003-2016-240-01-RD-Francisco Rodelo Jiménez Vs Ejército Nacional - Operativo Militar

TRIBUNAL ADMINISTRATIVO DE BOLÍVAR
SENTENCIA No. 004 DE 2023

SALA DE DECISIÓN No. 01
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
Cartagena de Indias D. T. y C., veinticuatro (24) de febrero de dos mil veintitrés (2023).
I.- IDENTIFICACIÓN DEL PROCESO, RADICACIÓN Y PARTES INTERVINIENTES.
Medio de control Reparación Directa.
Radicado 13001-33-33-003-2016-00240-01.
Demandantes Francisco Antonio Rodelo Jiménez y otros.
Demandado Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional.
Responsabilidad estatal por daños ocasionados en un

Tema
operativo militar.
Magistrado Ponente Óscar Iván Castañeda Daza.
II.- PRONUNCIAMIENTO
Procede la Sala Fija de Decisión No. 01 del Tribunal Administrativo de Bolívar a

pronunciarse respecto del recurso de apelación interpuesto por la parte actora
contra la sentencia del treinta y uno (31) de octubre de dos mil diecinueve (2019)
proferida por el Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de Cartagena.
III.- ANTECEDENTES
3.1. DEMANDA.
3.1.1 PRETENSIONES1.
La parte actora pretende que se declare patrimonial y administrativamente

responsable a la Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional, por los
perjuicios causados a los demandantes, con ocasión a la muerte de los menores
Jhon Jader Rodelo Jiménez y Widis Armando Rodelo Tapia, ocurrida el 29 de
agosto de 2014 en el municipio de Santa Rosa (Bolívar), luego de que el Ejército
Nacional bombardeara un campamento del entonces grupo armado ilegal de
las FARC.
Como consecuencia de lo anterior, pidió que se condenara a la entidad

demandada al pago de los siguientes perjuicios: (i) daño moral para cada uno
de los demandantes, por un valor total de 300 SMLMV; (ii) daño material por valor
de $200.000.000 de pesos colombianos.
1 Folios 2-3 del archivo 01 del expediente electrónico.
Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020
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1.2. HECHOS2.
En la demanda se relata que, el 20 de agosto de 2014, los jóvenes Widis Armando

Rodelo Tapia y Jhon Jader Rodelo Jiménez se dirigieron al corregimiento del
Paraíso, jurisdicción del municipio de Montecristo (Bolívar), con el fin de llevar a
cabo unas actividades que no implicaban mayor tiempo.
Refiere que, los jóvenes tardaron más de lo esperado en volver a su hogar, por lo
tanto, sus madres Luz Meris Tapia Santo y Mirian Rodelo Jiménez,
respectivamente, se trasladaron al corregimiento del Paraíso para ver qué les
había sucedido. No obstante, no encontraron a los jóvenes en dicho lugar.
Indica que, las progenitoras de los menores desaparecidos fueron informadas

que sus hijos habían sido reclutados forzosamente por las FARC.
Luego, el 30 de agosto de 2014, los demandantes se enteraron que el Batallón

Nueva Granada del Ejército Nacional había bombardeado un campamento de
las FARC en inmediaciones de la Serranía de San Lucas, cerca a los municipios
de Montecristo y Santa Rosa (Bolívar), lo cual, produjo el fallecimiento de Widis
Armando Rodelo Tapia y Jhon Jader Rodelo Jiménez.
Sostiene que estos hechos constituyen una falla presunta en la prestación del
servicio, toda vez que, se trata de civiles muertos en el marco del conflicto
armado. Además, los jóvenes en cuestión, no tuvieron nada que ver en el
enfrentamiento armado que emprendió el Ejército Nacional contra el entonces
grupo armado subversivo de las FARC. Toda esta situación, ha causado
diferentes perjuicios morales y materiales a la familia del Sr. Francisco Antonio
Rodelo Jiménez.
3.2. CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA
3.2.1. Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional3.
La apoderada judicial de la entidad demandada se opuso a las pretensiones de

la demanda. Manifestó que no había prueba alguna que permitiera inferir que
las víctimas directas hubiesen fallecido como consecuencia de un bombardeó
realizado por la Fuerza Pública. En todo caso, adujo que debe declararse la
prosperidad de la excepción de culpa exclusiva de la víctima. Aún cuando
estuviese demostrada la presencia de las víctimas en el campamento de las
FARC, se entiende que concurrieron a ese lugar por su propia voluntad. Ahora
bien, en el caso de que hubiesen sido reclutados forzosamente, se daría por

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probada la causal de exoneración de hecho exclusivo y determinante de un

tercero, a saber, el grupo guerrillero de la FARC-EP.
3.3. SENTENCIA DE PRIMERA INSTANCIA4.
Mediante sentencia del treinta y uno (31) de octubre de dos mil diecinueve (2019)
el Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de Cartagena, negó las
pretensiones de la demanda, dado que se encontró probada la causal de
exoneración de hecho de un tercero. La jueza de instancia señaló que resultaba
un hecho imprevisible e inevitable el reclutamiento forzado de un menor por
parte de un grupo guerrillero, toda vez que, no se tenía registro o conocimiento
de la presencia de esta situación al llevar a cabo la operación militar, por lo
tanto, se configuró la causal de exoneración de hecho exclusivo de un tercero.
Se transcribe en extenso, los argumentos expuestos por el juzgado de instancia:
“En tal medida, se impone concluir que el hecho de que Widys Armando
Rodelo Tapias haya muerto durante un operativo adelantado por las Fuerzas
Militares obedece no al hecho de ocurrencia del operativo en sí mismo
considerado, sino a la circunstancia de haber sido reclutado -todo indica que
forzosamente- por la guerrilla, pues fue debido a su reclutamiento que se
encontraba en el campamento guerrillero contra el cual se realizó -con
observancia de las reglas en el uso de la fuerza; según lo probado- un
operativo militar debidamente justificado en el marco del conflicto armado
interno y del deber de la fuerza pública de perseguir a los rebeldes y
contrarrestar su actuar delictivo, que fue. lo que ocurrió en el caso de marras,
con el lamentable resultado de la muerte del menor aludido, muerte que, no
sobra agregar, no está plenamente probado que haya obedecido al disparo
de un arma de dotación oficial, como quiera que no existe prueba técnica
que así lo corrobore, en tanto que tan sólo se verificó balísticamente el calibre
del proyectil recuperado de su cadáver sin identificarse si provino de alguna
de las armas de los miembros de la entidad accionada que participaron en
el combate.
Debe señalarse, además, que no existe ninguna prueba que permita inferir
que la entidad accionada hubiera sido advertida de la presencia del menor
como reclutado forzoso en el lugar de los hechos, pues no se adujo ni mucho
menos se verificó que la Personería de Montecristo, ante quien se había
instaurado una queja el 20 de agosto de 2014 por su desaparición, hubiere
dado traslado de la misma al Ejército o a la Armada.”.
3.5. RECURSO DE APELACIÓN5.
La apoderada judicial de la parte actora solicitó que se revocara la sentencia

de primera instancia. Manifestó su disenso frente a la declaratoria de la eximente
de responsabilidad de culpa exclusiva de la víctima, toda vez que, considera que

