Está en la página 1de 7

Bueno, Lourdes.

“About the playwright Juana Escabias”


• Otra vez, se relaciona la obra con Las mil y una noches.
• “The Hooker of a Thousand Nights … shows the impossibility of reaching a happy
ending that would absolve both protagonists from their sins” (5).
• “Their distressing words are symptomatic of a cruel society that hurls them (poor
puppets that they are!) into a merciless and selfish world in which they can barely
survive” (6).
• “The prostitute will try to escape the threat that surrounds her and keep the suitcase
full of money that will rescue her and her son from the miserable life in the streets.
The client, on the other hand, will try to drown his sorrows while raising his self-
esteem by capriciously, controlling and manipulating the situation” (6).
• Destaca que solo una noche más quizás la pudo haber salvado.

O’Connor, Patricia. “Translator’s note on The hooker of a thousand nights”.


• “In Scabia’s play, both characters tell plays that make the readers or spectator wonder
if they are fantasies or truth” (7).
• Considera intertextos La caperucita roja y el Gran lobo malo (a ellos hacen referencia
los propios personajes). Interesantemente, en La caperucita el lobo se disfraza, intenta
engañar a la niña, igual que el Cliente a la Puta.

Shades of violence: The hooker of a thousand nights


• La obra tiene un final alternativo: la Puta se despide, pero el Cliente la detiene y le
advierte que si se iba, le iba a disparar. La Puta lo enfrenta, si bien no voltea la mirada:
“I have earned this money and more tonight than in all the nights of my life. (Taking
a deep breath) I cannot stay with you any longer. I must make my own way” (52). La
mujer comienza a caminar y se marcha. El Cliente coge la pistola y parece que la va
a seguir, pero se detiene. Vuelve a reanudar su marcha, pero se contiene otra vez.
“SUDDEN BLACKOUT” (52).

Juana Escabias: Pasión y reflexión


• [35-6]: sobre Apología/La puta. Se refiere a la intertextualidad con Las mil y una
noches. Sobre el ingenio de la protagonista y el poder del Cliente. Otra vez, thriller:
quién ganará. La traducción al inglés ofrece dos desenlaces.
• su admirable pasión consiste en hacer reflexionar al público a la espera de hechos
capaces de promover un mundo mejor para todos. Aunque la autora recurre a una
variedad de imágenes, acciones y registros para censurar las lacras sociales causadas
por las desmedidas ambiciones y debilidades humanas, muchos problemas concretos
se asocian con hombres egoístas en puestos de poder económico, religioso o político.
(38-9)
• Como la autora quiere que sus receptores reflexionen, no ofrece respuestas sino
situaciones reales y simbólicas a considerar con respecto a la función apropiada de
las entidades tratadas. (39)
• En espera de un mundo mejor, plasma de modo apasionado las realidades sociales
esperando conducir a sus receptores a reflexionar, a crecer y a actuar en
consecuencia. (39)

