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Rosbelisa Berroa Santana/100597642

INFORME COMPARATIVO

El enfoque que aplica el autor de Historia Social Dominicana es un enfoque explicito, gráfico y
Completo, basado en estudios y fuentes históricas; dice así:

La Industria Azucarera del Siglo

Inicia este período caracterizado por la creación de grandes explotaciones agrícolas, sobre todo
de los ingenios azucareros.
En ese entonces los ingenios representaban la mejor tecnología de explotación de la época. Todo
el sistema de ingenio de esa época consistía en relaciones capitalista, manufacturado en Europa,
pero sustentado en la mano esclavista. A pesar de esto no significó un crecimiento económico
porque era un sistema frágil por lo dependiente de las circunstancias por esto hubo factores que
terminaron en ruina, junto al 1513 donde la economía del oro estaba en crisis. Sobre todo se vio
todo afectado por la muerte de casi 4 mil indígenas que murieron a causa de la viruela y por ello
los españoles empezaron a emigrar y este proceso de abandono redujo la emigración de azúcar y
la industria azucarera empezó a decaer.

Evolución de la Industria

En 1506 la calidad de la industria era muy baja, antes había plantaciones de mieles.
Más adelante, hacia 1320 funcionaban tres ingenios de azúcar y muchos otros se encontraban en
construcción.
Eran 18 ingenios y 2 trapiches.
El inestable crecimiento de la producción azucarera empezó junto al decrecimiento de la
industria azucarera.
Las labores del ingenio se dividían en dos parte; la agrícola y la industrial.

Lo que se producía artesanalmente era por que significaban una necesidad para el
funcionamiento del ingenio, pero las maquinarias eran traídas de España por su complejidad,
hechas en Italia y en Holanda.
Ya en el XVI inicia el siglo de las devastaciones así, todo el resto de historia colonial, salvo. El
siglo XVI no sólo se caracteriza por un empleo intensivo y sistemático negros esclavos sino
también por una persistencia del auge productivo en torno a la economía en el período colonial.

Causas del Suministro de una Economía Esclavista Intensiva


El comercio fue el motor fundamental para la constitución la economía esclavista intensiva
del periodo. Se generaba un estímulo de inversión del Imperio Español.
La gran demanda a nivel de mercados europeos y las nuevas colonias españolas fue una de las
partes más importantes de todo, superando la producción de oro y plata, por Brasil a fines del
siglo. También el expansionismo de la región fue algo muy importante en la isla, relacionado
a la ganadería en el país.
Rosbelisa Berroa Santana/100597642

La entrada de negros esclavos mediante contrabando se debía a que en la época se requerían


licencias y se aplicaban una serie de altos impuestos por importación.
El crecimiento del número de esclavos negros, junto emigración de los blancos, provocó gran
desproporción entre ambos grupos raciales, por ello la porción de grupos mulatos fue en
crecimiento lo que trajo consigo a una decadencia en la economía esclavista, puesto que se
redujo la línea entre blancos dominadores y negros dominados. Otro factor que influyó en este
aspecto y que contribuyó a la fomentación de una estructura democrática fue la concentración de
la población en Santo Domingo y en torno a los ingenios azucareros.

Los hatos fueron la unidad ganadera más importante en el transcurso de la historia colonial pero
hubo otros o variantes de ganadería, principalmente la llamada montería, que consistía en la
ganadería propiamente dicha, era una cacería de reces ya que éstas eran semisalvajes o
totalmente salvajes. Había pequeños hatos llamados hatillos. Por ello la ganadería empezó a ser
un renglón económico importante.
Con el aumento paulatino de la ganadería, la industria azucarera empezó a decaer, debido a que
necesitaba mano esclava y trabajo muy forzoso, sin embargo, la ganadería constituía un medio
más fácil de comercio e ingresos económicos.

