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PRÁCTICA PERICIAL

PSICOLÓGICA

Aspectos Procesales

Psicológicos y Jurídicos

Autores:

Mariel Izcurdia

Stella Puhl

Osvaldo Varela

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“(…) Porque después de todo he comprendido

que lo que el árbol tiene de florido

vive de lo que tiene sepultado.”

Francisco Luis Bernárdez

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INDICE

DEDICATORIA

PROLOGO

PRIMERA PARTE

PRÁCTICA PERICIAL PSICOLÓGICA

Capítulo 1 Aspectos psicológicos y jurídicos de la práctica pericial

Introducción

Aspectos legales

Características de la función pericial

Características del rol pericial

Secreto profesional y práctica pericial

Capítulo 2 Proceso pericial

Los puntos de pericia

El encuadre en el proceso pericial

El proceso psicodiagnóstico

Criterios de aplicación en el proceso pericial

Capítulo 3 El informe pericial

Cuestiones de forma y de fondo

Confección del informe pericial

Capítulo 4 La impugnación del informe pericial

Explicación e impugnación: procedencia

De los tiempos de la impugnación

Espectro de posibilidades que comprenden la impugnación

Nulidad de la pericia

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Contestación a los pedidos de aclaración o de impugnación de la pericia

Nuevos puntos periciales

SEGUNDA PARTE

EL INFORME PERICIAL Y SU IMPUGNACIÓN: MODELOS DE

PRESENTACIÓN

Capítulo 5 Informes Pseudo-Periciales

Capítulo 6 Informe Pericial

Capítulo 7 Pseudo Impugnación

Capítulo 8 Impugnación Técnico Jurídica

Capítulo 9 Impugnación Técnico Psicológica

TERCER PARTE

EJEMPLO DE INFORME PERICIAL Y RESPUESTA A LA IMPUGNACIÓN

Capítulo 10 Un caso de daño por estafa

Informe Pericial

Respuesta a la Impugnación del Informe Pericial

BIBLIOGRAFÍA

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DEDICATORIA

A todos aquellos que desde la eternidad me acompañan siempre.

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PROLOGO

A fines del año 2005 surgió la propuesta de la inclusión de una Práctica

Profesional específicamente enfocada en la labor psicológico-pericial en la Carrera

de Psicología de la Universidad de Buenos Aires.

Consecuentemente, se elaboró un plan pedagógico que tenía como objetivo

primordial interiorizar al alumno sobre los conocimientos básicos necesarios para

el ejercicio del rol profesional en la actividad pericial; la que demanda de

conocimientos específicos del discurso jurídico que lo habiliten para actuar en los

fueros judiciales, dado que en razón de la existencia de un marco jurídico

regulatorio, es necesario poseer las herramientas conceptuales legales en su

articulación con la praxis pericial, para un correcto y eficaz desenvolvimiento en el

ámbito de la justicia.

Ello por cuanto, el sujeto inserto en la sociedad es atravesado por el

discurso jurídico, y el psicólogo en su actividad pericial, ocupa un rol a partir del

cual debe dar respuesta a los jueces para la comprensión de cuestiones específicas

ajenas al campo del derecho.

Así fue como, el ciclo lectivo del año 2006 estableció en su currícula en el

Área Justicia: la Práctica Profesional Optativa denominada La Actividad Pericial en

Psicología Jurídica correspondiente al Ciclo de Formación Profesional de la

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Licenciatura en Psicología, y desde ese entonces a la actualidad, de modo

ininterrumpido, se viene dictando cuatrimestre a cuatrimestre.

Sin embargo, a pesar de que la cursada de la práctica instruye al futuro

psicólogo sobre cómo está organizado el Poder Judicial, para contextuarlo

inicialmente en el espacio que da origen a la función pericial; sobre el modo de

abordaje de los diferentes casos ante los cuales es convocado un psicólogo como

perito, y sobre la práctica propiamente dicha; ello no resulta suficiente una vez que

el profesional decide enfocar su praxis a la práctica pericial.

Cotidianamente, profesionales psicólogos se acercan a recibir asesoramiento

específicos sobre diversas situaciones prácticas y contenido teórico sobre la

temática; y esto nos ha demostrado la creciente necesidad de proveer elementos

científicos de los cuales valerse en su quehacer.

En función de ello, este libro pretende brindar conocimientos específicos

sobre cómo se comienza el diseño y ejecución del proceso de evaluación

psicológico pericial, a la vez que proporciona los conceptos básicos que se

constituyen en los requisitos jurídicos de forma y de fondo inherentes a la

actuación pericial.

La directriz de este libro, es aportar un acercamiento al desempeño del rol

profesional en la praxis pericial concreta, promoviendo un ejercicio responsable y

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ético de la profesión; ya que considero que la práctica pericial, es el ejercicio de la

profesión en un rol particular marcado y signado por la legislación vigente y, por lo

tanto, requiere de profundización y capacitación específicas que, la práctica

profesional descripta intenta acercar al cursante.

La autora

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PRIMERA PARTE

PRÁCTICA PERICIAL PSICOLÓGICA

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CAPITULO I

Aspectos psicológicos y jurídicos de la práctica pericial

Introducción

Sabido es que la Psicología en su entrecruzamiento con el discurso jurídico

debe dar respuesta a diversas problemáticas que, por las exigencias que impone

actualmente la realidad se presentan cada vez con un mayor grado de complejidad.

Por tanto, es deber de la ciencia, en nuestro caso de la Psicología Jurídica, estudiar

en profundidad las diversas variables inherentes a la práctica psicológico-pericial.

En este contexto y para desarrollar la temática propuesta en esta ocasión, es

necesario referenciar con mayor profundidad conceptos fundamentales para el

eficaz desarrollo de la praxis profesional.

Aspectos legales

En principio debe establecerse que hablar de las pericias psicológicas, remite

a un ámbito de inserción laboral del psicólogo jurídico, como lo es el tribunalicio,

que es el área más desarrollada y reconocida en el trabajo del psicólogo jurídico.

Este ámbito recorre de manera transversal los diferentes ámbitos de la

psicología jurídica. En este sentido la participación del psicólogo desde el

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asesoramiento pericial, puede ser solicitada por diferentes actores judiciales o a

petición de una de las partes interesadas.

En este contexto, resulta de especial relevancia mencionar que la Ley del

Ejercicio Profesional de la Psicología N° 23.277, considera “ejercicio profesional a la

aplicación y/o indicación de teorías, métodos, recursos, procedimientos y técnicas

específicas para a) el diagnóstico, pronóstico y tratamiento; b) enseñanza e

investigación; c) desempeño de cargos públicos; d) certificaciones, asesoramiento,

informes, dictámenes y peritajes”.

Pero además, para el desarrollo de la práctica psicológica pericial, es de

suma relevancia conocer la legislación que enmarca a la misma, la cual está

especificada en los diferentes códigos de procedimiento.

La finalidad del proceso judicial es alcanzar el conocimiento de la verdad

jurídica a los efectos de impartir justicia. Como es sabido, en el campo del derecho,

“la verdad” en todo su estatuto es una y no otra; y justamente es aquella que

puede ser corroborada a través de la presentación de pruebas (entre ellas la

pericial). Por tanto en un proceso judicial donde se plantean hechos controvertidos,

las Partes litigantes presentarán las pruebas que consideren conducentes a dejar

establecida la verdad que sostienen como verdad jurídica. Al respecto, Bentham

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llegó a decir que “el arte del proceso no es esencialmente otra cosa que el arte de

administrar pruebas”.

El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación legisla el tema de la Prueba

en el proceso judicial desde el art.° 360 hasta el art.° 478 inclusive. Así es como,

dentro de un litigio pueden presentarse diferentes tipos de prueba, a saber:

Documental, Informativa, Confesional, Testimonial, Pericial y/o Reconocimiento

Judicial.

Específicamente, en cuanto a la Prueba Pericial el art.° 457 del referido

Código establece: “Procedencia. Será admisible la prueba pericial cuando la

apreciación de los hechos controvertidos requiriere conocimientos especiales sobre

alguna ciencia, arte, industria, actividad o técnica especializada”.

La relevancia de la prueba pericial reside en que contribuye en el proceso

con un conocimiento determinado y profundo, respecto de hechos que superan el

análisis y la comprensión de un lego.

Características de la función pericial

El Perito será convocado en un proceso cuando se requiera la valoración de

hechos que por su especificidad excedan los alcances de los conocimientos del

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Juez en su formación jurídica o en lo que el buen criterio y sentido común puedan

indicarle (sana crítica – íntima convicción).

La función del perito psicólogo estará entonces signada por el deber de

asesorar al Juez sobre cuestiones científicas ajenas al campo del derecho e

imposibles de ponderar por el magistrado; y en el ejercicio de tal función adquirirá

la calidad de auxiliar de la justicia, lo que lo obliga a desenvolverse dentro del

marco jurídico regulatorio que engloba la práctica pericial.

En tal calidad que lo reviste como auxiliar de la justicia, el Perito debe

responder absoluta y acabadamente a todos los requerimientos que el magistrado

interviniente en la causa -que es convocado- le formule; pero de ningún modo

debe responder a los intereses de las Partes; ello por cuanto la investidura de

director del proceso le atiene exclusivamente al juez y la obligación del perito es

asesorarlo en lo que a su ciencia atañe ceñido al principio de neutralidad y bajo los

presupuestos que imponen imparcialidad, impartialidad e independencia, para

cumplir doctamente con la labor que le ha sido asignada, conforme a derecho y a

los parámetros que rigen la praxis de la ciencia que lo atañe.

El principio de neutralidad obliga al Perito a que ejerza su función de modo

imparcial, impartial e independiente. En otros términos, la actuación del Perito

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debe estar despojada de toda connotación y/o apreciación que no sea técnico-

científica.

La imparcialidad hace a la esencia de lo judicial, y se constituye en un

contenido ontológico que caracteriza tanto a la figura del Juez como a la del Perito.

Cuando se habla de impartialidad, ello hace referencia a que el Perito no

debe ser Parte en el proceso judicial, no debe tener intereses propios en la

resolución del litigio en el que interviene. De hecho, ello constituye una causal de

recusación del Perito.

El Perito tampoco debe depender -en ningún aspecto- de las partes, porque

sino sería parcial en sus apreciaciones. La independencia del Perito debe ser

absoluta, desprovista de toda forma de poder que pueda llevarlo a parcializarse. El

Perito debe ser independiente de todo aquello que propicie el beneficio de una de

la Partes litigantes; de toda forma de poder económico, político, periodístico, etc.; e

incluso de sus propias pasiones (entendiéndose a éstas como afinidades, religión,

cultura, prejuicios, etc.).

La estricta observancia del Perito a tales obligaciones, encuadra la Buena Fe

Objetiva a la que deben sujetarse todos los que intervienen en un proceso judicial.

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Entonces, el perito psicólogo en el ejercicio de su función deberá aportar sus

conocimientos al proceso conforme se lo indican las reglas de su ciencia y sujeto a

las normas procesales que regulan su actuación judicial.

Así también, el Perito como “profesional” “auxiliar de la justicia”, tendrá

cualidades propias y específicas que le otorgan ciertas atribuciones: solicitar en

préstamo el expediente y/o historias clínicas para extraer antecedentes del caso

bajo análisis, fijar fecha, hora y lugar de las entrevistas (conforme lo establecido por

el Código Procesal Civil Y Comercial de la Nación) sin necesidad de conformidad de

las Partes, elegir la batería de técnicas psicodiagnósticas que resulten propias a la

evaluación pericial del caso, etc.

La función pericial demanda que el Experto actúe con conciencia,

honestidad y sabiduría, aplicando su juicio conforme la formación científica que

posee.

El Perito Psicólogo debe orientar sus estudios, investigaciones,

documentaciones e interpretaciones periciales hacia la descripción y comprensión

profunda de las características de personalidad de la persona que evalúa. Para

alcanzar las conclusiones que conduzcan a la dilucidación del modo de

funcionamiento del psiquismo de un sujeto, debe, en todos los casos, administrar

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una batería de test psicodiagnósticos que le permita explorar todas las áreas del

funcionamiento psíquico (intelectual, afectiva, volitiva, vincular, etc.).

Las conclusiones a las que arribe el Perito serán volcadas en su Informe

Pericial, el cual brindará al magistrado interviniente en el caso concreto un

panorama acabado del estado psíquico de la persona evaluada, y sobre cómo y en

qué aspectos ha sido afectada por los hechos que se debaten y dieron lugar al

examen pericial.

Características del rol pericial

La palabra Perito deviene del término en latín “Peritu”, y su significado

genérico es “sabio, experimentado, práctico en una ciencia o arte”.

Por tanto, a quien posee sabiduría, práctica, experiencia y habilidad en una

ciencia, arte u oficio; se lo denomina Perito.

La labor técnica pericial puede desempeñarse tanto en el marco de un

litigio, como así también por fuera del mismo.

