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A pesar que todos los hombres hacemos referencia al pasado, eso no basta para
delimitar la actividad del historiador de la de otros porque al interiorizar un
acontecimiento remoto sólo se capta el hecho histórico, pero analizarlo y clasificarlo
es hacerlo objeto de estudio científico.
No es fácil definir lo que es historia. La historia es una relación escrita de los hechos
de la vida del hombre, desde el pasado hasta el presente, más el estudio del
significado de tales hechos para el hombre mismo.
Todos los hechos científicos están vinculados entre si y que los hechos
históricos tienen por lo tanto vínculos con los hechos económicos, políticos y
culturales. La historia de la educación forma parte de la historia de la cultura; por lo
tanto, el hecho pedagógico debe ser estudiado en su relación con los otros hechos de
naturaleza cultural. La evolución de los ideales y sistemas pedagógicos tiene, como
telón de fondo, la evolución social en su expresión material y espiritual.
Cada una y cada uno de nosotros y todos juntos no somos otra cosa más que
el producto de sucesos a lo largo de nuestra historia.
2. La historia nos ayuda a entender el mundo en el que vivimos, una mirada a lo que
ocurrió en el pasado, nos da un panorama completo de por qué el mundo es como es,
no solo nuestra en realidad si no en el contexto global, incluyendo otras culturas y
desde luego, la naturaleza. Aprender sobre las causas y efectos de los eventos en la
historia de la humanidad, nos brinda mejores herramientas para tratar los conflictos
entre las naciones y los individuos.
Las FUENTES SECUNDARIAS han sido elaboradas con posterioridad al período que
se está estudiando y son obra de los historiadores. Fundamentalmente son los libros
de texto, los manuales, los estudios científicos y artículos de revistas especializadas...
También son fuentes secundarias los gráficos y los mapas temáticos realizados con
datos primarios.
Fuentes ESCRITAS o TEXTUALES: Son las fuentes más habituales y pueden ser
primarias o secundarias. Las primarias son los documentos jurídicos (leyes y
testamentos) y textos oficiales, las memorias, crónicas, censos y registros
parroquiales, cartas, diarios privados, prensa y ensayos de la época, textos literarios
del momento... Las secundarias son los libros de historia y otros trabajos de los
historiadores.
Fuentes CARTOGRÁFICAS: Son los mapas. Raramente son fuentes primarias. Los
mapas tienen un lenguaje específico que es necesario poder interpretar, para lo que
debe adjuntarse una clave (o leyenda) con el significado de los símbolos, los colores o
las tramas utilizados en su realización. Los mapas históricos son temáticos y de dos
tipos: sincrónicos (o estáticos) (explican la situación en un momento determinado) y
diacrónicos (o dinámicos) (explican la evolución de una situación histórica y los
cambios que se han producido).
• Según su temática, teniendo en cuenta que las fuentes históricas tratan y nos dan
información sobre alguno o diversos aspectos (política, economía, sociedad, ciencia y
técnica, religión, cultura, arte), pueden ser: fuentes políticas, económicas, técnicas y
científicas, sociales, religiosas, militares... Las leyes, en cualquiera de sus formas
(pragmática, decreto, constitución...) son fuentes jurídicas o legislativas.
Hay quien afirma que la Historia debería "pisarse", en el sentido que cuando
hablamos, por ejemplo, de la Edad Moderna deberíamos pisar alguna ciudad colonial
del siglo XVIII; para comprender la revolución industrial deberíamos poder visitar
una fábrica o un barrio burgués, entrar en sus casas y compararlo con los suburbios
obreros del mismo momento. ¿Podemos comprender la aventura americana sin haber
subido nunca en buque de vela? ¿Es posible imaginar lo que fue la Segunda Guerra
Mundial sin haber sentido de alguna forma la angustia de un bombardeo aéreo?
Naturalmente, una fábrica puede ser una magnífica fuente para la Historia del siglo
XIX, como lo es una catedral, una ciudad colonial, un yacimiento arqueológico o un
periódico antiguo, etc. La cuestión principal radica en saberlo identificar como
documento histórico, en saber acercarse a él con actitud especulativa y con
sensibilidad científica.
RESUMEN DE LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN T 3
Como sabemos la educación va de la mano con la evolución del ser humano, ya que
todas las sociedades por más primitivas que sean se apoyan en la enseñanza.
Podríamos asegurar que la educación asume su origen en las comunidades
primitivas y el punto de referencia lo encontramos cuando el ser humano pasa de
vivir un estilo de vida nómada a establecerse y ser sedentario; donde ya se beneficia
de sus primeras labores, como la caza y la pesca, la agricultura y la recolección de
sus alimentos y sobre todo de su supervivencia.
