TRANSCRIPCIÒN LA ARDILLITA GLOTONA.

Había una ardillita en el bosque que le encantaba comer, todo el tiempo. Todos los días
iba y se robaba la comida de sus amigos del bosque. Los amiguitos estaban cansados
de que les quitara su comida, así que decidieron hacerle una casita chiquita con
montones de cosas ricas. La ardillita, al ver tanta comida en su nueva casita, se
emocionó mucho. Entró corriendo y se comió todo lo que había dentro, se puso tan
gorda que no podía ni moverse Cuando sus amigos vinieron a jugar, ella estaba tan
gordita que no podía salir por las ventanitas ni por la puerta. La ardillita se sintió muy
triste porque no podía jugar con sus amigos. Solo podía verlos desde adentro de la
casita. Entonces, prometió que no volvería a comer tanto y que nunca más les quitaría
la comida a sus amigos. Así podría volver a jugar y ser feliz con ellos en el bosque.
Había una ardillita en el bosque que le encantaba comer, todo el Presentación:
tiempo. Todos los días iba y se robaba la comida de sus amigos del Personaje
bosque Problema
Episodio:
Acción
 TRANSCRIPCIÒN EL SAPITO SALTARIN
Había un sapito que vivía en una laguna y era el mejor saltarín de todos. Le encantaba
brincar y saltar tanto, sobre todo en las noches. Pero sus saltos eran tan ruidosos que
los otros animalitos no podían dormir. Estaban muy cansados. Los animalitos
decidieron hacerle una trampa al sapito para que dejara de saltar tanto. Escondieron
una red entre las flores de la laguna. Cuando el sapito saltó, quedó atrapado en la red y
se lastimó una patita. El sapito ya no podía saltar y lloraba mucho por el dolor. Los
otros animalitos se dieron cuenta de que habían hecho algo mal. Se sintieron muy
tristes porque el sapito estaba sufriendo y también porque seguían sin poder dormir.
Entonces, decidieron curarle la patita y ¡le construyeron un gimnasio especial para que
pudiera saltar. Con el tiempo, el sapito se recuperó gracias a sus amigos y se puso
súper contento al ver su regalo. Para agradecerles, prometió no saltar nunca más de
noche para que todos pudieran descansar.
TRANSCRIPCIÒN EL LOBO FRIOLENTO.
Había una vez un lobo que siempre tenía frío, siempre. Llegó el invierno y el lobo
estaba tan helado que apenas podía moverse, comer o hablar. Estaba congelado y no
sabía qué hacer. Entonces, el lobo vio que los conejitos que vivían cerca de su cueva
tenían una estufa para calentarse. Como tenía mucho frío, entró sigilosamente y se
robó la estufa de los conejitos. Los conejitos se asustaron mucho y comenzaron a gritar
pidiendo ayuda. El lobo salió corriendo con la estufa para que los conejitos no lo
alcanzaran y se encerró en su casa con ella. Pero, se durmió profundamente y se
quemó la cola con la estufa. Se despertó gritando por el susto y pidiendo ayuda. Los
conejitos escucharon sus gritos y fueron a ayudarlo, pero cuando le echaron agua para
apagar el fuego, el agua se convirtió en hielo por el frío. El lobo quedó atrapado en un
bloque de hielo. A pesar de todo, los conejitos se sintieron mal por dejar al lobo así, así
que le pusieron la estufa para derretir el hielo. Cuando el lobo estuvo bien, se dio,
cuenta de que los conejitos eran muy buenos. Les prometió que nunca más robaría
nada a nadie. Los conejitos invitaron al lobo a quedarse en su casa, y así, el lobo
nunca más sintió frío.