UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS

CARRERA DE ECONOMÍA

ECONOMÍA AMBIENTAL Y ECOLÓGICA

TEMA:
Precios hedónicos y Capacidad de carga
Nombre:

Edisson Lema

Aula:
E8-003

Fecha: 20-06-2023
 INFORME ABSTRACT # 15

TEMA
Precios hedónicos y Capacidad de carga
AUTORES
Cammarano; Cohen; Comisión Económica para América Latina y el Caribe, Gloria Flórez , Rosen
y Sherwin; Seidl yTisdell

ABSTRACT
Hare especial énfasis en los siguientes temas; Precios hedónicos y Capacidad de carga, los
costos monetarios de daños ecológicos como la contaminación, los costos monetarios de la
disminución de stock de recursos naturales, los gastos del medio ambiente, los beneficios
medioambientales.
CONTENIDO Y DESARROLLO
Precios hedónicos
El economista americano Sherwin Rosen en la década de 1970. La idea detrás de la teoría
de precios hedónicos es que el precio de un bien o servicio refleja no sólo su función
económica o utilidad, sino también los atributos no tangibles que lo acompañan, como la
calidad, la marca, la ubicación y otros factores subjetivos.
Normalmente, el proveedor de un bien o servicio enfrenta una demanda explícita por su
producto, la cual determina, en conjunto con la estructura de costos relevante, el
comportamiento en el mercado de dicho proveedor. Cada bien y servicio, por su parte, está
constituido por una serie de características o atributos que, en conjunto, configuran la
unidad básica que es transada en el mercado. Dichos atributos, en la medida en que son
inevitablemente traspasados por el proveedor al consumidor al momento de efectuar éste la
compra del bien, tienen la particularidad de afectar positiva o negativamente el precio de
éste, dependiendo de la valoración que el demandante mantenga por cada uno de estos
atributos.
De este modo, se generan mercados implícitos por cada atributo, cuyas demandas y ofertas,
no obstante, no son observables en forma directa. En la mayoría de los casos, conocer las
demandas implícitas por las características que componen un bien o servicio carece de
relevancia, especialmente en aquellos mercados en que dichas características, cuantitativa y
cualitativamente, se reflejan en forma relativamente transparente en los precios. En
mercados más complejos, como el de los bienes raíces, el conocimiento de las demandas o
los "precio sombra" de cada atributo cobra especial interés, fundamentalmente por la alta
heterogeneidad de los atributos observados, su fácil diferenciación y el alto valor relativo
de este tipo de bienes.
En tal sentido, la Teoría de Precios Hedónicos constituye un significativo avance
metodológico en la modelación de mercados implícitos por atributos, proporcionando
técnicas econométricas para la obtención de precios y demandas implícitas a partir de la
medición del precio del bien compuesto y de la forma en que se efectúa la "mezcla" de
atributos que lo compone.
La aplicación de las teorías hedónicas se remonta al estudio realizado por Ridker y Henning
en 1967, quienes analizaron para St. Louis, Estados Unidos, el efecto de la contaminación
del aire sobre el precio de mercado de las viviendas, así como de otras características
propias de los inmuebles y su vecindario. Posteriormente, S. Rosen (1974) enunció
formalmente un modelo de precios hedónicos en dos etapas para obtener precios (primera
etapa) y demandas (segunda etapa) implícitas para cada atributo o característica (Rosen,
Sherwin, 1992)
La Teoría de Precios Hedónicos pretende explicar el valor de un bien raíz, entendido como
un conjunto de atributos (superficie, aptitud de uso del suelo, calidad de la construcción,
diseño interior y exterior, áreas verdes, ubicación, características del vecindario, etc.), en
función de cada uno de ellos, obteniendo sus respectivas valoraciones y, por ende,
demandas implícitas.
La metodología utilizada consiste en construir un modelo econométrico que explicite la
relación funcional entre el precio del bien raíz y sus respectivas características, dotarlo de
información estadística y regresionarlo, procesando luego los resultados de manera de
estimar la valoración implícita por cada atributo.
EXPRECION DEL MODELO
La metodología estándar proporciona una ecuación hedónica de precios que capta el efecto
de los distintos atributos individuales de un inmueble en la determinación de su valor de
mercado.
La forma general del modelo utilizado es la siguiente:
P=f (I ,V , U , Z , S , E ; w)
La variable P corresponde al precio del bien raíz, el cual se asume está determinado por los
argumentos de la función f. Normalmente se tiende a privilegiar el uso de esta variable
como el precio por metro cuadrado en lugar del precio total del inmueble, siguiendo la
indicación teórica (corroborada por la experiencia empírica) de que la superficie de éste
ejerce una fuerte influencia como variable explicativa del valor del metro cuadrado.
Los argumentos de la ecuación hedónica:
I : características inherentes al inmueble (superficie construida, superficie del terreno,
aptitud de uso del suelo, aspectos de arquitectura y diseño interior, equipamiento interior,
número de habitaciones, calidad de los materiales, etc.).
V : características del vecindario (nivel socioeconómico, tipo de residentes, seguridad,
etc.).
U : características de ubicación del bien raíz (área residencial, área industrial, distancia
