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b. La última cena es una pintura mural realizada entre los años 1495 y 1498 por el
multifacético Leonardo da Vinci. Fue encargada por Ludovico Sforza para el refectorio del
Convento de Santa Maria delle Grazie en Milán, Italia. Leonardo no cobró por ella. La
escena recrea la última cena de Pascua entre Jesús y sus apóstoles, a partir del relato
descrito en el evangelio de Juan, capítulo 13.
2.
a.La última cena es una pintura mural al fresco. El fresco es una técnica de pintura en la
que el artista aplica pigmentos sobre una superficie de mortero húmedo o fresco. Esto
permite que los colores penetren en la superficie y se fusionen con ella, creando una obra
duradera y resistente al paso del tiempo. El tamaño de la pintura es de aproximadamente
8,80 metros de alto por 4,60 metros de ancho. La elección de la técnica del fresco para
representar esta obra monumental permitió a da Vinci capturar la escena de manera
detallada y precisa, otorgándole una durabilidad y permanencia en el tiempo. Sin embargo,
esta técnica también presentó dificultades, ya que el fresco requiere una ejecución rápida y
precisa, debido a que los pigmentos deben ser aplicados antes de que el mortero se seque
por completo. Esto implicaba que da Vinci debía trabajar con rapidez y precisión para
plasmar su visión en la pared antes de que el mortero se endureciera.
3.El autor Leonardo da Vinci, presenta en esta obra su propia visión de la belleza y la
estética. En cuanto a la estética, da Vinci se enfoca en retratar la belleza idealizada de sus
personajes, utilizando proporciones armónicas y elegantes. Los apóstoles están
representados con cuerpos proporcionados y elegantes, con expresiones serenas y gestos
controlados. Además, el autor utiliza la luz y la sombra para resaltar los detalles y crear
contrastes, lo que contribuye a la belleza y dramatismo de la escena. En resumen,
Leonardo da Vinci presenta una visión de la belleza y la estética basada en los ideales
renacentistas, destacando la armonía, la proporción y la elegancia en sus personajes y en la
composición de la obra.
4. Kandinsky creía que el arte debía ser auténtico y sincero, y que debía trascender las
convenciones superficiales y estéticas establecidas. Al considerar que la obra de arte es hija
de su tiempo, se enfatiza la importancia de comprender el contexto en el cual fue creada
para poder apreciar plenamente su significado y valor. Además, esto implica que cada
época tiene su propio lenguaje artístico y que el arte debe evolucionar y adaptarse a las
cambiantes realidades culturales y sociales. La decisión de Kandinsky de centrarse en lo
espiritual en su arte en 1912 fue influenciada por el contexto histórico, su formación, su
interés en el espiritualismo y la teosofía, así como su conexión entre arte y música. Estos
factores contribuyeron a su desarrollo como uno de los artistas más importantes en la
exploración de lo espiritual en el arte.Según Wassily Kandinsky, el arte puede impactar en
nuestros sentimientos porque tiene una conexión directa con lo espiritual. Kandinsky creía
en la existencia de un lenguaje universal del arte que iba más allá de la representación
visual de la realidad externa.