0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
9 vistas1 página
Reconocer y comprender las propias emociones es importante porque permite identificar cómo nos sentimos realmente y tomar decisiones que conduzcan al bienestar. No existen emociones positivas o negativas, sino que cada una cumple una función sana y es importante aceptarlas en lugar de tratar de esconderlas, ya que de lo contrario se pueden acumular experiencias negativas que afecten la salud mental.
Reconocer y comprender las propias emociones es importante porque permite identificar cómo nos sentimos realmente y tomar decisiones que conduzcan al bienestar. No existen emociones positivas o negativas, sino que cada una cumple una función sana y es importante aceptarlas en lugar de tratar de esconderlas, ya que de lo contrario se pueden acumular experiencias negativas que afecten la salud mental.
Reconocer y comprender las propias emociones es importante porque permite identificar cómo nos sentimos realmente y tomar decisiones que conduzcan al bienestar. No existen emociones positivas o negativas, sino que cada una cumple una función sana y es importante aceptarlas en lugar de tratar de esconderlas, ya que de lo contrario se pueden acumular experiencias negativas que afecten la salud mental.
Reconocer o saber mis emociones implica identificar y darle sentido/ significado
a lo que siento y a partir de ahí tomar estrategias / decisiones que nos permitan llegar a una sensación de bienestar. Cuando las personas dicen “Me siento mal” a que se refieren realmente, está enojada, triste o melancólico, según la respuesta debemos tomar decisiones que nos ayuden a sobrellevar de mejor manera nuestros sentimientos. ¿Existen emociones malas o buenas? Para identificar emociones debes tener claro que, no hay emociones positivas o negativas, sino que, cada una de ellas tiene una función sana. Así que simplemente se tienen que entender como lo que son y dejar que hagan su función, aceptarlas y afrontarlas de forma sensata. Muchas veces tratamos de esconder nuestras emociones pensando que son malas porque nos muestran débiles ante los demás, pero lo único que hacemos es acumular malas experiencias que pueden desfavorecer la salud mental.