5 Folios 62-85 archivo 02 del expediente electrónico.
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no estaba dentro de la capacidad de los menores controlar su reclutamiento

forzado por parte de un grupo al margen de la ley. Refiere que, aún cuando
hubiesen acudido voluntariamente al grupo guerrillero de las FARC, su accionar
no tenía un libre consentimiento a raíz de su edad.
Recordó que los menores de edad son sujetos de especial protección

constitucional. Todo este recuento, permite inferir que el Estado es
patrimonialmente responsable por omitir sus deberes de protección a la vida e
integridad personas de las personas afectadas. La muerte de los jóvenes en
cuestión, constituye un delito de lesa humanidad, por cuanto, hubo una
afectación contra la población civil, en el marco del conflicto armado. Ultimó
que, la muerte de las víctimas directas las provocó el Ejército Nacional, conforme
al protocolo de necropsia practicado a la humanidad de los menores. Reiteró
que las víctimas no son culpables del despliegue militar adelantado por la Fuerza
Pública.
3.5 TRÁMITE PROCESAL DE SEGUNDA INSTANCIA.
Por auto del 2 de noviembre de 20216, se admitió el recurso de apelación

incoado por la parte demandante. Luego, mediante providencia del 11 de julio
de 20227, se corrió traslado para alegar de conclusión en el transcurso de
segunda instancia.
3.6. ALEGATOS DE CONCLUSIÓN.
3.6.1. Parte demandante8.
La apoderada judicial de la parte actora instó al Tribunal a acceder a las súplicas

de la demanda. En su escrito, hizo en recuento de los hechos sucedidos el 20 de
agosto de 2014, donde el joven Widis Armando Rodelo Tapia y su primo, Jhon
Rodelo Jiménez fueron reclutados forzosamente por el entonces grupo subversivo
de las FARC-EP, mientras se dirigían al municipio de Montecristo (Bolívar). En el
tiempo que las víctimas permanecían privadas de su libertad, puntualiza que
fueron asesinados por la Fuerza Pública en un operativo militar que se había
adelantado contra el grupo armado al margen de la ley. Considera que debe
declararse la responsabilidad estatal, dado que, la muerte de los menores la
produjo el Ejército Nacional, sin tener en cuenta, la presencia de población civil
en el campamento que fue bombardeado.
6 Archivo 05 del expediente electrónico.

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3.6.2. Parte demandada9.
La vocera judicial del Ejército Nacional pidió que se confirmara el fallo de primera
instancia. Explicó que el hecho dañoso no provino de una actuación u omisión
de la entidad demandada. No existe prueba alguna que acredite que la
presencia del menor en el campamento del grupo guerrillero hubiese sido
forzosamente. Al no verificarse que la queja presentada a la Personería Municipal
de Montecristo fuese trasladada al Ejército Nacional, se configuró la causal de
exoneración de hecho exclusivo y determinante de un tercero. En efecto, no se
verificó que las víctimas hubiesen solicitado algún tipo de protección a la entidad
demandada.
3.7. CONCEPTO DEL MINISTERIO PÚBLICO.
No se registra pronunciamiento por parte del Agente del Ministerio Público.
IV. CONTROL DE LEGALIDAD
Revisado el expediente se observa que de conformidad con lo previsto en el

artículo 207 del Código de Procedimiento Administrativo y de lo Contencioso
Administrativo-CPACA, en el desarrollo de las etapas procesales se ejerció control
de legalidad de estas. Por ello y como en esta instancia no se observan vicios
procesales que acarreen la nulidad del proceso o impidan proferir decisión de
fondo, se procederá a dictar la respectiva sentencia.
V.- CONSIDERACIONES
5.1. COMPETENCIA.
Es competente esta Corporación para conocer el presente proceso en segunda

instancia, por disposición del artículo 153 del Código de Procedimiento
Administrativo y de lo Contencioso Administrativo, que dispone que los Tribunales
Administrativos conocen en segunda instancia de las apelaciones de las
sentencias dictadas en primera instancia por los jueces administrativos.
5.2. PROBLEMA JURÍDICO.
Le corresponde a esta Colegiatura resolver el siguiente problema jurídico:
¿Debe declararse la responsabilidad administrativa y patrimonial de la Nación

- Ministerio de Defensa - Ejército Nacional, por los perjuicios causados a los
demandantes, con ocasión a la muerte de los menores Jhon Jader Rodelo
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Jiménez y Widis Armando Rodelo Tapia el 29 de agosto de 2014, en el marco

de un operativo militar dirigido contra el Frente 37 del entonces grupo
subversivo de las FARC?
5.3. TESIS DE LA SALA.
La Sala sostendrá como tesis que debe confirmarse la sentencia del treinta y uno
(31) de octubre de dos mil diecinueve (2019) proferida por el Juzgado Tercero
Administrativo del Circuito de Cartagena, por medio de la cual, se negaron las
pretensiones de la demanda. En el marco del operativo militar realizado el 29 de
agosto de 2014 por la Fuerza Pública, se actuó de manera proporcional y
razonable a la agresión iniciada por los combatientes del Frente 37 del entonces,
grupo subversivo de las FARC. De acuerdo a la Orden de Operaciones No. 035
expedida por la Armada Nacional10, los agentes estatales previnieron a los
combatientes de su presencia en el territorio, ante lo cual, recibieron diferentes
disparos contra su humanidad.
Al advertir esta situación de agresión, era a penas lógico que los uniformados
reaccionaran de manera proporcional con el uso de armas de dotación oficial
contra los insurgentes. Si bien, los menores Widis Rodelo y Jhon Rodelo tenían la
condición de víctimas por el delito de reclutamiento ilícito, lo cierto es que, por el
contexto de la situación y por la ropa que portaban, era razonable que las
Fuerzas Militares reaccionaran con el uso de armas de fuego ante la agresión que
estaban presentando. No existe prueba alguna que desacredite lo afirmado en
la Orden de Operaciones No. 035 incorporada al plenario, por lo cual, se le dará
el mérito probatorio correspondiente al mismo. Adicionalmente, no obra prueba
alguna que constate que las Fuerzas Militares hubieran tenido conocimiento de
la presencia de menores reclutados en la zona.
5.4. MARCO NORMATIVO Y JURISPRUDENCIAL.
5.4.1. La responsabilidad extracontractual del Estado
El daño constituye el primer elemento estructural de los procesos de

responsabilidad. Solo ante la existencia del daño se pone en marcha el aparato
social y jurisdiccional para buscar la eventual reparación de la víctima. El daño
es definido como la “afectación o lesión a un interés jurídicamente tutelado, es decir,
daño es toda injuria a un derecho o interés ajeno”11.
El segundo elemento de la responsabilidad es la "imputación", la cual, es

entendida como la identificación del hecho que ocasionó el daño sufrido por la
10Folios 193-204 del archivo 01 del expediente electrónico.

11Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Ramiro Pazos Guerrero, Rad No. 05001-23-31-000-2009-
01012-01(45902), Sentencia del 17 de septiembre de 2018.
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víctima, y por consiguiente, permite vislumbrar el sujeto, suceso o cosa que

produjo el daño. La teoría tradicional de la responsabilidad hablaba del nexo
causal como la relación necesaria y eficiente entre el daño provocado y el
hecho dañoso.
En la actualidad dicho concepto ha sido ampliado jurisprudencialmente, dado

que al ser un criterio naturalístico de relación causa-efecto, puede quedarse
corto a la hora de englobar la totalidad de consideraciones que implica un
proceso de imputación. Esto llevó a que el contenido de dicho nexo causal haya
sido ampliado, al contener un componente fáctico y un componente jurídico. Es
decir, se analiza la “relación que surge entre el daño y la observancia o inobservancia
de los deberes jurídicos”12.
Por último, el operador judicial debe determinar si la entidad demandada se

encuentra en la obligación de reparar el daño imputado. De resultar cierto, se
procede analizar bajo qué fundamento o régimen de responsabilidad ha de ser
declarada administrativamente responsable. Lo anterior, partiendo de lo
dispuesto en el artículo 90 de la Constitución Política de Colombia, disposición
que regula la responsabilidad patrimonial del Estado, en los siguientes términos:
"ARTÍCULO 90. El Estado responderá patrimonialmente por los daños

antijurídicos que le sean imputables, causados por la acción o la omisión de
las autoridades públicas. En el evento de ser condenado el Estado a la
reparación patrimonial de uno de tales daños, que haya sido consecuencia
de la conducta dolosa o gravemente culposa de un agente suyo, aquél
deberá repetir contra éste".
El régimen bajo el cual se analice la responsabilidad del Estado, será diferente

dependiendo del origen del daño. En la primera hipótesis (falla del servicio) se
estudiará bajo el régimen subjetivo. Mientras que en la segunda (riesgo
excepcional) se hará bajo el régimen objetivo. Estos regímenes son coexistentes
y no excluyentes entre sí, ya que su determinación le corresponde determinarlo
al juez en base al principio iura novit curia.
5.4.2. Marco jurídico del uso de la fuerza por parte de los agentes de las Fuerzas
Militares y de la Policía Nacional.
El Estado tiene a su cargo la protección de la vida de sus habitantes, tal como lo

establece el artículo 11 de la Carta Política de 1991. Este deber tiene fundamento
en la bidimensionalidad que le se atribuye a los derechos fundamentales. Por un
lado, implica abstenerse a realizar cualquier acto dirigido a violar o menoscabar
12Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Jaime Enrique Rodríguez Navas, Rad No. 68001-23-31-
000-2004-02686-01(42731), Sentencia del 29 de marzo de 2019.
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la vida, y por el otro, conlleva adoptar medidas positivas para defender la vida
cuando las circunstancias amenacen o pongan en peligro la integridad y que
provengan de terceras personas13.
Para tales efectos, se recuerda que las Fuerzas Militares tienen a su cargo la
defensa de la soberanía, la independencia, la integralidad territorial y el orden
constitucional. Por su parte, la Policía Nacional fue instituida como un cuerpo
armado de carácter permanente para mantener las condiciones necesarias
para el ejercicio de los derechos y libertades públicos de los habitantes del
territorio nacional14.
Para llevar a cabo estos objetivos, se ha permitido que sus agentes hagan un uso
proporcional y razonable de la fuerza, incluyendo, el manejo de armas de
dotación oficial. Se entiende que existe un adecuado uso de las armas de fuego,
cuando estos elementos son utilizados como último recurso para proteger el
cometido constitucional en el caso concreto. Por este motivo, es indispensable
que el personal de la Fuerza Pública cuente con la debida preparación y
entrenamiento para utilizar este tipo de artefactos.
Una indebida utilización de las armas de fuego por parte de la Fuerza Pública
comprometería la responsabilidad administrativa y patrimonial del Estado. Esta
situación puede presentarse cuando se utilizan armas de dotación oficial de
manera desmedida o desproporcional frente a la situación de riesgo que se
presenta. De lo contrario, se estaría legitimando el restablecimiento del orden en
desmedro de la vida y demás derechos fundamentales de las personas15. En todo
caso, la Policía Nacional debe propender por aplicar medidas preventivas y
correctivas sujetas al principio de legalidad para contrarrestar las agresiones que
ponen en peligro los derechos y bienes de las personas16.
Otro evento que puede conllevar la declaratoria de la responsabilidad estatal,

ocurre cuando se obvia o prescinde de la aplicación al principio de distinción, es
decir, cuando los miembros de las Fuerza Pública no respetan la vida e integridad
personal de la población civil ajena a los conflictos, hostilidades, o
enfrentamientos que adelante17.
13 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección C, C.P. Jaime Orlando Santofimio Gamboa,
Rad. No. 05001-23-31-000-2004-01004-01(47347), Sentencia del 26 de febrero de 2014.
14 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección C, C.P. Nicolás Yepes Corrales, Rad. No. 73001-
23-31-000-2010-00636-01(49571), Sentencia del 13 de agosto de 2021.

15 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección B, C.P. Alberto Montaña Plata, Rad. No. 23001-
23-33-003-2012-00-106-01 (51178), Sentencia del 2 de marzo de 2022.

16 Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Marta Nubia Velásquez Rico, Rad No. 05001-23-31-
000-2007-01548-01(44739), Sentencia 19 de julio de 2018.

17 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección B, C.P. Ramiro Pazos Guerrero, Rad. No. 05001-
23-31-000-2011-00092-01(52979), Sentencia del 7 de septiembre de 2020.
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En esta clase de situaciones, el Consejo de Estado ha propendido por analizar el

daño producido por los agentes estatales a través del título de imputación de
riesgo excepcional, aunque, si se advierte la ocurrencia de una falla del servicio
por parte de la entidad demandada, así habrá de declararse18. Recuérdese que,
el régimen de responsabilidad del riesgo excepcional procede “cuando el daño
acaece como consecuencia de la actividad legítima de la administración pública que
comporta un riesgo excesivo o de naturaleza anormal sea porque la administración
incrementó el peligro inherente o intrínseco a la actividad o porque en el despliegue de
la actividad se crearon riesgos que en atención a su exposición e intensidad,
desbordaron o excedieron lo que razonablemente debía asumir la víctima”19.
Así entonces, al analizar los casos bajo el régimen objetivo del riesgo excepcional,
le corresponde a la parte actora probar “la existencia del daño y la relación de
causalidad entre este y el hecho de la Administración, realizado en desarrollo de la
actividad riesgosa”20. Por su parte, la Administración Pública puede exonerarse de
responsabilidad cuando demuestre una causa extraña, como lo son: la fuerza
mayor, el hecho exclusivo de un tercero, o la culpa exclusiva de la víctima.
Igualmente, se puede romper el nexo de causalidad cuando el empleo de las

