Está en la página 1de 33

UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE MÉXICO

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD

LICENCIATURA EN ENFERMERÍA

ASIGNATURA: PRACTICA EN PEDIATRÍA

PROCESO DE ATENCION DE ENFERMERIA APLICADO CON


PACIENTE PEDIATRICO CON CRISIS CONVULSIVAS FEBRILES

CONDUCTA DESORGANIZADA DEL LACTANTE R/C


DETERIORO DEL FUNCIONAMIENTO MOTOR/
NEUROCOGNITIVO M/ P MOVIMIENTOS ESPASMÓDICOS,
DESCORRDINADOS E HIPEREXTENSIÓN DE LAS
EXTREMIDADES

ELABORO: EST. L.E. REYES RAMIREZ ROCIO ABIGAIL

ASESOR: MUÑOZ MÁRQUEZ ROSARIO


INDICE

INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………………………

JUSTIFICACION…………………………………………………………………………………

OBJETIVOS………………………………………………………………………………………

METODOLOGIA…………………………………………………………………………………

MARCO TEÓRICO………………………………………………………………………………

PROCESO ENFERMERO………………………………………………………………………

VALORACIÓN……………………………………………………………………………………

DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA………………………………………………………….

PLAN DE CUIDADOS ………………………………………………………………………….

PLAN DE ALTA………………………………………………………………………………….

CONCLUSIONES ……………………………………………………………………………….

GLOSARIO……………………………………………………………………………………….

BIBLIOGRAFIA………………………………………………………………………………….
INTRODUCCION

Las crisis convulsivas son descargas eléctricas neuronales anormales que tienen
manifestaciones clínicas variadas de origen multifactorial y que se asocian a trastornos
clínicos, que dependiendo de su localización se manifiestan con síntomas motores,
sensitivos, autonómicos o de carácter psíquico, con o sin pérdida de conciencia.

Una convulsión se caracteriza por contracciones musculares anormales, generalizadas o


localizadas, tónicas, clónicas, presencia de comportamientos extraños y alteración del
nivel de conciencia, estas afectan a entre un 4-10% de los niños hasta los 16 años, son la
urgencia neurológica más frecuente en las urgencias pediátricas, que si no son tratadas a
tiempo conllevan a producir complicaciones importantes

Las crisis convulsivas en pacientes pediátricos son diferentes a la de los adultos, esto es
debido a que en niños pueden ser causadas por trastornos metabólicos, tóxicos e
infecciosos

En los pacientes pediátricos suelen extenderse solamente unos segundos, esto va a


depender del grado o frecuencia en que estas sucedan, por lo que, no se debe descartar
que pueden durar incluso varios minutos.

Las convulsiones febriles son crisis convulsivas asociadas en muchas ocasiones a


fiebre de origen extracraneal, son las más frecuentes en pediatría. Se presentan en
niños entre los tres meses y los cinco años de edad y, afectan de 3 a 5 % de los
menores, están dependen de la edad y pueden derivar de distintas causas, para el
tratamiento, este varía en función del tipo de convulsión febril que presente el paciente.

El presente trabajo se realizó para conocer la importancia de la utilización del Proceso


Atención de Enfermería en un paciente pediátrico que presenta crisis convulsivas febriles
mediante el cual se podrá detectar los factores de riesgo que existen en el paciente, los
cuidados que se deben tener durante y después de presentar una crisis, priorizando la
necesidad alterada para así brindar una mejor calidad de vida en el estado de salud del
paciente.
JUSTIFICACION

El proceso de atención de enfermería (PAE) es un método que guía las acciones de


enfermería necesarias para brindar cuidados que conllevan a la pronta recuperación del
paciente de una forma racional, lógica y sistemática.

El motivo de la realización del presente trabajo es con el fin de fortalecer, reforzar y


ejecutar de manera correcta los conocimientos previamente adquiridos mediante la
realización del (PAE) podemos brindar un cuidado de manera integral

Para la elaboración del PAE es de suma importancia tomar en cuenta la valoración del
paciente, esto se realizo en base a las 14 necesidades de Virginia Henderson.

En base al padecimiento del paciente es posible realizar previas valoraciones y así


identificar las necesidades reales, potenciales o de riesgo que presente el paciente. Una
vez identificadas las necesidades realizamos los diagnósticos de enfermería los cuales
serán nuestra base para elaborar un plan de cuidados a través del cual podremos brindar
calidad, eficacia y seguridad en los mismos y así mismo lograr que el paciente se sienta
seguro y satisfecho durante la ejecución de dichos procedimientos.

