Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DECLARO que este texto es fruto de mi trabajo personal, que no utilizo ideas,
formulaciones, citas integrales o ilustraciones diversas, extraídas de cualquier fuente,
impresa o electrónica, sin mencionarla de forma explícita en el cuerpo o en la
bibliografía de mi tarea.
Aún recuerdo cuando, la primera vez que fui capaz de recordar mi sueño por la
mañana, salté de la cama y me tiré en la de mis padres para preguntarles porqué había
soñado esto y qué significaba. Todos, y más de pequeños, queremos saber a qué se debe
lo que nos ocurre tanto física como mentalmente. Lógicamente, mis padres no podían
darme una explicación verificada de cuál era el significado de aquello que había soñado,
pero sí lograron que me creyera que mi cerebro, y el de todos, de noche se pone una
película porque se tiene que mantener despierto para poder seguir mandando al resto de
órganos del cuerpo y que, cuando me despertaba con el recuerdo de haber soñado,
significaba que el señor cerebro se había pasado con el volumen de la televisión y mi
mente había sido capaz de entrar la propia película y por eso lo recordaba.
Esta historia funcionó para que no preguntara más hasta que entendí que el
cerebro no se tiene que poner ninguna película para quedarse despierto de noche. Fue
entonces cuando, quise indagar en el porqué de los sueños y en lo que mi mente querría
decirme con ellos, si es que quería decirme algo.
Muchos expertos han investigado a cerca de este hecho, teniendo mucho más
conocimiento que el que tengo yo y pudiendo llevar a cabo experimentos que no están a
mi alcance, como es el caso de Sigmund Freud1, que entiende estos sueños como un
acercamiento del subconsciente a los deseos reprimidos de los individuos. En su teoría
sobre la interpretación de los sueños trata a estos como una vía de acceso al
subconsciente, es decir, a los deseos inconscientes censurados por la mente consciente
debido a su contenido inaceptable o amenazador. Para llegar al significado latente, es
decir, a su simbología, se deben analizar los elementos del sueño, como los símbolos,
imágenes, situaciones… Dentro de estos sueños, encontramos varios mecanismos que
hacen que nuestra mente consciente no saque deseos reprimidos como la represión, la
condensación y el desplazamiento, y salgan a la luz en los sueños. A través entonces de
poder soñar, estos deseos y conflictos pueden salir del inconsciente y el que sueña
puede adquirir más autoconocimiento. Esta teoría ha sido muy revisada y ampliada por
otros muchos enfoques.
Esto último pasa con Carl Jung2 el cual expone que los sueños son
manifestaciones inconscientes con mensajes simbólicos que nos revelan la psique
humana, es decir, consiste en patrones y símbolos arquetípicos compartidos en todas las
1
Freud, S. (2013). La interpretación de los sueños. Ediciones AKAL.
2
Jung, C. G. (1999). Recuerdos, sueños, pensamientos.
culturas. Los sueños nos ayudan a entender la interacción entre el inconsciente personal
de un solo individuo y el inconsciente colectivo. A través de estos sueños, se podría
acceder a partes de la psique humana que no vemos en la conciencia cotidiana,
ayudando a la individualidad de las personas y al crecimiento personal como seres
humanos.
En ambos, vemos la coincidencia de que, para ellos, los sueños nos ayudan a
crecer personalmente y poder entendernos de mejor manera como personas, además de
la referencia clara que hacen ambos a los símbolos que nos aparecen en estos sueños y
que, no tienen un significado propio y directo sino que, tenemos que ser capaces de
analizarlos uno a uno en los diferentes contextos en los que aparecen para tratar de
entenderlos, sin, en muchas ocasiones, triunfo en ello y quedándonos sin saber lo que
nuestro subconsciente quiere decirnos o dejarnos de decir.
Una vez conocemos lo que los expertos como Jung y Freud opinan y analizan de
los sueños, es necesario saber que, nosotros, como individuos también interpretamos
nuestros sueños sin necesidad de saber nada a cerca de ellos o de lo que pueden
significar. Todos en algún momento nos hemos preguntado una mañana al despertar si
lo que acaba de pasar por nuestra cabeza mientras dormíamos habría tenido algún
significado mentalmente hablando para nosotros. Pues bien, es necesario añadir a este
análisis el hecho de que cada individuo desarrolla su propio enfoque para interpretar sus
sueños según su contexto o sus experiencias personales. Esto nos lleva a comentar el
hecho de que todos llevamos el significado de nuestros sueños a lo que deseamos que
suceda en nuestra vida y que aún no se ha dado el caso, es decir, buscamos un reflejo
nuestros deseos más privados y ocultos para darnos esperanza de que suceda o nos
tranquilicemos con lo que nos está sucediendo ahora.