Está en la página 1de 6

Tema 3.

Porfiriato y Revolución (1876 –1920)

Introducción
Aristocracia y Revolución mexicana. Autor desconocido. Imagen usada con fines educativos

En el tema 3 se van a estudiar el Porfiriato y la Revolución Mexicana, nuestra línea del


tiempo inicia en 1876 y concluye en 1920. Es importante mencionar que el tema concluye
en 1920 pero eso no implica que la Revolución Mexicana haya concluido en 1820.

Este tema inicia con el análisis del contexto histórico mundial la misma época en la que se
dan los procesos de este tema y que fueron el liberalismo, las revoluciones burguesas del
siglo XIX, el desarrollo de la segunda Revolución Industrial y la segunda fase del sistema
capitalista.

Habiendo explicado estos procesos los temas siguientes son las etapas principales que son
el proyecto de la modernidad y la crisis del Porfiriato y en la Revolución Mexicana se estudia
el inicio del proceso revolucionario con Madero, luego la dictadura de Huerta, la creación del
ejército constitucionalista, la Convención de Aguascalientes, el enfrentamiento de las
facciones carrancistas, villistas, zapatista, el triunfo de Carranza, el decreto de la
Constitución de 1917 y para concluir con el desarrollo cultural de esa época.

Los temas tratados en esta unidad son de enorme relevancia para comprender el México
actual, la Constitución que hoy tenemos fue decretada en ese entonces, los gobiernos
emanados de la Revolución Mexicana reconstruirían un México que hoy sigue existiendo en
muchos aspectos.

Para este tema vas a contestar una evaluación diagnóstica, elaborar la línea del tiempo del
periodo y la solución de una evaluación de conocimientos.

Iniciemos nuestro nuevo recorrido por el pasado que permite comprender quiénes somos.

El Porfiriato y la Revolución Mexicana: Porfiriato y Revolución (1876 –1920) e


Imperialismo y revoluciones burguesas

Procesos revolucionarios en Europa


El liberalismo europeo se enfrentó a los gobiernos del Antiguo Régimen por muchos años,
podría decirse que el triunfo del liberalismo se logró hasta concluida la Gran Guerra. Este
enfrentamiento se desató a partir de la Revolución Francesa y con la expansión del Imperio
Napoleónico entre 1804 y 1815. Con la derrota del corso, los monarcas absolutistas
establecieron diversos mecanismos para detener la propagación del liberalismo en Europa,
una de las estrategias más importantes fue el Congreso de Viena celebrado entre 1814 y
1815.

La reacción de los liberales fue de rebeldía y numerosas revoluciones de origen burgués se


desarrollaron a lo largo y ancho de gran parte de Europa: la Península Itálica, España,
Francia, Austria, entre otras. Sus objetivos eran destituir a la monarquía absolutista e
instaurar gobiernos democráticos, querían dejar de ser súbditos para convertirse en
ciudadanos. Las Revoluciones se desarrollaron en 1815, 1830 y 1848, los resultados no
siempre fueron exitosos para los liberales, pero el ímpetu provocó cambios a mediano y
largo plazo.

América frente al desarrollo capitalista


De manera paralela el capitalismo y las revoluciones industriales empujaban con gran
fuerza, el liberalismo y el capitalismo van de la mano, para que el capitalismo se
desarrollara eran necesarios cambios importantes como el otorgamiento de ciudadanía, la
libertad intrínseca de los seres humanos, el derecho a la propiedad privada y a la rebelión
en contra de la opresión.

Las ideas liberales e ilustradas llegaron en el siglo XVIII al continente americano y


prendieron fuego en las mentes de los hijos de europeos nacidos en América, es decir, los
criollos. La coyuntura de 1808 impulso los procesos de independencia en América y con las
independencias de las metrópolis, las otrora colonias se convirtieron en países botín para
las naciones en pleno desarrollo industrial. América no tuvo un desarrollo económico ni
industrial como sucedió en Europa en el siglo XIX, el papel del continente sería más bien de
proveedor de materias primas, mano de obra barata y de mercado para los productos
manufacturados por los europeos.