armas de dotación se utilice en alguno de los siguientes casos: “(i) en defensa
propia o de otras personas, en caso de peligro inminente de muerte o lesiones graves;
(ii) con el propósito de evitar la comisión de un delito particularmente grave que entrañe
una seria amenaza para la vida; (iii) con el objeto de detener a una persona que
represente ese peligro y oponga resistencia a su autoridad; (iv) para impedir su fuga, y
sólo en caso de que resulten insuficientes medidas menos extremas para lograr dichos
objetivos; y (v) en cualquier caso, sólo se podrá hacer uso intencional de armas letales
cuando sea estrictamente inevitable para proteger una vida”21.
5.5. CASO CONCRETO.
5.5.1. Hechos relevantes probados.
5.5.1.1. Registro civil de nacimiento del menor Widis Armando Rodelo Tapias,
donde se registra como fecha de nacimiento el 1° de diciembre de 1997. Sus
padres son Luz Meris Tapia Santo y Francisco Antonio Rodelo Jiménez22. A su vez,
18 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección A, C.P. María Adriana Marín, Rad. No. 05001-
23-31-000-2008-01141-01 (48303), Sentencia del 11 de mayo de 2022.
19 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección C, C.P. Jaime Enrique Rodríguez Navas, Rad.
No. 19001-23-31-000-2003-00223-01(40522), Sentencia del 16 de diciembre de 2020.

20 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección A, C.P. Marta Nubia Velásquez Rico, Rad. No.
68001-23-31-000-2008-00298-01(45661), Sentencia del 11 de octubre de 2018.

21 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección B, C.P. Fredy Ibarra Martínez, Rad. No. 68001-
23-31-000-2009-00675-01 (57.056), Sentencia del 4 de mayo de 2022.

22 Folio 24 del archivo 01 del expediente electrónico.
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se constata que sus hermanos son María Luz Rodelo Tapia23, Francisco Javier
Rodelo Tapias24, Alejandra Vanessa Rodelo Tapias25, Santiago Rodelo Tapia26
5.5.1.2. Queja del 20 de agosto de 2014 presentada por la Sra. Luz Meris Rodelo
Tapia ante la Personería Municipal de Montecristo, donde informó que su hijo,
Widis Rodelo Tapia y su sobrino, Jhon Jader Rodelo Jiménez se dirigieron al
corregimiento del Paraíso, ubicado en esa misma municipalidad. Sin embargo,
precisó que no han regresado de ese lugar, a pesar de que su idea era
demorarse poco tiempo. Refiere que se acercaron a la Estación de Policía, para
solicitar ayuda, no obstante, le indicaron que solo podían realizar acciones a
partir de las 72 horas seguidas a su desaparición. Finalmente, indicó su
preocupación, dado que, teme que hubiesen sido reclutados por grupos
armados al margen de la ley que circulan por esa zona27.
5.5.1.3. Orden de operación del 28 de agosto de 2014 realizada por el Batallón

de Fuerzas Especiales de Infantería de Marina. En el documento se establece que
la misión del operativo militar es ubicar y neutralizar a Irlandio Orfelio Ramoz
Camacho, alias “Mario Managua”, cabecilla del Frente 37 de la SATT-FARC28.
5.5.1.4. Orden de operaciones No. 035, donde se narran los detalles de la

operación efectuada entre 28 al 31 de agosto de 2014 por el Batallón de Fuerzas
Especiales de Infantería de Marina. Se indica como resultados operacionales, la
muerte de 4 personas, 2 capturados heridos y 2 capturados ilesos. Igualmente, se
hace alusión al material de guerra utilizado y recuperado29.
5.5.1.5. Registro civil de defunción del menor Widis Armando Rodelo Tapias,
donde se registra que falleció el 29 de agosto de 201430.
5.5.1.6. Informe de necropsia del 1° de septiembre de 2014 realizado por el

Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses a la humanidad de Jhon
Jader Rodelo Jiménez. La opinión forense respecto a la causa de muerte fue la
siguiente: “Las múltiples heridas de órganos muy vascularizados como el riñón izquierdo
y el bazo, así como el compromiso de vasos sanguíneos renales izquierdos, explican la
muerte del sujeto por pérdida del volumen sanguíneo (Hemorragia aguda y Shock
Hipovolémico) y estas fueron desencadenadas por el paso penetrante y transfixíante de
dos fragmentos metálicos o esquirlas de artefacto explosivo”31.

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5.5.1.7. Informe pericial de necropsia del 2 de septiembre de 2014 efectuado por

el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias forenses a la humanidad del
joven Widis Armando Rodelo Tapia. La opinión frente a la causa de muerte fue la
siguiente: “Las lesiones de vasos sanguíneos a nivel del cuello, explican la muerte del
sujeto por pérdida del volumen sanguíneo (Hemorragia aguda y Shock Hipovolémico) y
estas fueron desencadenadas por el paso perforante de un proyectil de arma de
fuego”32.
5.5.1.8. Queja del 2 de septiembre de 2014 presentada por la Sra. Luz Meris Rodelo
Tapia ante la Personería Municipal de Montecristo, donde señaló que el 20 de
agosto de esa anualidad, le avisaron que el grupo guerrillero de las FARC había
reclutado a su hijo. Igualmente, relata que varios familiares le informaron que el
Batallón Nueva Granada del Ejército Nacional había bombardeado un
campamento de la mencionada guerrilla, donde resultaron muertos dos jóvenes
provenientes de Montecristo. Su excompañero, Francisco Rodelo se dirigió el 1°
de septiembre de 2014 a la morgue ubicada en el municipio de
Barrancabermeja, donde reconoció los cadáveres de su hijo y sobrino33.
5.5.1.9. Oficio No. 3727 del 11 de agosto de 2016 expedido por el Comandante
de Batallón Nueva Granada, donde informa que, esa unidad militar no realizó
ningún bombardeó durante los meses de agosto y noviembre de 2014. Además,
señaló que esta unidad militar no cuenta con el personal, ni con los medios, para
realizar ese tipo de operaciones militares. Por último, precisó que el Batallón
Nueva Granada no tuvo participación en los hechos que produjeron la muerte
de los menores de edad, dado que, su jurisdicción se limita a los municipios de
San Pablo, Cantagallo y Barrancabermeja. De todas formas, refieren que
redirigieron la petición elevada por las madres de las víctimas directas, al
Comando Conjunto de Operaciones Especiales, con sede en Bogotá D.C., dado
que, se tiene conocimiento de que, esa unidad militar -aparentemente- realizó
una operación militar para el día 29 de agosto de 2014, en inmediaciones del
municipio de Santa Rosa (Bolívar)34.
5.5.1.10. Oficio No. 20169160270831 del 24 de agosto de 2016 suscrito por el

Comandante del Comando Conjunto de Operaciones Especiales de las Fuerzas
Militares, por medio del cual, informa que para el día 29 de agosto de 2014, esa
unidad llevó a cabo una “operación militar contra el objetivo militar campamento del
cabecilla del Frente 37 del GAO SATT-FARC, en área general [del] Departamento Bolívar
municipio Santa [R]osa del sur vereda los Robles”35.

