Está en la página 1de 144

Música, cultura y pensamiento

Revista de Investigación de la Facultad de Educación y Artes del Conservatorio del Tolima

Vol. 2 No. 2
Música, cultura y pensamiento
Revista de Investigación de la Facultad de Educación y Artes del Conservatorio del Tolima

Vol. 2 No. 2

Humberto Galindo Palma


-Editor-

Conservatorio del Tolima


Institución de Educación Superior
1906
Música, cultura y pensamiento

Reservados todos los derechos


© Conservatorio del Tolima
© Humberto Galindo Palma

Directora
Luz Alba Beltrán Agudelo
Editor
Humberto Galindo Palma

Comité Editorial
Dra. Luz Alba Beltrán Agudelo
Mg. Néstor Guarín Ramírez
Mg. Franklin Emir Torres
Esp. Humberto Galindo Palma
Mg.(c) Carlos David Leal
Lic. Andrea Hernández Guayara

Comité Científico Artístico


Héctor Mauricio Rojas B., Doctor. Universidad de Manizales
Franklin Emir Torres, Mg. Universidad Nacional de Colombia
Diego Mauricio Barragán, Mg. Universidad Nacional de Colombia
Conservatorio del Tolima Luz Alba Beltrán Agudelo, Dra. Universidad Valladolid, España
Néstor Guarín Ramírez, Mg. (c) Universidad del Tolima
Institución de Educación Superior Juan Pablo Luna, Mg. Texas Christian University
1906
© Autores:
Adrián Camilo Ramírez
Andrea Hernández Guayara
Luz Alba Beltrán Agudelo Carlos David Leal
Rectora Diego Fernando Góngora
Gilmer Capera Chilatra
Néstor Guarín Ramírez Humberto Galindo Palma
Decano Irnel Andrés Ruiz
Jaime Quevedo Urrea
Jairo Bernal Guarnizo Jesús Antonio Quiñones
Jorge Sossa Santos
Secretario Consejo Directivo Juan Gabriel Alarcón
Oscar Barreto Quiroga Manuel Alejandro Murcia Suárez
Ruth Nayibe Cárdenas Soler
Presidente del Concejo Directivo Sergio A. Sánchez Suarez

© Fotografías:
Portada: Guillermo Abadía Morales, Archivo El espeactador http://www.elespectador.
com/impreso/cultura/articuloimpreso183403-guillermo-abadia-morales-1912-2010
Archivo personal Gonzalo Sánchez

Corrección de estilo:
Edna Constanza García Melo
Traductor: Carlos Ortiz Leiva

Segunda Edición:
Ibagué, noviembre de 2010
ISSN:2145 - 4728
Número de ejemplares: 300

Diseño e Impresión:
León Gráficas Ltda.

Fondo Editorial Conservatorio del Tolima


Carrera 1 Calle 9 No. 1-18
Teléfonos: +57(8) 2618526 - 2639139 Fax: +57(8) 2615378 - 2625355
musicaculturaypensamiento@conservatoriodeltolima.edu.co
www.conservatoriodeltolima.edu.co
Ibagué - Tolima – Colombia
Música, cultura y pensamiento. Revista de investigación musical/editor:
Humberto Galindo Palma 1 edición Ibagué: Fondo Editorial Conserva- Prohibida la reproducción total o parcial de este material, sin la autorización escrita
torio del Tolima, 2010 del Conservatorio del Tolima
144 páginas, ilustraciones, retratos, partituras e índice, 23 x 30 cm.
ISSN : 2145 - 4728
5
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Contenido
Prólogo
7
Editorial
9
In memoriam
11
Música y pensamiento

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos,


documentales y jurídicos
17
Jaime Quevedo Urrea

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal


para las músicas regionales
31
Jorge Sossa Santos

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en Colombia: Directores destacados


Juan Gabriel Alarcón Carreño 45
La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable
para la cualificación de los procesos educativos
55
Carlos David Leal Castro

Neurología y cognición musical


Ruth Nayibe Cárdenas Soler 61


Música y cultura

Gonzalo Sánchez: Testimonio del folclor musical de la Tierra del Bunde


Humberto Galindo Palma, Gilmer Capera Chilatra, Manuel Alejandro Murcia Suárez, 73
Diego Fernando Góngora, Irnel Andrés Ruiz

La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito,


el rito, el juego y la fiesta
89
Jesús Antonio Quiñones

Música en clave

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?


Sergio A. Sánchez Suárez 99
Debussy: otro camino al atonalismo
Adrián Camilo Ramírez 113
Informes de investigación

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del


Conservatorio del Tolima (2008-2010)
124
Andrea Hernández Guayara

6
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 |
7
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Prólogo

Prólogo
En su segunda versión aparece la revista del Es de resaltar que en el Conservatorio
Conservatorio del Tolima con la participación del Tolima estamos viviendo trasformaciones
de los maestros y maestras investigadores dialo- verdaderas, asumimos e interiorizamos que la
gando y reflexionando sobre su práctica educa- educación universitaria debe superar la de los
tiva. Es el esfuerzo investigativo que va más allá conservatorios tradicionales y le concedemos
de la búsqueda de la eficiencia y la productivi- la importancia que tiene la investigación ha-
dad para plantear otros procesos que tienen que ciéndola en nuestro contexto, con referencia
ver con la música y la pedagogía musical, con a nuestro quehacer y rescatando nuestros va-
la creación y la recreación, es decir, son trabajos lores. El trabajo de estos procesos está en parte,
que invitan a ver la investigación educativa rea- a través de la presente publicación, promovien-
lizada en un Conservatorio que se enorgullece do los cambios esenciales en la mente de los
de ser Institución de Educación Superior y de educadores musicales, como lo plantea Violeta
avanzar de manera autónoma hacia el recono- Gainza (1999) en su artículo sobre la educa-
cimiento de una entidad, que además de hacer ción superior musical en América Latina: “¿Si
música reflexiona en el cómo y para qué hacer los maestros de música no cambian, cómo podrán
música, cómo enseñarla, cómo ir hacia la con- hacer que sus estudiantes aprendan de otra forma
secución de resultados favorables para todos los la música?”
músicos y pedagogos musicales. Ésta es una muestra de nuestro compro-
En nuestra revista se evidencia que la in- miso con la construcción del pensamiento uni-
vestigación hace parte del proceso educativo, versitario fundamentado en los valores inscritos
político y concientizador, donde están involu- en el Proyecto Educativo Institucional y en el
crados los estudiantes como sujetos de su pro- ideario de los miembros de la comunidad edu-
pio conocimiento y los docentes como ense- cativa, puesta ahora en las manos de los lectores
ñantes y aprendices, en una dialéctica que lleva para continuar el diálogo y la reflexión.
a la transformación de la realidad institucional
y la de los estudiantes. Luz Alba Beltrán Agudelo.
9
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Editorial
Al celebrar la edición del segundo número de la memoria, la educación y la actualidad nacional.
revista Música, Cultura y pensamiento, es preci- Es también una mirada global que enlaza las
so expresar nuestro más sincero agradecimiento perspectivas y avances en experiencias, debates
a los autores, que con sus producciones, hacen y propuestas, que construyen aquellos autores
realidad el propósito del Conservatorio del músicos y académicos colombianos que, para
Tolima de liderar para la región, dinámicas de fortuna de Ibagué y el Conservatorio del To-
conocimiento superior basadas en la investiga- lima, han atendido la invitación de continuar
ción, como una responsabilidad social compar- este diálogo desde nuestra revista, abierta desde
tida de una comunidad académica, esmerada su primera edición a la confluencia de un saber
por contribuir a la profundización del conoci- generoso en fuentes documentadas, y destina-
miento de la música en los distintos escenarios do principalmente a estimular la investigación
y problemas inherentes a nuestra realidad na- en nuestros más jóvenes lectores: los estudian-
cional y latinoamericana, que llenen ese vacío tes de Licenciatura y Maestro en Música.
epistemológico que, en palabras de Gabriel Siguiendo la iniciativa de nuestra prime-
Castillo Fadic (1998), en América “no alcanza a ra revista, se abre el contenido de este segundo
llenarse con los aciertos marginales de la musico- número con la publicación de dos artículos co-
logía histórica y de la etnomusicología” y la con- rrespondientes a las ponencias presentadas en
vocan desde la teoría crítica a una “comprensión el VI Congreso Nacional de la Música, reali-
de los fenómenos musicales tal como estos acon- zado en Ibagué en 2008, cumpliendo así con
tecen en la inmediatez territorial de la cultura”. un compromiso histórico, que seguramente
Lo que da sentido a esta revista en su se- el maestro Castilla había considerado esencial
gundo impulso editorial, es el encuentro de para la permanencia de dichos Congresos y sus
ideas elaboradas juiciosamente por autores y re- contenidos en el ámbito musical nacional: Me-
ferentes divergentes entre sí, pero convergentes morias documentales del sonido inédito: Algunos
en su propósito de leernos desde la música y la aspectos técnicos, documentales y jurídicos, del ex-
sociedad colombiana. Es una respuesta de fide- perto Jaime Quevedo Urrea, director del Centro
lidad para con los complejos y diversos relatos de Documentación Musical del Ministerio de
que se requieren para, explicar y dimensionar la Cultura; y Pedagogía del acontecimiento: Una
importancia de la música en los ámbitos de la experiencia de educación no formal para las mú-
Editorial

sicas regionales, de Jorge Sossa Santos, músico y Gonzalo Sánchez, símbolo del folclor musical de
educador, gestor de la Fundación Nueva Cul- la Tierra del Bunde; y participa el músico Jesús
tura. Dichos artículos abren la discusión sobre Quiñones, director de la Fundación Totolin-
dos procesos prioritarios en la revisión de prác- cho, y presidente de la Asociación Nacional de
ticas académicas tanto para la investigación Egresados del Conservatorio del Tolima con la
musicológica, como el redireccionamiento de ponencia La música de los pueblos originarios
políticas educativas, que reconozcan la tradi- de América y su relación con el mito, el rito, el
ción musical regional en la transformación de juego y la fiesta. Ponencia presentada en marzo
modelos de enseñanza musical, basados en los de 2010 en Ibagué, junto con su colección de
constructos de región-identidad. instrumentos musicales indígenas en el Museo
Los artículos Reflexión histórica de la di- de Arte del Tolima.
rección sinfónica en Colombia, de Juan Gabriel Música en clave abre con el ensayo Bunde
Alarcón Carreño, y La autoevaluación en el do- Tolimense: Ritmo o Mito, de Sergio Sánchez. Un
cente universitario: una actividad indispensable texto de análisis que indaga sobre una de las
para la cualificación de los procesos educativos, de obras musicales más representativas de la tradi-
Carlos David Leal presentan respectivamente ción e identidad musical regional. El docente y
las perspectivas de dos de nuestros docentes, compositor Adrián Camilo Ramírez nos ofrece
donde abordan respectivamente realidades de sus consideraciones en el artículo Debussy: otro
una praxis musical nacional escasamente refe- camino al atonalismo?, y es quién participa de la
renciada, y un debate ético desde la academia separata del presente número, con la presenta-
en general en la búsqueda de su excelencia, ción de su Nocturno Op. 20 para oboe y orquesta
que encuentra resonancia en nuestra cátedra de cuerdas.
universitaria. Cierra la sección de Música y Concluye la revista con un Análisis biblio-
10 pensamiento, el ensayo “Neurología y cognición métrico en la producción de trabajos de grado
musical”, de Ruth Nayibe Cárdenas Soler, doc- de Licenciatura en Música, a cargo de Andrea
torada de la Universidad de la Universidad de Hernández, asistente de investigación del Con-
Granada y docente de la Universidad Pedagógi- servatorio del Tolima, que busca reconocer las
ca y Tecnológica de Colombia, como un aporte tendencias de fuentes de consulta que soportan
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 |

desde la ciencia a la música en su dimensión la construcción de saberes desde las líneas de


educativa. investigación institucionales, articuladas a la
Como en el primer número, La sección producción académica de nuestros futuros li-
Música y cultura retoma la producción resultan- cenciados.
te de trabajos de investigación con estudiantes,
docentes y egresados de nuestra institución, a Humberto Galindo Palma
través de las líneas de música vernácula, y músi- Ibagué, noviembre de 2010
ca y pedagogía, presentando la historia de vida
11
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

In memoriam

In memoriam
El 20 de enero del presente año, Colombia entera se despidió de uno de sus más queridos y ab-
negados folcloristas nacionales: El maestro Guillermo Abadía Morales. Como testigo directo de la
memoria musical de esta nación, el maestro Abadía “caminó” por todos los senderos de la patria en
busca de las fuentes primarias y depositó en sus más de 25 obras, un relato que fue multiplicado en
las voces de las generaciones que le escucharon en su paso de toda la vida, pregonando que como co-
lombianos, es urgente parecernos cada vez más a lo que somos realmente. Para quienes le conocimos
de manera directa, su partida marcará una de las ausencias más profundas como el relator mayor del
folclor en Colombia. Queremos, entonces, desde este espacio, compartir con nuestros lectores, uno
de sus últimos testimonios, a su paso por las tierras del Tolima.

Guillermo Abadía Morales (1912- 2010)


In memoriam

Evocación del Tolima*


G.A.M

Para evocar las glorias del Tolima no es sufi- Gómez Medina, el coreógrafo Jacinto Jarami-
ciente rememorar las hazañas que narraban en llo, el poeta Emilio Rico y alguna vez con Ju-
el rincón de los niños (un poco antes del des- lio Fajardo y la historiadora Blanca Álvarez o
crito por Debussy) los abuelos Abadía Torrijos el inolvidable Misael Devia, nos reuníamos en
y Abadía Guerra divagando sobre los episodios algún cafetín que recibía nombres estrafalarios
bélicos del “compadre Tulio Varón” más valien- según el humor del día: Bar-tolomé, bar-basco,
te y condenao que el tigre salir al monte/ cuan- bar-atillo, bar-bosa, bar-celona. bar-quillo, bar-
do se come al ganao” como reza el galerón de becho bar-cino, bar-carola, bar-bera, bar-budo,
Darío Samper. y hasta el de comer, bar-gajo. Otra escapato-
Porque nosotros estamos en la capital mu- ria de esos viajes era a la plaza de mercado de
sical de Colombia y nuestra profesión de soció- Ibagué para buscar a una anciana de el Espi-
logos del desarrollo nos fuerza a referirnos a la nal, una ceramista genial que cada año creaba
cultura auditiva, producida por el arte de los una sola pieza magistral en arcilla coloreada:
sonidos antes que a la galaxia de Gutenberg, la Tiplera, La Aguatera, el Cazador, etc., que
ídolo de la publicidad, o a la ritmo-plástica o a causaban asombro a los conocedores en Bogo-
la antropología cultural Y así, no exactamente tá; la primera se la robó el pintor Rodríguez
a la sombra de los árboles del patio del Con- Acevedo, la segunda un gringo especialista en
servatorio, sino a otra sombra más emoliente porcelanas y la tercera desapareció tan miste-
y segura, la de la ceiba del Tolima que tiene el riosamente como la creadora de esas piezas úni-
nombre de Amina Melendro de Pulecio. Y así cas, sin duplicado posible, que resistirían com-
12 hablar con deleite y sosiego de esa hamadría de paración con las que hacía al otro lado del mar
que embalsama el oficio esencial de los bam- un señor, también sin duplicado que se llamó
bucos, guabinas y torbellinos bajo las manos Pablo Picasso. De las piezas de El Espinal solo
transparentes de Leonor Buenaventura de Va- quedan las viñetas reproducidas en la carátula
lencia, transparentes porque – como la mari- de mi Compendio de Folklore, cuarta edición.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 |

posa de Rivera- “pasan sin hacer sombra” sobre Pero volvamos a nuestra inspiradora e
el teclado. inspirada compositora. El dueto Néstor y Jor-
Mi primer recuerdo de Leonor data dese ge llevó a la grabación discográfica algunas de
antes de conocerla y a través de un poeta con sus mejores canciones, que en orden de nuestro
quien viajábamos a Ibagué por entonces. gusto serían: Ibaguereña, Novia del Sol Ibague-
Era Arturo Camacho Ramírez cuando reño, La Calentana, el Mohán y Qué linda que
escribía “Leonor Buenaventura, tú eres la más está la tarde. Don Juan Nepomuceno Buena-
cercana”. Como el poeta Camacho, el escultor ventura ya había soñado y una sinfonía de aves

* Palabras pronunciadas por el Maestro Guillermo Abadía Morales el 14 de octubre de 1986 en el homenaje a la compositora Leonor
Buenaventura de Valencia en el concierto Ibagué 436 años, sala Alberto Castilla
13
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

In memoriam

canoras que no pasó del ámbito literario. Leo- que como la “jauría de remordimientos”, que
nor, guiada por la línea de sangre paterna, si- decía Vallejo, nos hace confesar en homenajes
guió como el ave “tra-la-lí” que “cantaba en las las limitaciones de la admiración que impone
ramas del cerebro de Huidobro, produciendo la sociedad de consumo. Cruces de la Legión
pámpanos musicales cada vez más acendrados de Honor como la que le quitó al viejo Fabre
y embriagadores: su torbellino más reciente, la en la calleja de París un polizonte o guardacan-
guabina que llevó a su repertorio el conjunto tón por hallarle sentado en el suelo observan-
Canta-Tierra, y la guabina Ribereña que es, do unas hormigas y lo juzgó subversivo; cruces
como dijera mi maestro González, una perla de como las de Malta y Calatrava y Ullumbes, y
oro. Perla que recuerda las de Alberto Castilla, Mundos de oro que nos cuelgan cuando nos
Fulgencio García, Cantalicio Rojas, Patrocinio, descuidamos. Y la dulce cruz del matrimonio
Ortiz, José Ignacio Camacho Toscano o José que nosotros manejamos en modelo portátil y
María Rincón. sin cirineos. Y esa otra inmensa cruz, la más
Vino más tarde otro viaje y una velada famosa de la historia, la condecoración que le
inolvidable en la casa de Leonor con mi com- impuso a Cristo el imperio romano y que se-
pañero de trabajo de esos años, el maestro Jesús gún el poeta Luis Vidales “se enredó en ella y
Bermúdez Silva, antaño director del Conserva- se mató”. Y la Cruz del Sur que es la cruz de
torio de Ibagué. Noche como las de León de diamantes que le pusieron a la noche estrellada
Greiff en su Nocturno 13: “noches al amor de de Cartagena cuando el amor nos envolvió en
los sauzales macilentos/como en las consejas, sus redes de ensueño. Verdad? Marina. Y ahora
en las baladas y en los cuentos”. Saturada con vuelve el poeta – siempre los poetas, esa rémora
la alegría finísima de Norma e iluminada por la a la que según Platón en su República, debían
perenne luna de Leonor, sobria y discreta que coronar de laureles y enseguida desterrarlos-
nos hacía recordar al querido poeta Rafael Vás- vuelve el poeta de Luna de Arena con el final
quez; “Seduce en lo sobrio la belleza/ como en de su poema: “Leonor Buenaventura, última
los discreto la elegancia”. Y/ esa delicadeza lu- lágrima”.
nar hizo decir al viejo Bermúdez Silva cuando
ella se casó con Gonzalo Valencia: “ahora sí nos Guillermo Abadía Morales
quedamos a la luna de Valencia”. Octubre 14 de 1986
Y aquí viene la exigencia del protocolo
Música y pensamiento
17
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

Memorias documentales del sonido inédito:


algunos aspectos técnicos, documentales y
jurídicos*
Jaime Quevedo Urrea**
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. La memoria inédita sonora está representada por todo conocimiento que no ha sido difundido
ni producido por la industria editorial, fonográfica y/o audiovisual haciendo parte de prácticas culturales
específicas generalmente de tradición oral. El artículo expone, mediante ejemplos del patrimonio sonoro
inédito del Centro de Documentación Musical, los diferentes procesos y criterios de identificación de
materiales sonoros disponibles para realizar catalogaciones y bases de datos. Plantea criterios para el levan-
tamiento de información técnica con un interés investigativo basado en dichos materiales, y hace énfasis en
la necesidad de incorporar la tecnología para la actualización y análisis de archivos sonoros, tarea en la que
viene trabajando el Centro de Documentación Musical. En la última parte se exponen algunas perspectivas
de orden jurídico y técnico que deben observarse como políticas de ética, en consideración al debido proce-
so de protección de los derechos de autor sobre el material documental sonoro que es registrado o dado en
depósito en colecciones de uso público.

Palabras Clave: memoria inédita- documento sonoro – condiciones técnicas y jurídicas de registro y uso-
bases de datos y análisis de documentos sonoros - Centro de Documentación Musical.

Abstract. Unpublished sound memory is represented by all knowledge that has not been released or pro-
duced by the publishing, phonographic and / or audio industry, being part of specific cultural practices,
generally oral tradition. The article describes, with examples of unedited sound heritage of the Musical
Documentation Centre, the different processes and criteria for identification of audio material available for

* Texto de la Ponencia presentada por el autor en el VI Congreso Nacional de la Música convocado por el Conservatorio del Tolima en junio
de 2008
** Esp. Director del Centro de Documentación – Biblioteca Nacional- Ministerio de Cultura. jquevedo@mincultura.gov.co
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

catalogues and databases. It proposes criteria to build up technical information with research interests based
on those materials, and emphasizes the need to incorporate the technology for updating and the analysis of
sound files, a task that has been carried out by the Musical Documentation Center. In the last part, some
legal and technical perspectives have to be seen as ethical policies in regard to due process protection of
copyright on sound documentary material that is recorded or given in trust for public use collections.

Key words: Unpublished report, document sound - technical and legal conditions of registration and use
- data-bases and analysis of sound recordings - Musical Documentation Center

¿Que es La memoria inédita? que poseemos y que recibe un Centro de Do-


En primer lugar se plantea un ejercicio de con- cumentación, se encuentran en cintas magné-
ceptualización para tratar de establecer un al- ticas, discos gramofónicos o de reproducción
cance y de enmarcar los contenidos de su inte- de sonido de grabación mecánica analógica 16
rés. La memoria inédita está representada por (ó 16 2/3) R.P.M., 33 (ó 33 1/3) R.P.M., 45
todo conocimiento y/o saber que no ha sido R.P.M. y 78 (ó 78 4/5) R.P.M. y en diámetros
difundido ni producido por la industria edito- de 7, 10 y 12 pulgadas. Casetes de 30’ 60’ y 90’,
rial, fonográfica y/o audiovisual y hace parte de eventualmente rollos de piano, DATs, PCM y
prácticas culturales específicas, en algunos ca- Discos Compactos. Principalmente son docu-
sos hace parte de un imaginario colectivo gene- mentos de campo, radiales, grabaciones docu-
ralmente de tradición oral. Puede ser de origen mentales editadas y sin editar, y producciones
individual o colectivo, no se ha establecido a fonográficas.
partir de definiciones temporales ni espaciales
que delimiten su origen geofísico aunque se ¿Que caracteriza al material sonoro
18 reconoce su presencia y proceso de expansión inédito?
en el tiempo. También proviene de prácticas y • Cada documento es único.
tradiciones culturales originadas en la academia • Son ejemplares únicos, la única graba-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

que no han sido editorializadas y como conse- ción de la cual solo hay un ejemplar. Es
cuencia permanecen ocultas.1 posible que de éste, solo se haya con-
El presente artículo se limita al patrimo- servado una reproducción. El ejemplar
nio sonoro inédito, por encontrar en él la ma- único no necesariamente es un original.
yor fuente de información oral acumulada des- • Son inéditos como documentos que no
de que se inventó el fonógrafo. Los soportes en se han publicado y su producción no
los que se encuentran los documentos sonoros obedece a especificaciones técnicas que
se han construido en consenso entre fa-
1 En la definición de Patrimonio Cultural de la UNESCO se en-
cuentran incluidas como rasgos de identidad: “Conjunto de bienes, bricantes, consumidores, laboratorios,
muebles e inmuebles, materiales e inmateriales, de propiedad de par-
ticulares, de instituciones y organismos públicos o semipúblicos, de la centros de investigación entre otros ac-
Iglesia y de la Nación, que tengan un valor excepcional desde el punto tores de la cadena productiva, basados
de vista de la historia, del arte y de la ciencia, de la cultura en suma, y
que por lo tanto sean dignos de ser conservados por las naciones y pue- en la experiencia y del desarrollo tec-
blos conocidos por la población, a través de las generaciones como rasgos
permanentes de su identidad (Dr. Edwin R. Harvey) UNESCO” nológico, sometidos a evaluaciones y
19
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

cuyo resultado es el reconocimiento de ellos es evidente el conjunto de rasgos que ca-


un Organismo de Normalización reco- racterizan el tipo de materiales y contenidos de
nocido. Por las razones expuestas, estos este tipo de documentos.
documentos mantienen, en este sentido,
su carácter inédito, así sean conocidos y Ejemplo: Cinta de audio 1
se hayan interpretado y difundido por Cinta magnetofónica de la colección de audio
algún medio (emisión radial, estreno en del fondo Guillermo Abadía Morales. Toma-
concierto, fijación y reproducción es- mos la cinta identificada con el código COL
pontánea en una grabación de campo), Bog 25P como “Música folklórica de la costa
fijados en dispositivos que contienen la pacífica colombiana”. Grabación realizada en
información registrada y que no se han el departamento del Chocó por la Universidad
producido a escala industrial. Nacional. Seleccionamos la pieza N° 9 cuyo
• Carecen de información técnica docu- título asignó el investigador como “Música ins-
mental externa al contenido. trumentada”, con la información “Ejecutantes:
• La comprensión de su información re- Caja y dos clarinetes”, “Compositor: Chocó”, con
quiere conocimiento y competencias una duración de Tiempo: 0’55’’. El número
específicas. asignado en el sticker de la caja (COL Bog 25P)
• La lectura de su información depende no coincide con el número original impuesto
de máquinas apropiadas a las tecnolo- en la caja numerada con el número (40), que,
gías que fijaron la información. parece corresponder a una catalogación pos-
• Son fijaciones sonoras y/o audiovisuales terior y general no regulada por estándares de
de campo en primera generación. clasificación o inventario.
• Se conservan como originales como
primera fijación sonora de la expresión, CINTA N° COL Bog 25P
es el primer registro fijado en cualquier MÚSICA FOLKLÓRICA DE LA COSTA PACÍFICA
dispositivo. Las reproducciones que se COLOMBIANA
generen de éste, serán reproducciones Grabación realizada en el Departamento del Chocó por la
de segunda, tercera o cuarta etc., gene- Universidad Nacional
ración. Pieza N° 9 de la cinta
Los materiales que se poseen en los cen- Título: MÚSICA INSTRUMENTAL
tros de documentación musical exponen el tipo Ejecutantes: Caja y dos clarinetes
de dificultades a las que se enfrentan, cuando Compositor: Chocó
se van a clasificar, identificar y describir sus Tiempo: 0’55’’
contenidos. Los ejemplos presentados a conti-
nuación ilustran sobre dichas dificultades y han En realidad se trata de una pieza ubicada en el
sido seleccionados de la colección de documen- número 9 de la secuencia de grabaciones en la
tos del Fondo Guillermo Abadía Morales que re- cinta, clasificada por el investigador mediante
posa en el Centro de Documentación Musical locución al iniciar la cinta como: “Música fo-
de la Biblioteca Nacional de Colombia, y en lklórica de la costa pacífica colombiana”, pieza
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

que no está identificada con un título espe- fecha de la grabación, tres títulos y los nombres
cífico, pero que el investigador tituló como de los integrantes del conjunto musical.
“Música instrumentada” interpretada por dos
ejecutantes de chirimía y un tambor, en cuya Donación de J.O. ÁLVAREZ, octubre 16 de 1978
interpretación incluyen fragmentos de distintas
piezas, entre ellas una aproximación melódica Velocidad: 15 IPS
que cita el Bunde tolimense. Al no identificar un CONJUNTO DE DANZAS FOLKLÓRICAS DE AR-
autor, el investigador asigna su creación al ám- MERO (Tolima)
bito territorial del departamento “Compositor:
Chocó” tal vez con la intención de asignar su Grabación: Estudio de la Radio Nacional.
expresión a una tradición colectiva de la región. Técnico: Rubén Darío Godoy M.

Noviembre 6 / 77
1. Los Monos
2. La Caña
3. Tierra Caliente (Coplas Rajaleña)

INTEGRANTES:
Tiple y canto: Juan de Dios Gallón
Guitarra acompañante: Alejandro Rondón
Guitarra puntera: Gregorio Martínez
Tambora: Jaime Roa
Chucho: Alejandro Chávez
Chucho: Alejandro Bustos
20
Voz: Norma María Amazo

Esta cinta se encuentra en el contenedor original de cartón de la em-


Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

presa productora de la cinta. Para la descripción de esta pieza, se cuenta


con la información registrada en la caja, y una hoja incluida en papel,
copia de un mecanuscrito reproducido con papel carbón que contiene La información incluida sin embargo
la información descrita.
no precisa claramente el contenido musical y
de la danza. Se refiere en realidad a una graba-
Ejemplo: Cinta de audio 2 ción de tres piezas interpretadas por el conjunto
Es una cinta que hace parte de la colección de musical que acompaña las danzas. Información
Guillermo Abadía Morales que no está identi- que no está especificada y que requiere de un
ficada con algún número o código, etiquetada conocimiento específico que permita precisar
con la descripción “Danzas Folclóricas de Ar- la información a partir de la audición de la cin-
mero”. La descripción del contenido reseña el ta. El contenido de la cinta no tendría el valor
origen de la cinta, la velocidad de grabación, que hoy se le asigna, si no fuera porque la po-
el grupo dancístico, el lugar donde se realizó la blación de Armero desapareció con la tragedia
grabación, el técnico que operó los equipos, la
21
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

del año 1985 y porque sus integrantes también Para el ejemplo tomamos la pieza número
desaparecieron. 7 de la secuencia de grabaciones que registra
una “Guabina Veleña”. Se trata de un torbelli-
no interpretado con tiple, guitarra, requinto y
carraca, en el que se incluye una canta con voz
primera femenina y una segunda masculina.
Lo interesante de este ejemplo musical radica
en que el torbellino no se suspende mientras se
realiza la canta, el torbellino acompaña la can-
ta, todas estas particularidades que no se docu-
mentan en ninguna ficha técnica o de registro
con información específica del registro, sólo se
podría reseñar a partir de una audición califica-
da. Probablemente podría tratarse de una copia
de varias grabaciones que haya hecho el maes-
tro Abadía que condensó en esta cinta, y que
utilizaba en sus clases a modo de ilustración.
Esta es una cinta que se encuentra contenida en una caja circular de
acetato en la cual se incluyó un fragmento de papel mecanuscrito que La descripción del contenido es muy compleja
contiene la información descrita.
porque no disponemos prácticamente de nin-
gún dato de campo (intérpretes, instrumentos,
Ejemplo cinta de audio 3 título de la pieza, autores, lugar y fecha de gra-
Esta también es una cinta del mismo fondo de bación, derechos, entre otros), ni del origen de
audio que no está identificada con algún nú- la cinta, ni de información técnica tanto del re-
mero o código. En su interior en un fragmento gistro como de la eventual copia, tampoco de
de cartulina con el título subrayado Clases N° las condiciones de uso desde el momento en
27, en el que se incluye un listado con una se- que se adquirió del fondo.
cuencia numérica que supone la duración de
cada pieza seguida de una expresión que iden- CINTA N. 27
tifica el género musical de cada ejemplo. Al Breves ejemplos para música folclórica de las 4 zonas
reproducir la cinta, el investigador le asigna el Pieza N° 7 de la cinta - Guabina Veleña
título al contenido de la cinta con una locución
que dice: “Breves ejemplos para música folclórica
de las cuatro zonas”
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

La cinta se encuentra incluida en el conte-


nedor original de cartón de la empresa produc-
tora de la cinta en cuyo interior se encuentra el
fragmento de cartulina escrito por las dos caras.
Dado que, como lo ilustran los ejemplos,
esta es una situación que se repite prácticamen-
te en cada soporte con mayores o menores di-
ficultades, a continuación se presenta una In-
formación técnica documental básica que en
todo registro de campo debe tenerse en cuenta,
con los propósitos del análisis la conservación
y la difusión En ella se consigna la información
más importante de cada registro un formato
basado en la información incluida en la Guía
de Análisis Documental del sonido inédito para
la elaboración de bases de datos2 (Bonnemason
et. al, 2001)

2 Guía Análisis documental del sonido inédito para la organización


de bases de datos”, Bénédicte BONNEMASON Véronique GI-
NOUVÈS, Véronique PÉRENNOU 2001 Francia. Versión tradu-
cida por Gloria Figueroa Correa, adaptación y actualización 2007.
Proyecto coordinado y desarrollado con participación de entidades
documentales en Francia, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia, por
el Centro de Documentación de la Biblioteca Nacional de Colom-
bia bajo la dirección de Jaime Humberto Quevedo Urrea.
22

Ficha Técnica documental básica para registros de campo


Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

1. Identificación
Número Referencia del documento
2. Consulta
Fecha del depósito y nombre del depositario 0: no consultable
Propietario(s) de los derechos 1: consultable bajo autorización
2: Consulta libre y copia bajo autorización
3: libre para la consulta y la copia
3. Designación
TIPO de documento:
Sonido inédito
Música - pieza vocal instrumental
23
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

Según la producción del sonido


Tipo de voz:
Voz de niño
Voz de hombre
Voz de mujer
Voces mixtas
Forma de la emisión
Cantado
Pregonado
Efecto de voz
Tarareo
Hablado
Relatado
Silbado
Leído
Forma y expresión musical
Vocal
Instrumental
Vocal e instrumental
Dúo
Trío
4. Autores – encuestadores – directores: Apellido, nombre (función)
• Encuestador(es) colector (es)
• Lugar de recolección o grabación
• Fecha de grabación
• Idioma del documento
• Autor del texto
• Autor de la música
• Intérpretes
5. Títulos
• Título
6. Descripción técnica
Descripción material original Características técnicas
- Banda magnética Tipo de sonido:
Estereofónico (stereo)
Monofónico
Duración del documento
XX Horas, XX Minutos y XX Segundos
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

Tipo de soportes
Original, copias de conservación, de consulta o de préstamo.
CALIDAD
Calidad técnica del documento original.
1 muy bueno
2 bueno
3 regular
4 malo
5 muy malo
7. Análisis
• Resumen y/o análisis
• Descriptores temáticos
• Descripción del ítem
• Aire musical
Contextualización
• Nombre de instrumentos interpretados, citados o evocados
• Clasificación organológica
• Nombre de danzas interpretadas, citadas o evocadas
• Observaciones sobre el texto
• Observaciones sobre las características musicales
8. Notas: Información adicional significativa del registro, no contenida en los ítems anteriores

24 Todos estos materiales ejemplificados an- gradables, en serio riesgo de deterioro y pérdi-
teriormente, registran información de hechos da, por el paso inevitable del tiempo, las con-
específicos de la vida diaria colectiva o indivi- diciones inadecuadas de almacenamiento, las
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

dual, que son absolutamente distintos de las amenazas ambientales, la brecha tecnológica, la
colecciones de materiales publicados por la in- falta de uso y/o el excesivo o el uso inadecuado.
dustria editorial, fonográfica y/o audiovisual, Este material en su inmensa mayoría carece de
y constituyen el tipo de material documental información sobre el tipo de uso permitido a
inédito que ocupa este escrito. Las colecciones su acceso o difusión, y en raras excepciones es
documentales son regularmente complemen- por lo menos confuso. A diferencia de los do-
tadas con diversos materiales editados (libros, cumentos en papel, los soportes en los cuales se
revistas, periódicos, enciclopedias, diccionarios encuentra esta información sonora provienen
etc.) de los que hay extensa experiencia técnica, de tecnologías análogas hoy en desuso. Depen-
de análisis documental y conservación en bi- de de máquinas apropiadas a las tecnologías
bliotecas y archivos. que fijaron la información, que lo descifren y
El sonido inédito, está conformado por nos permitan su reproducción y reconocimien-
un material contenido en soportes frágiles, de- to. La información contenida en ellos requie-
25
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

re para su recuperación y uso operaciones de panorama. Como consecuencia de este convul-


transferencia de información a tecnologías di- sionado movimiento de la tecnología y el co-
gitales, bajo parámetros técnicos que permitan mercio, se han transformado significativamen-
la recuperación y la seguridad de la informa- te los procesos de tratamiento documental, por
ción digitalizada, además de la disposición de ejemplo: la digitalización de registros análogos
la información de origen del registro en ejem- ha permitido un tratamiento innovador del
plares de seguridad y de servicio. sonido, pero ha puesto al descubierto la fragi-
La mayoría de estos documentos reposan lidad jurídica y la incertidumbre sobre qué y
en casas de habitación, almacenados general- cómo difundir, contenidos inéditos originados
mente en condiciones de riesgo, de coleccio- en trabajos de campo.
nistas, investigadores, periodistas, docentes, El análisis documental del sonido in-
entre otros, quienes originalmente realizaron édito con frecuencia requiere un proceso in-
los registros y/o la compilación. Estos soportes vestigativo. Es necesario comprender entonces
finalmente terminarán en las entidades docu- que hay una cadena de relaciones y procesos,
mentales, lamentablemente cuando el tiempo, en donde muchos actores intervienen en el tra-
el desuso, y en ocasiones el desinterés y el des- tamiento del documento sonoro inédito desde
cuido, ya hayan generado un progresivo e irre- su recolección hasta su difusión. Los documen-
parable deterioro. Esta información permitió a tos inéditos que son confiados a un centro de
sus poseedores un conocimiento pero sus inter- documentación adquieren una vida pública y
pretaciones no pudieron expandirse dado que ello implica toda la información relacionada
su acceso se limitó a sus ámbitos domésticos o con el documento sonoro. Esta documentación
de relaciones cercanas y las comunidades de es- aún sin estar procesada puede resultar particu-
pecialistas que podrían aportarle, complemen- larmente atractiva si se conoce el origen y sus
tarlo, enriquecerlo y proyectarlo en su momen- posibles contenidos. Hacer posible su acceso es
to no pudieron amplificar este conocimiento una tarea compleja que requiere la interacción
por las condiciones descritas. disciplinaria de especialistas y la indagación en
Es fundamental construir hábitos y sen- múltiples fuentes paralelas. Realizar el análisis
sibilizar sobre la importancia de las memorias técnico puede resultar complejo por el tipo de
radiales para que sus contenidos se preserven información de campo que acompaña el docu-
y proyecten como memoria de su paso por el mento o por la ausencia de la misma. Es por
paisaje sonoro que ocuparon a través de sus ello necesaria la interacción entre investigado-
épocas. res y analistas, con el fin de disponer los docu-
En los países andinos son relativamente mentos y sus repertorios al servicio con la más
recientes las prácticas documentales del sonido completa y fiable información.
y más aún, la preocupación por su recupera- La disposición pública de fuentes com-
ción y actualización. La evolución ligada a la piladas facilita el uso reiterado en atención
aparición de nuevas tecnologías, las continuas de múltiples intereses, resignificando sus dife-
innovaciones tecnológicas, y el avance inexora- rencias de enfoques y sentidos. Así, la entidad
ble del tiempo, han hecho más complejo este documental se constituye en un centro de me-
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

moria viva que puede ser aprovechada desde El desafío de la perspectiva


diferentes ángulos. El acceso y reutilización Es urgente apropiarse de procesos técnicos y do-
de documentos recolectados, sigue siendo una cumentales rigurosos desde la recolección hasta
fuente indispensable cualquiera que sea el tipo la digitalización, con el fin de crear un modelo
de interpretación que posteriormente se haga de registro y gestión documental que sirva de
de los mismos. referencia al tratamiento de los aspectos téc-
El papel fundamental del Centro de Do- nicos, documentales y de condiciones legales,
cumentación que posee este tipo de documen- que permita su recuperación y uso. La mayoría
tación es poner a disposición de todos, y en de los registros que se encuentran en las colec-
especial de las poblaciones observadas, los di- ciones documentales de los centros documen-
ferentes materiales y los resultados de sus pes- tales que las poseen, provienen de grabaciones
quisas, asegurando en sinergia un papel diná- en vivo que se realizaron en diferentes escena-
mico esencial: motivar la recolección, asegurar rios, de un heterogéneo formato y diversa pro-
la conservación, facilitar la investigación y el cedencia regional, que no se produjeron bajo
análisis, promover el repertorio y su práctica. estándares técnicos y que no tienen definidas
Como vimos, las prácticas de documen- sus condiciones de uso. Infortunadamente los
tación de campo que originaron la memoria materiales que son entregados a estos centros
documental que nos ocupa, no incluyeron he- o que se han producido por ellos, demuestran
rramientas técnicas que registraran con rigu- que las prácticas documentales son incomple-
rosidad toda la información relacionada con tas, carecen de información significativa para el
el proyecto que originó el registro o la compi- análisis documental y dificultan el acceso a los
lación documental, con el proceso mismo de documentos generados en cada proyecto. Para
registro tanto técnico como etnográfico. facilitar su acceso es necesario reconstruir las
26 La información compilada en cada proyec- informaciones de origen, rastrear las fuentes y
to: escrita, gráfica, visual y sonora, permanece restablecer las condiciones de uso de un patri-
en bruto, puede ser objeto de nuevas lecturas monio documental musical rico en contenido
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

e interpretaciones y puede potencialmente dar y volumen. Dada su magnitud, diversidad y


origen a múltiples proyectos en la medida en complejidad, es fundamental que sea desde su
que la comunidad de creadores, intérpretes, es- origen gestionado con los propósitos de la con-
tudiosos e investigadores accede a ellas, en tan- servación, tratamiento documental y difusión
to sea posible recoger en forma compleja múl- para que pueda ser conocido y valorado.
tiples etapas de búsqueda, orígenes e intereses Ocuparse de elaborar y adaptar herra-
incorporando a su análisis el aporte particular mientas técnicas, normativas y analíticas des-
de cada proceso. El acceso público de sus ha- tinadas a los documentos orales sobre los que
llazgos y sus conclusiones enriquece y fortalece no se tenía una experiencia de análisis y des-
múltiples motivaciones de investigación y co- cripción cualificada, constituye un aporte de-
nocimiento y favorecen la comprensión y valo- cisivo al reconocimiento y la valoración de la
ración de las memorias que hasta el momento memoria musical inédita. Casi la totalidad de
permanecían inéditas. documentos inéditos de la región que no han
27
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

sido objeto de tratamiento documental, ni han nes, saberes, formas representativas y simbóli-
sido objeto de proyectos editoriales, permane- cas, exige un código ético de respeto al posee-
cen depositados en condiciones de riesgo. Es dor de la expresión sobre el derecho de decidir
necesario por tanto establecer estándares con la disposición de los usos de los productos re-
base en experiencias concretas, apropiando he- sultantes de la fijación de sonidos e imágenes,
rramientas y técnicas que ayuden a ordenar los en un proceso de documentación y con una
procesos y sus resultados tanto para la conser- perspectiva futura. Investigación, servicio pú-
vación como para la disposición pública de la blico, producción, etc.3 (Quevedo, 2004)
información compilada. La transmisión oral sigue siendo la fuente
Es necesario abrir las perspectivas, com- de conocimiento expansión y apropiación de
plementar el conocimiento, prepararse desde las expresiones sonoras inéditas, mantiene vi-
cada disciplina y actuar con pensamiento coo- gentes y activos los saberes de mayor arraigo y
perativo para comprender la dimensión inter- tradición. La evidencia de esta dinámica reside
disciplinaria de la formación y de las prácticas en los documentos compilados en los que se
de la música en el S. XXI, para responder en encuentra fijada esta información. Es necesario
una sociedad del conocimiento que se va a con- realizar fijaciones de expresiones sonoras e imá-
solidar a través de objetos digitales y toda esta genes, aclarando previamente la intención de
información debemos incluirla allí. uso de los registros colectados. Estas fijaciones
En 2001 el CDM inició procesos de digi- realizadas por primera vez, generan derechos y
talización de información de audio, partituras títulos de propiedad a quien las fija amparado
e imágenes. A través de una experiencia de digi- por la legislación del derecho de autor como
talización de información con destino al árbol individuo. Es necesario constituir una forma-
de música biblioteca virtual y hoy se encuentra lidad mediante la cual se establece la autoriza-
publicado en http://www.lablaa.org/bvirtual_ ción previa, explicitando los posibles usos futu-
musica.htm ros de los documentos registrados delimitando
El CDM avanza en un proyecto propio los usos concedidos allí. Producción editorial,
con fines de preservación y difusión, y dispo- audiovisual, fonográfica e incluso el depósito
ne de información digitalizada con mayor se- en un centro documental con todos los posi-
guridad técnica y jurídica, mediante procesos bles usos requeridos allí.
sistemáticos. Estos procesos deben adelantarse Es idealmente deseable que exista un com-
con continuidad, son lentos, costosos y jurídi- promiso de retribución en el que sus primeros
camente complejos; requieren actualizaciones aportantes sean los primeros depositarios de los
permanentes, dada la velocidad de sustitución resultados del trabajo surgido del registro docu-
tecnológica y los cambios de formatos. mental, con fines de difusión de sus resultados,