En cuanto a los norteamericanos la historia fue diferente ya que, con el triunfo del norte en
la Guerra de Secesión, el modelo industrial y capitalista se impuso y ello llevó a un gran
desarrollo en esta región del continente.

Porfiriato

El proyecto de modernidad porfiriana


La llamada Paz Porfiriana se alaba mucho como un gran logro de la dictadura del Gral.
Díaz, pero es importante no perder el contexto internacional: el tránsito de la primera a la
segunda revolución industrial, la nueva etapa del capitalismo liberal hacia el capitalismo
imperialista permitió que las naciones se conectaran de manera mundial y así hacer
funcionar esos engranajes económicos y tecnológicos. Ante este escenario internacional, la
modernización de México era un elemento más de este engranaje en la historia universal.
La aparente paz lograda por el Gral. Porfirio Díaz permitió implementar diversos proyectos
relativos a la infraestructura y a la economía, muchos de estos proyectos respondieron a las
necesidades de las grandes potencias industrializadas en Europa y de los EE. UU.

Sólo basta ver la red ferroviaria construida en este periodo y se podrá apreciar que no
comunicaba a todo el país, sino más bien llevaba materia prima del lugar de producción a
los puertos. La construcción de escuelas, palacios municipales, caminos y puentes permitió
mejorar la comunicación, pero uno de los grandes obstáculos fue la falta de población,
México era un país extenso y requería de mucha mano de obra que no era suficiente. El
gobierno promovió la migración de trabajadores calificados de origen europeo para tener
ejemplos de “gente trabajadora” para las clases bajas que no eran “razas” apropiadas. El
programa de migración no tuvo éxito y en muchas ocasiones México fue visto como un
mero trampolín para llegar al vecino del norte.

La economía mejoró notablemente y por un tiempo se tuvo un sueño casi imposible, un


superávit y excelentes relaciones crediticias con varias naciones. El talón de Aquiles de esta
mejora fue que no se impulsó a la industria mexicana y esto mantuvo a nuestro país bajo
una larga dependencia.

Las tierras comunitarias indígenas y campesinas son un obstáculo para el progreso, para el
desarrollo del capitalismo y por ello las compañías deslindadoras trabajan a marchas
forzadas, dos visiones del mundo se enfrentan, una la de la idea comunitaria y la otra la de
la propiedad privada.

La clase media surge y se fortalece, se abren escuelas para esa clase media, escuelas de
jurisprudencia, normales superiores, pero no es suficiente porque es para un grupo muy
reducido de la población.

Crisis de la dictadura
Para finales del siglo XIX se conjuntaron diversos elementos tales como la gerontocracia en
el poder, la injerencia de los norteamericanos en la sucesión presidencial, la clase media
fortalecida y con anhelos de gobernar para cambiar el país.

La crisis social era profunda, se había heredado del complicado proceso previo entre 1821 y
1876 y se había agudizado por la falta de sensibilidad del gobierno hacia las clases pobres
y en mayor desventaja. El analfabetismo tenía un alto porcentaje en todo el país, la
marginación, la pobreza, la injusticia, el desprecio hacia esos grupos llevaron a una grave
crisis social en todo el país. Los primeros síntomas fueron las huelgas de obreros, los
periódicos y textos clandestinos que criticaban al régimen, entre ellos destaca El hijo del
Ahuizote o Regeneración.

El contexto mundial y la Revolución Mexicana. De la Belle Epoque a la Primera


Guerra Mundial
El largo siglo XIX concluyó con la Gran Guerra (Hobsbwam, La Era del Imperio, 1875-1914)
que presenció la lucha entre las ideas liberales y conservadoras, la transición entre el
feudalismo al capitalismo, el pleno desarrollo de la primera y la segunda revolución
industriales, y el inicio de dos grandes revoluciones: la china y la mexicana.

