1. El Muñeco De Nieve
Había dejado de nevar y los niños, ansiosos de libertad, salieron de casa y empezaron a corretear por la blanca y
mullida alfombra recién formada.
La hija del herrero, tomando puñados de nieve con sus manitas hábiles, se entrego a la tarea de moldearla.
Le salio un niñito precioso, redondo, con ojos de carbón y un botón rojo por boca. La pequeña estaba
entusiasmada con su obra y convirtió al muñeco en su inseparable compañero durante los tristes días de aquel
invierno. Le hablaba, le mimaba...
Pero pronto los días empezaron a ser mas largos y los rayos de sol mas calidos... El muñeco se fundió sin dejar
mas rastro de su existencia que un charquito con dos carbones y un botón rojo. La niña lloro con desconsuelo.
Un viejecito, que buscaba en el sol tibieza para su invierno, le dijo dulcemente: Seca tus lagrimas, bonita, por
que acabas de recibir una gran lección: ahora ya sabes que no debe ponerse el corazón en cosas perecederas.
2. El Cedro Vanidoso
Plantado en mitad del jardín, superaba en altura a todos los demás árboles. Tan bellamente dispuestas estaban
sus ramas, que parecía un gigantesco candelabro.
Plantado en mitad del jardín, superaba en altura a todos los demás árboles. Tan bellamente dispuestas estaban
sus ramas, que parecía un gigantesco candelabro.
Si con lo hermoso que soy diera además fruto, se dijo, ningún árbol del mundo podría compararse conmigo.
Y decidió observar a los otros árboles y hacer lo mismo con ellos. Por fin, en lo alto de su erguida copa, apunto
un bellísimo fruto.
Tanto y tanto creció aquel fruto, que se hizo demasiado grande. La copa del cedro, no pudiendo sostenerlo, se
fue doblando; y cuando el fruto maduro, la copa, que era el orgullo y la gloria del árbol, empezó a tambalearse
hasta que se troncho pesadamente.
3. El Nuevo Amigo
Erase un crudo día de invierno. Caía la nieve, soplaba el viento y Belinda jugaba con unos enanitos en el bosque.
De pronto se escucho un largo aullido.
¿Que es eso? Pregunto la niña .
Al día siguiente volvió a escucharse el aullido del lobo y Belinda , apenada, pensó que todos eran injustos con la
fiera. En un descuido de los enanos, salio, de la casita y dejo sobre la nieve un cesto de comida.
Al día siguiente ceso de nevar y se calmo el viento. Salio la muchacha a dar un paseo y vio acercarse a un
cordero blanco, precioso.
Entonces el cordero salto sobre Belinda y el lobo, oculto se lanzo sobre el, alcanzándole una dentellada. La
astuta y maligna madrastra, perdió la piel del animal con que se había disfrazado y escapo lanzando espantosos
gritos de dolor y miedo.
Solo entonces el lobo se volvió al monte y Belinda sintió su corazón estremecido, de gozo, mas que por haberse
salvado, por haber ganado un amigo.
Había un niño que tenía muy, pero que muy mal carácter. Un día, su padre le dio una bolsa con clavos y le dijo
que cada vez que perdiera la calma, que él clavase un clavo en la cerca de detrás de la casa.
El primer día, el niño clavó 37 clavos en la cerca. Al día siguiente, menos, y así con los días posteriores. Él niño se
iba dando cuenta que era más fácil controlar su genio y su mal carácter, que clavar los clavos en la cerca.
Finalmente llegó el día en que el niño no perdió la calma ni una sola vez y se lo dijo a su padre que no tenía que
clavar ni un clavo en la cerca. Él había conseguido, por fin, controlar su mal temperamento.
Su padre, muy contento y satisfecho, sugirió entonces a su hijo que por cada día que controlase su carácter,
sacase un clavo de la cerca.
Los días se pasaron y el niño pudo finalmente decir a su padre que ya había sacado todos los clavos de la cerca.
Entonces el padre llevó a su hijo, de la mano, hasta la cerca de detrás de la casa y le dijo:
- Mira, hijo, has trabajo duro para clavar y quitar los clavos de esta cerca, pero fíjate en todos los agujeros que
quedaron en la cerca. Jamás será la misma.
Lo que quiero decir es que cuando dices o haces cosas con mal genio, enfado y mal carácter, dejas una cicatriz,
como estos agujeros en la cerca. Ya no importa tanto que pidas perdón. La herida estará siempre allí. Y una
herida física es igual que una herida verbal.
Los amigos, así como los padres y toda la familia, son verdaderas joyas a quienes hay que valorar. Ellos te
sonríen y te animan a mejorar. Te escuchan, comparten una palabra de aliento y siempre tienen su corazón
abierto para recibirte.