Condiciones Técnicas y jurídicas 3 Quevedo, Jaime; apartes de la ponencia “PERTENECIA Y PRO-


de registro y depósito de materiales PIEDAD LA CREACIÓN COLECTIVA SIN DERECHOS, di-
mensiones jurídicas y éticas”, realizada en Colombia del 12 al 14
inéditos de mayo de 2004, durante el “Seminario sobre El estatuto Jurídico
de documentos audiovisuales etnográficos en los países andinos,
El registro de expresiones sonoras de creacio- Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia”.
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

sujeto a un procedimiento responsable y respe- que circula por estas redes. Las entidades do-
tuoso, que se pueda acceder a dicha retribución cumentales se encuentran con frecuencia con
legítimamente; que se conozca mediante pu- problemáticas ante la dificultad de identificar
blicaciones que circulen para que sus autores, los actores originales del registro y datos bási-
las comunidades o individuos y las expresiones cos asociados que puedan guiar al analista en la
registradas puedan ser valoradas y reconocidas descripción. Ello trae como consecuencia:
como testimonio, sin que el costo de la inten- - la carencia de la respuesta de las enti-
ción lesione en forma grave sus derechos, los dades, o actuales interlocutores de la expresión,
intereses de las personas y entidades objeto del que no encuentran mérito a las peticiones para
proceso de compilación documental. gestionar una autorización de uso de los mate-
Es necesario construir un generoso hábito riales registrados o, consideran que su material
ético, en el que las entidades gestionan las for- goza de un alto prestigio y por tanto de gran
malidades que la consulta previa y el reconoci- valía económica y que este interés puede susci-
miento de los derechos individuales requiere, tar una provechosa negociación. En ocasiones
cuando se realiza un trabajo de campo como lo surge una reacción económica desbordada ante
es el registro documental en vivo, la recolección el interés manifiesto.
de información, gestión y realización, de mane- - Con frecuencia, las entidades, los inves-
ra que, al entregar estos documentos a una en- tigadores y docentes encuentran serias dificul-
tidad o colección específica, se disponga de las tades cuando se interesan en utilizar los mate-
garantías básicas para transferir esos documen- riales audiovisuales con fines de investigación,
tos y los derechos requeridos por los receptores educativos y de difusión, por las limitaciones
en el momento del depósito, permitiendo el de acceso, por conservación o por derechos de
máximo acceso. De otra parte es necesario pro- uso no explícitos, o por la barrera interpuesta
28 mover una cultura en la que los creadores y las de los poseedores que reclaman sus derechos
entidades depositarias reconozcan la necesidad sobre la fijación impidiendo el acceso incluso a
de gestionar, con el rigor requerido, los dere- los aportantes originarios de la información.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30

chos en su concepción compleja especialmente - En los países andinos no es fácil iden-


para concertar usos de información inédita, fi- tificar las obras y/o expresiones que se encuen-
jación en vivo e intenciones de uso. tran en el dominio público.
En el mundo globalizado, el potencial del Para avanzar en los propósitos de la inves-
Internet de diseminar la información rápida y tigación, el acceso y la difusión se proponen
extensamente, plantea nuevas condiciones ju- las siguientes recomendaciones que adicio-
rídicas sociales, ante la producción y edición nalmente recogen avances puestos en práctica
de documentos que requieren un ágil trámite en Colombia y planteados por el investigador
de autorización de uso de los documentos, con Anthony Seegaer (2001):
una urgencia que no han tenido antes. Esta si- Se sugiere definir un instrumento con
tuación cambia radicalmente las nociones de fuerza jurídica cuando la gestión sea posible
tiempo y espacio convirtiendo rápidamente por la vía del derecho de autor “minuta de au-
en objeto de valor y consumo la información torización de uso”, “consulta previa”, “concer-
29
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

tación de consentimiento con uso controlado sobre su utilización. Así, el acceso a la colec-
por autoridades comunitarias” entre otras for- ción, el uso de tecnologías y procesos para su
malidades, más aquellas que se surgieren en una conservación y su divulgación podrá realizarse
concertación basada en el respeto en el que se sin riesgo legal para las partes. Es sumamente
prevean los propósitos que interesan al conoci- importante que se establezcan períodos de ac-
miento, la investigación, el acceso, la difusión y tualización y renovación de las condiciones de
la preservación; de manera que el colector pue- depósito ya sea para levantar las restricciones,
da realizar la transferencia de la autorización a actualizar procesos de preservación o para mo-
las entidades depositarias, para que se puedan dificar las condiciones iniciales de acuerdo con
realizar los tratamientos documentales y las fi- las variables presentadas y el interés manifiesto
jaciones técnicas de preservación, con el fin de en los documentos depositados.
poner al alcance bajo condiciones específicas En este proceso se ponen en juego có-
establecidas, el acceso. Este documento puede, digos éticos de Responsabilidad y Confianza en
en razón de interés cultural, pedagógico e in- la manifestación de voluntades e intereses, de
vestigativo, conceder una limitada autorización quienes conceden y quienes reciben la conce-
de uso que no persiga fines de lucro o lesione sión, de manera que sea posible conocer y co-
la integridad o autenticidad del contenido de la nocernos sin arriesgar nuestras disposiciones de
expresión. Los intérpretes, creadores o actores voluntad y respeto.
de la expresión, los colectores, técnicos, etc.,
deben conocer los límites de su dominio para Fuentes documentales
poder conceder autorizaciones de uso, transfe- Bonnemason, B. ; Ginouvès, V.; Pérennou V. (2001)
rir derechos al colector, para que éste a su vez, Guía Análisis documental del sonido inédito para
pueda documentar, depositar, divulgar y even- la organización de bases de datos”, Francia. Ver-
tualmente editar y publicar el contenido. sión traducida por Gloria Figueroa Correa, adap-
El colector gestiona las autorizaciones tación y actualizaciónón (2007). Proyecto coordi-
de uso con el fin de obtener los derechos ne- nado y desarrollado con participación de entidades
cesarios para diferentes usos: la investigación, documentales en Francia, Bolivia, Perú, Ecuador y
el depósito en un centro documental, la con- Colombia, por el Centro de Documentación de la
sulta, la preservación y/o la divulgación. Estas Biblioteca Nacional de Colombia bajo la dirección
condiciones deben convenirse en el proceso de de Jaime Humberto Quevedo Urrea.
recolección, intentar realizarlo posteriormente Biblioteca y patrimonio musical sociedad: Memorias del
es más difícil. Él, debe ser conocedor de los de- Segundo Coloquio Colombo-francés de Biblio-
rechos que le son concedidos identificando la tecas Públicas Bogotá, “En el marco de la XVII
pertenencia de quien se los concede. Feria Internacional del Libro de Bogotá y del mes
Definidas y tramitadas las formalidades de Francia”
sobre usos y derechos, las entidades deposita- Fondos documentales de la colección de audio del Cen-
rias reciben los materiales de los colectores, con tro de Documentación Musical. Biblioteca Nacio-
la documentación que describe los términos nal. Bogotá.
concedidos que le permiten tomar decisiones Memorias del Primer encuentro Nacional de Centros
Memorias documentales del sonido inédito: algunos aspectos técnicos, documentales y jurídicos*

de Documentación Musical Diciembre 12 al 14 Collections [Virginia Danielson, Elizabeth Cohen


de 1996 conferencia del Doctor Ricardo Nemo- and Anthony Seeger, contributors], Council on
gá –Dimensiones jurídicas y éticas del Derecho de Library and Information Resources, May 2001.
autor. Documento inédito. Quevedo, J. (2005).Embajada de Francia en Colombia:
Memorias Cuarto encuentro Nacional de Centros de Ministerio de Cultura, Biblioteca Nacional de Co-
Documentación Musical Octubre 27 al 29 de lombia, Ponencia “Derechos de autor en el ámbito
2006 La documentación musical en Colombia. del patrimonio musical”, Autor conferencia.
Documento inédito Quevedo, J. (2004) Ponencia “Pertenencia y propiedad
Ley 23 de 1982. Sobre derecho de Autor la creación colectiva sin derechos, dimensiones ju-
Protección del folclore: Consulta regional UNESCO/ rídicas y éticas” en el Seminario sobre el estatuto
OMPI sobre la salvaguardia de la cultura tradicio- jurídico de documentos audiovisuales etnográficos
nal y popular 28-02 -2002 en los países Andinos Colombia, Perú, Bolivia y
Protección del Patrimonio de los Pueblos Indígenas - Gi- Ecuador - ICANH - Bogotá, Mayo 12, 13
nebra UNESCO/OMPI Consulta regional sobre la protección
Erica-Irene A. Daes Relatora Especial de la Subcomisión de las expresiones del folclore en África, Pretoria
de Prevención de Discriminaciones y Protección a 23-25 de marzo de 1999
las Minorías
Presidenta del Grupo de Trabajo sobre Poblaciones In- Documento en línea
dígenas Página del comité CASAE mayor información y amplia-
Seeger A. (2001) Folk Heritage Collections in Crisis. In- ción www.casae.org
tellectual Property and Audiovisual Archives and

30
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 17 - 30
31
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia


de educación no formal para las músicas
regionales*
Jorge Sossa Santos**
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. Con la presente reflexión se propone hacer un trazado de orden conceptual y de modos de inter-
vención pedagógica que caracterizan nuevas maneras de hacer pedagógico; se señalan nuevas posibilidades
de pensar e intervenir las músicas regionales que se consideran parte de una categoría más englobante: las
denominadas Músicas Caribeiberoamericanas. Se habla de los enfoques convencionales de la educación
musical, con sus rasgos de centralidad, jerarquías y linealidad y se proponen aproximaciones de lo que se
denomina paradigma estético. Desde conceptos como rizoma y pedagogía del acontecimiento se muestran
maneras inéditas de abordar la formación musical desde la perspectiva de la educación para el trabajo y el
desarrollo humano, en contraste con las miradas canónicas propias de la educación formal de corte acadé-
mico.

Palabras Clave: Rizoma, acontecimiento, músicas CIAM (Caribeiberoamericanas), mediación, literalidad-


oralidad

Abstract. With this reflection it is proposed the construction of a conceptual and pedagogical path with
intervention modes that characterize new ways of pedagogical work, identifies new opportunities to think
and act in regional music that are considered part of a more encompassing category: the so-called Caribei-
beroamericana Music. It talks about conventional approaches to musical education, with its qualities of
centrality, hierarchy and linearity and proposed approaches the so-called aesthetic paradigm. Since concepts
such as rhizome and pedagogy from the event will show ways to deal with unprecedented musical training

* Texto de la Ponencia presentada por el autor en el IV Congreso Nacional de Música. Etnomusicología- ciencia y patrimonio. Conservatorio
del Tolima junio de 2008
** Jorge Sossa Santos. Administrador público y pedagogo musical. Director de la Escuela de Formación Musical Nueva Cultura. corporacion@
escuelanuevacultura.edu.co
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

from the perspective of education for work and human development, in contrast to the canonical looks
proper of formal academic education.

Key words: Rhizome, event, music CIAM (Caribeiberoamericanas), mediation, literal-oral

Pero los alquimistas de los sonidos, los músicos, en sus prácticas reales suenan y al hacerlo sueñan,
reinventan el mundo, nos abren a nuevos horizontes, a nuevos misterios.
Eliécer Arenas

...como una cierta calidad de presencia que moviliza en nosotros la voluntad y el coraje de expresar, no
solo en el habla, sino en la acción, la singularidad de nuestra propia existencia.
Suely Rolnik

La creación, las ideas, no están en la mente sino en la acción y experimentación, emergen con ellas. La
acción piensa.
Javier Gil

Este artículo se propone compartir plantea- corrido planteado se hará referencia a la norma-
mientos básicos, mecanismos y modos de ope- tividad que sobre la Educación para el trabajo y
rar que la Escuela de Formación Musical Nueva el desarrollo humano, antes llamada Educación
Cultura1 ha venido construyendo a partir de sus No Formal, se ha venido planteando en el país.
trayectos y recorridos. Se suscitan igualmente, Al abordar de manera crítica lo mencio-
algunas inquietudes sobre aspectos que deman- nado en el decreto 2888 de 2007 y las normas
32 dan profundizaciones importantes de parte de que a partir de él se han derivado, se muestra
la comunidad que se mueve en torno a la edu- cómo es necesario que el Ministerio de Educa-
cación artística. Se considera que el campo de ción se pronuncie sobre una resolución, y acote
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

la ciencia tiene su ámbito y su estatuto, y que lo específico de la educación artística. En ese


la música debe concitar las problematizaciones contexto, el artículo plantea, desde la mirada
propuestas, desde un nuevo paradigma, el pa- de la sociedad civil musical, la necesidad de se-
radigma estético. guir conceptualizando sobre la educación mu-
Las actividades de formación que realiza sical en el país de manera crítica, documentada
una entidad cultural como la Escuela de For- y responsable.
mación Musical Nueva Cultura generan com-
promisos éticos y políticos, si asumimos que la La formación musical de los niños y
educación es un bien público. Por eso en el re- las niñas o la música como práctica
cultural
Ya es amplia la comunidad musical que se aglu-
1 Nueva Cultura es una escuela pionera de formación musical con
más de 20 años de existencia en Colombia, fundada en el fomen- tina en torno a las escuelas de música en el país.
to de la educación en torno a las músicas caribeiberoamericanas
(CIAM) Para la Escuela de Formación Musical Nueva
33
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Cultura, como parte de este movimiento, se trabajo y el de la acción. Lo que nos permite
hace urgente profundizar las políticas públicas preguntarnos ¿qué escuela buscamos? ¿Aquella
que orientan la formación de niñas, niños y jó- que se inscribe en el ámbito del trabajo donde
venes. Es el momento de repensar el sentido todo está definido, debidamente planeado, pre-
de la formación musical desde una perspectiva determinado, controlado? ¿O una escuela que,
flexible, experimentadora, para asumir objetos inscrita en el ámbito de la acción, dé lugar a la
de estudio y procesos de configuración de la experimentación, a la búsqueda, a la expresión
subjetividad que se derivan de acciones musi- de la vida, al fluir del goce, del disfrute, a la
cales y pedagógicas cuando trabajamos para los manifestación de fuerza colectiva de afectar y
niños y las niñas. Se tratará de habilitar la expe- ser afectado?
riencia como lugar de la infancia, asumiéndola Siendo la acción el ámbito donde se esce-
como potencia, como voluntad de asombro y nifican los elementos políticos y se manifiesta
como disposición a la experimentación. La in- la vida de los hombres, habría que repensar un
fancia así considerada no es el vacío a llenar, el tipo de educación musical diferente ya que, en
espacio a corregir; distantes de una concepción nuestro contexto, ésta parece inscribirse más en
del infante como carente, que espera una ver- el ámbito del trabajo. Deberíamos pensar una
dad que lo complete, la formación musical que escuela que esté en consonancia con la fiesta,
proponemos apuesta por la construcción de un con el goce y con el disfrute. En últimas, pensar
mundo infantil que llene de sentidos la cons- una escuela que exprese las tensiones de las mú-
trucción de cuerpos sensibles y subjetividades sicas y la sociedad, donde se manifieste la vida
dispuestas al mundo de los sonidos, de los colo- en todas sus dimensiones. Se recuperará así el
res, de las texturas, en últimas de la vida. sentido profundamente político de la comu-
La infancia no es carente sino abundante, nidad y se asumirá el sentido plural del taller
nos dice Javier Gil (2007); es abierta y está dis- en tanto espacio de la experimentación y de la
puesta a lo nuevo. Lo infante es expresión de la potencia colectiva. Una escuela que dé curso a
levedad, manifestación de un mundo en el que la experiencia y que relativice el papel y peso de
el niño piensa lo no pensable, estando proclive la teoría y de los discursos. Un espacio forma-
a la experiencia. Con todo, la escuela de for- tivo que recupere la experiencia y el sentido de
mación musical de las niñas y los niños debe la práctica, constituyéndose en posibilidad de
ser el tiempo-espacio de lo nuevo, universo del movilizar, de problematizar, de inquietar.
riesgo, de la fiesta, del cambio. De allí el reto En el contexto de las prácticas formativas
de pensar el sentido y dimensión de las escuelas en músicas de base campesina, la academia ha
de formación musical que toman como base las asumido, respecto de las músicas tradicionales,
músicas regionales y lo hacen dentro del ám- una mirada distante del ámbito de la acción
bito de lo que se ha llamado la educación no para, de manera en muchos casos arrogante, si-
formal. Buscando referentes hemos encontra- tuarse en el ámbito del trabajo. Es aquí donde
do a Hannah Arendt, cuando en su texto La la aproximación a la música práctica y al músico
Condición Humana (1996) distingue tres ám- práctico se hace imprescindible.
bitos del hacer humano: el de la labor, el del ...los programas formativos que toman como base
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

las músicas populares y tradicionales, se han visto para la práctica, en función de, para y desde las
y se siguen viendo cuestionados por representan- prácticas musicales y sus necesidades”. (Arenas,
tes de la academia letrada del país, o por quienes, sf. p.3)
ubicados en lugares de poder, comparten más o La investigación de prácticas musicales vi-
menos acríticamente dicha lógica, o se alinean con vas enfrenta al estudioso
ellas por razones diversas. (Arenas, sf. p.1) ...a problemas valorativos, a su propia ignoran-
cia. A fuentes diversas y vivas que muchas veces
Es claro que los rasgos del sistema acadé- lo confunden (...) porque no son documentos pa-
mico tradicional hacen parte del ámbito del sivos sino sistemas de relaciones humanas, textos
trabajo y éste hace parte de la racionalidad cien- móviles donde hay historia, poder, diversidad, y
tífico-técnica. No es de otra manera manifiesta sobre todo, donde el investigador se ve abocado
su característica de aproximación al universalis- a la necesidad de mirar el presente y salir del es-
mo, objetivismo, sistematización, ordenamien- trecho marco de la búsqueda solitaria de papeles
to jerárquico y propuesta programática lineal y amarillentos para enfrentar la tarea de conocer las
rígida. Por eso, las músicas tradicionales inscri- músicas con las que gentes vivas, en contextos vi-
tas en el mundo de la acción y de la vida don- vos, enfrentan los retos de la contemporaneidad.
de fluye el deseo, el goce, la fiesta, la parranda, (Arenas, sf. p.5)
aparecen distantes de ser consideradas objeto
de estudio serio, por tanto alejadas de la “alta” La riqueza de la acción, ámbito donde flu-
cultura. Cuando le hacen una concesión, confi- ye la vida, como lo dijera Arendt, nos muestra
nan estas prácticas a la ideología romántica del la proliferación inagotable de variantes sonoras.
folclor. Y Arenas lo reitera cuando enuncia que Por esa razón no es posible pensar la existen-
...la idoneidad de las propuestas de educación ba- cia de un solo bambuco, de una única manera
34 sadas en músicas populares tradicionales ha sido de tocar un tambor de bullerengue, ni en una
puesta en cuestión presuntamente por detenerse en única forma de acompañar rítmicamente una
el detalle, apuntar a las diferencias en detrimento música tradicional viva, manifestación siempre
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

de los universales, por carecer de sistematización, cambiante de esquemas aprendidos por tradi-
por no tener aval de comunidades internacionales, ción oral, versiones legitimadas en la práctica
por no ser propuestas contrastadas con la práctica por complejas y diversas relaciones sociocultu-
académica y, todas ellas sumadas, por algo que se rales. Así como un mapa no es un territorio,
puede decir en una sola frase, aunque casi nunca el código gráfico de la música —generalmen-
se diga de frente: por carecer de rigor académico. te referido al pentagrama— no agota el rito
(Arenas, sf. p.2) de su actualización. El verdadero territorio de
la música es el de su reinvención. Citando a
Entonces, entre la aproximación acade- Hennión, Arenas nos dice que “...la música se
micista y la aproximación desde el hacer vivo fundamenta en su práctica (...) porque sin ella
de las prácticas musicales se evidencia una im- no existe. No existen museos de música porque
portante diferencia: investigar para ampliar los no hay nada que guardar: la música se hace y se
marcos de referencia disciplinares o “investigar rehace o se muere. (p.16)
35
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Si asumimos las escuelas de formación musical gresivamente, pues privilegiamos los elementos
dentro del ámbito de lo no formal tendrá mucho expresivos y significativos de lo musical como
sentido reivindicar el “sentido práctico” e impug- parte del universo artístico.
nar el sentido común académico con su erudición Hablamos de músicas Caribe-Iberoamericanas
y con su desprecio por las prácticas reales proclive para referirnos a las que, como producto de pro-
a la asepsia de las prácticas de escritorio. Y de otra cesos complejos de hibridación cultural, se han
parte mostrar la violencia simbólica y la violencia cristalizado y configurado en el territorio de lo que
epistémica que, como expresión del colonialismo comúnmente se ha llamado América. Lo caribe-
tanto económico como político, creó un imagina- iberoamericano busca trascender las taxonomías
rio que no solo sirvió para legitimar el dominio tradicionales de las denominadas “músicas latinoa-
económico sino también para producir los mode- mericanas” (Sossa, 2000).
los simbólicos necesarios para aceitar esa situación
colonial. “Se configuró así una pedagogización No pesa en esta aproximación el criterio
agenciada por instituciones, discursos, constitu- de área geográfica como sí el de las dinámicas
ciones, leyes, códigos, planes de estudio, proyectos culturales, los procesos de transformación y
de investigación, gramáticas del buen decir”. (Gil, refuncionalización entre formas y estructuras
2007. p. 9) musicales que se han venido gestando en el es-
pacio y el tiempo. Lo CIAM tiene en cuenta,
El sentido del hacer pedagógico y además, las múltiples asimetrías e irregularida-
musical como objeto de estudio des propias de toda manifestación de las pro-
En el marco del hacer pedagógico y musical, ducciones culturales.
como producto de la actividad investigativa, la Lo que constituye entonces lo CIAM
Fundación Nueva Cultura desde 1988 ha veni- en sus elementos conformadores, además de
do realizando el espacio de escuela. Una escuela incluir complejos lusitano, hispano, indígena y
basada en la necesidad de socializar la sistema- africano, contiene componentes franceses, in-
tización y el conocimiento sobre las músicas re- gleses y holandeses, así como los influjos resul-
gionales colombianas que, a su vez, hacen parte tantes de procesos posteriores de inmigración
de las músicas caribeiberoamericanas (músicas de europeos, asiáticos y africanos. Todo ello
CIAM), expresiones sonoras impregnadas de intervenido por múltiples significaciones y di-
vida y de fuerza expresiva que en muchos casos versificaciones interculturales, con sus cambios
no circulan por los medios de comunicación, y movimientos. En esta caracterización cuenta
pero con las que existen resonancias culturales también, de manera significativa, la irrupción
que hemos querido hacer visibles. Intervenir de los medios masivos de comunicación, la
pedagógicamente las músicas CIAM es, enton- apertura de los mercados y en general los pro-
ces, una apuesta; una apuesta expresiva, lúdica, cesos de globalización. Debe reiterarse que en
fiestera. Así, partimos del hacer vivo de la mú- este enfoque no se tienen en cuenta notas cons-
sica, cantamos y tocamos de una manera activa titutivas de cualquier etnia o complejo cultural
y divertida. Los elementos de los códigos y las antecedente por separado o que se muestren
grafías musicales se nos van apareciendo pro- como excluyentes.
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Las músicas caribe-iberoamericanas, por crítica, algunas miradas y concepciones pe-


lo ya expuesto, han sido leídas desde la diversi- dagógicas de las que ha tomado y apropiado
dad genérica propia de las músicas regionales, como elementos fuertes:
desde su complejidad rítmica y melódica, des- • El aprendizaje significativo de Ausubel.
de sus posibilidades tímbrico-organológicas, • Los planteamientos de Vigotsky acerca
desde la pluralidad de sus textos lingüísticos. de la zona desarrollo proximal, concer-
(Sossa, 2000). tado con las teorías del juego y de las
Al hablar de músicas CIAM, no habla- dimensiones lúdicas expuestas por Win-
mos de folclor, ni marcamos el objeto de estu- nicot, Huizinga y Dauvignod.
dio del tinte identitario de lo “nuestro”, de lo • Algunos referentes conceptuales de los
autóctono, de las raíces. No. “Se trata de asumir estudiosos de la Escuela Nueva y enfo-
la cultura como práctica creadora y no como ques particulares de la llamada pedago-
un enunciado trascendental al cual remitirse”.2 gía conceptual.
(Gil, 2007. p.9) De acuerdo con Gil preferimos • Los planteamientos constructivistas de
entender la cultura como “horizonte, apertura, la filosofía de los llamados filósofos del
matriz creativa que rebasa su inmovilización en afuera como Deleuze, Guattari, princi-
el pasado”(p.11), pues la memoria y la tradi- palmente y que conectan con plantea-
ción son germen creativo; una tradición cultu- mientos contemporáneos de jóvenes
ral es fuerte porque se recrea constantemente, filósofos latinoamericanos como Walter
se modifica para conservarse. Kohan que nos acercan a Jaques Ran-
En la medida en que nuestras niñas, niños ciere en su libro El maestro ignorante
y jóvenes se apropian creativamente de unas (2002); y en contrapunto con él, el texto
músicas-fuerza, de unas sonoridades-vida, en la Hermenéutica del sujeto (1994) de Fou-
36 medida en que las hacen suyas trasformándo- cault.
las, recobra más sentido lo enunciado por Gil:
“tan negativo es una contemporaneidad redu- Estas referencias nos han llevado a pro-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

cida a moda, como una memoria convertida en poner, como producto de la construcción co-
momificada pieza de museo”.3 tidiana del proceso pedagógico, la pedagogía
del acontecimiento como fundamento concep-
La pedagogía del acontecimiento tual que anima nuestra búsqueda permanente.
y el rizoma como imagen del Tal pedagogía se basa en el concepto de acon-
pensamiento: Una concepción tecimiento, que es aquel hecho o fenómeno
pedagógica que modifica sustancialmente al sujeto en sus
La Escuela de Formación Musical Nueva Cul- maneras de actuar sobre el mundo. Aconteci-
tura, a partir de su larga experiencia ha enten- mientos son aquellas experiencias que después
dido la importancia de referenciar, de manera de haberlas vivido y recorrido nos transforma-
ron. (Nómade Proyecto Artístico y Ambiental,
2 GIL, op.cit., p. 11,
2008) Para ello partimos de una premisa fun-
3 Ibid. damental:
37
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

...el pensamiento se produce dejándose afectar, a conexión y en interacciones, y ya no como su-


partir de los encuentros con el mundo. No sabe- matoria desde áreas que se conciben aisladas e
mos cuando surge, algo de azar lo define, algo nos independientes. Vemos cómo desde las mismas
sacude desde el afuera y arrastra al pensamiento, músicas abordadas como las “materias” se apro-
una sensación, un suceso, un problema, un deseo, pia más de un tema a la vez, generándose un
una imagen, un sueño, un color, un trauma, una movimiento que comienza a perder su centro
obsesión, son desencadenantes. (Gil, 2007. p 4) hasta desvanecerse y ya no importa el origen.
Por eso, dicho de otra manera, cualquiera de las
Y como los conceptos no se dan solos sino músicas escogidas puede ser el punto de partida
que se tejen en red, en la pedagogía del aconte- o de llegada. El centro ya no importará, im-
cimiento así considerada aparece como elemen- portarán los cruces, los movimientos, las tran-
to determinante el rizoma, concepto esbozado srelaciones, la red de estratos, ya que también
por Deleuze y Guattari en su texto Mil Mese- los entrecruces darán espesor al conocimiento.
tas (2002) y que, grosso modo, como imagen del Nudos y tallos también van llenando los espa-
pensamiento, nos sirve para desplazarnos de la cios entre redes, tupiendo y conformando una
idea de centro, de jerarquías, de verticalidades, estructura compleja. Así, se deviene rizoma.
de comienzos unitarios, de linealidades. El rizo- Estructuras complejas corresponden a
ma nos invita a pensar a la manera de la mala pensamientos complejos. Un conocimiento que
hierba, de las enredaderas, de los bulbos que no sea pertinente a la actualidad de los estudiantes
tienen raíces, ni tallos, ni ramas que se despren- de este siglo debe ser complejo; lo complejo es
den de ellas. El rizoma no es el árbol; es, enton- la red, el tejido; hay una interdependencia, in-
ces, la imagen del pensamiento que se convierte teracción e inseparabilidad, entre el todo y las
en punto diáspora para la búsqueda de nuevos partes, las partes y el todo, las partes entre sí, el
trayectos, ofreciendo tantos, cuantas necesidades objeto de conocimiento y su contexto, la uni-
e intereses se presenten en el colectivo de trabajo. dad y la multiplicidad, por eso la escuela debe
En los caminos están los libros, los maestros, las direccionar la formación de los estudiantes ha-
imágenes, el mundo real y aparente, todo cuanto cia el desarrollo de una inteligencia general, un
esté a tono con la búsqueda que se emprenda, pensamiento periférico que ligue nuevamente
siempre y cuando la apertura no se fuerce, ya las especializaciones disciplinarias, centradas en
que la mera información, conectada con nada, sí mismas, en un todo, para que los estudiantes
perderá su potencial y quedará relegada al archi- logren contextualizar el saber y expandirlo mas
vo oscuro de la amnesia. Es así como el rizoma, allá de las fronteras de las disciplinas. Los cami-
que es una multiplicidad, podrá ocupar todas las nos que recorra cada sujeto, aún para llegar al
dimensiones pedagógicas o incluso aumentarlas, punto acordado, serán de una infinita variedad
generando las no esperadas, según se conecten y dependerán lógicamente de los intereses, ca-
unos con otros caminos. pacidades y procesos de cada uno de ellos. Esto
Desde este enfoque, los estudiantes han es, desarrollo de un pensamiento Nómade que,
conformado la red de saberes en torno a una como lo hemos visto aquí, es un pensamiento
práctica musical viva asumida como campos en rizomático.
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

A partir de la pedagogía del acontecimien- suceso extra-ordinario. Justamente alejarnos de la


to la dinámica de la formación musical, asumi- experiencia inmediata para refugiarnos en grandes
da como práctica y como acción, ha planteado categorías marca el olvido de la experiencia la cual
como un movimiento que viaja horizontalmen- yace en lo pequeño, ordinario, cotidiano. Un gesto
te expandiéndose en múltiples sentidos; mudán- nos llama, una acción pequeña redefine el curso y
dose, territorializando y desterritorializando los el sentido de las cosas. Algo se encuentra en nues-
espacios; es un desplazamiento que rastrea, escu- tro vivir diario, algo inesperado y que no dirigimos
driña, explora, indaga, como la mala hierba, que nos sucede, escapa a nuestro control. El artista —
hoy se ha reivindicado. Es un rizoma. Pero esa nos vuelve a decir Gil— piensa no tanto porque
dinámica tiene también una dimensión vertical, se le ocurran cosas, sino porque le ocurren cosas.
que no es de naturaleza jerárquica porque tiene (Gil, 2007. p 4)
gran movilidad, viaja sobre el rizoma en forma
de espiral, ampliada sobre su borde superior y al- Hablamos entonces de la pedagogía del
canzando cada vez estratos más altos: la imagen acontecimiento, como aquellas acciones forma-
del tornado. Fuerzas que llegan desde distintas tivas que están en clave de búsqueda de ele-
direcciones con diferentes características de tem- mentos, situaciones, imágenes, sucesos que nos
peratura y humedad, lo generan y movimientos transforman, que hacen que después de un en-
circulares que hacen que vuelva sobre sí mismo, cuentro con los sonidos, con los compañeros,
lo potencian. Es el movimiento del retorno, que con los docentes, las cosas ya no sean iguales.
alcanza nuevos estratos al iniciar cada ciclo, por- Estar atentos a romper las inercias, a dejarnos
que aunque retorne, al igual que el rizoma no permear por aquello que, por simple que pueda
recorrerá el mismo camino. Es el principio de la parecernos, esconde los múltiples sentidos que
repetición, tan común y tan básico en las artes nos genera tocar y cantar.
38 (en la música por ejemplo); es ese volver a hacer,
retornar, volver la mirada sobre, re-mirar y sin Un currículo abierto, un currículo
embargo no volver a partir del mismo punto. rizomático
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

Este volver a mirar ha sido clave en los pro- No armamos un currículo rígido. Asumimos
cesos formativos de los estudiantes, ya que, para una noción de planificación blanda y abier-
abordar nuevos temas, siempre será lícito volver ta a lo inesperado; hablamos de trayectos que
sobre los conceptos; revisarlos, recordarlos, ma- organizamos desde las músicas específicas que
durarlos y aplicarlos al nuevo hecho pedagógico. se constituyen en las “materias” a abordar. En-
El acto creativo surge cuando el objeto del cono- tendemos que existen dispositivos pedagógi-
cimiento es abordado desde diferentes miradas; cos que determinan los flujos discursivos en-
cuando se retorna a él una y otra vez, para escu- tre los sujetos. Sabemos —y por eso estamos
driñarlo y hacer visible a los demás lo que no es alertas— que el dispositivo pedagógico ordena,
obvio a simple vista. Aquí, como se ha dicho, clasifica y jerarquiza los enunciados y discursos
aparece lo estético como paradigma, entre los sujetos que intervienen en el proceso
...la experiencia de cualquier elemento cotidiano formativo. El dispositivo pedagógico establece
es provocadora, no necesariamente se trata de un reglas de lo decible o de lo comunicable, tanto
39
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

de lo comunicado como de las formas en que 2007) Por eso hemos hablado de rizoma y no
se comunica. (Maldonado, 2004 p. 121-134) de árbol, ya que la figura predominantemente
Desde allí, tomamos distancia con las notas y arbórea tiene poca disposición para la incerti-
las calificaciones, con las evaluaciones que se dumbre y para lo desconocido.
expresan como el mecanismo controlador del Con todo, es conveniente recordar que,
orden normalizador y jerárquico que establece no obstante tener un sentido de búsqueda y
la curricularización. Valorar los desempeños y experimentación, la Escuela consulta los es-
lo que se ha dado en llamar las competencias de tándares y lineamientos curriculares propues-
los estudiantes es un acto de profunda respon- tos por diferentes espacios formativos tanto de
sabilidad ética que supone descentrarse de las la educación formal como de la no formal. Se
líneas del saber-poder sacralizados por el apara- trata de articular, de manera creativa y respon-
to educativo y encarnadas en el rol del profesor sable, lo que puede constituir una real innova-
entendido como el elemento activo del proceso ción pedagógica con aquellos elementos que el
de enseñanza-aprendizaje. Preferimos entonces medio educativo del país exige como requisitos
hablar de mediación y, como lo dice Walter mínimos a ser apropiados por los estudiantes
Cohan, (Cohan, 2006) resonamos con hablar de música en el pregrado. Los estándares y li-
de traducción. neamientos son así asumidos no como manua-
Desde aquí, ha sido decisivo asumir el les a seguir de manera mecánica y lineal, sino
planteamiento de la construcción a partir y a elementos con los cuales se dialoga de manera
través de la experiencia, es decir, un enfoque abierta y flexible. La disyuntiva ha sido basarse
constructivista en contraste con las concepcio- en lo establecido y ya definido, o dar cabida a
nes que asumen la información como algo ya la apertura, a lo flexible, al acontecimiento que
procesado que debe ser comprendido y usado genera el mismo devenir de la práctica y hacer
funcionalmente. Hemos preferido ser cautos; pedagógico cotidiano. “Se piensa sobre lo experi-
hemos tomado distancia crítica de muchas mentado, aunque impensado, y no desde la ade-
imágenes que sobre el currículo existen. Si te- cuación del pensamiento a un objeto previamente
nemos en cuenta que el currículo responde a programado”. (Gil, 2007. p 6)
la preguntas ¿qué, cómo, cuándo asumir el pro- Entonces, si habláramos de currículo lo
ceso de mediación pedagógica? y ¿de qué mane- haríamos como currículo abierto donde los
ra concebir, planificar y asumir la evaluación de conceptos remiten a circunstancias y no a esen-
dicho proceso?, nos ha sido necesario indagar y cias levantadas por encima de las propias cir-
sustentar todas aquellas acciones, estrategias y cunstancias. “Un currículo ciertamente configu-
conceptualizaciones que nuestra Escuela viene rado desde la razón pero preferiblemente asistido
desarrollando para lograr la formación de sus por el susurro de la razón artística”. (Gil, 2007.
estudiantes, evitando las imágenes “tranquili- p 6) Y, esto es decisivo, tomando distancia de
zadoras” que se derivan del currículo con “tra- la construcción rígida de currículos, con méto-
zados hechos y seguros, con puntos de origen y de dos y problemas muy preestablecidos que con-
llegada donde el aprendizaje sucede sin mayores trolan la necesaria fluidez y líneas de fuga que
errancias ni extravíos, azares y sorpresas”. (Gil, habitan la experiencia artística.
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Sobre la docencia musical o la • Antes de basarnos en los contenidos que


mediación pedagógica asumen las escuelas como algo dado y
Asumimos la docencia como una dimensión canónico, nos hemos jugado a asumir
que hace parte del campo musical. No creemos el fortalecimiento de procesos y formas
en la dicotomía intérprete-profesor. Ni mucho alternativas de intervención pedagógica.
menos compartimos el enunciado músico (mú- Pensamos que la organización de acti-
sico bueno) - pedagogo (músico malo). Cree- vidades para regular las acciones de un
mos, como Savater, que la pedagogía está más estudiante para obtener, generalmente a
cerca del arte que de la ciencia. Creemos en la partir de la mimesis, lo ya adquirido por
intuición, en la capacidad de inventar, de bus- el maestro, neutraliza el pensamiento,
car, de experimentar. Lo hemos dicho todo el impide el desarrollo de la experiencia.
tiempo.
• Antes que trabajar en el marco de la Queremos recordar aquí a Guilles Deleu-
enseñanza-aprendizaje hemos asumido ze, quien hizo de sus clases de filosofía un acto
la construcción del conocimiento a par- estético, cuando nos dice que no se hace un
tir de los procesos de mediación, trans- curso sobre lo que ya se sabe; también cuando
ferencia y comunicación pedagógica. comentaba que le hubiese gustado dar clases a
Mediación pedagógica para dejar apren- la manera de Bob Dylan, es decir organizarlas
der, incluso para ayudar a desaprender, como ocurre con una canción, que, por un
proceso de traducción para facilitar las lado, tiene desarrollos previsibles pero tam-
condiciones que permitan que broten bién tiene espacios para la improvisación. Nos
las singularidades, no tanto para dar lec- gusta pensar que en el hacer pedagógico de los
ciones como para sembrar inquietudes. docentes se da una permanente tensión entre
40 (Gil, 2007. p 5) lo preparado y la apertura a lo desconocido,
• Antes que abordar el deber ser de la en- a los trayectos insospechados, a los aconteci-
señanza aprendizaje, como los propósi- mientos.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

tos ideales de la educación dando énfasis Nos hemos inclinado a pensar el docente
a teorías educativas y postulados de las como un músico profesional, que asume la pe-
diferentes corrientes pedagógicas, he- dagogía como un componente de su dimensión
mos preferido dar fuerza a la práctica, de músico; un pedagogo musical o un músico
a la elaboración conceptual y reflexión pedagogo que enriquece su hacer cuando se en-
teórica que se deriva de ella. “La edu- frenta a los sentidos que surgen de los procesos
cación artística debería asumirse como de mediación y comunicación de una clase, de
acto creador, como obra de arte, es decir un taller, de un montaje. Imaginar entonces un
—y para ser fiel a su objeto— sus proce- docente que se permea de la experiencia en el
dimientos deberían desarrollarse como trabajo con niños y jóvenes, y, sobre todo, que
proceden los grandes artistas que trans- construye un compromiso para apostar y para
curren por territorios aún no nombra- trabajar por su crecimiento y felicidad.
dos”. (Gil, 2007. p 6)
41
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