De la misma manera mediante la consulta de este texto les proporcionará un mejor


entendimiento sobre las crisis convulsivas febriles lo cual les permitirá tener un mayor
conocimiento sobre el tema.

Así mismo el presente trabajo contiene una recopilación de información la cual incluye,
patología, definición, fisiopatología, factores de riesgo pronostico, diagnóstico y
tratamiento, con el propósito de conocer más sobre la patología , brindar un cuidados
eficaces así como brindar el apoyo necesario al paciente en base a sus necesidades
OBJETIVOS

Objetivo general

• Aplicar el Proceso de Atención de Enfermería a un paciente pediátrico con


diagnóstico de crisis convulsiva febril que se encuentra hospitalizado en el Hospital
Pediátrico Iztapalapa, con el objetivo de satisfacer las necesidades que presenta
alteradas, y así poder proporcionarle los cuidados correspondientes así como una
atención de calidad al paciente para que mejore sin problema alguno y se
recupere satisfactoriamente.

Objetivos específicos

• Identificar las afecciones que presenta la paciente


• Describir la definición, etiología, fisiopatología, manifestaciones clínicas, métodos
diagnósticos y tratamiento de las crisis convulsivas.
• Identificar las necesidades en el paciente de acuerdo con el modelo de Virginia
Henderson, para así posteriormente realizar los diagnósticos necesarios
orientados a preservar su salud
• Brindar cuidados adecuados de acuerdo con las alteraciones que el paciente
presenta
• Diseñar un plan de cuidados de acuerdo con las necesidades que se encuentran
alteradas
• Brindar los cuidados específicos para evitar posibles complicaciones
• Elaborar un plan de alta, el cual nos permitirá identificar y preparar de forma
anticipada las necesidades de cuidado de la salud del paciente al egreso del
hospital.
METODOLOGIA

Este proceso de atención en enfermería se llevó a cabo dentro del hospital con el
consentimiento y ayuda de la madre

El paciente ingreso con un diagnóstico de crisis convulsivas febriles, por lo cual se debía
estabilizar y mantener en observación por si llegase a presentar una crisis de nuevo.

Posterior a esto realice una valoración clínica, en la anotando los signos vitales obtenidos

Se realizo una entrevista a la madre, para recabar los datos necesarios sobre su hijo

Por medio del diagnostico se logro identificar mediante las 14 necesidades cuales estaban
afectadas, analice los datos e identifique los problemas reales, potenciales o de riesgo.

Posterior a esto procedí a utilizar las taxonomías Nanda, Noc y Nic para priorizar las
necesidades afectadas mediante las cuales es posible mantener el estado de salud del
paciente y una evolución para su pronta recuperación, así como evitar cualquier riesgo
para evitar complicaciones en su recuperación, así mismo poner en observación durante
su estadía en el hospital

Finalmente se realizo un plan de alta donde anote recomendaciones que el paciente debe
seguir ante cualquier sospecha de otra posible crisis.
MARCO TEORICO

El proceso de atención de enfermería (PAE) es un método científico de suma importancia


para el personal enfermero, ya que es la principal herramienta dentro de su ámbito
asistencial, el cual permite brindar cuidados de forma lógica racional y sistemática al
individuo, familiar y comunidad.

El (PAE) es un método sistemático y organizado a través del cual podemos brindar


cuidados de enfermería individualizados e integrales, en donde se interpreta, analiza una
serie de observaciones y es capaz de proponer un plan de acción al respecto que
conllevan la pronta recuperación del paciente, así mismo permite a la persona participar
en su propio cuidado. Garantiza la respuesta a los problemas de salud reales o
potenciales. Ofrece atención individualizada continua y de calidad. Ayuda a identificar
problemas únicos de la persona.

La relación existente entre el modelo conceptual de Virginia Henderson y el Proceso de


atención de enfermería (PAE) radica en la idea de que el modelo de Henderson servirá
como guía fundamental a la hora de llevar al cabo el Proceso, esto servirá para valorar
las necesidades de un individuo a través de un modelo teórico

La estructura correcta para la realización de un Plan de Cuidados es la siguiente:

• Valoración
• Diagnósticos
• Criterios de Resultados
• Intervenciones
• Evaluación

Estas fases consisten en:

• Valoración: es la primera fase del proceso de Enfermería que consiste en la


recogida y organización de los datos que conciernen a la persona, familia y
entorno. Son la base para las decisiones y actuaciones posteriores
• Diagnóstico de Enfermería. Es el juicio o conclusión que se produce como
resultado de la valoración de Enfermería.
• Planificación. Se desarrollan estrategias para prevenir, minimizar o corregir los
problemas, así como para promocionar la Salud.
• Ejecución. Es la realización o puesta en práctica de los cuidados programados.
• Evaluación. Comparar las repuestas de la persona, determinar si se han
conseguido los objetivos establecidos

El desarrollo del Proceso atención enfermero

Hace falta una interacción entre el personal de enfermería y el paciente además de tener
una serie de capacidades:

• Capacidad técnica (manejo de instrumental y aparataje).