El Perito es convocado en un proceso judicial cuando es necesario dirimir

cuestiones cuya apreciación requiere de conocimientos muy específicos que

exceden el campo del Derecho.

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En el ámbito de la Justicia Nacional, el Psicólogo puede desempeñar su rol

pericial como:

Perito Oficial: es aquél que trabaja en relación de dependencia del Poder

Judicial, es decir, es un empleado de éste y por tanto percibe un sueldo mensual

por la labor que desempeña; lo que implica que su remuneración no variará según

la cantidad de casos que se le asignen.

Los Peritos Oficiales, tienen la obligación de aceptar la evaluación de todos

aquellos casos en que sean convocados; excepto en el evento en que existiere

alguna causal de excusación de las taxativamente enunciadas en los Códigos

Procesales.

El Decreto- Ley 1285/58 ratificado por la Ley 14.467, ha creado -con carácter

de auxiliares de la Justicia- cuerpos técnicos periciales; los cuales en principio,

intervienen sólo en el fuero penal; pero excepcionalmente, pueden actuar en otros

fueros cuando por las circunstancias del caso; la existencia de notorias razones de

urgencia, pobreza o Interés público, el Juez considerare necesario su

asesoramiento.

Los profesionales que trabajan como Peritos Oficiales desempeñan su labor

en el Cuerpo Médico Forense, el cual depende de la Corte Suprema de Justicia de

la Nación.

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El inicio de la función pericial psicológica en el Servicio de Psicología del

Cuerpo Médico Forense de la Justicia Nacional, data del año 1993.

Perito de Oficio o de Lista: es aquél que se inscribe en los Listados de las

Cámaras de Apelaciones de los diferentes Fueros de la Justicia. El Poder Ejecutivo

Nacional creó por Decreto N° 1813/92, un registro de peritos y demás auxiliares de

la justicia para designaciones de oficio.

La inscripción a los Listados precisa de la cumplimentación de ciertos

requisitos por parte del profesional.

Este Perito es nombrado, para intervenir en un determinado caso, a través

de un sorteo; y la relación que establece con el Poder Judicial es contractual

respecto de cada caso en el que intervenga.

Los honorarios que percibirá serán regulados por el Juez a cargo del proceso

en cada caso en los que hubiere actuado.

Consultor Técnico: es convocado por una de las Partes, quien solicita al

Juez que autorice su intervención en el proceso.

Este Experto actuará como asesor de la Parte que lo propuso; y como veedor

de la pericia y su designación sirve para garantizar el derecho de defensa en juicio,

en tanto su función será supervisar el desempeño del Perito de Oficio.

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Esta figura está contemplada por el Código Procesal Civil y Comercial de la

Nación en el art.° 458 “in fine”: “Perito. Consultores Técnicos (...) Cada parte tiene la

facultad de designar un consultor técnico”.

Ante su designación en un litigio, el Consultor Técnico no tiene obligación

legal de realizar lo que se denomina Aceptación Formal del Cargo, ni de presentar

un Informe. Pero, es de tener en cuenta que si bien no existe deber que lo compela

a presentar un Informe, sí tiene pleno derecho a presentarlo y así corresponde que

lo haga cuando en su criterio existan consideraciones técnicas y/u observaciones

respecto del actuar del Perito de Oficio y/o del Informe que éste presente,

necesarias de ser comunicadas al magistrado interviniente con la finalidad de

respetar el debido proceso y proteger el derecho de defensa en juicio.

Según el art.° 461 “in fine” del Código Procesal Civil y Comercial de la

Nación “Los honorarios del consultor técnico integrarán la condena en costas.”.

Aunque también, conforme lo dispuesto por la Ley 24.432 (Ley de Honorarios

Profesionales de Abogados y Auxiliares de la Justicia) los profesionales pueden

pactar con sus clientes la retribución de sus honorarios. Por tanto el Consultor

Técnico podrá percibir honorarios tanto de la Parte que ha sido condenada en

costas en el juicio, como de aquélla que lo ha contratado.

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Perito de Parte: es nombrado por el Juez para intervenir en un proceso

penal a petición de alguna de las Partes del litigio.

La función de este Experto es observar el desenvolvimiento del Perito Oficial,

de modo tal que garantiza el respeto por el derecho constitucional de defensa en

juicio.

El accionar del Perito de Parte está regido por lo normado en el Código

Procesal Penal de la Nación arts.° 254, 257 “in fine”, 259, 262, 266 y 267 “in fine”.

El nombramiento que recibe en el proceso lo obliga a tener que realizar la

Aceptación Formal del Cargo con el cual se lo inviste; así como también a dejar

sentada en el proceso por escrito su opinión científica respecto del caso que se ha

evaluado; pudiendo para ello firmar en conformidad el Dictamen Pericial que

presente el Perito Oficial o, en su defecto presentar un Informe propio.

Los honorarios podrán ser exigidos a la Parte que lo ha convocado, o al

condenado en costas. Pudiéndose aplicar también en estos casos la Ley 24.432.

Experto Consulto: Es un profesional de reconocida trayectoria y

especialización que es convocado en un litigio por sí o en representación de un

organismo especializado para ilustrar a los jueces sobre una temática en particular.

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El desempeño de este perito está especificado en art.° 476 del CPCyCN que

refiere: “A petición de parte o de oficio, el juez podrá requerir opinión a

universidades, academias, corporaciones, institutos y entidades públicas o privadas

de carácter científico o técnico, cuando el dictamen pericial requiriese operaciones

o conocimientos de alta especialización”.

Así también el art. 258° del CPPN dice: “El juez designará…entre los

funcionarios públicos que, en razón de su título profesional o de su competencia,

se encuentren habilitados para emitir dictamen acerca del hecho o circunstancia

que se quiere establecer”.

Por otra parte, el Psicólogo puede desenvolverse en el ejercicio de su

profesión en otros ámbitos ajenos al Poder Judicial. Cuando un Perito es

convocado para actuar por fuera de un proceso jurídico, pero en razón de la

existencia del mismo y con la finalidad de que colabore con quienes sí intervienen

en éste, se entiende que la función específica que desempeña el profesional es la

de Asesor Técnico.

Así, por ejemplo, el Asesor Técnico podrá redactar los Puntos Periciales que

considere apropiados para el que letrado patrocinante en la causa los proponga al

momento de ofrecer la prueba pericial.

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De igual modo, el Asesor Técnico puede realizar una evaluación previa sobre

la persona que se solicitará el posterior examen pericial; para de este modo

informar al letrado patrocinante sobre el estado psíquico que presente y que éste

pueda en base a ello planear una mejor estrategia jurídico-procesal.

También, en muchos casos en donde no se ha designado Consultor Técnico

en la causa, una vez presentado el Informe Pericial, el letrado debe recurrir a un

Asesor Técnico que interprete lo comunicado o en su defecto que le brinde

elementos técnicos para fundar su impugnación.

Es conveniente aclarar que tanto el Perito Oficial como el Perito de Oficio

tienen la obligación de respetar el principio de neutralidad en el proceso. Dicha

obligación atañe a todos los auxiliares que intervengan en el proceso; a pesar de

que hay quienes pretenden otorgar al Consultor Técnico y al Perito de Parte

idéntica calidad que la del abogado patrocinante, quien, sabido es que intentará

favorecer a la Parte que lo designa.

Secreto profesional y práctica pericial

La práctica pericial de ningún modo se agota en la realización del proceso

psicodiagnóstico y la confección del Informe. Por ello, es que la misma requiere de

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conocimientos tanto científicos psicológicos, como así también de conocimientos

jurídicos (de fondo y procedimentales).

Hemos explicado en otras exposiciones que el Secreto Profesional tiene por

fin proteger un bien: el derecho a la intimidad de la persona, derecho atribuido a

los sujetos por imperio constitucional.

Resultan sumamente interesantes las múltiples definiciones que existen en

cuanto a la diferenciación del secreto profesional asistencial y pericial. Pero, es

necesario destacar que, un constructo teórico jamás puede primar por sobre la ley

vigente, y muchísimo menos por sobre la Constitución Nacional misma, Ley

Suprema en nuestro país. Por tanto, en el marco de la ley, un derecho

constitucionalmente reconocido como los es el resguardo de la intimidad de una

persona humana, no puede ser vulnerado en base a meras conceptualizaciones.

La Ley 23.277 del Ejercicio Profesional de la Psicología en su Título IV, art.° 8,

inc. 4°, específicamente conmina al resguardo del Secreto Profesional diciendo:

“Los profesionales que ejerzan la psicología están obligados a (...) guardar el más

riguroso secreto profesional sobre cualquier prescripción o acto que realizare en

cumplimiento de sus tareas específicas, así como de los datos o hechos que se les

comunicare en razón de su actividad profesional sobre aspectos físicos,

psicológicos o ideológicos de las personas.”.

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En relación a la Violación de Secretos el Código Penal de la Nación establece

que: “Será reprimido con multa de mil quinientos a noventa mil pesos (montos

según Ley 24.286, art.1, apartado 7) e inhabilitación especial, en su caso, por seis

meses a tres años, el que teniendo noticias, por razón de su estado, oficio, empleo,

profesión o arte, de un secreto cuya divulgación pueda causar daño, lo revelare sin

justa causa”.

Cuando dentro del proceso judicial se han propuesto puntos periciales

concretos, el Secreto Profesional queda claramente delimitado en razón de la

existencia de dichos puntos. En cambio, cuando no hay puntos periciales el

Experto deberá valorar el alcance del Secreto ponderando la demanda que se

plantea en términos jurídicos. En ningún caso en el que no exista una Justa Causa,

el Experto puede aportar datos que no han sido interrogados y/o que no

encuentren conexión con el expediente en el que interviene.

Solo puede ser revelado el Secreto Profesional cuando la propia persona

sobre la cual se guarda el secreto preste su consentimiento expreso y manifiesto

por escrito; o cuando un Juez así lo ordene en mérito a la existencia de una Justa

Causa (Código Penal de la Nación, art.° 34, inc. 3°).

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En razón de todo ello es que no resulta procedente la presentación adjunta

al Informe Pericial de la transcripción de las entrevista ni de los protocolos

obtenidos en la administración de la batería de test.

Al respecto cabe señalar que se denomina protocolo a aquella producción

realizada estrictamente por el sujeto, cualquiera sea su naturaleza conforme la

consigna que le fuera indicada. Y, solo los protocolos son de pertenencia –

técnicamente jurídica- de la persona que los produjo, quien puede solicitarlos o

autorizar su presentación.

En tanto, la/s hoja/s de registro son aquellas notas que el profesional realiza

durante el examen. Y las mismas, son de su propiedad exclusiva, no pudiendo ser

conminado a su presentación.

Para una mayor profundización es necesario aclarar que la evaluación de los

protocolos fuera del contexto en el que han sido obtenidos es absolutamente

inapropiada y carente de valor científico alguno; ya que no interesa únicamente al

análisis la producción material sino también la situación fenomenológica en que se

produjo, sólo observable porque quien/es ha/n presenciado el proceso (vg. modo

de presentación del sujeto, estados emocionales, tonalidad de la voz, lenguaje

gestual, manejo de la ansiedad y/o angustia, etc.). Es así, como tales observaciones

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son fundamentales de tener en cuenta al momento de arribar a conclusiones

diagnósticas acertadas.

Desde ninguna óptica es dable aceptar que un perito psicólogo afirme con

valor de verdad la existencia y/o ocurrencia de hechos y/o circunstancias y/o

diagnósticos, que no ha evaluado, no ha presenciado o no hayan sido probados a

través de sentencia judicial firme. Puesto que ello se constituiría en una opinión

teñida de subjetividad y formada por prejuicios propios y ajenos; pero

indudablemente carente de rigurosidad técnico-científica; a más de infringir el

principio de neutralidad que impone la tarea pericial y consecuentemente su deber

de imparcialidad, impartialidad e independencia.

Por tanto, no existen “fundados fundamentos” ni jurídicos ni psicológicos

que avalen la presentación de los protocolos.

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CAPÍTULO II

El proceso pericial

Los puntos de pericia

Como ya hemos dicho, el perito psicólogo es convocado a los fines de dar

respuesta a los requerimientos que la justicia le haga para que con su aporte

científico colabore en la comprensión de los hechos que se ventilan en el

expediente, y así lograr una mejor administración de justicia.

Ahora bien, se plantea el tema de cuales concretamente son tales

requerimientos que se le presentan al profesional.

Generalmente, nos encontramos con que dentro del expediente constan los

puntos periciales que el perito debe responder.

Los puntos periciales son plasmados de diversas formas. Nos encontramos

con formulaciones que conllevan en sí mismas preguntas, muchas veces

afirmaciones y/o negaciones que deben ser confirmadas o avaladas por el experto;

aunque también en ocasiones consta la solicitud de que se apliquen determinadas

técnicas psicodiagnósticas, o asimismo que se nos convoca para que sea realizado

un examen psicodiagnóstico.