Oralidad, literalidad y cuerpo cual se cimenta el trabajo de formación artística


Nos hemos preguntado por las formas y posibi- y musical, pues creemos que formar el cuerpo
lidades de apropiar las grafías entendidas como es el fundamento de la expresión y de la rela-
códigos y recursos para decodificar el lenguaje ción con otras áreas del conocimiento. Consi-
musical (lectura) y su manejo para escribirla deramos que el cuerpo es la base de la acción
(escritura). Desmitificamos el pentagrama y la musical. Por eso construir un estado de música
notación occidental convencional. La usamos es resonar con un cuerpo sensibilidad y movi-
en su justa medida y nos aproximamos a ella miento, un cuerpo goce y abierto al disfrute de
a partir de la potencia de la oralidad inmersa lo sonoro. Valorar la fuerza de este enunciado
en las músicas CIAM. Sabemos que el disposi- quizá nos permitiría entender por qué de una
tivo pedagógico “…opera sobre los discursos li- manera moralizada se considera que las mate-
teralizados, sobre los discursos que han dejado máticas o la historia son más importantes que
de ser solamente orales y se han materializado las artes en la escuela. Problematizar desde allí
de algún modo en un texto escrito, con cier- nos permitirá entender que la valoración mo-
tas características”. (Maldonado, 2004. p 128) ralizada de la educación artística siempre la
Por eso no hacemos convergente el enunciado pondrá como elemento accesorio y decorativo.
estudiar música con aprender los códigos del Entonces, hablar del cuerpo música es hablar
pentagrama. Tomamos con cuidado el decir de la experiencia estética, que es lo mismo que
común de muchos músicos empíricos cuando decir lo estético como experiencia. Un cuerpo
afirman yo no sé música —al referirse a no “sa- que afirma la profundidad de la piel y de un
ber” leer una partitura cuando son excelentes contacto singular e inmediato con el mundo
interpretes de variados géneros populares—. previo a cualquier juicio o teoría. La experien-
Primero tocar, sonar, apropiar el universo so- cia estética así considerada es conciencia del
noro, la lectoescritura musical irá apareciendo cuerpo o, mejor, del cuerpo como conciencia.
como una resultante de haber develado los sen- (Gil, 2007. p 2)
tidos de los ritmos, las melodías, las métricas,
en fin. Sí abordamos lo literal, pero como un La Escuela y el legado
correlato de lo expresivo y empático que está La Escuela Nueva Cultura es para nosotros un
presente en la oralidad de las músicas CIAM aporte al legado que queremos hacer a las nue-
entendidas como textos de cultura. En suma, vas generaciones. En esto estriba la originalidad
estamos atentos a describir el dispositivo peda- y la importancia cultural de su objeto de estu-
gógico, a identificar y describir las reglas de su dio. Es un espacio para la formación musical
funcionamiento; atentos a no dejarnos captu- en la modalidad no formal, dirigida a niños,
rar por las líneas que traza y establece como niñas y jóvenes entre los dos y los dieciocho
cosas inamovibles y “naturalmente” propias de años de edad. Así pensamos de las escuelas que
la Escuela; atentos, en fin, a mostrarnos lo que se vienen construyendo y consolidando a partir
hacen, sienten y piensan los agentes del proceso del PNMC. Para nuestro caso pensamos en las
formativo. setenta escuelas de los departamentos de Nor-
Y pensar el cuerpo como la base sobre la te de Santander, Santander, Boyacá, Cundina-
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

marca, Caquetá, Antioquia, Risaralda, Valle de esas músicas y aquello que ve desde un mundo
del Cauca y Quindío, donde hemos tenido la infantil al que pertenece. El universo de la canción
oportunidad de intervenir de alguna manera. infantil así considerado se multiplica y expande.
Nuestra intención formativa es propiciar (Sossa, 2005. pp 75-76)
elementos musicales como parte de una forma-
ción integral, buscando el crecimiento perso- En este largo recorrido, lleno de movi-
nal, el desarrollo de la sensibilidad y, claro está, mientos y acontecimientos-vida son muchos
potenciar las aptitudes musicales de cada uno los logros que podríamos registrar. En la at-
de los estudiantes. Hemos dado un especial mósfera de estas notas solo quiero hacer énfasis
énfasis a pensar el mundo infantil. Tratando en tres aspectos.
de develar su clave, hemos querido imaginar 1. Como producto del proceso formati-
trayectos para generar procesos de formación vo, por postulación y previo proceso de
dotados de sentido. Para ello nos hemos pre- selección, escogemos a estudiantes des-
guntado: tacados para integrar grupos musicales
…¿Cómo pensar el mundo infantil desde expresio- que se orientan a desempeños artísticos
nes musicales que se inscriben en culturas de arrai- como son la realización de conciertos y
go tradicional? ¿De qué maneras recoger ese acervo la grabación de discos. Es una actividad
de sonoridades, de cuerpos sonoros, de tonadas, de que complementa la formación musical
formas de canto —en su mayoría distantes por su del estudiante y que nos permite la pro-
ethos y singularidades expresivas— de manifesta- yección artística de la Escuela.
ciones más propias de las músicas centroeuropeas 2. La construcción de esta dimensión no se
que secularmente han sido tomadas como objeto da con gratuidad ni es el resultado me-
de estudio por conservatorios y centros de educa- cánico de asistir a unas clases de música.
42 ción formal? No.
Dentro de las músicas caribeiberoamericas —mú-
sicas CIAM— ya señaladas, hacemos referencia a Como se trata de interactuar con estos niños y
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

las músicas de base campesina que son entendidas adolescentes, ya en los ensayos de grupo, ya en el
y asumidas como textos de cultura, no como re- montaje, será menester intentar seducirlos, per-
pertorios de compositor individual. En muchas de suadirlos, involucrarlos. ¿Cómo hacerlo sin im-
estas expresiones la frontera entre lo adulto y lo ponerles nuestro encuadre adulto? Trabajar con
infantil no existe como algo especializado en tanto ellos para conformar grupos musicales, construir
todo, música y texto, se asume como una totalidad sus territorios, armar sentidos de pertenencia, sin
expresiva. Son estas, músicas que con su fuerza, pensar en identidades rígidas; ¿Cómo ser grupo,
con su alegría, con su proclividad a la fiesta, al di- construir integración y sociabilidades, sin dejarnos
vertimento, son leídas, interrogadas y apropiadas atrapar por las nociones cerradas que a veces vemos
por los niños y jóvenes de nuestra Escuela, situada en colectivos marcados por una idea disciplinaria,
en Bogotá, por lo que desde su sensibilidad de ha- el uniforme, las filas, como los Scout, o los equipos
bitante de ciudad y condición de ser niño, estable- deportivos? ¿Qué cosas hacer para que, siendo gru-
ce puntos de convergencia entre lo que es propio pos artísticos, fluyan la creatividad, las relaciones
43
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

respetuosas buscando gozar, disfrutar y ser felices? la cotidianidad y sin someterse a una lógica de
(Sossa, 2005. p 80) horas, límites y parcelas, distancias y segmenta-
ciones entre lo teórico y lo práctico, y un siste-
Es decir, en la práctica hemos interpelado ma de requisitos siempre discutible e implícito
la idea generalizada de la “Música Universal”. en una concepción acumulativa y lineal del sa-
Hemos formado desde unas músicas que secu- ber” (Gil, 2007. p 6) tal como sucede en los
larmente no han sido objeto de estudio porque programas de educación formal. Los logros de
se han considerado propias de otras prácticas. muchas de las Escuelas de Música tradicional
Muchos de nuestros estudiantes se han involu- que el PNMC viene impulsando, nos enfren-
crado con éxito en esquemas curricularizados ta ante nuevas maneras de pensar la Escuela, y
de la educación formal superior, no porque nos pone ante modos inéditos de intervención
se hayan formado en sus códigos sino porque pedagógica.
quizá han sabido leer lo literalizado desde la La ley 1064 de 2006 cambió la denomina-
potencia empática de lo oral, o porque no han ción de educación no formal por la de educación
renunciado a que la música antes que letra es para el trabajo y el desarrollo humano. Cambio
sonoridad apropiada, antes que código escrito, paradójico y discutible que se realizó a espal-
es flujo sonoro. das del sector educativo y cultural. Nominar
3. Varios de quienes fueron estudiantes de no es un ejercicio formal. La manera de nom-
la Escuela integran en la actualidad gru- brar esconde miradas y concepciones. Como ya
pos profesionales de altos desempeños se anotó, en julio de 2007 se emite el decreto
musicales y muy competentes en el me- 2888 que derogó el decreto 114 de 1996 que
dio artístico y cultural del país. Haberlo regulaba la educación formal y la educación
logrado ratifica una apuesta fundamen- informal en el país. Si bien en la discusión y
tal: es posible formar músicos a partir de creación del nuevo decreto el sector cultural se
las lógicas de las Músicas CIAM y des- movilizó y tuvo relativa participación, aún esta-
de allí potenciar la creatividad, la cons- mos en espera de la resolución que reglamente
trucción de subjetividades en clave de el decreto para el ámbito de la educación artís-
construir mundos posibles y de dialogar tica. Las particularidades del arte, las tensiones
con las culturas en las que esas músicas que se dan entre las miradas de la creación, de
nacieron y se transforman permanente- lo estético con respecto al mundo del empren-
mente. dimiento, de la productividad, nos reclama su-
tilezas y capacidad para hilvanar y tejer a partir
De la educación no formal a la de discursos que se expresan en la normativi-
educación para el trabajo y el dad de manera disímil y contrastante.
desarrollo humano, otras miradas, Pensar la nueva normatividad como mar-
otros enfoques co nos plantea retos conceptuales y de posturas
La práctica de la educación no formal en Co- éticas y políticas. ¿De qué desarrollo humano
lombia ha mostrado experiencias aleccionado- estamos hablando? ¿Cómo inscribir los progra-
ras “en tanto se presentan más articuladas con mas que entidades privadas sin ánimo de lucro
Pedagogía del acontecimiento: una experiencia de educación no formal para las músicas regionales*

venimos desarrollando y hacerlo en el encuadre Referencias


que nos plantea el Sistema Nacional de Educa- Gil, J. (2007). Pensamiento artístico y estética de la expe-
ción para el Trabajo coordinado por el SENA? riencia. Repercusiones en la formación artística y cul-
En agosto de 2005 se creó la Mesa Secto- tural, Congreso de Formación Artística y Cultural
rial de la Música, uno de cuyos propósitos fun- para América Latina y el Caribe. Bogotá.
damentales es construir las Normas de Compe- Arenas, E. (s.f.) Una aproximación conceptual a los fun-
tencia Laboral para las diferentes funciones de damentos y apuestas conceptuales del programa de
la música. Todos estos hechos nos hacen volver músicas tradicionales del Plan Nacional de Música
sobre preguntas fundamentales. ¿De qué ma- para la Convivencia. Manuscrito (Documento bo-
neras buscar la configuración de un sujeto esté- rrador).Bogotá
tico a partir de acciones artísticas y pedagógicas Sossa, J. (2000) Música y pedagogía. En: ASAB Cobalto.
fieles a lo sensible y basadas en comprensiones Bogotá.
sentidas, imaginadas, y soñadas? ¿Cómo, en Sossa, J. (2005) Una puesta en escena pensada en los niños
medio de normatividades tan rígidas e instru- o La expedición al mundo infantil. En: Encuentro
mentales, es posible imaginar una escuela que de la canción infantil latinoamericana y caribeña.
movilice la intuición, la emoción, la pasión, el Panorama del movimiento de la canción infantil
sentimiento, el deseo y la imaginación? El de- latinoamericana y caribeña: Estudios, reflexiones y
sarrollo cultural genera desarrollo económico, propuestas acerca de las canciones para la infan-
pero, de manera contraria, el desarrollo econó- cia. Montevideo, Uruguay: Ediciones de la Banda
mico no siempre genera desarrollo cultural. De Oriental, septiembre.
acuerdo a esta idea, asumiremos el desarrollo Nómade Proyecto Artístico y Ambiental. (2008) Una
cultural como potencializador de la acción hu- Escuela para todos. Proyecto Educativo institucional.
mana, de la creatividad, tomando distancia con Bogotá.

44 posturas más de corte neoliberal que ponen el Maldonado, J. (2004) La formación artística en la edu-
acento casi exclusivo en las lógicas del mercado. cación básica. En: Revista UIS – Humanidades.
En suma, vivimos en un modelo de socie- Volumen 32 Nº 2. UIS Facultad de Ciencias Hu-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 31 - 44

dad que ha puesto el acento en la producción manas. Bucaramanga.


de bienes, sobre el supuesto de que las nece- Cohan, W. (2006, julio).Principios de educación artística.
sidades humanas deben ser satisfechas a través Conferencia dictada en el Auditorio de Artes de la
del consumo. Se ha perdido el sentido humano Universidad Nacional de Colombia.
de la realización de las necesidades. Asistimos Hannah A. (1996) La Condición Humana. Ed. Paidós,
a una hipervaloración de la rentabilidad eco- Barcelona
nómica, a una sobrevaloración del dinero, del Rancière J. (2002) El Maestro Ignorante. Editorial Aler-
tener, a una saturación del consumo. En este tes. Barcelona
contexto, sin duda, nos enfrentamos al reto de Foucault, M. (1994) Hermenéutica del sujeto. Ed. de la
plantearnos nuevos paradigmas de la educación Piqueta, Madrid.
artística y musical. Deleuze, G; Guattari F. (2002) Mil mesetas (capitalismo y
esquizofrenia) 5ª Ed. Pre-Textos. Valencia, España.
45
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en Colombia Directores destacados

Reflexión histórica de la dirección


sinfónica en Colombia
Directores destacados
Juan Gabriel Alarcón Carreño*
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. Poco o nada se ha escrito sobre la dirección sinfónica en Colombia y sus directores a través de
la historia, y el papel social - cultural de esta profesión en el campo laboral. Durante las últimas décadas,
la música en Latinoamérica ha sido conductora de procesos de transformación social, como el movimiento
orquestal en Venezuela y la red de orquestas de Medellín, o la Fundación Batuta, siendo el medio por el
cual, muchos niños y jóvenes tienen la oportunidad de progresar y salir adelante. El presente artículo hace
una síntesis sobre los orígenes de la dirección en Colombia. Se habla sobre el papel actual del director en sus
campos de acción, los procesos de formación y se hace una reflexión final a su proyección.

Palabras clave: Compañías de ópera- directores en Colombia a finales del siglo XIX y comienzos del XX
-campo laboral de la dirección en Colombia-formación de los directores, reflexión histórica.

Abstract. Little or nothing has been written about the symphonic direction in Colombia and its principals
through history, and social cultural role of this profession in the labor field . During the last decades music
in Latin America has been conducting social transformation processes, such as the orchestral movement
in Venezuela and the network of orchestras in Medellín, or the Batuta Foundation in Colombia, being the
means by which many children have the opportunity to progress and move forward. In Colombia and Latin
America, the figure of the director leads processes of orchestras, choirs or bands formation. In Colombia
and Latin America, the figure of the director leads forming processes for orchestras, chorus and bands, his
labor goes beyond moving the baton, profiling him as a manager and leader who teaches and transforms
society by means of his musical labour, its history, the first directors who came to our country as well as the

* Músico con énfasis en dirección - Universidad Nacional de Colombia. Docente y director de la Banda Sinfónica del Conservatorio del Tolima.
juan.alarcon@conservatoriodeltolima.edu.co
Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

most prominent ones, is presented here. It talks about the current role of the director in Colombia, its fields
of action, the training process and there is also a final reflection on its projection in Colombia.

Key words: Opera company, directors in Colombia in the late nineteenth and early twentieth centuries,
labor field of directors in Colombia, training for managers, historical reflection

Primera Parte la más importante. Estas primeras compañías,


en su mayoría italianas, no rivalizaban entre sí,
Antecedentes históricos y solían interpretar las óperas más famosas de la
La historia de la dirección sinfónica en Colom- época. Se destacan compañías de ópera, como
bia se puede remontar al siglo XIX, época en la Compañía Lirica cuyo director musical era el
la cual muchas compañías de ópera y zarzuela, compositor venezolano Atanasio Bello y otras
la mayoría Europeas, llegaron a nuestro país y como la Compañía de Marina Barbieri, Flore-
con ellas músicos y directores de gran nivel. Es- lini de Balma, Pocoleri, Emilia Benic, Augusto
tas compañías permitieron que se crearan sobre Azzali, Turconi Bruni y algunas compañías de
todo en Bogotá, ambientes propicios para una zarzuela como la Compañía de Villa Zafrane y
cultura musical y pusieran en boga las obras la de Josefa Mateo.
más famosas del repertorio operístico europeo, Cabe recordar que durante esta época, en
sobre todo el italiano. También cabe destacar Bogotá, como en el resto del país, no existían
que gracias a este fenómeno, se sentaron las ba- escenarios adecuados para la representación de
ses para crear posteriormente las primeras aca- óperas. Solo fue hasta 1892 y 1890 que se in-
demias de música, donde muchos profesores auguraron en Bogotá los teatros Colón y Mu-
eran cantantes o músicos europeos que venían nicipal, respectivamente.
46 en dichas compañías y se radicaban en nuestro José Ignacio Perdomo Escobar en su His-
país como es el caso de Oreste Sindici,1 autor toria de la Música en Colombia(1975) nos
del Himno Nacional, cuya compañía era la de cuenta:
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 45 - 53

Eugenia Bellini. “El teatro Colón se inauguró con un ban-


quete en honor a don Carlos Holguín, al termi-
Compañías de ópera, primeros directores en nar su mandato, y luego se abrió al público en
Bogotá una solemne velada el 12 de octubre de 1892.
En la primera mitad del siglo XIX, la ópera El 15 de febrero de 1980 fue inaugurado el in-
comenzó a ser parte del repertorio musical en olvidable teatro municipal. El iniciador de la
algunas ciudades de Colombia, siendo Bogotá obra fue don Francisco Zenardo”.(p.64)
Muchas de estas compañías de ópera iban
1 Oreste Síndici
Nació en Roma en 1837. Llegó a Bogotá como integrante de una y venían, pero la primera compañía de ópera
Compañía de Opera y decidió adoptar la nacionalidad colombia-
na. Casó con Doña Justina Jannaut, dama bogotana de ascendencia en actuar más o menos de forma continua fue
francesa, con quien tuvo tres hijos Oreste, Eugenia y Emilia. El la compañía de Luisia Olivieri, que hizo su de-
maestro compuso la música el Himno Nacional sobre un poema
del entonces Presidente de la República, doctor Rafael Núñez. Mu- but en 1858 y cuyo director musical fue Gui-
rió en Bogotá en 1904. El Congreso Nacional expidió la Ley 89 de
1937 de honores en su memoria. llermo Freudenthaler. Otros directores impor-
47
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

tantes que encontramos en esta época fueron Academia Nacional de Música (1882-1910)
Augusto Azzali (1863-1907) quien fue director que después tomaría el nombre de Conserva-
de la compañía de ópera Zenardo Lombardi y torio Nacional, fue fundada por Jorge W. Price
que más tarde pasaría a ser director de la ban- (1853-1953), hijo de Henry Price. Ésta abrió
da militar, y el español Jesús Ventura Laguna la brecha para que Bogotá -al igual que en Me-
quien dirigió la orquesta de la unión musical a dellín con la creación de la escuela de música
principios del siglo XX. Es importante destacar Santa Cecilia en 1888- tuviese unas prácticas
que estas compañías también se presentaron en musicales muy definidas, además de ayudar a
diferentes ciudades de Colombia. conformar las cátedras de composición, armo-
Entre 1900 y 1903, la compañía de zar- nía, contrapunto e instrumentos de cuerda y
zuela de Alfredo Del Diestro, llegó a Bogotá viento.
y su director era Mario Alberto Rueda (¿- c. Pero aún no existía en nuestro país una
1945). También en 1914 la compañía de ope- cátedra en dirección que permitiera crear una
retas española de las hermanas Bailló, arribó a escuela nacional. Cabe recordar que muchos de
Bogotá, cuya orquesta dirigió Jerónimo Velasco los músicos que integraban estas agrupaciones
(1885-1963). no eran virtuosos, pero sí músicos de buen ni-
Otro factor importante que ayudó a fo- vel.
mentar el gusto por la música académica y que Ya con la creación del Conservatorio Na-
permitió crear las primeras orquestas naciona- cional (1910) y después de la salida de Guiller-
les, fueron las academias musicales que ofre- mo Uribe Holguín2, (1880-1971), la orquesta
cieron un espacio para los primeros directores del Conservatorio pasó a llamarse Orquesta
nacionales. Sinfónica Nacional, cuya dirección fue asumi-
Entre ellas, podemos encontrar la Socie- da por el director cartagenero Guillermo Espi-
dad Filarmónica, la cual fue fundada en 1846, nosa, quien había estudiado dirección orques-
por Henry Price, cuyo objetivo fue “fomentar tal en Milán y Berlín.
y generalizar el gusto por la música” (Perdomo,
p.54) Además de la creación de una orquesta y Directores de orquesta más destacados que
la programación regular de conciertos, muchos han llegado a nuestro país en la primera mi-
de sus integrantes eran músicos aficionados que tad del siglo XX y que dirigieron la Orquesta
se mezclaban con profesionales. Sinfónica Nacional de Colombia
Otra creación importante fue la Socie- La orquesta Sinfónica Nacional, una vez
dad Lírica dirigida por Joaquín Guarín (1825- fundada, comenzó a través de las primeras
1854). Es de resaltar que después de la desapa- décadas del siglo a adquirir prestigio y po-
rición de estas dos sociedades, nace la unión pularidad, tanto así que muchos directores y
musical en el año de 1858 por Manuel María
Párraga, con los mismos objetivos que las dos 2 Guillermo Uribe Holguín, nació en Bogotá el 17 de marzo de 1880
mencionadas anteriormente. Más tarde se fun- y murió el 26 de junio de 1971. Ingresó a la academia nacional de
música donde fue discípulo de Santos Cifuentes. En 1907 viajó a
dó la Sociedad Filarmónica de Santa Cecilia parís e ingresó a la Schola Cantorum que dirigía Vincent D´Indy.
Al regresar a Bogotá, ocupó el cargo de director del Conservatorio
en 1886, bajo la dirección de Pedro Visoni. La Nacional de música durante 25 años.
Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

compositores de renombre universal vinieron los grupos de músicos que tocaban en los dife-
a nuestro país como invitados. Entre los más rentes batallones en la época de la independen-
importantes cabe destacar a Nicolás Slonimsky, cia. Estas bandas contaban con muy pocos ins-
director ruso radicado en América del Norte trumentos, pero no fue sino hasta mediados del
que vino a nuestro país a dirigir la Sinfónica siglo XIX que se empezaron a incorporar más
Nacional como director invitado en 1938, por instrumentos de viento para dar paso a las ban-
motivo de los cuatrocientos años de la funda- das musicales. Es así como hacia el año 1870,
ción de Bogotá. encontramos la Banda del Batallón de Artillería
Otra de las figuras más notorias y presti- Dirigida por Cayetano Pereira.
giosas de la dirección sinfónica que nos visitó Es importante mencionar que la Banda
fue Leonard Bernstein con la Filarmónica de Nacional se crea a partir de la fusión de anti-
Nueva York en 1958. Por el año de 1962 vino guas bandas militares de los regimientos Bolí-
la ópera de Brasil dirigida por Nino Stinco. var y Cartagena a principios del siglo XX. Su
También tuvimos el privilegio de tener como primer director fue Manuel Conti (¿-1914),
directores invitados con la Sinfónica Nacional quién llegó al país en 1888 para encargarse de
al director Norteamericano Robert Craft junto la organización de las bandas de música. Conti
con el notable compositor Ruso, más que di- se desempeñó como director de la Banda Na-
rector, Igor Stravinsky por el año de 1975. cional hasta su muerte y fue reemplazado por
Asimismo, otros directores destacados que Andrés Martínez Montoya.
nos visitaron fueron el Holandés André Rieu, La Banda Nacional toma realmente im-
Leopold Ludwig, Antal Dorati, Luis herrera de portancia con el maestro José Rozo Contreras,
la Fuente, Jacques Singer, Ernest Bour, Franz quien hizo de ésta una verdadera identidad de
Von Benda entre otros. la música en Bogotá hasta la década del 70. José
48 También cabe destacar la presencia de Ignacio Perdomo Escobar en su libro Historia
compositores- directores como Igor Stravins- de la Música en Colombia nos dice:
ky, ya mencionado, Paul Hindemith, Carlos “Fue encargado de la dirección de la
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 45 - 53

Chávez, Aram Jachaturián, Galindo Estévez. Es Banda Nacional de Bogotá el 15 de diciembre


importante destacar que la Orquesta Sinfónica de 1933 y permaneció al frente de ella hasta
Nacional desde sus inicios hasta la actualidad hace muy poco, en que lo sucedió el maestro
es una gran fuente laboral para los directores Roberto Pineda Duque. Al frente de la Banda
colombianos como también para los jóvenes llevó a cabo una labor verdaderamente gigan-
instrumentistas. tesca.” (Perdomo, 1975, p 85)
Es de anotar que en la década de los 40
Directores de banda encontramos la Banda de la Policía Nacional
Las bandas en nuestro país tienen su origen en dirigida por Dionisio González.
49
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

alemanes, españoles e italianos que llegaron


al país huyendo de las guerras mundiales que
azotaban Europa y en la búsqueda de mejores
oportunidades.
Es así como en el año de 1924 encontra-
mos al maestro Miguel Uribe que fue director
del coro del Conservatorio y que por esta épo-
ca, dieron su primera gira en la ciudad de Gi-
rardot. Uno de los directores más notables en
dicha institución fue el maestro italiano Alfre-
do Squarcetta, quién sucedió al maestro Casti-
Fig. 2 . Banda Nacional de Bogotá, bajo la dirección de José Rozo
Contreras: Fuente lla en la dirección del Conservatorio en 1937 y
fue gracias a él que el Coro del Tolima hizo eco
Directores del Conservatorio del Tolima por primera vez en Bogotá en 1948 y en Cuba
hasta mediados del siglo XX en una gira realizada un año después. Jesús Ber-
El Conservatorio del Tolima, desde los tiempos múdez Silva (1883-1958), director bogotano,
de su fundación llevada a cabo por el Maestro a su regreso de Europa dirigió el Conservato-
Alberto Castilla3 en 1906, ha sido testigo de la rio del Tolima entre 1942 y 1943. Demetrio
llegada de varios directores de gran nivel que Haralambis, director de origen Griego, llegó a
dieron relevancia a la música en el Tolima. Ibagué, luego de haber trabajado en el Gimna-
A principios del siglo XX, el panorama ar- sio Moderno de Bogotá y se encargó de la di-
tístico en Ibagué, no era muy diferente al de rección de la institución y del Coro del Tolima
otras ciudades de Colombia. La falta de agru- entre 1945 y 1946.
paciones musicales profesionales era evidente Dentro del grupo de músicos italianos
y el nivel de los músicos con que se contaban Nino Bonavolontá fue otro gran maestro que
era muy bajo como para aspirar a tener orques- llegó a Ibagué a desempeñarse como director
tas de gran nivel. Los recursos y el apoyo para del Conservatorio entre 1953 y 1955. También
llevar a cabo una escuela de música se dieron al maestro Giuseppe Gagliano, que en el año
gracias a las gestiones del maestro Castilla. Las de 1955 fue nombrado director artístico del
diferentes legiones extranjeras que llegaron a la Conservatorio del Tolima y a su vez director
ciudad, dieron un gran adelanto en la enseñan- de la Orquesta y del Coro del Tolima. En 1953
za musical y lograron que Ibagué se consoli- llega a la ciudad de Ibagué el maestro Quarto
dara como la “Ciudad musical de Colombia”. Testa, ocupando el cargo primeramente como
El Conservatorio del Tolima llegó a contar en- profesor de violonchelo y eventualmente direc-
tre sus filas a músicos de gran nivel entre ellos tor del Coro y la Orquesta del Conservatorio.
Dentro de los directores alemanes más
3 Alberto Castilla (1878-1937) Director y Fundador del Conservato- destacados podemos nombrar a Alfred Hering
rio de Música del Tolima, Senador y Representante por el Tolima,
Secretario de Gobierno y Hacienda en varias ocasiones. Entre sus quien fuera director del Conservatorio del To-
composiciones se destacan el Bunde, el Cacareo, Misa de Requiem,
Fuentecilla, entre otras. lima entre 1959 hasta 1964 y director del Coro
Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

del Tolima. Gracias a él se implementó la en- nerando mejores oportunidades para sus inte-
señanza del método Orff en dicha institución. grantes y para la comunidad a la que pertene-
Por último tenemos al maestro español Vicente cen. Como lo dice el Plan Nacional de Música
Sanchis Sanz quien llegó en 1965 como subdi- para la Convivencia:
rector y posteriormente como director artísti- Las bandas de viento son un proyec-
co. Fue con el maestro Sanchis que el Coro del to artístico y educativo que ofrece a las nue-
Tolima realizó una memorable gira por Euro- vas generaciones oportunidades de formación,
pa, presentándose en el Concurso Internacio- creación e interpretación musical. Alrededor de
nal Guido D’Arezzo. Otros directores fueron el ellas se congregan los habitantes de las localida-
argentino Jorge Fontenla, el español José Luis des y las familias de cada uno de sus integran-
de Salbide, el suizo Fritz Voegelin y el italiano tes, posibilitando el fortalecimiento del tejido
Franco Piva entre otros. (Saavedra, 1986) social. (Ministerio de Cultura, 2005, p 11)
Pero estos procesos no serian posibles sin
Segunda parte la ayuda de un director, ya que este es el encar-
gado no sólo de dirigir al grupo en cuanto a lo
El papel del director en Colombia y sus cam- musical sino también es el encargado de liderar,
pos de acción organizar, gestionar y educar a los músicos de
En una sociedad como la nuestra en donde los su agrupación.
índices de desempleo, analfabetismo y desnu- Nos damos cuenta cada vez más que la
trición son altos, las condiciones de vida no función del director ya no es la misma del siglo
son las mejores para desarrollar una educación XIX o comienzos del XX, en donde éste sola-
óptima y de calidad. Es por esta razón que el mente cumplía labores estrictamente musicales
gobierno ha generado procesos educativos y como la escogencia del repertorio y el montaje
50 culturales para lograr una mejor educación te- del mismo. Hoy en día las funciones del direc-
niendo en cuenta la música como pilar de di- tor van mucho más allá, si se tiene en cuenta
chos procesos ya que esta es capaz de enseñar y que, no sólo en nuestro país sino también en
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 45 - 53

transmitir diferentes emociones a nuestra vida. Latinoamérica, el presupuesto para la cultura es


Tenemos como ejemplo de esto la funda- cada vez más bajo haciendo que las funciones
ción Batuta, la Red de Orquestas de Medellín del director se extiendan hacia lo administrati-
y el Plan Nacional de Música para la Convi- vo y pedagógico. Me permito citar nuevamente
vencia. Este último toma como eje central el el Plan de Música para la Convivencia donde
formato banda, que como sabemos es quizás nos dice que el director:
el más importante y más difundido a nivel na- Es el principal recurso de la banda – es-
cional, pues se sabe que existen en la actualidad cuela ya que cristaliza el proyecto de formación
aproximadamente 1215 bandas entre infanti- y práctica musical. En lo posible la alcaldía
les, juveniles y mayores en todo el país. debe vincular laboralmente al director, quien
Vemos como las bandas cumplen un papel tiene como responsabilidad de dar cuenta de
muy importante en los procesos de formación su calidad artística y educativa, crear o conso-
musical, artística y cultural de nuestro país, ge- lidar la banda – escuela y adelantar una labor
51
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

permanente de gestión para que el proceso se Anteriormente vimos como en el siglo


fortalezca y sea sostenible. (Ministerio de Cul- XIX y principios del siglo XX los únicos di-
tura, 2005, p 11) rectores profesionales que llegaban a nuestro
Los campos de acción de los directores en país eran extranjeros que venían ya sea en las
Colombia son básicamente tres: la orquesta, el compañías de ópera o como directores invita-
coro y la banda. Hay que tener en cuenta que dos. Los pocos directores profesionales con que
en nuestro país el número de agrupaciones pro- contábamos anteriormente se formaban en Eu-
fesionales en este tipo de formatos es mínimo, ropa. Actualmente el panorama ha cambiado.
de modo que la mayoría de nuestros directores Durante los últimos años muchas universida-
se desempeñan en agrupaciones juveniles e in- des en diferentes ciudades del país, sobre todo
fantiles liderando procesos de formación. Así Bogotá, han venido ofreciendo programas de
pues, esto hace que la actividad musical de un dirección ya sea orquestal, coral o de banda.
director, sobre todo de banda, exige que ade- Esto permitió que nuestro país se nutriera y se
más de desempeñarse como director, también autoabasteciera de jóvenes directores con una
se desempeñe como compositor, arreglista, formación académica dispuestos a liderar los
pedagogo, gestor e intérprete ya que se cuenta distintos procesos de formación musical.
con pocos recursos para llevar a cabo este tipo Estos programas universitarios, básica-
de procesos formativos y es el director el que mente se enfocan en la dirección de orquesta,
asume estas responsabilidades enseñando a los centrándose sobre todo en el repertorio clási-
jóvenes y niños a interpretar un instrumento, a co, romántico y algunas obras representativas
leer las grafías musicales, a componer o adaptar de comienzos del siglo XX, dando énfasis en la
música y a conseguir recursos para su agrupa- parte gestual. Esto mismo sucede con la direc-
ción. Vemos entonces las diferentes facetas que ción coral y de banda. En la praxis, se trabaja
cumple el director en nuestra sociedad. Este fe- sobre todo con pianistas correpetidores y de vez
nómeno se da sobre todo en nuestro país y en en cuando, sobre todo en los últimos semestres
Latinoamérica más que en Europa. se hace la práctica con un conjunto, ya sea la
orquesta, el coro o la banda. Como sabemos,
La formación del director en Colombia la orquesta es el instrumento del director, de
En nuestro país, históricamente, la formación modo tal que estudiar dirección es igual que
de un director era sobre todo empírica. Gene- estudiar otro instrumento, requiere disciplina
ralmente, y todavía se da, el director iniciaba y dedicación. Pero a diferencia de otras disci-
su formación musical como intérprete de algún plinas musicales, el estudiante de dirección no
instrumento que conformaba la banda del pue- siempre tiene a su disposición su instrumento,
blo y años después éste sucedía al director en de manera que tiene que hacerlo mentalmente.
retiro. Muchos de estos directores, por supues- He aquí una de las grandes dificultades para un
to no contaban con una batuta ni con un score, estudiante de dirección y si a eso se le suma que
así que dirigían al frente del grupo tocando su en nuestro país, algunas de las universidades o
instrumento y leyendo con el papel del primer conservatorios que brindan este tipo de carre-
clarinete. ras no cuentan con los ensambles necesarios,
Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

o sea un buen instrumento para el director, la en cuenta que en nuestro país, un músico con
dificultad es mayor. pregrado en dirección tiene posibilidades de
encontrar trabajo como director en Batuta, o
Reflexión final en la Red de Orquestas de Medellín o como
A pesar de que en nuestro país el campo de director de una banda en un municipio. Quie-
la dirección sinfónica ha avanzado significa- re decir que va a tener que enfrentarse a niños
tivamente, gracias a los intentos de algunas y jóvenes en formación. Más no a músicos de
universidades por vincular esta profesión a la una orquesta profesional. Teniendo en cuenta
academia, todavía hay muchos aspectos en que esto, vemos que la academia realmente no pre-
mejorar, pues todavía se sigue enseñando de la para a los estudiantes a enfrentarse a este tipo
manera tradicional como si fuéramos europeos de grupos, a liderar procesos y a gestionar pro-
o como si una vez graduados nos fuéramos a yectos. En cortas palabras, se desconoce nuestra
dirigir las mejores orquestas del mundo, dejan- realidad. Por ejemplo se estudian las sinfonías
do de lado nuestra realidad. Surgen entonces de Beethoven, pero no se tienen en cuenta las
algunas preguntas sobre las cuales podemos sinfonías de compositores colombianos o Lati-
reflexionar como por ejemplo: ¿de qué vive noamericanos. Esto mismo pasa con los instru-
realmente un director? es obvio que en Colom- mentistas convirtiéndose en un círculo vicioso,
bia y en Latinoamérica son pocos los directo- pues los instrumentistas no quieren tocar otro
res que viven exclusivamente de su profesión. repertorio distinto al tradicional y los directo-
La mayoría de ellos, al igual que otros colegas, res no quieren dirigir otras obras distintas a las
viven de la docencia, ya sea en academias de acostumbradas. No quiero decir con esto que
música, universidades y/o conservatorios. Pero, desde la academia se tenga que desconocer el
surge otra pregunta al respecto ¿Qué enseña un repertorio clásico, que es importante cono-
52 director? algunos con suerte enseñan su oficio cerlo, pero sí que se abran espacios para otros
mientras que otros son profesores de teoría. repertorios, colombianos y latinoamericanos,
Este fenómeno no es exclusivo de los directo- que estén estrechamente relacionados con to-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 45 - 53

res, vemos por ejemplo que los pianistas viven dos estos procesos de formación musical.
prácticamente de enseñar o acompañar y de
vez en cuando dan un recital o tocan de solistas Bibliografía
con una orquesta. Bermúdez, E. (2000) Historia de la música en Santafé y
Otra pregunta que surge y que vale la Bogotá, 1538-1938 en Colombia. Alcaldía de Bo-
pena reflexionar sobre esta es ¿los procesos de gotá.
formación de un director en Colombia, están De Greiff, O. (2006) Escritos sobre música clásica en la
realmente enfocados a la realidad nacional? La Colombia del siglo XX. . Secretaría de Cultura de
respuesta es no. Si vemos el campo de acción Antioquia. Medellín
en el cual se desenvuelve un director en Co- Ministerio de Cultura,(2005), Manual para la Gestión de
lombia, y lo comparamos con la formación que bandas- Escuela de música. Plan nacional de Música
este recibe en la academia, nos damos cuenta para la convivencia. Bogotá. Descargado en
que están desarticulados. Hay que tener muy
53
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Reflexión histórica de la dirección sinfónica en ColombiaDirectores destacados

http://www.sinic.gov.co/SINIC/Publicaciones/archi- Saavedra, F. (1986) Grandes Directores del Conservatorio


vos/125-2-1-20-2005105155438.pdf del Tolima. Revista El Boga, Magazín Porque !...
Perdomo Escobar, J.I. (1975). Historia de la música en Ciudad Musical? Varios autores. Editorial Atlas.
Colombia (4th ed.), Bogotá: editorial ABC. Ibagué
55
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

La autoevaluación en el docente universitario:


una actividad indispensable para la cualificación
de los procesos educativos
Carlos David Leal Castro*

Resumen. Para nadie es un secreto que la evaluación educativa hoy en día es objeto de una amplia gama de
reflexiones y debates en el contexto nacional que reivindican su trascendencia como una actividad necesaria.
Esto obedece en gran parte al imaginario predominante en el mundo educativo según el cual “aquello que
no se evalúa, no se mejora”. Sin embargo, esta presunción parece tener relativa validez, pues no se trata de
evaluar “sin ton ni son”, como lo afirma Miguel Ángel Santos Guerra, o de evaluar atendiendo de forma
sumisa y unívoca a los intereses externos del mercado del trabajo, del poder, del dinero, de la injusticia y de
la desigualdad. (Santos Guerra, 2001). Se trata de evaluar con base en criterios éticos racionales que le per-
mitan al docente apelar a su autonomía y al ejercicio reflexivo como condiciones sine qua non para alcanzar
una calidad cimentada en un aspecto que le debe ser inherente al docente en el mundo actual y que desde la
filosofía platónica y algunos pensadores modernos como Descartes, Spinoza o Kant ya se dilucidaba como
piedra angular para la formación del hombre: la necesidad de pensar, de aprender a pensar por sí mismo.

