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“Sistemas

dinámicos”

Andrés Martínez Galán 2º I


Seminario de Guadix
Filosofía de naturaleza y de la ciencia
Indice:

1.- Historia del caos................................................................................................................ 2

2.- El caos como sistema y las paradojas de la tolerancia........................................................5

3.- Caos en sistemas biológicos............................................................................................. 10

4.- Caos y complejidad económica....................................................................................... 11

5.- Fractales.......................................................................................................................... 14

6. Bibliografía....................................................................................................................... 15

CAOS /1
1.- La historia del caos:
El primer experimentador del caos fue un meteorólogo llamado Eduardo Lorenzo. En
1960 estaba trabajando en el problema de predecir el tiempo. Tenía una computadora que
calculaba el tiempo con 12 ecuaciones. La máquina no predijo el tiempo, pero en principio
predijo como sería el tiempo probablemente.

Un día, en 1961, Lorenzo quiso ver unos datos de nuevo. Introdujo los números de
nuevo a la computadora, pero para ahorrar con el papel y el tiempo, solo calculó con 3
números decimales en vez de 6. Le salieron resultados totalmente diferentes. Lorenzo intentó
encontrar la explicación de eso. Así surgió la teoría que está tan de moda en nuestros días: la
teoría del caos...

Según las ideas convencionales, los resultados habrían tenido que ser prácticamente
los mismos. Lorenzo corrió el mismo programa, y los datos de inicio casi fueron iguales -
esas diferencias muy pequeñas no pueden tener efecto verdadero en los resultados finales.
Lorenzo demostró que esa idea era falsa. Al efecto que tienen las diferencias pequeñas e
iniciales después se le dió el nombre 'efecto mariposa'.

"El movimiento de una simple ala de mariposa hoy produce un diminuto cambio en el
estado de la atmósfera. Después de un cierto período de tiempo, el comportamiento de la
atmósfera diverge del que debería haber tenido. Así que, en un período de un mes, un
tornado que habría devastado la costa de Indonesia no se forma. O quizás, uno que no se iba
a formar, se forma."

Este fenómeno, y toda la teoría del caos es también conocido como dependencia
sensitiva de las condiciones iniciales. Un cambio pequeño puede cambiar drásticamente el
comportamiento a largas distancias de un sistema. Al medir, una diferencia tan pequeña
puede ser considerada 'ruido experimental' o inpuntualidad del equipo. Esas cosas son
imposibles de evitar, también en el laboratorio más aislado. Con un número inicial 1,001 el
resultado puede ser totalmente diferente que con 1.000543.

CAOS /2
Es simplemente imposible alcanzar este nivel de eficacia al medir. De esta idea
Lorenzo saco la consecuencia de que era imposible predecir exactamente el tiempo. Pero
todo eso llevó a Lorenzo a otros aspectos de lo que viene llamándose teoría del caos.

Lorenzo intentó encontrar un sistema menos complejo que depeniera sensitivamente


de las condiciones iniciales. Miró las ecuaciones de convección y los simplificó. El sistema
ya no tuvo que ver con la convección, pero sí dependía mucho de los datos iniciales, y esta
vez solo había 3 ecuaciones. Después se vió que sus ecuaciones describen precisamente una
rueda de agua.

CAOS /3
Las ecuaciones del sistema también parecían tener un comportamiento hecho
totalmente al azar. Pero después de verlos en una gráfica, sucedió algo sorprendente. La
salida (el resultado) siempre quedó en un espiral doble. Antes sólo había dos tipos de
comportamientos conocidos: un estado fijo, donde los variables nunca cambian, y el
comportamiento periódico, donde el sistema está en un 'círcuito cerrado' y se repite
infinitamente. Las ecuaciones de Lorenzo son definitivamente ordenadas - siguieron un
espiral. Nunca se pararon en un punto, ni se repitieron, o sea no son periódicos. A la imagen
que dieron las ecuaciones le dio el nombre Atractor de Lorenzo.

En 1963 Lorenzo publicó lo que había descubierto, pero como lo publicó en un


periódico meteorológico, nadie le atendió. Su descubrimiento solo fue reconocido años más
tarde, cuando fueron redescubiertos por otros. Lorenzo ha descubierto algo revolucionario,
ahora tuvo que esperar a alguien que le descubriera a él.

