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NECESIDADES DE COMPENSACION EDUCATIVA

Alumnos con NECESIDADES DE COMPENSACIÓN EDUCATIVA.

Estos alumnos presentan una serie de necesidades ocasionadas por factores


externos (sociales, familiares, económicos…). Nuestro sistema educativo establece que
en tales casos se implemente una serie de medidas de compensación. (Res. 17 de
mayo 2010, BOCYL 27 de mayo)

Para entender la filosofía que en su momento promovió estas medidas de


compensación que debemos aplicar, acudimos a la claridad del maestro Fernández
Enguita: “Son ya un lugar común, en el que no necesitamos detenernos, las ventajas
asociadas a la clase media o a la mayoría étnica a través del capital escolar, los
hábitos culturales, el uso de un lenguaje formal, la familiaridad con las pretensiones del
profesor y la disposición a entrar en el juego de la evaluación. (…) Los alumnos
proceden de medios no igualmente estimulantes, poseen capacidades diversas, se
sienten más o menos atraídos e identificados con la institución, traen consigo distintos
grados de conocimiento previo y pasan por muy diferentes momentos y
circunstancias…” (1*) y nuestra legislación indica que no deben ser evaluados todos
por igual.

Incluimos a los alumnos de compensatoria en tres grupos (algún alumno puede


estar en más de uno):

 Necesidades relacionadas con la falta de dominio del idioma castellano, tanto en


el aspecto oral como escrito.
 Necesidades causadas por la incorporación tardía al sistema educativo español:
desfase curricular.
 Necesidades causadas por especiales condiciones sociales o familiares.

Hay que tener en cuenta que a veces estas condiciones externas al alumno (lagunas
en la escolarización, falta de hábitos de trabajo, etc), cuando se alargan en el tiempo,
provocan un retraso cognitivo difícil de superar.

POSIBLES ESTRATEGIAS A SEGUIR


Si no tienen Adaptación Significativa, se supone que estos alumnos pueden
alcanzar los objetivos mínimos de su curso. Por lo tanto los contenidos y criterios de
evaluación serán los de la programación ordinaria, pero exigiéndole los mínimos
contemplados en la programación, y contemplándolo así en los exámenes. A esto se le
llama Adaptación no Significativa. Cuando veáis que no pueden alcanzar los mínimos,
es que necesita Adaptación Significativa. En el departamento de orientación os
ayudamos a hacerla.

-Seleccionar los contenidos que en cada tema se le van a exigir. Presentárselos de


manera sintetizada y organizada coherentemente, para facilitar su comprensión-
asimilación (facilitarles resúmenes, que puede ser los que vienen en el texto o en guías
del profesor, en lugar de que se enfrente él solo al estudio directo del libro de texto). Es
tarea imposible que analicen, comprendan, asimilen y recuerden toda la información del
libro de texto. Tampoco son capaces de seleccionar lo relevante o irrelevante con
eficacia. Por eso es importante ofrecerle la información que consideremos fundamental
para alcanzar los mínimos

-Es importante proporcionarles una exhaustiva reglamentación. Directrices claras y


muy explícitas en cuanto a cómo realizar y presentar sus trabajos. Ayuda mucho que
las instrucciones queden recogidas en el cuaderno (por ejemplo dictándoselas a todos,
recogiéndolas en la primera hoja del cuaderno, etc). Es conveniente cortar la clase 3
minutos antes para recordar a todos los alumnos que apunten los deberes en su
agenda.

-Organizarse: necesitan ayuda para elaborar planes de estudio y secuenciar tareas.


Esto se hace en tutoría y lo deban supervisar las familias. Si veis que hay muchos
problemas en este aspecto, comunicadlo al tutor o al departamento de orientación.

-Favorecer el trabajo en clase, que se lleve lo menos posible para casa, tareas
cortas, que ellos puedan ver el resultado (por ejemplo trabajando con un solucionario).
Cuánto más tiempo de clase pasen trabajando y menos escuchando, mejor.

-Tanto en los ejercicios de clase como en los deberes, seleccionar para este grupo de
alumnos los más asequibles (contenidos mínimos). Mejor pocos pero bien hechos.

-Puede que necesiten tiempo extra para acabar las tareas. Trabajan muy lentamente,
les ayudaría la reducción del número de tareas y no tener que copiar los enunciados.

-Cuando sea posible, potenciar otras vías de aprendizaje (sobre todo visual), para que
el aprendizaje pueda “entrar” por más sentidos.

-Se tratará siempre de reforzar su seguridad en sí mismo y su autoestima, con el fin


de evitar el bloqueo ante las tareas que suponen un gran esfuerzo para él, y el
consecuente abandono por fracaso.
-Evaluación

Contemplar en la programación la evaluación continua puede suponer para estos


alumnos la diferencia del éxito al fracaso. Nuestro centro lo recoge de diferentes
maneras en cada departamento (valorando ejercicios hechos en clase en un porcentaje
X). Podéis pedir la información en jefatura.

-Exámenes: se planificarán con la suficiente antelación para que no tenga más de 1


por día.

-Practicar en clase el mismo tipo de examen o similares.

-Flexibilizar el tiempo de realización de exámenes (o reducir el número de preguntas).


Es importante darles tiempo suficiente para que terminen trabajo y exámenes con
tranquilidad y puedan revisarlos.

-Ofrecerle también las pautas necesarias durante el examen. Favorecer las preguntas
cerradas como los test de respuestas múltiples. Se puede realizar el examen en el aula
de apoyo para ofrecerle también las pautas necesarias. Contactar para ello con el
departamento de orientación.

-Es bueno que el profesor tenga en cuenta y reconozca el esfuerzo que les supone
preparar un examen o un trabajo, que les trasmita su reconocimiento y les motive para
continuar trabajando, sean cuales sean los resultados.

FUNDAMENTACIÓN LEGAL

Orden EDU 1151/2010

Res 17 de mayo 2010, BOCYL 27 de mayo

(1*) Fracaso y abandono escolar en España. Mariano Fernández Enguita, Luis Mena Martínez y Jaime Riviera
González. Fundación La Caixa. 2010.

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