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El cuento transcurre en un puerto fluvial sobre el río Magdalena.

Desde
la canoa, los niños ven flotando a un muerto que navega por el río.
El relato, que describe una atmósfera cálida y reverberante, establece
una relación de tensión entre la música y la prisión. Entre la libertad que
invoca la música, y el encierro y la represión.
El acordeonero es un juglar que se la pasa cantando y llevando mensajes
a las poblaciones cercanas. Ahora, desde la cárcel, se ve obligado a cantarle
al verdugo, que impone su propia ley.
Si en “¿Quién dio el fusil a Oswald” el blues está presente a lo largo del
relato, en “Un acordeón tras la reja” se respiran aires de porros y vallenatos
que, desde la prisión, endulzan el corazón de sus vecinos.

Un extraño bajo mi piel

“Un extraño bajo mi piel” narra la historia de Elder, un mulato, hijo


de madre negra y hombre blanco, que vive una situación ambigua, frente
al hecho de sobrevivir en una sociedad racista, como era el sur de Estados
Unidos, en los años sesenta.
Mattie, su madre, decide dejarse embarazar del cartero Jim para que
“su hijo no sufra por ser negro”. Ella tiene sus razones para involucrarse con
el hombre blanco. Su padre Arcie fue colgado por los blancos racistas que
pululan en Missouri.
Elder es un mulato que es repudiado en el autobús, en el bar y el
restaurante donde es visto como un “negro bastardo”.
En las calles de Missouri hay un letrero que dice:
Prohibido transitar a los negros
Después de las seis de la tarde.
En los baños de los establecimientos, hay avisos que advierten:
Para gente de color.

Fabio Martínez
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En un momento del relato, el personaje Elder explota diciendo: ¡Estoy
harto de ser negro! Y adopta el nombre francés de “Ham Leroy” para poder
vivir en una sociedad que lo repudia y aborrece.
“Un extraño bajo mi piel” plantea el tema de la ambigüedad de
identidad, como una forma de resistir ante el embate racista.
En el mundo afroamericano han sido varias las prácticas ambiguas
de camuflaje que los negros han utilizado para poder defenderse del
poderío blanco. La adopción de nombres occidentales en detrimento de
sus nombres ancestrales; la acogida de la religión judeo-cristiana para
ocultar a sus dioses y sus orischas y el apareamiento con el hombre blanco
para renegar del color de su piel son algunas prácticas sociales que aún
se mantienen.
“Un extraño bajo mi piel” es uno de los cuentos perfectos de Manuel
Zapata Olivella, con el sabor agrio del racismo y la discriminación que
continúan en pleno siglo XXI.

La cuentística en Manuel Zapata Olivella


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