Así surgió la nueva ciencia que todavía en nuestros día también es 'jóvencita'. Hay
muchas ideas falsas sobre el caos, divulgadas por películas como el Jurassic Park, según las
que la teoría del caos se trate del desorden. Nada podría estár más lejos de la verdad. Es
cierto que la teoría dice que cambios pequeños pueden causar cambios enormes, pero no dice
que no hay orden absolutamente. Una de las ideas más principales es que mientras es casi
imposible predecir exactamente el estado futuro de un sistema, es posible, y aún más, muchas
veces fácil modelar el comportamiento general del sistema. Eso es lo que se muestra en el
Atractor de Lorenzo. O sea, el caos no se trata del desorden, más que nada en cierto sentido
podemos decir que es determinista.

Pero se puede poner un ejemplo para verlo mejor.

La rueda de agua de Lorenzo antes mencionada es parecida a la rueda en el parque de


atracciones. Tiene cajitas (generalmente más que siete), que están colgadas a la rueda, o sea,
su 'boca' siempre mira para arriba. Abajo todas tienen un hueco pequeño. Y todo eso está
puesto abajo de un flujo de agua. Si le echamos agua a velocidad pequeña, el agua después de
entrar en el cajón, sale inmediatamente por el hueco. Así que no pasa nada. Si aumentamos el
corriente del agua un poquito, la rueda empieza a rotar, porque el agua entra más rápido a las
cajitas que sale. Así, las cajas pesadas por el agua descienden dejando el agua, y cuando están
vacías y ligeras, ascienden para ser llenadas de nuevo. El sistema está en un estado fijo, y va
a continuar rotando a una velocidad prácticamente constante. Pero si aumentamos el corriente
más, van a pasar raras cosas. La rueda va a seguir rotando en la misma dirección, pero su
velocidad va a decrecer, se para y luego girará en la dirección contraria. Las condiciones de
las cajitas ya no están suficientemente sincronizadas como para facilitar solamente una
rotación simple, el caos ha conseguido el mando en este sistema aparentemente tan sencillo.

Ahora, no podemos decir nada del estado de la rueda en concreto, porque el


movimiento nos parece hecho totalmente al azar. Pero si miramos el comportamiento general
del sistema, el atractor de arriba lo describe perfectamente. Y ¿de que sirve eso? Los sistemas
caóticos están presente todos los días. Y en vez de mirarlos cada uno, investigamos los
comportamientos de los sistemas parecidos. Por ejemplo, si cambiamos un poquito los

CAOS /4
números iniciales del atractor, él siempre nos dará números distintos que en el caso anterior,
y la diferencia con el tiempo va a ser cada vez más grande, de tal forma que después de un
tiempo los dos casos aparentemente ya no tendrán que ver. Pero mirando la gráfica del
atractor de los dos casos, esas serán iguales. Y eso es lo que sí puede ayudar mucho a la
humanidad tanto en la medicina, como en la economía, etc.

Y ¿por qué no se desarrollo esta ciencia hasta ahora? El 'padre' del conjunto
Mandelbrot fue un libro publicado por Gaston Maurice Julia, y aunque recibió el 'Grand Prix
de'l Academie des Sciences', sin visualizar sus funciones nadie le dio mucha importancia. La
respuesta es simple. Computadoras. Para poner un conjunto Mandelbrot a la pantalla se
necesita 6 millones de cálculos (operaciones), que son mucho para ser calculados por
científicos - pero para las computadoras de nuestros días esa es una tarea de todos los días. Y
de verdad, la teoría surgió de que matemáticos empezaron a darle números a la computadora,
y mirar lo que ésta hace de ellos, y después trataron de visualizarlo todo de alguna forma.

Y después de un tiempo, las imágenes se veían como la naturaleza. Nubes, montañas


y bacterias. Así indicaron porque no podemos predecir el tiempo. Parecían ser iguales al
comportamiento de la bolsa, poblaciones, y reacciones químicas a la vez. Sus investigaciones
dieron respuestas a preguntas puestas hace 100 años sobre el flujo de fluidos, como movían
de un flujo suave hacia un flujo caótico, o sobre el comportamiento del corazón, o las
formaciones de rocas. Los sistemas caóticos no son hechos al azar, y se conocen por unos
rasgos muy simples.
_ Los sistemas caóticos son deterministas, o sea hay algo que determina su
comportamiento.
_ Los sistemas caóticos son muy sensitivos a las condiciones iniciales. Un cambio muy
pequeño en los datos de inicio y salen resultados totalmente diferentes.
_ Los sistemas caóticos parecen un desorden, o echos al azar. Pero no lo son. Hay
reglas que determinan su comportamiento. Sistemas de verdad hechos al azar no son
caóticos. Los sistemas regulares, descritos por la física clásica son las excepciones. En este
mundo de orden, reglas caóticas...