A lo largo de este período los principales lugares para aprender eran los monasterios,
que mantenían en sus bibliotecas muchos manuscritos de la cultura clásica. La
educación medieval también desarrolló la forma de aprendizaje a través
del trabajo o servicio propio. A pesar de eso, la educación era un privilegio de las
clases superiores y la mayor parte de los miembros de las clases bajas no tenían
acceso a la misma.
En los inicios del siglo XVI, las iglesias protestantes surgidas a partir de la reforma
propuesta por Martín Lutero, establecieron escuelas en las cuales se enseñaba a
leer, escribir, nociones básicas de aritmética, el catecismo en un nivel elemental, y
cultura clásica, hebreo, matemáticas, y ciencias, en lo que se podría denominar
enseñanza secundaria. En Suiza, otra rama del protestantismo fue creada por el
teólogo y reformador francés Calvino, cuya academia en Ginebra, fue un importante
centro educativo. La moderna práctica del control de la educación por parte del
gobierno fue diseñada por Lutero, Calvino y otros líderes religiosos y educadores de
la Reforma.
Los católicos también siguieron las ideas educativas del renacimiento, en las
escuelas que dirigían, o que promovieron, como forma de respuesta a la creciente
influencia del protestantismo, dentro del espíritu de la Contrarreforma.
Esa síntesis se realizaba en los centros de la Compañía de Jesús, fundada por el
religioso español San Ignacio de Loyola en 1540, con la aprobación del papa Pablo
III. Los jesuitas, como son conocidos los miembros de esta congregación,
promovieron un sistema de escuelas que han tenido un papel preponderante en el
desarrollo de la educación católica en muchos países desde el siglo XVI: la
llamada "Ratio Studioron", que después se transformarían en las "Escuelas
Pías", de San José de Calasanz.
El siglo XVII fue un período de rápido progreso de muchas ciencias y de la creación
de instituciones que apoyaban el desenvolvimiento del conocimiento científico.
Muchos educadores ejercieron una amplia influencia. El educador alemán Wolfang
Ratke inició el uso de nuevos métodos para enseñar más rápidamente la lengua
vernácula, las lenguas clásicas, y el hebreo. René Descartes, filósofo francés,
remarcó el papel de la lógica como el principio fundamental del pensamiento
racional, postulado que se ha mantenido hasta la actualidad como base de la
educación en Francia. La importancia de la ciencia se manifestó en los escritos del
filósofo inglés Francis Bacon, que fundamentó los procesos de aprendizaje en
el método inductivo que anima a los estudiantes a observar y examinar de forma
empírica objetos y situaciones antes de llegar a conclusiones sobre lo observado. El
filósofo inglés John Locke recomendaba un currículo y una metodología de
educación (que contemplaba la educación física) basada en el examen empírico de los
hechos demostrables antes de llegar a conclusiones. El educador francés san Juan
Bautista de La Salle, fundador del Instituto de los Hermanos de las Escuelas
Cristianas en 1684, estableció un seminario para profesores y fue pionero en su
educación sistemática.
El educador más destacado del siglo XVII fue Jan Komensky, obispo protestante de
Moravia, más conocido con el nombre latino de Comenio.
En su obra "Didáctica Magna", escrita entre 1628 y 1632, remarcó el valor de
estimular el interés del alumno en los procesos educativos y enseñar múltiples
referencias sobre las cosas concretas, más que en sus descripciones verbales. Su
objetivo educativo podría resumirse a una frase de la página inicial de
"Didáctica Magna": "…Enseñar a través de todas las cosas a todos los hombres…",
postura que se conoce como pansofía. Los esfuerzos de Comenio para el desarrollo de
la educación universal le valieron el título de "Maestro de las Naciones".
El teórico educativo más relevante del siglo XVIII fue Jean-Jacques Rousseau,
nacido en Ginebra. Su influencia fue considerable tanto en Europa como en otros
continentes. En "Emilio", escrito en 1762, insistió en que los alumnos deberían
ser tratados como niños más que adultos en miniatura, y que se debía atender a
la personalidad individual. Entre las propuestas concretas estaba la de enseñar a
leer en una edad posterior y el estudio de la naturaleza y de la sociedad
por observación directa. Sus propuestas radicales sólo eran aplicables a los niños
del sexo masculino: las niñas debían recibir educación convencional. El más
influyente de los seguidores de Rousseau fue el educador suizo Johann
Pestalozzi, cuyas ideas y prácticas ejercieron gran influencia en las escuelas de todo
el continente. El principal objetivo de Pestalozzi fue adaptar el método de enseñanza
al desenvolvimiento natural del niño. Para alcanzar este objetivo, consideraba el
desenvolvimiento armonioso de todas las facultades del educando (cabeza, corazón y
manos).