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5.5.1.11. Oficio No. 0117002784602 del 28 de noviembre de 2017 suscrito por el

Comandante del Comando del Conjunto de Operaciones Especiales, donde
certifica que “este Comando no llevó a cabo ningún bombardeo en las inmediaciones
de los municipios de Montecristo y Santa Rosa del Sur en el departamento de Bolívar
entre el 28 y 29 de agosto de 2014”36.
5.5.1.12. Declaración juramentada del Sr. José Domingo Tapia Santo recibida por
el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de Montecristo, el pasado 12 de
diciembre de 2017, donde manifestó lo siguiente:
“PREGUNTADO: Diga el declarante todo en cuanto sepa y le conste sobre

unos hechos ocurridos en jurisdicción del corregimiento del PARAISO
jurisdicción del municipio de MONTECRISTO BOLIVAR, aproximadamente
alrededor de la fecha del 20 de agosto del 2014, en donde resultaron muertos
los señores WIDIS ARMANDO RODELO TAPIA y su primo JHON JADER RODELO
JIMENEZ, al parecer por hechos según sus familiares ocasionados por el
Ejército Nacional de Colombia motivo de bombardeos en el lugar antes
mencionado donde al parecer se encontraban los señores nombrados al
comienzo de esta pregunta. CONTESTO: los dos niños muertos uno era mi
sobrino ósea [sic] WIDIS ARMANDO y el otro niño ósea JHON JADER era sobrino
del papa de WIDIS, los niños estaban en el corregimiento de EL DORADO, ellos
por tiempo estudiaban y por tiempo no estudiaban, ya que ellos desde
temprana edad trabajaban en el sector minero, barequeando para ayudar
a sus padres, tengo entendido por mi hermana LUZ MERY TAPIA, mamá de
WIDIS que el día 20 de agosto de 2014, los niños se encontraban barequeando
cuando llegaron miembros de la guerrilla de las FARC y los reclutaron según
versiones de pobladores del sector, fueron llevados hasta el corregimiento EL
PARAISO, y de allí fueron llevados a otro lugar, mi hermana y la mamá del otro
niño fueron a rescatarlos pero no se los quisieron entregar, de allí al 29 de
agosto del año 2014, mi hermana me llamó llorando diciéndome que los niños
estaban muertos, por el bombardeo que hizo el ejército nacional (Batallón
Granada) acantonado en el sector al lugar donde los tenían, fueron llevados
por la autoridad hasta Barrancabermeja, y cuando llegamos a
Barrancabermeja ya los habían sepultados como NN, duramos dos días para
llegar hasta Barrancabermeja porque es lejos el trayecto, entonces fuimos
hasta medicina legal y fue donde nos pusieron a identificarlos a través de unas
fotos que tenían en el computador, fotos donde ya estaban muertos, una vez
reconocidos empezamos hacer el proceso de exhumación, el cual duro ocho
días , en las fotos que nos mostraron los niños estaban vestidos con unos
camuflados que les quedaban grande, lo que me hizo pensar que se los
colocaron después de muertos, después de todo el proceso de exhumación
los trasladamos hasta Montecristo donde les dimos cristiana sepultura”37.
5.5.1.13. Declaración juramentada de la Sra. Aideth del Carmen Patiño Díaz

recibida por el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de Montecristo, de fecha
12 de diciembre de 2017, donde expuso lo siguiente:

12
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01

comienzo de esta pregunta. CONTESTO: En cuanto a la fecha no me acuerdo
exactamente, conozco a las madres de los jóvenes en mención que vivía uno
de ellos en el caso del joven WIDIS lo conocí siendo un menor de edad
viviendo en el sector del barrio abajo del municipio de Montecristo, que
escuche como es de conocimiento público que en un momento fueron
reclutados por la guerrilla de las FARC en el sector minero a donde él se había
dirigido en compañía de otros jóvenes en busca de trabajo, y que luego
aparecieron muertos a causa de un bombardeo en la serranía de san lucas,
al parecer en un operativo militar en contra de la guerrilla, y que fueron
llevados los cuerpos a Barrancabermeja en donde los familiares hicieron todas
las gestiones para recuperar los muertos y darles cristiana sepultura en el
municipio de Montecristo”38.
5.5.1.14. Declaración juramentada de la Sra. Carmen Esther Duarte Rodríguez

recibida por el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de Montecristo, de fecha
12 de diciembre de 2017, donde indicó lo siguiente:

comienzo de esta pregunta. CONTESTO: tuve conocimiento que el día 20 de
agosto del año 2014, un grupo de guerrilla de las FARC EP que operaban en
ese momento en esa zona de las serranías de san Lucas en las confluencias
de los municipios e Montecristo, Morales y Santa Rosa sector minero, estos
niños se encontraban en la zona en busca de trabajos, porque en esta zona
es fácil y se permite que los menores trabajen en oficios varios en las minas,
fueron reclutados por este frente de las FARC EP que operaban en ese
momento en la zona, porque fue de público conocimiento su reclutamiento,
cabe anotar que no solamente los reclutaron a ellos sino a varios niño en esa
confluencia minera, pero con tan mala suerte que el día 29 de agosto del año
2014, hubo un bombardeo por parte del Ejercito Nacional de Colombia
contra un campamento de las FARO EP, donde infortunadamente murieron
los niños WIDIS RODELO TAPIA Y JHON JADER RODELO JIMENEZ, cuando los
familiares de estos niños se enteraron de que ellos fueron reclutados
forzosamente por miembros de la guerrilla de las FARC EP, de inmediato
empezaron a hacer todas las diligencias y gestiones para recuperar a sus hijos
13
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
pero todo fue imposible, estas acciones se hicieron a través de las juntas de
acciones comunales de estos asentamientos mineros y la respuesta
encontrada por ellos fue totalmente negativa, los cuerpos de estos menores
de edad fueron trasladados a BARRANCABEMEJA por las autoridades
competentes y a través de la defensoría regional del magdalena medio con
sede en Barrancabermeja se hicieron las gestiones para el traslado de los
cadáveres que ya habían sido sepultados como NN, la defensoría del pueblo
conjuntamente con la fiscalía de Barrancabermeja hicieron todos los trámites
para las exhumación de los cadáveres y posterior traslado a la cabecera
municipal de Montecristo bolívar donde se les dio cristiana sepultura”39.
5.5.1.15. Oficio del 8 de febrero de 2018 suscrito por la Fiscal 122 Especializada de
Barrancabermeja, donde aporta copia del expediente penal bajo noticia
criminal número 68-08-16-00-0135-2014-0138740.
5.5.2. Análisis crítico de las pruebas frente al marco jurídico.
Para resolver el problema jurídico planteado, esta Corporación Judicial

