Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Carné: 201947098.
INTRODUCCIÓN:
Aspectos Generales:
“es un principio de derecho internacional (léase una concepción general de derecho) que
toda violación de un compromiso internacional implica la obligación de reparar de una
forma adecuada”.
Se ha establecido por la doctrina internacionalista que “de acuerdo con la doctrina admitida
comúnmente, la responsabilidad internacional es siempre una relación de Estado a Estado”,
esto es, supone que un Estado dañe a otro Estado y que éste solicite la reparación por el
daño causado.
Los elementos que componen el hecho ilícito (este incumplimiento de la regla de derecho
internacional), según el profesor JIMÉNEZ DE ARÉCHAGA, serían los siguientes:
a) existencia de un acto u omisión que viole una obligación establecida por una norma del
derecho internacional vigente entre el Estado responsable del acto u omisión y el Estado
perjudicado por dicho acto u omisión;
b) dicho acto de carácter ilícito le debe ser imputable al Estado en su calidad de persona
jurídica; y
c) debe haberse producido un perjuicio o daño como consecuencia del acto u omisión
ilícita.
Debemos tener presente que parte importante de la doctrina ha señalado que el daño no es,
necesariamente, un requisito para el surgimiento de la responsabilidad internacional del
Estado, bastando el incumplimiento imputable al Estado, sin que sea necesario que además
se produzca un daño a partir de dicho incumplimiento. Esta fue la tesis del Relator de la
Comisión de Derecho Internacional, Roberto AGO quien en su Segundo Informe sobre la
Responsabilidad de los Estados señaló que sólo dos son los elementos necesarios para
configurar responsabilidad internacional por actos ilícitos: comportamiento atribuible al
Estado como sujeto del Derecho Internacional y la contravención de la norma. A juicio de
la CDI, mantener como un requisito el “daño” forzaría a concluir que toda violación a las
normas internacionales constituye de por sí un daño o perjuicio ya que es evidente que hay
infracciones que no provocan ni daño ni siquiera afectación al honor o dignidad de los
Estados contratantes. En todo caso, el daño sigue siendo un tema relevante, en particular
por sus implicancias en materia de reparaciones.
Esta tesis fue seguida por la Comisión de Derecho Internacional, la cual ha establecido en
el artículo 1° del Proyecto de artículos sobre Responsabilidad de los Estados por hechos
internacionalmente ilícitos que “todo hecho internacionalmente ilícito de un Estado da
lugar a la responsabilidad internacional de este”, determinando como únicos requisitos: la
contravención de la norma y la atribución de esta al Estado. Así el artículo 2 relativo a los
“Elementos del hecho internacionalmente ilícito”, señala: “Hay hecho internacionalmente
ilícito del Estado cuando un comportamiento consistente en una acción u omisión:
La obligación que tienen los Estados de reparar en caso que incurran en un ilícito
internacional se considera como uno de los principios del derecho internacional público en
materia de responsabilidad del Estado. Su condición de principio del Derecho Internacional
y, por tanto, aplicable como fuente de obligaciones, ha sido consagrada por la Justicia
Internacional entre Estados y por la Corte Interamericana de Derechos Humanos:
De esta forma, hoy es evidente y no es materia de discusión, que los Estados están
obligados a reparar las infracciones a las obligaciones internacionales en que concurran.
Dicha obligación es un principio del derecho internacional público19 y una norma acogida
tanto por el sistema contencioso público como por el sistema especializado en derechos
humanos. La Comisión de Derecho Internacional así lo ha entendido y en su proyecto de
artículos sobre Responsabilidad Internacional del Estado por hechos ilícitos (2001),
estableció en su artículo 31:
2. El perjuicio comprende todo daño, tanto material como moral, causado por el hecho
internacionalmente ilícito del Estado.
Reparación
"Es un término genérico que permite describir los diferentes métodos con que cuenta un
Estado para cumplir o liberarse de responsabilidad internacional".
Un Estado cumple con la responsabilidad que le incumbe por la violación de una obligación
internacional, reparando el daño causado".
Modalidades de reparación
1. La restitución
2. La indemnización
3. Satisfacción.
La restitución:
La indemnización:
"Es la forma más usual de reparación por ser el dinero la medida común de las cosas
valiosas. Esta indemnización debe compensar todos los daños que se produzcan a
consecuencia del acto ilícito, incluyendo aquellas utilidades que se dejaron de percibir y
que, en caso de no haberse realizado dicho acto, se hubiera obtenido".