geográfica y accesibilidad a centros de importancia, etc.).
Z : características determinadas por la ubicación del inmueble dentro del Plano Regulador
de la ciudad (zoning) (densidad de la construcción, tipos de actividades y usos del suelo
permitidos, etc.).
S : características determinadas por el nivel de equipamiento exterior, servicios e
infraestructura que recibe el inmueble (agua, alcantarillado, electricidad, pavimentación,
etc.).
E : externalidades presentes en el entorno en que se encuentra el bien raíz (actividades
contaminantes, áreas verdes, vertederos de desperdicios, etc.)
w : conjunto de parámetros que acompañan a cada atributo y que constituyen los precios
implícitos (sombra) de cada característica del inmueble.
En esta ecuación señala que el precio de mercado de un bien raíz está determinado por la
canasta de las cantidades de los distintos atributos (pertenecientes a los grupos I, V, U, Z, S
y E) que posee el inmueble y que lo caracteriza y la diferencia de otros bienes raíces de su
tipo.
Capacidad de carga
La regla de Parson: establece que la capacidad de carga ambiental se alcanza cuando la tasa
de explotación de un recurso natural es igual a su tasa de regeneración.
Las poblaciones tienen patrones característicos de incremento que se incluyen en el
concepto de formas de crecimiento poblacional. Para efectos de comparación, se han
escogido dos patrones básicos: las curvas de crecimiento con forma de J y S. En el primer
caso, la densidad se incrementa rápidamente de forma exponencial y se detiene
abruptamente cuando la resistencia del ambiente se convierte en un factor determinante
(Odum 1959).
En la curva en forma de sigmoide (S), la población crece despacio al principio (fase de
aceleración positiva); luego, el crecimiento se acelera (fase logarítmica) y más tarde pierde
velocidad gradualmente al aumentar el coeficiente de resistencia del ambiente (fase de
aceleración negativa) hasta alcanzar el nivel de equilibrio. Esta forma puede ser
representada por el modelo logístico de crecimiento poblacional:
∆N (k−N )
=rN
∆t k
La fórmula explica el comportamiento en el que la población alcanza su crecimiento
máximo la constante K, representado en la asíntota superior de la curva sigmoide. Esta
constante es la que se conoce como la capacidad de carga de la población. En la curva en
forma de J probablemente no existe un nivel de equilibrio, pero sí un máximo representado
por N, que es el límite superior impuesto por el ambiente. En la Fig. 1, este estado se
alcanza cuando las funciones llegan a su punto máximo (Odum 1959). La capacidad de
carga de hábitats o ecosistemas particulares como sabanas, bosques o especies animales, así
como la cantidad de turistas en las reservas naturales, se determina mediante la ecuación
anterior (Seidl y Tisdell 1999)
En la ecología aplicada, cuando se habla de capacidad de carga, se pueden distinguir al
menos cinco concepciones, cada una con un objetivo diferente de gestión: (i) un rango
existente de población, (ii) la tasa de crecimiento de equilibrio de una población, (iii) el
número de individuos que se debe proteger en la población, (iv) el descuento de la
población cosechada, (v) la población como un recurso de libre acceso, donde existen
curvas de ingreso y costos (Cohen 1995).
Los costos monetarios de daños ecológicos como la contaminación
Son difíciles de medir y a menudo se subestiman. Sin embargo, estos daños pueden tener
enormes impactos en la salud humana, la productividad económica y los ecosistemas. Por
ejemplo, la contaminación del aire puede provocar enfermedades respiratorias y reducir la
productividad de los trabajadores. La contaminación del agua puede dañar la pesca y la
agricultura, y el cambio climático puede tener efectos devastadores en la infraestructura y la
seguridad alimentaria. Por lo tanto, es importante tomar en cuenta los costos monetarios y
no monetarios de los daños ecológicos al tomar decisiones que afecten el medio ambiente.
Los costos monetarios de la disminución de stock de recursos naturales
La disminución del stock de recursos naturales puede tener varios costos monetarios. Por
ejemplo, la sobreexplotación de bosques puede reducir la cantidad de madera disponible
para su uso en la construcción, la fabricación de muebles, entre otros, lo que eleva el precio
de la madera y, por lo tanto, los costos para los consumidores. De manera similar, la pesca
excesiva de ciertas especies puede reducir su disponibilidad, aumentando los costos de
producción y los precios para los consumidores (Cammarano, 2016).
Además, la disminución del stock de recursos naturales también puede tener un impacto
negativo en la economía en general, ya que muchos sectores económicos dependen de estos
recursos para funcionamiento. Por ejemplo, la agricultura depende del agua y los suelos
saludables, mientras que la energía se basa en los combustibles fósiles y las fuentes de
energía renovable.
Los gastos del medio ambiente
Los gastos del medio ambiente pueden incluir una serie de costos asociados con la
protección o la restauración del medio ambiente. Estos gastos pueden estar asociados con la
reparación de la contaminación, la gestión de residuos, la restauración de ecosistemas