Las palabras de su padre, así como la experiencia vivida con los clavos, hicieron que el niño reflexionase sobre
las consecuencias de su carácter. Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.
FIN
Cuento Corto Infantil para niños y niñas, escrito por: Jose Juan Cantu
Había una vez tres ratones muy envidiosos, querían todo para ellos solos. Pero cuando llegaba a visitarlo un
vecino, ellos escondían todo el queso que tenían guardado.
De pronto se acercó un gato muy peludo, asomó su nariz en el agujero y los ratones envidiosos se arrinconaron
muy asustados. Cuando gritaron, el vecino los escuchó y se acercó al gato lleno de valor y como pudo lo alejó de
la puerta. Quedó tan cansado el pobre ratón que los envidiosos salieron a agradecerle el favor y por fin lo
invitaron a comer.
Todos felices disfrutaron de un estupendo platillo de queso y entre risas recordaban al gato que corrió muy
enojado.
FIN
6. El Gato Dormilon
Había una vez un gato muy dormilón que se pasaba los días y las tardes enteras echado en el sofá. Siempre se
preguntaban que es lo que hacía para quedar tan exhausto, pero nadie lo veía haciendo otra cosa que no fuera
descansar.
Una noche su dueño tuvo la idea de ir a buscarlo y ver si también dormía toda la noche, pero mientras bajaba la
escalera pudo verlo… ahí estaba él, sentado frente al acuario, viendo cómo dormía la tortuga. Sólo se quedó allí
mirando en silencio a su gato, despierto y sereno estaba cuidando el sueño de su amiga tortuga.
Al día siguiente pudo verlo como de costumbre, durmiendo en el sofá y entonces pudo comprender el porqué
de su sueño durante el día, pero no notó que la tortuga también lo cuidaba desde su sitio.
FIN
FABULAS
1. La Liebre Y La Tortuga
Una vez, una liebre se burlaba de las patas tan cortas y de la lentitud al caminar de una tortuga, sin embargo,
esta no se quedó callada y se defendió lanzando una risa y diciéndole a la liebre: – Puede que seas muy veloz
amiga liebre, pero, estoy más que segura de que podré ganarte una carrera.
La liebre, sorprendida por lo que le dijo la tortuga, aceptó el reto sin pensarlo dos veces, ya que ella estaba muy
segura de que ganaría a la tortuga a ojos cerrados. Entonces, ambos propusieron a la zorra, que fuese ella quien
señalase el camino y la meta.
Días después, llegó el esperado momento de la carrera, y al sonar la cuenta de tres, se inició la carrera de estos
dos contendientes. La tortuga no dejaba de caminar y caminar, pero a su lento paso, avanzaba tranquilamente
hacia la meta.
En cambio la liebre, corrió tan rápido que dejó muy atrás a la tortuga. Al darse la vuelta y ya no verla, la liebre
vió seguro su éxito sobre la carrera y deicidió echarse una siesta.
Poco después, la liebre despertó y vió si por atrás seguía sin llegar la tortuga, pero al mirar hacia la meta, vió a la
tortuga muy cerca de la final, y en un intento desesperado por correr lo más veloz que pudo, la tortuga llegó y
ganó.
Moraleja: la enseñanza es que las metas se consiguen poco a poco, con trabajo y esfuerzo. Aunque a veces
parezcamos lentos, el éxito llegará siempre.
También nos muestra que no tenemos que burlarnos de las personas por sus defectos físicos, ya que pueden ser
mejores en otros aspectos.
Esta fábula tiene un gran valor educativo, ya que hacer las cosas bien hechas es importante en la educación y
para ello es necesario ser pacientes.
2. El León Y El Ratón
Érase una vez un león que estaba descansando en la selva, después de un día de caza. Era un día caluroso y solo
le apetecía dormir.
Cuando se encontraba más cómodo, llegó un ratón haciendo mucho ruido. El león era tan grande que ni si
quiera se percató, pero el ratón empezó a subir por su nariz.
El león se despertó con muy mal humor, empezó a gruñir, y agarró al ratón, preparándose para comerlo.
“¡Perdóname!” suplicó el pobre ratón. “Por favor déjame ir y algún día seguramente te lo pagaré”.
Al león le resultó divertido pensar que un ratón podría alguna vez ayudarlo. Pero fue generoso y finalmente lo
liberó.
Algunos días más tarde, mientras acechaba a una presa en el bosque, el león quedó atrapado en la red de un
cazador.
Era incapaz de liberarse y rugió fuerte para pedir ayuda. El ratón reconoció la voz y acudió rápidamente para
ayudarlo. Mordió una de las cuerdas que ataban al león y este se liberó.
Moraleja: no menosprecies lo que pueden hacer los demás. Aunque parezca lo contrario todos te pueden
ayudar.