La Belle Epoque es un intento de evocar un pasado añorado que en realidad no fue así, es
la idealización de que lo pasado fue mejor (Hobswam, Historia del siglo XX)

Hemos visto que las potencias industriales buscaron materias primas, mano de obra barata
y/o esclava y mercados en donde colocar sus mercancías, todo esto los llevó a conquistar
gran parte del continente africano, a humillar imperios antiquísimos como el chino, traficar
con seres humanos como si fueran objetos, así que pregunto en ¿Dónde está la Belle
Epoque?
Dictaduras y revoluciones (Díaz-Madero, Huerta-Carranza, los grupos campesinos
Zapata y Villa)
Cuando Francisco I. Madero publicó su obra La sucesión presidencial en 1910 nadie la
censuró y el libro se vendió bastante bien. Díaz había dicho públicamente que estaba de
acuerdo en que se requería un relevo en el gobierno y muchos le creyeron, Madero entre
ellos.

Las elecciones en 1910 fueron una farsa y Madero promulgó el Plan de San Luis mediante
el cual invitaba a la rebelión el 20 de noviembre a las 18:00 horas, su convocatoria tuvo
respuesta antes de lo previsto y la revolución estalló el 18 de noviembre de 1910. El
coahuilense abrió una caja de Pandora que provocaría enorme violencia por muchos años
en el territorio mexicano. Él mismo fue víctima de esta violencia, de esas calamidades
resguardadas en esa caja.

La Revolución Mexicana se desarrolló en diversas regiones que respondían a distintos


intereses porque los campesinos, vaqueros y obreros del norte vivían en una realidad
diferente a los campesinos de las haciendas del centro y sur del país, la clase terrateniente
representada por Madero tenía intereses distintos a los hombres de la clase media urbana o
a los campesinos de las comunidades indígenas. Así que para acercarnos a este proceso
histórico tan importante en la historia de nuestro país y a nivel mundial debemos considerar
que no fue un movimiento uniforme y unívoco, podría decirse que se desarrollaron varias
revoluciones en momentos diferentes o de manera paralela.

A partir de estas diferencias podemos comprender los numerosos conflictos entre los
distintos actores de la revolución mexicana, con el asesinato de Madero y Pino Suárez, el
Gral. Victoriano Huerta se apoderó de la silla presidencial y esto fue el elemento en común
entre personajes tan diversos como Carranza, Obregón, Villa o Zapata. Las distintas
revoluciones se unieron en contra del enemigo en común: Victoriano Huerta y habiendo
logrado su objetivo no sólo se separaron, sino que se enfrentaron para imponer sus ideales
o simplemente tomar el poder.

Lucha de facciones y triunfo constitucionalista en 1917.


Venustiano Carranza se abanderó con la Constitución de 1857 y en torno a ello creó su
ejército constitucionalista, su objetivo era poner orden en el país, elaborar una nueva
constitución y ocupar la presidencia. Sus rivales –otrora sus aliados—organizaron una
Convención en Aguascalientes para elegir al presidente de México, que por cierto no era
Carranza.

El ejército constitucionalista se impuso y debilitó a los ejércitos de Zapata y Villa, se redactó


la Constitución de 1917 y Venustiano Carranza fue electo presidente ese mismo año. Una
constitución progresista y con un fuerte elemento social sentó las bases de un México que
podría ser democrático.

El Gral. Carranza estaba por concluir su periodo presidencial y los conflictos con los otros
militares que lo habían acompañado en el ejército constitucionalista, se le enfrentaron y fue
asesinado. En 1920 Adolfo de la Huerta ocupó la presidencia de manera provisional para
dar paso a un periodo conocido como de la reconstrucción o los sonorenses en el poder.
La Revolución Mexicana aún no terminaba, faltaban muchos conflictos por resolver en
México.