Ensayos con bate de béisbol: género y poder en el teatro de Juana Escabias


• 452: En una entrevista reciente Escabias ha reconocido la centralidad de la violencia
en su teatro: violencia doméstica, psicológica, sexual, laboral, de clase, abusos de
poder y ensayos sobre cómo se somete y doblega al otro … Esta dramaturgia trae la
revelación de una verdad esencial: que el status quo de nuestra sociedad global,
avanzada y democrática se sostiene en buena medida desde la violencia y la
discriminación. El teatro de Escabias testimonia que la violencia es una forma
recurrente de interacción entre los seres humanos y es tan productiva que se replica
constantemente a diferentes niveles en el tejido social (Ceballos, 2011: 1).
• 453: Estamos ante un teatro que busca concienciar, revelando la identidad y rasgos
del depredador, reconociéndonos a veces en él, y arrojando luz sobre la ferocidad de
nuestro sistema para deslumbrar y despertar al público de la anestesia
• 453: Escabias ha afrontado con su teatro una difícil tarea ética y estética: fotografiar,
relatar, exponer, explicar la violencia para abrir un espacio desde el que sea posible
desactivarla y desmantelarla, pues solo entonces será posible articular otro orden
basado en principios alternativos.
• 454: Las palabras del despótico cliente de Apología reflejan muy bien el modo en que
la dominación se multiplica y prolonga en una contienda colectiva: “te ensartaré,
gritarás de dolor porque es de tamaño súper […] Dig-ni-dad. La criada aguanta la
reprimenda del ama, el empleado adula a su superior, el camarero se traga los
caprichos del cliente, la vida es un gesto colectivo de humillación. Nuestra contienda,
esta pugna entre tú y yo, es pura lucha de clases” (Escabias, 2011a: 51-52). Estas
obras privilegian una mirada y una conciencia: la de que todo el sistema funciona de
esa manera, basado en la moneda, la lucha de clases y la desigualdad, sin espacio para
la dignidad o la solidaridad …
• 455-6: Apología del amor, narra a su vez la lucha dialéctica durante el enfrentamiento
verbal entre una prostituta que, a modo de Sherezade, trata de salir airosa y conseguir
una maleta llena de dinero, un salario que conseguirá si logra culminar con éxito la
difícil tarea de realizar un strip-tease emocional de una noche completa,
complaciendo a un cliente implacable que no busca sexo sino ejercitar su poder y
doblegarla a cada instante. La leyenda de Barba Azul, Las mil y una noches, el cuento
de Aladino y la lámpara maravillosa y el de Caperucita Roja actúan como subtextos
de este drama en el que el intercambio sexual es irrelevante porque lo que se
representa es la violencia de la lucha de clases (Martín Clavijo, 2014: 322). El motor
económico define las relaciones entre todos los personajes de la obra: el cliente y la
prostituta, el cliente y su familia política, el cliente y su mujer, la prostituta y sus
compañeras, y así sucesivamente, para mostrar que la centralidad del dinero en las
relaciones personales no hace sino agrandar la red de explotación y reproducirla: la
prostituta que trata de cobrar su servicio, la prostituta que delata a una compañera que
le debe dinero, el hombre que intenta agradar a la aristocrática familia de su esposa,
el cliente que no puede comprar ni el orgasmo fingido de su esposa. No estamos ante
la guerra de los sexos, sino ante una contienda mucho más compleja, la batalla por
una maleta llena de dinero y la pugna por el poder. El diálogo brutal entre estos dos
personajes a lo largo de una noche de duelo verbal, destilado en un tira-y-afloja
dialéctico entre estos dos contrincantes, muestra la disposición a sacrificarlo todo con
tal de ostentar y mantener el poder: retener el dominio en la relación o el dinero que
otorga una independencia económica engendradora de poder y seguridad, no se olvide
que la maleta constituye también un seguro de vida para la prostituta que envejece.
Como subraya la filósofa feminista Graciela Hierro, ante la imposición del poder por
quien lo ostenta y venera sólo existen dos respuestas posibles: someterse o responder
con otro poder más fuerte que pueda oponérsele (1994: 176). En este sentido,
Apología del amor documenta de manera explícita y feroz el ejercicio del poder en
las relaciones humanas basadas en principios de intercambio económico. La batalla
entre estos dos personajes, depredador y superviviente, ejemplifica la lucha por la
vida :
El cliente: […] Me encanta, salvaje, con orgullo. Qué gracia tendría
domesticar a un animal sumiso; y qué trofeo tan exiguo poseer un simple
cuerpo. No puedes ser orgullosa, acepta tu destino, el orgullo es privilegio de
pudientes.
La puta: […] No eres tan original, los clientes que me aplastan con el peso de
su cuerpo buscan lo mismo que tú, ejercer el poder.
El cliente: He encontrado una puta con estudios. ¡Qué barbaridad! Qué dientes
tan afilados tienes, lobita feroz […]
La puta: Deseas lo mismo que ellos, sentirte dueño de mí. […] ¿Qué debo
hacer para ganarlo?
El cliente: Obedecerme.
La puta: Obedeceré… depende (Escabias, 2011a: 20-21).
• Resumen párrafo anterior: varios intertextos, relación económica que media a los
personajes. Buscan el poder y este se relaciona a dinero.
• 459: La violencia, por tanto, es también una representación, un ensayo que actúa
como advertencia para imponerse muchas veces sin materializarse. El látigo anticipa
el dolor y también podría prevenirlo porque su visión domestica al que debe ser
avasallado. El teatro de Juana Escabias examina estas prácticas, mostrando la
perversión y la complejidad del dominio y la autoridad, desnudando al poder ante
nuestros ojos. Sus obras no sólo documentan las múltiples ramificaciones de la
violencia como instrumento para reafirmar y perpetuar el poder, sino que, además,
revelan de forma eficaz el ensayo performático de la misma, descubriendo los
mecanismos utilizados para domesticar y someter.
• 459-60: La realidad se ha vuelto, de alguna manera, teatro pero el crimen con que
concluye la obra problematiza esta visión. Ensayamos a diario la violencia y la
aceptamos sometiéndonos a ella, pero las muertes que cierran algunas piezas nos
advierten sobre la perversidad de una dinámica tan arraigada que la obra solo puede
terminar con el golpe del cuerpo de la víctima cayendo a nuestro lado, en el patio de
butacas (Escabias 2011a: 86 [Final de Apología del amor]). Esa revelación hace
pensar al espectador si es posible romper el ciclo, crear un sistema distinto, un orden
no impuesto desde la intimidación, tal vez un orden radical y transformador del placer
y no del poder (Hierro, 1994: 182). Una vez desenmascarado el poder quizás este
teatro haya abierto una grieta, ofreciendo una oportunidad, y empiece a ser posible
otro teatro radical del placer que hable de cooperación en vez de obediencia.