CAOS /5
2.- El caos como sistema y las paradojas de la tolerancia:

I. LA PARADOJA

Octavio Paz dijo que algunos pensadores alemanes quisieron establecer un puente
entre Oriente y Occidente y todos ellos perecieron al despeñarse en ese abismo. Al parecer el
poeta se equivocó.

Aunque hay que decir que ahora la vieja filosofía Oriental está retomándose por
Occidente lamentablemente bajo formas pervertidas. La adoración hinduista por el presente
se ha convertido en el hedonismo sin sentido; al mercado se lo presenta como el Nirvana
social; el eterno retorno se lo juzga como el reembobinamiento aburrido de la Historia; el
brillo de los fragmentos se leen como esquizofrenia; la identidad descansa sobre la infinita
variedad del consumo antes que en el espacio/raíz; la "metalepsis", sustitución de efectos por
causas, , ahora en crisis, no la entiende nuestra cultura de lógicas causales; la epistemología
del "yin yang" de la que habla Morin, donde dentro del yin hay un yang y dentro del yang un
yin y a su vez dentro de cada uno de ellos está siempre el otro, como un reflejo infinito de
espejos, termina empobrecida con el dualismo platónico; al postmodernismo, sin diferenciar
ramas, se lo acusa de "budismo agónico" y hasta algunos físicos cuánticos, creen ver en sus
descubrimientos últimos las enseñanzas de Gautama y del Zen. ¿Por qué está pasando esto?
Tiene que ver con la sinrazón de la razón. La razón siempre ha desprendido su poder de
explicación de sí misma. Es inmanente. Tiene la "desgracia" de no esperar de fuera sus
justificaciones, como trascendencia, tal como hacen las religiones.

Sin embargo, cuando se le introducen las paradojas su estado llega a condiciones


basales cero, entonces la razón se destruye a sí misma en racionalidades infinitas (Weber,
1968) dando paso a las realimentaciones entre sus fragmentos produciendo una turbulencia,
polvaredas de imaginarios o "nubes de pensamiento" como las llama Lyotard. Las
contradicciones en este nivel ya no se pueden superar, aquí es donde se revela que con un
truco de trascendencia reconciliante la razón se reencuentra "astutamente" con la religión en
un punto del tiempo y se descubre no lo que siempre la separó de ella sino lo que siempre
estuvo oculto como continuidad entre la una y la otra.

Nadie como dos historiadores de la religión medieval europea han explorado esto:
Eco con su novela "El Péndulo de Foucault", al reirse de la decadencia del racionalismo que
termina emparentándose con las sectas más esotéricas y Kolakowski que ha descubierto la
continuidad de la religión en la razón (1986) algo también advertido con vergüenza entre la
ciencia y la religión por Russell hasta el grado de lamentarse de la falta de "fe científica" de
sus colegas de la post-guerra.

La paradoja como principio tiene una larga trayectoria. "Todo es falso" o "Todo es
cierto" es una viejísima polémica desde los tiempos de Heráclito y Aristóteles. Si "todo es
falso" quiere decir que sólo no lo es la expresión misma o sea no es cierta. Y si "todo es
cierto" también supondría la verdad de su opuesto y en consecuencia también no es cierto.
Todo el chiste en la versión aristotélica es que expulsa al presente y al destinador y se
excluye detrás del Logos, como recién ha descubierto Lyotard (1991). Este ha sido el secreto
de hablar del "ego" siempre por el "otro". Camus en un célebre ensayo apoya a Aristóteles
que juega con esos sofismas para invalidarlos, pero la realidad de nuestros tiempos está
demostrando lo contrario.

La paradoja es parte de la vida, quizás su principal fundamento. Los matemáticos


hasta ahora la están considerando en sus congresos porque siempre la declararon insoluble.
Gödel es uno de los pocos matemáticos que se enfrentó con ella, al demostrar que los
fundamentos de las matemáticas son indemostrables. La paradoja siempre fue expulsada del
reino de la lógica, desde que los sofistas Gorgias y Protágoras se reían de la razón
aristotélica. La paradoja del mentiroso de Creta, del litigante y su defensor, del ser y no ser,
donde es verdad lo falso y su opuesto, se hizo célebre entre ellos.

La paradoja es algo que no puede trabajar el sistema binario (0,1) de las redes
electrónicas. Los científicos Briggs y Peat, que ya mencionamos, apelan a una imagen
simpática cuando recuerdan la petición del capitán Kirk, de la vieja serie televisiva Star Trek,
a los ordenadores enemigos para quemar sus semiconductores: "Demuestre que su directiva
principal no es su directiva principal". Significa que los ordenadores no entienden las
paradojas porque las remite al caos, mientras que en los humanos las paradojas y el caos son
productivos.

