ACTIVIDAD 6: INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS

PRESENTADO POR:

ANGIE DANIELA GAÑAN

ID: 544229

PRESENTADO A:

LAURA PATRICIA ORTIZ

ASIGNATURA

TEORIA PSICOANALITICA

NRC: 29716

CORPORACION UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

PSICOLOGÍA

Noviembre 2021
Introducción

Los sueños en el psicoanálisis son una manera de satisfacer y dejar la rienda suelta a los

deseos del ello a través de manifestaciones oníricas del inconsciente y al yo, a través de

manifestaciones iguales, pero del pre-consciente. Los sueños funcionan como un lienzo en el

cual pintamos nuestros deseos cotidianos, son la continuación de nuestras actividades, el lugar

donde nuestros problemas son resueltos, al menos mientras nos dura la idea onírica.

Freud plantea que los sueños son una realización alucinatoria de deseos y por consecuencia,

una vía privilegiada de acceso al inconsciente, mediante el empleo del método interpretativo

fundado en la asociación libre de los símbolos más importantes del sueño. El texto es

importante ya que Freud expone de forma sistemática su primera teoría sobre el aparato

psíquico (o primera tópica).

Para Freud el soñar es la vida del alma mientras dormimos. Nuestra relación con el mundo, al

que hemos venido sin querer, es tal que no la resistimos ininterrumpidamente, por eso de

tiempo en tiempo buscamos dormir. En ese retiro del mundo, la vida anímica no descansa,

trabaja y produce sueños que persiguen anhelos inconcientes.51 En La interpretación de los

sueños Freud analiza detenidamente el trabajo del sueño y el trabajo de interpretación para

encontrar una fórmula sorprendente que expresa la esencia del sueño: “El sueño es el

cumplimiento (disfrazado) de un deseo (sofocado, reprimido)”52 Todo sueño tiene un

contenido manifiesto y un contenido latente. Lo que el sueño consigue es traducir los

fenómenos oníricos a un modo de expresión primitivo, análogo a la escritura figura jeroglífica

de las lenguas antiguas. El texto consciente del sueño aparece sólo como un acertijo gráfico.
INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS

“Los sueños son el santuario de la creatividad, son el rostro más hermoso y los lugares más

tétricos, las experiencias más excitantes, las palabras menos comprensibles y el horror más

profundo.”

Freud realizó numerosos estudios sobre el inconsciente y llegó a la teoría de “la interpretación

de los sueños” (1900), para explicar el contenido oculto y mencionó “el sueño es la vida regia

del acceso al inconsciente”, según Freud en los sueños planteamos la realidad vivida, esto

tiene que ver con los deseos inconscientes, pues no todo lo que deseamos puede ser cumplido

inmediatamente por las demandas del ello ya que algunas actividades como el matar no son

aceptadas, o tal vez no es el contexto adecuado para realizar X actividad, es por eso que

dentro de su teoría de la interpretación de los seños se maneja la primera tópica del psiquismo

(Yo, Superyó y Ello). Estos entes tienen propiedades únicas en su funcionamiento, formas

compartidas entre ellas y a la vez totalmente diferentes que se entrelazan en la construcción

del ser. El ello son los impulsos de origen filo-genético, algo como impulsos pre-establecidos

por las estructuras orgánicas del ser humano, se cataloga como manifestación del Eros, la

libido (una fuerza de vida) y que está sumergido en el inconsciente desde el nacimiento;

aquellos sucesos de los cuales no estamos al tanto y dejamos suceder en las tinieblas de

nuestra vida mental. El superyó está constituido por impulsos represores no razonados, de

control, impulsos autodestructivos que pertenecen al impulso de muerte, reacciones que se

asemejan al control “paternal” y está construido por la influencia del medio ambiente durante

el crecimiento de la persona. El yo se constituye por el fenómeno de la consciencia y la

búsqueda constante de equilibrio y mediación entre los impulsos del ello, las restricciones del

superyó y la búsqueda constante de placer, es la estructura racional. El yo y el superyó, tienen

características de estar en el consciente, aquellas cosas que tenemos percibidas y vigentes, y

en el preconsciente, área que ha sido desplazada del consciente a un estado semi-inconsciente,

pero que puede recuperar su estado de consciente o quedar inconsciente. 

Freud comenta, que cuando el soñante dice «Mi madre estaba también allí» . Un elemento así

del contenido onírico es entonces comparable a un determinativo de la escritura jeroglífica, no

destinado a la elocución, sino a la aclaración de otro signo. Lo común que justifica la reunión

de las dos personas (vale decir, que la ocasiona) puede estar figurado en el sueño o faltar. Por

lo general, la identificación o la formación de una persona mixta sirven para ahorrarse la

figuración de eso común.

Conclusión.

En conclusión, considero que los sueños son fundamentales para el bienestar de las personas,

pues sin ellos los deseos que no se pueden realizar en un estado de consciencia no serían

satisfechos, y por lo tanto se presentaría un malestar, son un camino indispensable para

cumplir con los objetivos del ello y armonizar el estado psíquico de las personas.

El tema de los sueños es controversial, pues su significado es muy complejo, existes muchas

teorías acerca de los sueños, sin embargo aún no existe teoría alguna que fundamente la

verdadera interpretación de los sueños, pues considero que estos son cambiantes y tienen

distintos significados, digámoslo así no existe un “machote” con el cual guiarte al momento

de hacer una interpretación. Sin embargo las teorías confirman que los sueños se basan en

vivencias propias del individuo y sus deseos más profundos que son censurados por nuestra

conciencia.
Los sueños son representaciones oníricas simbólicamente expuestas por imágenes, de manera

que están conectados con nuestro inconsciente y la realidad que “no queremos aceptar”. Creo

que en realidad no esencialmente es como se plantea que la mayoría de los sueños tienen

contenido sexual, creo que el darle una connotación a cualquier forma semejante a un falo

limita a la interpretación, aunque varían las interpretaciones según sea el pensamiento del

analista.