• Capacidad intelectual (emitir planes de cuidados eficaces y con fundamento
científico.
• Capacidad de relación (saber mirar, empatía y obtener el mayor número de datos
para valorar).

Las ventajas:

La aplicación del Proceso de Enfermería tiene repercusiones sobre la profesión, el


paciente y sobre la enfermera; profesionalmente, el proceso enfermero define el campo
del ejercicio profesional y contiene las normas de calidad, beneficiando así pues al
paciente, ya que mediante este proceso se garantiza la calidad de los cuidados de
enfermería; para el profesional enfermero se produce un aumento de la satisfacción, así
como de la profesionalidad.

¿QUE SE HACE EN CADA ETAPA DEL PAE?

• Valoración

La valoración es la obtención de datos tanto objetivos como subjetivos, es la recogida de


toda la información que necesitamos del paciente. Las fuentes de información primarias
son: paciente, entrevista, observación, exploración física de enfermería (auscultación,
inspección, palpación, percusión). En esta etapa determinamos el Grado de
dependencia/independencia en la satisfacción de cada una de las 14 necesidades,
propuestas por V. Henderson.

• Diagnóstico

Para determinar qué necesidad está afectada y formular un diagnóstico de enfermería.


Estos diagnósticos pueden ser: Reales, Potenciales y de Salud. Otra formulación para
diagnósticos es la del formato P.E.S (P=problema, E= etología, S=signos y síntomas).

• Planeación

Sirve para la formulación de objetivos de independencia en base a las causas de dificultad


detectadas. Elección del modo de intervención. Determinación de actividades que
implique a la persona en su propio cuidado.

• Ejecución

Ayudar a la persona para mantener la salud, recuperarse de la enfermedad o morir en


forma tranquila. Las intervenciones son personalizadas, dependiendo de los principios
fisiológicos, la edad, la formación cultural, el equilibrio emocional, la capacidad física y
mental de la persona.

• Evaluación

Ayuda a determinar los criterios que indican los niveles de independencia mantenidos y/o
alcanzados a partir de la ejecución. Permite a la persona conseguir su independencia
máxima en la satisfacción de las 14 necesidades lo más rápidamente posible. La
enfermera y la persona deben establecer si el plan ha sido efectivo y si hay algún cambio
en el mismo

VIRGINIA HENDERSON

Virginia Avenel Henderson (30 de noviembre de 1897 – 19 de marzo de 1996) fue una
enfermera, teorista y autora conocida por su Teoría de la necesidad y definió la
enfermería como: “La función única de la enfermera es ayudar al individuo, enfermo o
sano, en la realización de aquellas actividades que contribuyan a la salud o a su
recuperación e incluso en los últimos momentos de su vida que realizaría por sí mismo si
tuviera la fuerza, voluntad o los conocimientos necesarios.

También es conocida como “La primera dama de la enfermería”, “El ruiseñor de la


enfermería moderna”, “La madre de la enfermería moderna” y “La Florence Nightingale
del siglo XX “.

El Modelo de Virginia Henderson parte de la teoría de las necesidades humanas para la


vida y la salud como núcleo central para la actuación enfermera, de acuerdo con este
modelo, la persona es un ser integral, con componentes biológicos, psicológicos,
socioculturales y espirituales que interactúan entre sí y tienden al máximo desarrollo de su
potencia.

El máximo principio de Virginia Henderson para aplicar su modelo teórico a la práctica


consiste en que la enfermería debe ser capaz de fomentar la actividad del paciente para
que éste adquiera su independencia. Respecto al modelo de Virginia Henderson se han
descrito cuatro conceptos en relación con su paradigma:

• Salud

La salud es básica para el funcionamiento del ser humano. El objetivo es que los
individuos recuperen la salud o la mantengan, si tienen la voluntad, fuerza y
conocimientos necesarios. Se considera salud la habilidad del paciente para realizar sin
ayuda las 14 necesidades básicas.