Entrevista a Juana Escabias, dramaturga y directora de escena


• Pertenezco a una generación que ha vivido y exigido la igualdad como derecho
innegable, como algo que me correspondía por el simple hecho de pisar el mundo,
pero en mi obra siempre están presentes las mujeres obligadas a vivir una existencia
de segunda categoría por el hecho de pertenecer “al segundo sexo”. (311-2)
• Uno de los temas que más me preocupa es la incomunicación entre los seres humanos,
la imposibilidad de llegar los unos a los otros, las dificultades para comprenderse y
la soledad que esa circunstancia genera en todos nosotros. Mis grandes temas,
aquellos que con más frecuencia se cuelan en mis escritos, son la hipocresía social y
todo ese repertorio de dificultades que padece el ser humano para vivir de forma plena
en sociedad, con el miedo como piedra angular de muchas de ellas. La dificultad para
entenderse con el prójimo, para llegar a otros, incluso a nuestras parejas o familiares
más próximos, aparece y reaparece en casi todas mis obras … La violencia también
es una constante en mi teatro, no solo la agresión física o sexual ejercida de forma
directa sobre alguien (temática sobre las que se cimentan entre otras Fantasmas,
Deseo o Apología del amor) sino también la violencia innata a la lucha de clases y a
la promoción social que nos convierte en depredadores de otros seres humanos a
través de primitivos instintos de supervivencia camuflados bajo académicas
denominaciones como la ambición. … Mi propuesta global como artista es hacer
reflexionar al lector/espectador, colocarle delante de los ojos las grandes cuestiones
del hombre de todos los tiempos para sacudirle y hacerle crecer. Descolocar a la gente,
no trabajar desde el tópico y cambiar continuamente de perspectiva son una parte de
las técnicas que conforman la esencia de mi escritura. … Que el arte haga progresar
el mundo: nuevos lenguajes para traer nuevas temáticas. (313)
• Intento escribir teatro atemporal, que no es lo mismo … Cultivo un tipo de teatro en
el que el escalpelo se adentra en el subsuelo para explorar los grandes enigmas de la
vida que anteceden incluso a las cuestiones más transcendentales del hombre de todos
los tiempos. Mis preguntas rebasan el consabido qué somos de dónde venimos o a
dónde vamos para tornarse aún más primigenias: ¿por qué hay algo en lugar de nada?
(314)
• El simbolismo en mis obras es constante. (318)
• ¿Qué tipo de relaciones interpersonales establecen los personajes de sus obras?
Suelen ser relaciones complicadas, como crítica y reflejo del enmarañamiento
innecesario en el que vive de manera habitual el ser humano en las llamadas
“sociedades avanzadas”. (320)
• En los últimos años se habla continuamente de violencia de género también en el
teatro ¿Está presente en sus textos la violencia de género? Está presente en varios de
mis textos y experimentos dramáticos … También me gusta llevar al escenario la
violencia no evidente, el maltrato psicológico, la dominación que no se ejerce por la
mera fuerza física. … En mis obras, en general, abunda la violencia. (320-1)
• ¿A qué se debe esta prevalencia de la violencia en su teatro? Porque la sociedad
civilizada es extremadamente violenta, y a mí me gusta reflejar la vida. (321)
• ¿Qué otras formas de violencia aborda en sus creaciones? … En mis obras, la crítica
se multiplica para convertirse en un ataque a la desigualdad social y las lacras que
provoca: la pobreza es la forma más primaria de violencia. La pobreza no existe de
forma natural, es un estado artificial creado por unos hombres como fórmula para
dominar a otros. En ella se encuentra el origen de los abusos de todo tipo, entre ellos
los sexuales. … [Deseo] Plantea el problema de las minorías dentro de las sociedades
avanzadas, esa población marginada y sin posibilidades de asimilación cultural,
obligados a vivir fuera de lo establecido. En Apología del amor, que recrea el
encuentro de una noche entre una prostituta y un desconocido que demanda sus
servicios, la violencia originada por la lucha de clases relega el encuentro sexual a un
plano insignificante. (321-2)
• Como creadora, ¿cuál es su objetivo último? Que el público reflexione, que
engrandezca su horizonte, que vea donde nunca vio y se atreva a llegar a donde nunca
llegó. … Que el Arte sirva para transformar el mundo, para mejorar el mundo: ese es
mi mayor deseo. (322)

También podría gustarte