procederá a analizar los elementos del daño y de la imputación jurídica que se
le endilga a la Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional.
5.5.2.1. El daño.
El daño es definido como “la afectación o lesión a un interés jurídicamente tutelado,

es decir, daño es toda injuria a un derecho o interés ajeno”41. En el presente asunto,
se encuentra acreditada la muerte del joven Widis Armando Rodelo Tapias,
conforme al registro de defunción que obra en el expediente42. Además, este
hecho se encuentra probado con el informe pericial de necropsia elaborado por
el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, según el cual, la
causa de su muerte fue provocada por un proyectil de arma de fuego43.
Así entonces, los medios probatorios aludidos, permiten concluir que, el joven,
Widis Armando Rodelo Tapias tuvo una afectación a su vida e integridad
personal. De esta manera, se deduce que, este daño afecta un bien jurídico
tutelado, y a su vez, tiene repercusiones económicas y morales para el entorno
familiar de la víctima directa. Sin embargo, se aclara que, para estructurar la
responsabilidad patrimonial del Estado no es suficiente con acreditar el daño, ya

40 Folio 22 del archivo 01 y Carpeta “15ExpedientePenal” del expediente electrónico.
41 Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Ramiro Pazos Guerrero, Rad No. 05001-23-31-000-2009-
01012-01(45902), Sentencia del 17 de septiembre de 2018.

14
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
que, debe demostrarse que ese perjuicio es atribuible a la entidad demandada

(imputación jurídica)44.
5.5.2.2. La imputación jurídica.
El juicio de imputación conlleva realizar una “valoración fáctica, en la que se

determina su origen o causa material, y otra jurídica, en la que se analiza la relación que
surge entre el daño y la observancia o inobservancia de los deberes jurídicos”45. Para
acreditar este elemento de la responsabilidad es importante determinar el
régimen de responsabilidad aplicable al presente caso, ya sea, falla del servicio,
riesgo excepcional, o daño especial.
Como se mencionó en líneas precedentes, los daños originados a través del uso
de armas de fuego deben analizarse a través del título de imputación de riesgo
excepcional, dado que, implica el despliegue de una actividad que pone en
una situación de exposición e intensidad superior a la víctima46. Para tales
efectos, le corresponde a la parte actora probar “la existencia del daño y la relación
de causalidad entre este y el hecho de la Administración, realizado en desarrollo de la
actividad riesgosa”47. Por su parte, la Administración Pública puede exonerarse de
responsabilidad cuando demuestre una causa extraña, como lo son: la fuerza
mayor, el hecho exclusivo de un tercero, o la culpa exclusiva de la víctima.
Igualmente, se puede romper el nexo de causalidad cuando el empleo de las

armas de dotación se utilice en alguno de los siguientes casos: “ (i) en defensa
propia o de otras personas, en caso de peligro inminente de muerte o lesiones graves;
(ii) con el propósito de evitar la comisión de un delito particularmente grave que entrañe
una seria amenaza para la vida; (iii) con el objeto de detener a una persona que
represente ese peligro y oponga resistencia a su autoridad; (iv) para impedir su fuga, y
sólo en caso de que resulten insuficientes medidas menos extremas para lograr dichos
objetivos; y (v) en cualquier caso, sólo se podrá hacer uso intencional de armas letales
cuando sea estrictamente inevitable para proteger una vida”48.
Descendiendo al caso concreto, la Sala sostendrá como tesis que, debe

confirmarse la sentencia del treinta y uno (31) de octubre de dos mil diecinueve
(2019) proferida por el Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de Cartagena,
44 Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Carlos Alberto Zambrano Barrera, Rad No. 73001-23-
31-000-2011-00077-01(44886), Sentencia del 10 de diciembre de 2018.
45 Consejo de Estado, Sección Tercera, C.P. Jaime Enrique Rodríguez Navas, Rad No. 68001-23-31-
000-2004-02686-01(42731), Sentencia del 29 de marzo de 2019.

46 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección C, C.P. Jaime Enrique Rodríguez Navas, Rad.
No. 19001-23-31-000-2003-00223-01(40522), Sentencia del 16 de diciembre de 2020.

47 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección A, C.P. Marta Nubia Velásquez Rico, Rad. No.
68001-23-31-000-2008-00298-01(45661), Sentencia del 11 de octubre de 2018.

15
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
por medio de la cual, se negaron las pretensiones de la demanda. Los

argumentos que se tuvieron en cuenta para adoptar esta decisión fueron los
siguientes:
i) No se desconoce la calidad de víctimas de los menores Widis Rodelo Tapias y

Jhon Rodelo Jiménez. En el marco de la operación que adelantó el Batallón de
las Fuerzas Especiales de la Armada Nacional el pasado 29 de agosto de 2014,
resultaron muertos los menores antes aludidos, conforme a lo previsto en la orden
de operaciones49 y en el expediente penal50. Cabe destacar que, no existe
indicios de que el fallecimiento de las víctimas hubiese sido provocado por
ejecuciones extrajudiciales, o falsos positivos. En ningún momento se alegó esta
situación en la demanda, y adicionalmente, tampoco existe inconsistencias en
los informes presentados por el personal de la Fuerza Pública a la Fiscalía.
Según lo dispuesto en el líbelo introductorio, los menores fueron reclutados

forzosamente por el entonces, grupo guerrillero de las FARC, mientras se dirigían
al corregimiento del Paraíso, jurisdicción del municipio de Montecristo (Bolívar), el
día 20 de agosto de 2014. No existe una prueba fidedigna que compruebe que
el reclutamiento de los jóvenes hubiese sido forzosamente, pues, solamente se
aporta en este sentido una queja interpuesta por la Sra. Luz Meris Rodelo Tapias
ante la Personería Municipal de Montecristo51. En este documento, la madre del
menor Widis Rodelo manifiesta su preocupación frente un eventual reclutamiento
de su descendiente.
En igual sentido, los testigos José Domingo Tapia Santo, Aideth del Carmen Patiño
Díaz y Carmen Esther Duarte Rodríguez indicaron que habían escuchado sobre
el reclutamiento de la víctima por parte del grupo subversivo. Al respecto, debe
precisarse que estos testimonios son de oídas, es decir, que no les consta lo
sucedido porque no vieron o presenciaron el acto que se cuestiona. Para su
valoración, los testigos de oídas deben detallar la identificación plena y clara de
la(s) persona(s) que hubiere(n) transmitido la información que relatan. De esta
manera, se busca evitar que un verdadero testimonio se confunda con un rumor,
en cuanto proviene de fuentes anónimas o indeterminadas52.
En este orden de ideas, las declaraciones rendidas al interior de este proceso

judicial, no cumplieron con este presupuesto para su efectiva valoración, toda
vez que, no precisaron la fuente que los condujo a afirmar que los jóvenes de 16
años hubiesen sido reclutados forzosamente por las FARC.