Palabras claves: Evaluación, autoevaluación, autonomía, calidad, educación.

Abstract. It is no secret that educational assessment is now subject to a wide range of discussions and
debates in the national context in favor of its importance as a necessary activity. This is due largely to the
dominant imagery in the educational world, according to which “What is not evaluated is not improved.”
However, this assumption seems to be relatively valid, as it is not only about assessing “without rhyme or
reason”, as stated by Miguel Angel Santos Guerra, neither assessing in a submissively and unambiguous way
the external interests of labor market, power, money, injustice and inequality. (Santos Guerra, 2001). It is
all about assessing based on rational and ethical criteria that allow the teacher to appeal their autonomy and

* Mg(c) Educación, Universidad del Tolima. Docente del Conservatorio del Tolima. carlos.leal@conservatoriodeltolima.edu.co
La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

reflective practice as sine qua non to achieve a quality rooted in an aspect that should be inherent to the tea-
cher in the world today and since Platonic philosophy and modern thinkers as Descartes, Spinoza or Kant
already elucidated as a cornerstone for the formation of man: the need to think, learn to think for himself.

Keywords: Evaluation, self-assessment, autonomy, quality, education

Introducción mismo para construir sus propios presupuestos


evaluativos.
Evaluación y calidad, más allá de la hetero- En este sentido la evaluación como activi-
nomía dad o proceso que permite acceder a determina-
Existe un vínculo innegable entre la evalua- dos <<estándares de calidad>> no debe obede-
ción autónoma, reflexiva, que lleva al docente cer de forma unilateral a imperativos exógenos
a pensar por sí mismo apoyándose en procesos o a imposiciones de la normatividad existente,
metacognitivos, y una de las ideas más difun- sino que debe entenderse como un prurito aca-
didas en el sistema educativo actualmente, es la démico y ético en el que se debe reivindicar la
de la “calidad educativa”, idea cuya concreción capacidad autónoma, crítica y reflexiva del do-
se hizo posible en el marco de la “evaluación cente, quien está llamado a pensar y repensar
de la calidad” que avino a nuestro contexto permanentemente sus prácticas, teniendo en
en sintonía con el estribillo de moda, el de las cuenta los aciertos y desaciertos y respaldándo-
competencias1, y que continúa vigente en los se en sus propios procesos metacognitivos.
discursos educativos. De allí es entendible que Desestimar los anteriores elementos ha
la Ministra de Educación del anterior gobier- conllevado a la instauración de condiciones de
no señale sistemáticamente que la comunidad heteronomía en los procesos evaluativos, lo cual
56 educativa hoy en día reconozca la estrecha rela- se traduce básicamente en condicionamientos
ción que existe entre calidad de la educación y evaluativos regidos por imperativos que están
evaluación (Vélez White, 2009). desacordes con los rasgos idiosincrásicos y la
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 55 - 60

Sin embargo, más allá de concientizar al realidad de los procesos educativos de nuestro
docente de la inobjetable articulación entre la medio, imperativos que tampoco están sintoni-
evaluación y la calidad de la educación repro- zados con la voluntad de los docentes, quienes
duciendo miméticamente un discurso oficial ven mancillada su “autonomía” y sus posibili-
que legitima preceptos normativos, existe otra dades de autoformación al imponérseles <<des-
perspectiva educativa que llama fuertemente la de afuera>> instrumentos preestablecidos que,
atención por cuanto concibe la evaluación ya desde ningún punto de vista, contribuyen para
no como una acción basada en procesos regu- fomentar el espíritu crítico y reflexivo sobre sí
lados por agentes y agencias externas que, en y sobre su desempeño evaluativo y educativo.
últimas, propenden por la heteronomía más Como aquel oráculo de la filosofía orien-
que por la capacidad autónoma del docente tal que no da respuestas claras, obvias ni inme-
diatas sino que apenas señala el posible camino
1 Ver a este respecto el texto de Zamudio Bustamante, Guillermo
que titula La moda de las “Competencias” p. 21 ante ciertas pistas enigmáticas, el maestro debe
57
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

hacer de su quehacer una práctica en la que no neologismo, que responde a múltiples intereses
importa tanto la respuesta como sí la calidad en el ámbito educativo” (Díaz Barriga, 2001).
de la pregunta, una actividad en la que debe Algunos discursos tanto oficiales como extraofi-
seguir las orientaciones del contexto educativo ciales que se escuchan en el contexto nacional
en el que está inmerso y que le debe llevar a du- coinciden en esta articulación que también ha per-
dar racionalmente de la normatividad evalua- meado el pensamiento de diversos países de otras
tiva homogénea y exógena a la(s) realidad(es) latitudes. Sin embargo, algo tan sonado como esta
escolar(es), impuesta, arbitraria y descontex- confluencia terminológica no debe estar exenta de
tualiza. sospechas, máxime cuando “resulta particularmen-
De lo anterior surge la pertinencia de te significativo analizar cómo el concepto calidad
perspectivas evaluativas que propendan por la de la educación sólo ha podido tener consistencia
autonomía, la reflexión, la emancipación y la en el campo de la educación a partir de su vincula-
responsabilidad, más aún en contextos como ción con las prácticas de evaluación [y cuando] los
el universitario, toda vez que la universidad es estudios sobre calidad -en general vinculados a los
el ámbito por antonomasia en el cual se deben productos- no se han podido aplicar al escenario
impulsar condiciones que les permitan a los educativo precisamente por la dificultad para de-
diferentes actores (y en particular al docente) finir tales productos, o mejor aún, por reducir los
reflexionar autónoma y críticamente sobre sí procesos simbólicos que subyacen en los procesos
mismo y sobre su desempeño en los procesos educativos a magnitudes de resultados” (Díaz Ba-
de enseñanza y aprendizaje. rriga, 2001).

La autoevaluación del profesorado, Artículos recientes que proceden de inves-


una actividad indispensable tigaciones en el ámbito universitario indican
Para nadie es un secreto que la evaluación está cómo en el sistema educativo persiste aún un
desempeñando un papel preponderante para la marcado interés por el tema de la calidad edu-
“medición” de la educación y que, por consi- cativa. Sin embargo, más allá de reivindicar esta
guiente, ella tiene un estrecho vínculo con la relación, que ya suena a lugar común, parece
idea de “calidad educativa”. Así, la evaluación preeminente reconocer que, el interés sobre la
se muestra como una actividad indispensable calidad, ha conllevado a focalizar la atención
y previa a toda acción conducente a lograr la sobre un aspecto particular que incide en ella:
optimización de los procesos de enseñanza y la evaluación del profesorado, una actividad
de aprendizaje. Esta relación que articula algu- imprescindible en el mundo actual cuando se
nas nociones como las de “evaluación”, “me- trata de mejorar los procesos de las institucio-
dición”, “optimización” y “calidad” corrobora nes educativas y el desarrollo profesional del
que, “frente al “caos” conceptual, en el que se profesorado (Magaña Echeverría, Montesinos
mueve el concepto de marras, la articulación López, & Hernández Suárez, 2007).
con el de ‘evaluación’ resuelve el problema; de Por lo anterior, las prácticas evaluativas no
esta manera, evaluación de la calidad y medición deben recaer de forma exclusiva sobre el estu-
de la calidad se han convertido en una suerte de diantado, por cuanto esta óptica parcializada
La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

confina precisamente lo que aquí se reclama: la en aras de que asuma responsabilidades en el


necesidad de implementar prácticas evaluativas proceso de construcción de su proyecto de vida
en otros agentes, como los docentes, quienes (Escobar Londoño, 2007). Por ello, no es sen-
generalmente pasan inadvertidos pese a su ele- sato que la modalidad de la heteroevaluación
vada incidencia en la cualificación de los proce- siga prevaleciendo en el contexto universitario
sos educativos. De esta situación procede una ya que ésta privilegia cuestiones normativas, es-
de las patologías que circundan el tema de la tatales, organizacionales, instrumentales y exó-
evaluación y que radica en que solo el alum- genas que no contribuyen significativamente ni
nado es objeto de evaluación. Pedagogos como para la dignificación y la profesionalización de
Miguel Ángel Santos hablan sobre la necesidad la labor docente ni para la cualificación real de
de que se rompa la exclusividad de la evaluación los procesos educativos.
del alumno dentro del sistema educativo pues- De hecho, la autoevaluación en el docen-
to que no todo lo que hacen ellos encuentra te universitario no solo tiene una importancia
raíz en sus capacidades, en sus formas de traba- con miras a la obtención de la calidad y la cua-
jo o en sus actitudes (Santos Guerra, 2003). De lificación en general de los procesos educati-
ahí que sea menester considerar la complejidad vos sino que también es vital en relación con
evaluativa involucrando otros agentes que re- el desarrollo profesional mismo. Autores como
percuten en los procesos educativos. Duke y Stiggins, citados por Niño Zafra, coin-
En este sentido la evaluación del docente universi- ciden en que “el desarrollo profesional puede
tario se muestra como una actividad necesaria para darse cuando, aún los profesores con bajo des-
la mejoría de los procesos educativos pues desde empeño, tienden a buscar la excelencia a través
ella “se puede cualificar la práctica y favorecer su de la reflexión de sí mismos, ampliando así el
desarrollo, entendiendo al docente responsable conocimiento de sus responsabilidades de indi-
58 de un trabajo específico en el aula y a la profesión viduos y participantes de una carrera profesio-
integrante de un colectivo igualmente responsable nal” (Niño Zafra, 2003).
del mejoramiento de la institución y la comunidad En este sentido la reflexión debe conside-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 55 - 60

educativas” (Niño Zafra, 2003). rarse como un proceso inherente al estamento


docente en contextos como el universitario por
Dentro de las múltiples modalidades que cuanto ello puede propiciar nuevos derroteros
tiene la evaluación del docente, existe una que evaluativos acordes con las realidades escola-
hoy en día debe reivindicarse con el fin de pa- res, más que con intereses y preceptos exóge-
liar las condiciones de heteronomía que cam- nos normativos que, la mayoría de las veces,
pean en las prácticas evaluativas y para superar actúan negativamente como imperativos a los
el pensamiento neoconservador que se apodera que deben atender los maestros en sus procesos
del mundo educativo occidental: la modalidad educativos y evaluativos. Autores como Mc-
autoevaluativa. Esto obedece a que la autoeva- Cormick, citado por Niño Zafra (Niño Zafra,
luación es por excelencia la modalidad que le 2003), coinciden en que “los profesores y las
permite al docente fomentar el espíritu críti- escuelas estarán dispuestos a mejorar su prác-
co y reflexivo sobre sí y sobre su desempeño, tica si consideran que forma parte de su res-
59
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

ponsabilidad profesional, mientras que es pro- que permita alcanzar el dorado eficaz de las
bable que se opongan al cambio si se les obliga prácticas evaluativas. Lo único que el indivi-
a ello”. Sumado a esto, Álvarez reivindica una duo puede afirmar de forma cierta es su propia
práctica fundamentada en el cuestionamiento, existencia.
una práctica crítica y reflexiva que rompa con Intelectuales como Estanislao Zuleta son
decisiones rutinarias recibidas (Álvarez Mén- claros al afirmar que “habría que ver la edu-
dez, 2003). cación como un proceso de formación y de
El cuestionamiento se convierte enton- acceso al pensamiento y al saber en el sentido
ces en piedra angular para reflexionar sobre clásico en que la filosofía lo ha considerado des-
los procesos evaluativos llevados a cabo por el de la antigüedad” (Zuleta, 1995).2 Esto implica
docente. “En coherencia con ello, el compro- que el docente asuma una actitud crítica y re-
miso de las instituciones, de los docentes y del flexiva frente a sus propias prácticas evaluativas,
Estado ha de girar en torno a la formación de aquellas que tradicionalmente le han sido im-
un talento humano capacitado a través de áreas puestas, y que la autoevaluación en el docente
particulares, para ejercer su libertad, autorre- se convierta no en una demostración del saber
gular sus desempeños y autoevaluar sus accio- sino en una construcción de saber permanen-
nes dentro de contextos específicos” (Escobar temente. “Esa necesidad de saber no es pensa-
Londoño, 2007) . No se trata por supuesto de da por Platón como una necesidad de infor-
entender la autoevaluación en el docente uni- mación, sino como una necesidad de pensar.
versitario como una entelequia abstracta: la au- El criterio es aprender a pensar por sí mismo”
toevaluación se debe convertir para el docente (Zuleta, 1995).
en la posibilidad de construcción activa de su No se trata entonces de transmitir axio-
propio aprendizaje, experiencia individual que mas evaluativos generales por medio de entes
se complementa efectivamente con la experien- reguladores sino de que el docente encuentre
cia social, espacios de interacción y de inter- el saber adecuando la evaluación al contexto en
cambio. (Álvarez Méndez, La evaluación edu- el que está inserto por sus propios medios, ha-
cativa en una perspectiva crítica., 2003). biendo hecho un proceso de pensar y reflexio-
Esto legitima que la autoevaluación, más nar por sí mismo. De esta forma, la pretensión
allá de basarse en “respuestas certeras”, debe va- no es otra de que la autoevaluación se convierta
lidar la calidad de las preguntas con base en una en un insumo empleado por el docente para
suerte de pistas que, en el caso del tema que nos autoformarse como pensador, investigador y
atañe, proceden de una realidad educativa que creador pues, un docente que pueda pensar por
no puede ni debe ser regulada homogéneamen- sí mismo, apasionarse por la búsqueda del sen-
te por la normatividad. Esto pone de manifies- tido de sus propuestas educativas, formativas,
to también la importancia de la duda racional evaluativas, es un hombre mucho menos mani-
cartesiana en el ámbito evaluativo, pues no hay pulable que aquel hombre que no es capaz de
una sola verdad, una sola norma, que pueda
direccionar el rumbo de las cosas, no hay un 2 Recuérdese que la evaluación es también un proceso formativo y
educativo que debe permitirle al evaluado acceder a o potenciar su
solo método ni un solo fundamento racional mayoría de edad en el sentido kantiano.
La autoevaluación en el docente universitario: una actividad indispensable para la cualificación de los procesos educativos

reflexionar sobre la forma como está llevando a asunto vital en la educación superior. Revista Lasa-
cabo su quehacer como docente. llista de Investigación., 50-58.
García, E. Núcleo de Teoría y práctica de la evaluación.
A manera de conclusión Notas de clase, Maestría en educación, Universi-
A partir de lo anteriormente mencionado se dad del Tolima. Semestre A-2009.
puede finalizar reconociendo que la actividad Gobierno Nacional. (1994). Ley 115. Santafé de Bogotá
autoevaluativa es de suma importancia para la D.C.: Congreso de la República de Colombia.
cualificación de los procesos educativos toda Magaña, M. a., Montesinos López, O. A., & Hernández
vez que desde ella es posible paliar las condicio- Suárez, C. M. (2007). Comparación del nivel de
nes de heteronomía que campean en las prác- escolaridad para el desempeño docente y acadé-
ticas de enseñanza y aprendizaje en el contexto mico. Revista mexicana de investigación educativa,
universitario, para propender por la calidad 615-634.
educativa pues, como se ha dicho, existe un Malagón, L. A. (2008). Lineamientos curriculares para la
vínculo estrecho entre la idea de la calidad y universidad social y regional. Ibagué: Universidad
una evaluación autónoma, reflexiva, metacog- del Tolima.
nitiva, tendiente a fomentar el espíritu crítico El Tiempo (2009, Abril 12). A la hora de evaluar, ¿letras
y reflexivo. o números?, pp. 2-6.
Niño, L. S. (2003). Las tendencias predominantes en la
Bibliografía evaluación docente . Revista Opciones Pedagógicas,
Álvarez, J. M. (2003). La evaluación a exámen . En J. M. 1-23.
Álvarez Méndez, La evaluación a exámen (pág. s.p. Santos, M. Á. (2001). Sentido y finalidad de la evalua-
). Buenos Aires: Mino y Dávila. ción de la universidad. Rev. Perspectiva educacio-
Álvarez, J. M. (2003). La evaluación educativa en una nal., 9-33.
perspectiva crítica. Encuentro internacional sobre Santos, M. Á. (2003, Abril 20). Mucha evaluación y
60
políticas, investigaciones y experiencias en evaluación poco cambio. (C. A. Hernández, Interviewer).
educativa: consecuencias para la educación (págs. Vélez, C. M. (2009, Abril 18). Evaluacion y calidad . El
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 55 - 60

1-19). Bogotá, D.C.: División de recursos educa- tiempo, p. 1-23.


tivos y publicaciones de la Universidad Pedagógica Zuleta, E. (1995). Educación y filosofía. En E. Zuleta,
Nacional. Educación y democracia. (pp. 93-110). Bogotá.:
Escobar, J. V. (2007). Evaluación de Aprendizajes. Un Corporación Tercer Milenio - Fundación E. Zuleta.
61
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Neurología y cognición musical

Neurología y cognición musical


Ruth Nayibe Cárdenas Soler*
(Fecha de recepción julio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. El presente texto se fundamenta en tres artículos: “The Neuroscientific Basis of Music: Appli-
cations to the Development of Talent and Education” de William Bart y Michael Athernon, “Swinging in
the Brain: Shared Neural Substrates for Behaviors Related to Sequencing and Music” de Janata y Grafton y
“Towards a Neural Basis of Music Perception” de Koelsch y Siebel. Adicionalmente, su desarrollo se encuen-
tra matizado por otros autores e investigadores que relacionan sus postulados con los temas tratados por los
tres primeros artículos mencionados. Vale la pena resaltar la importancia del trabajo interdisciplinario en
los hallazgos científicos que se pueden lograr en cada campo del saber, constituyéndose en un significativo
aporte para el fortalecimiento e impulso de la ciencia. En este caso, estos estudios tendrían una importante
implicación pedagógica para la educación musical, de manera particular, pero también para la educación
general, revalidando la apreciación y la importancia de los procesos musicales en la escuela.

Palabras clave: Cerebro, neurología, cognición musical, emoción.

Abstract. This text has been developed based on three articles: “The Neuroscientific Basis of Music: Appli-
cations to the Development of Talent and Education” by William Bart y Michael Athernon, “Swinging in
the Brain: Shared Neural Substrates for Behaviors Related to Sequencing and Music” by Janata y Grafton
and “Towards a Neural Basis of Music Perception” by Koelsch y Siebel. Additionally, its development is
nuanced by other authors and researchers who relate their postulates with the topics reviewed in the first
three articles mentioned above. It is worth noting the importance of interdisciplinary work in scientific
discovery that can be made for each field of knowledge, constituting a significant contribution to stren-
gthening science. In this case, these studies would have important pedagogical implications for music
education, so particular, but also for general education, assessment and revalidate the importance of music
teaching in the school.

* Doctoranda (c) de la Universidad de Granada (España) ruthnayibecardenas@ugr.es


Neurología y cognición musical

Key words: Brain, neurology, musical cognition, emotion.

Introducción tarse con músculos y glándulas. De esas unio-


nes, denominadas sinapsis, depende nuestra
“La música es uno de los más viejos y más básicos memoria, nuestro aprendizaje, nuestra forma
dominios socio-cognitivos de la especie humana” 1 de hablar, nuestros movimientos y otra serie
(Koelsch y Siebel, 2005) de habilidades cognitivas, es decir, el funciona-
miento de la mente.
Conocer el funcionamiento del sistema El proceso de aprendizaje garantiza el
neurológico a partir de estímulos sonoros re- cambio de la fisiología del cerebro. Al respecto
sulta muy interesante para cualquier músico, de las investigaciones sobre el tema, lo único
pero más aún para un educador musical. La te- que se sabía era que el cerebro había cambiado
mática de música y cerebro debe ser consultada de tamaño. Pero, la experiencia diaria garantiza
por pedagogos, músicos, docentes de música, que el ser humano no se acuesta en la noche
sicólogos y estudiantes de música (Hernández, con el mismo cerebro con el que se despertó
2002). Estos aspectos permitirían explorar o en la mañana. Esto significa que día a día, con
preguntarse sobre las formas en que se puede las diferentes experiencias, nuestro cerebro se
potenciar el desarrollo de habilidades desde el va modificando.
órgano rector de nuestro organismo, el cerebro. (Lacárcel. 2003) manifiesta que para hablar de
Conocer e interpretar esta completa máquina educación musical se hace necesario hablar de psi-
es imprescindible hoy día, y resulta una tarea cología de la música, tomando en cuenta la forma-
de fácil alcance dados los avances de la tecnolo- ción integral del ser, que incluye los desarrollos:
gía y la ciencia, que nos permiten ver, a través biológico (corporal, cerebral), sicológico y emo-

62 de scanner especializados, la actividad cerebral cional, además de su interacción con el entorno.


cuando se realizan determinadas acciones, en Manifiesta que la música influencia la totalidad del
tiempo real. cuerpo, la mente, las emociones y el espíritu, tam-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 61 - 69

El cerebro humano es un instrumento bién relacionando el individuo con la naturaleza y


funcional, organizado y complejo, además de el medio social. La Neurociencia moderna ofrece
ser la única parte del cuerpo humano que ha explicaciones de cómo se dan los procesos cogni-
evolucionado. Se subdivide en dos hemisferios tivos en la música y en la educación, constituyén-
que se conectan por el cuerpo calloso. Puede dose en un aporte y una herramienta de trabajo
contener cien mil millones de células nervio- significativa para los educadores y más aun para los
sas, llamadas neuronas, y un número mayor profesionales y maestros del área musical.
de otras células llamadas Gliales, pero sólo las
primeras son las encargadas de recepcionar y Música y cognición
transmitir la información, permitiéndole, este El arte musical, como fenómeno físico, consis-
hecho, conexionar entre sí, pero además conec- te en secuencias de movimiento y sonido que
se engranan en la mente produciendo varia-
1 Traducción del texto original: “Music is one of the oldest and most
basic socio-cognitive domains of the human species.” das experiencias sensitivas y cognitivas. Es así
63
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Neurología y cognición musical

como la música nos genera, provoca o moti- miento verbal y las habilidades memorísticas; y
va hacia el movimiento (especialmente por el el lóbulo prefrontal derecho en el procesamien-
componente rítmico) y de esta manera baila- to espacial visual. Por esta razón cobran impor-
mos, palmeamos, nos balanceamos o dispone- tancia, para la educación, las investigaciones
mos nuestro cuerpo para moverse. La música, en cuanto a cognición musical, dado que se
como fenómeno sensorial, provoca reacciones ha encontrado y demostrado que la formación
y respuestas perceptivas y emocionales, donde en música (y en general la formación artística)
hablamos no solo de los textos de las cancio- incide en el desarrollo de otras capacidades o
nes –por ejemplo-, sino también del conteni- habilidades, en términos de Howard Gardner.
do semiótico de las melodías, los ritmos y los Notando entonces que no aplica específica-
acordes. Según Koelsch y Siebel (2005) el desa- mente para el campo del desempeño musical,
rrollo de las conductas musicales ha favorecido sino que a partir del trabajo con estímulos mu-
funciones evolutivas importantes a nivel social, sicales se pueden desarrollar habilidades que
tales como: la comunicación, la cooperación, nos sirven para desempeñarnos en diferentes
la cohesión social y la coordinación de grupo. áreas del conocimiento. Cabe resaltar, que esto
Esta manifestación artística ha sido un común puede ser aprovechado gracias a que la música
denominador permanente en todas las culturas es una actividad social, dado que hace parte de
y un factor coadyuvante en su propio desarro- la vida cotidiana de todas las culturas.
llo, al permitir expresar el transcurrir del tiem- Se pueden encontrar algunos estudios so-
po y las visiones que los pueblos tienen de su bre el tema, como los que se describen a con-
propia historia. tinuación.
La percepción de la música involucra funciones Bever y Chiarello (2009), que centraron
complejas del cerebro dentro de las que se resalta el sus investigaciones en el desempeño compara-
análisis acústico, la memoria auditiva, el análisis de do de músicos y no músicos, encontrando que
la escena auditiva y el procesamiento de la sintaxis los sujetos no músicos tenían mejores resulta-
y la semántica musical, afectando las emociones e dos reconociendo melodías que sonaban en su
influenciando el sistema nervioso autonómico, los oído izquierdo; mientras que para los que eran
sistemas hormonales e inmunes y las representa- músicos su preferencia estaba hacia aquellas que
ciones premotoras; aunque no necesariamente el sonaban en el oído derecho. De lo anterior se
significado de la música se asocia con sus propie- puede deducir que la formación musical per-
dades emotivas (Koelsch y Siebel, 2005). mite y desarrolla la habilidad de realizar trans-
ferencias del hemisferio derecho al izquierdo.
Existe una relación directa entre la percep- Rauscher, Shaw y Ky (1993), quienes de-
ción y la acción, y gracias a esta relación se per- sarrollaron una investigación con estudiantes
mite el análisis, desde el desempeño musical, universitarios, para entender la influencia de la
de la organización neuronal de las conductas música en el desarrollo del pensamiento no ver-
complejas (Janata y Grafton, 2003). El traba- bal. Este estudio se focalizó en tres grupos, uno
jo musical activa el lóbulo temporal izquierdo escuchaba determinada música de Mozart, en
en cuanto a la percepción auditiva, el procesa- determinado tiempo; otro realizaba sesiones de
Neurología y cognición musical

relajación y el otro se quedaba en silencio, tam- taban los ejercicios) obtuvieron unos puntajes
bién durante un tiempo determinado; luego de mayores en las pruebas aplicadas posteriormen-
estos ejercicios, los tres grupos presentaban un te a la actividad musical, en contraste con los
test cognitivo. Los datos resultantes se registra- niños de los demás grupos. De esta forma es-
ron en el siguiente orden de favorabilidad: pri- tablecieron que esta actividad específica (ejer-
mero el grupo que escuchó música de Mozart, citación motora y entonación-audición) refle-
luego el que participó en las sesiones de relaja- jaba modificaciones en los circuitos neuronales
ción y por último el grupo que se mantuvo en favoreciendo el desarrollo del razonamiento
silencio. Sin embargo, los investigadores resal- espacio temporal, aspecto denominado plasti-
taron que los efectos de la audición de la mú- cidad cerebral.
sica de Mozart no perduraban más allá de un Schneider, Scherg, Dosch, Specht, Guts-
determinado periodo seguido a la realización chalk, y Rupp (2002), realizaron investiga-
de la actividad y que de igual forma, música ciones involucrando a músicos profesionales,
de otros compositores podía servir en la misma músicos aficionados y no músicos usando mag-
tarea y conseguir con ella resultados similares. netoencefalogramas. A partir de estos estudios,
Twomey y Esgate (2002), que también encontraron que la región Gyrus de Heschl es
realizaron un estudio aplicando los principios más grande en los músicos profesionales que en
del efecto Mozart en un grupo de no músicos, los otros dos grupos (aficionados y no músicos) y
encontraron reacciones sobresalientes en la rea- que su actividad cerebral era más activa ante los
lización de una tarea específica, teniendo en impulsos o estímulos musicales. Estos investi-
cuenta la variable tiempo en estímulo (audi- gadores sugirieron que la habilidad musical de
ción) – respuesta (acción). un individuo puede estar influenciada por fac-
Por otra parte, Rauscher, Shaw, Levine, tores genéticos o por factores medioambienta-
64 Wright, Dennis, y Newcomb (1997) realizaron les, de igual manera sugirieron la importancia
una actividad de intervención musical con cua- del inicio en el ejercicio musical a temprana
tro grupos de niños –entre 3 y 4 años y medio-, edad, como se insinúa desde los planteamien-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 61 - 69

para determinar el desarrollo cognitivo genera- tos de los pedagogos musicales del siglo XX.
do después de la participación en actividades Gaser y Schlaug (2003), de quienes des-
musicales. Un grupo se ejercitaba con los te- tacan sus estudios por usar técnicas morfomé-
clados (pianos eléctricos), mientras cantaba las tricas en la comparación de los volúmenes de
lecciones; un segundo grupo trabajó canto; un materia gris en pianistas profesionales, músicos
tercer grupo recibió lecciones individuales de aficionados y no músicos, encontrando dife-
informática, directamente en el computador, y rencias significativas entre estos tres grupos de
el cuarto grupo no recibió ninguna clase de for- sujetos, en las regiones cerebrales de la audi-
mación. A continuación, a los cuatro grupos se ción, el control motor y la visual espacial, sien-
asignaron ejercicios de razonamiento espacial. do éstas mayores para el caso de los pianistas
Dentro de los resultados más significativos, los profesionales.
investigadores resaltan que los niños del primer También, Sluming, Barrick, Howard, Ce-
grupo (que se ejercitaron en los teclados y can- zayirli, Mayes, y Roberts (2002), realizaron un
65
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Neurología y cognición musical

estudio similar al del equipo anterior, donde lodías, acordes y ritmos o simplemente cómo
también analizaron comparativamente el volu- se evidencia la coordinación motora – sensorial
men de material gris en dos grupos de sujetos: (sensomotora) en el cerebro de un músico ins-
músicos profesionales y no músicos, encontrando, trumentista. Estos sonidos se producen en un
en los primeros, mayor volumen en el área de tiempo adecuado y posiblemente en respuesta
broca, que es la sección cerebral considerada el a impulsos antecedentes.
centro de desarrollo de las habilidades del len- Janata y Grafton (2003) sugieren tres es-
guaje. pacios de investigación para la música y la cog-
Ho, Cheung, y Chan (2003) estudiaron nición, estos son: la sincronización, la atención
dos grupos de niños –entre 6 y 15 años-. Un y la secuencia de aprendizaje. La sincroniza-
grupo tenía formación musical y participaban ción hace referencia a la producción sonora, en
en una orquesta de cuerdas tocando música un espacio de tiempo determinado, que pue-
clásica occidental, y el otro grupo no tenía for- de ser: secuencias de una duración constante
mación musical. Estos investigadores aplicaron o secuencias de variados tiempos de duración
test de memoria verbal a los dos grupos de ni- (polirritmias). Esta, la sincronización, resulta
ños, encontrando resultados más satisfactorios ser una habilidad importante, sobre todo en la
en el primer grupo y resaltando que su nivel de ejecución instrumental en un ensamble, donde
memoria tenía mayor alcance temporal. se atiende a una señal y se continúa en perpe-
Otro trabajo de este corte, es mostrado tua atención, es decir que el músico mantiene
por Janata y Grafton (2003) y está basado en un tiempo en su cerebro, mientras realiza su
estudios de neuroimagen sobre las secuencias ejecución, lo que no interfiere con permanen-
musicales complejas que se representan y se tes ajustes de sincronización que sean requeri-
producen en el cerebro. Cuando un individuo dos, según lo mande el director del ensamble.
interpreta una obra musical, la experiencia sen- Koelsch y Siebel (2005) manifiestan que la
sorial se relaciona directamente con la acción. actividad musical de grupo es tremendamen-
Es así como estos investigadores sugieren que te exigente para el cerebro humano, al requerir
dichos estudios sirve como modelo para enten- que se tengan en cuenta diversos procesos cog-
der los circuitos neuronales y los mecanismos nitivos que incluyen: la percepción, la acción,
de engranaje en el emparejamiento sensomo- la cognición, la cognición social, la emoción,
tor. Un emparejamiento simple puede consis- el aprendizaje y la memoria; los cuales deben
tir en mover el pie al ritmo de una canción, conjugarse por parte de todos los miembros
mientras que un emparejamiento complejo de la agrupación musical; e ahí la importancia
sería bailar un vals cantando una canción o to- funcional de un Director de orquesta.
cando un instrumento musical. Estas acciones En lo relacionado con la secuencia de
están directamente relacionadas con el diseño aprendizaje o secuenciación, se refiere a las ta-
motor. Este diseño determina cómo nos mo- reas de seriación – reacción – tiempo. Cuan-
vemos o desplazamos en el espacio, cómo po- do la secuencia es repetitiva se produce una
nemos los dedos (digitación), manos y brazo respuesta motora, si no hay interferencia de
sobre un instrumento musical para generar me- procesos puramente analítico cognitivos. La es-
Neurología y cognición musical

tructura de los acentos, que marca el desarrollo se tiene, a través de los análisis de neuroima-
de los tiempos, puede formar la connotación gen, de entender cómo un individuo percibe
emocional de la melodía. La complejidad de la progresión sintáctica de la música entre he-
los elementos que componen una obra musi- chos conocidos y hechos desconocidos (acordes
cal, que es interpretada por un músico, llega consonantes y disonantes), elemento planteado
a tal elaboración de trabajo motor y cognitivo por Koelsch y Siebel (2005) y por Valeri Bra-
que, después de determinado tiempo de prác- inin (2005) en su trabajo pedagógico llamado
tica, resultan siendo esquemas a los cuales se “Razonamiento Musical”. Los primeros auto-
da respuesta inmediata con un simple estímulo res señalan este proceso sintáctico como “auto-
visual. La música posee una moderada comple- mático”, lo cual puede estar relacionado con lo
jidad temporal pero una alta complejidad ordi- que Benenzon2 denomina ISO “Identidad So-
nal, que son los dos niveles de la secuenciación. nora” y que se refiere a los elementos musicales
Pero esta última complejidad (ordinal) también que conforman la memoria auditiva del indivi-
puede ser cognitiva y puede llegar a modificarse duo, relación que se afirma cuando dicen que
con el aprendizaje. En la percepción y produc- estudios en no músicos demuestran que estos
ción de secuencias de este tipo (musicales) está poseen unas habilidades especiales en el cono-
implícita la atención, dado que el sujeto tiene cimiento de la sintaxis musical, posiblemente
que responder a los estímulos espaciales que relacionadas con la experiencia de la escucha en
está monitoreando. la vida cotidiana.
La forma en que cada individuo escucha “Los numerosos sonidos musicales y formas son
la música y el análisis o uso que haga de ella, asociados con un significado semántico fijo, por
interfiere y depende de la activación de las dife- ejemplo, los sonidos asociados con los conceptos
rentes regiones cerebrales. Cuando escuchamos ‘‘áspero”, ‘‘caluroso”, ‘‘luminoso” o “suave”, y las

66 música, la información auditiva pasa por dife- frases musicales de “legítimo”, “amistoso”, ‘‘en-
rentes procesos, hasta provocar reacciones en el fadado” o ‘‘gigantesco”. Porque algunas formas
oyente. Esta información acústica se traduce en musicales imitan los gestos prosódicos, donde
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 61 - 69

actividad neural, indicando respuestas al tono, su significado es posiblemente universal para las
timbre, intensidad o color, como cualidades culturas. Otras formas musicales tienen cultural-
sonoras, las cuales se denotan en la corteza mente unos significados determinados, por ejem-
auditiva, después de que el tálamo -estructura plo un himno de la iglesia y la palabra devoción”3
neuronal con importantes funciones sensoria- (Koelsch y Siebel, 2005).
les y de interconexión- haya proyectado alguna
2 Benenzon, R. (www.fundacionbenenzon.org). ISO (identidad
información, porque cada tono musical lleva sonora) cúmulo de energías formadas de sonidos, movimientos y
información de significado. Estos elementos silencios que caracterizan a cada ser humano y lo diferencia del otro
y al proceso dinámico de sus respectivas descargas.
permiten la formación de un Gestalt (forma, 3 Traducción del texto original: “Numerous musical sounds and
forms are associated with a fixed semantic meaning, for example,
configuración) auditivo que conjuga: melodía, sounds associated with concepts like ‘rough’, ‘warm’, ‘bright’ or
ritmo, timbre y su agrupación como un todo ‘soft’, and musical phrases that sound ‘friendly’, ‘angry’ or ‘gigan-
tic’. Because some musical forms mimic prosodic and other ges-
(Koelsch y Siebel, 2005). tures, their meaning is possibly universal across cultures. Other
musical forms have culturally determined meanings, for example
Es interesante anotar la posibilidad que a church anthem and the word devotion.”
67
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Neurología y cognición musical

no musical y lo musical requieren asociaciones


Dice Rodolfo Llinás 4 que la música entra
4
multimodales. De esta manera, los aspectos
en el cerebro sin necesidad de una traducción sociales de hacer música tienen alta probabili-
- como sucede en el caso de los idiomas -, que dad de estar acompañados por efectos positivos
la música no existe en el mundo externo, sino hacia el sistema inmunológico, lo cual influye
que es un producto cerebral interno que genera en la evolución de la conducta de hacer música
movimiento y oscilaciones del aire. Esta afir- cooperativa. Algunos estudios sobre sicología
mación parte de que las células nerviosas tienen de la música han encontrado que individuos
actividad rítmica intrínseca, que se conjuga sin formación musical tienen mucha habilidad
con la actividad de las otras células nerviosas y para interpretar las funciones semánticas de la
de esas frecuencias se hace, se percibe y concibe música así como para disfrutarla. De la mis-
la música; es decir que este arte es inventado y ma forma determinaron que los niños reciben
secretado por el cerebro. Llinás asocia el tálamo información adicional sobre las palabras y las
del cerebro con un director de orquesta, por- frases, es decir, aspectos como la melodía del
que esta estructura neuronal primero establece discurso, el ritmo, el timbre, etc., porque la
relaciones temporales con las otras partes del musicalidad es una habilidad natural del cere-
cerebro a través de las estructuras de axones; bro humano (Koelsch y Siebel, 2005)5.
que en la orquesta sería el aire y la luz que co- Resulta de considerable importancia que
munica al Director con los músicos, a partir de los educadores o maestros, en general, consi-
un movimiento que éste realiza, con su mano deren las actividades musicales dentro de la
o con la batuta, y al que los músicos responden formación integral de sus estudiantes, para me-
con otros movimientos que producen música. jorar sus habilidades de razonamiento. En su
El tálamo recibe la información del mundo momento, teniendo en cuenta estos estudios,
externo, permitiéndole al cerebro reconstruir Weinberger (1998) sugirió que la música se
una realidad virtual. De esta manera, Llinás debería llevar a las escuelas y ponerse a disposi-
explica que la enfermedad del Parkinson se tra- ción de todos los individuos, lo cual redundaría
ta de diferentes ritmos que asumen las células en una notable mejoría en los logros escolares,
nerviosas y no se pueden conjugar a un mismo a partir del uso y mejor aprovechamiento de
tiempo. En el momento en que se implantan las diferentes regiones cerebrales (Bart y Ate-
microelectrodos que regulan la actividad rítmi- hernon, 2004). La música ofrece a la mente hu-
ca neuronal desaparición de la enfermedad. mana un único vehículo de pensamiento, un
La información no musical del fenómeno medio para expresar emociones, crear sonidos
sonoro comprende evocaciones producidas por y generar sincronía de movimientos, elementos
la música, como los aspectos emocionales y las que pueden ser aprovechados tanto en la didác-
reacciones corporales. Estas asociaciones de lo tica general como en la didáctica específica para
la formación musical (Janata y Grafton, 2003).
4 Rodolfo Llinás, Médico Neurofisiólogo Colombiano. director del Finalmente, Koelsch y Siebel (2005) nos
departamento de Physiology & Neuroscience en la escuela de medi-
cina de la Universidad de Nueva York. Estos datos se han tomado
de la conferencia con la Orquesta Filarmónica de Bogotá en “Con- 5 Traducción del texto original “[…..that musicality is a natural abi-
cierto Cerebro”, 2004. lity of the human brain]”.
Neurología y cognición musical

presentan interesantes caminos para investigar en los estudiantes desde la aplicación de


y profundizar en estas temáticas, que sugieren didácticas pertinentes y coherentes.
trabajo interdisciplinar, especialmente los rela- • Dignificar la profesión de un maestro de
cionados con: ¿cómo se decodifican los rasgos música es una tarea importante, en paí-
acústicos a nivel cortical?, ¿cuáles propiedades ses como Colombia, y es a través de es-
físicas de los signos acústicos tienen significado tos hallazgos como podemos conseguir
universal y cuáles son culturalmente determi- la credibilidad por parte de otros colegas
nadas?, ¿cuál es la incidencia de la percepción y de las mismas esferas académicas y po-
y la producción musical en el sistema nervio- líticas que ven con ojos de incertidum-
so autonómico y en el sistema inmunológico?, bre los trabajos en el campo musical.
y ¿cuáles serían las influencias cognitivas y las • Esta área de trabajo se torna como un
relaciones neurales establecidas a partir de los camino interesante en el proceso investi-
estímulos sonoros en músicos y no músicos?, gativo frente a cómo se demuestra cien-
entre otros. tíficamente la importancia de la educa-
ción musical para cualquier individuo.