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El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación en su art.° 459 establece:

“Designación. Puntos de pericia. Al ofrecer la prueba pericial se indicará la

especialización que ha de tener el perito y se propondrán los puntos de pericia (...).

La otra parte, al contestar la vista que se conferirá conforme el art. 367, podrá

formular la manifestación a que se refiere el art. 478 o, en su caso, proponer otros

puntos que a su juicio deban constituir también objeto de la prueba, y observar la

procedencia de los mencionados por quien la ofreció (...). Si se hubiesen

presentado otros puntos de pericia u observado la procedencia de los propuestos,

por la parte que ofreció la prueba, se otorgará traslado a ésta (...)”.

El art.° 460 del mismo Código, continúa diciendo: “Determinación de los

puntos de pericia. (...) el juez designará el perito y fijará los puntos de pericia,

pudiendo agregar otros o eliminar los que considere improcedentes o superfluos

(...).

Conforme ello, debe entenderse que las partes que intervienen en el litigio

son quienes proponen la prueba pericial psicológica y consecuentemente los

puntos de pericia que desean se les respondan. No obstante lo cual, es facultad

exclusiva del magistrado que interviene en la causa determinar la procedencia o no

de tales propuestas o incluir las propias, lo que en definitiva implica que el experto

deberá responder sólo aquellos puntos periciales que el juez considere pertinentes.

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Veamos ahora algunos ejemplos de los posibles puntos periciales que

suelen presentarse en un juicio.

Cuando los puntos de pericia son formulados a modo de interrogación,

suelen consignarse del siguiente modo:

 Si hay disminución en las actividades psíquicas superiores.

 Si padecen trastornos derivados de algunos de estos estados: fobias,

pesadillas, angustias permanentes, traumas e inhibiciones.

 Si resulta necesario tratamiento psicoterapéutico de apoyo, y en caso

afirmativo, su costo.

 Determine el grado de incapacidad psicológica en la actora.

 Necesidad de tratamiento, costo del mismo, frecuencia, duración.

 Considerando los datos que surgen de la causa penal, y los de esta acción,

determinará concordancias entre el evento y las afecciones psicológicas.

 Diagnóstico y pronóstico psíquico de cada uno de los firmantes.

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 Indique el perito cómo influyó en la psiquis del actor, el hecho de no poder

trabajar por verse privado de su medio de transporte y por las secuelas de

las lesiones.

 Si la referida afección encuentra relación causa efecto con su actual estado

de salud como consecuencia de su problema columnario y/o hipoacusia y/o

las tareas desempeñadas para el empleador.

 Costo y duración del correspondiente tratamiento indicándose cantidad de

sesiones necesarias y valor de cada una de ellas en el supuesto de encararse

el mismo en forma privada.

 Grado de incapacidad laboral derivada de la afección.

 Indique cual es el tratamiento en la materia de su especialidad que

considera más adecuado.

 Se expida especialmente respecto de la actitud hacia la vida de relación, en

los planos familiar, social, cultural, intelectual, y de aprendizaje en general.

 Si como consecuencia del accidente que da cuenta la presente demanda, el

actor padece de síndrome de estados de ánimo angustioso y/o depresivos

y/o sentimientos de desvalorización de su personalidad y/ seguridad laboral.

Si puede coexistir depresión con irritabilidad.

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 Tomando en cuenta la edad de la actora, si es posible lograr una

recuperación; si es necesario suministrar medicación y/o tratamiento

psiquiátrico.

 Determine como ha influenciado el hecho traumático en su vida de relación

afectiva, su esfera laboral y social.

Ante tales propuestas el perito debe tomar muy en cuenta que al responder

deberá limitarse única y específicamente a evacuar la pregunta planteada, basado

ello en el resguardo del secreto profesional. Aunque, la respuesta sí debe ser

detallada y fundamentada ampliamente.

En cambio, cuando se expresan afirmaciones y/o negaciones que se

pretenden que el perito convalide, frecuentemente se realizan manifestaciones

como:

 Tratamiento psicoterapéutico de apoyo por un mínimo de 2 años:

costo.

 Incapacidad psicológica.

 Importancia de las lesiones psíquicas.

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 Indique qué aspectos ha afectado la lesión psicológica.

 Tipo de afección psíquica sufrida y relación causal entre dicha

afección y las discapacidades laborativas que motivan la presente litis.

 Fundamente concretamente las conclusiones a las que arribe.

 Incidencia del daño antedicho en las esferas afectivas, sociales,

laborales, deportivas, etc.

 Deterioro de la capacidad de concentración, y del rendimiento

intelectual consecutivo.

 Influencia negativa en la psiquis del actor por el hecho de no poder

trabajar por verse privado de su medio de transporte y por las

secuelas de las lesiones.

 Grado de incapacidad.

En estos casos, siempre el experto tendrá que realizar aclaraciones al

respecto, con la finalidad de que no quede por sentada “per se” la postura de

quien ha redactado el punto pericial. Además, la mayoría de las veces no podrá el

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experto explicitar acabadamente lo evaluado sin antes hacer constar el punto de

vista desde donde se está respondiendo.

Así también, existe un punto pericial que frecuentemente es utilizado como

clisé en todas las convocatorias de peritos, cualquiera sea su especialidad.

Expresado de diferentes formas, siempre apunta a lo mismo, a que el perito se

explaye ampliamente sobre lo que considera pertinente.

Su redacción suele plasmarse del siguiente modo:

 Informe sobre todo dato que considere de interés.

 Todo otro dato de interés para la litis.

 Mencione cualquier otro dato ampliatorio que pudiere aportar al

presente, agregando copia de los test que se le efectúen con

indicación de sus resultados.

 Cualquier otro dato de interés para la solución de la cuestión que se

ventila en estos obrados.

 Informe sobre cualquier elemento que considere de interés para su

mejor y más acabado esclarecimiento de este pleito.

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 Todo otro dato-aporte-sugerencia que a criterio del experticio crea

conveniente para la justa solución de la litis.

 Cualquier otro dato de interés.

 Todo aquello que el experto considere de interés relevante a los

efectos del presente.

 Todo otro dato de interés para la dilucidación de la presente causa.

Es fundamental que al momento de responder este punto, el experto

considere si realmente tiene o no otros aportes relevantes a los hechos que se

ventilan en los actuados; ya que no puede bajo ningún punto de vista volcar en su

respuesta datos que no han sido solicitados o que no se corresponden con los

hechos. Si los puntos periciales fueron bastamente respondidos, seguramente en la

respuesta a éste, el experto no tenga nada para decir en cuyo caso lo responderá

en tales términos. Sin embargo, sucede a veces, que se considera necesario sugerir

otra evaluación pericial por profesionales de otras disciplinas, o se cree

conveniente indicar que aún sin encontrar alteración psíquica que configure algún

trastorno específico, el sujeto se ve afectado moralmente por los hechos; entonces

el perito podrá volcar esas u otras apreciaciones en su respuesta; pero debe en

34
todo momento respetar la privacidad del periciado no violando el secreto

profesional en cuanto aparezcan problemáticas que no se refieran a los planteos

que dieron motivo al juicio que lo convoca.

Particularmente destacable, es el caso en donde se solicita la administración

de determinadas técnicas psicodiagnósticas como ser:

 Entrevista semidirigida.

 Test Guestáltico Visomotor de Lauretta Bender.

 Test HTP (casa, árbol, persona).

 Cuestionario Desiderativo

 Test de Matrices Progresivas de J.C. Raven

 Test de Relaciones Objetales de Herbert Phillipson.

 Estado psíquico actual de la actora, conforme los estudios

correspondientes -entrevistas, relato, verbalización, psicodiagnóstico,

etc..

 Para que realice un análisis psicológico, psicodiagnóstico y tests

(incluyendo Test de Rorschach, y M.M.P.I II ).

35
Frente a ello, es el experto quien considerará si la aplicación de las mismas

es o no conveniente, ponderando qué es lo que debe evaluar en el caso concreto y

si tales técnicas resultan suficientes y adecuadas a tal fin. En otras palabras, es el

perito quien tiene la facultad de decidir qué técnicas utilizará para realizar el

examen, puesto que él posee los conocimientos técnicos-científicos necesarios.

Pero, si el profesional decidiere no aplicar alguna/s de las técnicas que le fueron

planteadas deberá, al momento de hacer constar la respuesta al punto pericial,

especificar las razones técnicas-científicas que motivaron la desestimación de las

mismas.

Cuando lo requerido es un examen psicodiagnóstico, el perito se enfrenta a

un dilema muy específico: ¿qué se debe informar, y qué no?.

Pues bien, la respuesta la encontrará en el análisis del expediente. Para

determinar qué se debe informar y qué no en estos casos, se valorará

exclusivamente cuál es el derecho que se está debatiendo en ese juicio, en otros

términos, cuál es la temática sobre la que trata el litigio Vg. Daños y Perjuicios,

Régimen de Visitas, Adopción, Tenencia de Hijos, Violencia Familiar, etc. Ello,

marcará el camino sobre que es necesario informar, considerando siempre que lo

comunicado no debe apartarse de los hechos ventilados en la litis.

36
Es importante explicar que muchas veces se presentan puntos periciales

incomprensible para el experto, ya sea por su modo de redacción o porque es

inentendible el planteo formulado desde una postura científico-psicológica. Bajo

estas circunstancias, el perito puede, previo a la aceptación de su cargo (y

condicionándola a ello), a la evaluación pericial o incluso a la presentación de su

dictamen; presentar ante el juzgado un escrito de Pedido de Aclaración de Punto

Pericial, para que el juez inste a las Partes intervinientes a que contesten tal

solicitud del experto. Incluso, el profesional, puede incluir en el mismo escrito una

sugerencia en cuanto a qué debería plantear el punto pericial cuestionado,

indicando en que alcances podría implicar el mismo desde la ciencia de la

psicología.

Cabe señalar que existen determinados tipos de procesos judiciales, en

donde la labor del perito psicólogo ha tomado relevancia en los últimos años,

debido a la especificidad de los casos que se evalúan en ellos; siendo estos

procesos los de Declaración de Demencia en Sentido Jurídico (Juicio de Insaña), y

Declaración de Inhabilitación Civil; y la contrapartida a ambos que es el Juicio de

Rehabilitación.

Se destaca especialmente estos juicios, por cuanto el antiguo Código

Procesal Civil y Comercial de la Nación en su art.° 626, inc. 3 refería: “La

designación de oficio de tres médicos psiquiatras o legistas, para que informen,

37
dentro del plazo preindicado, sobre el estado actual de las facultades mentales del

presunto insano. (...)”. De ello, se entendía, y así se efectuó históricamente en los

estrados, que los peritos autorizados para intervenir en estos casos deben ser

médicos psiquiatras o legistas.

Afortunadamente, fueron muchos los profesionales médicos que cuando

eran designados en esas causas le solicitaban al juez interviniente la realización

previa a su dictamen de una pericia psicológica; e incluso muchos jueces en el uso

de las facultades que les confiere la calidad de director del proceso y considerando

el principio de amplitud de la prueba, la requerían por sí mismos como

complemento de la pericia médica que el Código de Procedimientos establecía. De

éste modo, se dio un lugar de intervención al psicólogo, que subsanaba la falencia

que –a nuestro criterio- lucía el mencionado Código Procesal.

Pero, en estos casos, se nos presenta nuevamente el problema de qué se

debe o no informar, dado que no corresponde que se planteen puntos periciales.

En realidad, no corresponde que se planteen puntos periciales porque el

propio Código Procesal establecía los requerimientos que debía cumplimentar el

profesional en su informe, a saber:

1) Diagnóstico

38
2) Fecha aproximada en que la enfermedad se manifestó.

3) Pronóstico.

4) Régimen aconsejable para la protección y asistencia del presunto insano.

5) Necesidad de su internación.”

Es así, como un informe pericial referente a casos de Insaña, Incapacidad

Civil o Rehabilitación, debía contener la respuesta a esos 5 puntos establecidos en

el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.

En la actualidad, la señalada falencia del nombrado Cuerpo Normativo, fue

subsanada por la Nueva Ley Nacional de Salud Mental que propició la

modificatoria del mismo en tal aspecto. Sin embargo, siguen siendo las directrices

a seguir en la confección de un Informe Pericial en estos casos, de los mencionados

puntos.

El encuadre en el proceso pericial

El encuadre del proceso pericial resulta muy particular, toda vez que el

experto tiene el deber de guardar el más riguroso secreto en el cumplimiento del

ejercicio de su profesión de todos aquellos conocimientos que obtenga a través de

ésta; pero simultáneamente se encuentra con que cuando es llamado por la

39
justicia para intervenir en un proceso, su función está signada justamente en

informar de la persona evaluada todos aquellos datos (relacionados a la causa que

se tramita) que obtenga con su praxis pericial en el marco de la pericia.