dañados o la implementación de políticas y regulaciones ambientales (Comisión Económica
para América Latina y el Caribe (CEPAL) , 2014).
Por ejemplo, el costo de limpiar un derrame de petróleo puede alcanzar cifras millonarias,
mientras que la introducción de tecnologías más limpias y eficientes para reducir las
emisiones de gases de efecto invernadero puede generar importantes gastos para las
empresas.
Además, también hay costos asociados con la gestión adecuada de recursos naturales, como
la plantación de áreas forestales para reducir la erosión del suelo y proteger la
biodiversidad, la construcción de infraestructuras para la gestión de residuos, el monitoreo
de especies en peligro o la evaluación de los impactos ambientales de los proyectos de
desarrollo.
Los beneficios medioambientales
Los beneficios medioambientales se refieren a resultados positivos o mejoras tangibles en
los ecosistemas y la calidad del medio ambiente que pueden ocurrir como resultado de
acciones conscientes enfocadas en un enfoque sostenible. Algunos beneficios ambientales
clave pueden incluir:
 Mejora de la calidad del aire y agua: Las políticas y prácticas que buscan reducir la
contaminación son esenciales para mejorar las condiciones del aire y el agua, lo que
puede ayudar a reducir la cantidad de enfermedades relacionadas con la
contaminación, mejorar los medios de vida, y promover la biodiversidad.
 Preservación de los ecosistemas naturales: Como resultado de las políticas y
prácticas que buscan proteger el medio ambiente, se puede lograr la conservación y
protección de los ecosistemas naturales. Esto garantiza la continuidad de los
recursos naturales y al mismo tiempo promueve la biodiversidad.
 Ahorro de recursos naturales: Las políticas y prácticas que buscan reducir el
desperdicio y la sobreexplotación de recursos naturales contribuyen a su
preservación y conservación a largo plazo. Varios estudios han demostrado que el
ahorro de energía y recursos también puede conducir a importantes ahorros
económicos.
 Mejora de la salud y del bienestar humano: La adopción de prácticas y políticas
sostenibles puede llevar a una reducción en la contaminación y a la mejora de la
 calidad del aire y el agua, lo cual puede conducir a beneficios en la salud y el
bienestar humano.
 Promoción del cambio climático: La reducción de la carbonización y adopción de
tecnologías energéticas limpias ayudará en la reducción de emisiones y a su vez a la
reducción del calentamiento global (Gloria Yaneth Flórez Yepes, 2013).
CONCLUSIONES
 El economista americano Sherwin Rosen en la década de 1970. Precios hedónicos
es que el precio de un bien o servicio refleja no sólo su función económica o
utilidad, sino también los atributos no tangibles que lo acompañan, como la calidad,
la marca, la ubicación y otros factores subjetivos.
 Parson: establece que la capacidad de carga ambiental se alcanza cuando la tasa de
explotación de un recurso natural es igual a su tasa de regeneración.
 Los gastos del medio ambiente pueden incluir una serie de costos asociados con la
protección o la restauración del medio ambiente. Estos gastos pueden estar
asociados con la reparación de la contaminación, la gestión de residuos, la
restauración de ecosistemas dañados o la implementación de políticas y
regulaciones ambientales (Comisión Económica para América Latina y el Caribe
(CEPAL) , 2014).
RECOMENDACIONES
 Es importante el método de precios hedónicos es una herramienta valiosa para
estimar el valor económico de los bienes y servicios ambientales. Para garantizar
resultados precisos y confiables.
 Es necesario en la capacidad de carga ambiental identificar cómo las actividades
humanas impactan el área evaluada, como la contaminación del agua, la
deforestación, la sobreexplotación de recursos, entre otros. Se deben establecer
metas y umbrales de sostenibilidad para la gestión del área. Estos establecerán los
límites máximos de carga y los niveles de calidad ambiental que se deben mantener,
lo que ayudará a garantizar que la gestión del área sea sostenible.
 La atención a los gastos del medio ambiente es esencial para garantizar la
sostenibilidad y protección del medio ambiente. La implementación de prácticas
efectivas de evaluación e inversión, colaboración, inversión en tecnología verde y
promoción de la educación y conciencia son algunos enfoques necesarios para
garantizar una inversión efectiva en el medio ambiente.

Referencias
Cammarano, D. E. (2016). Obtenido de
chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://www.intercostos.org/
documentos/congreso-08/194.pdf
Cohen, JE. (1995). Population growth and the Earth´s human carrying capacity (269:341-346 ed.).
Science.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) . (2014). El gasto en protección
ambiental en América Latina y el Caribe. Chile: Naciones Unidas.

Gloria Yaneth Flórez Yepes. (2013). Análisis de beneficios socio-ambientales por la implementación
de estrategias de producción más limpias en el sector agropecuario. Colombia.

Rosen, Sherwin. (1992). "Hedonic Prices and Implicit Markets: Product Differentiation in Perfect
Competition. Journal of Political Economy.

Seidl, I; Tisdell, C. (1999). Carrying capacity reconsidered: from Malthus population theory to
cultural carrying capacity. Ecological Economics.