Mientras que el autor de Composición Social Dominicana enfoca la historia de esta forma en un
contexto más narrativo, escueto y simple, añadiendo que cita en frecuentes ocasiones las palabras
de varias personas de ese entonces:
DE LOS INGENIOS A LOS HATOS
Hacia el 1540 la población de La Española tendía a organizarse alrededor de la industria
azucarera; sesenta años después se había organizado alrededor de los dueños de hatos. Porque
cuando se dejan abandonadas a sus impulsos naturales, las sociedades se congregan en torno a
fuerzas económicas; donde hay metales se forman las sociedades mineras, donde lo que rinde
beneficios es la agricultura se forman las sociedades agrícolas, y en Santo Domingo, una vez
extinguida la riqueza del azúcar, lo que quedó como fuente de negocios fue el ganado. En 1540
en República Dominicana había centenares de reses. Crecen y se reproducen sanas y tranquilas.
El cuero llegó al punto de que competía con la exportación del azúcar en la Isla.
El obispo Bastidas encarnaba un caso particular; él se hallaba en los dos bandos, en el que estaba
llamado a perder y en el que estaba llamado a ganar. Pero el país iba a perder, pues en unos
treinta años la Isla pasó, de las perspectivas de acabar siendo una sociedad organizada alrededor
de la industria azucarera, a ser una sociedad organizada alrededor de los hateros. Y ese paso
significó un retroceso enorme en términos de organización social significó pasar de las puertas
del nivel más alto de desarrollo social que era posible tener en la época, no solo e nuestro país,
sino en cualquier otro de América, al nivel más bajo a que podía llegar cualquier sociedad.
En total, en los ingenios debían vivir de mil seiscientos a mil ochocientos esclavos. El resto
estaría en otros lugares; una parte de ellos en servicios domésticos en la ciudad de Santo
Domingo y en las pocas villas de entonces, y otra parte en estancias y hatos.
De todos modos, el autor no ha querido quedarse corto en esos cálculos, precisamente porque la
intención es demostrar que al llegar a la mitad del siglo XVI, punto el más alto a que llegó el
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desarrollo de la industria azucarera, y por tanto la antesala de la decadencia de la oligarquía del


azúcar, la población de la Isla no podía pasar de siete a siete mil quinientas personas, de ellas,
unos cuatro mil esclavos y el resto españoles y criollos, y casi seguramente más criollos que
españoles.
Ya en 1582 los ingenios azucareros habían comenzado a disminuir y a medida que los ingenios
iban desapareciendo los hatos iban convirtiéndose en sus sustitutos como centros de autoridad
social. En
En 1600 en Santo Domingo en había sólo doscientas familias, según informaba el arzobispo
Dávila y Padilla. Para seguir viviendo, los esclavos que se habían especializado -para decirlo con
una palabra actual- en alguna tarea de las muchas que había en la industria azucarera, tenían
necesariamente que olvidar sus conocimiento y aplicarse a los oficios primitivos de los hatos;
tenían que descender no sólo como parte del conjunto de la población, sino además de manera
individual, pues lo que ellos habían aprendido en largos años de su juventud no podía ejercerse
más. Su descenso era resultado del descenso general del país, pero a la vez ese descenso personal
estimulaba el del conjunto. Ahora bien, los maestros de azúcar, como los tacheros, los que
cortaban la caña y los que cuidaban de los bueyes; toda la poblaci6n de los ingenios respondía a
la misma ley que todos los seres humanos en cualquier grado de la civilización: se congregaban
alrededor de una autoridad social. En sus años de trabajadores de los ingenios, esa autoridad
estaba representada por los dueños de las fábricas de azúcar. Cuando éstos desaparecieron pasó a
estar encarnada en los hateros. Así, la Isla, que iba desarrollándose como sociedad de azucareros,
sin llegar a alcanzar su madurez en esa dirección, pasó a ser una sociedad de hateros; y los
hombres y las mujeres que antes se agrupaban alrededor de los centros del azúcar tuvieron que
pasar a agruparse alrededor de los centros de ganado. Hasta ahora se ha pensado que la
decadencia de la Española se debió a que sus pobladores la abandonaron porque en el Perú y en
México se descubrían minas de oro y de plata. El abandono es un hecho comprobado, lo que no
está comprobada es la causa de la decadencia. La fabricación de azúcar pudo proporcionar a la
Isla tanta riqueza como el oro y la plata al Perú y México, y tal vez más. De hecho, eso sucedió
en el siglo XVIII en una parte pequeña de la Isla, que fue Haití. En caso de que la industria del
azúcar hubiera llegado a desarrollarse en todas sus posibilidades, la Isla no se habría despoblado;
al contrario. Luego, la razón del abandono de La Española por parte de sus habitantes en el siglo
XVI no hay que buscarla en las minas peruanas y mexicanas sino en el fracaso de la industria
azucarera y ese fracaso se debió a la falta de un mercado comprador. Ahora bien, cuando la
fabricación de azúcar empezó a ser un negocio malo los pobladores comenzaron a organizarse
alrededor de la riqueza ganadera, y esto significó un cambio cualitativo muy importante, el paso
de la oligarquía esclavista industrial al de la oligarquía ganadera.
La Española después del fracaso de la oligarquía azucarera, era precapitalista, no capitalista. Así,
del camino del desarrollo capitalista, a través de la modalidad típicamente americana de las
oligarquías esclavistas, que nuestro país había tomado a partir del 1520, vinimos a salir a una
vereda enmarañada y perdida, la de la oligarquía esclavista precapitalista. Del nivel industrial
descendimos al nivel de los hateros, sin dejar por eso de ser una sociedad esclavista. Y en lo
sucesivo toda nuestra historia iba a estar condicionada por ese descenso, que sufrimos en nuestra
infancia como pueblo.

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