Dado que el destinatario del informe pericial es un juez y no un paciente; es

necesario hacer conocer a la persona examinada específicamente los fines de la

evaluación, así como el imperioso requisito de su voluntariedad e implicancia de

dicha situación o contexto para la aceptación de las pruebas a las que deberá

someterse.

Por tanto, previo a comenzar la primer entrevista, el profesional debe

informar claramente al periciado como se desarrollará el proceso de evaluación,

cual es su finalidad, y modalidad de trabajo. Aclarando además, que todo lo que

sea comunicado por él y encuentre relación con los hechos que se ventilen en los

actuados serán informados en el Dictamen pericial, haciéndole saber que los

datos que no resulten relevantes en el litigio por no encontrar correspondencia

alguna con el mismo, serán resguardados por el Secreto Profesional.

Consecuentemente, se deberá explicar que al ser la pericia una prueba que

se presenta en el juicio con la finalidad de demostrar la validez del derecho que se

debate en el mismo, la misma no constituye una obligación sino una facultad a ser

ejercida o no por quien detente ese derecho. Por tanto existe la posibilidad de

40
aceptar o negarse a someterse a la misma, y sólo es la persona (mayor de edad y

capaz civilmente) periciada quien puede brindar su consentimiento para ello.

Una vez realizada tal exposición al sujeto que será evaluado debe

procederse a interrogarlo sobre si está dispuesto o no a ejercer esa facultad, en

otros términos “a ser evaluado pericialmente”.

Ante la negativa de la persona a colaborar con el proceso pericial, el perito

deberá solicitarle que deje por escrito la misma, para luego presentar su copia

junto con un escrito en donde se explique lo sucedido y la consecuente

imposibilidad de presentar informe pericial alguno sin evaluación previa, ante el

juzgado donde tramita la causa.

En cambio, si el sujeto manifiesta su voluntad de colaborar con el proceso

pericial, podrá comenzarse el mismo sin inconvenientes ni reticencias en cuanto a

lo que el secreto profesional se refiere, puesto que el consentimiento dado por la

persona en este sentido releva al perito del resguardo de su secreto en todo lo

relacionado al expediente de que se trate, no así con otros aspectos de su vida que

no se mencionen en el mismo.

Es importante destacar que el encuadre pericial no sólo encuentra las

particularidades mencionadas; sino que se constituye –muchas veces- en un

41
espacio peculiar dada la cantidad de personas que podrían estar presentes en el

proceso pericial.

Frecuentemente sucede que habiéndose debidamente fijado en el

expediente las fechas para la realización de la evaluación, concurren a las

entrevistas Consultores Técnicos y/o Letrados de las partes que intervienen en el

litigio; ante lo cual el perito designado para realizar la pericia no puede negarse a

que los asistentes presencien la misma. Ello por cuanto el Código Procesal Civil y

Comercial de la Nación en su art.° 471 taxativamente establece: “Práctica de la

pericia. La pericia estará a cargo del perito designado por el juez. Los consultores

técnicos, las partes y sus letrados podrán presenciar las operaciones técnicas que

se realicen y formular las observaciones que consideraren pertinentes”.

En este sentido, cabe aclarar que si bien será el perito de oficio quien tenga

a su cargo la dirección del proceso pericial (con todo lo que ello implica:

establecimiento de fechas, hora, lugar, determinación de técnicas y modalidad de

trabajo), esto no lo habilita a impedir que quienes concurran al proceso -estando

legalmente autorizados para hacerlo- puedan intervenir formulando preguntas y/

cuestionamientos. Aunque, dependerá de la idoneidad del perito para (en forma

privada) convenir con los concurrentes en su buena disposición para la

intervención de éstos mediatizada a través suyo, proponiéndoles que de tener

algún tipo de sugerencias se la hagan conocer por escrito durante el proceso o en

42
su defecto con posterioridad a la finalización de la entrevista para poder actuar en

función de ello durante la siguiente.

Es necesario considerar que todo proceso de evaluación por sí mismo

genera cierto monto de ansiedad y angustia; y en esto casos se suman las

implicancias jurídicas que reviste en el proceso. Por ello, de este modo, se intenta

que el espacio pericial, resulte lo menos condicionado posible para el mejor

rendimiento del sujeto en las producciones que se le solicite que realice. Si así no

se lograre, no solamente podrían verse alterados los resultados que se obtienen,

sino también hasta podría propiciarse una intervención con efectos iatrogénicos.

Pero, se insiste, no es posible impedir que terceros (partes en el juicio)

presencien la pericia, ya que si así se hiciera se estaría violando derechos

constitucionalmente protegidos (Defensa en Juicio e Igualdad de las Partes ante la

Ley).

El proceso psicodiagnóstico

El medio que utilizará el Perito para alcanzar su objetivo final -la confección

del informe pericial- será la realización de un proceso psicodiagnóstico.

Para obtener la información precisa para contestar los puntos de pericia, el

Perito Psicólogo recurrirá a:

43
1) Entrevistas:

Las entrevistas periciales, cuentan con el particular carácter de tener como

objetivo la investigación y diagnóstico sobre el psiquismo de una persona.

Es conveniente –en la mayoría de los casos- que el Perito no deje librados a

la voluntad del sujeto evaluado los temas a ser abordados durante las entrevistas;

ya que su labor es específica y dirigida sólo a las cuestiones inherentes al proceso

judicial. Por tanto, lo más adecuado es la realización de entrevistas estructuradas y

semi-estructuradas, a través de las cuales el Experto inclinará su investigación a los

aspectos requeridos de ser evaluados.

Si bien es cierto y correcto que el Perito deberá escuchar toda la información

que la persona le brinde, y luego valorará su correspondencia o no con la causa; no

es menos cierto que su labor está dirigida a profundizar el examen sobre aquellos

aspectos de la personalidad que se le ha encomendado evaluar.

Muchas veces, a los fines de poder obtener la información, resulta práctico

para el Perito armar un cuestionario que conserve en su poder al momento de la

entrevista y que utilice como guía para la estructura y dirección de la misma;

incluso aclarándole al entrevistado la necesidad de indagar sobre determinadas

cuestiones, por lo cual se cuenta con una serie de preguntas escritas, las que

necesariamente deberán ser interrogadas a lo largo de la entrevistas.

44
Para planear la organización de este tipo de entrevistas, el profesional

deberá tomar en cuenta –muy especialmente- la forma en que serán planteadas las

preguntas, evitando en un todo las posibilidades de respuestas inducidas. Así

también, el orden en que se formularán las interrogaciones no puede dejarse

librado al azar; siendo el principio rector en este sentido, comenzar la entrevista

abordando temas que no generen montos muy altos de ansiedad y angustia, para

progresivamente ir ahondando sobre cuestiones emocionalmente más

movilizantes.

Así, durante las entrevistas el Perito Psicólogo no sólo podrá evaluar el

dinamismo psiquico del sujeto periciado, sino también recopilar datos

imprescindibles a los efectos del trabajo técnico pericial que se realiza.

2) Administración de técnicas psicodiagnósticas:

La batería de test seleccionada por el Perito debe ser lo suficientemente

amplia en cuanto explore la totalidad de los aspectos necesarios a conocer a los

efectos de responder los puntos periciales solicitados; pero en todos los casos el

criterio privilegiado será el de no recabar más información que la necesaria a los

efectos de responderlos.

45
Es atribución exclusiva del Perito la elección de las técnicas

psicodiagnósticas que utilizará para el examen pericial. Aún cuando se hayan

propuesto dentro de los puntos periciales la administración de una técnica en

particular, queda a juicio del Experto que ha sido nombrado por el Juez, la

aplicación o no de la misma. Ello por cuanto, es el Perito quien posee los

conocimientos técnicos necesarios para ponderar la correspondencia o no en la

aplicación de una técnica según los aspectos que se le han solicitado que evalúe.

No obstante, cuando el Perito desestime la utilización de una técnica que le ha sido

propuesta como punto pericial, al responder el mismo debe especificar los

fundamentos que avalen tal decisión, puesto que de otro modo estaría

incumpliendo con su labor al no responder un punto pericial.

Hay una gran variedad de técnicas psicodiagnósticas con validación

científica suficiente que acreditan su utilización en un proceso pericial; ello propicia

que actualmente el Experto pueda elegir en un amplio espectro cuáles son las más

adecuadas al examen que debe realizar, debiéndose -en tal sentido- considerar

como válido el criterio utilizado por éste dentro del proceso judicial.

Siempre las áreas de la personalidad a ser investigadas serán la directriz que

le indique al Perito el tipo de técnicas que habrá de aplicar. Debiendo también

tener en cuenta en la elección la edad, la etapa vital por la que atraviesa el peritado

y hasta su nivel socio-educacional.

46
Así, la elección podrá definir la administración de tests gráficos (Vg. Test

Guestáltico Visomotor de Lauretta Bender; Dibujo de la Figura Humana; Casa-

Árbol-Persona; Dibujo de la Familia, Test de la Pareja; Dibujo de la Persona Bajo la

Lluvia; etc.); técnicas verbales (Vg. Cuestionario Desiderativo; Test de Frases

Incompletas de Rotter, Test de Frases Incompletas de Sacks; Test de Asociación de

Palabras de Jung; etc.); tests de inteligencia (Test de Raven; Test de Dominó; Test

de Weschler; etc.); técnicas proyectivas profundas (Vg. Test de Apercepción

Temática; Test de Relaciones Objetales de Phillipson; Psicodiagnóstico de

Rorschach; etc.); u otras técnicas menos difundidas pero de un gran valor

diagnóstico como ser el Test de los Colores de Max Lüscher, el TOP 8 (Escala de 8

ítems para los Resultados del Tratamiento del Trastorno de Stress Postraumático),

el Test de Toulouse, el Test de Deterioro Mental de Crocq y Leborgne, el Test de

Wartegg; el MIPS (Un Millón de Personalidades), el DTS (Escala de Trauma de

Davidson), la Escala de Beck; etc.

Al determinar el Perito la batería de técnicas psicodiagnósticas que habrá de

utilizar, también deberá pautar probamente el orden que seguirá en la

administración de las mismas, siendo ello de suma importancia; ya que como es

sabido en todo proceso psicodiagnóstico deben implementarse en un primer

tiempo técnicas estructuradas y luego el material más desestructurado.

47
Es importante destacar que todas las notas tomadas durante las entrevistas

y todos los protocolos, deben ser firmados por la persona evaluada (aclarando la

firma y haciendo constar el número de documento nacional de identidad); ya que

ello otorga valor documental a tales elementos; además de que en el acto

signatario el sujeto da prueba del consentimiento prestado para su evaluación, así

como también de la autenticidad de dichos instrumentos.

Criterios de aplicación en el proceso pericial

La reconocida especialista en técnicas de exploración psicológica, Dra.

Zanequelli, expone “Las peritaciones psicológicas son en realidad

psicodiagnósticos aplicados al ámbito judicial, por lo tanto para poder hablar de

ellas primero es necesario explicar que es un psicodiagnóstico.” (Psicodiagnóstico.

Nuevas formulaciones, ECUA, Bs. As., 1999).

En relación a ello, explica la autora que “El psicodiagnóstico es un proceso

científico mediante el cual se construye el perfil de personalidad individual.”; y

como todo proceso tiene diferentes momentos que se deben cumplir para alcanzar

el objetivo. “Los momentos son los instrumentos que le brinda la psicología clínica,

y ellos son la entrevista, y la administración de las técnicas (…)”, las cuales se deben

seleccionar según el caso particular, y aplicando los criterios de elección, como son:

48
edad, sexo, nivel intelectual, problemática, motivo del estudio, etc.

Pero, siempre se deberá considerar que “Aunque hablemos de que el

proceso psicodiagnóstico consta de una serie de pasos (y estos de hecho se

realizan), nunca se puede afirmar que uno va primero y otro va después de una

manera mecánica, fija e inamovible. Todo depende de muchas razones.” (Nuevas

aportaciones al psicodiagnóstico clínico, García Arzeno, Nueva Vision, Bs. As.,

2007).

En la fase de “Planificación del peritaje” “se debe organizar el procedimiento

del peritaje, partiendo de la información sobre el caso, la demanda del peritaje y la

información obtenida en la entrevista inicial con el sujeto. Esta primera entrevista

es imprescindible para analizar la versión que el sujeto da de los hechos, su nivel

sociocultural y de comprensión, el grado de colaboración que muestra, etc. Esta

información permite seleccionar el modelo más adecuado de evaluación en función

del caso y, a su vez, el tipo de pruebas psicológicas más idóneas para ese sujeto.

Es en esta fase donde el perito debe hacer la hipótesis que en definitiva será lo que

tiene que informar posteriormente”.

