Vestido Santo

Ensayo

La obra del vestido Santo, narra la historia de dos indigentes que vivieron
su fiel amistad desde serie de acontecimientos vividos en Venezuela en tiempos
de manifestaciones , en historias recientes donde las calles de Chacaíto, estaban
dominadas por la protesta social y la rebelión, donde a toda hora habían dosis de
violencias, que envolvían la vida cotidiana no solo de los transeúntes, sino también
de la vida de sus personajes, que casi nunca son tomadas en cuenta, personajes
que en el día luchan en las calles para sobrevivir y en las noches pernoctan en las
mismas, viviendo entre miseria e inseguridad.
Chacaíto visto desde las calles ¿Verdad o censura?, Es un hecho que la
indigencia y la pobreza venezolana habían disminuido hace décadas atrás, sin
embargo, aún quedaban personas en situación de calle, así se puede ver en la
obra la El Vestido Santo donde un hombre el cual no se consideraba indigente ya
que vendía tickets del 5 y 6, y una mujer, la cual se sentía protegida con un
vestido que le regalo una señora la cual llamaba santa, y el cual ella denomino su
vestido santo; Ellos Vivian en una casa antigua abandonada, donde próximamente
la restaurarían. En él transcurrir de los días, ellos se la pasaban en plazas el
vendiendo en 5 y 6 y ella se aprovechaba del descuido de las personas para
hurtarle sus carteras, eran tiempos difíciles en Venezuela, la crisis económica
agudizaba y ellos debían buscar cómo sobrevivir, por otro lado, a ella le gustaba
recolectar papeles de colores eso la alegraba.
El hombre la admiraba mucho, era su única compañía le aconsejada que se
cambiara ese vestido que la hacía notar mucho entre las personas y que no le
darían limosna porque, reconocerían que ya le dieron, “Cuando pedía limosna en
la Avenida Principal de Las Mercedes, aprovechando los semáforos, la gente le
gritaba que ya le habían dado en la Plaza Venezuela, que ya la habían visto en la
Miranda.” ella se negaba rotundamente pues su vestido que era de cuadros grises
con blanco la hacía sentirse protegida porque se lo regalo la mujer santa a lo que
él no le insistió más. Un día se levantó y ella ya no estaba, luego pasaron los días
y ella no regresaba, el triste la extrañaba mucho, no podía salir a buscarla ya que
tenía una pierna mal, a las mayorías personas les molesta las personas
discapacitadas y las molestias que puedan causar, hasta que un día decidió salir
luego de que un policía le diera algunas sugerencias de donde la podía conseguir.
Llego hasta un asilo donde por suerte la consiguió, pero ella se conseguía
internada y no podía salir, allí fue donde hicieron un plan para escaparse.
 Días antes de llevar a cabo el plan, empezaron las manifestaciones, asi lo
expreso en la obra “Poco antes del día señalado para la fuga estallaron los
disturbios y el plan tuvo que posponerse. No había transporte y nadie en el asilo
contestaba el teléfono. La ciudad estaba sitiada y para cruzarla era necesario
atravesar por calles donde había constantes tiroteos”. Según Fernández (2017) las
manifestaciones en Chacaíto y en el país fueron un estallido social, producto de
las tensiones socioeconómicas sufridas por la sociedad venezolana a partir de la
primera devaluación de la moneda. El protagonista Como consecuencia de los
disturbios no llegaba la comida al asilo, lo que hacía que las personas que estaban
internadas de alteraran, cuando se dieron cuenta que la comida no llegaría, los
encargados del asilo abrieron las puertas para que fueran a buscar alimentos en
las calles, soltándolos a la deriva en un momento de conflictos armados, como si
ellos no importaran, como si fueran chatarra humana. La chica del vestido santo al
ver la libertad salió corriendo sin saber el peligro que aguardaba no sabiendo
también que un tiro le quitaría la vida y seria libre de toda la vida de miseria que
llevo, por otro lado, el hombre se quedó esperándola y ella nunca llego.
Finalmente, ante esta obra el autor usa un estilo narrativo con un lenguaje
fácil de entender que no permite que se vaya el hilo de la historia. En esta obra
pude apreciar como la realidad de las personas que viven en condición de calle o
pobreza no es tan fácil si la vemos desde nuestra perspectiva, solemos decir
“Quien fuera loco para no pensar en nada” cuando vemos una persona en
situación de calle, sin saber la realidad que ellos en verdad viven y las
preocupaciones que los agobian para poder sobrevivir cada día, en este caso
aunado a la falta de hogar y alimentación, también se sumaba el peligro que
corrían en las manifestaciones y protestas vividas en Chacaíto, y que en lo social
tenían un albergue que se supone que los protegerían y a la final los lanzaron a
buscar su muerte, porque tristemente para la sociedad solo son chatarra humana.