• Persona

Es aquel individuo que necesita ayuda para alcanzar salud e independencia o una muerte
en paz. La persona es una unidad corporal y mental que está constituida por
componentes biológicos, psicológicos, sociales y espirituales.

• Entorno

Para Henderson un individuo sano es capaz de controlar su entorno, pero la enfermedad


puede influir en esta capacidad. El entorno incluye la relación del individuo con la familia.
También incluye la responsabilidad de la comunidad de proveer cuidados.
• Enfermera (cuidados o rol profesional)

La función de enfermería es ayudar al individuo, sano o enfermo, a realizar aquellas


actividades que contribuyen a la salud o a su recuperación (o a una muerte en paz)
actividades que podría realizar sin ayuda si tuviera la fuerza, la voluntad o el conocimiento
necesario, y hacerlo de tal forma que se le ayude a conseguir la independencia lo más
rápido posible.

Henderson establece 14 necesidades básicas que todo ser humano tiene, las cuales
normalmente están cubiertas por un individuo sano y que tiene el suficiente conocimiento
para ello. Cada una de las 14 necesidades constituye el elemento integrador de aspectos
físicos, sociales, psicológicos y espirituales.

Las 14 necesidades fundamentales descritas en el modelo de son:

1. Respirar normalmente.

2. Alimentarse e hidratarse.

3. Eliminar por todas las vías corporales.

4. Moverse y mantener posturas adecuadas.

5. Dormir y descansar.

6. Escoger ropa adecuada, vestirse y desvestirse.

7. Mantener la temperatura corporal.

8. Mantener la higiene y la integridad de la piel.

9. Evitar peligros ambientales y lesionar a otras personas.

10. Comunicarse con los demás para expresar emociones, temores…

11. Vivir de acuerdo con los propios valores y creencias.

12. Ocuparse en algo que su labor tenga un sentido de realización personal


CONVULSIONES FEBRILES

La convulsión febril, se define como una crisis ocasional, que se produce entre los tres
meses y los cinco años de edad, relacionado con la fiebre (≥38 °C), pero sin
datos o causa identificable, se presentan en niños sin historia previa de convulsiones
afebriles, evidencia de infección en sistema nervioso central (SNC) ni presencia de algún
disturbio metabólico.

Las convulsiones febriles generalmente ocurren en las primeras 24 horas del episodio
febril y en el 25% de los casos son la primera manifestación de la enfermedad febril.

La mayoría de los niños presenta en el momento de la convulsión temperaturas entre 38º


y 41º C.

La crisis febril es un cuadro bien delimitado, caracterizado por la aparición de paroxismos


clínicos desencadenados por la elevación de la temperatura corporal originada por un
proceso infectivo extracraneal

CAUSAS MAS FRECUENTES DE LAS CONVUISIONES FEBRILES

VIRALES BACTERIANAS
• Infecciones del tracto respiratorio • Otitis media
superior
• Roseola • Inmunizaciones(MMR, DPT)
• Virus de la influenza tipo A
• Gastroenteritis

EPIDEMIOLOGIA

Constituyen el trastorno convulsivo más frecuente de la infancia. Su incidencia se estima


de un 2 a un 5% de todos los niños menores de cinco años. Son muy raras después de
esta edad y antes de los seis meses, por lo que se dice que la edad media de inicio es de
18 meses y en la mitad de los casos aparecen entre los 12 y los 30 meses.
Suelen presentarse durante el primer día de la fiebre y en su mayoría son generalizadas,
tónico-clónicas y de corta duración (de uno o dos minutos, a veces tan solo de unos
segundos), pero en el 9% de los niños pueden prolongarse por encima de los 15 minutos
y no hay evidencia de que sean más frecuentes coincidiendo con el máximo ascenso de
la temperatura.

El 5% puede evolucionar hacia el estatus febril (crisis de más de 30 minutos de duración


o secuencia de crisis cortas, sin recuperación de la conciencia entre ellas). La exclusión
de una infección del SNC es fundamental, especialmente en estos niños.

Hasta el 24% de los afectados tiene una historia familiar de crisis febriles, y el 4%,
antecedentes familiares de epilepsia. Diversos loci cromosómicos han sido identificadas
como hereditarias y, al analizar a los familiares, se pone de manifiesto un componente
genético que sigue una herencia autosómica dominante, con un patrón de penetrancia
incompleta y más raramente poligénica.