3. La Cigarra Y La Hormiga
Una cigarra cantaba y disfrutaba durante el verano. Día tras día se despertaba tarde y sólo se dedicaba a cantar,
hasta que un día algo le llamó la atención.
Un grupo de hormigas pasaban por debajo de su rama cargando pesadas porciones de comida sobre su espalda,
entonces la cigarra bajó de su rama y le preguntó a una.
-El invierno se acerca, debemos guardas provisiones para poder pasar la helada- respondió la hormiga.
-¡Bah! Trabajar tanto es para bobos, haz como yo, canta y disfruta del verano.
La pequeña hormiga sin decir más nada siguió su camino. En los siguientes días, la cigarra seguía cantando y
muchas veces componía canciones que se burlaban de su amiguita la hormiga.
La helada era la peor de todas en muchos años, trató de abrigarse con hojas de su rama, pero no pudo.
Hambrienta buscó comida, pero no encontró nada.
Entonces recordó que su amiguita hormiga había estado guardando provisiones durante el verano y se dirigió a
su hormiguero, tocó la puerta y la hormiguita salió. Entonces dijo:
-¡Pues si eso hiciste en el verano, ahora baila en el invierno!- Dijo la hormiga y cerró la puerta.
Mientras, la cigarra arrepentida se alejaba reflexionando sobre la lección que había aprendido.
Moraleja: la vida consiste en trabajar y descansar. No puedes descansar demasiado porque más tarde puedes
encontrar consecuencias negativas.
4. Pedro Y El Lobo
Había una vez un niño llamado Pedro que era pastor y se llevaba todo el día caminando con sus ovejas.
Un día estaba tan aburrido que comenzó a preguntarse cómo divertirse. Entonces se le ocurrió gastar una
broma, diciendo que un lobo estaba cerca. Dijo:
Los vecinos del pueblo acudieron rápidamente con palos para ahuyentar al lobo, pero cuando llegaron al árbol
donde se sentaba Pedro, lo encontraron riendo a carcajadas. Pedro decía:
Los vecinos se fueron a sus casas pensando que era una broma y que no pasaba nada.
Otro día, de nuevo Pedro se encontraba aburrido y volvió con la misma broma:
Los vecinos volvieron a acudir rápido, con sus palos y preparados para hacer frente al lobo. Pero se volvieron a
encontrar a Pedro riendo, que reía y decía:
Esta vez los vecinos pensaron que la broma no era tan graciosa y se fueron malhumorados a sus casas.
Otro día, Pedro estaba caminando con sus ovejas cuando escuchó un ruido entre los matorrales. No le dio
importancia, pero rápidamente un lobo salió empezó a perseguir a sus ovejas. Pedro empezó a pedir ayuda:
Los vecinos lo escucharon pero no prestaron atención, ya que pensaban que era otra broma de Pedro.
El lobo pudo atrapar a algunas de sus ovejas y se las llevó para comerlas con su manada.
Moraleja: no mientas, ya que puede que los demás no te crean cuando digas la verdad.
5. La Lechera
La hija de un granjero llevaba un recipiente lleno de leche a vender al pueblo, y empezó a hacer planes futuros:
- Cuando venda esta leche, compraré trescientos huevos. Los huevos, descartando los que no nazcan, me darán
al menos doscientos pollos.
Los pollos estarán listos para mercadearlos cuando los precios de ellos estén en lo más alto, de modo que para
fin de año tendré suficiente dinero para comprarme el mejor vestido para asistir a las fiestas.
Cuando esté en el baile todos los muchachos me pretenderán, y yo los valoraré uno a uno.
Pero en ese momento tropezó con una piedra, cayendo junto con la vasija de leche al suelo, regando su
contenido.
Y así todos sus planes acabaron en un instante.
Moraleja:
Fábula ranitas
Una familia de ranitas que vivía en un lago, sentía mucho temor por un tronco tallado que se veía desde la orilla.
Estas ranitas amaban las fiestas y la diversión, pero sentían gran respeto por el tronco, así que en muchas
oportunidades trataban de no hacer tanto ruido para no molestar al tronco.
Seguramente este personaje al que tanto le temían, era un monumento de alguna tribu que ya no habitaba en el
lugar, pero como no se animaban a acercarse para ver bien de que se trataba, solo podían divisar un rostro serio
y que inspiraba mucha autoridad.
Un cierto día, en que se desató una terrible tormenta, el tronco cayo al lago y en ese momento las ranitas
pudieron ver con claridad, que era solo un tronco tallado que ningún daño podía hacerles. Se rieron mucho de
los temores por los que habían pasado y comenzaron a jugar con él y usarlo de trampolín para sus zambullidas
en el lago.
Si conoces alguna otra fábula para niños y quieres compartirla con nosotros y los demás padres, estaremos
encantados de recibirla.
