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Introducción
El propóleo es una sustancia que es producida por las abejas, su nombre viene
del griego “Propolis” donde “Pro” significa “delante de”, y “polis” significa “ciudad”,
su traducción literal significa “Defensa de la ciudad”, esto se debe a que las abejas
hacen uso de esta sustancia para sellar y proteger su colmena, además de otras
funciones. El propóleo se encuentra formado por resinas que las abejas van
recogiendo de ciertas especies de plantas. El propóleo se ha usado de forma
tradicional por las diversas propiedades que tiene, entre ellas las antisépticas y
fungicidas, que contribuyen al tratamiento de diversas infecciones
Concepto de Propóleo
En la colmena las abejas hacen uso del propóleo de forma versátil. Lo utilizan para
sella grietas, minimizar las vías de acceso, recubrir y aislar resto de animales que
ingresan en la colmena, lo usan para el fortalecimiento de estructuras internas,
aplicar una capa desinfectante en las celdillas y reducir vibraciones. Todas estas
funciones demuestra la valiosa naturaleza que tiene el propóleo en la vida de las
abejas y en la protección de su colmena.
En el mundo antiguo, el propóleo era conocido por las propiedades curativas que
tenía, se menciona en el papiro de Ebers, un antiguo documento médico egipcio
del año 1700 antes de Cristo, como una medicina. Aristóteles también habla de el
en una de sus obras, destacó que este era un remedio para las infecciones de la
piel y fiebres.
En épocas más recientes, alrededor del año 1900, durante la guerra Anglo-Boer en el sur
de África, se informó sobre el papel crucial que desempeñó el propóleo en la salvación de
muchos soldados. Actuando como una medida preventiva contra la gangrena en un
momento en que los antibióticos ni siquiera se conocían o estaban disponibles, el
propóleo se destacó por su capacidad para tratar heridas y afecciones infecciosas.
Durante la Revolución Rusa, también se utilizó el propóleo, aplicándolo como ungüento y
vaselina en las heridas. Este uso no solo tenía fines antisépticos, sino que también se
empleaba para estimular la cicatrización y regeneración de los tejidos lesionados. Estos
episodios históricos resaltan el potencial significativo de esta sustancia en el tratamiento
de heridas y condiciones infecciosas en una época en la que los recursos médicos eran
limitados.
Sin embargo, no fue sino hasta la década de 1960 que se empezaron a realizar
estudios científicos exhaustivos acerca de los componentes y las propiedades del
propóleo, lo cual marco su entrada oficial en la industria farmacéutica, dichos
estudios revelaron la diversidad de compuestos bioactivos presentes en el
propóleo y sus posibles aplicaciones terapéuticas. En 1978 la OMS comenzó a
promover el desarrollo de medicinas alternativas y terapias naturales, dando lugar
para que el propóleo evolucionara y se comenzara a aprovechar.
El propóleo es una sustancia resinosa que las abejas obtienen por medio de las
yemas de los árboles y otras fuentes vegetales. Lo usan en sus colmenas para
sellar grietas, fortalecer sus estructuras y defenderse contra patógenos, en su
composición química encontramos las Resinas, que son la parte principal de su
composición, estas se recolectan por las abejas, las consiguen en diferentes
árboles como los álamos, abetos y coníferas. La Cera de abejas, hace parte de la
composición, se mezcla con las resinas para darle al propóleo su consistencia
pegajosa y moldeable. Los aceites esenciales le proporcionan el aroma
característico de esta sustancia y puede tener propiedades antimicrobianas. El
polen, el propóleo contiene polen en pequeñas cantidades, o cual contribuyen en
su valor nutricional. El propóleo puede contar también con algunos compuestos
orgánicos, influyendo flanoides, ácidos fenólicos, alcoholes, ácidos grasos y otros
compuestos bioactivo.
Ceras: Comprenden alrededor del 30-40% del propóleo. Las ceras son
aquellos componentes cerosos que contribuyen a lograr la textura y la
maleabilidad que es característica del propóleo.
Aceites esenciales y aromáticos: Representan alrededor del 7-10% del
propóleo. Estos aceites esenciales y compuestos aromáticos aportan el
característico aroma y algunas de las propiedades terapéuticas del
propóleo.
Justificación
Conclusión
El propóleo surge como una prometedora solución en el ámbito de la medicina
veterinaria y la producción animal. Su composición química diversa y sus
propiedades terapéuticas lo convierten en un recurso versátil para mejorar la salud
y el bienestar de los animales, así como para optimizar la producción.
Uno de los hallazgos más importante es sobre el potencial que tiene como
alternativa a los antibióticos y productos químicos en el tratamiento y la prevención
de enfermedades en animales. La resistencia antimicrobiana es un problema
constante y creciente en la medicina veterinaria, y el propóleo ofrece una solución
natural y más efectiva para lograr combatir patógenos sin los riesgos que están
asociados con los antibióticos.
Bibliografía