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Tarea 3 Reconocimiento de los modelos no financieros para la valoración de los

activos intangibles

Presentado por:

Leidy Yadira Tovar Castillo

Código 1118028519

Presentado a:

Jaime Alberto Peña Valenzuela

Escuela de ciencias administrativas, Contables, económicas y de negocios ECACEN

Universidad Nacional Abierta y a Distancia UNAD

Noviembre, 2023
Gestión de los activos intangibles

Relatoría sobre Modelos No Financieros y su Aporte en la Creación de Valor

Los activos intangibles son fundamentales para el éxito de las empresas, ya que establecen
valor comercial y una ventaja competitiva sobre otras organizaciones. Es crucial evaluar
estos activos ya que fomentan la innovación y facilitan la creación y gestión de
conocimiento, lo que puede elevar el desempeño de una empresa y eclipsar a sus
competidores. De hecho, los activos intangibles constituyen una fuente superior de ventaja
competitiva para las organizaciones. Estos activos a largo plazo incluyen capacitación de
empleados, desarrollo de tecnología, procesos de fabricación y sistemas de marketing y
distribución, que no se reflejan en los estados financieros. La ausencia de activos
intangibles haría que una empresa careciera de valor y no fuera reconocida tanto a nivel
nacional como internacional. No se puede subestimar la importancia de valorar los activos
intangibles, ya que mejora la capacidad de una empresa para atraer recursos financieros,
presenta una oportunidad para elevar la imagen pública de la empresa, promueve una
competencia sana y proporciona un medio para mejorar la información sobre los activos
intangibles. Por eso es crucial que estos activos reciban la más alta consideración y se
reconozcan como un elemento esencial en cualquier informe publicado.

A continuación, la descripción de estos modelos:

Modelo Balance Scorecard

Herramienta utilizada con fines de gestión, que permite llevar a cabo la ejecución de la
estrategia de una empresa, que se basa en un conjunto de medidas orientadas a la acción
permite una supervisión constante de todos los aspectos de las operaciones de la empresa.

Al analizar una organización, es importante considerar sus elementos constitutivos y cómo


se interrelacionan, esto incluye examinar la relación entre los objetivos de la organización y
los medios por los cuales se logran esos objetivos. Las organizaciones exitosas comprenden
la importancia de vincular los objetivos con las acciones, asegurando que todos los
esfuerzos se dirijan hacia el logro de los resultados deseados, el acto de monitorear las
actividades comerciales a menudo se realiza de manera particular y precisa. El propósito de
este monitoreo es realizar un seguimiento de detalles específicos y garantizar que todas las
operaciones funcionen correctamente. En general, el objetivo es mantener un sentido
general de supervisión y control sobre el negocio.

La organización puede evaluarse con precisión basándose en un conjunto conciso de


indicadores, normalmente no más de catorce, que sirven como resumen de su progreso y
dirección. Para evitar confusión debido a la abundancia de indicadores disponibles para
nosotros, es útil tener un método para organizarlos e interpretarlos.

Para llegar a una conclusión sólida, es imperativo considerar las diversas facetas que
contribuyen a la percepción general de una empresa. Una imagen positiva de la empresa en
varias plataformas es un determinante clave para tomar la decisión correcta.

Las áreas de decisión, como las relacionadas con las operaciones financieras y comerciales,
brindan amplias oportunidades para que las empresas tomen decisiones estratégicas y
asuman riesgos calculados.

Con frecuencia, los resultados de la planificación estratégica son monitoreados de cerca y


respetados por varios gerentes, ya que reconocen el valor de estos resultados.

A través del proceso de poner riesgos en papel, las personas pueden asumir riesgos que tal
vez no se hubieran sentido cómodos en situaciones de la vida real. Este método de asunción
de riesgos permite una comunicación clara y efectiva entre todas las partes involucradas.

Los objetivos y determinaciones de los ejecutivos de alto rango deben alinearse con los de
la empresa en general. Es imperativo que los objetivos de la alta dirección estén
sincronizados con los del resto de la organización.

Modelo Navigator Skandia:

Se centra en la clasificación de los diferentes factores que componen el capital intelectual,


así como, en la creación de diferentes indicadores y parámetros que contribuyan a medirlo.
Esto lo convierte en una potente herramienta para averiguar las verdaderas fortalezas de la
corporación en cuanto a activos intangibles y aumentar su desarrollo.

Leif edvinson es el desarrollador de este modelo, estaba firmemente convencido de la


importancia de desarrollar el capital intelectual dentro de la organización para que
mantuviera su vigencia en el tiempo y pudiera ser asociado con otras actuaciones de esta,
por ejemplo, el desarrollo del negocio, recursos humanos y la tecnología. Los indicadores
del modelo skandia son los siguientes:

1.