Conclusiones Bibliografía
• Se hace necesario que músicos y maes-
tros de música (educadores musicales) Bart, W. y Athernon M. (2004) The Neuroscientific Ba-
tomen conciencia de la importancia de sis of Music: Applications to the Development of
la investigación en su campo de acción, Talent and Education. En: Brain Neurosciences &
lo cual redundará en el cambio de men- Education
talidad frente a pensar que la música si- SIG Newsletter Annual Meeting. San Diego California:

68 gue siendo un don o talento que ha sido American Educational Research Association.
otorgado sólo para algunas pocas perso- Bever, T. y Chiarello, R. (2009). Cerebral dominance in
nas. musicians and non-musicians. The Journal of Neu-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 61 - 69

• El trabajo interdisciplinario está mos- ropsychiatry and Clinical Neurosciences, Vol. 21 (1),
trando nuevos caminos hacia la produc- 94–97.
ción del conocimiento, a partir de in- Brainin, Valeri (2005). Sistema de Razonamiento Mu-
vestigaciones que soportan los hallazgos sical. Seminario Taller Universidad Pedagógica y
científicamente válidos y que apoyan el Tecnológica de Colombia. Tunja.
desarrollo del conocimiento en áreas re- Gardner, H. (2008). Inteligencias Múltiples: La Teoría en
lativamente nuevas como la neurología la Práctica. Barcelona: Paidós. 8ª Edición.
y la cognición musical. Gaser, C. y Schlaug, G. (2003). Brain structures differ
• Sería muy importante que las institucio- between musicians and non-musicians. Journal of
nes educativas se apropiaran de estos ha- Neuroscience, Vol. 23 (27), 9240-9245.
llazgos de la neurociencia para la cons- Hernández, G. (2002). Reseña de la Música y el Cerebro
trucción de sus proyectos educativos, de Jean Paul Despins. Ciencia UANL, Vol. 5 (4),
pensando en lograr mejores desempeños 561-565.
69
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Neurología y cognición musical

Ho, Y., Cheung, M., y Chan, A. (2003). Music training W., y Newcomb, R. (1997). Music Training causes
Improves verbal but not visual memory: Cross- long-term enhancement of preschool children`s
sectional and longitudinal explorations in chil- special-temporal reasoning. Neurogical Research,
dren. Neuropsychology, Vol. 17 (3), 439-450. Vol. 19, 2-8.
Janata, P. y Grafton, S. (2003) Swinging in the Brain: Schneider, P., Scherg, M., Dosch, H., Specht, H., Guts-
Shared Neural Substrates for Behaviors Related to chalk, A., y Rupp, A. (2002). Morphology of
Sequencing and Music. Review Nature Neuroscien- Heschl’s Gyrus reflects enhanced activation in the
ce, Vol. 6 (7), 682-687. auditory cortex of musicians. Nature Neuroscience,
Koelsch, S. y Siebel, W. (2005) Towards a Neural Basis Vol. 5, 688-694.
of Music Perception. TRENDS in Cognitive Scien- Sluming, V., Barrick, T., Howard, M., Cezayirli, E., Ma-
ces, Vol.9 (12), 578-584. yes, A., y Roberts, N. (2002). Voxel-based mor-
Lacárcel, M. (2003). Psicología de la Música y Emoción phometry reveals increased grey matter density
Musical. Educatio, Vol. 20 (21), 213-226. in Broca’s area in male symphony orchestra musi-
Orquesta Filarmónica de Bogotá. (2004) Concierto Ce- cians. Neuroimage, Vol. 17 (3), 1613-1622.
rebro, Conferencia Rodolfo Llinás. Bogotá. Twomey, A., y Esgate, A. (2002). The Mozart effect may
Rauscher, F., Shaw, G., y Ky, K. (1993). Music and spa- only be demonstrable in nonmusicians. En: Hui,
tial task performance. En: Rauscher, F., Shaw, G., K. (2006) Mozart effect in preschool children?
Levine, L., Wright, E., Dennis, W., y Newcomb, Early Child Development and Care, Vol. 17 (3),
R. (1997). Music Training causes long-term en- 411–419.
hancement of preschool children`s special-tempo- Weinberger, N. (1998). The music in our minds. Educa-
ral reasoning. Neurogical Research, Vol. 19, 2-8. tional Leadership Publications, Vol. 56 (3), 36-40.
Rauscher, F., Shaw, G., Levine, L., Wright, E., Dennis,
Música y cultura
73
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor


musical de la Tierra del Bunde*
Humberto Galindo Palma**, Gilmer Capera Chilatra, Manuel Alejandro Murcia Suárez,
Diego Fernando Góngora, Irnel Andrés Ruiz
(Fecha de recepción julio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. La música es uno de los legados más importantes en el Tolima, y sus compositores han con-
tribuido definitivamente a construir este patrimonio. En el municipio del Espinal, La meca del Folclor,
Gonzalo Sánchez, ha sido protagonista excepcional de su historia, primero como músico de La divina, la
más famosa banda de música de los años 20 en el Tolima, y ya en su edad madura, definiéndose como uno
de los más prolíficos compositores de música vernácula del departamento, con cerca de 800 composiciones,
en su mayoría inéditas. Resultado de una investigación de historia de vida, el presente artículo recoge el
testimonio de la trayectoria artística y educativa de Gonzalo Sánchez, el fundador del Festival del Bunde que
revela una vida entera dedicada a la difusión de la identidad regional y del folclor musical del departamento
del Tolima.

Palabras claves: Gonzalo Sánchez – compositor tolimense- bandas musicales del Espinal – Festival del
Bunde – folclor musical tolimense

Abstract. Music is one of the most important legacies in Tolima, and its composers have definitely contri-
buted to construct this heritage. Gonzalo Sanchez has been a star in the History of Espinal, The Mecca of
Folklore first as a musician of “The Divine”, the most famous band of the 20s in Tolima, and at his middle
age, is defined as one of the most prolific composers of vernacular music of the department with about 800
compositions, mostly unpublished. As a result of a life history research, this article presents the testimony
of the artistic and educational life of Gonzalo Sanchez, founder of the Festival of Bunde, revealing a lifetime
dedicated to the dissemination of regional identity and the folk music department Tolima

* El presente artículo está basado en el informe final de investigación del Trabajo de Grado que realizaron los autores para obtener el título de
Licenciaturaen Música en diciembre de 2008.
** Director, relator. Coordinador del grupo de investigación Historia, patrimonio y tradición musical del Tolima, Docente del Conservatorio del
Tolima. humberto.galindo@conservatoriodeltolima.edu.co
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

Key words: Gonzalo Sánchez – Tolima`s songwriter – musical bands in Espinal – Bunde`s Festival –
Tolima’s folk music.

rante el proceso se documentó el relato con


archivos primarios como fotos de laa época,
grabaciones, notas de prensa y se consultó el
archivo de partituras del compositor que por
su extensión de aproximadamente 800 obras,
al finalizar el estudio, ha dejado abierta la po-
sibilidad de iniciar una segunda investigación
para su debida catalogación y publicación.
El Espinal es un municipio folclórico
por excelencia; una tierra de compositores y
de costumbres que identifican a su gente como
un pueblo alegre y fiestero. La música de esta
región, aporte de muchos compositores, se
conserva casi sagradamente en las celebracio-
nes populares. Con una amplia trayectoria, la
vida del compositor Gonzalo Sánchez ya ha
sido registrada por algunos autores, (González,
1986/Pardo, 2002/Pinilla, 1980) gracias a su
memorable participación en la Banda del Es-
74 Fig. 1 Gonzalo Sánchez. Com La Banda Del Espinal. Fuente: Archivo pinal; su nutrida producción musical, y como
Gonzalo Sánchez
gestor del Festival del Bunde precursor de ideas
fundamentales para la construcción del folclor
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

Introducción musical del Tolima.


El presente artículo se ha realizado a partir del A sus 831 años Gonzalo Sánchez, figura
informe de investigación de campo de los au- representativa en la música del Espinal, en un
tores, realizado en 2008 en los municipios del almacén-academia de música, con gran mo-
Espinal e Ibagué, para recuperar el testimonio destia dedica parte de su tiempo a la venta de
vivo de Gonzalo Sánchez, uno de los más pro- instrumentos musicales; ocasionalmente a la
líficos compositores de música vernácula que enseñanza de la flauta y la guitarra con niños
nació a comienzos del siglo XX, y que ya en y niñas de su comunidad, y a evocar los más
su mayoría de edad, representa para el Tolima, importantes momentos de su vida como ges-
un símbolo de la tradición bandística que dio tor de la historia musical del Tolima, siendo él
identidad a las famosas fiestas de San Pedro en mismo el alma de la fiesta Sanjuanera. Este re-
el Espinal. El trabajo incluyó entrevistas con el
1 Edad del compositor en 2008, al momento de adelantar esta inves-
compositor, músicos y cronistas locales. Du- tigación.
75
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

lato histórico y testimonial involucra no solo les que involucran bandas y grupos folclóricos
a Gonzalo como protagonista, sino también a representativos del municipio y el departamen-
compositores como Alberto Castilla, Emiliano to. Desde su realización, la fiesta de San Pedro
Lucena, Eleuterio Lozano, que vivieron junto a en el Espinal ha tenido algunas interrupciones
este compositor etapas significativas del pasado motivadas en hechos de orden público. Así, en
cultural regional. Hablar de la obra de Gonzalo 1889, se suspendieron por motivo de la Guerra
Sánchez es hablar, bambucos fiesteros y rajale- de los Mil Días; En 1948 no se realizarían a
ñas, los aires que caracterizan al Tolima. Para causa del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, y
Gonzalo Sánchez, como para sus contemporá- en 1954 un decreto episcopal no permitió la
neos tolimenses como Cantalicio Rojas, recorda- celebración de las mismas.
do como el último juglar del Tolima (Galindo, Pero no solo esta tradicional celebración
1993) se cumple con la regla de apropiación por le da al Espinal el mérito de ser la cuna del fol-
parte su pueblo de su obra musical, fundiéndose clor tolimense. Haber sido el Espinal la ciudad
en una sola identidad que la renueva en cada donde el maestro Alberto Castilla compuso el
celebración importante de carácter popular. Bunde Tolimense, himno que identifica a la
región y una de las piezas representativas del
El Espinal, la meca del folclor folclor colombiano, es ya un hecho de signifi-
tolimense cación histórica. El legendario compositor Mil-
En el Espinal se gesta toda la cultura que repre- cíades Garavito compuso en su momento San
senta al departamento del Tolima a nivel folcló- Pedro en el Espinal en honor a la fiesta mayor
rico. Este municipio, tierra de los pelachivas,2 de esta ciudad. El Espinal ha sido testigo de
es reconocido en toda la región por su gastro- la formación de duetos reconocidos nacional-
nomía típica, por la amabilidad de su gente, mente como Silva y Villalba, el famoso dueto
por sus altas temperaturas, pero sobretodo, por de las “cuatro docenas de discos” que se conoció
su folclor colorido, alegre y fiestero. Las fiestas precisamente después de unas fiestas de San Pe-
de San Pedro en el Espinal, la mayor expresión dro; también nació aquí el reconocido Dueto
folclórica del departamento “… datan desde Rojas y Mosquera, integrado por Edgar Rojas
1881 por iniciativa del Alcalde de entonces, Don Montealegre y Carlos Julio Mosquera, ganado-
Timoteo Ricaurte”. (Arciniegas, 1980, p. 304) res de innumerables festivales musicales a nivel
época en que su realización tenía lugar en la nacional.
Plaza Mayor o Plaza deBolívar con las prime-
ras corridas celebradas en la comarca. Desde Un escenario para la música de
entonces, toreros y jinetes se exhiben ante mi- bandas
llares de espectadores, que desde los palcos de Una muchedumbre que desborda de alegría;
guadua, asisten a estas fiestas. Además de las un cielo que se enciende en luces multicolores;
corridas de toros, en la fiesta tienen lugar desfi- el resonar de juegos pirotécnicos como volado-
les, reinado popular, cabalgata y actos musica- res, idas y venidas, castillos, vacalocas y diablos
hechos por los modestamente llamados polvo-
2 Pelachivas: Apelativo dado a los oriundos del espinal, dada su tradi-
ción gastronómica asociada al consumo de carne de cabra o chivas. reros; la diversión y la fiesta que brindan los to-
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

ros en una plaza, en la que majestuosamente se go Antonio Pérez Rojas (directores de banda);
imponen palcos, barreras y cercas construidos Emiliano Lucena Rodríguez y Eleuterio Lozano
con la fortaleza y el vigor de la guadua; los bai- (compositores y directores de banda), Pedro
les al son de tambores, flautas, tiples y carracas; Sánchez “Garrocha” (platillero), Rafael Rodrí-
Estos son, por mencionar algunos, los elemen- guez “El mohán” (trompetista) y Luís Oviedo
tos que componen el folclor de la tierra espina- “mal de tierra” (trompetista), iniciaban una tra-
luna, una tierra donde se despliega la música dición que sería vertebral para las festividades
con verdadera autenticidad. del San Pedro. Otros como Milcíades Garavito
Las fiestas de San Pedro tienen su origen y Alberto Castilla, a pesar de no ser oriundos de
en el Espinal y datan del año 1881. Perdomo esta tierra, hicieron que su divulgación quedara
Ávila, historiador local relata: grabada como una insignia, que representaría
Según los antiguos moradores de la fértil comarca musicalmente a este territorio, no solo en aque-
espinaluna, las primeras fiestas reales celebradas en llos tiempos, sino también para la posteridad.
la Plaza Mayor o Plaza de Bolívar, se realizaron el De un considerable número de compo-
29 de Junio de 1881 y fueron organizadas por los sitores se destacan algunos que, a través de su
hombres de pro de esta planicie pastoril, quienes a trabajo, lograron definir puntos de referencia
su vez fueron los alcaldes de fiestas. A la cabeza de importantes dentro del desarrollo musical de la
todos ellos estaba Don Timoteo Ricaurte Urrutia, región. El músico espinaluno Domingo Antonio
alcalde de la villa de llano grande del Espinal. Las Pérez Rojas, “La Alondra” sobresaliente como
primeras fiestas de San Pedro se verificaban con ca- clarinetista es uno de los personajes memora-
balgatas de los señores, toreo en la plaza cercada bles dentro del acervo musical del municipio,
de guadua o barrera y con los palcos -construidos siendo él quien fundara, en colaboración del
con gran propiedad- con guadua, madera y techos párroco español Fraile Marcos de la Correa, la
76 de palma primordialmente engalanados, pólvora al famosa banda La Divina que representaría, a
aire, vara de premios y bailes al son de tambores, nivel nacional y también más allá de las fronte-
flautas, tiples, carracas y mojigangas. (Perdomo, ras patrias, lo mejor de la música en el Espinal.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

1981, p.1) Por su parte, al músico y director de banda


Abraham Guzmán se le atribuye la fundación
A nivel nacional, hacia las primeras déca- de otra banda: La humana, como la competen-
das del S. XX, la música tuvo un apogeo gra- cia musical de La Divina, hecho que produjo
cias al aporte de dignos representantes como que sus encuentros o retretas musicales se rea-
Emilio Murillo, Fulgencio García, Jorge Añez, lizaran frecuentemente dentro de los eventos
Los Hermanos Hernández, Luis A. Calvo y Pe- festivos que reunían a todos los espinalunos,
dro Morales Pino. Ellos fueron los directos res- generalmente en la plaza principal.
ponsables de impulsar la música predominante Con el correr del tiempo y con las diferen-
en el interior del país, en formatos de cuerdas cias políticas que se vivían para comienzos de
(guitarra, bandola y tiple). Por la misma época siglo XX, cada banda fue tomando un partido
en el Espinal una generación de músicos como político; así en La Divina todos sus miembros
Camilo del Valle, Abraham Guzmán, Domin- eran conservadores y en La Humana todos los
77
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

integrantes eran liberales, diferencias que no llegar a esta capital, y al grito de ¡San Juan! Dado
llegaron nunca a causar agresión entre una y por el señor alcalde y su comitiva, los habitantes de
otra banda, por el contrario, se dieron casos la ciudad se pusieron en movimiento y reunidos se
especiales como los de Emiliano Lucena, de dirigieron hacia el río Luisa”. (p.50)
La Humana, y Eleuterio Lozano, de La Divina
quienes formaron a lo largo de sus vidas una
relación musical y personal de compañeros.
Pero los antecedentes musicales que tienen
que ver con las bandas, formato por excelencia
en el que se dio a conocer la música del Espinal,
se remontan al siglo XIX con la presencia de la
banda antigua o primitiva. Helio Fabio Gonzá-
lez (1986) hace mención a una publicación del
semanario El Espectador de Junio 27 de 1872,
publicación editada en el Guamo, capital del Fig. 3 Banda Antigua o primitiva

entonces Estado Soberano del Tolima, en la


que se informa: En el Tolima como en muchos otros mu-
“… a la madrugada del 24, un golpe de música de nicipios de Colombia, las bandas influyeron en
la Banda del Espinal que, contratada, acababa de el surgimiento de músicos destacados. Emilia-

Fig. 2 Banda del Espinal La Divina bajo la dirección de Domingo Pérez La Alondra. (Fuente : Archivo Gonzalo Sánchez)1

1 A menos que se indique lo contrario, todas las imágenes del presente artículo fueron suministradas por el compositor Gonzalo Sánchez, y hacen
parte documental del trabajo de campo.
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

no Lucena (1887-1967), un icono de la músi- musical. Eleuterio Lozano recibió instrucción


ca en el Espinal empezó a desarrollar desde su musical de parte de Domingo Pérez, tomó lec-
niñez, tocando la armónica y luego, viendo a ciones con Guillermo Quevedo Zornoza3, y fue
otros músicos y ayudándose con cartillas teó- discípulo de Alberto Castilla Buenaventura. Su
rico prácticas, aprendió a tocar guitarra, ban- disciplina y vocación le permitieron desempe-
dola, tiple y clarinete hasta destacarse como un ñarse como director de bandas entre las que se
prolífico compositor, gran director de banda y cuentan la banda del Espinal, de Ibagué, del
como un tolerante pedagogo musical. A los 22 Guamo, de Rovira y Zipaquirá. Con la banda
años empezó a desempeñarse como director de del Espinal La Divina logró el primer premio
la banda La Humana llevando bambucos, pa- en el Congreso Musical de Ibagué, en Enero de
sillos, guabinas a diferentes departamentos del 1936. También tuvo una muy digna represen-
país. Además de dirigir la banda del Espinal, tación en las festividades del IV Centenario de
Lucena estuvo al frente de la Banda de Girar- Bogotá y Cali.
dot. Fue profesor de tiple, guitarra y bandola.
Organizó un cuarteto de cuerdas, con el que
amenizó eventos sociales como serenatas, ma-
trimonios, paseos y selectas reuniones de bohe-
mios. (González, 1986, p.53)

78 Fig. 5 Banda musical en la Plaza de Bolívar durante el Primer Congreso


Nacional de la Música. Realizado en Ibagué.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

De acuerdo con González, (1986) uno de


sus mejores arreglos fue el tema El Primer Toro4,
que compuso el peluquero tocaimuno Rober-
to Medina. A esta pieza musical Eleuterio le
agrega toda una sonoridad en la que se imita el
gemir del toro y el ambiente festivo que se vive
durante las típicas corridas espinalunas. De esta
Fig. 4 Emiliano Lucena interpretando su clarinete
manera, se enlazan personajes y sus historias a
Muy a la par del trabajo desarrollado por nivel musical y cultural en Espinal hacia fina-
Emiliano Lucena se encuentra Eleuterio Loza-
3 Guillermo Quevedo Zornoza (1886- 1964) músico, pintor y poe-
no, destacado compositor, director de banda ta, fundador del centro musical de Zipaquirá y director del Conser-
e intérprete de tiple, guitarra y trompeta que vatorio de Música de Ibagué hasta 1924.
4 En González se nombra como el Toro, pero por aclaración de Gon-
se dedicó durante toda su vida a la producción zalo Sánchez ser rectifica al nombre verdadero.
79
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

les del siglo XIX e inicios del siglo XX. Que A los seis años de edad, Gonzalo inicia sus
definirán su influencia en el desarrollo musical estudios de primaria en la escuela pública, con
que protagoniza el Espinal en las décadas si- gis y pizarra6 como únicos implementos escola-
guientes. res. En 1933, bajo la dirección del hermano la-
sallista Gaspar María, Gonzalo Sánchez ingresa
Gonzalo Sánchez: La Crónica de un al colegio San Isidoro para continuar sus estu-
músico popular dios de primaria, donde permanece dos años
El colegio San Isidoro, fundado en 1918 fue más. De sus estudios allí, recuerda Gonzalo:
una de las primeras instituciones educativas Entonces había un palo de pana7 grandísimo, unas
que abrió sus puertas a los jóvenes de la ciudad cosas que son deliciosas, y el director, el herma-
del Espinal. Muy cerca de allí, hacia mediados no Gaspar María, francés él, en agradecimiento
de 1920, Doña Rafaela Sánchez, era reconoci- de que mi mamá le remendaba las sotanas… me
da entre la escasa población espinaluna por sus regalaba las panas que caían del árbol; mi mamá
trabajos de modistería y por las hermosas car- las cocinaba y las vendía, una totumadita costaba
tas de amor que le encargaban algunos jóvenes. un centavo.
Por otra parte, Don Alberto Reyes que se desem-
peñaba como sastre de manera más discreta, ya Uno de los más grandes amigos de juven-
gozaba de reconocimiento en el ámbito musi- tud de Gonzalo Sánchez fue Clarín Munar,
cal como clarinetista de la Banda del Espinal. quien más tarde instalara la primera imprenta
Al igual que Doña Rafaela, Alberto confeccio- Mercurio en el Espinal. Con él y otros compa-
naba las sotanas para la comunidad religiosa ñeritos, iniciaría su inclinación por la música
de los hermanos de la Salle, quienes dirigían confeccionando toscamente instrumentos de
el colegio San Isidoro. Surge allí la unión de los matarratón8. Gonzalo se construyó un carrizo
padres de Gonzalo Sánchez, hijo único de la de caña de castilla9. Munar por su parte, tomó
pareja, que nace un 18 de septiembre de 1926. un taburete de cuero viejo que pertenecía a su
Sus primeros años, transcurrieron rodeado del padre intentando algo que se asemejara a la
cariño de su madre, quien fue la que se encargó música. No solo la música cautivó a Gonzalo,
de su crianza y cuidados. sus dotes artísticas también se inclinaron hacia
Mi mamá me tuvo con toda la pobreza del caso y el dibujo, posible herencia materna que en sus
siempre me daba grandes consejos. Ella fue la que tiempos de modista dibujaba también y hacia
se ocupo de lo que fue mi crianza, mi papá iba por bordados decorativos. Esta práctica la empieza
ahí de vez en cuando, pero ella era la que velaba en la escuela realizando los dibujos a sus com-
por mí, la que me vestía, la que me llevó al colegio, pañeros. “Yo le hacía los dibujos a mis compañe-
a la escuela. (Sánchez, 2008)5
6 Tabletas de pizarra y barras de gis (especie de tiza), utilizados en la
educación antes del lápiz y el cuaderno.
7 Árbol de fruto comestible al que le dicen “pana”
5 A menos que se indique lo contrario, las referencias siguientes co- 8 Árbol de nombre científico Gliricidia sepium de uso para alimenta-
rresponden las entrevistas realizadas al compositor Gonzalo Sán- ción bovina.
chez en el año 2008, durante el trabajo de campo en el Espinal, 9 Un carrizo es una pequeña flauta traversa, usualmente de seis orifi-
Tolima. cios de digitación.
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

ros, porque hay muchachos que no saben pintar da tocando, porque era mudo, películas así como
una patilla siquiera… el hermano Abel10 ya sabía las de Charles Chaplin. Eso era baratísimo, valía
que yo tenía aptitudes”. la entrada cinco centavos y ya la preferencial diez
centavos.
El teatro del General y la Banda del
Espinal Un estallido repentino del proyector en
En su infancia, Gonzalo recuerda que conoció medio de una de las funciones, ocasionando la
a un General Sánchez, personaje perteneciente quema del establecimiento y la huida despavo-
a una familia distinguida de la sociedad y muy rida de los asistentes, fue la causa del cierre de-
popular por su buen humor y su disposición finitivo de las primeras funciones fílmicas que
siempre amable, quien acostumbraba a estar tuvieron lugar en el Espinal.
presente en todo evento de índole cultural, so-
cial o religioso que reuniera a los espinalunos. La formación musical
Todas las tardes arribaba el tren a la estación Los estudios de primaria de Gonzalo Sánchez
del Espinal. Era el tren que traía el periódico y como discípulo de los hermanos Gaspar María
además llegaba con mercancías procedentes de no concluyeron, aunque continuó la vocación
Bogotá y con pasajeros que iban hacia Ibagué o eclesiástica como monaguillo del padre Efraín
Neiva. Este era todo un suceso en el Espinal, y Velásquez. Su sueldo básico mensual era de 3
las personas se aglomeraban para ver que gente pesos, ayudándose con las extras de las limos-
venía en aquella máquina. El General frecuen- nas recogidas (sic). Esta experiencia como mo-
taba con sus tres hijas la estación hacia la hora naguillo marca su introducción en ámbito mu-
de llegada del tren; mientras éste descargaba, sical, con la tutela de su tío Bautista Sánchez,
sus hijas entablaban conversación con las per- y luego, con su padre, quien lo acercaría a los
80 sonalidades que venían de viaje. Durante estas grandes maestros y compositores de la música
charlas el General aprovechaba para compartir tolimense.
su buen humor y hospitalidad con los viajeros Tanto el padre de Gonzalo Sánchez, don
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

de paso. En cierta ocasión, el General tuvo la Alberto Reyes, como Álvaro, Bautista y Pedro
idea de organizar un teatro de cine mudo que Sánchez, sus tíos, eran antiguos músicos, muy
se instalaría en la calle novena con el nombre reconocidos por su desempeño con la banda y
de “Teatro Espinal”. El teatro funcionó los sá- de parte de ellos recibió sus primeras lecciones.
bados y domingos, a veces cada quince días, y Todos ellos interpretaban el clarinete. También
la banda del Espinal sería la encargada de am- recibió instrucción de Balbino Bermúdez y de
bientar las películas que empezaban a reunir a Nepo Barreto con quien realizó estudios de lec-
una buena cantidad de personas. tura musical y solfeo, hasta conocer a Emiliano
Se le llamaba teatro pero simplemente era un patio Lucena y Eleuterio Lozano considerados dos de
con bancas de madera y unas guaudas (sic) con un sus grandes maestros. Hacia finales de la déca-
telón estirado. ... empezaba la función y la ban- da de los 30, Chaparral contaba con una ban-
da de músicos que amenizaba actos religiosos,
10 Uno de los hermanos de la comunidad religiosa del Colegio San
Isidoro. actos sociales y, por supuesto participaba en los
81
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

eventos festivos. La dirección de esta banda es- a donde mi mamá a buscar el duerme y la “papa”
taba a cargo del clarinetista Bautista Sánchez, como siempre.
tío de Gonzalo, músico muy respetado y ad-
mirado tanto en Chaparral como en el Espinal.
Por estos días la situación económica de Gon-
zalo y su madre no era la mejor, y recibe de par-
te de su tío Bautista Sánchez la invitación para
hacer parte de su banda tocando los platillos y
el bombo y así escampar de su mala situación.
Después de ensayos y prácticas constantes con
la banda, realiza Gonzalo Sánchez su primera
participación en la inauguración de un andén
(sic) que rodeaba la plaza principal.
Apenas contaba 14 años cuando hice el primer to-
que en la inauguración del andén o marco de ce-
mento de la plaza principal. Recuerdo que una de
las piezas del programa fue el pasillo del maestro
Emilio Sierra, Tierra Mía.

Las presentaciones de la banda de Chapa-


rral, eran cada vez más frecuentes ahora con la Fig. 6 Gonzalo Sánchez y Alberto Reyes, su padre, cuando pertenecían
a la Banda del Espinal.
participación del joven Gonzalo Sánchez. Se
hizo común ver a la banda tocar todos los sába- La permanencia de Gonzalo en Chapa-
dos a las seis de la tarde en el parque principal. rral concluye al ser llamado a ingresar a las fi-
Los sábados era el día de mercado y se reunía las de la Banda del Espinal por su padre y su
gran cantidad del pueblo y los campesinos de tío José, ambos clarinetistas de esta banda. Así,
las veredas aledañas, que venían a llevar la re- por intermedio de su papá Gonzalo adquiere su
mesa. Se reunían para ver tocar a la banda que primer clarinete y se inicia junto a los mejores
amenizaba con melodías muy típicas el final músicos de la famosa Banda del Espinal.
de una jornada de mercado. Entre la rutina de Empezaron todos los maestros a darme clases
ensayos y toques que tenia la banda también porque por aquí no había una escuela de música.
hubo momentos de ocio en los que Gonzalo se Aprendía de los músicos que había en ese enton-
dedicó a la peluquería como supernumerario. ces. … los maestros Emiliano Lucena, Eleuterio
En ese tiempo el carro se cogía Chaparral, Coyai- Lozano, Balbino Bermúdez que era un pedagogo
ma, Castilla. Y ahí en Castilla cogía uno el tren. extraordinario, Nepo Barreto, me tenían aprecio
En Castilla como almuerzo me tomé un vaso de porque yo no era golpeado para la cuestión de la
leche con un bizcochuelo por un valor de quince música. ... yo no tuve conservatorio ni nada de esa
centavos, que era todo mi capital. (y) Llego pues, cosa.
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

El debut con la Divina ta Antonio María Valencia, José Rozo Contreras,


Desde 1936 tendrían lugar las presentaciones director de la Banda Nacional de Bogotá, entre
de la Banda La Divina del Espinal por los di- otros.
ferentes lugares del país, y el debut oficial de Un mes antes de su realización, la emisora
Gonzalo Sánchez con esta banda se dio un Ecos del Combeima emitía desde las instalacio-
miércoles santo del año 1939. Aquel día la nes del Conservatorio. Esta emisora colaboró
banda se hacía presente en la procesión del via- enormemente en lo relacionado con la difusión
crucis y con gran sorpresa las personas miraban del evento. Para aquella época su programación
aquel muchacho que interpretaba el segundo incluía la música de la región como también
clarinete. Mientras los demás tocaban de me- las conferencias organizadas por Alberto Casti-
moria, él leía las partituras que estaban colga- lla. Entre el selecto componente musical que se
das en la espalda de un amigo suyo. La banda reunía en aquella ocasión, se encontraba tam-
la Divina la conformaban entre otros, músicos bién La Banda del Espinal La Divina, que con
como: Campo Elías Rojas, Teófilo Díaz, Julio su interpretación de “el Primer Toro”, una com-
Rodríguez, Edmundo Rojas, Gregorio Polonia, posición de Roberto Medina les otorgó premia-
Rafael Rodríguez “Mohán”, Eleuterio Lozano, ción destacada entre las bandas. Esta pieza cau-
Alberto Reyes, Luís Castro, Emiliano Lucena, los só sensación entre el público precisamente por
hermanos Cortes, Nepo Barreto y Neftalí Sabogal. el ambiente fiestero que se empezaba a recrear
… Yo estaba bien novato pero tenía muchos de- desde el inicio. Aparte de esta obra, la banda
seos y se me facilitaba… En ese tiempo era todo interpretó dos piezas más que también tuvie-
leído; a mí me ponían los papeles y yo busqué a un ron la admiración de la muchedumbre presen-
muchacho que le decían el sapo, el era muy amigo te. Se trataba del bambuco Las Mujeres Son y el
de la música y muy amigo mío… yo le puse las corrido El Jorobado, obras que, a diferencia de
82 partituras en la espalda y así el iba adelante y yo su tradicional repertorio instrumental, tenían
atrás tocando. la novedad de ser cantadas por la banda.
Entramos con un bambuco que arregló “El Mono”
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

Músicos de un pueblo, músicos de Eleuterio que iba dirigiendo la banda. Ahí tambien
una patria iba Domingo Perez a quien le llamaban “la Alon-
Entre el 15 y el 19 de Enero 1936 se organi- dra”, porque tocaba el clarinete de una manera
zó, por iniciativa directa del maestro Alberto muy hermosa.
Castilla, El Primer Congreso Nacional de la
Música en la capital musical de Colombia. A La banda que alli se presentó estaba bajo
este evento fueron invitados no solamente mú- la dirección del maestro Eleuterio Lozano. Jun-
sicos nacionales, sino también extranjeros. La to a él también se encontraba desempeñandose
lista estaba compuesta por virtuosos intérpre- como director Domingo Perez, fundador de la
tes, bandas departamentales, conjuntos corales banda. Se podria decir que la banda que visi-
y grupos instrumentales. La ciudad albergó una tó la ciudad musical en aquella ocasion vino al
gran cantidad de reconocidos personajes en el mando de dos grandes capitanes. Dentro del
campo musical entre los que estaban el pianis- grupo participaban Luis Oviedo (mal de tierra),
83
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

Rafael Rodríguez (el mohan), Francisco Cespedes La Banda del Espinal viaja a Caracas
(pachito), Salomon Polania (el sabio), Gustavo En marzo de 1967, la banda La Divina viaja
Gacherna y además, un pequeño joven que no a Maracay, Venezuela, para alternar escenario
se incluía entre los interpretes pero que, por las con la prestigiosa agrupación Billo´s Caracas
enormes ganas de seguir la música y por los do- Boys. Esta actuación supuso un compromi-
tes heredados de su familia, logró ser parte de so de perfeccionamiento, por tratarse de una
personal asistente. Gonzalo Sánchez, con tan presentación que daría renombre a la música
solo diez años de edad, acompañaba a su padre colombiana en el vecino país, y su primera gira
y a su tío en este Primer Congreso Nacional internacional. Nepo Barreto, director de enton-
de la Música. En la década de los cincuenta La ces, reunió a todos los músicos en su casa du-
Divina participó en las primeras ediciones de la rante una semana para ensayar una hora diaria
Feria de Cali como parte de los invitados más las piezas que interpretarían en su presentación.
especiales seleccionados por el Gobernador. … fuimos a Venezuela por insinuación del senador
Por esta misma época, también La Divina fue Emir Romano Chanela en 1967, … por medio de
invitada a la Feria de Manizales, donde gana el relaciones de un parlamentario venezolano, sirvió
primer premio por su participación musical en de intermediario para conseguir el contrato allá,
el Concurso de Bandas. Aparte de la actuación dijo que tenia ganas de llevar la banda a una feria
en este concurso, la banda fue invitada para to- internacional de artesanía en Caracas Venezuela.
car en homenaje a un músico de esta ciudad
que fue asesinado por la guerrilla saliendo de El día que partieron para Caracas, salie-
Ibagué. Así, los manizaleños desfilaron junto a ron en un autobús e hicieron escala en Buca-
la banda del Espinal hasta el cementerio de la ramanga hasta el día siguiente haciendo escala
ciudad para darle el último adiós al músico. en Cúcuta- San Antonio y luego San Antonio-
Maracay. La primera noche de actuación supie-
ron que quién dirigía la banda Billo`s Caracas
Boys era profesor y amigo de Alonso Oviedo
Hueso. El repertorio de esta orquesta era mú-
sica tropical de Lucho Bermúdez y Pacho Galán
mientras que La Divina llevó porros, cumbias,
bambucos y pasodobles. En total, la banda per-
maneció allí ocho días en un club militar en
donde cada noche realizaban una presentación.
En 1970, después de una trayectoria de más de
40 años, Gonzalo Sánchez pasó a ser el director
Fig. 7. Músicos de la Banda del Espinal (s.f.) Hueso, Cacahuero, Gon-
zalo, Rafael Rodríguez, Pachito Céspedes, Contreras, Luis Oviedo, Su- de la banda del Espinal en la que se desempeñó
zuki, Agustín Serrano, Muelas, Salomón Polania, Gustavo Gacharná
y Palmira. como clarinetista, continuando así la tradición
musical heredada de sus padres y de sus tíos.
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

En la Voz del Centro, ... Gonzalo integró el gru-


po El Recuerdo. ....los cantantes eran los hermanos
Garcia. Gonzalo tocaba clarinete, la trompeta, el
mono Eleuterio. Emiliano Lucena, el clarinete pri-
ma, Alonso Oviedo ejecutaba el tiple, patrocinio
Sanchez y Pedro Devia . Eso fue más o menos en
el año 62, 63 hasta el 65; don Fulgencio Cardozo
era un tipo que tocaba guitarra, tiple, bandola y, de
vez en cuando tocaba violín. Eso fue posterior a la
sonora del Espinal. El conjunto de la orquesta del
Fig. 8. Banda del Espinal partiendo hacia Venezuela.
Espinal fue en el 50, 55 máximo 60 y éllos daban
muchas serenatas . (Cervera, 2008)
La Sonora y El Recuerdo: la música
comercial y la radio La imposibilidad de realizar unos pro-
En el año de 1954, se conforma por iniciativa gramas y el incumplimiento de algunos de sus
de Gonzalo Sánchez una agrupación llamada miembros por ser a tan tempranas horas la gra-
la Sonora del Espinal, conformada por Enrique bación, obligaron al maestro Sánchez a trasla-
Medina, cantante, Eleuterio Lozano, primera dar el horario a la tarde y a cambiar el nombre
trompeta, Emiliano Lucena, guitarra, Rafael del programa por el de Tardes Tolimenses.
Rodríguez, el “mohán”, segunda trompeta,
Fabio García, saxofón y primer clarinete, Gil-
berto Céspedes, contrabajo y Arturo Rojas Cha-
zan, trompeta. Con un interés comercial, esta
84 agrupación nace inspirada en la Sonora Ma-
tancera de Cuba de gran auge por esa época.
Poteriormente, junto a un selecto número de
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

musicos, el maestro Gonzalo participó en una


agrupacion que tocaria por primera vez en un
programa radial llamado Mañanitas Tolimenses Fig. 9 Jaz- Ban del Espinal (sic) Fuente: archivo Gonzalo Sánchez
en la emisora La Voz del Centro. El nombre de
este espacio musical era asi porque desde alli El Festival del Bunde
emitian las actuaciones del grupo todos los dias En 1972, siendo Gonzalo Sánchez presidente
a las seis de la mañana. Este conjunto se de- de la Junta de Turismo, propuso la realización
nominó El grupo El Recuerdo y repetìa entre del primer Festival del Bunde, como un concur-
sus miembros a los reconocidos y talentosos so de composición e interpretación de música
Emiliano Lucena y Eleuterio Lozano. Siempre andina colombiana, que fue aprobado en 1973
su objetivo fue divulgar los valores tolimenses, y se realizó para un día de San Pedro. El festival
ocupándose en cada emision de un compositor fue creado con la idea de brindar culto y admi-
en particular, para tratar su obra e interpretarla. ración a las tradiciones y valores musicales de
85
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

la región andina, además de ser un tributo al inmediatamente al verla la descalificaron porque


maestro Alberto Castilla y su glorioso himno. que pensaron que era un plagio, pero realmente no
El maestro Gonzalo nunca deja de pasar por sabían que Pedro J. Ramos11 estaba participando y
alto la celebración del nacimiento del Bunde fue descalificado.
de Castilla; Relatan las anécdotas que en el mes
de septiembre de cada año, llama a sus ami- Actualmente el Festival del Bunde, que
gos y a los integrantes de su banda reuniéndose lleva el nombre de Gonzalo Sánchez, tiene
en el Monumento al Bunde, para rendirle ho- convocatoria nacional y premia en las catego-
menaje. La anécdota sobre el nacimiento del rías tradicional y nueva expresión contando
Bunde en el Espinal es narrada en la obra de con jurados reconocidos con prestigio a nivel
Helio Fabio González (1986), si bien Villegas nacional, académicos y costumbristas.
(1986) testimonia que su oficialización como
himno transcurrió en Ibagué en compañía de Otras facetas del compositor
los intelectuales Juan Lozano y Lozano, Ismael Aparte de destacarse como músico, compositor
Santofimio y Julio Galofre, entre otros. La ofi- y director de banda, Gonzalo Sánchez ha desa-
cialización que se llevó a cabo con la ordenanza rrollado toda una trayectoria muy definida en
66 del 14 de diciembre de 1959. otras artes. En este sentido, también ha sido un
El primer Festival del Bunde se llevó a incansable trabajador que emplea diferentes me-
cabo en el atrio de la Iglesia. El maestro Gon- dios para expresar su visión del mundo y para
zalo Sánchez realizó el trabajo de gestión so- conseguir las metas que se propone. Sus logros
cial. Con las oficinas de cultura consiguió los tienen que ver con proyectos educativos, cultu-
premios y una tarima rodante. Para este primer rales y artísticos. A mediados de los cincuenta,
certamen el maestro Gonzalo nombró como Gonzalo Sánchez adelantó gestiones para vincu-
jurados a destacadas personalidades dentro del larse con el Centro de Historia del Espinal donde
contexto musical como: Leonor Buenaventu- aportó su iniciativa a fin de crear el monumen-
ra, José Camacho Toscano y al maestro Gustavo to al Mohán, que en manos del escultor Fabio
Gómez Ardila. Además, dio los parámetros de Artunduaga, actualmente se exhibe en la plaza
evaluación del concurso. Todos los concursan- principal del Espinal. De manera autodidacta se
tes debían tener su obra transcrita en una parti- inició en la fotografía con ayuda de Constantino
tura, además la letra debía ser significativa, que Garay, e instaló su propio estudio dotándolo de
tratara temas relacionados con los valores y las los mejores equipos y perfeccionándose en el ofi-
expresiones folclóricas de la región, y finalmen- cio, alcanzando prestigio en provincias aledañas
te el último parámetro era la interpretación. como Guamo, Saldaña y Purificación.
Cada participante debía ser nombrado por un
seudónimo, por razones de seguridad, su verda- La obra musical de Gonzalo Sánchez
dero nombre se daba a conocer al momento de La producción musical del maestro Gon-
la premiación. Narra Gonzalo:
Una vez, en el momento de abrir los sobres en- 11 Pedro J.Ramos (1934 - ) notario, músico, compositor tolimense
reconocido por obras como Ora si entiendo porqué, Ortegunita y
contraron la canción vivirás mi Tolima, los jurados Vivirás mi Tolima.
Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

zalo Sánchez es amplia y diversa y aun en la valor vernáculo de la misma. Entre algunos de
actualidad, escribe sus ideas musicales, ya en sus títulos se reseñan:
momentos de ocio, en horas matutinas o mien- Bambucos: Cañita Dulce, Capuchino, El
tras observa el panorama. Hacia 1940 crea su Espinaluno, Salió el toro. Bambucas: A orillas
primera composición, Calentana del Tolima, del Magdalena, Las mujeres son del diablo, Ay mi
supervisado por su maestro y amigo Emiliano Tolima Boleros: La Aguas del infortunio, Amo
Lucena y en la que tuvo la colaboración del mucho tus ojos, Amor divino. Bundes: Chapai-
poeta y compositor Gilberto Céspedes, quien ma, Como te recuerdo Armero, Es Mi Tolima. Así
más adelante escribió la letra. En una oportu- es mi Tolima. Cañas: Caña pelachiva, Achique
nidad, tocando en las fiestas de Puerto Boyacá chique, Caña Castilla. Corridos: El carguero,
se conoció con el dueto Garzón y Collazos, que Las Monjitas, Del pueblo sale la pena, Pajarito
posteriormente grabara esta obra para el Sello tempranero. Danzas: Malevaje, Sufrimientos, el
Sonolux, dándole la portada del disco. 12 Al ha- monasterio Danzones: Negritudes, Arizta-pura-
cer un esbozo general en la obra y producción pia-sanquina-cu, Cuando te recuerdo. Fox: Gita-
musical de Gonzalo Sánchez se observa que su nos y Zíngaros, Sutachan, Fox de las marimbas.
repertorio es variado y extenso, con más de 800 Guabinas: Toro matrero, Calentana del Tolima,
obras creadas en un periodo de 70 años de vida. Flores de Acacio. Himnos: Canto al Espinal,
La composición de Gonzalo Sánchez es inspi- Caminos de esperanza, Himno de combatientes,,
rada en las manifestaciones de la vida cotidiana Himno Mariano Echandía, Joropos: El Galo-
Sus obras relatan y reviven escenas y personajes peo, El Rosquete, El Tinajero, Sentimiento lla-
que hicieron la memoria y el folclor del Espi- nero, Marchas: La muerte del torero Pomponio,
nal de su tiempo. La obra se conserva recopi- El recluta, Elevación, Misas: Misa de los niños,
lada de varias maneras: La gran mayoría están Misa de aguinaldos N. 1. Pasillos: Amor y fe-
86 en borradores de cuadernillos pentagramados, licidad, Blanca Rocío, Candidez, Capullito, Los
partituras manuscritas por el mismo composi- Avechuchos. Pasodobles: Clarines, El burladero.
tor; otras aparecen en cancioneros solo con la Porro- son: El coscorrón, Cumaral N.5, Testaru-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 73 - 87

letras de las obras; otras se encuentran grabadas do. Porros: Amaducho, El Patigrande La cueva
en disco (Acetato o CD por diferentes agrupa- del Mohán. Rajaleñas: Cachalambique, Lumbi,
ciones); y algunas se encuentran en arreglos o Sacatín, El timbico, Las achiras, Rasca chucho.
versiones para diferentes agrupaciones (bandas, Rumbas: Sufriendo por una mujer, Risa Risaral-
coros, vocal instrumental). Aún con esto, de da, San Buya. San Juaneros: En la fiesta de San
manera general se puede afirmar que la obra Pedro, San Juan en el Guamo, Somos pelachivas,
musical de Gonzalo Sánchez está inédita en un La víspera de San Pedro. San Rumbas: La quin-
muy alto porcentaje, y que demanda esfuerzos ta porra, La sopladera, La zancona. Sones: Alfre-
para que se haga pública entre la comunidad de güite, El chispao, El Patuá, Como son las mujeres.
intérpretes de música tradicional, en razón del Son Indígena: Coyarcos, Los Ortegas, Coyaimas,
Espinayes, Poinas del Río Yaporogos del yuma.
Torbellinos: El clásico, El Tominejo, Hunza, To-
12 Ver. LP Volumen VII 12-192. Del Sello Sonolux linquillo. Vallenatos: La muerte del aviador, La
87
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Gonzalo Sánchez: De las Bandas y el folclor musical de la Tierra del Bunde*