50 Folio 22 del archivo 01 y Carpeta “15ExpedientePenal” del expediente electrónico.
52 Consejo de Estado, Sección Tercera, Subsección B, C.P. Stella Conto Díaz Del Castillo, Rad. No.
17001-23-31-000-2002-11611-01(33650), Sentencias del 31 de mayo de 2016.
16
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
Sin embargo, más allá de la discusión probatoria sobre la “voluntariedad” de la

participación de las víctimas en el conflicto armado, esta Corporación Judicial
recuerda que el Código Penal en su artículo 162 establece el delito de
reclutamiento ilícito. Esta disposición normativa prevé lo siguiente: “El que, con
ocasión y en desarrollo de conflicto armado, reclute menores de dieciocho (18) años,
los utilice o los obligue a participar directa o indirectamente en las hostilidades, o en
acciones armadas, incurrirá en prisión”.
Al analizar la constitucionalidad de esta norma, la Corte explicó que las víctimas

o sujetos pasivos de este tipo penal incluyen a aquellos menores que hubieren
participado de manera voluntaria, o forzosa dentro de las hostilidades propias
del conflicto armado. Para sustentar esta posición, señaló que existen una serie
de cuestionamientos por parte de la comunidad internacional y de expertos en
el tema, que consideran que “el calificativo de “voluntario” no corresponde con la
situación material que lleva a los menores de edad a “decidir” que quieren participar en
un grupo armado”. La opción de un niño de ingresar a estos grupos no es
generalmente una decisión libre, al obedecer, en la práctica, a presiones de tipo
económico, social, cultural o político, que no dejan alternativa a los niños ni a sus
familias. Además, explicó que “la legislación civil prevé que los menores no tienen la
capacidad para obligarse estrictamente en decisiones que generen efectos jurídicos,
por lo que la voluntad de admisión o ingreso no puede ser considerada un motivo de
atipicidad, menos cuando ni siquiera está previsto en la norma”53.
Teniendo en cuenta lo anterior, puede concluirse que, superando la discusión

sobre la “voluntariedad” de la participación de Widis Rodelo Tapias y Jhon
Rodelo Jiménez en el conflicto armado, lo cierto es que ambos jóvenes fueron
víctimas del delito de reclutamiento ilícito. En estos términos, no puede afectarse
su buen nombre y honra, cuestionando esta calidad. No obstante, como se
explicará más adelante, su fallecimiento no es imputable a las Fuerzas Militares.
(ii) De los documentos aportados al plenario, puede revelarse que la operación

militar desarrollada entre el 28 y el 31 de agosto de 2014, iba encaminada en
ubicar y neutralizar a Irlandio Orfelio Ramoz Camacho, alias “Mario Managua”,
cabecilla Frente 37 del SATT-FARC. El grupo de inteligencia de la Armada
Nacional determinó el área o ubicación donde se encontraba el mencionado
objetivo militar. Además, detalló la composición del grupo subversivo, y las
posibles eventualidades que podían suceder en el desarrollo del operativo militar,
tales como, los refuerzos que podían solicitar y las vías o caminos de escape que
podían utilizar para darse a su fuga. Igualmente, destacó que no existía
población civil que pudiese resultar afectada por este operativo militar54.
53 Corte Constitucional, Sala Plena, M.P. Mauricio González Cuervo, Sentencia C-240 de 2009.
54 Folios 12-49 del archivo 01 de la Carpeta “01ExpedientePenal1” del expediente electrónico.
17
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
En cuanto al desarrollo propio de la operación55, se lee que el 29 de agosto de

2014, las fuerzas militares se encontraban en el punto de ubicación donde estaba
el puesto de mando del grupo guerrillero. En ese momento, los agentes estatales
lanzaron la proclama que los identificaba como tropas de las Fuerzas Militares,
Ante lo cual, el entonces grupo armado subversivo, procedió a disparar hacia el
sitio donde se encontraban los miembros de la Fuerza Pública. Este hecho
produjo un enfrentamiento armado directo entre ambos combatientes, donde
finalmente, resultaron muertas cuatro (4) personas, y a su vez, se produjo la
captura de cuatro (4) personas. Sumado a lo anterior, se logró incautar diferentes
armas de fuego, explosivos, material de informática y de comunicaciones.
Respecto a las personas fallecidas, se constató que los hombres tenían puestos
uniformes privativos de la Fuerza Pública, con prendas adicionales que aludían
su pertenencia al grupo subversivo de las FARC56. En estos términos, puede
concluirse que el accionar de los miembros de las Fuerzas Militares se hizo con
ocasión al ejercicio a la legítima defensa.
Primero, porque los agentes estatales anunciaron o previnieron a los

combatientes de su presencia, ante lo cual, recibieron diferentes disparos contra
su humanidad. Segundo, al advertir esta situación de agresión, era a penas
lógico que los uniformados reaccionaran de manera proporcional con el uso de
armas de dotación oficial contra los insurgentes. Tercero, si bien, los menores Widis
Rodelo y Jhon Rodelo tenían la condición de víctimas por el delito de
reclutamiento ilícito, lo cierto es que, por el contexto de la situación y por la ropa
que portaban, era razonable que las Fuerzas Militares reaccionaran con el uso de
armas de fuego ante la agresión que estaban presentando.
En este mismo sentido, el Consejo de Estado explicó que, la aplicación de la

causal de exoneración de legítima defensa está supeditada a los siguientes
eventos: “i) el uso de las armas debe ser el único medio posible para repeler la agresión,
ii) no debe existir otro medio o procedimiento viable para la defensa y, iii) la respuesta
armada se debe dirigir exclusivamente a repeler el peligro, de modo que no constituya
una reacción indiscriminada en tanto debe existir coherencia de la defensa con la
misión que legal y constitucionalmente se ha encomendado a la Fuerza Pública”57.
Así entonces, se reitera que, la Fuerza Pública actuó de manera proporcional a

la agresión que había sido iniciada por el grupo subversivo. No existía otro medio
o procedimiento viable que pudiese repeler el ataque padecido. Debe