Otros educadores influyentes del siglo XIX fueron el alemán Friedrich Froebel, que
introdujo la educación preescolar la cual se conoce como el “Kindergarten”, el
filósofo inglés Herbert Spencer, que defendía el conocimiento científico como siendo
el tema más importante a ser enseñado en la escuela. El filósofo y matemático
francés August Comte, teorizador del positivismo social.
El siglo XIX fue un período en que los sistemas nacionales de escolarización se
organizaron en el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, España y en otros países
europeos. Las nuevas naciones independientes de América Latina, especialmente
Argentina y Uruguay, miraron para Europa y los Estados
Unidos buscando modelos para sus escuelas. El advenimiento de la educación
pública se confunde muchas veces con el surgimiento de las repúblicas modernas,
tal el caso de Francia, por ejemplo. La escuela pública, encargada de formar
ciudadanos mediante una educación básica gratuita para toda la población, comenzó
a difundirse de manera significativa en el siglo XIX.
En inicios del siglo XX la actividad educativa se vio muy influenciada por los escritos
de la feminista y educadora sueca Ellen Key. Su libro "El Siglo de los
Niños", escrito en 1900, fue traducido a varios idiomas e inspiró a los educadores
progresistas en muchos países. Entre los educadores de mayor influencia cabe
destacar al alemán Georg Kerschensteiner (Escuela del trabajo), el francés, Ovide
Decroly (centros de interés) y a la italiana María Montessori. En los Estados Unidos
tuvo una enorme influencia, luego extendida a todo el mundo, el filósofo y
educador John Dewey. El programa de actividades que se derivaba de las teorías de
Dewey fortalecía el desenvolvimiento educativo del alumno en términos de animación
de las necesidades e intereses del mismo. Llegó a ser el método principal de
instrucción durante muchos años en las escuelas de los Estados Unidos y de otros
países. Todos ellos ejercieron amplia influencia en los sistemas educativos de los
países de América latina. Contribuyeron al interés internacional por la educación
soviética las teorías y prácticas pedagógicas que procedían de la ideología marxista-
leninista, tan bien expresada en el trabajo de Antón Makarenko, un claro exponente
de la rehabilitación de los delincuentes juveniles y de la educación colectiva durante
los primeros años de la Revolución.
El siglo XX ha estado marcado por la expansión de los sistemas educacionales de
las naciones industrializadas, así como por la aparición de sistemas escolares entre
las naciones más recientemente industrializadas de Asia y África.
EDAD ANTIGUA T 4
Período histórico, anterior a la Edad Media, que abarca desde la aparición de la escritura hasta el fin del
Imperio romano, hacia el siglo v.
Está representada por los llamados pueblos tradicionalistas. Estos pueblos cultivaron los tesoros
culturales de sus antepasados, siendo este el rasgo esencial de su pedagogía.
El tradicionalismo pedagógico consiste en la transmisión de bienes culturales de una generación a otra. Tres
factores constituyen el tradicionalismo:
Una generación encargada de transmitir los bienes culturales.
Una generación que recibe esos bienes culturales.
El acervo cultural tradicionalista, materia del proceso. 1
Los pueblos tradicionalistas se enamoran profundamente de su pasado y rechazan toda innovación que los
pueda apartar de sus tradiciones. Los valores alcanzados por sus antepasados son para ellos los más altos a
que puede aspirar un pueblo, de ahí el que cierre las puertas al progreso y transmitan fielmente sus tesoros
de antaño. La educación, empero tiene una orientación definida y se adquiere la conciencia de que se está
educando intencionalmente.
Son rasgos característicos de los pueblos tradicionalistas los siguientes:
Su organización política de tipo estatal.
La diferenciación de castas.
El aparecimiento de la escritura y con ello la fijación del saber.
La organización de una educación intencional y sistemática.
La Educación en la China.
Esta civilización es de las más antiguas. Se distinguen tres épocas:
Arcaica: desde el inicio hasta el 2300 a. C. organización familiar de tipo matriarcal.
Feudal: hasta el año 500 a. C. con tendencias guerreras y organización patriarcal.
Imperial: corresponde al gobierno de los mandarines.
En la riqueza de su literatura destacan los 5 King:
La Crónica de la Patria.
El Libro de la Historia.
El Libro de los Ritos.
El Libro de los Versos.
El Libro de la Adivinación.
Estas obras atribuidas a Confucio, ejercieron una influencia poderosa en la educación de la época imperial.
Aparecen sentencias religioso-morales de contenido humano, ocupando lugar preferente sus narraciones
históricas. La Centuria de los Apellidos, Odas para Niños, Los Cánones del Deber Filial, Clásico Trimétrico
y El Instructor de los Jóvenes, fueron libros comunes en los escolares.
Los usos y costumbres chinas, evidencian un alto sentido de elevación social y de refinada cortesía que aún
se admiran en nuestros días. Figuran inventos que deslumbraron al hombre como la pólvora, la brújula, el
papel vegetal y la xilografía o germen de la imprenta.