La risa sorpresiva y desordenante de Bataille, por ejemplo, rompe todo el sentido y


las gravedades de los sistemas racionales, en especial el de Hegel creando la ironía como arte
en mil direcciones, en un sentido parecido al teatro de la crueldad de Artaud cuando dice que
la mejor representación teatral son las fiestas donde todos son actores, directores y guionistas
y se conectan todos entre todos de un millón de maneras. Ya sabíamos esto desde
Aristófanes. ¿Será la paradoja, como sistema de pensamiento, y la risa, la próxima sinapsis
loca de nuestra cultura?

Jorge Luis Borges, tiene una frase que es muy usada por los post-estructuralistas
franceses. Expresa que la historia de la cultura occidental se puede reducir a unas cuantas
metáforas y que termina diciendo que puede todavía reducirse a una sola: la metáfora de la
luz.

Algo de pertinencia habrá en la alusión si entendemos que prácticamente la historia


de nuestra cultura se ha desarrollado alrededor de cadenas binarias reconciliantes o no
(cuerpo/espíritu, sujeto/objeto, pasado/futuro, esencia/ existencia, espacio/tiempo,
ideología/ciencia, verdad/error, tradición/modernidad, religión/razón, individuo/sociedad,
estado/mercado, oriente/occidente, norte/sur, bien/mal, sociedad/naturaleza, hombre/mujer,
amo/esclavo, infraestructura/superestructura, reacción/revolución, uniformidad/ diferencia,
consciente/inconsciente, alter/ego, ser/deber ser, idea/materia, eros/thanatos, orden/caos,
igualdad/libertad, gobernantes/gobernados, éxito/derrota, estructura/agentes, luz y oscuridad,
etc,
etc.) A un lado o a otro de los términos se ha venido distribuyendo, con violencia como diría
Lévinas, la luz según el espíritu de la época y el poder explicativo de los vencedores. Hay
algunos que, con el viejo recurso del punto medio, a lo "Etica a Nicómaco", han creído
remediar la situación distribuyéndola cómodamente a ambos lados como "tensiones"
creativas o "dialógicas" entre el exceso de identidad del ego (estructura) y el riesgo de
disolverse en el otro (agentes).

Alfred Whitehead, un filósofo y matemático inglés, dijo en algún lado que, viendo las
cosas como lo estamos haciendo, prácticamente desde el dualismo de Platón, la ciencia y la
filosofía occidental no ha venido nada más que variando una misma melodía. Marcel Proust
manifestó también algo parecido en su célebre obra "En busca del tiempo perdido", diciendo
que las ideas de todos los hombres podían reducirse a unas cuantas y que no entendía cómo
podía ser con tantos millones de personas con capacidad para pensar. Camus en el mismo
orden expresó en "Moral y política" que nuestra cultura es simple en sus principios y
complicada en sus detalles.

II. TOLERANCIA Y DEMOCRACIA

¿Qué tiene que ver todo este "viaje" con el sencillo despegue de la tolerancia?

La democracia es la diferencia en el sentido que Durkheim examinó a la sociedad


orgánica y Weber a la modernidad europea. Uno de ellos decía que el fruto de la división
social del trabajo era la diferencia de los distintos puntos de vista equilibrados por la
tolerancia que había tenido su propia historia desde las guerras de las religiones. Pero
también la diferencia es caótica y sus productos se realimentan negativamente (regulándose a
lo "efecto termostato") o positivamente (amplificándose hasta el desorden a lo "ruido
chirriante") produciendo lo "otro" múltiple, que a su vez se bifurca en nuevas
realimentaciones creando árboles coposos de sentidos, sólo frenados por el pensamiento de
regresión lineal, como hacen las rectas estadísticas que ajustan una nube de puntos. "El
pensamiento es precisamente lo que pone freno a las ideas, que por sí mismas tienden a
desplegarse sin freno y a ocupar todo el espacio. Las ideas proliferan como pólipos o algas, y
mueren asfixiadas bajo la frondosidad de su propia vegetación" (Baudrillard). Explorando
durante años la crisis famosa de paradigmas que atraviesa nuestra cultura, una de las cosas
que cabe preguntarse siempre es por qué la democracia moderna no encajaba bien en este
caos (¿o es su fruto?) y que la tolerancia de todos los juicios, incluyendo la intolerancia,
como su correlato, era toda una paradoja alguna vez tratada desde diferentes ángulos, por dos
autores muy apreciados: Norberto Bobbio y Leszek Kolakowski. En términos sociales es
posible explorar algunas ideas de la teoría del caos y del sistema de paradojas (fijaos en la
contradicción absurda hasta en los términos) empezando por recordar las célebres antinomias
de la igualdad en Rousseau ("obligar a ser iguales incluso a quienes no lo desean") o la de la
libertad en Saint-Just ("ninguna libertad para los enemigos de la libertad").

