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NÚCLEO DE SUCRE
ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN
PREGUNTAS
Asimismo, ambas doctrinas son válidas en el derecho civil venezolano, ya que, tienen un
enfoque eclético, pero la mayoría de los casos se resuelven siguiendo la doctrina del
nacimiento, ya que en la práctica resulta más fácil de demostrar el momento del nacimiento de
la criatura que el momento exacto de su concepción. No obstante, se han presentado casos en
los que se ha acudido a la doctrina de la concepción para reconocer derechos y obligaciones a
la criatura desde este momento, especialmente en casos de fecundación in vitro o cuando se
discute la validez de un contrato prenupcial, en tal caso.
La relación jurídica y la relación humana son dos conceptos diferentes, aunque están
estrechamente relacionadas entre sí debido a que una de las condiciones de las relaciones
jurídicas es que debe haber una relación humana, pero no toda relación humana es una
relación jurídica.
La relación humana se refiere a la interacción que tienen las personas entre sí
(interpersonal), ya sea en su ámbito personal o profesional. Esta relación está basada en
aspectos emocionales y psicológicos que se desarrollan a través del tiempo, como el amor, la
amistad, la confianza, el respeto, entre otros. En este tipo de relación, las personas se
relacionan de forma libre y espontánea, sin que medie una norma o ley que lo regule.
Por otro lado, la relación jurídica se refiere a aquella relación que vincula o une a dos o
más sujetos que están obligados porque hay una norma que los establezca o de acuerdo a un
ordenamiento jurídico. Esta relación no es espontánea ni libre, sino que está regulada por la ley
y tiene un carácter obligatorio para las partes involucradas. En este tipo de relación, las
personas están sujetas a un conjunto de normas que definen los límites de sus acciones, lo que
implica que deben respetar las obligaciones y cumplir con los derechos establecidos en la
relación.
En resumen, mientras que la relación humana es una interacción libre entre personas, la
relación jurídica es una relación que surge a partir de una norma legal que establece derechos y
obligaciones. Ambos tipos de relaciones son importantes en la vida cotidiana de las personas,
pero su naturaleza y características son diferentes.
La segunda condición para que haya o exista una relación jurídica es que debe haber
elementos que la conforman, los cuales son:
1. Elemento Subjetivo: Está conformada por los sujetos del derecho, es decir, los actores
que intervienen en la relación jurídica. El primer sujeto es el activo, el titular del derecho
subjetivo o aquel que la norma le otorga derechos. Pueden ser personas físicas o
jurídicas. Y el otro es el sujeto pasivo, el titular del deber, el obligado por la norma a
cumplir una determinada obligación. Por ejemplo, un contrato de compra – venta de una
venta de mercancías, los sujetos serían el vendedor y el comprador.
En el elemento subjetivo se puede generar una relación simple donde hay un sujeto que
demanda (Activo) y el otro obligado a cumplir (Pasivo) y una relación compuesta, donde la
situación pasa a ser de dualidad o interviene un tercero.
2. Elemento Objetivo: Es el intercambio o contenido que se da entre los actores de la
relación jurídica y que va a generar una obligación. En este aspecto, tiene que ver con
dos criterios: (1) Con la forma que se expresa la obligación (2) y el bien que están en
juego en la relación jurídica, ya sea un bien tangible (expresa carácter monetario o
económico) o intangible, el servicio que se presta o la prestación que se exige.
Ejemplos: En un contrato de arrendamiento, el objeto sería el inmueble que se va a
rentar.
Es importante destacar que estos tres elementos deben estar presentes y ser lícitos para
que la relación jurídica sea válida y eficaz.
Por ejemplo, en un contrato de compra – venta entre dos particulares, el sujeto activo
sería el vendedor y el sujeto pasivo sería el comprador. El objeto podría ser la mercancía y la
causa sería la necesidad del vendedor de obtener dinero a cambio del vehículo, y la necesidad
del comprador de adquirir la mercancía para su uso personal. Todos estos elementos deben
estar presentes para que la relación jurídica sea válida y legalmente vinculante.
Otro ejemplo podría ser una relación laboral entre un trabajador y una empresa. El
trabajador sería el sujeto pasivo y la empresa el sujeto activo. El objeto sería la prestación de
un servicio laboral y la causa sería la necesidad del trabajador de obtener un empleo
remunerado y la necesidad de la empresa de contar con mano de obra para producir y generar
ingresos. En este caso, también es necesario que todos los elementos estén presentes y sean
legales para que la relación laboral tenga validez y esté regulada por la ley.
4. ¿CUÁLES CRITERIOS SON LOS QUE PUEDEN PRESENTARSE PARA QUE UN
CONTRATO SEA NULO? EXPLIQUE CADA UNO DE ELLOS.
Existen tres criterios que pueden llevar a que un contrato sea considerado nulo, algunos
de los cuales son:
Error: Si una de las partes contrató con base en una información errónea o fue
engañada sobre algún aspecto crucial del contrato, este puede ser declarado nulo.
Dolo: Este criterio se utiliza cuando se considera que una de las partes ha engañado a
la otra, debido a alguna circunstancia como falta de información o inexperiencia. De ser, así el
contrato se puede declarar nulo.
Violencia: Si una de las partes es obligada por la otra a firmar el contrato, mediante
amenazas o violencia, este será nulo.
1. Realizar una reserva del nombre comercial ante el Registro Mercantil, esto para evitar
que otra empresa pueda utilizar un nombre similar.
2. Debe protocolizarse, (elaborar el acta constitutiva, donde se establecen los detalles de la
empresa, sus objetivos, capital social, entre otros.) su estatuto y su respectivo domicilio.
3. Realizar el depósito del capital social que se haya estipulado en el acta constitutiva.
4. Inscribir la empresa ante el Registro Mercantil.
5. Obtener el Registro de Información Fiscal (RIF) ante el Servicio Nacional Integrado de
Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT).
6. Solicitar las autorizaciones necesarias de acuerdo al tipo de empresa que se está
formando, por ejemplo, permisos sanitarios si la empresa se dedica a la producción o
venta de alimentos.
7. Registrar a los trabajadores en los organismos correspondientes, como el Instituto
Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS) y el Instituto Nacional de Prevención, Salud
y Seguridad Laborales (INPSASEL).
Es importante hacer mención que los requisitos y pasos a seguir pueden variar de
acuerdo a cada tipo de empresa y a la normativa actual en Venezuela.