Este pueblo es la muestra más típica del tradicionalismo extremo. Cerraron las puertas al progreso para
transmitir su cultura milenaria. Su educación se limita a memorizar rutinariamente los textos antiguos y en el
rasgo más liberal, a escribir poemas y ensayos sobre los libros canónicos.
En su educación se distinguen las etapas:
Educación familiar: hasta los 7 años. El niño aprende a hablar, algunos usos sociales, y rudimentos morales.
Era confiada al padre de familia.
Educación elemental: de 7 a 14 años. Impartida en la casa y en la escuela. Aprende a leer y escribir con el
libro de Las Tres Palabras. Es memorística y rutinaria. Se imparte también el cálculo elemental valiéndose
del ábaco. Es instruido en moral y religión con las doctrinas de Confucio.
Educación superior: hasta los 18 o 19 años. La poesía, la historia y la filosofía son las ramas importantes de
este período. Se les induce a la composición literaria y se les dan nociones de ciencias naturales. Al final de
cada período de estudio es sometido a un riguroso examen para medir la capacidad retentiva de cada
educando.
La educación china tiene como fin último preparar a los funcionarios del gobierno. Los exámenes
estaban divididos en 4 categorías:
Los Departamentales: con título de nobleza.
Los de Capital de Provincia: con licenciatura.
Los de la Capital del Imperio: obtención de un doctorado.
Los de Ingreso a la Academia Imperial: que van acompañados de altos cargos y honores.
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Los chinos se preocupan por mantener un orden familia político y social bien establecido, este era la
preocupación de Confucio, quien implantó un carácter de sabiduría conservadora, en la que se consideraba
al Estado, la facultad de mantener la unión familiar y que el emperador era como un padre universal que
contaba con todos los derechos pero también debía cumplir con sus deberes, el ideal de esta educación es
eminentemente práctico-político, que tiene como base una vaga religiosidad naturalista, en donde los
funcionarios llamados mandarines, quienes son hombres cultos y accedían a estos cargos mediante
exámenes estatales, que sólo las clases adineradas podían pagar los gastos de la educación.
La Educación en la India:
Se remonta a 2000 años a. C. por las invasiones se organizaron en castas sociales:
Castas Superiores: brahmanes o sacerdotes, chatrias o magistrados y guerreros, vaysyas o mercaderes.
Castas Inferiores: sudras o artesanos y parias.
Su cultura era elevada en el campo religioso. Con la aparición de Buda, 500 años a.C. la religión se torna
monoteísta. Los textos budistas comprenden dos grupos: el Kanjur formado por 108 libros y el Dandjur
formado por 240. Al lado de los textos budistas figuran los textos religiosos, los Vedas, que constituyen el
más antiguo monumento de la literatura sagrada del brahmanismo, en su orden son: Rig Veda, Sama
Veda, Yagur Veda y Atarva Veda.
También son de gran importancia los Upanishidas o comentarios de los libros sagrados, los Brahmanes o
comentarios rituales y el Código de Manu, compuesto de 12 libros y que contienen las reglas de la
conducta civil y religiosa. También figuran poemas épicos como el Ramayana, el Mahabarata y el
Panchatandra que comprenden la narración de fábulas y preceptos de índole moral. El sánscrito fue el
idioma que sirvió de base para la construcción de la mayoría de las lenguas occidentales.
Toda su educación se organiza en base a las castas. Asimilarse al sistema de vida que prevalece en cada
casta, es el rasgo característico de este tipo de educación, de ahí que el talento, las aptitudes y el esfuerzo
propio, quedaran anuladas frente a las murallas que se alzaban entre casta y casta. Puede decirse que la
educación de las castas inferiores estaba encuadrada en los moldes de la educación primitiva, limitándose a
una participación de tipo familiar con fines agrícolas. La instrucción propiamente dicha estaba destinada
para las castas superiores y es evidente que correspondían mayores derechos a las castas más elevadas.
Los primeros años del niño transcurrían en el seno del hogar y no era sino hasta los 8 años en que los
miembros de la casta brahmánica se iniciaban en la educación elemental, los chatrias y los vasysyas iniciaban
hasta los 11 y 12 años, respectivamente.
Los estudios elementales se reducían al aprendizaje del catecismo budista que servía como iniciación al
estudio de los Vedas. El maestro echaba mano de las fábulas y los proverbios para enseñar la moral. Toda
la enseñanza era memorística y comprendía lectura, escritura y cálculo elemental. Esta educación era de tipo
privado, funcionando las escuelas en el campo, en un portal y en ocasiones en una casa. Los encargados de
educar son los upanayanas o maestros ambulantes.
El plan de estudios superior comprendía: religión, gramática, literatura, matemática, astronomía, filosofía,
medicina y derecho.