Bobbio decía en un aparente sin sentido, que en la fragilidad de la democracia está su


fuerza, aceptando la paradoja como solución práctica en las sociedades modernas.
Kolakowski, en otro sentido, enumera cuatro tipos de tolerancia: "la tolerancia por
convencimiento, la tolerancia por indiferencia, la intolerancia por convencimiento y la
intolerancia por indiferencia". Termina señalando las paradojas a que se han visto sometidas
estos cuatro tipos de tolerancia, que no son más que las de la democracia, incluyendo la
primera que considera su favorita. ¿Podemos ser tolerantes con los intolerantes? Si lo somos,
ponemos en peligro la tolerancia y si no, los intolerantes somos nosotros. ¿Qué hacer con este
dualismo, también !por todos los cielos!, irresoluble? Aprender a navegar en esos "rápidos"
de la lucha social o en esas "tormentas" con la paradoja a cuestas y una suerte de bricollage
ético.

III. EL CAOS

La única promesa de la Ilustración cumplida fue la secularización y las dos únicas que
no ha cumplido, en una visión totalmente opuesta: el control del clima y la simulación del
cerebro en la que, de hecho, ya está trabajando la Inteligencia Artificial (IA). Morin, por su
parte, piensa que las ciencias todavía no han podido resolver dos misterios: el del ser y la
muerte.

Cumplidas o no, lo cierto es que las promesas de la Ilustración, de las que el


marxismo fue su más radical continuador, descansaban sobre la persecución de una sociedad
reconciliada, igualitaria, libre, abundante, tecnológica y feliz. Todos daban por descontado
que tal día llegaría. Hoy, al contrario, la preocupación de los científicos es saber el día que
desaparecerá la tierra y todo el sistema solar por la culminación del "big bang" y su efecto
contráctil. Aquellos prometieron ilusamente la vida plena al final de los tiempos, estos, la
muerte más absoluta ¿No es toda una locura parecida al lamento del físico y el esteta de que
mientras la mayor parte de los científicos están a punto de controlar ciertos secretos del
tiempo que lo creen reversible, Prigogyne, al revés, revuelva todo y hable de la imposibilidad
de regresar a las condiciones iniciales de las estructuras disipativas por efectos de la "barrera
entrópica"?

Hay tres revoluciones científicas modernas ninguna de las cuales es reducible a las
otras porque no nacieron ni se desarrollaron de un modo lineal: a) la mecánica newtoniana
que fundó la causalidad científica y el principio logicial del "todo como la suma exacta de las
partes": Dios era matemático; b) la relatividad einsteiniana vs la cuántica bohrniana, donde
para aquellos actuaba el principio sinérgico del "todo como algo más que la suma de las
partes" y para estos el universo estaba regido por las probabilidades y las incertidumbres:
Dios jugaba a los dados; y c) la teoría de los fractales (caos) mandelbrotiana cuya concepción
hologramática (bucle recursivo) está llevando a creer que el "todo está en las partes que están
en el todo": Dios está en todos lados y en ninguno.

Esta última es la que puede brindar perspectivas nuevas a las ciencias sociales. Ya la
están explorando algunos antropólogos franceses como Balandier y otros estudiosos
norteamericanos.
La teoría del caos es como una derivación de la segunda ley de la termodinámica y la
entropía pasiva descubierta por Boltzmann e intuida por Poincaré. Hoy tiene distintas
vertientes que sumariamente podemos resumir así: Verhulst con sus iteraciones de ecuaciones
de crecimiento no lineales (Xn+1 = NXn [1-Xn]); Lorenz con su "efecto mariposa" al variar
infinitesimalmente las condiciones iniciales del clima; Mandelbroot con su geometría de
fractales; Peano con su curvatura de las líneas; Thom y su teoría de la catástrofe; Prigogine
con sus estructuras disipativas alejadas de todo equilibrio; Cantor con sus polvaredas de
series de números infinitos; Gödel con la "demostración" de sus 52 teoremas matemáticos
"indemostrables"; los números aleatorios y la duplicación de períodos de Feigenbaum a partir
de la aplicación iterativa del Pi a las ecuaciones no lineales; Margulis con su teoría biológica
antidarwinista de la cooperación; etc. Todas estas vertientes se están aplicando en varias
ciencias simultáneamente (matemáticas, física, astrofísica, estadística, biología, química,
economía, antropología, etc.) y pueden orientar a las ciencias sociales de una múltiple
manera.