FISIOPATOLOGIA
FACTORES DE RIESGO

Se han encontrado algunos factores que incrementan hasta en 30% el riesgo de


desarrollar convulsiones febriles:

• Temperatura mayor de 38°


• Ser menor de 18 meses de edad
• Tener un familiar (de primer orden) con antecedente de convulsiones febriles
• Estancia en cunero mayor de 30 días
• Retraso psicomotor
• Asistencia a una guardería

Los principales factores desencadenantes de una convulsión febril son: infecciones


virales, anemia por deficiencia de hierro, infecciones bacterianas de las vías
respiratorias altas, gastroenteritis aguda, exantema súbito, otitis media aguda,
infecciones urinarias y reacciones febriles tras la vacunación (difteria, tétanos, tos
ferina y sarampión, entre otras). Uno de los agentes etiológicos es el serotipo 12F de
Streptococcus pneumoniae que no es cubierto por la vacuna 7-neumocócica
conjugada heptavalente.

Los factores genéticos asociados a una convulsión febril incluyen diagnóstico de


epilepsia en la madre, antecedentes previos de convulsión febril en padre o hermanos,
retraso en el desarrollo psicomotor y desequilibrio electrolítico.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

Las Convulsiones febriles se clasifican según sus características clínicas en simples y


complejas.

• Las convulsiones febriles simples, generalizadas se encuentran entre El 70-75%,


duran menos de 15 minutos, no recidivan en 24 horas y no se acompañan de
anomalías neurológicas posteriores, a su vez pueden presentarse como tónico-
clónicas (80%), tónicas (15%) o atónicas, con una duración menos de 5 minutos,
la persistencia de la desviación ocular y el mantener los ojos abiertos es un signo
clínico sugestivo de actividad convulsiva.
• Las convulsiones febriles complejas, atípicas o complicadas son menos, son
focales y/o duran más de 15 minutos y/o recurren en 24 horas y/o presentan
signos neurológicos en el periodo postictal.

Los motivos de ingreso en el hospital son: mal estado general, lactante menor de
12 meses con sospecha de infección del sistema nervioso central, crisis prolongada que
no cede con el tratamiento (más de 30 minutos) o varias recidivas dentro del mismo
proceso febril, y anomalía neurológica proscritica.

DIAGNOSTICO

El diagnóstico es fundamentalmente clínico y está basado en la anamnesis y la


exploración física, las cuales van dirigidas a investigar las características de la convulsión,
la presencia de signos neurológicos o focales y la etiología de la fiebre, para descartar
principalmente una infección del SNC u otras causas asociadas (metabólicas,
traumáticas, etc.).

• Anamnesis

El interrogatorio sistematizado es básico para clasificar el tipo de convulsión y debe incluir


una minuciosa descripción del episodio.

Es importante recoger la información de los padres o, en su defecto, de los familiares o de


otras personas que estuvieran presentes, buscar antecedentes personales de
convulsiones febriles o afebriles, edad de comienzo, número de episodios, enfermedades
previas y actuales, incluyendo las neurológicas o infecciosas y los traumatismos.

Se debe obtener información actualizada del calendario de vacunación y si hay


antecedentes familiares de crisis febriles o de epilepsia, de igual manera se debe verificar
si hubo otros síntomas llamativos antes de comenzar la convulsión.

Preguntar sobre sus características, inicio, si hubo o no pérdida de conciencia, tipo de


movimientos, duración, frecuencia, tiempo de recuperación y recurrencia, para poder
tipificarla en simple o compleja, y los tratamientos recibidos.
• Exploración física

El examen físico irá orientado a poder identificar un posible foco infeccioso y descartar
alteraciones neurológicas previas o producidas por la crisis.

Comenzará con la valoración inicial del estado cardiorrespiratorio y del nivel de


conciencia, así como la búsqueda de signos relacionados con una enfermedad
neuromeníngea, infecciosa o exantemática, como la presencia de erupciones cutáneas,
petequias, signos neurológicos, meníngeos, rigidez de nuca o de hipertensión
intracraneal, trastornos metabólicos, alteraciones hidroelectrolíticas, traumatismos previos
(traumatismo craneoencefálico, hemorragias) o malformaciones, la misma que se
complementará con una exploración general y neurológica detallada.

• Punción lumbar

No está indicada porque el riesgo de que una meningitis bacteriana se presente como una
primera convulsión febril en un niño de 6 a 18 meses es muy baja, si no tiene
enfermedades y está correctamente vacunado, pero si debe realizarse en casos en que
exista sospecha de meningitis (presenta signos meníngeos: rigidez de nuca, Kernig y/o
Brudzinski) o de encefalitis, o si la historia clínica o la exploración física sugieren la
sospecha de una infección del SNC.