Cacica, Rico beso.Valses: Bambalinas, Amor de Galindo, H. (1993) Memoria de Cantalicio Rojas. Ed. El
lejos, Virgen de Guadalupe, La brisa, Bojayá, Ca- Poira. Ibagué
puchinas. Villancicos: Misa de aguinaldos N.1, González, H. F. (1986) Historia de la música en el Tolima.
Gozos y villancicos al niño Dios, Duérmete niño. Fundación para el desarrollo y la democracia An-
Con sus 83 años, el maestro Gonzalo Sán- tonio García. Ibagué
chez tiene la satisfacción de haber recorrido el Pinilla. J. (1980) Cultores de la música colombiana. Edi-
país llevando una identidad musical que está ciones JPI. Editorial Adrián.
vigente y que transmite con la mayor humil- Pardo, C. O. et al. (2002) Músicos del Tolima Siglo XX.
dad, participando en proyectos de iniciación Pijao editores. Ibagué
musical con niños y jóvenes de su municipio. Villegas. J. Testimonio histórico sobre el tolima. Ibagué.
Su recorrido musical con las bandas abarca los Litografía Atlas.
escenarios nacionales en donde se han produci- Perdomo, C. (1981) El Origen de las Fiestas de San Pedro.
do las más importantes fiestas tradicionales de manuscrito inédito, Espinal.
renombre y prestigio en el país de su tiempo. Fuentes primarias
Entrevistas realizadas a Gonzalo Sánchez, Augusto Cer-
Bibliografía vera, Perdomo Ávila y César A. Zambrano por los
Arciniegas, J. I. (1958) Cantos del Tolima Grande. Iba- autores durante 2008 en las ciudades de Espinal e
gué Ibagué.
89
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

La música de los pueblos originarios de


América y su relación con el mito,
el rito, el juego y la fiesta*
Jesús Antonio Quiñones**
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación octubre 2010)

Resumen. El artículo busca motivar al lector para que, desde una conciencia histórica que le permita ubi-
carse en el tiempo y el espacio actual, valore la herencia de las culturas indígenas que nos precedieron, de
las que se conserva el legado tradicional a pesar de su desconocimiento en la sociedad moderna. A través de
citas de cronistas e intelectuales se reafirma la importancia de incluir en la educación artística la conciencia
de pertenecer a un contexto particular, recuperando el respeto por su propia esencia y dándole sentido a la
vida y a la identidad cultural. Se propone reflexionar sobre el mito y el rito como elementos vitales para la
existencia humana, invitando a que la práctica artística se derive de vivencias, como en las tradiciones ori-
ginarias de nuestra cultura actual, fuentes de inspiración para la creación poética, no solo para la música y
la danza sino también como practicas que deben ser recuperadas en las diferentes propuestas educacionales
colombianas.

Palabras claves: música indígena- educación artística - mito y rito – danza -juego y fiesta.

Abstract. From a historical conscience which lets us locate ourselves in our present, this article tries to
motivate reader to value the indigenous cultural heritage. Although the common ignorance this heritage is
partially conserved. This paper examines, through chronicler and intellectual´s citations, the importance of
including the conscience of belonging to a particular context for the artistic education. As well as recouping
the respect of self essence and making sense of life and cultural identity. It is argued that myth and rite can
be thought as vital elements for human existence, letting artistic practices become from experience as the

* Texto Elaborado a partir de la ponencia del mismo nombre presentada dentro del marco de la exposición “Bicentenario: Músicas e
Instrumentos de los Pueblos Amerindios” en marzo del año 2010 en el Museo de Arte del Tolima.
** Bachiller musical del Conservatorio del Tolima. Licenciado en Música de la Universidad de Caldas. Especialista en docencia del Arte
Dramático Universidad Antonio Nariño. Director artístico del Grupo Totolincho. Correo electrónico: totolincho1@gmail.com.
La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

ancient traditions of our culture. That culture is not only an inspiration resource to poetical, musical and
dance creation; but practices which must be recovered in the educational Colombian proposal.
Key words: indigenous music – artistic education – myth and rite – dance – play and party.

Introducción humanidad. Así, sin desconocer la cultura mu-


Debemos sentirnos orgullosos de tener pueblos sical de los pueblos europeos, debemos estudiar
milenarios, estos no son minorías étnicas; son pue- y analizar la música de nuestro continente y de
blos originales con una cosmovisión propia. Hoy nuestro país. Se hace necesario valorar los apor-
se impone una cultura para erradicar la otra y ese tes de la cultura indígena americana al contexto
ha sido el problema, nuestras culturas milenarias estético universal. De esta manera, en la for-
hay que fundirlas con las jóvenes, así la cultura de mación de nuestra cultura nacional se requiere
los pueblos será una cultura rica. Rigoberta Menchú reconocer la importancia de otros pueblos te-
(2000)1 niendo en cuenta nuestros valores propios.

El valioso patrimonio cultural de nues- Lo que nos contaron los cronistas y


tra América se hunde en las raíces de nuestra nos dicen los intelectuales.
cultura precolombina así como en su desarro- En Colombia, los Muiscas pertenecientes a la
llo posterior con sus descendientes. Así, una gran familia lingüística de los chibchas, tenían
orientación cultural que no desconozca el valor en sus rituales aspectos muy similares a los eje-
de las propias tradiciones no puede ignorar la cutados en muchas comunidades de toda Amé-
importancia de tales desarrollos culturales. En rica. Según el cronista Fray Pedro Simón2, en la
esta línea se encuentra José Martí, autor cuba- época seca o de verano que transcurre de enero
no quien a finales del siglo XIX afirmaba: hasta mediados de marzo en éstas tierras tenían
90 “el premio de los certámenes no ha de ser para la lugar unas fiestas que:
mejor oda, sino para el mejor estudio de los fac- “tenían la dedicación de sus casas y coronaciones
tores reales del país […]. La universidad europea de caciques, tenían otras en los meses de enero,
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 89 - 95

ha de ceder a la universidad americana, la historia febrero y parte de marzo en las cabas de sus la-
de América de los Inca, acá, ha de enseñarse al de- branzas, donde se convidaban alternativamente
dillo, aunque no se enseñe la de los arcontes de unos caciques a otros, haciéndose grandes gastos
Grecia, nuestra Grecia es preferible a la Grecia que y presentes de oro y mantas y de su vino, porque
no es nuestra. Nos es más necesaria” (pp 34) todas sus fiestas las hacía éste, supliendo las fallas
de la comida, pues ésta no les daba cuidado como
Al plantear que se deben utilizar nuestros el anduviese en abundancia. Asíanse de las manos
valores culturales no se trata de desconocer las hombres con mujeres, haciendo corro y cantando
contribuciones hechas por otros pueblos, por ya canciones alegres, ya tristes, en que referían las
otras culturas diferentes a las de América, ya grandezas de los mayores, pausando todos a una y
que forman parte del patrimonio cultural de la llevando el compás con los pies, ya a compás ma-

1 Ver en Menchu, Rigoberta. La Nieta de los Mayas. Ed. Aguilar 2 El texto original de Fray Pedro Simón es de 1627 y el presente
2000. ensayo se tomará la edición de 1981.
91
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

yor ya a compases, según sentían lo que cantaban, tante papel. Nos cuenta Lucas Fernández de
al son de flautas y fotutos […]. Tenían en medio Piedrahíta, citado en Chávez, (1979) que:
las múcuras de chicha de donde iban esforzando “eran muchísimos y tan bárbaros que afirmaban
a los que cantaban, otras indias que estaban den- que al principio del mundo hubo de la otra ban-
tro del corro, que no se descuidaban en darles de da del río grande de la Magdalena una sombra de
beber. Duraba esto hasta que caían embriagados y hombre que siempre estaba recostada, a quien lla-
tan incitados a la lujuria con el calor del vino, que maban en su idioma are y que esta sombra labró en
cada mujer y hombre se juntaban con el primero madera los rostros de hombres y mujeres y echán-
que se encontraba, para esto había general licencia dolos en el agua, se levantaron vivos y los casó y
en estas fiestas, aun con las mujeres de los caciques dividió después para que cultivasen la tierra y des-
y los nobles”. (Simón, 1981. pp 405) pués desapareció, dejándolos por primeros padres
de todos los indios. (pp. 49)
Los rituales chibchas con su complejo de
actos y gestos manifestados en las danzas, el rit- En su libro Pijaos y Quimbayas, Víctor Be-
mo de los movimientos, el compás llevado con doya (1950) narra cómo:
los pies, las libaciones, los cantos, la música, “los Pijaos se pintaban el cuerpo con bija y otras
etc., realizados en un momento culminante del sustancias colorantes, entraban en batalla dando
ciclo agrario (como lo era el de la preparación gritos desaforados, con el fin de meter miedo a sus
de las tierras para una nueva siembra) cumplían enemigos, fabricabánse máscaras con la piel del
una función eficaz. Los excesos biológicos con- rostro de los enemigos muertos, tocaban fotutos,
sumados en los campos de cultivo, tenían por zambombas, carracas, trompetas hechas con cani-
objeto estimular las energías del sol y reanimar llas de los vencidos, tambores, pitos de cobre o de
la actividad de la tierra, excitar el cielo para que barro y a veces de oro, ocarinas, silbos y entraban
la lluvia se realizara en las mejores condiciones, en batalla formando escuadrones imponentes”.
para que las plantas fueran abundantes en fru- (pp. 39-40)
tas, las mujeres tuvieran hijos y los animales se
multiplicaran copiosamente. En otro ejemplo, el intelectual tolimense
Estos rituales respondían a creencias reli- Leovigildo Bernal (1976), hablando del Valle
giosas como ocurría en todas las comunidades del Magdalena, nos dice:
que habitaban en la América precolombina. El “abriéndose, por carretera de la troncal que viene
texto descrito por el cronista Pedro Simón hace paralela al Magdalena, sesenta kilómetros al oeste,
referencia directa a lo que nosotros conocemos se encuentra Chaparral, al pie del cerro de Calar-
como música y danza, y nos permite intuir al- ma. Y allí cerca, las cuevas de Tuluni. Por la prin-
guna relación con el arte dramático de los indí- cipal de ellas corre la quebrada de igual nombre,
genas de América. tributaria del Amoyá que a su turno tributa en
De los Muzos, grupo Caribe que ocupaba el Saldaña. Las cuevas son inmensas bóvedas, de
la región esmeraldífera del mismo nombre, en veinte o más metros de altura las tres principales y
la cordillera oriental, encontramos un mito de lateralmente varias menores. Un extraño misticis-
creación en el cual la máscara tiene un impor- mo se apodera del espíritu en su seno. Son sensa-
La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

ciones similares a las que se sienten frente a la esta- ballos y la pólvora fueron en la conquista militar.
tuaria de San Agustín y las mismas de que hablan El misionero era con el soldado, un agente de ex-
los visitantes de las esfinges faraónicas. […] Hay pansión de las fronteras y de administración de las
una rara coincidencia semántica con la cueva de nuevas regiones. (pp 7-13)
Tulán –Tulan Zuiva–, la ciudad sagrada del pue-
blo quiché de Guatemala. […] Así dijeron relata Así para una arqueología del teatro prehis-
el Popol Vuh, aquellos grandes sabios, los varones pánico se hace necesario dar cuenta de la fiesta
entendidos, los sacerdotes y sacrificadores. Vamos, desde dos perspectivas diferentes. Por un lado
vamos a buscar y a ver si están guardados nuestros se debe tener en cuenta la configuración estruc-
símbolos. Y hacia la cueva de Tulán se dirigieron. tural de los elementos que componen el tea-
Y en el Tolima los viejos pescadores del rio Tulu- tro: música, danza, máscaras, maquillaje, entre
ni afirman que la cueva era santuario de los Pijao. otros. Y por el otro, la aproximación al teatro
[…] Cerca de Tulani-cueva, a orillas del Netaima, en tanto que comunión entre los actores y el
espera desde hace siglos el pueblecito más típica- público, como rito de amistad. Así, siguiendo a
mente indígena del Tolima, de existencia y nombre María Stern, es posible entender el teatro desde
precolombinos: Coyaima, hijo de Coy. Y uno no dos puntos de vista opuestos:
puede menos de recordar que la canción que los Para unos, teatro sigue siendo una «representa-
míticos Hunahpú e Ixbalanqué, del Popol Vuh, le ción», para otros, es un «acontecimiento». Para los
cantaban a sus hermanos monos se llamaba Huna- primeros el teatro representa en el microcosmos
hpú Qoy. (pp. 178) de la escena el macrocosmos del mundo. Para los
segundos, el teatro debe sacar el espectáculo de su
La conquista española en el siglo XVI, cotidiana rutina, hacer participar, conmover. El
encontró en América dos grandes imperios, el «acontecimiento» puede ser religioso, ritual, po-

92 Mesoamericano en el centro y el Inca en el sur, lítico o tener el carácter de una diversión. Como
en los demás territorios los aborígenes no es- ejemplo de teatro «acontecimiento» se cita a me-
taban agrupados como en estos dos centros de nudo los juegos del carnaval o los ritos populares.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 89 - 95

poder. Para analizar el comportamiento teatral (pp. 13)


podemos tomar como referencia los estudios
realizados por investigadores mexicanos como En la misma línea se encuentra el escritor
María Sten. Para dicha autora (1974): Octavio Paz (1959), quien al hablar de México
[…] las conquistas bélicas en el mundo entero se introduce la dimensión mítica de la realidad,
valen, a lo largo del tiempo, de distintas armas: es- podríamos decir la dimensión de aconteci-
padas, picas, pólvora, tanques, bombas atómicas, miento, en sentido teatral, de nuestro mundo.
guerras bacteriológicas […] La conquista española La historia de un pueblo se encuentra atravesa-
difiere de otras empresas similares de su época y de da por el mito. Así “el mito -disfrazado, oculto,
épocas posteriores en la medida que se usa, al lado escondido- reaparece en casi todos los actos de
de las armas tradicionales, un arma poco común: nuestra vida e interviene en nuestra historia.
el teatro. Y se puede decir, sin exageración, que el Muchas de nuestras verdades científicas como
teatro fue en la conquista espiritual, lo que los ca- la mayor parte de nuestras concepciones mo-
93
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

rales, políticas y filosóficas, solo son nuevas ex- esta forma se busca revivir el espíritu del pa-
presiones de tendencias que antes encarnaron dre de los animales. También aparecen ocarinas
en formas míticas”. (pp. 30) con la forma de aves principalmente jaguares,
ranas, murciélagos, etc., mostrando así la estre-
Los instrumentos musicales cha relación entre el hombre y el animal. En
El sentido musical es inherente a todos los pue- el caso de las ocarinas muchas veces su sonido
blos que habitan el planeta tierra. América ha corresponde al animal representado, como se
sido habitada desde hace más de 40.000 años afirma en el siguiente texto:
por hombres que cantan y danzan. Estos seres Escucha el canto,
han ido avanzando en la expresión de sus sen- Escucha el canto que enseña la tradición.
saciones, emociones y sentimientos, para lograr Entra al baile,
un arte que contiene una manera propia de Siente el abrazo de la comunidad.
sentir y de expresar, valga decir de ser. Toca el instrumento,
La música presidió la mayor parte de sus Libera su enseñanza,
actividades vitales: nacimiento, muerte, ado- Deja que cante su historia,
lescencia; se utilizó y se utiliza en ritos de ini- Deja que vuele ese pensamiento.
ciación, para la construcción de sus viviendas, Quedarán los instrumentos
como alabanza a las fuerzas de la naturaleza, Para que cuenten nuestra historia,
para las cosechas, la fertilidad, en la guerra, Quedará nuestra memoria en el canto,
contra las enfermedades, etc. La música sirvió La flauta hablará de lo que fuimos.
para acompañar cantos y danzas en ritos que se
realizan para que la sociedad siga su curso, para Cuando la gente sienta los instrumentos,
invocar a sus dioses y recordar sus tradiciones. Descubrirá lo que había en nuestros corazones.
No solo los instrumentos fueron dotados Esta es la fiesta, este es el baile.
de propiedades musicales sino también, algu- Ya llegaron los animales
nos elementos como algunos silbatos colgantes Y ahora cantan y bailan en forma humana.
de la zona Tayrona o vasijas rituales y funerarias Esta es la fiesta, este es el baile.
como las vasijas silbantes de Tierradentro, en Ya llegaron los anímales
las que aparece representado un personaje to- Y ahora suenan y repican en forma de instrumentos
cando un instrumento. Musicales.
Los animales, servían de inspiración o
como instrumentos: las payas, flauta de pan, Esta es la fiesta, este es el baile.
elaborada con los cañones recortados de las Ya se fueron los animales
plumas de cóndor, el morrocoy, caparazón de Y alegremente nos han dejado el legado de su canto
la tortuga que se golpea con un palillo o se frota Los cantos no han sido dados por los dioses o por los
en el esternón cubierto de cera de abejas, así Señores sino que se han aprendido de los animales.
como también el cacho de venado y de mata- (Duica, 1991)
cán recubiertos de cera de abejas, se emplean
en el pie de monte llanero en la Orinoquía. De En el territorio colombiano los instru-
La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

mentos musicales precolombinos fueron elabo- que conlleva al desarrollo armónico de la figu-
rados en calabazo, cerámica, hueso y oro. Estos, ra humana; el pie descansa normalmente, si se
además de ser excepcionales ejemplos de ins- empina lo hace sobre la articulación del meta-
trumentos musicales, son objetos de gran be- tarso y los dedos, el indígena expresa las emo-
lleza, como las trompetas en forma de caracol ciones y los sentimientos que sugiere la música
de la zona Nariño, a su vez que sirven para ex- que siente, teniendo conciencia del sentido del
plicar mitos, constituyendo signos de expresión ritmo, como algo suyo, armónico con la natu-
de su civilización. Por ello es necesario conocer raleza de su cuerpo y espíritu, o sea constru-
los ritos y mitos de las culturas indígenas para, yendo un cuerpo para expresar pensamientos,
a partir de esta vivencia, derivar el análisis ha- emociones y sentimientos en armonía con su
cia sus instrumentos musicales, sus melodías, entorno natural y social.
sus ritmos, su armonía, sus escalas musicales, la
relación de estos elementos con la vida diaria y Ancestros
contextualizarlos con la musicología y la antro-
pología contemporánea. Creo en la sombra de Aré
Y en su figura invisible
A manera de conclusión y propuesta Con ruidos, puntos y agua
El rito y el mito forman una unidad básica para Vi crear a Lulumoi
entender la cultura ya que son fundamento de
la conciencia humana. Estos dos elementos Vengo del monte, del campo
contienen valores de forma y contenido que Allí nací, de allí vengo
nos permiten comprender como la música y la Todo mi cuerpo es de fuego
danza, expresión de una realidad humana, es- Llevo la sangre del indio

94 tán reflejando la unidad de la comunidad.


Desde esta reflexión se propone que en Tocando voy por la vida
la educación artística colombiana es necesario Tan libre si como el cóndor
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 89 - 95

aprovechar las innumerables posibilidades de Ser orgulloso y altivo


las danzas, músicas, literatura y rituales indí- Forman las leyes, el rango
genas. La música indígena está ligada directa-
mente a la danza. Muchas veces el canto debe Si, indio soy no lo niego
realizarse danzando. Algunas comunidades se Pijao de todos los tiempos
niegan a cantar sin danzar. Son cantos colec- Con este canto de ancestros
tivos para danzas colectivas. La estructura del Que bailen todos los niños.
canto corresponde a las estructuras de la danza.
Son formas definidas y obedientes a leyes bien (Quiñones, 2009)
determinadas, que implican una íntima inte-
gración de la comunidad. Referencias bibliográfica
En la música y la danza indígena predo- Bedoya, V. (1950) Pijaos y Quimbayas. Bogotá: Imprenta
mina la disposición natural del movimiento, Departamental. pp. 39-40
95
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

La música de los pueblos originarios de América y su relación con el mito, el rito, el juego y la fiesta*

Bernal, L (1976). San Agustín, testimonio de piedra sobre Mendoza V.(1984) Panorama de la Música Tradicional de
el origen del hombre. Bogotá: Leipzig,. pp. 148. México. México. Universidad Nacional Autónoma
Castellanos P. (1970) Horizontes de la Música Precortesia- de México.
na. México: Fondo de Cultura Económica. Paz Octavio. (1959). El laberinto de la soledad. México:
Duica, W. (1991) La música de la vida: instrumentos ri- Fondo de Cultura Económica.
tuales. (Folleto de Exposición) Bogotá: Banco de la Quiñones J. (2009) Grupo Totolincho. “Ancestros”. En
República, Museo del Oro. Maravilloso Desconcierto (CD).
Grass A. (1985) La Marca Mágica, Diseño Precolombino Simón, P. (1981[1627]) Noticias historiales de la conquis-
Colombiano. Bogotá. Centro Colombo America- ta de tierra firme en las indias occidentales. Tomo III
no. Bogotá: Biblioteca Banco Popular, pp. 405.
Chávez Mendoza, A. (1977) La máscara precolombina. Sten M (1974). Vida y muerte del teatro náhuatl. México:
Bogotá: Ediciones Zazacuabi. Secretaria de Educación Pública. Pp.7-13.
Martí, J. (2005) Nuestra América. Caracas: Biblioteca Zalamea J. (1965). La Poesía Ignorada y Olvidada. Bogo-
Ayacucho. pp. 34 tá: Casa de las Américas.
Martí S. (1961) Canto, Danza y Música precortesianas.
México. Fondo de cultura económica.
Música en clave
99
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?


Sergio A. Sánchez Suárez*
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación octubre 2010 )

Resumen. En 1914, Alberto Castilla compuso el Bunde Tolimense, obra musical que lo inmortalizó como
compositor y que sirvió como modelo de identidad regional. Esta obra musical se convierte en Himno del
Tolima y a su vez una de las obras más representativas a nivel nacional. Sin embargo, estos acontecimientos
fueron lo suficientemente importantes para dimensionar la obra de Castilla como modelo y referencia, y
de esta manera establecerlo como un ritmo regional. La falta de popularización de otros bundes distintos
al de Castilla, a pesar de su categorización como ritmo e inclusive como género, deja varias interrogantes
desde el punto de partida. ¿Como fue el proceso de composición hasta convertirse en himno?, ¿porqué se
considera un ritmo ante el poco repertorio? ¿Cuáles son los elementos musicales que caracterizan el Bunde
Tolimense? Ante estos interrogantes, más allá del análisis técnico que se realice de la obra de Castilla, se
necesita previamente una contextualización histórica del autor y su entorno, identificar los procesos de
identidad regional que se vivieron en el país en la primera mitad del siglo XX y las referencias conceptuales
acerca de la palabra Bunde.

Palabras claves: Música Colombiana, Bunde Tolimense, identidad y música, Análisis Musical. Alberto
Castilla.

Abstract
In 1914, Alberto Castilla composed the Tolimense Bunde, musical work that immortalized him as a com-
poser and served as a model of regional identity. This musical work becomes Hymn of Tolima and also one
of the most representative works nationwide. However, these events were important enough to size the
work of Castilla as a model and reference, and thus establish it as a regional rate. The lack of popularity
other than the Bundes Castilla’s bunde, despite its categorization as rhythm and even as a genre, it leaves
several questions from the point of departure. How was the writing process into song? Why is considered
a little rhythm to the repertoire? What are the musical elements that characterize the Bunde Tolimense?
Given these questions, beyond the technical analysis that is conducted in the work of Castilla, is needed

* Esp. en Dirección instrumental Fundación Universitaria Juan N. Corpas Mg(c) candidato a maestría en teoría Musical. Universidad Eafit.
Docente del Conservatorio del Tolima. sergio.sanchez@conservatoriodeltolima.edu.co
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

before historical context of the author and his environment, identify the processes of regional identity that
is lived in the country in the first half of the twentieth century conceptual references about the word Bunde.

Key words: Colombian music, Bunde Tolimense, identity and music, musical analysis. Alberto Castilla.

Introducción: Tolima, Tierra de tores más recientes como Leonor Buenaventura,


Mitos Luis Enrique Aragón Farkas, Jorge Humberto Ji-
El Tolima es un Departamento rodeado por la ménez, Juan Pablo Hernández entre otros, re-
magia de sus historias. Cuando se habla del mo- crean en sus letras la esencia de los mitos To-
hán, la madremonte, la patasola, los tunjitos y la limenses.
candileja, se observa en el Tolima grande (Toli- El Bunde de Castilla no fue no fue la ex-
ma y Huila) una abundancia de mitos y leyen- cepción a este tipo de expresión cultural. El si-
das, que hacen parte de las costumbres del co- guiente es un verso de la primera letra escrita
lombiano, y además provienen de la tradición por Cesáreo Rocha Castilla (González, 1986,
oral de los pueblos que se encargaron de unir la p. 29):
fantasía con las creencias populares. El mito es Danzan, vuelan
un mecanismo de un colectivo para buscar ex- Candilejas, brujas
plicaciones no científicas de fenómenos natura- En las sombras.
les. Según Cesáreo Rocha (citado en Perdomo, Y el mandíngas,
1959), “los mitos hacen parte de la superstición Los tunjitos y el mohán
de los indígenas del Tolima, que toman fuerza
en los melancólicos atardeceres del llano a la hora Pero este no es el único elemento mági-
100 de las primeras sombras que alargan el miedo y co que tiene relación con el Bunde Tolimense.
la superstición”. Otra función del mito es crear Existen dos mitos alrededor del emblemático
conductas de control por medio del miedo, en himno del Tolima compuesto por Alberto Cas-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

donde todos nuestros actos morales son casti- tilla. El primero tiene que ver con la creación
gados o favorecidos por seres mitológicos. musical de una obra netamente instrumental,
Sin embargo a pesar del trasfondo fanta- para luego convertirse en un himno sin letra. El
sioso, un mito también es una verdad a medias segundo interrogante es la categorización como
(Aragón, 2010) en donde el campesino busca- aire y ritmo e inclusive como género regional.
ba explicaciones de un hecho cotidiano y real Estos dos interrogantes serán expuestas a lo lar-
por medio de leyendas, narraciones religiosas y go de este ensayo.
cualquier mecanismo oral para convertirlo en
mandato o ley. Las tonadas interpretadas por el Alberto Castilla: hombre de cultura
campesino en el Tolima grande consigna toda en la Ciudad Musical
esta tradición oral para convertirla en canción. Cuando el ciudadano francés de seudóni-
Es por esto que autores como Cantalicio Rojas, mo Conde de Gabriac visitó a Ibagué en 1886,
Gonzalo Sánchez, Alfonso Liz y otros composi- quedó impresionado con el ambiente musical
101
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

de esta naciente Ciudad dejando su relato en servatorio del Tolima, que se ha encargado de
un artículo titulado Ibagué, ciudad Musical liderar los procesos formativos musicales no
(González, 1986, p. 20). Un ambiente musical solamente a nivel regional sino a nivel nacio-
donde cantantes acompañados de tiples, ban- nal durante más de una centuria. La imagen de
dolas y guitarras, eran parte del diario vivir y hombre influyente y de cultura, se plasmó prin-
en su población se respiraba música por cual- cipalmente cuando Castilla desde de su visión
quier rincón de la naciente ciudad. . Este su- cosmopolita y futurista, decidió construir una
ceso no solamente sirvió para bautizar la capi- Sala de Conciertos. Esta idea se hizo realidad
tal tolimense como Ciudad Musical, sino para en 1934 cuando se inauguró una Sala de es-
despertar la conciencia y su culto colectivo de tilo republicano, inicialmente Bautizada como
la comunidad hacia la música. Dentro de este Sala Beethoven, que posteriormente llevaría el
ambiente cultural, llega a la capital tolimense nombre de su creador, y que durante más de
Alberto Castilla Buenaventura, una de las figu- medio siglo se ha convertido en el centro cultu-
ras tal vez más importantes e influyentes en los ral musical más importante del departamento y
destinos de la ciudad musical durante el siglo una de las más importantes salas de concierto
XX, hasta nuestros días: Aunque nació y se for- del país declarada monumento nacional por la
mó académicamente en Bogotá, Castilla tuvo ley 112 de 1994.
ascendencia Tolimense. En 1898, a los veinte Fue Castilla realmente el icono creador y
años de edad quedando huérfano de padre y gestor de la Ciudad Musical, hombre de cultura
madre decide trasladarse definitivamente a Iba- de la capital tolimense cuyo importante legado
gué. Una vez radicado, comienza una exitosa ha trascendido hasta nuestros días. La vida bo-
carrera como intelectual y músico. Castilla se hemia que vivió Castilla en Bogotá rodeada por
caracterizó por ser un hombre influyente, culto intelectuales y músicos (Acaldía de Ibague, si-
y polifacético que se desempeñó como político, tio web ), la siguió desarrollando no solamente
ingeniero, periodista y humanista (Conservato- en Ibagué, si no en sus alrededores como es el
rio del Tolima, sitio web oficial). caso del municipio del Espinal. El compositor
Aunque Castilla como compositor no ten- Eleuterio Lozano (González, 1986) narra el si-
ga un catálogo amplio, le bastaron obras como guiente acontecimiento:
Rondinella (pasillo), la Guabina Tolimense y Había en el Espinal una señora llamada María Ji-
el Bunde Tolimense para inmortalizarse como ménez, que tenía una venta de trago y una pianola.
creador. Como características importantes las Allí iba Castilla por una doble atracción: la pianola
obras de Alberto Castilla, se basan en ritmos y el trago.... Fue allí, en el establecimiento de doña
colombianos (principalmente guabina y pasi- María Jiménez, donde un día aguijoneado por los
llo), son de formato instrumental, contienen tragos, Castilla improvisó la música del Bunde To-
estructuras formales tripartitas; y mantienen la limense, tocándolo por la pianola y acompañando
tonalidad axial durante toda la composición sin en la guitarra por Lucena. (p. 51),
modular a otros centros tonales.
En 1906 Castilla funda la Academia de Es así como en el año de 1914, tras largas
Música del Tolima que actualmente es el Con- jornadas de tertulia y bohemia Castilla con-
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

cibió el Bunde Tolimense en el municipio del Tiple: Adolfo Lara Olarte


Espinal. Testigos
Eleuterio Lozano
El Bunde Tolimense: un himno sin Pedro Sanchez
letra
Es el Espinal la ciudad del Bunde y de la tam- El compositor Emiliano Lucena, narra
bora, tierra de mitos y leyendas donde Alberto este suceso de la siguiente manera:
Castilla concibió su más representativa compo- Cuando el Maestro Castilla vino al Espinal en el
sición: El Bunde Tolimense. Helio Fabio Gon- año de 1914… tuve el placer de gozar de su amis-
zález (1986) realiza un paralelo entre Ibagué y tad. Entonces existía un club social de propiedad
el Espinal. Si la capital Tolimense es conocida de Arturo Galindo, y como este club tenía un
como “Ciudad musical de Colombia”, al Es- piano lo visitaba con frecuencia. Allí nació por el
pinal debería catalogarse “ciudad musical del poder de la inspiración, esa obra que es como el
Tolima” ( p. 46). himno de los Tolimenses. Yo fui un favorecido de
Para la creación del Bunde, según Blan- la suerte, por el hecho de haber sido … quien con
ca Álvarez, Alberto Castilla hizo una mezcla de la guitarra … acompañaba al Maestro las frases
ritmos: guabina, pasillo y danza que es según que iban brotando de su mente y corazón hasta
la autora: formar con ellas la pieza musical tan conocida y
“Es una amalgama de estos ritmos, saturados de aplaudida, y a la cual es suficiente para inmortali-
sonidos del aire, entre las cañas, el rumor del río, el zarlo como compositor. (Perdomo, 1978)
trinar de las aves mañaneras; alegrado con el retozo
de brujas, duendecillos y mohanes y bautizado con Sin embargo y a pesar de que en la placa
gotas de anisado, chicha y guarapo Espinaluno. Así conmemorativa de la plazoleta del edificio de
102 nació el Bunde de Castilla, en 1914, en una casu- la Caja Agraria en el Espinal se menciona a los
cha de la plaza principal del Espinal de propiedad autores de la letra el Bunde Tolimense, estos no
de Arturo Galindo, en ese tiempo club social. (Ál- realizaron la letra en la fecha que describe la
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

varez, 1991, p. 303) placa. La obra de Castilla fue en principio ins-


trumental. Posterior a este acontecimiento, a
De esta manera, y como testimonio a través de una ordenanza el 14 de diciembre de
la posteridad, se puso la siguiente placa en la 1959, se toma la siguiente decisión: “por medio
plazoleta que expresa lo siguiente (Perdomo, de la ordenanza No 66, la asamblea del Toli-
1978): ma, en su artículo 1º ordena rendir pleitesía y
homenaje de admiración y gratitud al Maestro
“Aquí nacio el inmortal Bunde tolimense” Alberto Castilla por ser artífice preclaro de la
Septiembre 10 de 1914 hora 11 a.M. belleza, orgullo auténtico del Tolima y la repú-
Autor: alberto castilla buenaventura blica; así mismo en su artículo 2: Declara como
1ª letra Cesareo Rocha Castilla Himno oficial del Departamento del Tolima
2ª letra Nicanor Velasquez Ortiz. EL BUNDE, del mismo Maestro”. (Perdomo,
Guitarra: Emiliano Lucena Rodriguez 1978)
103
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