IV. A MODO DE CONCLUSIONES

1. La paradoja de la paradoja es que reafirma el dualismo que cuestiona. Ella misma


es una binariedad pero que la hace estallar en direcciones caóticas.

2. La tolerancia, como democracia, hay que defenderla no porque sea la única ni


siquiera la más racional de las salidas, sino porque es un nudo de flujos encontrados
parecidos a las múltiples corrientes marinas, un solitón como las que provocan los tsunamis,
que se han puesto de acuerdo consigo misma, se levanta y corre.

3. El presente es la única dimensión donde coinciden el tiempo y el espacio y la


paradoja no es más que la inclusión del tiempo en la lógica. Con las otras dimensiones no
sucede así. Desde Aristóteles el presente siempre ha sido expulsado o subordinado a los otros
tiempos. El presente es rico en propiedades, en diversidad, en pluralidad, en colores, que al
realimentarse a sí mismo estalla en nuevas diferencias totalmente espaciales y caóticas, de
aquí que el problema de identidad, tenga que ver más con el estar (raíz) que con el ser en el
tiempo.

4. No hay futuro que ilumine desde él mismo los anteriores momentos. El presente ha
llegado a ser lo que es. Por eso la gran pregunta de la filosofía de hoy es:

¿Qué es lo que es?

Pero es una interrogante que la ha trabajado más la filosofía hindú.

Krisnamurti, por ejemplo, dice que todo el problema occidental es la búsqueda por la
búsqueda misma. No hay que buscar nada. Cómo los occidentales, se pregunta con una
terrible sencillez, pueden "buscar" algo que no conocen y si ya lo conocen por qué lo
"buscan". Lyotard dice algo parecido aunque con sus pesadas e insoportables claves
occidentales. Expresa más o menos que las ciencias "buscan" reglas, normas, leyes y que al
hacerlo, paradójicamente, las emplean. !! ¿Cómo puede ser? !! Buscar unas leyes que se usan
para encontrarlas.

Es que "abrir puertas", como dice George Steiner en su obra "El Castillo de Barba
Azul", es la virtud que se convirtió en vicio en Occidente hasta que termine por abrir la
última: la de los cadáveres.
3.- Caos en sistemas biológicos:
Los sistemas biológicos se pueden plantear como paradigma de complejidad. Esta
complejidad se puede enfocar en dos aspectos que son complementarios: estructural y
dinámico. A nadie se le oculta que un ser vivo, desde la más simple bacteria, alberga una
estructura muy elaborada y altamente compleja.

Pero además de esta complejidad, los sistemas biológicos manifiestan un


comportamiento notablemente complejo, cambiante, que no es simple, estacionario o plano.
Es frecuente encontrar fluctuaciones, oscilaciones, pulsos y otros fenómenos
característicamente no lineales en muchos niveles de la escala evolutiva, desde el
comportamiento del metabolismo bacteriano hasta la organización de sociedades y
ecosistemas. En este sentido no es extraño encontrarse con el fenómeno caótico, como una
manifestación particular de esta complejidad dinámica de un gran número de sistemas
biológicos.

Cuando se estudia el fenómeno del caos en los seres vivos, sus implicaciones con
fenómenos de turbulencia, erráticos y las propias connotaciones catastrofistas del término,
conducen a pensar que la fenomenología caótica es algo antinatural, patológico, ajeno al
normal comportamiento de un ser vivo. Sin embargo, nada más lejos de la realidad: aunque
en ciertas circunstancias el caos está efectivamente asociado a alguna patología, en otras
muchas el régimen caótico representa el comportamiento normal o natural.

El estudio del caos en sistemas funcionales de extrema importancia en humanos: en el


latido cardiaco y las ondas cerebrales puede ayudar para su aplicación como futura
herramienta terapéutica.
4.- Caos y complejidad en economía:
La razón fundamental por la que se intenta incorporar en el campo de la Ciencia
Económica las técnicas del caos y el paradigma de la complejidad estriba en la insatisfacción
intelectual que producen los enfoques clásicos y neoclásicos basados sistemáticamente en la
existencia de equilibrio (y además único), en el tratamiento artificialmente simple de la
realidad, y en la adopción de un claro y acentuado determinismo reduccionista, todo ello con
independencia de los efectos negativos en los niveles de bienestar.

Un análisis comparativo de la evolución de la Física y de la Economía pone de relieve


el contraste entre la existencia de un cierto indeterminismo creativo, especialmente a partir de
la revolución cuántica, en la primera, y de un enfoque determinista, como hemos dicho, en la
segunda, a pesar de los importantísimos avances tecnológicos y de la formalización en el
campo de la economía.

