El chocolate es el producto final del procesado del fruto del cacao.

El cacao
proviene del árbol del cacaotero, de origen tropical y normalmente da
entre 15 y 20 frutos. De los granos de la fruta se hace el chocolate, que
contienen entre 20 y 60 semillas de cacao.
Hay diferentes tipos de chocolates: el chocolate negro es casi puro con un
50% de pasta de cacao, el chocolate amargo por su sabor contiene 60% de
cacao, el chocolate blanco, no contiene pasta de cacao solo 20% de
manteca de cacao y el chocolate con leche que contiene menos de 40% de
cacao. Pero el sabor, color y textura del chocolate depende principalmente
de la especies del cacao. Existen 22 especies de cacao entre ellos: el
forastero, el criollo es el más utilizado en la producción de barras de
chocolate y el trinitario.
El proceso de elaboración consiste en: primero el cacao se cultiva, es
recolectado, se desgrana y se deja fermentar. después, se seca y se limpia.
Los granos son tostados y pasan a ser molidos y prensado. Luego el
Conchado que es un proceso de refinamiento de la pasta del cacao y es
Templado y moldeado y por ultimo la degustación.
El chocolate es nutricionalmente completo y saludable. Da energía y
nos mejora el humor. Además, es bueno para el correcto funcionamiento
del cerebro y del corazón.
En la actualidad, es un alimento tan importante y que cuenta con una
gran fama que incluso en muchas ciudades se pueden encontrar museos
del chocolate para poder conocer sus orígenes y su historia.
.

se reserva para los chocolates más finos y exquisitos,

fue descubierto accidentalmente, cuando indígenas de América Central que producían
cerveza con la pulpa de las vainas de cacao aprendieron a utilizar los granos de la
fruta. De la fruta del cacao se produce el chocolate.

Tiene una cáscara dura, es alargado y similar a una pelota de fútbol americano, el
fruto crece directamente del árbol o en sus ramas más viefútbol

El cacao entra en Europa por España, Se comienza a comercializar a Francia, Italia,

Suiza, Alemania, Bélgica y otros países. Así, el chocolate comienza a popularizarse en
toda América y el mundo. A mediados del siglo XIX el chocolate se solidifica
ofreciendo un aspecto nuevo, surgen los bombones y los chocolates rellenos, y es
utilizados en diferentes preparaciones de pastelería y en helados.