LEYENDAS
Los cenotes son pozos de agua dulce creados como consecuencia de la erosión del a piedra caliza. Se encuentran
en México.
El cenote Zaci estaba ubicado dentro de una ciudad con el mismo nombre. Allí vivía una joven llamada Sac-Nicte,
que era nieta de una bruja, que enamorada de Hul-Kin, hijo del cacique del pueblo. Sin embargo, las familias de
la bruja y del cacique eran enemigas, por lo que los jóvenes se veían a escondidas. Cuando el padre se enteró,
envió a Hul-Kin a otro pueblo, a casarse con otra joven. Debido a la tristeza de su nieta, la bruja hizo rituales
para que Hul-Kin regresara, pero fue en vano.
La noche anterior de la boda de Hul-Kin, Sac –Nicte se arrojó al cenote con una piedra atada a su cabello. En el
momento de la muerte de la joven, Hul-Kin sintió un dolor en el pecho que lo obligó a volver a Zaci. Al enterarse
de lo sucedido, se Hul-Kin se arrojó también al cenote y se ahogó. Finalmente los sortilegios de la bruja habían
obtenido una respuesta, y Hul-Kin había regresado para permanecer siempre con Sac-Nicte.
El origen de esta leyenda se encuentra en una fosforescencia que se ve en cerros y quebradas del noroeste
argentino, durante los meses secos.
La leyenda sostiene que este es el farol de Mandinga (el Diablo con forma humana) y que su aparición indica
sitios donde se esconden tesoros. La luz sería también el espíritu del difunto dueño de los tesoros, intentando
alejar a los curiosos.
El día de San Bartolomé, que es el 24 de agosto, es cuando se ven mejor estas luces.
La princesa Orihime (también llamada la princesa tejedora), tejía vestidos para su padre (tejía las nubes del
cielo) a orillas del río. Su padre era el rey celestial. Orihime se enamoró de un pastor llamado Hikoboshi. En un
principio la relación se desarrolló sin dificultades, pero luego ambos comenzaron a descuidar sus tareas por
estar tan compenetrados en su amor.
Al ver que esta situación no se solucionaba, el rey celestial los castigó separándolos y convirtiéndolos en
estrellas. Sin embargo, los enamorados pueden volver a verse una noche en el año, el séptimo día del séptimo
mes.
4. Leyenda de la Mojana
Según la leyenda colombiana, la Mojana es una mujer diminuta que rapta a los niños que se acercan a sus
dominios. Vive en una casa de piedra, debajo del agua, es blanca y tiene larguísimos cabellos dorados.
5. Leyenda de la Sallana
La Sallana es una mujer que se le aparece y aterroriza a borrachos y chismosas. Esto se debe a que los chismes
arruinaron su vida. Cuando vivía, estaba felizmente casada y tenía un hijo. Sin embargo, llegaron a sus oídos los
chismes de que su marido le era infiel con su madre. Enloquecida, la Sallana asesinó y descuartizó a su marido,
asesinó a su hijo y luego a su madre. Por el pecado de haber asesinado a toda su familia, está condenada a vagar
eternamente sola.
6. Leyendas. Espada.
Esta es una leyenda urbana japonesa. Aka Manto significa “capa roja” en japonés.
Según la leyenda, Aka Manto era una joven humillada por sus compañeras de colegio. Luego de morir,
permaneció en los retretes de mujeres. Cuando una mujer va sola al baño escucha una voz que le pregunta
“¿papel rojo o azul?” Existen diferentes versiones sobre la muerte que le toca a la mujer si elije rojo o azul, pero
en todos los casos es imposible librarse.
POEMAS
CHISTES
2. Había una vez un hombre tan pequeño que se subió encima de una canica y dijo: ¡El mundo es mío!
3. La maestra:
- Jaimito, si en esta mano tengo 8 naranjas y en esta otra 6 naranjas ¿Qué tengo?
- Unas manos enormes, señorita.
4. Esto son dos mosquitos que van en una moto y el de atrás le dice al de delante:
-¡Oye, para, que se me ha metido una mosca en el ojo...!
ADIVINANZAS
1
. Choco entre dos paredes 4. Oro parece, plata no es.
late mi corazón. Abran las cortinas,
Quien no sepa mi nombre y verán lo que es.
es un cabezón. Respuesta: el plátano.
Respuesta: el chocolate.
5. Lo come Pancracio,
2. Blanca por dentro, está en el champán;
verde por fuera. si piensas despacio
Si no sabes, sabrás que es el...
espera. Respuesta: el pan.
Respuesta: la pera.
6. ¿Quieres té?
3. Un señor gordito, ¡Pues toma té! ¿Sabes ya qué fruto es?
muy coloradito, Respuesta: El Tomate
no toma café,
siempre toma té
Respuesta: el tomate.