Satisfacción:
Responsabilidad internacional:
Por ello, aunque toda violación de la normativa internacional supone daño -aun moral-, el
resultado lesivo puede desprenderse además de actividades legítimas eventualmente
dañosas y también del riesgo, siempre y cuando su potencial materialización haya sido
objeto de oportuna cobertura preparatoria por vía convencional.
Por consiguiente, la responsabilidad internacional derivará tanto del acto ilícito, es decir,
contrario por ser la norma internacional latamente considerada y de aquellos otros
comportamientos lícitos susceptibles de generar perjuicios para terceros, como de
actividades de alto riesgo para el entorno ecológico de la humanidad, independientes de
ilícito previo alguno y cuya cobertura ha sido convencionalmente acordada.
TEORÍA DE LA FALTA.
Técnicamente, la teoría supone que la comisión de la falta es fácil o posible en tanto que la
realidad es que esa situación no debe ser ni fácil ni posible.
Algunos han considerado que el hecho que constituye la falta no es más que una violación a
un deber internacional, entendido como el deber general de no dañar a los otros,
acercándose con ello a una teoría del riesgo.
Pero Grocio agrega a esta situación el elemento sicológico, es decir, que exista voluntad por
parte del Estado responsable, por lo que no bastaba el nexo causal entre violación y agente,
sino que se necesita que resulte de su libre determinación.
Este artículo toma en cuenta las organizaciones intergubernamentales ya que las mismas
son los sujetos reconocidos del Derecho Internacional.
El Estado, por su naturaleza, actuará siempre por medio de sus agentes o representantes. Se
considera hecho atribuible al Estado el provocado por el comportamiento de cualquiera de
sus órganos, incluso aunque éstos se excedan en sus competencias. También los de las
personas o entidades que, sin ser órganos del Estado, estén facultadas por el Derecho
interno para ejercer atribuciones del poder público y actúen en el ejercicio de dicha
capacidad. Finalmente, el Estado será responsable por los hechos cometidos por
particulares bajo sus instrucciones o control, o si reconoce, ampara o comparte la actuación
de aquéllos.
La ilicitud del acto de un Estado puede excluirse respecto de otro Estado si éste consiente la
acción, o si se trata de una contramedida respecto de otro hecho ilícito cometido por el
segundo Estado contra el primero. También se excluye si se actúa en el marco de la
legítima defensa, recogida en el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas. No
obstante, existen obligaciones de Derecho humanitario y Derecho internacional de los
derechos humanos que deben cumplirse en todo caso, incluso en el ejercicio de la legítima
defensa, como también deben acatarse las normas de ius cogens.
En el segundo caso puede suceder que el funcionario actuando dentro de sus funciones o
arbitrariamente cause daño a otro Estado o a nacionales de otro Estado, por ejemplo dando
trato preferente a ciertos súbditos extranjeros en detrimento de otros, incurriendo en
discriminación, daños causados por soldados o militares en tiempo de paz, detenciones
ilegales, procedimientos aduanales discriminatorios, etc. De opinión que el invocar como
defensa que el funcionario actúa fuera del cumplimiento de sus funciones normales o
abusando de ellas o en contra de instrucciones expresamente recibidas es suficiente porque
ello hará que la responsabilidad internacional deviniera poco menos que ilusoria, pero en
todo caso es necesario que el funcionario o agente en su actuar ante de tal manera que d la
impresión de que lo que está haciendo en alguna forma se relaciona con las funciones
propias de su cargo. ORGANO LEGISLATIVO: Se incluye aquí los actos u omisiones
positivos o negativos de los órganos legislativos al adoptar leyes o emitir resoluciones
contrarias a los compromisos y obligaciones internacionales asumidas por el Estado, o no
adoptando las leyes o no emitiendo las resoluciones necesarias para el cumplimiento de los
compromisos y obligaciones asumidos.
CONCLUSION:
La reparación no debe ser menor ni mayor al perjuicio o daño causado; debe tomar en
cuenta el lucro cesante y pago de intereses cuando proceda; conlleva el restablecer las cosas
a su estado anterior; tiene carácter compensatorio y en ningún caso carácter punitivo.