El método AHP, o Análisis Jerárquico de Procesos (por sus siglas en inglés,
Analytic Hierarchy Process), es una técnica de toma de decisiones desarrollada por el matemático y científico de la gestión Thomas L. Saaty en la década de 1970. Este método se utiliza para abordar problemas complejos de toma de decisiones en los que se deben considerar múltiples criterios y alternativas.
El AHP se basa en la idea de descomponer un problema de toma de decisiones
en una estructura jerárquica, que consta de un objetivo principal, criterios intermedios y alternativas. Luego, se asignan valores numéricos a las relaciones de importancia entre estos elementos mediante comparaciones pareadas. Los participantes en el proceso de toma de decisiones comparan las alternativas y los criterios dos a dos, proporcionando juicios subjetivos sobre cuál de los dos es más importante en cada caso. Estas comparaciones pareadas se utilizan para calcular matrices de prioridades y, finalmente, obtener una puntuación numérica que refleja la preferencia global de cada alternativa en relación con el objetivo principal.
El método AHP es ampliamente utilizado en campos como la planificación
estratégica, la gestión de proyectos, la selección de proveedores y la evaluación de riesgos, ya que permite tomar decisiones más fundamentadas al considerar de manera explícita las preferencias y prioridades de los expertos involucrados en el proceso de toma de decisiones.
En el contexto de cadenas de suministro y logística se utiliza para evaluar y
priorizar diferentes alternativas o soluciones. Este método se basa en la descomposición jerárquica de un problema en sus componentes clave y permite a los profesionales de la cadena de suministro tomar decisiones informadas y estructuradas. Aquí tienes un resumen sobre el método AHP en este contexto:
El método AHP se utiliza en la gestión de cadenas de suministro y logística para
abordar problemas complejos de toma de decisiones. Se caracteriza por los siguientes pasos:
1. Definición de la jerarquía: En primer lugar, se identifican todos los
factores relevantes que influyen en la toma de decisiones en una cadena de suministro o proceso logístico. Estos factores se organizan en una estructura jerárquica que consta de un objetivo principal, criterios y subcriterios. 2. Asignación de pesos: Luego, se asignan pesos relativos a cada elemento en la jerarquía. Esto se hace mediante comparaciones pareadas, donde los expertos o tomadores de decisiones evalúan la importancia relativa de los elementos en relación con otros. Estas comparaciones se traducen en valores numéricos. 3. Construcción de matrices: Con base en las comparaciones pareadas, se construyen matrices de comparación que cuantifican las relaciones entre los elementos en la jerarquía. Estas matrices se utilizan para calcular los valores de consistencia y verificar la coherencia de las decisiones tomadas. 4. Cálculo de prioridades: Utilizando las matrices de comparación y los pesos asignados, se calculan las prioridades de los elementos en cada nivel de la jerarquía. Esto permite determinar qué alternativas o soluciones son más favorables según los criterios establecidos. 5. Análisis de sensibilidad: Se realiza un análisis de sensibilidad para evaluar cómo cambian las prioridades cuando se ajustan los pesos o se modifican las comparaciones pareadas. Esto ayuda a comprender la robustez de las decisiones tomadas. 6. Elección de la mejor alternativa: Finalmente, se elige la mejor alternativa o solución en función de las prioridades calculadas. Esta decisión se toma de manera informada y considerando la importancia relativa de los factores clave en la cadena de suministro o logística.
El método AHP es valioso en la gestión de cadenas de suministro y logística
porque permite abordar la complejidad de la toma de decisiones al considerar múltiples criterios y subcriterios, así como la opinión de expertos. Además, facilita la comunicación y la justificación de decisiones en entornos empresariales donde la eficiencia y la optimización son fundamentales para el éxito.