Al conjunto de todas las ciencias se le llamó Enciclopedia India. Como maestros de estos centros de
estudios superiores actuaban los brahamanes que eran los hombres más cultivados del territorio.
La educación hindú tiene sus raíces en la religión y todos los estudios tienen como meta proporcionar al
individuo el clima místico para llegar al NIRVANA, es decir, el aniquilamiento del individuo en el seno de la
divinidad que todo lo abarca.
El lastre que impone todo tradicionalismo, la falta de instrucción femenina, el sistema de castas
infranqueables y el abandono que se tuvo a los parias, restaron mucho desenvolvimiento al pueblo hindú,
cuyo mayor valor educativo sea acaso “el haber reconocido la importancia y altura del maestro que fue
objeto de una veneración profunda como no se ha vuelto a ver en país alguno”
Los hindúes, poseían un sistema de castas completamente cerrado, cuya separación entre si era muy diversa
la educación que recibían, en la que la litera sapiencial de los vedas, casta privilegiada, están reservadas sólo a
las castas superiores y que contribuían a desarrollar en espíritu de sumisión en las castas inferiores. 3
La Educación en Egipto:
(4,000 años a.C.) Su gobierno, encabezado por los faraones, fue de tipo absolutista. Ayudaban en la tarea
del Estado los escribas. Alejandría fue una de las ciudades importantes considerada centro de la cultura
mundial.
En la cultura de este pueblo se dan la mano las ciencias y las artes. La medicina influencia a Grecia. La
arquitectura dejó obras como la esfinge y las pirámides.
El factor más decisivo de esta cultura fue la religión de tipo politeísta en la que se fundían Dios, hombre,
animal. La idea de la vida eterna, es decir, de la inmortalidad, los preocupó, desarrollando a la perfección el
arte de embalsamiento (Ramsés II y Tutankamón) Su cultura influencia a Grecia, Roma y Fenicia.
La educación se inicia en el seno de la familia; la segunda en instruir al niño en moral y religión, inculcándole
modales finos. Entre los 6 y 7 años el niño ingresaba en la escuela elemental, se les enseñaba lectura,
escritura y cálculo, rudimentos de geometría y algunos ejercicios gimnásticos acompañados de natación. A
esta escuela también se le llamó Casa de la Instrucción.
La escuela superior era para los adolescentes de 17 años en adelante, funcionaban en los templos. Era para
todos, pero se daba preferencia a las clases superiores. Los sacerdotes fungían como maestros. Esta
educación perseguía un fin práctico, realista y utilitario.
Los egipcios escribieron un libro de contenido moral llamado La Doctrina de la Sabiduría, catalogado
como el primer libro pedagógico de que se tiene referencia.
Los judíos fueron los que más adquirieron y asimilaron los elementos culturales de las grandes civilizaciones
avanzadas debido a que los principios religiosos, espirituales y personales fueron elevados al concebir a un
Dios no como las fuerzas de la naturaleza, sino como un espíritu que protegía desde lo alto.
Se sabe que los profetas fueron los primeros educadores del pueblo hebreo, cuya instrucción básica que
impartían en el seno familiar con un profundo sentimiento religioso, patriótico y moral, estos eran más
eficaces que las anteriores civilizaciones, en donde las sinagogas que en un comienzo fueron empleadas
como sitio de introducción religiosa y luego como escuelas primarias.
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2021 LA EDUCACIÓN DE GRECIA T5
Aunque Grecia estuvo formada por varios estados-ciudades, los que lograron alcanzar mayor hegemonía
fueron Esparta y Atenas.
La Educación Espartana:
Un punto de esta conocida sociedad, el cual siempre se trata y estudia con incredulidad, a la par que con
curiosidad, hace referencia a la educación del joven espartano, implantada por Licurgo. No hay que
deshumanizar esta educación puesto que en ella no se buscaba la crueldad contra el ser humano. El
espartano era educado desde su más tierna infancia para formar parte del Estado; y si éste lo necesitara para
la batalla, el espartano luchará hasta morir. Con ello, se anulaba la voluntad individual en pro del conjunto
de la sociedad, se era parte de una colectividad, y para formar parte de esta, el recién nacido tendría que ser
declarado apto, luego, reunir unos requisitos para no ser rechazado por la sociedad, y así en un futuro
formar parte de los hoinoioi, los hombres libres.
Tras su nacimiento y a los pocos días de vida, el recién nacido era sometido a un examen minucioso por un
grupo de ancianos espartanos. Se llevaba al bebé en cuestión ante este grupo, el cual se encargaba de
observar si el bebé poseía alguna discapacidad o enfermedad que alternase su modus vivendi. Todo aquel
bebé, ya fuese del sexo femenino o masculino que no pasase tal minucioso examen, era desechado y
condenado a morir. Respecto al fin de estos niños, existen diversas hipótesis; hay quienes alegan que eran
arrojados por un acantilado del Monte Teigeto mientras que otros apuntan al abandono del bebé en este
monte para que el frío o algún animal acabaran con su vida. Por otra parte, aquel que era considerado apto
por los ancianos, sería devuelto al hogar, aunque según Indro Montanelli, antes de volver a los brazos de su
madre debían pasar una noche a la intemperie, “sólo aquellos que sobrevivían a las inclemencias del tiempo volverían al
calor del hogar”.