De lo anterior cabe resaltar que en 1959 la patria y modernidad. Cuando se analiza la re-
ley solo consagró lo referente a la música, pero lación entre identidad y música, siendo esta
de las dos letras existentes, una de Cesáreo Ro- parte del reflejo de la sociedad sus costumbres
cha y la otra de Nicanor Velásquez (Timoleón) y vivencias, Wade observa que la tendencia de
se guardó silencio. Se puede decir entonces que la llamada música nacional y sus procesos de
legalmente en esta ordenanza el Bunde de Cas- homogenización son una imposición hacia la
tilla es un Himno sin texto. ¿Entonces como construcción de patria realizada por la elite,
fue posible que esta obra musical se convirtiera o sea los músicos e intelectuales que hicieran
en un Himno sin letra? ¿Por qué no se recono- parte del reflejo del ciudadano identificado con
ció a ninguno de los dos autores de la letra en la republica: un burgués culto e ilustrado de
esta ordenanza? raza blanca. Es así como el Bunde Tolimense se
La placa conmemorativa que existe en el postula como un himno sin letra en el afán de
Espinal dice:”Aquí Nació el Bunde Tolimense”, convertirse en el icono del Tolimensismo, pri-
y después habla de los autores de la letra como mero por ser Castilla su compositor y modelo
si hicieran parte de la concepción de la obra. del ciudadano culto y burgués, segundo por ser
Realmente Castilla realizo una composición reflejo del arte musical de la región, impues-
musical netamente instrumental que poste- to por la elite de músicos e intelectuales de la
riormente se convierte en Himno del Tolima época, y tercero, por la búsqueda de identidad
primero por la importancia que tuvo este en musical como proceso de homogenización re-
el departamento como hombre de cultura, y gional. Algo similar se vivió a nivel nacional
segundo como dice la ordenanza para rendirle en los procesos de construcción de patria a co-
pleitesía y gratitud. El mito creado alrededor mienzos del siglo XX nombrando al bambu-
del Bunde tiene que ver con la concepción de co como aire y danza nacional dentro de una
una composición musical con letra cuando nación centralista olvidándose de las músicas
realmente las letras se reconocieron muchísimo periféricas (Sánchez, 2009). El Bunde Tolimense
después de su creación. Pero esto va más allá. realizó este mismo camino hacia la búsqueda
Ante la búsqueda de identidad regional se vio de identidad regional.
en el Bunde de Castilla el icono del Tolimen- El Himno del departamento del Tolima
sismo (identidad Tolimense), por lo que signi- tuvo una gran difusión y popularización gra-
ficaba su autor en el Departamento haciendo cias a la imagen de Alberto Castilla, la fácil asi-
de esta composición un modelo a seguir, y de milación del colectivo a la música y el texto,
alguna manera, aceptándolo como un aire pro- y por las importantes versiones de diferentes
pio de la región. agrupaciones emblemáticas departamentales
Estos procesos de identidad Nacional se como la Banda Sinfónica, estudiantinas, ron-
vivieron a nivel de patria y región que según dallas y duetos en los que se destacan Garzón
Peter Wade en Music, Blackness and National y Collazos.
Identity: Three Moments in Colombian History En la actualidad, y desde 1994, en el Es-
(1998, pp. 1-9), explica como parte de la ho- pinal se celebra anualmente el Festival Nacional
mogenización de las ideas de nacionalismo, del Bunde “Gonzalo Sánchez”. Hecho que su-
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

mado al suceso histórico ya reseñado de la com- te, ya que es un ritual para un velatorio que se
posición de Castilla, le ha ganado el título de realiza ante la muerte de un infante y en la cual
Tierra del Bunde, Dentro de las actividades del se canta un tipo de currulao denominado “chi-
concurso se otorga el premio de composición gualo”. Abadía agrega que en el Tolima el único
al mejor bunde tolimense, donde se le cataloga aire conocido con este nombre es el del maestro
como un ritmo de la zona andina colombiana Castilla y que corresponde a una composición
característico del Tolima Grande. Este premio única. Además agrega que el Bunde de Castilla
usualmente queda desierto ante la ausencia de se baila con coreografía de la guabina o del tor-
composiciones de este ritmo. Esta primera par- bellino sin generar problema rítmico alguno.
te deja varios interrogantes que serán analizados José Ignacio Perdomo dentro del glosario
en los siguientes apartes del ensayo en los que folclórico de la Historia de la Música en Co-
se quiere despejar interrogantes como: ¿Cuales lombia (1980, p. 249), define al Bunde Toli-
son los rasgos y características musicales que mense como ritmo del Tolima que popularizó
definen un bunde tolimense?, ¿Dentro de los el ilustre artista Alberto Castilla. A pesar de
procesos de búsqueda y construcción de iden- estas definiciones usadas por Abadía y Perdo-
tidad nacional y regional, porque hay muchos mo, Blanca Álvarez en la Enciclopedia folcló-
bambucos y casi no hay bundes tolimenses?... rica del Tolimense (1991, p. 303), lo especifica
O si cambiamos el enfoque de la pregunta, ¿Es como “un aire armonioso y señorial parecido a
realmente el bunde tolimense una aire o ritmo? la Guabina”. Según la misma autora, se rela-
Para comprender estos interrogantes es impor- tan crónicas de que el primer bunde nació en
tante en primera instancia definir el significado el Espinal- Tolima en 1881, lleva por nombre
y el origen de la palabra Bunde. “Hacienda de Canastos” y su creador fue Timo-
teo Ricaurte, quien se inspiró en el nombre de
104 Bunde: crisol de significados dicha hacienda para componerlo. Según Cesá-
El termino bunde no hace parte del dicciona- reo Rocha (Perdomo, 1978), tradicionalmente
rio de la Real Academia de Lengua Española. A en el Tolima, y dentro de la jerga local, la pala-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

pesar de no tener una aceptación, esta palabra bra bunde ha significado miscelánea de ruidos
hace parte del lenguaje popular el cual es uti- o mezcla desordenada de sones. Además agrega
lizado con diversos significados. Según Abadía que cuando hay algarabía o desorden suele uti-
(Abadía, 1994, p. 48) la palabra bunde etimo- lizarse el dicho ¡que es ese Bunde! en referencia
lógicamente proviene del término “Bundas” al caos. Otra acepción dentro de las costum-
que es el nombre de un baile africano de Sierra bres tradicionales tolimenses, es utilizar este
Leona definido como “wunde”. Según esto, se término cuando se pide a los músicos tocar o
concibe el origen de la palabra en lo africano improvisar diferentes tonadas y ritmos. Rocha
por lo cual estaría relacionado con uno de los concluye que el bunde es “anarquía melódica y
ritmos más representativos del litoral pacífico: es la síntesis del rumor de los llanos que aprisiona
El bunde Chocoano. Abadía lo define como al campesino en su rondador elemental”.
“cierto baile de negros”, sin embargo va más allá La definición de Rocha es reafirmada por
y menciona que el bunde como danza no exis- Abadía (1975, p. 184) agregando que el bun-
105
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

de es mescolanza y confusión. Este concepto es letra del Bunde creado sobre la partitura del Maes-
ratificado por Helio Fabio González (1986, p. tro Castilla, danzan, vuelan, la candileja, los tunji-
51) quien define el vocablo como desorden o tos, el Mohán, mandingas y otros mitos de los que
mezcla de cosas inconexas, término utilizado ha creado la superstición indígena del pueblo del
en el Tolima en el siglo XIX como sinónimo Tolima… cuya imaginación les da fuerza, vida y
de reunión o tertulia de baile sobretodo en presencia de manera especial, en los melancólicos
los festejos de San Juan. Por último, concluye atardeceres del llano, a la hora en que las primeras
González que el bunde es una conjunción de sombras alargan el miedo y la superstición.
compases de bambuco, vals, danza y pasillo.
En síntesis, el crisol de significados de la Muchos autores encontraron en este tipo
palabra de bunde es equivalente a la diversidad de lenguaje poético una manera narrativa de
de conceptos que se puedan usar. Esta variedad describir un fenómeno específico, en este caso
hace que sea complejo hablar de este término El Bunde. Aunque las descripciones narrativas
de una manera absoluta, ya que el significado son una importante fuente de referencia, gene-
es usado dependiendo del contexto y una si- ralmente tienden a la subjetividad por la falta
tuación específica. Esta palabra es semejante a de un lenguaje más técnico, preciso y crítico.
nuestra variedad racial, cultural y geográfica. Esto no es culpa de los historiadores de la épo-
El mayor problema radica en las definicio- ca, ya que no tenían las herramientas episte-
nes ambiguas encontradas sobre el Bunde Toli- mológicas adecuadas para abordar un objeto de
mense como aire o ritmo. Autores como Blanca estudio en este caso musical, campo de estudio
Álvarez (1991) y Helio Fabio González (1986) de la musicología histórica, la cual se desarrollo
lo describen como la mezcla de varios ritmos muchísimo después de estas narraciones.
de la región andina en los cuales encontramos Ante la ambigüedad de definiciones al-
el bambuco, el pasillo, la guabina y la danza. rededor del Bunde Tolimense como ritmo, sa-
Pero a pesar de estas definiciones no hay refe- biendo que es el de Castilla el más importante
rencia alguna que describa a fondo los rasgos y popular sin tener otras referencias similares
característicos y aspectos musicales de este rit- igual de importantes, se abren las siguientes in-
mo desde un lenguaje técnico. Por el contrario terrogantes ¿cómo es posible que el Bunde de
es recurrente en varios autores describirlo desde Castilla siendo una composición tan popular
una perspectiva narrativa a través de un lengua- y emblemática no tenga otras composiciones
je poético como es el caso de Cesáreo Rocha equivalentes y similares? ¿Porque si hay mu-
Castilla (Perdomo, 1978): chos bambucos, pasillos, torbellinos, guabinas
El Bunde es una amalgama de ruidos hechos me- y solamente unos pocos bundes tolimenses?
lodía, y por eso en una misma pieza musical de ¿Será factible que el Bunde Tolimense realmente
tal estirpe, se perciben compases de bambuco, de no sea un ritmo, ni aire y ni mucho menos se
valse, de danza y de pasillo, atados por los hilos pueda considerar un género musical? Es posi-
armoniosos de un solo paisaje melódico recargado ble que, así como la palabra bunde defina algo
de matices. Tal, la razón para que el Bunde sea la confuso, estemos ante una confusión colectiva
canción folclórica por excelencia del Tolima. En la
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

acerca de la categorización del bunde como rit- cal, se le reconoce dentro de una categorización
mo insigne del Tolima?. mayor de alguna característica musical, en este
Para poder abordar esta problemática es caso el ritmo. ¿Pero si se reconoce el Bunde Toli-
indispensable abordar analíticamente la parti- mense como un género musical dentro de la re-
tura de Castilla, ya que como fuente primaria, gión como es posible que a diferencia de otros
es la que nos puede otorgar una visión más géneros similares como la guabina no haya sido
aproximada ante tantas preguntas. tan popular? Esta pregunta nos abre otra in-
quietud y es el punto central de este discurso
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito? ¿Es realmente el Bunde Tolimense un ritmo?
Una de las definiciones más recientes que se Para poder entender esta interrogante es im-
encuentran acerca del Bunde Tolimense la po- portante realizar un análisis musical y descrip-
demos encontrar en la cartilla del Ministerio tivo del Bunde Tolimense insignia, el de Castilla.
de Cultura ¡Que viva San Juan, que viva San
Pedro! (Rodríguez, Ordoñez & Torres, 2009,), 1. Forma: A nivel macro la composición de
donde se referencia lo siguiente: Castilla es una forma tripartita caracterís-
El Bunde es otro de los géneros exclusivos del eje tica de muchos compositores de la primera
centro-sur. Su célula rítmica básica de acompaña- mitad del siglo XX como Emilio Murillo y
miento se asemeja a la de la guabina y su estructura Pedro Morales Pino, entre otros. Este tipo
melódica contiene elementos rítmicos similares a de estructura formal consta de tres seccio-
los de la guabina, el pasillo y la caña. (p. 14) nes temáticas, introducción y coda (simila-
res en material temático):
Al catalogar el bunde como género musi-

106 Tabla 1. Forma tripartita del Bunde Tolimense

Sección Compases Material temático


Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

Introducción 7

A 12X2

B 12X2

C 16X2

Coda 8
107
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

Es importante añadir que al finalizar las sar a la repetición de cada sesión o unir con la
secciones A, B y C, se observa un pequeño ri- siguiente sección:
tornello instrumental que lo utiliza para regre-

Fig. 1 Ritornello

2. Armonía: En el Bunde de Castilla se obser- ciones. La elaboración armónica es muy


va una armonía tonal basada en el enlace sencilla desde el punto de vista estructural
armónico I-IV-V, en donde no se encuen- usando acordes tríadicos en estado funda-
tran rearmonizaciones, ni uso de dominan- mental y en primera inversión:
tes secundarias, tonicizaciones o modula-

Fig. 2 Enlace Armónico del Bunde de Castilla

Tambien es usual ver encadenamientos tercalan funciones armonicas de subdominante


armonicos de la música popular, donde se in- (ii), Tónica (I), Dominante (V) y Tónica (I):
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

Fig. 3 Encadenamiento armónicos

Para el compositor tolimense Luis En- 3. Melodía: La bella melodía del Bunde To-
rique Aragón Farkas ( 2010)1, en Castilla po- limense, está construida sobre una escala
dríamos encontrar una particularidad: Es el diatónica mayor. Durante toda la obra la
único compositor de música colombiana de la melodía permanece intacta por alteraciones
primera mitad del siglo XX que no realiza una cromáticas. Una de las razones del porqué
sola modulación entre secciones. Compositores esta melodía es tan reconocible es su senci-
como Morales Pino y Emilio Murillo realiza- llez; en su simplicidad está su fortaleza, ha-
ban comúnmente este tipo de práctica, llevan- ciendo que el oyente la memorice y la iden-
do a cabo modulaciones cercanas como es el tifique desde el primer momento en que la
caso de la relativa, submediante o cambio de escucha. Ante la ausencia de modulaciones,
modo entre la tonalidad paralela. Pero Castilla la melodía gira alrededor de la tonalidad
108 en sus composiciones no realiza ningún tipo de axial, donde predominan saltos consonan-
modulación, manteniendo la tonalidad axial tes hacia grados armónicos y movimientos
durante la totalidad de la obra. melódicos por grados conjuntos, haciendo
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

que sea fácil de entonarse, incluso para una


1 Entrevista realizada por el autor del presente artículo al Compositor
Luis Enrique Aragón Farkas acerca del bunde persona sin instrucción musical.

Fig. 4 Línea melódica en el Bunde de Castilla

4. Ritmo: La base rítmica del Bunde Tolimen- ñamiento a la observada en la guabina. El


se es similar en varios aspectos de acompa- bajo marca el primer y tercer tiempo del
109
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

compás de 3/4 mientras el acorde lo realiza tercero. De esa manera se pueden observar
sobre el segundo tiempo y la sincopa del dos planos rítmicos.

Fig. 5 Base rítmica en el Bunde de Castilla

Estos dos planos rítmicos que se repiten que cumplen una función rítmico-armónica,
durante la mayor parte de la composición de ¿cómo se puede definir el Bunde Tolimense
Castilla, son análogos a la Guabina. Siendo como un aire o ritmo si se acompaña como una
así en cuanto al ritmo, no hay elementos que Guabina? ¿Qué diferencia un Bunde respecto a
difieran en la manera de acompañar el bajo y una Guabina?
la armonía. Por lo tanto, El Bunde Tolimense Según Rodríguez et al. (2009), la única
utiliza la misma base rítmica de la Guabina. diferencia La Guabina y el Bunde Tolimense es
Ahora si lo que identifica una composición a la acentuación que se produce sobre el segundo
nivel rítmico es precisamente los instrumentos tiempo a nivel melódico:

Fig. 6 Acento de segundo tiempo característico del Bunde

Pero Rodríguez va más allá y considera del Tolima de José María Tena: Esta composi-
que melódicamente el Bunde se caracteriza por ción es similar a la de Castilla primordialmente
tener figuraciones de otros ritmos como el pasi- en su forma tripartita y en el tratamiento rít-
llo y la caña. Para este fin en la cartilla ¡que viva mico de la melodía. Ahora si se comparan estas
san Juan, que viva san Pedro! (2009) se analizó dos composiciones encontramos muchos pun-
otro de los Bundes Tolimenses conocidos: Noches tos de convergencia:
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

Tabla 2. Comparativo entre los bundes Noches del Tolima y Bunde Tolimense
Ritmo carac-
Bunde Tolimense
Sección terístico en la Noches del Tolima (José M. Tena)
(Alberto Castilla)
melodía

A Guabina

B Pasillo

C Caña

El primer punto de convergencia está en la que los dos Bundes coinciden en el patrón
la sección A, donde es el acento agógico que rítmico, que se escucha internamente en 3/4 y
ocurre en el segundo tiempo del 3/4 coincide posteriormente en 6/8. A pesar de la analogía
en los dos bundes, siendo este punto de refe- que realiza Rodríguez sobre este Bunde con la
rencia para el acento prosódico del texto. En Caña, el segundo compás es distinto, ya que la
la sección B, no se puede observar alguna si- caña es yámbica (corto-largo), mientras que el
militud, y menos poder caracterizar como pa- Bunde es trocaico (largo-corto) utilizando una
sillo, ya que tiene relación con la sección C, en negra y corchea.

Fig. 7 Célula característica de la Caña, en contraste con el motivo C del Bunde


110
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

Otra perspectiva, la cual difiere sobre la si- comprender que el cambio armónico de la caña
militud del Bunde con la caña, la encontramos en el compás de 3/4 es anticipado en el tercer
en el libro Memoria de Cantalicio Rojas (Galin- tiempo sobre un acorde de dominante. Este ras-
do, 1994) en donde se expone de una manera go característico del acompañamiento de la caña
concisa el golpe característico de la caña y su no se parece rítmicamente, ni armónicamente,
relación con la armonía. Este estudio permite al compuesto por Castilla en la tercera sección:
111
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

Fig. 8 Características rítmicas y armónicas de la caña (Galindo, 1994)

Es muy complejo sacar conclusiones a co. Por lo tanto no se puede generalizar que
partir de la melodía aislándola del acompaña- un aspecto rítmico-melódico como el acento
miento, ya que es esta última la que define las del segundo tiempo, es el que permite distin-
características de un aire o ritmo. Este tipo de guir entre el bunde y la Guabina De manera
aislamiento ha creado una cierta cantidad de que ¿La guabina no tiene acento en el segun-
hipótesis alrededor de los ritmos utilizados por do tiempo? ¿O será que el bunde y la Guabina
Castilla en la melodía en los que se incluyen tienden a ser lo mismo?
la danza, el bambuco, el pasillo, el torbellino, la Según Farkas (2010), La obra de Castilla,
caña y la guabina. Si reconocemos el Bambu- se concentra principalmente en los aires tra-
co como un género musical, veremos muchas dicionales más emblemáticos de la Bogotá de
variantes de figuración melódica. Pero si hay principios del siglo XX, ya que es allá donde re-
algo que define al bambuco de una manera cibe su formación musical al lado de reconoci-
genérica, es su forma de acompañamiento rít- dos músicos como Emilio Murillo. Es por esto
mico. En el sanjuanero, subgénero del bam- que el repertorio compuesto por Castilla es pri-
buco, la melodía tiende a un patrón Yámbico mordialmente basado en Pasillos y Guabinas.
(corchea-negra), siendo este el ritmo melódico Al llevar estos imaginarios al departamento de
predominante, mientras que en otros tipos de Tolima, Castilla comenzó a utilizar elementos
bambucos la característica melódica es lo que se melódicos característicos de la región, mez-
denomina la sincopa caudal (Bernal, 2004), que clándolos de alguna manera con la Guabina
es el silencio que ocurre sobre al acento métri- que permaneció inalterable a nivel del acom-
Bunde tolimense: ¿ritmo o mito?

pañamiento rítmico-armónico. Podríamos en- Álvarez, B. (1991). Raíces de mi terruño. Ibagué-Tolima:


tonces concluir que el Bunde Tolimense no es Imprenta Departamental.
propiamente un ritmo en sí mismo, sino uno Aragón Farkas, L. E. (4 de Mayo de 2010). Entrevista
una categoría perteneciente a la Guabina, con acerca del Bunde. (S. Sánchez, Entrevistador)
motivos rítmico-melódicos particulares y dis- Aragón, F. A. Cantares del Tolima. Manizales: La Patria.
tintivos que son parte de la práctica musical de Bernal, M. (2004). De el Bambuco a los Bambucos.
la región. Es por esto que, ante la ambigüedad Anaisdo V Congresso lAS .
de la definición como ritmo y aun como géne- Colombia en 50 Canciones. (s.f.).
ro, el Bunde Tolimense, emblema de la identi- Galindo, H. (1994). Memoria de Cantalicio Rojas Gon-
dad regional, no ha tenido suficientes composi- zález, 1896-1974. Ibagué: El Poira editores.
ciones análogas o similares (A pesar del amplio González, H. (1986). Historia de la música en el Tolima.
catálogo compuesto por Gonzalo Sánchez), ni Ibagué: Fundación para el desarrollo de la demo-
ha alcanzado los procesos de popularización cracia.
como otros tipos de ritmos, donde el colectivo Rodriguez, J. P. C. A. (2009). !Que viva San Juan, que
lo pueda identificar de manera precisa como viva San Pedro! .Plan Nacional de Música para la
un ritmo propio y autóctono, y diferenciarlo Convivencia. Ministerio de Cultura. Bogotá.
de otros como es el caso de la Guabina. Perdomo, C. (1978). Taller de Música. Primer Documen-
A pesar de que todos los argumentos pre- to .
sentados en este escrito puedan tener un con- Perdomo, J. I. (1980). Historia de la Música en Colombia.
tenido analítico y de alguna manera, polémi- Bogotá: Plaza y Janes.
co, el Bunde de Castilla permanecerá inmune Sánchez, S. (2009). Reflexión histórica de las formas de
e inmortal al tiempo, al espacio y al discurso, la escritura musical del bambuco, entre el colonia-
ya que ha sido y seguirá siendo el Himno del lismo y la república en Colombia. Música cultura

112 Tolima, símbolo de identidad regional y una y pensamiento. Conservatorio del Tolima, Ibagué.
de las más bellas composiciones de Música Co- Sitio Web de la Acaldía de Ibague. (s.f.). Recuperado el
lombiana que ha trascendido a nivel universal. 7 de Mayo de 2010, de http://www.alcaldiadeiba-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 99 - 112

Será entonces la caña, cañita mestiza, in- gue.gov.co/web2/joomla/index.php?option=com_


diana, del Tolima Grande…. ¿la tradición? content&view=category&layout=blog&id=16&It
emid=67
Bibliografía Sitio web del Conservatorio del Tolima. (s.f.). Recuperado
Abadia, G. (1975) Compendio General del Folklore Co- el 7 de Mayo de 2010, de Conservatorio del To-
lombiano Editorial Universidad Nacional. Santa fe lima: http://www.conservatoriodeltolima.edu.co/
de Bogotá index.php?option=com_content&view=article&i
Abadía, G. (1994). 2.300 Adiciones al vocabulario Folkló- d=106&Itemid=146
rico Colombiano. Bogotá: Fondo de promoción de Wade, P. (1998). Music, Blackness and National Iden-
la cultura del Banco Popular. tity: Three Moments in Colombian History. (C.
Abadía, G. (1995). ABC del folklore Colombiano. Bogotá: U. Press, Ed.) Popular Music, Vol. 17, No. 1, 1-19.
Panamericana Editorial.
113
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

Debussy: otro camino al atonalismo


Adrián Camilo Ramírez*
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación septiembre 2010)

Resumen. El atonalismo como ruptura de característica música tonal occidental es el tema del presente
ensayo. A partir de algunos puntos de referencia histórica desde la Escuela de Manheim, la evolución y
declive de la forma sonata, el papel revelador de Wagner, para centrar el foco en la obra de Claude Debussy,
analizando los elementos constitutivos de su propuesta sonora, que con la ruptura de los convencionalismo
de la morfología europea, la liberación del sistema mayor - menor de la música de occidental, y el apro-
vechamiento de recursos inspirados en culturas musicales como el gamelán, daría inicio al impresionismo,
una de las más originales corrientes creadoras, que influenciaría, a los compositores de música occidental
del siglo XX.

Palabras clave: Impresionismo- Armonía impresionista- Claude Debussy- Estética francesa comienzos si-
glo XX

Abstract. The subject of this essay is the atonalism as a breaking of the tonal Occidental music . From some
points of historical reference from the School of Manheim, the evolution and decline of sonata form, the
revealing role of Wagner, to center the focus on the work of Claude Debussy, analyzing the elements of the
proposal score, which with the breaking of the conventions of the European morphology, release of the
larger system - under Western music, and use of resources inspired by the gamelan musical cultures, would
give birth to Impressionism, one of the most original creative currents, that would influence, to Western
composers of the twentieth century.

Key words: Impressionism-Harmony-Claude Debussy Impressionist Aesthetic early twentieth century


French

* Músico con énfasis en dirección de la Universidad Nacional de Colombia. Actualmente se desempeña como docente del área
de teoría de la música en el Conservatorio del Tolima. adrian.ramirez@conservatoriodeltolima.edu.co
Debussy: otro camino al atonalismo

Introducción Richard Wagner3 en gran medida alentó


Durante más de dos siglos la música de occi- la búsqueda del nuevo camino a lo impensa-
dente estuvo anclada fuertemente en la cultura ble: el atonalismo. El famoso acorde de Tristán
austrogermana. Desde la Escuela de Manheim1 aún hoy se considera como un baluarte de los
empieza a vislumbrarse una nueva manera de adelantos musicales de occidente, pues plantea
concebir la organización de las áreas tonales a un serio problema de análisis armónico del cual
partir de la forma sonata. Es natural que sea la se han escrito innumerables teorías formuladas
forma sonata la más refinada manera de estruc- a partir de las posibilidades armónicas y con-
turar, no por moda de los compositores que trapuntísticas (Abromont, 2005). Desde ese
recibieron el impulso imaginativo del barroco instante el horizonte compositivo sería el más
tardío, sino por el proceso dialéctico que esta amplio y divergente, pero traería consigo una
implica, en la contraposición de dos áreas to- dificultad, al menos para los analistas teóricos,
nales diferentes que hacen de blanco y negro a saber, el abandono de las armonías funciona-
dentro de una escala de grises. Así que el bite- les. Esto no quiere decir que de repente y de
matismo alcanza su apoteosis en los clásicos, su manera abrupta se dijo adiós al sistema tonal,
agonía en los románticos y la defunción en los más bien, que la riqueza de los acordes enar-
impresionistas2. mónicos, como los de sexta aumentada, harían
Es cierto que el tonalismo siguió siendo el len- parte del nuevo repertorio armónico del siste-
guaje los compositores del siglo XIX y que la ma vigente. Fue un proceso casi intermitente
forma sonata fue la mejor plataforma donde se que finalmente llevó al adiós definitivo del sis-
ensambló el pensamiento musical del momen- tema tonal con músicos como: Schoemberg,
to. Sin embargo, el pensamiento armónico to- Berg y Webern, quienes eran los compositores
maría un rumbo definitivo que también afecta- de la segunda escuela de Viena4.
114 ría la morfología musical. El hecho de que para Por otro lado en Francia, Claude Debus-
los compositores ningún intervalo se empezara sy forja su propia senda y un íntimo lenguaje
5

a considerar disonante y que ya no fuera indis- armónico que en principio le debió en gran
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 113 - 123

pensable la resolución de la disonancia en una medida a Wagner, pero que con el tiempo reci-
consonancia es muestra del nuevo camino que biría influencias de los nacionalistas rusos6, en
se empezó a abrir, dejando rezagada la antigua
tonalidad, por lo menos como se concebía has-
ta finales del aquel siglo. 3 Famoso compositor alemán (1813-1883), orquestador
innovador y armonizador vanguardista conocido por sus
1 Escuela de composición alemana del s. XVIII. óperas en grandes formatos instrumentales. Su lenguaje
ultracromático influyó en los compositores de la segunda
2 El impresionismo fue un movimiento estilístico tanto en
mitad del s. XIX como Bruckner y Debussy. También se le
la música como en la pintura gestado en Francia a finales
conoció como político extremista por su participación en la
del siglo XIX y principios del XX, cuyo objetivo principal
revolución alemana de 1848.
era el de buscar el color tímbrico y las impresiones sonoras
4 Escuela de composición formada a comienzos del s. XX. Haydn,
más que la búsqueda de estructuras formales o morfológicas
Mozart y Beethoven pertenecen a la primera Escuela de Viena.
tales como la sonata y la sinfonía. En la pintura, fue una
reacción ante el academicismo férreo de la Escuela Francesa 5 Compositor francés (1862-1918), impulsor del estilo
de Bellas Artes. Los pintores impresionistas se preocuparon impresionista en música.
más por captar la incidencia de la luz sobre el objeto que, 6 Compuesto por el grupo de los cinco: Musorgsky, Balakirev,
por la exacta representación de sus formas. Cui, Korsakov y Borodin.
115
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

especial de Musorgsky7, para proseguir hacia particularmente en la música para piano, sin
su personal y distinguido color impresionista. que ello signifique que su música sinfónica no
A continuación se analizan los más destacados tenga tesoros por explorar, otorgando uno de
aportes de Debussy a la armonía del siglo XX, los más valiosos adelantos en la verticalidad
sonora a los compositores del siglo XX, y que
7 Compositor ruso (1839-1881). Usó sucesiones acordes de
cuatro notas que compartían el mismo tritono, lo cual dio ha dado pie a la temática del presente artículo:
a Debussy el ejemplo para buscar en los enlaces por terceras Debussy: otro camino al atonalismo.
el color de inestabilidad tonal típicos de su obra.

Ejemplo1. Wagner, Tristán e Isolda (acorde polémico)

El acorde de Preludio a la siesta de (o pudiera verse también como un acorde me-


un Fauno nor con sexta agregada sobre C#), sin antece-
De la misma manera en que Wagner im- dente alguno y como una pincelada armónica
pactó con el primer acorde de Tristán, Debus- que divaga en la tonalidad de E. Es típico que
sy debió causar no menos polémica entre sus de ahora en adelante nos encontremos con una
contemporáneos con la aparición del primer interpretación armónica desde el punto de vis-
acorde de Preludio a la siesta de un Fauno. Lo ta colorístico. Los acordes son tratados por De-
novedoso de este acorde no es en sí su estruc- bussy como entes individuales y no como parte
tura sino el manejo inusual: aparece como un de un encadenamiento típico tonal, es decir sin
acorde semidisminuido no dominante sobre A# resolver obligatoriamente las disonancias.

Ejemplo 2. Debussy, Preludio a la siesta de un Fauno

Paralelismo de acordes nía aprendida en el Conservatorio de Paris,


Alejándose de las normas estrictas de la armo- para Debussy los acordes pueden sucederse
Debussy: otro camino al atonalismo

uno a otro con la absoluta libertad del com- animador e inspira un juego de juglares como
positor (De la Motte, 1989, 254), no existen en el siguiente ejemplo. Lo importante es la so-
prohibiciones por el paralelismo de los acordes noridad, el fin, no el quebrantamiento de las
menores y mayores, por el contrario el efecto es reglas fijadas.

Ejemplo 3. Debussy, Preludio 12, Libro I8


8 Debussy compuso 24 preludios para piano divididos en 2 libros. Los preludios fueron titulados originalmente en francés al final de cada partitura.
En este artículo se hace referencia a ellos por el libro al que pertenecen y el número interno del preludio.

Relación de tercera cromática su obra esta herencia romántica que, por lo tan-
(mediante cromática) to, es un manejo diferente de la tonalidad. No
Este tipo de manipulación de las relaciones ar- hay bitonalismo ni atonalismo en Debussy, hay
mónicas (De la Motte, 1989,55) ya tenía un una excelente tonalidad mimetizada por los arti-
protagonismo importante en la música de Franz ficios del enlazamiento de los acordes a distancia
Schubert9. Debussy aprovecha a lo largo de toda de tercera, bien mayor, bien menor.
116 9 Compositor austriaco (1797-1828). El primer movimiento de su
quinteto para cuerdas op. 163, D956, es un magnífico ejemplo de las relaciones de tercera cromáticas. Véase del compás 58 al 84.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 113 - 123

Ejemplo 4. Debussy, Preludio 6 Libro II

Acorde de novena dentro de la paleta armónica y es quizás uno de


La debilidad funcional es la norma. Este los más típicos en el lenguaje del impresionis-
acorde no se resuelve, juega un papel de color mo, debido al uso frecuente en otros composi-
117
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

tores como Maurice Ravel10. La séptima siem- pre es menor y la novena mayor: V9. También
se puede encontrar uno tras otro, sin más que
10 Algunos consideran impresionista a este compositor francés al la revelada y misteriosa bruma armónica pro-
igual que Debussy. Gran parte de los procedimientos armónicos
expuestos en este artículo fueron también usados por Ravel. ducida por los paralelismos.

Ejemplo 5. Debussy, Nocturnos, I Nubes

O bien de manera más sutil en un contexto modal:

Ejemplo 6. Debussy, Preludio 10 Libro II

Notas agregadas es estable, no le resta dicha estabilidad, por el


Naturalmente este procedimiento es novedoso contrario le oscurece el contorno perfecto de su
por cuanto se pintan las armonías con la diso- naturaleza y lo realza como foco de expresión
nancia de la segunda (mayor preferiblemente). a la manera de broma musical. Este es el efec-
Es más importante mostrar instantes, que pro- to conseguido por el color de las segundas: el
cesos para la estética de la música de Debussy. acorde de E@ se oscurece con el F agregado en la
El hecho de agregar una nota a un acorde que mano izquierda.
Debussy: otro camino al atonalismo

Ejemplo 7. Debussy, Children’s Corner Golliwogg’s cake walk

Tónica disonante en repetidas oportunidades. Además presentó las


Para compensar el efecto de estática armónica de tónicas exquisitamente coloreadas con disonan-
este tipo de conducciones de los acordes y al fal- cias como la sexta mayor, séptima mayor, octava
tar con claridad el ancla de las cadencias autén- o novena aumentadas. Aquí se muestran las tóni-
ticas, Debussy hizo uso de las cadencias plagales cas más usuales con sus respectivas disonancias:

Ejemplo 8. Tónicas disonantes más usuales en el impresionismo (sobre C)

En el caso siguiente, la disonancia de la aumentada D@-E$ y como una octava aumen-


118 tónica está como una séptima menor D@-B$ tada D@-D$
(escrita enarmónicamente), como una novena
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 113 - 123

Ejemplo 9. Debussy, Preludio 3 Libro II

Este es el análisis de la verticalidad sono- segundo caso la tónica podría entenderse con
ra: La tónica puede ser un acorde con novena fundamental original y octava aumentada o
alta o, una tónica con tercera natural y tercera como una tónica con novena disminuida.
bemol en el primer caso del ejemplo 10. En el
119
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

Ejemplo 10: Tónica disonante en el preludio 3 Libro II

Tonos enteros de cada sonido en el contexto musical. El hecho


En la exposición Universal de París de 1889, de que no haya jerarquías claras en la armonía
Debussy absorbe las nuevas sonoridades armó- de la música de Java impresiona y alimenta la
nicas resultantes de las escalas traídas por el ga- creatividad del compositor. Si bien es cierto,
melán11 de Java junto con la absoluta igualdad la escala de tonos enteros es demasiado limi-
tada por la proporción de un tono entre cada
11 Orquesta de instrumentos típicos del sudeste asiático sonido, lo que no permite más tensiones que
(especialmente placas) cuya característica es la superposición las propias de la escala. Sin embargo Debussy
de notas en dos escalas Slendro y Pelog, en que la primera
encuentra óptimo el empleo de esta escala por
intenta dividir la octava en cinco intervalos iguales. Al
variar la afinación de las placas no se pueden escribir en la encrucijada que representa el infinito círculo
notación occidental ((Sharma,2006,62) de seis sonidos.

Ejemplo 11. Debussy, Images Libro II núm. 1

La escala puede ser traspuesta una sola contrapunto es la llave para evitar caer pronto
vez. En el ejemplo anterior se observa que el en la monotonía.

Ejemplo 12. Escala de tonos enteros en Images Libro II núm. 1


Debussy: otro camino al atonalismo

Pentafonismo co aportó un aire de frescura a las artes del vie-


Las escalas exóticas también hacen parte del jo continente (Károlyi, 2000) La ausencia de
catálogo de los impresionistas. (Kotska, 1990) semitonos en la escala pentatónica sirvió como
Debussy supo aprovecharlas en el contexto to- base para el color delicado y simple, cristalino
nal para dar un aire de oriente a su música. El y etéreo de la música de Debussy; en pocas pa-
japonismo12 invadió a Europa y el nervio asiáti- labras: una fantástica herramienta para exponer
el simbolismo mediante los sonidos.
12 Fenómeno que consistió en la difusión de la cultura y el
arte japonés a fines del s. XIX

Ejemplo 13. Debussy, Arabesco I

La escala pentatónica sobre E se entrelaza confirma la intención de fusionar el oriente con


en un fragmento totalmente tonal, pero bella- el occidente…el resultado de la séptima mayor
mente decorado; el D# del segundo compás con la línea del bajo, un delicado color pastel.

120 Ejemplo 14. Escala pentatónica del Arabesco I

En el siguiente ejemplo Debussy evo- lans (Abromont, 2005). No es difícil imaginar


Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 113 - 123

ca con el registro grave del piano el paso del cómo la canción de cuna cierra lentamente los
elefante asiático y con la mano derecha imita ojos del elefante hasta el sueño profundo.
las percusiones de tipo xilófono de los game-

Ejemplo 15. Debussy, Children’s Corner Jimbo’s Lullaby

Acordes por quintas abiertas una herencia del período medieval, una re-
Los paralelismos de intervalos perfectos son membranza del organum paralelo. Debussy los
121
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

utiliza con frecuencia en su obra para piano. La Corner o los Epigraphes Antiques para encontrar
sonoridad es vacía pero extrañamente apropia- la sucesión de quintas paralelas que ponen con
da dentro del contexto en que el compositor la maestría el sello pour Debussy. Un verdadero re-
usa. Basta con mirar las páginas de Children’s torno al pasado remoto.

Ejemplo 16. Debussy, Epigraphes Antiques, núm. V Clusters13

13 Palabra inglesa que traduce al español: grupo o ramillete y que en música se refiere a racimos de notas tocados simultáneamente
produciendo una saturación armónica que resulta de la cercanía de las frecuencias de cada uno de los sonidos que lo componen.
En el piano se pueden lograr con la palma de la mano, el antebrazo, el puño o la combinación de éstos sobre las teclas negras y
blancas al mismo tiempo.

La sonoridad de los clusters es un poco tán claramente sistematizados los acordes de


más agresiva que la de los acordes con notas este tipo, como en el caso de Cowell16, pero de
agregadas. La superposición de las segundas es por sí la meta sonora fue alcanzada por el fran-
un avance en el esquema armónico de Debussy. cés en Ondine (ejemplos 17-19), del segundo
Un paso que, consciente o inconscientemente, libro de Preludios para piano.
seguirían compositores algo posteriores como
En Three Places in New England (para orquesta) se pueden
Bartók14 o Ives15. En el caso de Debussy no es- encontrar densos bloques sonoros a manera de clusters.
16 Henry Dixon Cowell, compositor estadounidense (1897-
14 Béla Bartók, compositor húngaro (1881-1945) En el vol. 1965). En 1912 compuso The Tides of Manaunaun (para
VI de Mikrokosmos (para piano) n. 142 y n. 144 se pueden piano), obra en la que utiliza clusters ejecutados con el
apreciar algunos clusters. antebrazo.
15 Charles Ives, compositor estadounidense (1874-1954)

Ejemplo 17. Debussy, Preludio 12 Libro II


Debussy: otro camino al atonalismo

Quedan resumidas las verticalidades de la siguiente manera:

Ejemplo 18. Clusters en Preludio 12 Libro II

Ejemplo 19. Debussy, Preludio 12 Libro II

¡Plus allant¡ profundas raíces en el estilo impresionista, en


Debussy logró liberarse de la poderosa influen- especial en el estilo de Debussy. Ahora es posi-
122 cia de los compositores austrogermanos y darle ble emprender el camino que este comenzó en
a Francia un lugar importante en la historia de su día, buscar un sonido propio y degustar de
la música universal. Su más sublime visión de la la más exquisita música secular de occidente.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 113 - 123

sonoridad, la intimidad de sus argumentos y la Ahora es tiempo de decir ¡Plus allant!


liberadora manera de conducir los acordes son
para el presente un insondable tesoro de inves- Bibliografía
tigación. La figura de este poeta musical con- Abromont, C. (2005) Teoría de La Música una Guía,
tribuyó en gran medida a la paulatina desapari- Fondo de Cultura Económica, México DF,
ción del sistema mayor-menor (Károlyi, 2000, Debussy, C. (1983) Three great orchestral Works, Dover
50); heredó a occidente una nueva forma de Publications Inc, New York,
escribir para los instrumentos ya existentes; se ______________Images I und II, Henle Verlag, Mün-
permitió tomar elementos de otras épocas y de chen, 1989
otras culturas; y al final rompió con el conven- ______________ Douze Études pour Piano, Editions
cionalismo de la morfología de los europeos. Durand, Paris, 1916
Podría decirse que no hay intención De la Motte, D. (1989) Armonía, Editorial Labor S.A.,
compositiva en el s. XX que no tenga sus más Barcelona,
123
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Debussy: otro camino al atonalismo

Grabner, H. (2001) Teoría general de la música, Edicio- Persicheti,V. (1985) Armonía del s. XX, Real Musical edi-
nes Akal, Madrid, tores, Madrid.
Károlyi,O. (2000) Introducción a la música del siglo XX, Piston, W. (1991) Armonía, Editorial Labor S.A., Bar-
Alianza Editorial, Madrid. celona,
Kotska, S. (1990) Materials and techniques of twentieth- Sharma, E. (2006) Músicas del Mundo. Editorial Akal.
century Music, Prentice Hall, Englewood Cliffs, Madrid
New Jersey, 1990
Informes de investigación
127
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado


de la Licenciatura en Música del Conservatorio
del Tolima (2008-2010)
Andrea Hernández Guayara*
(Fecha de recepción junio 2010; fecha de aprobación octubre 2010 )

Resumen. Este artículo expone los resultados del análisis bibliométrico realizado a 27 trabajos de grado
de la Facultad de Educación y Artes del Conservatorio del Tolima. En él se determinaron las dinámicas y
apuestas metodológicas desarrolladas en estos trabajos, y su contribución al desarrollo musical local. Asi-
mismo, se identificó el número de estudiantes que ejecutaron el proyecto, directores que los dirigieron, los
autores más citados, la línea de investigación institucional a la que pertenece cada trabajo y herramientas
o instrumentos utilizados para la recolección de la información. Estos datos fueron documentados en una
ficha de análisis en formato Excel. El análisis permitió constatar que la dinámica investigativa en los últimos
años se ha fortalecido, gracias a la puesta en práctica de estrategias propuestas en el Conservatorio para cua-
lificar la investigación formativa en el nivel de pregrado. Esto ha llevado a la consolidación de trabajos de
grado de mayor de calidad en su contenido, y diseño respecto a trabajos realizados antes de 2008.

Palabras Claves: Análisis bibliométrico – Trabajos de grado – Investigación formativa en el Conservatorio


del Tolima– Enfoques de investigación – líneas de investigación

Abstract. This article presents the results of bibliometric analysis of 27 theses or dissertations from the
Faculty of Education and the Arts, Conservatory of Tolima. It identified the dynamics and methodological
stakes developed in this work and its contribution to local music. Moreover, we identified the number of
students who carried out the project directors who directed them, the most cited authors, the research
institution to which each job belongs tools or instruments used to collect information. These data were
documented on a form of analysis in Excel format. The analysis helped to confirm that the dynamics of

* Licenciada en música del Conservatorio del Tolima. Docente asistente del área de investigación de la Facultad de educación y Artes del
Conservatorio del Tolima. Estudiante de Maestría en Docencia de la Universidad de la Salle. andrea.hernandez@conservatorio.edu.co
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

research in recent years has been strengthened, thanks to the implementation of strategies proposed in the
Conservatory to qualify formative research on the undergraduate level. This has enabled us to consolidate
higher grade work quality in content and design with respect to work performed before 2008.

