ACTIVIDAD No.

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CUADRO COMPARATIVO SOBRE SALUD Y ECONOMÍA

Nombre: Keneth Ramiro Hernandez Morales____________________________________

Carné: 000006299____________________________________________________________

Sede: CENTRAL____________________________________________________________

Curso: DUNDAMENTO DEL CONOCIMIENTO___________________________________

Aspectos Salud Economía

Fundamento se refiere al estado completo
de bienestar físico, mental y
teórico social, y no meramente la
ausencia de enfermedades.
La salud y la economía están
interrelacionadas, ya que el
estado de salud de una
población puede influir en su
desempeño económico y
viceversa.
En el ámbito de la salud, se
utilizan teorías y modelos
como el modelo biomédico, el
modelo de determinantes
sociales de la salud y el
enfoque de atención primaria
de salud. Estos enfoques
buscan comprender y mejorar
la salud de las personas a
través de estrategias de
prevención, promoción y
atención de la salud
La economía se ocupa del
estudio de cómo se asignan
los recursos escasos para
satisfacer las necesidades y
deseos de las personas.
La economía puede influir en
la salud de una población a
través de factores como el
acceso a servicios de salud, la
calidad del ambiente y los
determinantes sociales, y a su
vez, el estado de salud de una
población puede afectar
variables económicas como la
productividad y el gasto en
salud.
En el ámbito de la economía,
se utilizan teorías y modelos
como la teoría de la oferta y la
demanda, la teoría del
crecimiento económico y la
teoría del desarrollo
económico. Estos enfoques
buscan entender y mejorar la
asignación eficiente de
recursos y el crecimiento
económico.
 Relación bíblica nos enseña que el cuidado de
la salud es importante y que
nuestro cuerpo es un templo
del Espíritu Santo (1 Corintios
6:19-20). Dios se preocupa por
nuestra salud y nos insta a
cuidarla, tanto física como
espiritualmente.
La relación entre salud y
economía en la Biblia se puede
ver a través del principio de la
mayordomía. La mayordomía
nos enseña que tanto nuestra
salud como nuestros recursos
son dones de Dios y debemos
ser buenos administradores de
ellos. Cuidar nuestra salud nos
permite rendir mejor en
nuestras ocupaciones y, a su
vez, una economía bien
administrada nos brinda los
recursos necesarios para
cuidar nuestra salud y ayudar a
los demás
Exponentes / En el ámbito de la salud, se
implementan políticas y
Aportes acciones como la promoción
de estilos de vida saludables,
la mejora de la atención
médica, la prevención de
enfermedades y la reducción
de las desigualdades en salud
La Biblia nos enseña principios
para mantener una buena
salud, como cuidar nuestro
cuerpo a través de una
alimentación saludable, el
descanso adecuado y el
ejercicio (1 Corintios 10:31,
Proverbios 3:7-8). También
nos exhorta a cuidar nuestra
salud espiritual a través de la
oración y el estudio de la
Palabra de Dios (Mateo 4:4,
Proverbios 4:20-22).
La Biblia también nos enseña
principios económicos, como
la importancia del trabajo
diligente (Proverbios 10:4), la
administración sabia de los
recursos (Lucas 16:11), el dar
de manera generosa (2
Corintios 9:7) y evitar la
avaricia (1 Timoteo 6:10).
Estos principios nos guían
hacia una vida económica
balanceada y próspera.
la Biblia nos enseña que
preocuparnos por los demás
es importante, tanto en su
salud como en su bienestar
económico. Debemos cuidar a
los enfermos, ayudar a los
necesitados y compartir
nuestras riquezas con
generosidad, siguiendo el
ejemplo de Jesús de amar a
nuestro prójimo como a
nosotros mismos.
En el ámbito de la economía,
se implementan políticas y
acciones como la estabilidad
macroeconómica, la
promoción del empleo, la
atracción de inversión
extranjera, el fomento de la
competitividad y el desarrollo
de políticas fiscales y
monetarias
En cuanto a la economía, la
Biblia nos enseña principios
como trabajar con diligencia
(Proverbios 12:24),
administrar sabiamente
nuestros recursos (Proverbios
21:20) y ser generosos en
nuestras ofrendas y
donaciones (Malaquías 3:10,
Lucas 6:38). Estos principios
nos ayudan a vivir de acuerdo
con la voluntad de Dios en el
ámbito económico.