Las madres espartanas no se caracterizaban por malcriar o mimar a sus descendientes. Al bebé no se le
ponía pañal y, se les daba de comer lo que hubiera, así evitaban que su paladar se volviera “delicado”. Se les
bañaban en vino porque pensaban que aquella criatura enfermiza o epiléptica moriría con el tratamiento
mientras que la sana se fortalecería. Se les dejaban a oscuras para que perdieran todo miedo a la oscuridad, e
incluso, se les dejaban solas para que se acostumbraran a valerse por sí mismos, consiguiendo hacer del niño
un ser autosuficiente. Todas estas prácticas fueron recogidas por Plutarco, que las describían de la siguiente
forma: “procurando hacerlos liberales en sus miembros y su figura; fáciles y no melindrosos para ser alimentado:
imperturbables en las tinieblas; sin miedo en la soledad, y no incómodos y fastidiosos con sus lloros”.
Al cumplir los 7 años, los varones eran separados de sus madres y, se iniciaban así esa estricta educación.
Aunque las niñas se quedaran en casa y no fueran reclamadas por el Estado, esto no significa que careciesen
de educación. La mujer espartana era educada de forma totalmente diferente a la mujer ateniense, ya que era
educada para ser independiente del varón, saber llevar la economía de un hogar, y además, ejercitaba su
físico para poder engendrar a futuros guerreros espartanos.
Como hemos dicho, los niños eran extraídos del hogar protector y reclamados por el Estado, iniciando así
su agogé, educación o adiestramiento militar. A los niños se les distribuían en grupos, se les cortaba el pelo al
cero, se les daba una única túnica la cual sería su ropa durante todo un año sin diferenciar las estaciones del
año y el frío o el calor que hacían, dormían en barracones con otros niños de su edad y se hacían las camas
de las hierbas que cogían con sus propias manos de la orilla del río Eurotas, río de aguas gélidas en el cual se
lavaban.
Su rutina diaria era la de hacer ejercicios para desarrollar su cuerpo, recibir palizas para doblegar su espíritu
rebelde y así conseguir que fueran inmunes al dolor y al sufrimiento. Como jefe tenían un niño mayor que
ellos que hacían las funciones de cabo, al cual respetaban, obedecían y además sufrían sus duros castigos.
A los 12 años pasaban a ser efebos, y era cuando empezaban la verdadera incursión en su educación, puesto
que a medida que cumplían años, los requisitos y las pruebas eran más duras.
La comida era escasa así que se las tenían que ingeniar para poder comer, eso significaba que tendrían que
robar para poder alimentarse. Pero el robo no estaba exento del castigo, si cogían al niño robando eran
apaleados no por el hecho de robar, sino por haber sido descubiertos. De este suceso nos ha llegado una
historia o leyenda la cual nos narra que hubo una vez un niño que puso en práctica esta educación hasta
límites insospechables, según Plutarco: “se cuenta que uno que hurtó un zorrillo y lo ocultó debajo de la ropa, y
despedazándole este el vientre con las uñas y con los dientes aguantó y se dejó morir por no ser descubierto”. Además, tenían
que realizar incursiones a las zonas donde habitaban los ilotas, y tenían que controlar e incluso ejecutar a
parte de esa población para seguir manteniendo su número de habitantes controlados y subyugados bajo el
yugo del pueblo espartano, y así, de paso fomentaban la inclusión del individuo en la comunidad del soldado
espartano en la cual dormían, comían, luchaban, sangraban y morían juntos, intentando conseguir ese
espíritu de camarería y cohesión que posteriormente necesitarían en la falange.
Durante estos 13 años de educación, los niños eran controlados tanto por el cabo, como por los ancianos
que los observaban jugar, los incitaban a luchar entre sí, y de paso haciéndoles aprender de una forma
extrema a mirar, observar, aprender, aguantar, apretar los dientes, resistir y callarse la boca. Pero aparte
aprendían lo básico del mundo de las letras, ya que los espartanos tenían prohibido el trabajar tanto en la
agricultura, como en el comercio, ellos estaban preparados para la guerra.
Una celebración un tanto peculiar se realizaba cuando tenían 18 años. En el altar de Ártemis Ortia, se
celebrara una ceremonia ritual en la cual, delante de la sacerdotisa los adolescentes eran flagelados hasta
hacerles sangrar teniendo que soportar el dolor, y no sólo eso, tenían que poner buena cara y no demostrar
su sufrimiento a los allí presentes.