Indicadores financieros: los autores advierten que para comprobar el estado de salud de una
empresa no hay que dejarse traicionar por las ganancias a corto plazo. El inversor cauto
tendrá en cuenta otros indicadores, como las ganancias que se deben a nuevos productos,
que le indicarán si la organización se deja llevar o si realmente dispone de la
competitividad suficiente para hacer frente al futuro.

2.

Indicadores del enfoque al cliente: para saber cómo son las relaciones con nuestros clientes
tenemos que conocer el tipo de cliente al que le pueden resultar atractivos nuestros
productos, la duración de la relación de nuestros clientes con nuestra organización, el papel
del cliente en el diseño de nuevos productos, el apoyo que damos al cliente y el éxito que
tenemos con nuestros clientes en cuanto a proporción de compras y de quejas.

Modelo Méritum:

Modelo Méritum El modelo está diseñado para las organizaciones que tengan en cuenta la
gestión de los intangibles como un componente de la estrategia global de la empresa para
así relacionarlo con la creación de valor. Cabe destacar que en este modelo es necesario
crear la diferencia entre los recursos intangibles y las actividades o inversiones en
intangible. Por tanto, para el análisis de los intangibles el modelo Méritum establece tres
categorías capital, humano, capital estructural y el capital relaciona. (Sarmiento, 2001).Las
principales características de este modelo son Según Sarmiento (2001):
 Se gestionan los intangibles mediante las fases de identificación, medición y
seguimiento y acción.
 Utiliza como sinónimo los términos intangibles y capital intelectual.
 Está diseñado para empresas que consideren la gestión de los intangibles como
estrategia global de la organización.
 Busca aportar una base consistente para la medición y difusión de la información
sobre intangibles.
 Aporta mejora a la toma de decisiones en el ámbito organizacional.
 Permite el diseño de políticas de ciencia tecnología e innovación.

Este modelo utiliza los términos de capital intangible y capital intelectual como
sinónimos y pone especial énfasis en la distinción entre recursos intangibles y
actividades corporativas. El primero, es estático, que representa el stock o valor
actual de un determinado objeto inmaterial en un momento dado. Las actividades,
un concepto dinámico, implican la asignación de recursos para el desarrollo
interno o la adquisición en el exterior de nuevos activos intangibles, así como para
mantener y mejorar los ya existentes, como medir y controlar su crecimiento.

Modelo Intellectus:

Es un modelo dinámico y operativo de evaluación, en el cual su elaboración está a cargo de


un determinado grupo multidisciplinar, el cual está constituido en el foro de conocimiento
intelectos, el cual permite el estudio de la escala de medida, los procesos de evaluación y
construcción de indicadores en la valoración optima de activos de carácter intangibles.

Se basa principalmente en el capital humano, además de lo organizativo, tecnológico, de


negocio y social. Este fue desarrollado por el centro de investigación sobre la sociedad del
conocimiento.

Componentes modelo Intellectus

 Capital humano
 Capital organizativo
 Capital tecnológico
 Capital negocio
 Capital social

Capital humano:

 Valores
 Actitudes
 Capacidades

Capital organizativo:

 Cultura
 Estructura
 Aprendizaje
 Organizativo
 Procesos

Capital tecnológico:

 Tecnológica
 Propiedad intelectual e industrial

Capital de negocio:

 Relaciones con clientes, proveedores, aliados, competidores, medios de


comunicación e imagen corporativa, relaciones con las instituciones de promoción
y mejoras de calidad.

Capital social:

Relaciones con accionistas, instituciones e inversiones, administraciones públicas, defensa


del medio ambiente, sociales, reputación corporativa, otras relaciones con la sociedad.

Objetivos

 Clasificar la lógica que construye y desarrolla el contenido del modelo.


 Mejorar la estructura lógica del modelo.
 Proponer una guía metodológica para la elaboración del informe de capital
intelectual.

Características:
 Sistemático
 Abierto
 Flexible
 Adaptivo
 Dinámico
Bibliografía

Salazar, D. & Osorio, M. (2016). La gestión del conocimiento organizacional y el capital intelectual
en el sector de alimentos y bebidas. Estudios y perspectivas en turism 25(3), 339-359.o
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Donoso, J. (2018). Modelos no financieros de valoración del capital intelectual. [OVI].


http://hdl.handle.net/10596/21349.

Gómez, L., Londoño, E. & Mora, B. (2020). Modelos de capital intelectual a nivel empresarial y su
aporte en la creación de valor. Revista CEA, 6(11), 165-184. https://www.redalyc.org/articulo.oa?
id=638171128010.

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