“El proceso de aplicación de pruebas está en función del modelo de

evaluación seleccionado previamente, por ejemplo, no se sigue el mismo proceso

para aplicar un test que para realizar un análisis funcional. El proceso seguido debe

49
garantizar la validez interna de la evaluación (lo cual también varía en función del

modelo de evaluación), para ello hay que tener en cuenta:

 Las garantías científicas de las pruebas y su aplicación adecuada, que se

adapten al nivel del sujeto y a sus características.

 Que se apliquen de forma racional en función del tiempo, esto también está

en función del sujeto evaluado: en unos casos más de dos horas de

evaluación, suponen fatiga para unos sujetos, mientras que otros pueden ser

evaluados durante periodos más prolongados.

En resumen, el psicólogo forense debe aplicar las pruebas en un contexto

ambiental, temporal y personal adecuado que garantice la calidad de los datos

obtenidos.” (Sierra, Jimenez, Buela Casal, Psicología Forense. Manual de Técnicas y

Aplicaciones, Ed. Biblioteca Nueva, Madrid, 2006).

Es así como, “La pericia psicología es el informe que brinda el psicólogo,

luego de haber estudiado y analizado el caso a peritar. Se trata de un proceso o

acontecer, que transcurre durante varias horas, y frente a una o varias personas,

que llegan para ser analizadas y evaluadas” (Pericia Psicológica, Talarico Pinto, Ed.

La Rocca, Bs. As., 2003).

Consecuentemente, queda claro que no existe un clise estipulado para la

administración de un proceso psicodiagnóstico con fines periciales; sino que el

50
mismo debe resultar idóneo y válido de la aplicación del criterio experticio

aplicado por el perito.

51
CAPÍTULO III

El informe pericial

Cuestiones de forma y de fondo

Aspectos Generales

 Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, art. 472: Presentación del

Dictamen: “El perito presentará su dictamen por escrito, con copias para las

partes. (…)”.

 Acordada 17/1271952 – Reglamento para la Justicia Nacional, art. 46: Tinta

negra, firma aclarada y número de matrícula.

Partes del Informe Pericial Psicológico

 Encabezado Jurídico (de carácter obligatorio)

Acordada 17/1271952 – Reglamento para la Justicia Nacional, art. 47: “Todo

escrito debe encabezarse con la expresión de su objeto, el nombre de quien

lo presenta, su domicilio constituido y la enunciación precisa de la carátula

del expediente (…)”

 Aspectos Jurídicos – Psicológicos (de carácter obligatorio)

52
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, art. 472: Presentación del

Dictamen: “(…) Contendrá la explicación detallada de las operaciones

técnicas realizadas y de los principios científicos en que se funde (…)”

 Aspectos Psicológicos –Jurídicos (de carácter optativo)

Explicación teórico conceptual sobre las directrices consideradas para la

elaboración de las conclusiones.

En ocasiones se puede citar algún autor de referencia y/o jurisprudencia.

Debe prevalecer la idea de que sea sencillo y comprensible.

No debe otorgar al informe el carácter de una monografía o investigación.

 Descripción situacional (de carácter optativo)

Construcción que se realiza a partir del discurso del examinado y siempre

“en relación al mismo”, que refleja una reseña histórica de los hechos,

siguiendo una cronología desde el acontecimiento que motivó el litigio

hasta el estado del sujeto que evaluamos al momento de la pericia.

 Aspectos Psicológicos (de carácter obligatorio)

I.- Identificación del objeto (sujeto) de estudio.

53
 Datos personales del examinado

 Nombre y Apellido

 Número de Documento

 Edad

 Fecha de nacimiento

 Estado civil

 Nivel de Instrucción

 Domicilio

 Otros

II.- Especificación de los aspectos fenomenológicos observados durante el

examen.

 Actitud general del examinado

Colaboración / Reticencia

Verborragia / Pobreza discursiva

Cambios en la tonalidad de la voz

Lenguaje pre-verbal

54
Ansiedad / Angustia

Estados emocionales disruptivos e incontrolables

Otros

III.- Detalle del estado psicológico del examinado

 Aspecto semiológico

Orientación témporo-espacial

Estado de las funciones psíquicas superiores

(Conciencia, atención, concentración, percepción, memoria,

inteligencia, afectividad)

 Características generales de personalidad (Primero los aspectos más

sanos o conservados y luego los afectados)

Fortaleza yoica

Funcionamiento de los mecanismos defensivos

Rasgos prevalentes

55
Modalidad vincular

Otros

 Sintomatología actual

 Conclusiones – Respuesta los puntos periciales (de carácter obligatorio)

Individualización de la Parte a quien se responde

Individualización y transcripción del punto pericial

Individualización de la respuesta al punto pericial correspondiente

La redacción debe ser clara y concreta en relación a lo que el punto

interrogue.

Confección del informe pericial

El informe pericial se adjuntará al expediente pasando a ser parte integrante

del mismo, ya que la pericia es un medio de prueba en el proceso judicial, dado

que así se establece en los Códigos Procesales. Debido a ello, es que el mismo

debe cumplimentar con requisitos indispensables en su confección.

56
El camino que ha de haber recorrido el experto hasta llegar al momento de

la redacción de su informe, es largo y complejo; y en todos los casos su sapiencia

profesional debe ser enmarcada por las normas que rigen el proceso jurídico.

Es así como, en primer término, el perito deberá titular su informe (como así

también todos los demás escrito que presente), utilizándose generalmente títulos

tales como: PERITO PSICOLOGO ELEVA INFORME PERICIAL, INFORME PERICIAL, SE

ELEVA INFORME, PERITO ELEVA INFORME, PERITO PRESENTA INFORME PERICIAL,

etc. Cualquier título elegido resultará apropiado en tanto identifique

específicamente el contenido del escrito que se está presentando. Luego, y en

todos los casos, el encabezamiento del Informe deber estar dirigido al funcionario

que lo requirió.

A continuación deberá redactarse el exordio o presentación, en el cual se

consignan los siguientes datos y en el orden que aquí se enuncian: nombre y

apellido completos del perito, profesión del mismo, tipo y número de matrícula

profesional, domicilio legal constituido, designación de su función, número de

expediente del caso, y caratula del expediente.

Así también, debe detallase pormenorizadamente la modalidad y técnicas

científicas que condujeron a las conclusiones arribadas; consecuentemente con lo

57
establecido por los Códigos Procesales “Contendrá la explicación detallada de las

operaciones técnicas realizadas y de los principios científicos en que se funde”.

Todo ello, resultan presupuestos procesales indispensables para que el

Informe Pericial tenga el carácter de prueba, en tanto si no son observados

estrictamente, el Informe será desestimado por no ajustarse a las normas legales.

En todos los casos, cuando el proceso psicodiagnóstico fue presenciado por

terceros autorizados, deberá dejarse constancia en el Informe Pericial de tal

circunstancia, explicitando los datos identificatorios de quien haya concurrido a la

evaluación.

Una vez cumplimentados todos los requerimientos mencionados, habrá que

individualizar los datos personales del sujeto que ha sido examinado por el perito,

a saber: nombre y apellido, edad, documento de identidad, domicilio, ocupación,

estado civil, y nivel de instrucción.

Siempre es conveniente realizar, previo a las consideraciones científicas que

se deban informar, una breve reseña del caso; en donde en pocas palabras se

relaten los hechos que han dado lugar al litigio y por tanto a la prueba pericial. Es

importante tomar en consideración que, el relato de lo sucedido no debe contener

apreciaciones y/o hipótesis del perito respecto de lo evaluado, sino simplemente

58
debe transmitir en forma descriptiva los hechos, para lo cual el perito podrá valerse

tanto del discurso del sujeto como de los datos que extraiga del expediente.

En los casos en que el experto encuentre antecedentes de la historia vital del

sujeto (relacionados a la litis) que resulten relevantes, también deberá informarlos

en un apartado específico.

La actitud general del examinado durante el proceso psicodiagnóstico debe

ser comunicada en el Informe. Se explicarán entonces los aspectos conductuales,

como se presentó el sujeto a las entrevistas y cual fue su actitud frente al proceso

de evaluación; y se expondrán toda la fenomenología que el experto haya

observado durante el transcurso de las mismas.

El estado general del examinado al momento de la evaluación también debe

constar en el Informe; consignando la semiología correspondiente (estado de las

funciones psíquicas); detallándose todo lo relacionado con las esferas afectiva,

volitiva e intelectual; con las áreas social, familiar, laboral, etc.; características de

personalidad de base; sintomatología; y posibles relaciones entre el estado que se

observó, con los hechos que dieron motivo al juicio.

En ocasiones, y debido a la complejidad del caso que se evaluó, el perito

debe incluir en su informe un apartado especial en donde expone consideraciones

psicológico-jurídicas; con la finalidad de contextuar y aclarar terminología técnica

59
psicológica -que ha de utilizar seguidamente en sus conclusiones- en su relación

con el proceso judicial en general y con la prueba pericial psicológica en particular.

Finalmente, se volcarán en el Informe las conclusiones, o en otros términos,

las respuestas a los puntos de pericia. Es conveniente que previo a responderlos el

perito transcriba en forma textual el punto pericial al que hace referencia su

respuesta y a continuación explicite la misma, para de este modo evitar

interpretaciones o suposiciones erróneas respecto a la temática que se ha

respondido o no; siendo de fundamental importancia que el Informe Pericial sea

absolutamente fundado, pormenorizado y categórico en relación con las preguntas

que contienen los puntos periciales.

Las conclusiones que se vuelcan en un Informe Pericial, tienen como directriz

los puntos periciales propuestos, en base a los cuales, además, el profesional

seleccionará las técnicas a ser administradas a los fines de responderlos. Cuando se

responden puntos periciales, se debe aquilatar la información obtenida en el

proceso psicodiagnóstico, a fin de salvaguardar los aspectos personales del sujeto

evaluado en tanto los mismos no encuentren relación con los hechos ventilados en

la litis. Es en función de ello que las conclusiones que se vuelcan en un Informe

Pericial, no pueden exceder el límite que marcan los aspectos sobre los que se está

interrogando.

60
La síntesis de las conclusiones del Informe del Perito constituye la respuesta

a los puntos periciales. Congruentemente a esto, el Informe Pericial debe

responder todos los puntos propuestos oportunamente, objetivizando de este

modo los resultados hallados en las respuestas dadas, como sumario de la

evaluación realizada.

Un aspecto particular de todo Informe Pericial es el vocabulario que en él

debe ser utilizado; ya que el mismo debe ser preciso y a la vez estar desprovisto de

tecnicismos psicológicos. Ello por cuanto el Informe está dirigido al Juez, quien no

posee necesariamente conocimientos en la materia. Hay que tomar en cuenta que

un Informe Pericial que resulte ininteligible para un lego pierde su eficacia como

medio de prueba y por tanto puede ser declarada su nulidad.

En definitiva, el Informe Pericial, debe cumplimentar con ciertos requisitos

conducentes a su objetivo principal en el proceso, esto es que dé cuenta de que se

ha realizado una evaluación profunda de la personalidad de la persona examinada,

un pormenorizado detalle del estado psíquico de la misma al momento del examen

pericial, y un diagnóstico taxativo; todo ello con la finalidad de que el Juez pueda

tener un panorama acabado del estado psíquico del periciado.

La integridad de los contenidos vertidos en el Informe Pericial deviene de

indicadores objetivos que el Perito obtiene durante el proceso psicodiagnóstico; y

61
las conclusiones volcadas en el mismo deben ser arribadas a través del exhaustivo

análisis e interpretación de los test de exploración psicológica administrados, la

correlación de las características de personalidad de la persona evaluada, la

sintomatología evidenciada, sus posibles causas y los hechos ventilados en el

expediente. De este modo, el Dictamen emitido por el Experto encontrará sustento

científico en la fundamentación teórica de los test administrados y en la aplicación

práctica de sus conocimientos técnicos-científicos en la evaluación de los

resultados.

Es importante aclarar que, no se deben exponer manifestaciones y/o

observaciones y/o indicadores psicológicos evidenciados en las técnicas

psicodiagnósticas en forma aislada, pues ello conlleva implícitamente

descontextualizar la significación de los mismos dejando de lado la integridad del

sujeto en el que se manifiestan; puesto que la enumeración de tales hechos “per

se” no conduce a diagnóstico alguno, sino más bien se constituye en un recuento

que no podría traducirse en una patología específica y mucho menos

individualizarse en un sujeto.

Tampoco corresponde detallar la forma de análisis que ha conducido al

arribo de las conclusiones pues implicaría la ilustración y enseñanza de conceptos,

técnicas, procedimientos y metodologías particulares de la ciencia que ocupa al

Perito, lo cual no es la meta que persigue el Informe Pericial. El Experto, en la

62
confección del Informe Pericial debe sujetarse al principio de economía procesal,

por cuanto su función es ayudar a la comprensión de los hechos al Juez, y no

proveer información que resulte superflua, confusa o engorrosa.

El instrumento que se eleve tiene que ser completo, y lucir manifiesta su

incuestionable naturaleza científica. Por tanto, debe subordinarse en absoluto a las

premisas requeridas para tenerlo por correcto, haciendo constar en el mismo todos

los aspectos enunciados.