Tiene entre 6 y 12 meses y no está vacunado frente a dos de las causas más frecuentes
de meningitis bacteriana en este rango de edad (Haemophilus influenzae tipo b o
Streptococcus pneumoniae) También es una opción si el niño ha sido tratado con
antibióticos, porque pueden enmascarar los signos y síntomas de una meningitis.

• Electroencefalograma

La tasa de encontrar alteraciones en el EEG postictal es baja, pero podría considerarse


cuando en el niño con una CF haya sospecha de patología cerebral.

• Analítica de sangre

No se recomienda la determinación de glucosa, electrolitos séricos (iones, calcio, fósforo,


magnesio) ni hemograma completo de forma habitual en una primera convulsión febril
simple, pero se deberían solicitar cuando haya indicaciones específicas a identificar la
causa de la fiebre.

• Pruebas de neuroimagen

No son necesarias en la evaluación inicial de un niño con una primera convulsión febril
simple, aunque podrían detectar precozmente lesiones cerebrales, como una displasia o
más raramente un absceso o un tumor

Prueba de látex para rotavirus en heces/ análisis de LCR se realiza cuando se sospecha
de posible infección gastrointestinal.

Se debe considerar que existen otros eventos paroxísticos no epilépticos


desencadenados por la fiebre como los síncopes vágales (neurocardiogénico) durante
estados febriles, los estados confusionales transitorios asociados a fiebre elevada
conocidos como delirios febriles, o los escalofríos.

PRONOSTICO

Las convulsiones febriles dependen de la edad en que aparece la primera crisis


termógena, la frecuencia de la recidiva. En niños menores de 1 año, la recurrencia es más
frecuente y a su vez aumenta con el número de convulsiones

En relación con el sexo, la incidencia de presentación de epilepsia es mayor en las niñas


que en los varones. Esto puede deberse a que las niñas presentan convulsiones febriles a
edades más tempranas que los varones, pero así como mueren mayor número de niños
con convulsión febril, existe mayor número de niñas con secuelas.

EL desarrollo de complicaciones es más frecuente en:

• Crisis febriles atípicas.


• Múltiples crisis recurrentes febriles.
• Historia familiar de epilepsia.
• Evidencia de alteración neurológica o de conducta, anterior a la convulsión febril.
• Presencia de enlentecimiento moderado o grave en el EEG 1 O días después de
la convulsión febril inicial o la presencia de paroxismos, siendo de peor pronóstico
el primer caso.

TRATAMIENTO

Para un adecuado tratamiento en esta condición se deben tener en cuenta la


edad del paciente, las recurrencias de las convulsiones, el tiempo de duración y los
antecedentes familiares.

El tratamiento en niños con convulsión febril se divide en dos:

• El administrado en el momento de la convulsión o al poco tiempo de ésta (crítico)


• El profiláctico, el cual puede basarse en tratamiento continuo o intermitente.

En el manejo de la convulsión febril simple, se aconseja administrarlo en niños menores


de 12 meses, en convulsiones complejas a repetición, cuando hay antecedentes
familiares importantes de epilepsia, ante un trastorno neurológico previo o cuando se
presenta un grado de ansiedad elevado entre los familiares del paciente

En el momento de una convulsión, y antes de proceder, es importante considerar la vía


de administración que se tiene, de igual manera se debe determinar qué fármaco se
va a utilizar

Las benzodiacepinas, como el diazepam rectal, 5 mg en niños menores de tres años, 10


mg en niños mayores de tres años, si después de la administración de diazepam rectal la
crisis no cede, se puede administrar diazepam intravenoso, 0,2 a 0,5 mg/kg, hasta una
dosis de 10 mg, en cambio pacientes con riesgo de recurrencia o en convulsiones
complejas, se administran dosis de 0,3 mg/kg de diazepam cada ocho horas por vía oral
durante el tiempo que dure la enfermedad febril.

Si pasados 15 minutos, la crisis no cede, se puede pasar a 20 mg/kg diarios intravenosos


de ácido valproico, en dos dosis, en cinco minutos, de igual manera se debe explicar
a los padres que persiste la posibilidad de presentar crisis cuando suba la
temperatura.

• Tratamiento continuo

El tratamiento continuo se puede llevar a cabo con diferentes fármacos, tales como
ácido valproico, fenobarbital, carbamazepina y fenitoína.

Los medicamentos como la carbamazepina, la fenitoína y los antipiréticos no son


buenos en las recurrencias ni como tratamiento preventivo de un convulsión febril.

