Nuevos espacios industriales; los parques tecnológicos.

Por: Sotelo.

El texto trata sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la sociedad y la

economía, y cómo han cambiado el modelo de desarrollo industrial clásico.

Las nuevas tecnologías se basan en la información como materia prima, y se

caracterizan por su interconexión y reforzamiento mutuo. Estas tecnologías forman
un sistema científico-técnico-industrial que afecta a los procesos más que a los
productos.

El modelo de desarrollo industrial clásico se estructuraba en torno a la trilogía

puerto-industria pesada-mina, mientras que el nuevo modelo se enmarca en tres
aspectos diferentes: universidad-aeropuerto-centro urbano.

La universidad reemplaza a la mina porque se sustituyen las materias primas por la

“materia gris”, es decir, las ideas e innovaciones científicas y tecnológicas. El
aeropuerto reemplaza al puerto porque el transporte generado por las nuevas
tecnologías es más ligero y rápido. El centro urbano es el punto de destino principal
debido al fenómeno de “terciarización” de la economía.

En los contextos urbanos surgen nuevas formas de espacio industrial como los
parques científicos, las cuencas de innovación tecnológica y los parques
tecnológicos.

Algunos puntos importantes que se pueden extraer del texto son:

Un parque tecnológico es un espacio geográfico donde se concentran empresas,

centros de investigación y proveedores de servicios que usan el conocimiento y la
tecnología intensivamente. El objetivo de un parque tecnológico es estimular y
gestionar el flujo de conocimiento y tecnología entre universidades, instituciones de
investigación, empresas y mercados.

El concepto de parque tecnológico surge de la necesidad de crear suelo apto para la

ubicación de industrias en áreas urbanas, que no puedan instalarse dentro del
casco urbano por el desarrollo de la actual concepción de actividades industriales.

El modelo de desarrollo industrial clásico se basaba en la trilogía puerto-industria

pesada-mina, mientras que el nuevo modelo se enmarca en tres aspectos
diferentes: universidad-aeropuerto-centro urbano.
Los parques tecnológicos se diferencian de los polígonos industriales por su mayor
calidad, diversidad, complementariedad y respeto al medio ambiente. Los parques
tecnológicos también se distinguen de los parques científicos por su mayor
orientación a la producción y al mercado.

Los parques tecnológicos pueden ayudar a crear nuevas oportunidades de negocio

y empleo, albergar a pequeñas y medianas empresas desarrolladoras de
tecnologías, promover la creación, innovación y mejora de tecnologías, así como
impulsar la competitividad.

Un parque científico es un espacio donde se realizan actividades de diseño e

investigación, sin actividades de fabricación, y que están relacionadas con las
universidades. Los parques científicos no han tenido mucho éxito porque no son
muchas las empresas privadas dedicadas a la que necesiten el suelo ofertado por
un parque científico.

Los parques tecnológicos han surgido como respuesta a las necesidades de

pequeñas sociedades, en las que los socios o accionistas son los propios
profesionales e investigadores.

Antecedentes;

En el texto se centra en el caso de Estados Unidos, donde se han desarrollado más

de cincuenta parques tecnológicos en los últimos quince años, como respuesta a la
creciente integración y competitividad de la economía mundial, la crisis económica
de las universidades y la necesidad de sustituir los métodos de producción basados
en la mano de obra por otros basados en el capital y la tecnología. Los parques
tecnológicos en Estados Unidos han surgido como resultado de la cooperación entre
la universidad y la empresa, y de la modificación de las leyes antitrust para
promover la difusión empresarial en sociedades. También han tenido un papel
importante los programas relacionados con la defensa, que han impulsado el
desarrollo de software especializado.

Los parques tecnológicos en Estados Unidos se pueden clasificar en tres categorías

según su grado de madurez: parques maduros, parques en desarrollo y parques en
nacimiento.

Parques tecnológicos y el Desarrollo Regional;

Los diferentes tipos de innovación que se dan en las regiones según sus
características geográficas, económicas y sociales. El autor distingue tres tipos de
medios innovadores: el tipo Amsterdam, el tipo Escocia y el tipo Cambridge, que se
basan en la creación de empresas de servicios, de producción o de investigación,
respectivamente. Estas empresas dependen de la existencia de una demanda
regional que las impulse. El autor clasifica las regiones en seis grupos según su
grado de desarrollo, su actividad económica, su situación geográfica y sus
problemas específicos. Estos factores influyen en la atracción o no de las nuevas
empresas.

● La viejas regiones industriales: son aquellas que tienen una larga historia de
actividad industrial, pero que han entrado en declive por la competencia de
otras regiones o por el cambio tecnológico. Estas regiones han intentado
acercarse a los parques tecnológicos como una forma de renovar su imagen
y su tejido productivo, aprovechando su experiencia y sus infraestructuras
industriales. El autor pone como ejemplos a Nancy y Zamudio, que son
ciudades francesa y española, respectivamente, con una fuerte tradición
industrial.
● Las áreas metropolitanas: son aquellas que tienen una gran concentración de
población, servicios e industrias en un espacio urbano. Estas regiones tienen
como atractivo las economías de aglomeración, que son las ventajas que se
obtienen por la proximidad y la interacción entre los agentes económicos.
Estas regiones también tienen una diversidad de industrias, que van desde
las antiguas a las nuevas tecnologías, lo que les permite adaptarse a los
cambios del mercado. El autor pone como ejemplos a Boston-Route 128,
Paris Sur y Madrid, que son áreas metropolitanas de Estados Unidos, Francia
y España, respectivamente, con una importante presencia de parques
tecnológicos.
● Los nuevos espacios industriales: son aquellas que tienen una cierta tradición
industrial, pero que no han entrado en declive, sino que han buscado
adaptarse a la llegada de las nuevas tecnologías. Estas regiones han creado
parques tecnológicos como una forma de impulsar su desarrollo y su
competitividad, aprovechando su capacidad de innovación y su dinamismo
empresarial. El autor pone como ejemplos a California, Texas, regiones del
sur de Francia y la Comunidad Valenciana, que son regiones de Estados
Unidos, Francia y España, respectivamente, con una destacada actividad en
sectores tecnológicos.

Por último, el autor critica el modelo de los polos de crecimiento, que se basaba en
la difusión del desarrollo desde un centro hacia la periferia, y que se demostró poco
fiable. El autor propone una visión más descentralizada y diversificada del desarrollo
regional, en la que los parques tecnológicos juegan un papel importante.
también clasifica los parques tecnológicos existentes según el tipo de región en la
que se ubican, distinguiendo tres módulos: las viejas regiones industriales, que
buscan cambiar su imagen de declive; las áreas metropolitanas, que aprovechan las
economías de aglomeración y la diversidad industrial; y los nuevos espacios
industriales, que se adaptan a las nuevas tecnologías. El autor concluye que los
parques tecnológicos pueden constituir una red de polos tecnológicos que
favorezcan el desarrollo regional, siempre que demuestren su utilidad en la práctica.