A partir de los 20 años, eran considerados hombres. Su dura educación había terminado y ya formaban
parte del ejército lacedemonio. Pero eso no significaba que estuvieran exentos de la vigilancia y el control de
los ancianos, ya que ellos tenían que verificar que de ellos se habían obtenido los resultados deseados. Con
el fin de la agogé, pasaban a formar parte del ejército, y adoptaban el look espartano (túnica, barba sin bigote
y el cabello largo el cual antes de una batalla cuidaban y peinaban). Era en esta etapa cuando entraba a
formar parte de la syssitia (mesa comunal de guerreros), pero antes se tenía que realizar una votación en la
cual todos los allí presentes aceptaban al nuevo miembro, un solo voto negativo le prohibiría el estar en los
grupos de batallones que componían esas mesas e incluso arrebatarle la ciudadanía. Cabe destacar, que la
asistencia a estos banquetes era obligatoria para todos; sólo por temas religiosos o militares podían faltar a
ellas, y aquel que faltara por otro motivo era multado.
Ha llegado hasta nosotros la historia de que las madres, e incluso las esposas, acompañaban a sus hijos y
maridos cuando partían a la guerra hasta un cierto punto. Cuando se iban a despedir eran ellas quienes les
entregaban el escudo, elemento importante para ellos en la guerra gracias al cual soportaban el ataque del
enemigo, se protegían de este y protegían a su compañero de la batalla; éstas les despedían diciendo que
cuando volvieran de la guerra, que lo hicieran con su escudo o sobre él. Otra historia de su curtido carácter
y devoción al Estado que nos ha llegado era una en la cual nos dice que una madre espartana vio partir a sus
hijos a la guerra. Estuvo esperando a recibir noticias de la contienda y al cabo de un tiempo empezó a llegar
guerreros. Paró a los primeros que vinieron y les preguntó por la batalla, éstos incómodos por la pregunta le
dieron la nefasta noticia de que sus hijos habían muerto en ella, y la mujer enfadada les reprochó que ella no
había preguntado por el fin de sus hijos, sino por el resultado de la batalla.
El fin de todo este proceso llegaba a la edad de 30 años, cuando por fin los hombres espartanos eran
considerados ciudadanos de pleno derecho. Esto significaba que podían decidir en una asamblea, eran aptos
para adoptar cargos políticos y militares y además, estaban obligados a casarse con una mujer espartana,
puesto que la procreación en Esparta era una cuestión estatal y una obligación para ellos.
Tal y como hemos dicho y narrado, el pueblo lacedemonio era una sociedad peculiar. Fueron la élite
guerrera de su época, puesto que eran unas verdaderas “máquinas de matar” preparadas desde su más tierna
infancia, no con el fin de disfrutar con la muerte y la sangre, sino para defender su patria, estado y modo de
vida en una época difícil para el ser humano. No se les puede tachar de crueles ni sádicos puesto que todo
esto no lo realizaban por placer sino con el mero hecho de conseguir unos hombres que fueran capaces de
lidiar con una vida dura, y la prueba de que no fueron insensibles a la belleza y a las artes, es que Esparta
produjo una notable cantidad de poetas, escultores y arquitectos, sin contar, que las mujeres espartanas
fueron adoradas, respetadas y amadas por sus hijos, los cuales nunca tuvieron rencor hacia ellas ni hacia
la agogé.
Esparta fue una ciudad estado eminentemente militarista, que basó su desarrollo en una capacidad militar
para dominar y someter a otros pueblos, su estilo de gobierno la timocracia, apoyándose en la idea de los
derechos ciudadanos a la posesión de la tierra y la necesidad de controlar los territorios conquistados, por su
espíritu patriótico y guerrero de sus ciudadanos.
Es por eso que en la educación los espartanos se inclinaron hacia el cultivo del cuerpo, de su fortaleza y
sanidad, que asegura su superioridad militar sobre las demás clases y sobre los sometidos era fin supremo de
la educación.
La Educación Ateniense:
Hasta los 7 años el niño ateniense permanecía bajo el manto de su madre, abuela o nodriza, la cual enseñaría
al niño aspectos básicos de la mitología, pequeños poemas nacionales o cuentos sencillos, lo justo para
familiarizarse con el tema. A partir de los 7, el padre decidía si continuaba su educación en el hogar o bien
acudiría a la casa de algún maestro particular. A partir de entonces la educación del niño pasaba a manos
del pedagogo, que por norma general, era un esclavo que se dedicaría por velar la enseñanza del pequeño
heleno.