El ácido valproico se proporciona a dosis de 30-40 mg/kg al día, repartidos en dos


tomas diarias, pero no es recomendable que el tratamiento dure menos de un año,
así como tampoco que supere los tres a cuatro años, de igual manera es necesario
vigilar algunos efectos colaterales, tales como trombocitopenia, pancreatitis y trastornos
gastrointestinales, entre otros. El ácido valproico presenta interacción con los salicilatos,
por lo que es muy importante manejar la fiebre con acetaminofén.

El fenobarbital se administra en dosis diarias de 5 a 8 mg/kg, que se reparte en dos


tomas. Se destaca por disminuir la recurrencia de las convulsiones de 25 a 50 %, pero
puede producir hiperactividad y reacciones de hipersensibilidad

• Tratamiento intermitente

En el tratamiento intermitente se destaca el uso de diazepam. Los antipiréticos son


útiles para el manejo del episodio febril, pero no para la disminución de las
recidivas y para el manejo de la convulsión. El diazepam se puede administrar en
dosis diarias de 0,1-0,3 mg/kg, repartidas en tres tomas por vía oral, también, se
puede administrar por vía rectal en niños menores de dos años, 5 mg cada 12
horas, y en niños mayores de dos años, 10 mg cada 12 horas. Una de las
desventajas es enmascarar los posibles signos meníngeos por la sedación, de igual
manera produce letargia y somnolencia.

La mayoría de las convulsiones febriles se detienen solas en un par de minutos, pero es


de suma importancia tener en cuenta que se debe:

• Colocar al niño de lado en una superficie blanda y plana, donde no pueda caerse.
• Controlar la duración de la convulsión.
• Mantenerse cerca para observar y calmar al niño.
• Quita los objetos duros o filosos que haya cerca.
• Aflojarle cualquier prenda ajustada o restrictiva.
• No sujetar, ni interferir en los movimientos que este presentando.
• No colocarle nada en la boca( pedazo de manta, o cualquier otro objeto ya que s
se puede lastimar o puede lastimar)

Se debe acudir de inmediato a la unidad hospitalaria más cercana en los siguientes


casos:

• Si se presenta una convulsión febril que dura más de cinco minutos.


• Si se tiene convulsiones reiteradamente.
• La convulsión duró menos de cinco minutos pero no se recupera rápidamente.

CASO CLÍNICO

Lactante H.R. Hombre de 1 año 7 meses fue admitido al Hospital pediátrico Iztapalapa, el
día 23 de julio del año 2022, por haber presentado en la hora previa dos episodios de un
minuto de duración aproximadamente, consistentes en desconexión ambiental, mirada
perdida, arreactivo, hipertonía generalizada, miembros inferiores flexionados con
movimientos musculares involuntarios y bruscos y somnolencia postictal, ambos episodios
cedieron solos.

Dos días antes había comenzado con vómitos y diarrea (deposiciones líquidas
abundantes sin moco y sin sangre) en aproximadamente 8 veces, las cuales persistían al
momento del ingreso.

El lactante se muestra inquieto y presenta fiebre de 38.8 °C.

No tenía antecedentes personales de interés.


Entre sus antecedentes familiares destacaba únicamente un hermano de seis años que
había presentado dos crisis febriles.

En la exploración

Presentaba datos de deshidratación sin alteraciones neurológicas.

Se realizaron hemograma, bioquímica y gasometría venosa, que fueron normales.

En la exploración física únicamente destacaba una leve sequedad de mucosas

Durante el examen físico encontramos:

Peso: 11,5Kg

FC: 109x’

FR: 28x’

T: 36.6 °C.

T/A: 100/ 62

Análisis de laboratorio

Hemograma: Predominio linfocitario.

Electrolitos séricos: Normal.

Reacción inflamatoria en heces: No se observó leucocitos, se observa flora mixta


bacteriana.

Tomografía axial computarizada (TAC): Ausencia de lesiones focalizadas


parenquimales y extra-axiales intracraneales.

Electroencefalograma (EEG): En sueño inducido, de características normales para


edad.