63
CAPITULO IV

La impugnación del informe pericial

Explicación e Impugnación: Procedencia

Art. ° 473 del CPCCN: “Traslado. Explicaciones. Nueva pericia. Del dictamen del

perito se dará traslado a las partes, que se notificarán por cédula. De oficio o a

instancia de cualquiera de ellas, el juez podrá ordenar que el perito dé las

explicaciones que se consideren convenientes, en audiencia o por escrito,

atendiendo a las circunstancias del caso (…). El perito que no concurriere a la

audiencia o no presentare el informe ampliatorio o complementario dentro del

plazo, perderá su derecho a cobrar honorarios, total o parcialmente”.

De los tiempos de la impugnación

 Para impugnar: 5 días hábiles a partir del momento de la notificación

fehaciente.

 Para contestar las impugnaciones: 5 días hábiles a partir del momento de la

notificación fehaciente.

 Otros plazos que a los efectos y en el caso concreto imponga expresamente

el Juez que interviene.

64
Espectro de posibilidades que comprende la impugnación

 Pedido de explicación o aclaración: Solicitud dirigida al experto para que

ilustre sobre la terminología y/o concepto que ha volcado en su informe.

Muchas veces, los peritos en el uso de sus conocimientos científicos, olvidan

que el informe pericial será interpretado por legos en materia psicológica,

utilizando en su redacción vocabulario técnico de muy difícil o imposible

comprensión para quienes no poseen formación específica.

Por tanto, ante una solicitud de esta naturaleza, el experto deberá

precisar cual es el sentido que le ha querido dar a sus manifestaciones,

dilucidando el significado que éstas contienen; lo cual sólo es posible de

hacer utilizando un léxico desprovisto de cientificismo.

 Pedido de ampliación: Las razones que motivan esa solicitud es que el

experto no se ha explayado lo suficiente en las conclusiones a las que

arribara, brindando únicamente datos aislados sin correlato; por lo cual no

se llega a transmitir con exactitud el cuadro psíquico que se ha encontrado.

65
Es así como, en la respuesta que brinde, deberá entonces detallar el modo

en que ha arribado a las conclusiones que volcó.

Generalmente se presentan diagnósticos taxativos pero no se

especifican los signos y síntomas que se han encontrado para su

determinación; o bien el caso contrario, se enuncian una serie de signos y

síntomas sin consignar el diagnóstico diferencial que indican.

 Pedido de impugnación: Lo que cuestiona es la idoneidad de la pericia en

todo o en parte de su contenido y, a veces también, la del perito mismo en

el ejercicio de sus funciones.

Al respecto, circula la creencia errónea de que el perito en su

contestación a una impugnación, debe simplemente reafirmar todo lo que

ha dicho en su informe, negando a su vez lo expresado por la Parte

impugnante.

El perito deberá no solo argumentar sus expresiones, sino más bien

fundamentar ampliamente, psicológica y jurídicamente – cuando

corresponda esto último-.

66
Nulidad de la pericia (art.° 169 CPCCN)

El art.° 473 faculta al juez a declarar la nulidad de la pericia y designar nuevo

perito. Para que ello suceda deben existir causales que demuestren que la pericia

está viciada.

Los extremos para declarar la nulidad son: parcialidad del perito o

inhabilidad jurídica de aquél.

Contestación a los pedidos de aclaración o de impugnación de la pericia

El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación en el art.° 473 especifica:

“Traslado. Explicaciones. Nueva pericia. Del dictamen del perito se dará traslado a

las partes, que se notificarán por cédula. De oficio o a instancia de cualquiera de

ellas, el juez podrá ordenar que el perito de las explicaciones que se consideren

convenientes, en audiencia o por escrito, atendiendo a las circunstancias del caso.

Si el acto se cumpliere en audiencia y los consultores técnicos estuvieren

presentes, con autorización del juez, podrán observar lo que fuere pertinente; si no

comparecieren esa facultad podrá ser ejercida por los letrados. Si las

explicaciones debieran presentarse por escrito, las observaciones a las dadas por el

perito podrán ser formuladas por los consultores técnicos o, en su defecto, por las

67
partes dentro del quinto día de notificadas por ministerio de la ley. La falta de

impugnaciones o pedido de explicaciones u observaciones a las explicaciones que

diere el perito, no es óbice para que la eficacia probatoria del mismo pueda ser

cuestionada por los letrados hasta la oportunidad de alegar (...) Cuando el juez lo

estimare necesario podrá disponer que se practique otra pericia o se perfeccione o

amplíe la anterior, por el mismo perito u otro de su elección. El perito que no

concurriere a la audiencia o no presentare el informe ampliatorio o

complementario dentro del plazo, perderá su derecho a cobrar honorarios, total o

parcialmente”.

Ello significa que, cuando es presentado el informe pericial en todos los

casos el Juez que interviene en la causa dará traslado del mismo (ordenará su

aviso) a las Partes intervinientes en el litigio.

A partir de que las Partes tomen conocimiento de lo informado (se

notifiquen en forma fehaciente) tendrán 5 días hábiles para proceder en

consecuencia a lo que crean pertinente al respecto de lo informado. Es decir,

podrán decidir si: guardan silencio, o formulan un pedido de explicación y/o

ampliación y/o impugnación. Para el caso en que se realicen tales solicitudes, el

68
perito deberá responderlas dentro del quinto día hábil de haber sido notificado de

ello.

Conforme lo señala el tratado de Derecho Procesal Santiago C. Fassi, las

partes pueden formular impugnaciones a la pericia tanto al contestar el traslado

como después, en el alegato. Cualquiera sea la oportunidad elegida, las

impugnaciones sólo pueden ser analizadas por el juez al tiempo de dictar

sentencia, todo ello sin perjuicio de que –frente a los términos de la impugnación

o aún de oficio, el juez disponga la realización de otra pericia o el

perfeccionamiento de la producida (conf. “Código Procesal Civil y Comercial.

Comentado. Anotado y Concordado”, Ed. Astrea, 1972, T° II, p. 143, N° 1629).

Al hablar de un pedido de aclaración y/o impugnación de la pericia,

técnicamente debe conocerse que el espectro que esto abarca es muy amplio ya

que puede implicar –como se ha detallado anteriormente- un pedido de

explicación o aclaración, una impugnación, o un pedido de ampliación.

Quizás uno de los ejemplos más claros respecto de las solicitudes de

explicación o aclaración específicas, se presenta cuando interrogado el perito

sobre el pronóstico del sujeto, vuelca en su informe como respuesta que el mismo

es de carácter Reservado. Para un profesional de la psicología, resulta obvio el

significado de ello, pero la obviedad se pierde cuando quien lee el informe es una

69
persona ajena a nuestro campo, más aún cuando se trata de alguien con

formación jurídica.

Otros casos frecuentes son aquellos en donde en el informe se mencionan

términos tales como: mecanismos de defensa, esquema corporal, hiperprosexia,

paraprosexia, etc.; sin exponer el significado de los mismos y sus implicancias en el

sujeto.

Distinto es cuando se insta al experto a realizar una ampliación de su

informe pericial. En este marco, la labor del psicólogo requerirá de un trabajo más

exhaustivo de su parte para la contestación de aquellos requerimientos que se le

hagan; no obstante lo cual su buen desempeño y eficacia de la prueba no se

encuentran bajo cuestionamiento.

En cambio, la existencia de una impugnación al dictamen pericial, reviste

mayor análisis en el proceso judicial; puesto que lo que se cuestiona es la

idoneidad de la pericia en todo o en parte de su contenido y, a veces también, la

del perito mismo en el ejercicio de sus funciones.

En estos casos, debe el experto brindar fundamentos psicojurídicos tanto de

sus conclusiones como de su actuar. Ello es, no solo expresar los motivos que

dieron lugar a la conclusiones arribadas, lo que podría ser interpretable como un

neto argumento -carente de cimientos- en donde únicamente se reitera lo

70
manifestado con antelación; sino que es necesario realizar una amplia

fundamentación de éstas. Parafraseando lo referido por el Dr. Carrió -en relación a

los fallos- “no bastan los fundamentos, sino que es menester que los

fundamentos estén a su vez fundados”. De igual modo, acontece con las

manifestaciones vertidas por un perito: “deben contener fundados fundamentos”.

Además, es necesario que los “fundados fundamentos” sean de genuina aplicación

a la especie que resuelve, porque de lo contrario, estaríamos en presencia de una

aparente fundamentación, absolutamente inaplicable a la cuestión que dirime. De

otro modo, incurriría en una conducta que podría ser interpretable como un

incumplimiento de los deberes.

Todos los fundamentos brindados deben ser idóneos en materia

psicológica y jurídica, para que puedan sostenerse como razonamiento judicial

válido; por cuanto la Pericia Psicológica es una prueba dentro del proceso judicial.

Por otra parte, existe la posibilidad de que el juez ordene que se practique

una nueva pericia por otro experto. Ello, excepcionalmente sucede cuando se

declara la Nulidad de la pericia llevada a cabo.

Según Arazi-Rojas (en Código Procesal Civil y Comercial de la Nación,

Comentado, Anto. Y Concordado, T° II, pág. 516 y 517) “Si bien el art.° 473 faculta

al juez a designar nuevo perito, ello requiere que la pericia sea nula, ya sea por

71
estar viciada la voluntad del experto al practicarla o bien por haber sido

inhabilitado para ello”. Tales extremos jurídicos concurren cuando el perito

demuestra parcialidad en su intervención o inhabilidad jurídica para la misma.

La parcialidad del perito se comprueba a la luz del informe cuando en el

mismo se vuelcan apreciaciones personales francamente subjetivas basadas en una

creencia y/o postura que no encuentran un marco científico teórico que las

sostenga.

Las opiniones del experto deben tener como fundamento la instrucción que

el mismo ha recibido como profesional especialista; ante lo cual la designación de

oficio del mismo garantiza su imparcialidad en el proceso.

En tanto la inhabilidad jurídica se constata por la existencia de alguna causal

de recusación.

El Pedido de Nulidad de una pericia, reviste un tema de especial relevancia a

nivel jurídico procesal, puesto que pone en tela de juicio la calidad suficiente que

la prueba presenta; por lo cual se ordena su repetición.

Al respecto el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación en el art.° 169

establece: “Trascendencia de la Nulidad. Ningún acto será declarado nulo si la ley

no prevé expresamente esa sanción. Sin embargo, la nulidad procederá cuando el

72
acto carezca de los requisitos indispensables para la obtención de su finalidad.

No se podrá declarar la nulidad, aún en los casos mencionados en los párrafos

precedentes, si el acto, no obstante su irregularidad, ha logrado la finalidad a que

estaba destinado”.

De ello se desprende que el pedido de nulidad de la pericia procede cuando

queda comprobado que la prueba presentada no alcanzó el fin al que estaba

destinado. En el caso concreto de la pericia psicológica, hay que entender esto en

el sentido de que: o bien no se cumplimentaron los requerimientos técnicos

necesarios que conducen a una conclusión imbuida de rigor científico, como

puede ser, haber incurrido en un error material al momento de administrar las

técnicas psicodiagnósticas; o bien se ha omitido la cumplimentación de pasos

procesales indispensables conducentes a la producción de la prueba pericial

psicológica, o ha vulnerado el Derecho de Defensa en Juicio.

Nuevos puntos periciales

Es frecuente que en las instancias mencionadas, se propongan nuevos

puntos periciales a ser respondidos por el Perito. Pues bien, en todos los casos

resulta improcedente responder nuevos puntos periciales, ya que los Puntos de

Pericia deben ser fijados en la etapa de ofrecimiento de la prueba. Si el Perito

73
contestara los mismos, no sólo incurriría en un error procesal que podría dar lugar

a la anulación jurídica de su Contestación, sino también estaría violando el Secreto

Profesional.

74
SEGUNDA PARTE

EL INFORME PERICIAL

Y SU IMPUGNACIÓN

Modelos de Presentación

75
CAPITULO V

Informes Pseudo-Periciales

76
77
CAPITULO VI

Informe pericial

78
CAPITULO VII

Pseudo Impugnación

79
CAPITULO VIII

Impugnación Técnico Jurídica

80
CAPITULO IX

Impugnación Técnico Psicológica

81
TERCERA PARTE

EJEMPLOS DE INFORME PERICIAL Y

RESPUESTA A LA IMPUGNACION

82
CAPITULO X

Un caso de daño por estafa

PERITO PSICOLOGA ELEVA INFORME.-

Juzgado Nacional de Primera Instancia

En lo Civil N° XX

Uruguay 714, Piso X

Sr. Juez:

María de los Angeles Izcurdia, Dra. en Psicología Social, M.N. 26.368, con domicilio

constituido en xxxx de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y domicilio electronico

xxxxxxxxxxxx, designada Perito Psicóloga; en los autos caratulados “XXXXXX ANA Y OTRO

C/ EMPRESA CONSTRUCTORA Y OTROS S/ DAÑOS Y PERJUICIOS”, Expte. XXXX/07, a V.S.

elevo el presente Informe:

Consideraciones psicológico jurídicas.-

Conforme la tarea encomendada, debe entenderse en el caso que nos

convoca, que lo solicitado es la evaluación de la posible existencia de daño

psíquico en la persona de la Sra. XXXXX Ana.