Modernidad y procesos culturales

La diversidad de las expresiones culturales nacionales (cultura popular y cultura de


élites)
El Porfiriato miro mucho hacia Europa y de manera especial hacia Francia y ahí buscó su
ejemplo a seguir por lo que el mundo indígena no tenía cabida en este deseo de ser otro, de
ser moderno. La cultura en México se desarrolló en varios niveles dependiendo de los
grupos sociales y es por ello por lo que se habla de cultura popular y cultura de élites. La
Revolución Mexicana es considerada un parteaguas en la cultura mexicana porque rompió
con la tradición cultural del régimen porfirista e inauguró una nueva época para la cultura
mexicana. (Nueva Historia General de México, 2014). Nombres como el Vasconcelos,
Rivera, Siqueiros, Kahlo, nos hablan de estos cambios en la cultura a partir de 1920.

Prensa y cine, ciudadanía y poder (los medios en la construcción de las imágenes del
poder y en la creación de ciudadanía)
El desarrollo de la ciencia y la tecnología impulsaron los periódicos de distribución masiva,
la fotografía y el cine, medios de comunicación que transformaron al mundo. (Hobsbwam,
La Era del Imperio, 1875-1914) El Hijo del Ahuizote o Regeneración son ejemplo del
periodismo que denunciaba a la dictadura, las injusticias sociales y la proclama de los
deseos de cambio. La fotografía nos habla de la intimidad de las familias, del papel de la
mujer y del hombre en la sociedad, la visión decimonónica de la niñez y la adolescencia. La
fotografía transita de la esfera privada a la esfera pública y se convierte en un claro
testimonio de los procesos históricos y un medio utilizado por los poderosos para transmitir
un mensaje.

Conclusión
El liberalismo mexicano llegó a su punto culminante con la Constitución del 1857 y las
Leyes de Reforma, los ideales liberales se plasmaron en esas leyes que nos permiten ver
claramente la importancia del laicismo y de la secularización.

De acuerdo con Daniel Cosío Villegas el liberalismo del siglo XIX se va a transformar con la
nueva generación entre los que destacan Justo Sierra y Francisco Bulnes, los liberales
como Juárez, Ocampo y Lerdo de Tejada confiaban ciegamente en las leyes y la nueva
camada de liberales no lo veía de la misma manera. (Cosío Villegas, Daniel. Historia
Moderna de México. El Porfiriato) El desarrollo de la burguesía, del individualismo y las
ideas de progreso marcaron grandes diferencias. Considero que el conflicto que siguió
existiendo fue respecto a la identidad del mexicano e incluso podría decir que se agudizó,
me refiero al trato para con los campesinos, para con la indiada como diría la gente de la
elite de esa época. Tanto los liberales del siglo XIX como los del Porfiriato pensaban que los
indios y su cultura constituían un obstáculo para que México entrara de lleno al progreso y
por ello se prohibió que hablaran las lenguas indígenas y siguieran sus costumbres. La
meta era aculturarlos, en pocas palabras occidentalizarlos.
Siguiendo a Cosío Villegas, la Revolución Mexicana sí hará un cambio con el liberalismo
tanto del siglo XIX como el de la generación del Porfiriato, el mestizo, el indio, los problemas
sociales son considerados importantes y se busca solucionarlos.

Durante la dictadura de Porfirio Díaz, México mira a Europa y quiere emular a Francia en
muchos aspectos, México sueña con más recursos naturales de los que en realidad tiene y
no encuentra cómo suplir la falta de población en un territorio más grande. Ese México
desdeña a los indios, a los pobres, a los campesinos y el analfabetismo es rampante. Las
campañas de salud buscan erradicar a los grupos o razas degeneradas y por ello se busca
la migración de europeos y así mejorar a la población mexicana.

El Porfiriato fue juzgado e interpretado a la luz de los revolucionarios mexicanos y eso


provocó una pérdida de objetividad en cuanto al análisis de dicho periodo, la historia no se
trata de juzgar sino más bien de comprender.

Las fiestas del centenario de la Independencia fueron el escaparate que evidenció los
avances, atrasos y enormes desigualdades que existían en ese México del 1910.

La Revolución Mexicana fue el proceso que transformó a México y dio paso a la


transformación de las estructuras políticas, económicas y sociales.

También podría gustarte