a su voluntad y propósitos, en eso radica su soberanía, que Él es el único

con autoridad suprema, dirige nuestra vida. La supremacía de Dios es única y eterna

13
Peters. Benedikt, El Libro de Job ¿Por qué tienen que sufrir los justos? (Dillenburg, 2002), 31.

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