56 Folios 256-265 del archivo 01 de la Carpeta “01ExpedientePenal1” del expediente electrónico.
18
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
destacarse que los uniformados de la Armada Nacional anunciaron su presencia

en la zona para intentar mediar su entrega de manera pacífica. Sin embargo, al
presentarse disparos con armas de fuego, la única forma de repeler la agresión
era de la misma manera. Además, no se probó que la Fuerza Pública hubiese
actuado de manera irregular. Utilizó armas permitidas por el Derecho
Internacional Humanitario, y realizó la captura de dos miembros del grupo
guerrillero, sin que se produjese alguna vulneración a su integridad personal, o al
debido proceso respecto a la investigación penal que se adelantó en su contra.
Por otro lado, la entidad demandada no pudo dar aplicación al principio de

distinción, ya que, las víctimas directas portaban uniformes y prendas alusivas a
un grupo al margen de la ley. Lo anterior, sumado al contexto de agresión inicial
por parte del grupo guerrillero, resultaba de difícil diferenciación para las Fuerzas
Militares determinar si los menores eran víctimas, o simplemente, soldados rasos
de la organización criminal. Por lo anterior, resultaba una actuación legítima por
parte de la Fuerza Pública proceder a utilizar sus armas de dotación oficial para
detener los disparos que estaban dirigiéndose en su contra.
(iii) Finalmente, debe advertirse que la queja presentada por la Sra. Luz Meris
Rodelo Tapias ante la Personería Municipal de Montecristo, el 20 de agosto de
2014 58, no fue trasladada a las Fuerzas Militares. Esta situación se torna relevante,
en la medida que, hubiera significado un insumo importante para que el grupo
de inteligencia de la Armada Nacional tuviera en consideración, las sospechas
de reclutamiento ilícito que había alegado la Sra. Rodelo Tapias. Al no remitirse
esta documentación a la entidad demandada, resultaba imprevisible para la
misma, contener los daños colaterales que produjo el operativo militar.
Sumado a lo anterior, no obra en el expediente judicial, ninguna prueba que

justifique la omisión de la Personera Municipal de Montecristo en remitir dicha
queja a las autoridades competentes para investigar y proceder a tomar
acciones en este asunto. En todo caso, un análisis en este sentido resulta
superfluo, por cuanto, la Personería Municipal de Montecristo no fue vinculada a
esta controversia judicial.
Por todos estos motivos, el Tribunal considera que debe confirmarse la sentencia
del treinta y uno (31) de octubre de dos mil diecinueve (2019) proferida por el
Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de Cartagena, por medio de la cual,
se negaron las pretensiones de la demanda.
19
Rad. 13001-33-33-003-2016-00240-01
5.6. CONDENA EN COSTAS.
El artículo 188 del CPACA señala, que la condena en costas debe liquidarse y
ejecutarse conforme a lo dispuesto en el Código de Procedimiento Civil (hoy,
Código General del Proceso). A su vez, el artículo 365.1 del CGP estipuló que se
condenará en costas a la parte vencida en el proceso, o a quien se le resuelva
desfavorablemente el recurso de apelación.
En consecuencia, al confirmarse la sentencia de primera instancia, se condenará

en costas de segunda instancia a la parte demandante, las cuales serán
liquidadas por el juzgado de primera instancia.
En mérito de lo expuesto, el Tribunal Administrativo de Bolívar administrando

justicia en nombre de la República y por autoridad de la ley,
VI.- FALLA
PRIMERO: CONFIRMAR la sentencia del treinta y uno (31) de octubre de dos mil
diecinueve (2019) proferida por el Juzgado Tercero Administrativo del Circuito de
Cartagena, por las razones expuestas en la parte motiva de esta providencia.
SEGUNDO: Condenar en costas de segunda instancia a la parte demandante,

las cuales serán liquidadas por el juzgado de primera instancia.
TERCERO: Ejecutoriada esta providencia, REMÍTASE el expediente al juzgado de

origen.
CÓPIESE, COMUNÍQUESE, NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE
Constancia: el proyecto de esta providencia fue estudiado y decidido en sesión virtual de la

fecha.
LOS MAGISTRADOS,
ÓSCAR IVÁN CASTAÑEDA DAZA
20

003-2016-240-01-RD-Francisco Rodelo Jiménez Vs Ejército Nacional - Operativo Militar

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TRIBUNAL ADMINISTRATIVO DE BOLÍVAR

SENTENCIA No. 004 DE 2023

I.- IDENTIFICACIÓN DEL PROCESO, RADICACIÓN Y PARTES INTERVINIENTES.

Medio de control Reparación Directa.

Demandantes Francisco Antonio Rodelo Jiménez y otros.

Demandado Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional.

Responsabilidad estatal por daños ocasionados en un

Magistrado Ponente Óscar Iván Castañeda Daza.

Procede la Sala Fija de Decisión No. 01 del Tribunal Administrativo de Bolívar a

La parte actora pretende que se declare patrimonial y administrativamente

Como consecuencia de lo anterior, pidió que se condenara a la entidad

1 Folios 2-3 del archivo 01 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

En la demanda se relata que, el 20 de agosto de 2014, los jóvenes Widis Armando

Indica que, las progenitoras de los menores desaparecidos fueron informadas

Luego, el 30 de agosto de 2014, los demandantes se enteraron que el Batallón

3.2. CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA

3.2.1. Nación – Ministerio de Defensa – Ejército Nacional3.

La apoderada judicial de la entidad demandada se opuso a las pretensiones de

2 Folios 3-5 del archivo 01 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

probada la causal de exoneración de hecho exclusivo y determinante de un

3.3. SENTENCIA DE PRIMERA INSTANCIA4.

3.5. RECURSO DE APELACIÓN5.

La apoderada judicial de la parte actora solicitó que se revocara la sentencia

4 Folios 37-59 del archivo 02 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

no estaba dentro de la capacidad de los menores controlar su reclutamiento

Recordó que los menores de edad son sujetos de especial protección

3.5 TRÁMITE PROCESAL DE SEGUNDA INSTANCIA.

Por auto del 2 de noviembre de 20216, se admitió el recurso de apelación

3.6. ALEGATOS DE CONCLUSIÓN.

3.6.1. Parte demandante8.

La apoderada judicial de la parte actora instó al Tribunal a acceder a las súplicas

6 Archivo 05 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

3.6.2. Parte demandada9.

3.7. CONCEPTO DEL MINISTERIO PÚBLICO.

No se registra pronunciamiento por parte del Agente del Ministerio Público.

IV. CONTROL DE LEGALIDAD

Revisado el expediente se observa que de conformidad con lo previsto en el

Es competente esta Corporación para conocer el presente proceso en segunda

5.2. PROBLEMA JURÍDICO.

Le corresponde a esta Colegiatura resolver el siguiente problema jurídico:

¿Debe declararse la responsabilidad administrativa y patrimonial de la Nación

9 Archivo 11 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

Jiménez y Widis Armando Rodelo Tapia el 29 de agosto de 2014, en el marco

5.3. TESIS DE LA SALA.

5.4. MARCO NORMATIVO Y JURISPRUDENCIAL.

5.4.1. La responsabilidad extracontractual del Estado

El daño constituye el primer elemento estructural de los procesos de

El segundo elemento de la responsabilidad es la "imputación", la cual, es

10Folios 193-204 del archivo 01 del expediente electrónico.

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

víctima, y por consiguiente, permite vislumbrar el sujeto, suceso o cosa que

En la actualidad dicho concepto ha sido ampliado jurisprudencialmente, dado

Por último, el operador judicial debe determinar si la entidad demandada se

"ARTÍCULO 90. El Estado responderá patrimonialmente por los daños

El régimen bajo el cual se analice la responsabilidad del Estado, será diferente

El Estado tiene a su cargo la protección de la vida de sus habitantes, tal como lo

Código: FCA - 008 Versión: 03 Fecha: 03-03-2020

Otro evento que puede conllevar la declaratoria de la responsabilidad estatal,