83
Por tanto, cabe expresar que se conceptualiza al daño psíquico como toda

perturbación, trastorno, enfermedad, síndrome, o disfunción que, a consecuencia

de un hecho traumático sobre la personalidad del individuo, acarrea una

disminución en su capacidad de goce, afectando su relación con los otros y/o con

el medio, sus acciones, etc.; no importando si hay una personalidad predispuesta

para ese daño. No hay medida fija para establecer cuando un hecho se vuelve

dañoso o traumático, sino que esto dependerá de la estructura psíquica de la

persona, es decir cuáles y cuántos son sus recursos psíquicos en el momento vital

en que sobreviene una situación en particular.

Por consiguiente, sólo ciertas experiencias tienen una carga pregnada de

significación en determinadas etapas y circunstancias de la vida; resultando

fundamental ésta diferencia para determinar si un acontecimiento asumirá o no la

calidad de dañoso.

Cuando se comprueba la existencia de un daño psíquico, es menester

determinar la causa que lo ha generado; es decir, señalar la relación causa-efecto

entre un hecho y las secuelas psíquicas que devienen del mismo.

Ahora bien, en la relación de causalidad podría presentarse un factor

predisponente o sobreviniente que se interponga en la misma, y en este caso

hablaríamos de concausalidad, entendiéndose por tal a la condición o circunstancia

84
preexistente, concurrente o sobreviviente, que sin pertenecer a la acción ayuda o

coopera en la producción del resultado.

Detalle de las operaciones técnicas efectuadas.-

Con la finalidad de alcanzar las conclusiones del caso, se ha llevado a cabo un

proceso psicodiagnóstico, el cual se trata de una situación de exanimación, de duración

limitada, realizada por un psicólogo cuyo objetivo es lograr una descripción lo más

profunda y completa posible, de la realidad psíquica actual de la persona examinada.

A tales efectos, se aplican técnicas de exploración psicológica

específicamente seleccionadas según las particularidades del caso. Dichas técnicas,

aportan información sobre distintos aspectos de la estructura y funcionamiento

psíquico del examinado, como por ejemplo: rasgos de personalidad, afectividad,

estilos de afrontamiento de las diversas situaciones, vulnerabilidad, funcionamiento

intelectual, fortalezas y debilidades, como así también mecanismos defensivos.

Cabe señalar que en el caso concreto, la mencionada “selección” contempló

que existía en el Sub Lite documentación que acreditaba la administración previa

de otras técnicas de exploración psicológica, las cuales fueron descartadas para

esta ocasión con el objetivo de evitar contaminación de la producción debido a

aprendizajes propios de la experiencia en la realización de las mismas.

85
Por tanto, se informa que, todo lo especificado en este informe fue

obtenido a través de técnicas de trabajo específicas, a saber: entrevistas discursivas

y otros tests de exploración psicológica.

A través de las entrevistas el examinado provee información desde el plano

de lo consciente: cómo vive cada situación y los recuerdos que tiene de la misma.

Los demás tests psicológicos brindan información en un plano más

profundo de la personalidad; dando cuenta del estado psíquico de la persona

desde el punto de vista afectivo, volitivo e intelectual. Además cómo el examinado

no sabe qué se evalúa con cada test ni cómo se evalúa, es que sus respuestas y su

accionar frente a la tarea a realizar son totalmente libres.

Las técnicas utilizadas para este examen psicológico fueron:

 Entrevista Semidirigida;

 Escala de Sucesos de Vida de Casullo;

 BDI-II Inventario de Depresión de Beck;

 Test del Sí Mismo, en el Pasado, el Presente y el Futuro;

 Test de Deterioro Cognitivo de Crocq Leborgne.

86
Datos personales.-

Nombre y apellido: XXXXX Ana

Edad: 67 años

Fecha de Nacimiento: 2 de Noviembre de 1946

Documento de identidad: XXXXX

Ocupación: Jubilada

Estado civil: Casada

Nivel de Instrucción: Terciario Completo (Psicología Social)

Reseña del caso según los relatos del examinado.-

La señora XXXXX Ana, indica que ha sido estafada por la empresa de

construcciones XXXXX S.A, como consecuencia de la compra de un inmueble en el

año 2007.

En relación a esto, la Sra. XXXXX Ana relata que en la actualidad presenta

estados de tristeza y malestar a partir del hecho de haber comprado el inmueble

antes mencionado, en tanto que el fin de esa transacción era constituir un lugar

junto a su marido para el bienestar de ambos, estado que expresa nunca ha

logrado alcanzar en razón de los vicios ocultos que presentara la propiedad. Así

mismo, la señora XXXXX Ana afirma que se ha visto afectada su situación

87
económica, ya que hasta el día de la fecha continúa invirtiendo en arreglos para la

respectiva vivienda, al igual que su vida social, ya que no siente ganas de ver a sus

amigos. La señora agrega a lo informado, haber tenido que transitar una

operación, estando ya instalada en la vivienda mencionada, la cual complejizó su

recuperación, como consecuencia del mal estado en el que se hallaba la

construcción en aquel momento.

Informó además, que al momento de mudarse a la vivienda se encontraba

en tratamiento psiquiátrico, medicada con antidepresivos; y que a partir de que

comenzaran a evidenciarse las falencias de la construcción, su médico tratante

consideró que debió aumentar la dosis de aquel atento el estado que la sujeto

presentara.

Al día de la fecha, menciona seguir tomando antidepresivos, realizar un

tratamiento psicológico una vez por semana desde Diciembre del año pasado, y

visitar a la psiquiatra cada dos meses, porque no puede solventar económicamente

el tratamiento. Refiere además, dificultad para conciliar el sueño, y no tener ganas

de levantarse por las mañanas.

Actitud general durante el proceso psicodiagnóstico.-

88
La examinada concurre al encuentro en el horario pautado acompañada de

su abogada, quien se retiró previo a comenzar la evaluación.

Se presentó con un aspecto prolijo, alineado y con vestimenta acorde a su

edad, según parámetros culturales y contextuales.

Durante el proceso psicodiagnóstico, se la observó tranquila y predispuesta

a realizar lo que le era requerido. A medida que transcurrió la entrevista, la

examinada manifestó cambios emocionales y posturales, evidenciando signos de

ansiedad y angustia. Asimismo, se pudo observar que la entrevistada, poseía ciertas

dificultades para interpretar algunas de las preguntas o consignas, y debido a esto,

solicitó aclaraciones de la profesional a cargo de la evaluación en reiterados

momentos durante el proceso. Sin embargo, manifestó predisposición a cooperar

brindando la información solicitada, intentando responder a las preguntas

propuestas por la perito.

Datos relevantes de la historia vital.-

La examinada relata provenir de una familia constituida por sus padres

(fallecidos), un hermano (fallecido), una hermana y ella.

Sus padres se separaron cuando ella contaba con 10 años de edad.

Mantiene una fluida relación con su hermana.

89
Cuenta haber estudiado psicología social y magisterio, por lo cual ha tenido

oportunidad antes de jubilarse, de trabajar en colegios tanto en la Argentina, como

en el exterior.

En relación a su núcleo familiar actual, menciona que convive con su esposo,

tiene dos hijas y que privilegia la relación con sus nietos.

Comenta que ha sufrido un estado de depresión, al momento de ingresar en

la etapa vital de la menopausia, provocado por los efectos de los cambios en el

sistema hormonal. Posterior a esto, hacia principios o finales del 2008, fecha que

no recuerda con exactitud, la Sra. XXXXX Ana cuenta que debió ser operada.

Con posterioridad a tales hechos, comenzó un tratamiento psiquiátrico con

la finalidad de estabilizar su estado depresivo.

Cabe señalar que se han registrado indicadores de vivencias traumáticas

ajenas a los eventos que se ventilan en estos actuados. Al respecto, la examinada

informó haber realizado oportunamente tratamiento psicológico.

Estado psíquico general al momento de la evaluación.-

De la evaluación realizada se infiere que la Sra. XXXXX Ana posee una base

de personalidad neurótica; se encuentra orientada respecto del tiempo y espacio,

y que posee un criterio y juicio de realidad conservados. Asimismo, se infiere que

90
su nivel intelectual se encontraría dentro de lo esperable, según su educación y

contexto sociocultural.

Su pensamiento es de curso normal, ya que no presenta distorsiones.

Además, su vocabulario es claro y su lenguaje fluido.

La examinada se expresó con un discurso encuadrado dentro de sus

posibilidades cognitivas, no denotando fallas lógicas sobre aspectos de su vida que

le fueron solicitados a efectos de realizar la labor de evaluación, denotando un

lenguaje adecuado, y su discurso presenta signos de verosimilitud.

Asimismo, se evidenciaron indicadores que dan cuenta de cierto deterioro

cognitivo, el cual podría ser producto del condicionamiento -en razón del estado

emocional- de las funciones psíquicas, destacándose alteradas principalmente las

funciones de atención, memoria, concentración y retención mnésica en general e

inmediata.

Se registraron indicadores de ansiedad, inseguridad, introversión y

dependencia afectiva. Asimismo, se evidenciaron sentimientos de enojo, tristeza,

abatimiento, irritabilidad, infelicidad, amargura, desaliento y pesar; consecuentes al

hecho de autos.

El área socio afectiva se encuentra empobrecida, dando lugar a una apatía

casi constante, sin demasiadas intenciones de generar lazo, retirándose de su

91
entorno social y actividades de ocio. Si bien señala de modo conciente que, puede

sentir un bienestar efímero, únicamente cuando concurre a la iglesia.

Sin embargo, la modalidad de relación con los otros se infiere como limitada

y sucinta, siendo el desgaste emocional y por tanto psíquico el que restringe las

mismas.

La actora evidenció sentimientos negativos respecto de sí misma, la

proyección de su futuro y el mundo. Esto repercute de forma inmediata en su

situación actual, en cuanto a su desempeño cotidiano el cual se ve interferido por

su estado anímico. Las dificultades que tendría para alcanzar la estabilidad que

desea, serían fuente de intensa ansiedad, incertidumbre y angustia.

En relación a la esfera volitiva, se infieren serias dificultades para proyectarse

hacia el futuro, el cual sería de modo desesperanzado. Esto se expresaría en

relación a la dificultad actual que presenta para mantener sus relaciones personales

y actividades cotidianas.

Concluyendo, de lo evaluado se infiere que la vivencia subjetiva de perjuicio

provocada por el hecho que se debate, habría reactualizado en la sujeto

sentimientos de tristeza, reforzando el cuadro que presentara previamente y

reactivando sintomatología preexistente.

Conclusiones – respuesta a los puntos de pericia.-

92
Primer Punto de Pericia: Determínese si la coactora presenta un cuadro

psicopatológico a causa de la compra del inmueble.

Respuesta: A partir del examen realizado, se puede inferir que la Sra. XXXXX Ana

presentaría una afectación psíquica compatible con la figura de daño psíquico.

Segundo Punto de Pericia: En caso de resultar positiva la respuesta previa,

establézcase diagnóstico del paciente.

Respuesta: El estado presentado por la sujeto resultaría compatible con cuadro

depresivo moderado.

Tercer Punto de Pericia: Informará si la coactora sufre ataques de pánico,

angustia, fobias como consecuencia de la compra del inmueble.

Respuesta: De lo evaluado, se infiere el padecimiento de estados de angustia

concomitantes a la vivencia de frustración generada por el estado del inmueble

adquirido.

Cuarto Punto de Pericia: Informará si las secuelas y/o daño psíquico,

comprometen o afectaron en su momento su vida laboral, de pareja, y/o de

relación, y/o deportiva, y/o su calidad de vida, su estado actual.

93
Respuesta: A más de lo especificado ut-supra, debe agregarse que de lo evaluado

se infiere que la compra del inmueble resultaba un proyecto específicamente de

pareja, en una etapa vital denominada síndrome del nido vacío (época en que los

hijos abandonan el hogar y el matrimonio se vé afectado en cuanto a su dinámica

por la ausencia en la cotidianeidad de los hijos; lo que –idealmente- da lugar a que

se establezcan nuevos modos y vías de comunicación y se planteen nuevos

proyectos individuales y comunes).

Las vivencias generadas en la propiedad debido al estado percibido por la

sujeto de la misma; habrían generado en ella sentimientos de frustración y tristeza,

dado que sintió truncado un proyecto anhelado.