Aristóteles, criticó la educación de los gobernantes, por no incluir al pueblo en general y llamó a los
gobernantes dagogos que quiere decir “ocio elegante, juego noble”; repaso distinguido, y funda la escuela
en el 600 antes de Cristo, donde esta desempeñaría una función de simplemente imitar a los adultos, donde
el Estado dejaba a los maestros en permanente libertad, con la capacidad de que formaran a los futuros
gobernantes e inculcarles el amor a la patria, a las instituciones y a los dioses.
LA EDUCACIÓN ROMANA T 6
La schola ("escuela") estaba regida por el calendario religioso, las clases se daban por las mañanas y era
mixta hasta los doce años. Un grammaticus era el responsable de enseñarle a los niños los autores clásicos y
la mitología, mientras que a las niñas, consideradas adultas a los catorce años (domina, kyria), podían tener
uno que le enseñara los clásicos. La educación tenía lugar en el gymnasium o en la palaestra. En oriente, las
principales materias eran Griego, Homero, Retórica, Filosofía, Música y Deporte. En cambio, en la mitad
occidental, se enseñaba además latín, en detrimento de la música y el deporte. A los dieciséis o diecisiete
años, había una bifurcación en el camino de los jóvenes, que tenían que decidirse por el ejército, o los
estudios (cursus honorum).
El ludus litterarius componía un sistema educativo con tres niveles de enseñanza:
1. Las escuelas a cargo de un ludi magister ("maestro"), que impartían la educación elemental (Ludus
Principalis).
2. Las escuelas a cargo de un ludi grammaticus ("gramático"), que correspondían a lo denominado
actualmente enseñanza secundaria (Ludus Grammaticus).
3. Las escuelas a cargo de un ludi rhetor ("retórico"), establecimientos de educación superior que
iniciaban con la retórica y, seguían con la enseñanza del derecho y de la filosofía, una especie de
universidad (Ludus Rhetoricae).
De pequeños podían tener un maestro en casa (magister), que generalmente era un esclavo o liberto griego o
bien ir a una escuela llevados por un esclavo (pædagogus) que después también les repasaba las lecciones en
casa.
En la primera etapa educativa, el niño aprendía con un maestro (magister ludi, litterator y calculator) a leer,
escribir y hacer cuentas. La disciplina era severa, pero los niños jugaban con letras de madera o marfil y con
ellas aprendían a leer y a escribir. Por eso a esta escuela le llaman «juego» (ludus) y el maestro era magister ludi.
La escuela se situaba en un pequeño cuarto (taberna, pergula), en una cabaña o en el jardín (según el tiempo y
las posibilidades). El maestro tenía una silla (cathedra) o un taburete (sella). Los niños se sentaban en escaños
(subsellia).
Los instrumentos de trabajo eran unas tablas enceradas (tabulæ, ceræ) en las que rascaban con punzones
(stilus) que por un lado eran puntiagudos y por otro acababan en una espátula con la que se alisaba la cera y
así quedaba lista para volver a escribir en ella (stilum vertere).
La segunda etapa podía ser privada o pública. El profesor era el grammaticus que enseñaba a entender y
comentar los textos literarios. Comentando los textos clásicos, los niños aprendían de
todo: geografía, historia, física, religión, etc. Con el tiempo, la grammatica empezaría a ser también estudio
sobre la lengua que hablaban y esta innovación acabaría eliminando el primitivo concepto de grammatica.
La tercera etapa preparaba en la elocuencia al futuro político romano. El profesor era el rhetor (maestro
de oratoria). Quintiliano, por ejemplo, escribió muchas notas pedagógicas de cómo formar al orador. Entre
los ejercicios frecuentes estaba la realización de juicios ficticios en los que unos alumnos acusaban y otros
defendían.
Las escuelas romanas se encontraban en los pórticos del Foro romano y sus profesores eran mal pagados
por los padres de los alumnos. Esto ilustra una de las diferencias centrales entre griegos y romanos y su
visión sobre la educación: En los griegos la educación era un fin en sí mismo. Los romanos, por su parte,
eran más prácticos de lo que enseñaban a sus hijos. Para ellos, un área de estudio era buena sólo si sirve a un
propósito más alto o extremo determinado.
En la educación terciaria se fundan las escuelas de Derecho. Los juristas y magistrados serán los encargados
de estos centros, cuyo plan de estudios era de 5 años, funcionando en Roma y Alejandría. Ya en el siglo III
Roma se erige como sede de la jurisprudencia, dejando este legado para todo el mundo.
La educación romana había heredado muchos fundamentos de la educación griega, ya que esta se convirtió
en una colonia romana, es así como la tradicional escuela ludi magister, modelo de escuela griega empieza a
resultar insuficiente ante tales exigencias de la educación romana, es por esto que surgió un tipo de
educación superior o terciaria, basadas en el uso de la retórica que pretendió formar los jóvenes en la
elocución, preparando y pronunciando discursos y dándoles la posibilidad de una buena carrera política.