Por otra parte, la naturaleza no-lineal de la mayor parte de los fenómenos


económicos, así como la dependencia de la variación en las condiciones iniciales, la
existencia de ruido y la endogeneidad, da lugar a comportamientos caóticos que exigen, para
su comprobación y tratamiento, el empleo de los instrumentos y métodos de las matemáticas
del caos.

Se trata, en esencia, de recuperar una visión más real e integradora de la Economía,


más allá de los planteamientos estériles y excluyentes que alimentan posiciones
irreconciliables entre la micro y la macro, o que pretenden saltos cualitativos
"extremadamente reduccionistas" a través del "agente representativo" o de la figura
carismática, nuevamente resucitada, de Robinson Crusoe.

Con esta pretensión se puede abordar con nuevos instrumentos analíticos el estudio de
los ciclos económicos, del crecimiento económico o del comportamiento de los mercados
capitales, entre otras muchas posibilidades.

Dado que el caos determinista supone que existe un orden revestido o disfrazado de
irregularidad y desorden, es preciso discernir si las series temporales que describen la
evolución del sistema son auténticamente aleatorias o, por el contrario, esconden unos
principios o leyes deterministas.

Hay que reconocer que la ciencia trata siempre de descubrir el orden oculto de la
naturaleza, y que sin esta paradójica composición de lugar no podría explicarse los
fenómenos de turbulencia, los cambios climáticos o las fluctuaciones en los mercados
bursátiles. Detengámonos por un momento en este último caso, es decir, en el del
funcionamiento de los mercados capitales. Se trata de un ejemplo típico en el que la aparente
aleatoriedad en las series temporales puede deberse al comportamiento caótico de un sistema
no lineal, pero determinista, que permite llevar a cabo predicciones a corto plazo más
precisas que las que podrían realizarse con modelos estocásticos lineales. Pero el análisis se
complica si tenemos en cuenta que en determinados procesos caóticos se cumplen las mismas
condiciones o propiedades respecto a momentos estadísticos, que en series auténticamente
aleatorias, pudiéndose hablar incluso de "caos blanco" debido a su similitud con el ruido
blanco.
Entre las técnicas para resolver el problema, es decir, para detectar el caos, puede
utilizarse el análisis espectral, la dimensión de correlación, la dimensión de inserción
(embedding), los exponentes de Liapunov, así como la dimensión de información y la
entropía de Kolmogorov.

Para el estudio de series temporales referidas a mercados de capitales concretos, se ha


utilizado el análisis R/S, que permite comprobar si una serie sigue o no un movimiento
Browniano y calificarla como persistente o antipersistente.

Partiendo del rango y la desviación típica de los datos estadísticos durante un período
de tiempo se llega a una relación del tipo.

expresando H el conocido coeficiente de Hurst. Si tomamos una medida de la


correlación en función de H, y de la dimensión fractal, también en términos de H se tendría,
respectivamente:
C = 2 (2H-1) – 1

Teniendo en cuenta la variación o intervalos del coeficiente de Hurst, estaríamos ante


tres tipos de series:

a) C = 2 (2H-1) – 1 = 0
b) C = 2 (2H-1) – 1 = 0,50
c) C = 2 (2H-1) – 1 = 1

En el primer caso, se trata de una serie aleatoria en la que los sucesos no están
correlacionados. En el segundo, nos encontramos con una serie "antipersistente" o ergódica,
dependiendo su grado de no persistencia de la medida en que H se acerque a cero, lo que
daría lugar, como hemos visto, a una correlación negativa. Tendremos en el tercer caso una
serie "persistente", repitiéndose o manteniéndose los valores de alza o baja de los períodos
anteriores, y siendo la persistencia mayor cuanto más se acerca a 1 el valor de H, en cuyo
caso estaríamos ante una correlación total o del 100 por 100.

Hablamos en el primer caso de la existencia de ruido blanco en el sentido habitual del


término, y de ruido rosa y ruido negro en los casos segundo y tercero, respectivamente.

La aplicación del análisis R/S a los mercados de capitales pone de relieve la


existencia de estructuras fractales y ciclos no periódicos, comprobándose asimismo que se
comportan como sistemas no lineales, y que la hipótesis de mercado eficiente resulta
discutible.