A nivel personal, se evidencian signos de profunda angustia, desesperanza,

visión negativa del futuro, malestar anímico. Como consecuencia de ello se infieren

dificultades para planificar y concretar proyectos.

A nivel social, si bien la examinada informa realizar algunas actividades, no

se constata en su discurso intención de cultivar, o generar lazos sociales. A pesar

de las actividades que la sujeto desarrolla, los vínculos que mantiene se infieren

superficiales en su trato y sentir.

Por tanto, se infiere en la sujeto una disminución en su capacidad de goce a

nivel individual, familiar y social.

94
Quinto Punto de Pericia: Determinará si resulta aconsejable un tratamiento

psicológico en forma perentoria para revertir el cuadro y/o evitar un cuadro más

severo.

Respuesta: Conforme lo expuesto anteriormente se informa que, resultaría

beneficioso para la sujeto la realización de un tratamiento psicoterapéutico de tipo

focalizado con una frecuencia semanal, que brinde un espacio de escucha y

contención al respecto del cuadro psíquico que presenta.

En el mismo sentido se informa que actualmente los honorarios de la

consulta privada oscilan entre $200 y $300 cada sesión psicoterapéutica.

Por otra parte, se sugiere la evaluación psiquiátrica a los efectos de

determinar la necesidad de indicar medicación específica.

Sexto Punto de Pericia: El perito incorporará a las actuaciones todo el material de

testeo para realizar el dictamen.

Respuesta: Resulta de primordial importancia explicar que, la no presentación de

los instrumentos de evaluación (test psicológicos), se FUNDA en el estricto

cumplimiento del deber en el ejercicio de nuestra profesión, resguardando el

Secreto Profesional, el cual está claramente delimitado en la función pericial

95
conforme el derecho que se debate. Por tanto dichos instrumentos, mantienen el

carácter de Reservados.

Tienen dicho los Suscriptos que: “…el Secreto Profesional tiene por fin

proteger un bien: el derecho a la intimidad de la persona, derecho atribuido a los

sujetos por imperio constitucional. En razón de ello, a más de lo que a continuación

se explica, es necesario aclarar que no resulta procedente la presentación de las

entrevistas y protocolos obtenidos durante la batería de test administrada, pues

ello implicaría una Violación del Secreto Profesional (art.° 156 del Código Penal).

Dichos elementos, constituyen instrumentos de evaluación que no deben ser

entregados, manteniendo los mismos el carácter de Reservados, ya que durante la

aplicación y evaluación de la batería psicodiagnóstica, quedan evidenciados

aspectos de la personalidad del sujeto que no solo hacen referencia a los hechos

ventilados en autos. Ergo, su presentación también conllevaría implícita el delito de

Violación del Secreto Profesional. La no presentación de estos instrumentos de

evaluación, se funda en el estricto cumplimiento del deber en el ejercicio de la

profesión (art.° 34. inc. 4 del Código Penal), resguardando el Secreto Profesional.

Esto es así, en razón de que la Ley del Ejercicio Profesional de la Psicología,

específicamente conmina al resguardo del Secreto Profesional (Título III, Art.° 8 de

la Ley N° 23.277) …” (La Psicología en el Campo Jurídico, ECUA, Bs. As. 2012).

96
Al respecto, resulta de suma importancia destacar que el Secreto

Profesional sólo puede ser revelado en casos de excepción. Pues, como se ha

mencionado previamente, durante la administración y evaluación de las técnicas

psicodiagnósticas, quedan expuestos diversos aspectos de la personalidad del

sujeto, los cuales, cuando no son atinentes a los hechos que motivan en autos la

producción de la pericia, deben ser resguardados bajo el más riguroso Secreto

Profesional, el cual sólo puede ser Relevado por expresa orden de V.S. y en caso de

que exista JUSTA CAUSA ( Art.° 34 inc. 3 del Código Penal), razones que no

encuadran en el caso que nos convoca. Por tanto quedando enmarcados dichos

elementos dentro del Secreto Profesional, deviene improcedente su presentación.

Séptimo Punto de Pericia: Grado o porcentaje de incapacidad psiquiátrica o

psicológica sufrida por la victima

Respuesta: Conforme lo evaluado, se informa que el cuadro -consecuente al hecho

de autos- presentado por la Sra. XXXXX Ana se correspondería con una Reacción

Vivencial Anormal, de Grado II, con un porcentaje de Incapacidad Psíquica del 10%

según el Baremo Decreto 478/98.

Dígnese V.S. tenerlo presente que,

ES JUSTICIA

97
PERITO PSICOLOGA RESPONDE IMPUGNACIÓN.-

Juzgado Nacional de Primera Instancia

En lo Civil N° XX

Uruguay 714, Piso X

Sr. Juez:

María de los Angeles Izcurdia, Dra. en Psicología Social, M.N. 26.368, con domicilio

constituido en xxxx de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y domicilio electronico

xxxxxxxxxxxx, designada Perito Psicóloga; en los autos caratulados “XXXXXX ANA Y OTRO

C/ EMPRESA CONSTRUCTORA Y OTROS S/ DAÑOS Y PERJUICIOS”, Expte. XXXX/07, a V.S.

respetuosamente digo

I.- Que vengo en legal tiempo y forma, a responder el Pedido de

Impugnación efectuado respecto del Informe Psicológico Pericial presentado

oportunamente.

II- Que no obstante, las aclaraciones que a continuación se efectivizan,

rechazo en un todo por improcedente el Escrito presentado por el Impugnante,

98
ratificando “in integrum” todo lo especificado en el preindicado Dictamente

Pericial.

III.- Que atenta los planteos efectuados por el Requirente se impone señalar

que:

1.- Sorprende en mucho que la Impugnación efectuada haya sido fundada

en un Informe Pericial que oportunamente fue declarado nulo, ya que fácticamente

los argumentos que se sustenten en un “acto que jurídicamente ha sido declarado

nulo” no pueden correr sino la misma suerte.

Aunque, no se desconoce que la finalidad del proceso es alcanzar el

conocimiento de la verdad jurídica objetiva a los efectos de impartir justicia. Y,

como es sabido, “la verdad” en todo su estatuto es una y no otra; y justamente es

aquella que puede ser corroborada a través de la presentación de pruebas (entre

ellas la pericial). Por tanto, deviene obvio que en un proceso judicial donde se

plantean hechos controvertidos, las Partes litigantes presentarán las pruebas que

consideren conducentes a dejar establecida la verdad que sostienen como verdad

jurídica.

2.- Sin perjuicio de ello, se debe aclarar que el informe presentado se

subordina en absoluto a las premisas requeridas para tenerlo por correcto, por

cuanto en el mismo se ha hecho constar todos los aspectos relevantes a los

actuados, tal como se constata a la luz del mismo, a saber: Consideraciones

99
Psicojurídicas, Operaciones técnicas efectuadas, Datos de la examinada, Reseña del

caso según los relatos de la examinada, Actitud general de la examinada durante el

proceso psicodiagnóstico, Datos relevantes de la historia vital; Estado de la

examinada al momento de la evaluación, y Conclusiones – Respuesta a los puntos

de pericia.

Al respecto, cabe señalar que el impugnante objeta que la versión de la

reseña del caso corresponde exclusivamente a los dichos de la examinada, sin

advertir que el mismo Apartado donde se hacen constar tales manifestaciones

“aclara” en su misma denominación que lo que allí consta son los “relatos de la

examinada”. Por lo que la “objeción” resulta inocua a cualquier fin.

En tal sentido, se impone explicar que frente a una “profunda lectura” del

mencionado Apartado, se advierte claramente que no se califican a los dichos de la

Sra. XXXX Ana, sino sólo se los transcribe como dato informativo.

Las conclusiones volcadas en el Informe, devienen del exhaustivo

análisis e interpretación de las técnicas de exploración psicológica

administrados a la peritada, la correlación de sus características de

personalidad, la sintomatología evidenciada, sus posibles causas y concausas,

y los hechos ventilados en autos.

100
3.- Por lo demás, respecto de los protocolos producidos durante el examen,

se deja expresa constancia de que los mismos mantienen el carácter de

Reservados. Ello por cuanto, el Secreto Profesional tiene por fin proteger un bien:

el derecho a la intimidad de la persona, derecho atribuido a los sujetos por imperio

constitucional. En razón de esto, a más de lo que a continuación se puntualiza, no

es posible enunciar en un Informe Pericial todos los contenidos evidenciados en la

aplicación y evaluación del examen psicodiagnóstico pues ello implicaría una

Violación del Secreto Profesional (art.° 156 del Código Penal). Del mismo modo, la

presentación de los protocolos obtenidos durante la batería de test administrada, -

es necesario aclarar- que no resulta procedente, dado que constituyen

instrumentos de evaluación que no deben ser entregados, ya que durante la

aplicación y evaluación de la batería psicodiagnóstica, quedan evidenciados

aspectos de la personalidad del sujeto que no sólo hacen referencia a los hechos

ventilados en autos. Ergo, su presentación también conllevaría implícita el delito de

Violación del Secreto Profesional. La no presentación de estos instrumentos de

evaluación, se funda en el estricto cumplimiento del deber en el ejercicio de la

profesión (art.° 34. inc. 4 del Código Penal), resguardando el Secreto Profesional.

Esto es así, en función de que la Ley del Ejercicio Profesional de la Psicología,

específicamente conmina al resguardo del Secreto Profesional (Título III, Art.° 8 de

la Ley N° 23.277). Resulta de suma importancia destacar que el Secreto Profesional

101
sólo puede ser revelado en casos de excepción. Pues, como se ha mencionado

previamente, durante la administración y evaluación de las técnicas

psicodiagnósticas, quedan expuestos diversos aspectos de la personalidad del

sujeto, los cuales, cuando no son atinentes a los hechos que motivan en autos la

producción de la pericia, deben ser resguardados bajo el más riguroso Secreto

Profesional, el cual sólo puede ser Relevado por expresa orden de V.S. y en caso de

que exista JUSTA CAUSA ( Art.° 34 inc. 3 del Código Penal); o por consentimiento

manifiesto por escrito del sujeto sobre el cual se guarda el Secreto, razones que no

encuadran en el caso que nos convoca. Por tanto quedando enmarcados dichos

elementos dentro del Secreto Profesional, deviene improcedente su presentación.

4.- Se impone resaltar que conforme al C.P.C.C.N, art.° 471, segundo párrafo,

los consultores técnicos, las partes y sus letrados podrían haber presenciado el

proceso psicodiagnóstico llevado a cabo. Habiendo establecido e informado el

Suscripto en el sub-lite con razonable antelación las fechas, horas y lugar para la

realización de la pericia, nadie se presentó en representación de la parte

Impugnante para ejercer este derecho que los asistía. Por ende, la imposibilidad

actual para valorar el material obtenido, deviene de dicha ausencia al proceso

pericial, y de ningún modo es dable atribuirla a nuestro accionar.

5.- Para finalizar, CATEGÓRICAMENTE se rechaza cualquier duda o

cuestionamiento que ponga en tela de juicio el CORRECTO DESEMPEÑO Y

102
BUENA FE que han regido la labor pericial. Es así como, no sólo se ha realizado un

análisis más que científico y corroboración objetiva a través de las técnicas de

exploración psicológica; sino que además resulta absolutamente insoslayable

destacar que el accionar Pericial que desempeñamos, en éste, y en todos los casos,

se ajusta estricta y taxativamente al principio de Buena Fe Objetiva; puesto que en

todo nuestro proceder se patentiza que los principios que nos rigen se atienen

estrictamente a derecho, y de modo indesmentible se demuestra a luz del Sub Lite

que la intervención pericial en autos se inspira y guía por el básico principio de

neutralidad y bajo los presupuesto que imponen imparcialidad, impartialidad e

independencia.

IV.- Por todo lo expuesto devienen absolutamente insostenibles los

cuestionamientos que se plantean en el escrito de impugnación, ya que el mismo

no resiste el más mínimo análisis ni psicológico ni jurídico, siendo que a todas luces

se coteja las descalificaciones asignadas al Informe. Ello, con fuerza de evidencia

muestra que las manifestaciones vertidas en tal escrito de impugnación, no tienen

la relevancia que la Impugnante intenta imprimirle. Consecuentemente, resultan,

absolutamente ilógicos en el marco de nuestro ordenamiento jurídico vigente, los

argumentos esgrimidos por el Impugnante en desmedro de la labor técnica

103
pericial, tal como incontrastablemente, lo corrobora en autos el Dictamen

Impugnado y el presente Responde.

Atenta todo lo manifestado ut-supra a V.S., se solicita:

1) Tenga por contestado en legal plazo el Pedido de Impugnación;

2) Haga lugar en su totalidad al Informe Pericial presentado;

3) Desestime “in totum” por carentes de sustento técnico-psicológico-

jurídico el Escrito, cuyas descalificaciones por el presente se contesta.

Dígnese V.S. tener presente lo expuesto y proveer de conformidad lo

peticionado que,

ES JUSTICIA

104
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