Key Words: Bibliometric analysis - Jobs grade - Research training at the Conservatorio del Tolima-Research
Approaches - Research lines

Introducción necesario entonces, que docentes y estudiantes


La investigación formativa tiene por objeto se vinculen al diseño de proyectos de investiga-
desarrollar herramientas que le permitan al ción, pues sin ellos no se propondrían nuevas
estudiante adquirir competencias básicas en visiones de la enseñanza y quehacer artístico.
investigación, con las cuales pueda desarrollar (Barriga, 2009).
su trabajo de grado. También, busca contribuir Preocupada por alcanzar estos niveles de
al desarrollo local y regional, con el estudio calidad en la formación en investigación, la ins-
de problemáticas específicas que se presentan titución de educación superior Conservatorio
en estos contextos. De igual manera, “…. en del Tolima, ha desarrollado procesos de inves-
la investigación formativa se aprende a expe- tigación formativa con estudiantes de octavo,
rimentar el placer de saber más” (Hernández noveno y décimo semestre de la Licenciatura
S.f pp184), mediante el desarrollo teórico del en música, los cuales han ejecutado importan-
tema de investigación y la construcción de co- tes proyectos de investigación, de corte pedagó-
nocimiento generado a partir de la inmersión gico, histórico y musicológico.
en el campo. Con el fin de establecer las dinámicas y
Es por esto que, las universidades se im- apuestas metodológicas que se desarrollaron en
128 plican en procesos de investigación formativa, estos trabajos, la evolución del proceso forma-
pretendiendo generar un conocimiento perti- tivo en investigación e identificar su contribu-
nente al ámbito social y cultural en el que están ción al desarrollo local, se propuso desarrollar
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

inmersas. La calidad de estos procesos se mide un análisis bibliométrico de los trabajos de


por él número de investigadores, tanto docen- grado de los años 2008, 2009 y semestre A de
tes como estudiantes que conforman grupos de 2010.
investigación, su reconocimiento ante Colcien- Los estudios bibliométrico permiten ha-
cias, la participación en redes de investigación cer seguimiento a la producción científica en
y por la producción constante de materiales las instituciones de educación superior. Es un
fruto de los proyectos de investigación. método analítico que utiliza la estadística des-
Las instituciones de educación superior criptiva, el análisis multidimensional y las re-
que ofertan programas de licenciaturas en artes presentaciones gráficas para medir el desarro-
conforman grupos de investigación que tam- llo de las ciencias. Es de gran utilidad para la
bién están sometidos a estos parámetros de ca- presentación y desarrollo de políticas para el
lidad. A pesar de ello, la investigación formati- fomento de la investigación formativa, puesto
va en estos pregrados es poco allanado, se hace que en sus resultados se puede observar sobre
129
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

qué se investiga, se describen las actividades de en pregrado, desarrollado por el estudiante desde
los investigadores, las innovaciones y tenden- las competencias en investigación, sobre los cam-
cias de estudios realizados en una disciplina de- pos de dominio que el programa ha definido para
terminada. (Jiménez, 2004) su formación profesional. Puede ser de carácter
En el ámbito de la educación musical, musical, pedagógico, académico, artístico, o de
son pocos los estudios bibliométrico que se en- extensión a la comunidad, acorde a las líneas de
cuentran. Uno de ellos fue realizado por María investigación de la institución.”.1
del Mar y Jesús Pérez Ceballos, quienes analiza- Este proceso comprende varias etapas: en
ron artículos sobre investigación en educación la primera, el estudiante debe conocer e iden-
musical encontrados en la Base de datos ERIC. tificar diversos métodos de investigación y con
Su principal objetivo fue la identificación de ello, proponer en la cátedra de metodología de
trabajos de investigación que contribuyeran a la investigación un anteproyecto. En la segun-
la mejora en la fundamentación teórica de los da, se diseñan las herramientas e instrumentos
trabajos de investigación en educación musical, para la recolección de los datos y se realiza el
los diseños de investigación y actualizar la bi- trabajo de campo, que es asesorado por un di-
bliografía existente. (Mar y Pérez, 2008). rector (a) en la asignatura de trabajo de grado
I; y finalmente, en la tercera, se elabora el in-
1. Estructura Investigativa del forme de investigación en la cátedra de trabajo
Conservatorio del Tolima de grado II.
El Conservatorio del Tolima es una Institución Como paradigma de investigación, la ins-
de Educación Superior, que oferta los progra- titución ha adoptado el enfoque postpositivista,
mas de Licenciatura en Música y Maestro en que surge como modelo alterno al positivismo,
música. Su interés primordial es “… promo- para la investigación en ciencias sociales. Tiene
ver el desarrollo musical y artístico de la región como fin construir conocimiento a partir de
y del país, mediante la formación, investigación, la experiencia vital de los sujetos investigados,
producción, difusión artística y labor pedagógica permitiendo que el investigador indague”… en
que garantizan la innovación y la transformación escenarios naturales usando métodos cualitativos,
de la institución”. (PEI, 2010) En este sentido, que dependen de la generación emergente de datos
propende por una educación basada en el re- y haciendo del descubrimiento una parte esencial
conocimiento de la integralidad humana, la del proceso de indagación. 2 Con ello, se rompe
valoración por el arte y el desarrollo de compe- la barrera entre el investigador e investigado y
tencias profesionales e investigativas. se establecen relaciones que conducen al inves-
En el programa de Licenciatura en músi- tigador a comprender el contexto investigado,
ca, con más de 10 años de funcionamiento, se desde la interpretación y análisis de los datos,
han realizado importantes esfuerzos para desa-
1 Tomado del manuscrito no publicado del acuerdo que reglamen-
rrollar con los estudiantes, procesos en investi- ta los trabajos de grado de la Facultad de Educación y Artes del
Conservatorio del Tolima. Al momento de realizar este análisis se
gación formativa, que se consolidan al ejecutar encontraba en proceso de aprobación por parte del Consejo Acadé-
su Trabajo de Grado, considerado por la insti- mico.
2 Tomado de : http://www.revista.unam.mx/vol.5/num1/art1/art1-
tución, como el “resultado del proceso formativo 2b.htm
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

sin el ánimo de predecir o generalizar resulta- 1. Generar políticas y estructura organizacio-


dos. (Vasilachis, 2006) nal para realizar investigación en la insti-
La institución a partir del año 2004 viene tución,
desarrollando estrategias para mejorar el desarro- 2. vincular trabajos de investigación de pre-
llo de los procesos investigativos cuyos objetivos grado a los grupos de investigación y las
son responder a las demandas que en investiga- líneas de investigación institucionales, y
ción le exige la sociedad y la nación, y optimizar 3. fomentar la divulgación y fortalecer las re-
la calidad de la formación musical ofrecida a la des de investigación. (PEI, 2010)
comunidad estudiantil. Para ello, se concibieron
escenarios institucionales, elementos epistemo- En la siguiente tabla se establecen las es-
lógicos y estéticos que permitieron iniciar el ca- trategias y acciones desarrolladas por la institu-
mino hacia fortalecimiento la dinámica investi- ción en pro de la construcción de una comuni-
gativa en la institución. (PEI, 2010) dad investigativa más solida.
Las principales estrategias desarrolladas se
orientaron a:

Tabla 1 Ejes estratégicos para el desarrollo de la investigación. Extractado del Proyecto Educativo
Institucional (PEI) del Conservatorio del Tolima.

Eje estratégico Acciones Nivel alcanzado de cumplimiento


Reformar el Reglamento de grado, vincu- Documento de propuesta elaborado. Pendien-
lando actividades de investigación e inno- te de aprobación por el Consejo académico y
vación Directivo.
Documento de propuesta elaborado por el co-
Política y estructura Reformar el Reglamento General de in- mité de investigaciones y aprobado por el Con-
130 organizativa institu- vestigación (Acuerdo 013 de 1999) sejo Directivo según Acuerdo 008 del 27 de
cional para investiga- noviembre de 2009.
ción
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

Continuar la dinámica de trabajo del Co-


Plan de Acción 2010 por el Comité.
mité de investigación y trabajos de grado.
Vincular la institución a la plataforma Aval institucional en InstituLac.
Scienti de Colciencias Grupo de investigación avalado en GrupLac.
Vincular trabajos (proyectos de investi- Existe convenio con el Conservatorio de Música
Fomentar y fortalecer las gación y procesos formación en investi- de la Universidad Nacional, la Universidad del
redes de investigación gación) en redes de investigación a nivel Valle, la Universidad de Antioquia y EAFIT.
nacional.
Asignar tiempos para investigar a profeso- Se contrató un asesor externo, se designó un
res del Conservatorio del Tolima vincula- profesor de tiempo completo como coordina-
Aumentar el número de
dos a proyectos de investigación. dor de investigación, una profesora de medio
docentes y estudiantes
Generar espacios de discusión, capacita- tiempo y dentro de la asignación académica se
vinculados a procesos y
ción y entrenamiento en temas referentes destinaron horas a los docentes vinculados a
grupos de investigación
al proceso de investigación. proyectos de investigación.
Fortalecer los semilleros de investigación
en la institución
131
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Crear el fondo editorial institucional. Publicación del libro “Mujeres en la historia de


Publicar con fondos de la institución, ma- la música del Tolima” del docente Humberto
teriales que resulten de proyectos de inves- Galindo Palma.
Divulgación de resulta-
tigación, una vez sean arbitrados por pares Edición de la Revista de la Facultad “Música,
dos
externos. Cultura y Pensamiento”.
Publicar la revista de investigación del
Conservatorio del Tolima.
Cohesionar y continuar el proceso de for-
mación en investigación en los diferentes
Cohesionar el proceso
pregrados.
de formación en inves-
Reconocer las modalidades de grado que
tigación a nivel de pre- Existen 23 trabajos de grado, anexos al Proyecto
involucran a diferente nivel la evaluación
grado y su vinculación Institucional de Investigación “Historia y Patri-
de competencias en investigación.
con los grupos de inves- monio del Conservatorio del Tolima”.
Vincular trabajos de grado a proyectos de
tigación y las líneas de
investigación liderados por profesores de
investigación.
la institución y vinculados a la línea de in-
vestigación institucional.

2. Metodología del año 2008, 9 del 2009 y 2 que fueron ejecu-


Para efectuar el presente análisis bibliométrico tados en el semestre A de 2010. 3
se consultaron 27 trabajos de grado desarrolla-
dos durante el año 2008 al primer semestre de
3 Estos documentos reposan en la biblioteca de la Facultad de
2010; distribuidos de la siguiente manera: 16 Educación y Artes del Conservatorio del Tolima

Tabla 2.Trabajos de grado por rango de año.

Año N° T
2008 16
2009 9
2010 (Semestre A) 2
Total general 27

En ellos se identificó la línea de investiga- ficha de análisis en formato Excel que contie-
ción, metodología y herramientas o instrumen- ne los siguientes campos: Signatura topográfica
tos utilizados para la recolección de los datos. (código alfanumérico que le fue asignado en la
Se efectuó lectura del marco referencial (ante- biblioteca para su localización física), año de
cedentes y marco teórico), para reconocer los publicación, autor (es), número de estudiantes,
autores más citados; y se consideraron aspectos título, número de páginas, línea de investiga-
como el número de estudiantes que ejecutaron ción, metodología, herramientas/instrumentos
el proyecto y directores que los asesoraron. de investigación y director (a).
Estos datos fueron documentados en una
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Tabla 3 Campos de consulta


Signatura topográfica

Año de publicación

instrumentos de
de investigación
de estudiantes

Herramientas/

investigación
Metodología

Director (a)
de Páginas
Autor (es)

Número

Número
Título

Línea
3. Análisis de Datos formación musical. En la cuarta, se pretende
A partir de los datos recogidos en la tabla Ex- identificar elementos que permitan dinamizar
cel se procedió a realizar el análisis de los datos y mejorar la propuesta curricular de la institu-
teniendo en cuenta los siguientes las siguientes ción. Dentro de ella, también se han realizado
categorías: línea de investigación, número de propuestas que tiene como fin el desarrollo de
estudiantes que realizaron los trabajos de gra- planes de curso y proyectos curriculares para el
do, directores (as), autores más citados, meto- área de música en otras instituciones.
dología y herramientas para la recolección de Se encontró que de los veintisiete trabajos
los datos. A continuación se presentan los re- de grado consultados diez pertenecen a la línea
sultados que arrojó este análisis. de música vernácula. En ellos se resalta la histo-
ria de vida y aportes musicales de músicos de la
3.1. Líneas de Investigación región Tolima-Huila; así como, se documenta
El Conservatorio del Tolima cuenta con cuatro el proceso de edición de obras de composito-
132 líneas de investigación que prenden responder res representativos de la música vernácula y se
a las necesidades, políticas, objetivos y enfo- caracterizan grupos musicales y de festivales de
ques de la institución. Ellas son: Música verná- música colombiana.
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

cula, Historia y tradición institucional, Música En cuanto a las demás líneas, ocho de los
y Pedagogía e Innovación curricular veintisiete trabajos pertenecen a la línea de músi-
En la primera se busca reconocer los as- ca y pedagogía. En ellos se desarrollaron propues-
pectos y actores que tipifican la música propia tas metodologías musicales adaptadas a contextos
de la región, la etnomusicología, el folclor y específicos. En cuando a la línea de investigación
la música popular. En la segunda, se preten- historia y tradición institucional se realizaron
de documentar, a manera de estudio de caso, cuatro trabajos de grado en donde se resalta la
la historia del Conservatorio del Tolima, con vida y aportes pedagógicos que realizaron impor-
el ánimo de ser enseñada y divulgada en otras tantes pedagogos musicales a la institución.
regiones del país y centros de educación mu- En la siguiente tabla se registraron las lí-
sical. En la tercera, se tiene por objeto investi- neas de investigación y el número de trabajos
gar sobre nuevas posturas metodológicas para de grado realizados en cada una de ellas.
133
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Tabla 4 Líneas de investigación

Línea de Investigación N°T


Música Vernácula 10
Música y pedagogía 8
Historia y tradición del Conservatorio del Tolima 4
No registra 4
Innovación curricular 1
Total general 27

3.2. Número de Estudiantes que realizaron pos. Esto se dio en parte como estrategia insti-
Trabajos de Grado tucional para mejorar la calidad de los trabajos
Como se pude observar en la siguiente tabla realizados por los estudiantes, con mayor perti-
durante el 2008, 2009 y 2010 se generó una nencia para el ámbito educativo y cultural.
tendencia a realizar trabajos de grado en gru-

Tabla 5 Número de estudiantes que realizaron los trabajos de grado

Número de estudiantes N° T
1 8
4 8
3 7
2 4
Total general 27

3.3. Directores informes deben ser socializados en las sesiones


Los directores (as) de trabajos de grado son do- del comité de investigación. 4
centes de la institución quienes tienen como Los directores que han estado vinculados
función orientar a los estudiantes para que es- con los procesos de investigación formativa du-
tos precisen los objetivos del trabajo de grado, rante los tres últimos años son: Humberto Galin-
tracen y desarrollen las tareas necesarias para su do Palma, Beatriz Hernández Quintero, Andrea
ejecución. De igual manera proponer alternati- Hernández Guayara, Luz Alba Beltrán, Miguel
vas de solución a diversas dificultades teóricas, Ángel Carrión y Néstor Guarín Ramírez.
metodológicas y administrativas que se presen- En la siguiente tabla se especifican el nú-
ten en el desarrollo de la investigación. Tam- mero de trabajos dirigidos por cada uno de los
bién de entregar informes en los cuales evalué y directores o directoras antes mencionados.
califique el desempeño de los estudiantes. Estos
4 Tomado del manuscrito no publicado del acuerdo que reglamen-
ta los trabajos de grado de la Facultad de Educación y Artes del
Conservatorio del Tolima. Al momento de realizar este análisis se
encontraba en proceso de aprobación por parte del Consejo Acadé-
mico.
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Tabla 6 Directores de trabajos de Grado

Director (a) N° T
Humberto Galindo Palma 10
Beatriz Hernández Quintero 9
Andrea Hernández Guayara 4
Luz Alba Beltrán 2
Miguel Ángel Carrión 1
Néstor Guarín Ramírez 1
Total general 27

3.4. Autores Citados folclórica, el desarrollo de metodologías nove-


Para establecer el número de autores más ci- dosas para el desarrollo de la enseñanza musical
tados en los veintisiete trabajos de grado con- y los de corte histórico fueron Guillermo Aba-
sultados, se registraron en un archivo Excel los día Morales, Octavio Marulanda, Javier Ocam-
autores y sus obras citadas. En él se manejaron po López, Humberto Galindo Palma, Carlos
cuatro ítems: autor, año de publicación, título Orlando Pardo y Héctor Villegas Villegas. En
de la obra citada y número de trabajos. Los cri- lo concerniente al desarrollo de la metodología
terios que se tuvieron en cuenta para la elección de investigación el texto más citado fue el de
de los autores fue el número de citas realizadas Juiet Corbin y Amsel Straus.
por los ejecutores del proyecto en el marco refe- En la tabla que se presenta a continuación
rencial y sus referencias en la bibliografía. se relaciona específicamente el autor, su obra y
Se encontró que los autores más consulta- el número de trabajos en los que se encontró.
dos en los trabajos de cuyo tema fue la música
134
Tabla 7 Autores más citados
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

Año
Autor de publica- Título N° T
ción
Instrumentos del folclor Colombiano. Bogotá: LFAS Pro-
1991 1
ducciones editoriales
La música Folclórica Colombiana. Dirección de divulgación
1973 de cultura. Universidad Nacional de Colombia. Bogotá: Pa- 1
namericana editores
Música Llanera Colombiana. Bogotá: Centro Colombo
Abadía Morales, G. 1986 1
Americano
Instrumentos musicales del folclor colombiano. Bogotá:
1991 1
Fondo de promoción de cultura del banco popular
1986 ABC del folclor Colombiano Bogotá: panamericana 2
Compendio General del Folclor Colombiano. Bogotá: Insti-
1979 6
tuto colombiano de cultura
Total 12
135
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

1995 Juegos infantiles Folclore y educación. Bogotá: Andrés Bello 1


Marulanda Octavio
1984 Folclor de Colombia. Bogotá: Arte editorial. 4
Total 5
El folclor y sus manifestaciones en las supervivencias música
1970 1
en Colombia ediciones Tunja : Ediciones La rana águila
Música y folclor de Colombia Bogotá Plaza y Janes edito-
1984 3
riales
Ocampo López Javier
Las Fiestas y el Folclor en Colombia. Medellín: El Ancora
1984 4
Editores
El folclor en la música Colombiana. Tunja: Ediciones La
1970 1
rana y el águila.
Total 9
Itinerario de una Hazaña. Historia del Conservatorio del To-
1997 1
lima. Bogotá: Pijáo Editores
Manual de historia del Tolima. Tomo III. Ibagué: Pijao Edi-
2007 1
Pardo, Carlos Orlando tores
2002 Músicos del Tolima siglo XX 3
Protagonistas del Tolima Siglo XX. Ibagué- Bogotá: Pijao
4
editores
Total 9
Reseña Histórica del Conservatorio del Tolima. Bogotá
1962 1
:Contraloría General del departamento
Villegas, Villegas H La tierra el Hombre y el corazón. Ibagué: Litográfica Atlas
1986 1
1986 Testimonio sobre el Tolima. Ibagué: Editorial Atlas 2
Total 4
Galindo Palma, Hum- Memoria de Cantalicio Rojas. Ibagué: El Poira
1993 4
berto
Corbin Juiette & Strauss Bases de la investigación cualitativa 2002 Medellín: Editorial
2002 4
Anselm universidad de Antioquia

3.5. Metodología de Investigación investigativos que se relacionen con el ámbito


En los 27 trabajos de grado se evidenciaron dos en el cual se desenvuelve el estudiante y le per-
tendencias en los enfoques de investigación, la mita conocer su realidad y entenderla a fondo,
cualitativa y la musicológica. El primero se pre- para que pueda transformarla.
sentó en los trabajos de grado relacionados con Como se establece en la siguiente tabla, los
temas como aportes musicales de composito- métodos más utilizados en el enfoque cualitati-
res, pedagogía y didáctica musical. El segundo, vo se encuentran la historia de vida y el estudio
en trabajos cuyo interés es más relacionado con de caso. En menor proporción se desarrollaron
aspectos teórico-práctico musicales. trabajos etnográficos, históricos –documenta-
El uso del enfoque cualitativo apunta a un les y de investigación acción (I A).
interés institucional por desarrollar procesos
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Tabla 8 Metodología utilizada en los trabajos de grado

Metodología N° T
Cualitativa - Historia de Vida 9
Cualitativa 4
No registra 4
Cualitativa - Estudio de Caso 3
Cualitativa - Empírico Analítica 2
Cualitativa - Etnográfica 2
Cualitativa - Documental 1
Cualitativa - I A 1
Musicológica 1
Total general 27

3.6. Herramientas para la recolección de los puesto que estaban directamente relacionadas
datos con las necesidades de cada proyecto y su me-
En cuanto a la recolección de los datos, se evi- todología de investigación. Es decir, según se
denció la utilización en mayor medida de la requiriera, en un mismo trabajo se puede en-
entrevista cualitativa, seguida del registro fo- contrar que los estudiantes realizaron entrevis-
tográfico, audiovisual, análisis de documentos, tas, desarrollaron diarios de campo y llevaron
diarios de campos, revisión documental y la registro fotográfico.
observación. De igual manera, se puedo esta- En la tabla que se encuentra a continua-
blecer que estas no fueron utilizadas de manera ción, se establecen las herramientas y el núme-
sistemática en un solo proyecto, si no en varios, ro de trabajos en los que se hallaron.
136
Tabla 9 Herramientas o instrumentos para la recolección de los datos
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

Herramienta o instrumento N°T


Entrevista 19
Registro fotográfico 8
Registros audiovisuales 8
Análisis de documentos 8
Diario de campo 7
Revisión documental 5
Observación 4

4. Conclusiones conocimiento importante y pertinente en los


La investigación formativa en el Conserva- campos pedagógico e histórico, desde la docu-
torio del Tolima en lo corrido de los últimos mentación de los procesos musical generados
tres años ha desarrollado importantes procesos en la institución, la cual lleva más de 100 años
que aportan a la sociedad que está inmersa con formando músicos y docentes musicales, así
137
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

como el reconocimiento de la labor realizada Vida y obra del compositor tolimense José Faxir Sán-
por músicos de la región y sus aportes al de- chez Vargas. Trabajo de grado no publicado, Facul-
sarrollo musical de la misma. También, se han tad de Educación y Artes, Conservatorio del Toli-
realizado importantes herramientas para la en- ma.
señanza musical infantil que pueden ser con- Ayala Hernández, M. (2009).Manual para la conserva-
sultadas por estudiantes, docentes y egresados ción y mantenimiento del archivo musical del com-
de la institución. positor Álvaro Ramírez Sierra. Trabajo de grado no
Con ello, se generó una dinámica investi- publicado, Facultad de Educación y Artes, Con-
gativa más fuerte en la institución consolidan- servatorio del Tolima.
do trabajos de grado mayor de calidad en su Bahamón Martínez, R (2008). Aporte al proceso de or-
contenido que los realizados en años anterio- ganización sistematizada del material documental
res. De igual forma, esto se debe a la puesta en de la musicoteca del Conservatorio del Tolima: Cla-
práctica de estrategias propuestas en el Conser- sificación y catalogación de la música para orquesta
vatorio para la mejora de la investigación for- sinfónica. Trabajo de grado no publicado, Facultad
mativa en el nivel de pregrado. de Educación y Artes, Conservatorio del Tolima.
Se pudo constatar que las apuestas meto- Bernal Samudio R, Moreno Osorio l & Vargas Martinez
dológicas son acordes con las políticas e intere- J. (2010). El juego y la ronda como herramientas lú-
ses investigativos de la institución. Cabe señalar dicas para el mejoramiento de la educación musical
que con la apertura y desarrollo de nuevo pro- en la escuela: una propuesta en el aula. Trabajo de
gramas la institución deberá abrir nuevas líneas grado no publicado, Facultad de Educación y Ar-
de investigación en las cuales se pueda acoger tes, Conservatorio del Tolima.
los intereses y expectativas de los estudiantes. Bonilla Charry, A, Rodríguez Sierra, J, Artunduaga, K &
Es importante que la institución divulgue Murillo Sandoval, L. (2009). Medardo Puyo Yasnó
los alcances de los proyectos de investigación y su aporte al acervo musical plateño. Trabajo de gra-
formativa, pues en ellos se concentran los es- do no publicado, Facultad de Educación y Artes,
fuerzos de toda una comunidad educativa, por Conservatorio del Tolima.
desarrollar procesos investigación en pro del Bonilla Orjuela, D, González Rivera, D, & Pinto Mera,
reconocimiento de su realidad social y cultural. J (2008).Caracterización de las agrupaciones musi-
cales vigentes en la ciudad de Ibagué, participantes en
Bibliografía el Festival Nacional de la Música Colombiana en los
Ávila Quevedo, F, Londoño Ospina, D, Martan Carran- años 2003 a 2007. Trabajo de grado no publicado,
za, F & Nieto Niño, E. (2008). Portafolio pedagógi- Facultad de Educación y Artes, Conservatorio del
co musical para el grado primero de primaria a partir Tolima.
de experiencias pedagógicas en la Institución Educa- Bueno Sierra, L & Sánchez Cifuentes, E. (2008). Reco-
tiva Liceo Nacional de Ibagué – Tolima. Trabajo de nocimiento a la labor docente e instrumental en el
grado no publicado, Facultad de Educación y Ar- campo artístico del maestro Jaime Cuéllar en el Con-
tes, Conservatorio del Tolima. servatorio del Tolima. Trabajo de grado no publica-
Angarita García, F, Bonilla Acosta, J, Tierradentro Cés- do, Facultad de Educación y Artes, Conservatorio
pedes, L & Rodríguez Valverde, Wilson Fermín. del Tolima.
Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

Calderón Sarmiento, R (2008). Aporte de elementos para Gómez Sánchez, J (2008). Organización sistematizada
la estimulación de la inteligencia musical, a partir del material musical para bandas musicales utilizan-
de los lenguajes artísticos en edades tempranas (5 a do como aporte la clasificación, catalogación y siste-
6 años). Trabajo de grado no publicado, Facultad matización en la musicoteca del Conservatorio del
de Educación y Artes, Conservatorio del Toli- Tolima. Trabajo de grado no publicado, Facultad
ma. de Educación y Artes, Conservatorio del Tolima.
Canizales Cartagena, L (2008). Caracterización de las Güiza Hernández, M, Bautista Suárez, S & Luna Gó-
actividades culturales desarrolladas en la Institución mez, M (2009). Vida y trascendencia pedagógica y
José Joaquín Flórez Hernández. Trabajo de grado no musical del director artístico, maestro Vicente San-
publicado, Facultad de Educación y Artes, Con- chis Sanz, en el Conservatorio del Tolima. Trabajo
servatorio del Tolima. de grado no publicado, Facultad de Educación y
Capera Chilatra, G, Murcia Suárez, M, Góngora, D & Artes, Conservatorio del Tolima.
Ruiz Orjuela, I. (2009) Gonzalo Sánchez, símbolo Gutiérrez Chica Y, Navarro Restrepo O & Uribe Franco
musical de la tierra del bunde. Trabajo de grado no Y. (2010) Música identidad y valores éticos en la sede
publicado, Facultad de Educación y Artes, Con- Jorge Quevedo Velázquez de la institución educativa
servatorio del Tolima. Germán pardo García de Ibagué. Trabajo de gra-
Carrero Ospina, O, Ceballos Prada, I, Hernández An- do no publicado, Facultad de Educación y Artes,
drade, O, & Rubio Gómez, J. Edición de once Conservatorio del Tolima.
obras del compositor Álvaro Ramírez Sierra. Trabajo León Chacón, J, Váquiro Alfonso, M, Munar Sinesterra,
de grado no publicado, Facultad de Educación y F, Díaz Riaño, A. (2008). Transcripción y edición
Artes, Conservatorio del Tolima. en formato digital de algunos manuscritos del com-
Castro Turriago, H, Ninco Villanueva, J, & Mendoza positor Álvaro Ramírez Sierra. Trabajo de grado no
Prieto, A (2008). Legado musical del compositor to- publicado, Facultad de Educación y Artes, Con-
limense Luis Enrique Aragón Farkas. Trabajo de gra- servatorio del Tolima.
138
do no publicado, Facultad de Educación y Artes, Linares Benavides, C, Ibarra Rivera, L, Barrero Ortíz, J,
Conservatorio del Tolima. Herrera Gómez, E (2008). Registro de Modificacio-
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | 127 - 139

Castro Turriago, J & Molina Molina, O (2009). Brevia- nes en las manifestaciones musicales presentes en el
rio histórico “Festival Nacional de la Música Man- Torneo Internacional del Joropo en el período com-
gostino de Oro” en Mariquita Tolima desde 1996 a prendido entre 1999 y 2007. Trabajo de grado no
2009. Trabajo de grado no publicado, Facultad de publicado, Facultad de Educación y Artes, Con-
Educación y Artes, Conservatorio del Tolima. servatorio del Tolima.
Conservatorio del Tolima (2010). Proyecto Educativo Motta Marín, A, Alférez Velásquez, D, Camargo Sala-
Institucional. Ibagué: Conservatorio del Tolima. zar, J & Sánchez Rodríguez, S. (2009) José Ignacio
Granada Bermúdez, M & Vallejo Vargas, V (2008). Camacho Toscano: legado artístico y musical de un
“Leamos y entonemos”: Análisis y sistematización al maestro para el Tolima. Trabajo de grado no publi-
material didáctico del compositor Tolimense Daniel cado, Facultad de Educación y Artes, Conservato-
Oviedo Galeano. Trabajo de grado no publicado, rio del Tolima.
Facultad de Educación y Artes, Conservatorio del Orozco Reinoso, A, Villar Herrera, J & Cavides Valen-
Tolima. cia, J. (2009). Aporte educativo del maestro Alberto
139
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Análisis bibliométrico de los Trabajos de Grado de la Licenciatura en Música del Conservatorio del Tolima (2008-2010)

De La Roche al desarrollo musical y cultural del mu- dagógicas artísticas orientadas a la sensibilización
nicipio de Mariquita, Tolima. Trabajo de grado no musical de un adolescente con limitaciones auditivas.
publicado, Facultad de Educación y Artes, Con- Trabajo de grado no publicado, Facultad de Edu-
servatorio del Tolima. cación y Artes, Conservatorio del Tolima.
Rincón Rodríguez, F & Llanos Franco, D. (2008). Di- Cibergrafía
seño de la cátedra “Folclor musical de Colombia” a Barriga Monroy M (2009). La investigación en edu-
partir de la plataforma virtual Moodle, para la li- cación artística: Una guía para la presentación de
cenciatura en música de la Facultad de Educación y proyectos de pregrado y postgrado. Disponible en:
Artes del Conservatorio del Tolima. Trabajo de gra- Revista El artista http://dialnet.unirioja.es/servlet/
do no publicado, Facultad de Educación y Artes, articulo?codigo=3206685. Consultado el 28 de
Conservatorio del Tolima. marzo de 2010.
Rivas Quijano, D, Millán, A & Espinosa, H. (2008). Galera Núñez, M & Pérez Ceballos (2008). La inves-
Amina Melendro de Pulecio: Historia de vida. Tra- tigación en Educación Musical en la base de datos
bajo de grado no publicado, Facultad de Educa- ERIC. Disponible en: Revista Electrónica LEEME
ción y Artes, Conservatorio del Tolima. –Lista Electrónica Europea de Música en la Educa-
Triana Salinas, A (2008). Bienal Pensamiento reflexivo en ción-. http://musica.rediris.es. (2008) Consultado
torno de la música: Seminario Filosofía taxativa de la 23-marzo-2010
música Ibagué Ciudad Musical de Colombia. Traba- Jiménez E, (2005). Análisis bibliométrico de tesis de pre-
jo de grado no publicado, Facultad de Educación grado de estudiantes venezolanos en el área educación:
y Artes, Conservatorio del Tolima. 1990-1999. Disponible en: http://www.rieoei.org/
Toro Montenegro, J. (2008). Aporte al proceso de organi- inv_edu31.htm. Consultado: 20 marzo 2010
zación sistematizada del material documental de la Hernández, A. (2003) Investigación e investigación for-
musicoteca del Conservatorio del Tolima: Clasifica- mativa. Revista Nómadas. Fundación Universidad
ción y catalogación de la música de cámara. Trabajo Central. Santafé de Bogotá. Disponible en: http://
de grado no publicado, Facultad de Educación y www.ucentral.edu.co/NOMADAS/nunme-an-
Artes, Conservatorio del Tolima. te/16-20/PdfsNomadas%2018/17-investigacion.
Trujillo Pineda, H. (2008). Descripción de acciones pe- PDF
141
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Convocatoria de publicación

Música, Cultura y Pensamiento


Revista de Investigación musical de la Facultad de Educación y Artes del
Conservatorio del Tolima, Vol. 1 No. 3. 2011

Convocatoria de publicación
La Revista Música, Cultura y Pensamiento del campo en ciencia o tecnología, con el fin de
Conservatorio del Tolima es una publicación dar cuenta de los avances y las tendencias de
anual que busca divulgar resultados de investi- desarrollo. Se caracteriza por presentar una cui-
gaciones y recoger reflexiones en torno a la mú- dadosa revisión bibliográfica.
sica, derivadas de procesos de investigación de También se publicarán: Artículos cortos,
la comunidad académica, artística y científica Reportes de caso, Revisiones de temas, Car-
a nivel regional, nacional y mundial. La revista tas al editor, Traducciones, Documentos de
está abierta a las comunidades de especialistas reflexión no derivados de investigaciones,
en campos musicales del mundo, interesados Reseñas bibliográficas, según clasificación de
en presentar sus artículos a consideración. Mú- Publindex-Colciencias, y resúmenes de traba-
sica, Cultura y Pensamiento es una revista de jos de grado y de tesis de postgrado en las áreas
corte expositivo argumentativo, que incluye estéticas, artísticas, musicales, históricas y cul-
artículos científicos, reflexiones teóricas sobre turales.
problemas o temas particulares, desarrollos Separata de música La revista incluye una
históricos, informes de investigación, artículos separata de música dedicada específicamente a
cortos, aplicaciones pedagógicas y didácticas la publicación de partituras inéditas que reve-
de la música, obras artísticas y musicales, en- len el pensamiento musical colombiano, como
trevistas, ponencias, reseñas y traducciones. Se patrimonio documental en obras históricas,
publicarán preferiblemente, los siguientes tipos productos de trabajos musicológicos de campo,
de documentos: o como productos de creación de compositores
Artículo de investigación científica y colombianos en relación a reflexiones de la es-
tecnológica: que presenta, de manera detalla- tética y lenguaje musical.
da, los resultados originales de proyectos de in-
vestigación. Proceso para la publicación del
Artículo de reflexión: que presenta resul- artículo
tados de investigación desde una perspectiva 1. Las propuestas deben enviarse a la dirección
analítica, interpretativa o crítica del autor, so- postal o correo electrónico que aparece al fi-
bre un tema específico, recurriendo a fuentes nal de esta convocatoria: Conservatorio del
originales. Tolima, Decanatura de la Facultad de Edu-
Artículo de revisión: elaborado con base cación y Artes; Revista Música, Cultura y
en una investigación donde se analizan, siste- Pensamiento, con una carta dirigida a la di-
matizan e integran los resultados de investiga- rectora de la revista, Dra. Luz Alba Beltrán,
ciones publicadas o no publicadas, sobre un en la que certifique que todos los autores
Convocatoria de publicación

del trabajo están de acuerdo con someter el 5. Una vez que el artículo llegue a la dirección
artículo a consideración del comité edito- de la revista, se notificará por correo electró-
rial. Además, en la carta remisoria se deben nico el recibido y se iniciará el proceso de
incluir los datos personales de cada uno de evaluación por pares; luego de esta evalua-
los autores, como: nacionalidad, escolari- ción, se informará a los autores si el artículo
dad, correo electrónico, teléfonos para su se acepta o no. En caso de aceptación, el au-
ubicación o dirección postal. tor deberá atender las respectivas correccio-
Música, Cultura y Pensamiento nes de los evaluadores y el último concepto
Revista de Investigación musical de la Fa- del Consejo Editorial para su publicación.
cultad de Educación y Artes del Conser- 6. A la versión final del artículo, revisada por
vatorio del Tolima, Vol. 1 No. 3. 2011 y los autores después del proceso de evalua-
filiación institucional, o en su defecto, la ción, se le debe anexar una carta en la cual
dirección de la página Web donde pueden se exprese que todos los autores del artículo
ser consultados. están de acuerdo con la publicación y di-
2. El artículo debe llevar la información de vulgación electrónica del mismo, y se res-
clasificación de la topología del artículo se- ponsabilizan por su contenido.
gún lo establecido por la Revista y la espe-
cialidad del tema tratado. Contenido
3. El artículo debe hacerse llegar en medio Para ser considerado cualquier artículo por el
magnético (formatos CD, DVD), dos copias Comité para su posible publicación en la Re-
impresas a la oficina de la Revista y enviarse vista Música, Cultura y Pensamiento del Con-
al correo electrónico de la revista musicacul- servatorio del Tolima, debe contar con los si-
turaypensamiento@conservatoriodeltolima. guientes componentes:
142 edu.co, en formato RTF (93, 97 o XP), así Título, autores (apellido, nombre, institu-
como todas las informaciones gráficas o de ción, correo electrónico del autor para corres-
imágenes en los programas originales de Ex- pondencia); palabras o frases claves (cinco según
Música, cultura y pensamiento 2010 | Vol. 2 | Nº 2 | XX - XX

cel o Corel 9 o superior); o en los formatos las categorías de la Nomenclatura Internacional


gráficos JPG o TIFF. Gif, o BMP. Las imáge- de la unesco); resumen (en el idioma original y
nes o partituras en los programas originales en inglés, con una máxima extensión de 250 pa-
de Excel, Corel, pdf. o Finale (Versión 2009 labras); introducción; desarrollo (en caso de un
o anteriores). El disco debe estar debida- artículo de investigación incluirá metodología,
mente marcado con el nombre del artículo. resultados y análisis de los mismos); conclusio-
La información de texto, gráficos e imágenes nes y bibliografía (según las normas APA). Las
deben ser presentados a una sola tinta. notas al artículo se presentarán al final del mis-
4. Deben ser artículos originales que no estén mo y antes de la bibliografía.
siendo evaluados en otras revistas ni hayan Se exige que las referencias bibliográficas en
sido publicados (a excepción de las traduccio- todos los artículos se incluyan al final del artí-
nes o de artículos de gran relevancia publica- culo ordenadas alfabéticamente y señalándolas
dos en revistas de difícil acceso en el medio). dentro del documento. Las normas básicas exi-
143
Conservatorio del Tolima. Instiutción de Educación Superior. 1906

Convocatoria de publicación

gidas para la estructura de esta bibliografía, se Internet: Apellido, Nombre (Año). Títu-
pueden interpretar en los siguientes ejemplos, lo. Recuperado el día del mes, año, dirección
sólo se debe hacer referencia de la bibliografía electrónica.
mencionada en el interior del artículo: Garzón, Omar. (2002). Rezar, soplar, cantar: Análisis de
Artículos de revistas: Apellidos, Nombre. una lengua ritual desde l etnografía de la comuni-
(Año). Título del Artículo. Nombre de la Revista, cación. Recuperado el 15/05/2008. De http://re-
volumen (número), rango de páginas citado. dalyc. uaemex.mx/yc/pdf/21901507.pdf
Keane, D. (1986) Music, Word, energy: A dynamic fra-
mework for the study of music. Communication Presentación de los artículos
and Cognition, Vol. 19 (2), 207 – 219 La extensión máxima del artículo propuesto
Hernández Salgar, Oscar (2007) Música de marimba y debe oscilar entre 3.500 y 8.000 palabras in-
poscolonialidad musical. Revista Nómadas, No. 26, cluyendo tablas y gráficas las cuales deben ser
58 – 62 incluidas en el texto del artículo. Las fotogra-
fías, tablas y figuras siempre deben ser referen-
Ensayos dentro de compilaciones: Apelli- ciadas en el texto del artículo. Las fotografías,
do, Nombre (año). Título del ensayo. En: Nom- tablas y figuras han de procesarse como obje-
bre, Apellido (Eds) / (Comps.), título del libro tos, realizados teniendo en cuenta que la revista
(rango de páginas citado). Ciudad: Editorial. se imprime a blanco y negro. Preferiblemente
González, F. (1998). La violencia política y las dificul- se debe adjuntar un archivo que contenga estas
tades de construcción de lo público en Colombia: imágenes en sus programas originales en alta
una mirada de larga duración. En: F. Arocha y M. resolución, con el fin de evitar problemas de
Jimeno (Eds). Las violencias: inclusión creciente visualización en la publicación.
(pp. 309 – 330). Bogotá: Facultad de Ciencias
Humanas – Universidad Nacional. Público al que se dirige
La Revista se dirige a comunidades dedicadas a
Libros: Apellidos, Nombre. (Año). Título la actividad e investigación científica y tecno-
del libro. Ciudad: Editorial lógica; a músicos, artistas y docentes universi-
Fischerman, Diego. (2004), Efecto Beethoven. Compleji- tarios.
dad y valor en la música de tradición popular. Bue-
nos Aires: Editorial Paidós Plazo
Hennion, Antoine. (2002). La pasión musical. Barcelo- Las inscripciones estarán abiertas desde el 1
na. Editorial Paidos marzo de 2011 hasta el 15 de junio de 2011.

Informes: Conservatorio del Tolima - Decanatura de la Facultad de Educación y Artes


Carrera 1 Calle 9 No. 1-18 Teléfonos: +57(8) 2618526 - 2639139 Fax: +57(8) 2615378 - 2625355

Revista Música, Cultura y Pensamiento


musicaculturaypensamiento@conservatoriodeltolima.edu.co

También podría gustarte