Este ejemplo en el campo de la Economía ilustra sobre el concepto de "caos


determinista", es decir, sobre su significado y alcance. La cuestión está en que si lo que se
analiza no es un fenómeno auténticamente aleatorio, aunque presente todos sus síntomas,
estaríamos entonces ante un proceso determinista encubierto, hacia cuyo conocimiento
trataríamos de tender. ¿Podríamos hablar en ese caso de un determinismo asintótico?. La
respuesta sería positiva en el sentido de situar el "caos determinista" entre un indeterminismo
"práctico" y un determinismo "asintótico", rompiendo así la estéril dualidad determinismo-
indeterminismo.
Es preciso poner de relieve que este nuevo enfoque en el campo de la Ciencia
Económica empieza a dar sus frutos, contándose con aplicaciones concretas con excelentes
resultados como por ejemplo es el caso de una tesis doctoral sobre "Economía Dinámica
Caótica: una aplicación al mercado de capitales en España", defendida en la Universidad
Complutense por la profesora Pilar Grau. A pesar de ello nos encontramos en ocasiones con
actitudes acomodaticias y recalcitrantes con reflejos inequívocos de intolerancia que
pretenden obstruir con un silencio elocuente, en el mejor de los casos, la marcha inexorable
hacia un conocimiento científico más abierto e interdisciplinario, aunque se cuenta con el
apoyo moral y el aliento de Físicos y Economistas prestigiosos, como, entre otros, los
premios Nobel Murray Gell-Mann, Keneth Arrow y Herbet Simon. En el ámbito de esta
colaboración se está investigando, por ejemplo, la aplicación de ecuaciones de difusión a la
economía espacial, o la posibilidad de encontrar leyes de potencia en determinados
problemas o parcelas de la Economía.
5.- Fractales:
Fractal, en matemáticas, figura geométrica con una estructura compleja y
pormenorizada a cualquier escala. Normalmente los fractales son autosemejantes, es decir,
tienen la propiedad de que una pequeña sección de un fractal puede ser vista como una
réplica a menor escala de todo el fractal. Un ejemplo de fractal es el “copo de nieve”, curva
que se obtiene tomando un triángulo equilátero y colocando sucesivos triángulos, cada vez de
menor tamaño, en el tercio medio de los lados cada vez más pequeños. En teoría, el resultado
es una figura de superficie finita pero con un perímetro de longitud infinita, y con un número
infinito de vértices. En el lenguaje matemático del cálculo, dicha curva no se puede
diferenciar. Se pueden construir muchas de estas figuras repetitivas aunque desde su
aparición en el siglo XIX se habían considerado como un concepto extravagante.

Un cambio decisivo en el estudio de los fractales ocurrió con el descubrimiento de la


geometría fractal por el matemático francés de origen polaco Benoit B. Mandelbrot en la
década de los setenta. Mandelbrot utilizó una definición de dimensión mucho más abstracta
que la usada en la geometría euclídea, afirmando que la dimensión de un fractal se debe usar
como un exponente al medir su tamaño. El resultado es que no se puede considerar
estrictamente que los fractales existen en una, dos o un número entero de dimensiones, sino
que se han de manejar matemáticamente como si tuvieran dimensión fraccionaria. La curva
del “copo de nieve” tiene una dimensión fractal de 1,2618.

La geometría fractal no es solamente una idea abstracta. Un litoral, considerado desde


el punto de vista de su irregularidad más pequeña, tendería hacia una longitud infinita, lo
mismo que ocurre con el “copo de nieve”. Mandelbrot sugirió que las montañas, nubes, rocas
de agregación, galaxias y otros fenómenos naturales son similares a los fractales, por lo que
la aplicación de la geometría fractal a las ciencias es un campo que está creciendo
rápidamente. Además, la belleza estética de los fractales los ha convertido en elemento
fundamental de los gráficos por ordenador o computadora.

Los fractales también se usan en ordenadores para reducir el tamaño de fotografías e


imágenes de vídeo. En 1987, el matemático inglés Michael F. Barnsley descubrió la
transformación fractal, capaz de detectar fractales en fotografías digitalizadas. Este
descubrimiento engendró la compresión fractal de imágenes, utilizada en multimedia y otras
aplicaciones basadas en la imagen.
6.- Bibliografía:

*Balandier, G. (1990) El desorden. La teoría del caos y las ciencias sociales.


Gedisa. Barcelona.

*Bobbio, N. (1986) El futuro de la Democracia. F.C.E. México.

*Modelos matemáticos de sistemas biológicos.


Harvey, J. (1977). John Wiley & Song.

*Mandelbrot, B. (1977). La geometría fractal de la naturaleza.


Freeman. Nueva York.

*Gleick, J., (1988). Caos. Seix Barral. Barcelona.

*Movimiento caótico, Antonio F. Rañada, Investigación y Ciencia, marzo 1986.

*Caos, Crutchfield, Doyne Farmer, Investigación y Ciencia Febrero 1987.

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