Punción lumbar (PL): No se realizó, por evolución favorable

Prueba de latex: para rotavirus en heces: Positivo

En el coprocultivo se detectó rotavirus. Seguimiento posterior sin presentar nuevas crisis y


con desarrollo psicomotor normal.
Tras la exploración física llevada a cabo y tras realizar diagnóstico diferencial se llega a la
conclusión de que se trata de una convulsión febril asociado a gastroenteritis

Durante su estadía en el hospital se presento una crisis convulsiva, para lo cual se


procedió a estabilizar y dar tratamiento.
INSTRUMENTO DE
VALORACION
DIAGNOSTICOS DE
ENFERMERIA
EJECUCION Y
EVALUACION
PLAN DE
CUIDADOS
PLAN DE ALTA
Paciente que ingresa al Hospital pediátrico Iztapalapa, el día 23 de julio del año 2022, por
haber presentado en la hora previa dos episodios de un minuto de duración
aproximadamente:

El paciente estaba desorientado, mirada perdida, arreactivo ,hipertonía generalizada,


miembros inferiores flexionados con movimientos musculares involuntarios y bruscos y
somnolencia postictal, ambos episodios cedieron solos.

En primer lugar, se estableció el conocido ABC

A: vía respiratoria

B: ventilación

C: circulación la monitorización cardio – respiratoria

Luego se posiciono al niño(a) en decúbito lateral sin forzarlo, administrar oxígeno


mediante una mascarilla con reservorio y posteriormente administración de antipiréticos
para el cuadro febril, y por supuesto, evitar cualquier procedimiento doloroso que pudiese
estresarlo mientras se encuentra convulsionando.

Una vez estabilizando al paciente, se procedió a interrogar a los padres o acompañantes


para terminar de identificar las características de la crisis convulsiva, así como los
antecedentes que se han presentado.

La exploración clínica deberá realizarse únicamente cuando el episodio convulsivo haya


cesado.

Se procedió a realizar una evaluación clínica dirigida a identificar el foco infeccioso el cual
dio positivo a gastroenteritis por rotavirus.

Si el paciente no reincide en la crisis y no presenta factores de riesgo, el personal médico


le dará de alta e indicará un tratamiento específico, por lo que el enfermero o enfermera
debe proceder a educar a los padres o acompañantes del paciente con el fin de
tranquilizarles y procurar el cuidado del mismo.
Durante su estadía en el hospital el paciente presento otra crisis convulsiva se cronometro
el tiempo desde el inicio de la crisis convulsiva, y este fue de 2 minutos, posterior a esto
se inició la administración de fármacos anticonvulsivos de primera línea (Lorazepam 0, 1-
0,2 mg/kg E.V / I.M y Midazolam 0, 2 mg/kg E.V / I.N) por la vía de mayor disponibilidad.

Finalmente, se informó a los padres o acompañantes del paciente pediátrico que a pesar
de la incertidumbre o ansiedad que pueda generarlas convulsiones febriles no
representan una epilepsia, sino al contrario, se trata de un proceso mayormente benigno
en el que las crisis suelen ser únicas y no implican secuelas neurológicas, de igual forma,
recalcar que la mortalidad en este tipo de convulsiones es nula.

De igual manera se proporcionó educación a los padres para que actúen de manera
correcta ante una crisis y acudan al servicio de emergencias en caso de que no cese, al
igual que prevenirles acerca de los riesgos que derivan de la reincidencia de la convulsión
febril y de la posibilidad de que aparezca entre los hermanos del niño que la sufre.
CONCLUSION

Se puede concluir que la convulsión febril se manifiesta en niños con un pico entre los 18
y los 24 meses de edad, para lo cual se establece que las de base más frecuentes que las
ocasionan son por causas virales o bacterianas.
Para ello es de suma importancia promover educación dirigida a los padres y familiares
del paciente, pues muchas veces no le toman la importancia necesaria, pensando que es
solo una simple fiebre,
De la misma manera identificar la causa que está provocando la crisis controlara la salud
del mismo, y la importancia de iniciar el tratamiento para el control de estas.
Es importante tener seguimiento de estos pacientes puesto que son más propuestos a
mayor riesgo de desarrollo de epilepsia, especialmente si tienen historia previa de
convulsiones febriles
La convulsión febril acontece en menores de 6 meses o mayores de 6 años y si se ha
definido como compleja por haber presentado más de una crisis dentro del mismo
proceso febril.
Gracias a la realización del proceso de atención de enfermería fue posible identificar las
necesidades alteradas a partir de las cuales se elaboraron intervenciones.
Se obtuvieron resultados satisfactorios pues el paciente después de 4 días fue dado de
alta a su domicilio por mejoría ya que durante estos días se mantuvo en observación sin
presentar una nueva crisis
Sin duda el PAE es uno de los elementos más importantes que debe realizar el personal
de enfermería pues que su elaboración y ejecución depende de la recuperación o
deterioro del estado de salud del paciente
GLOSARIO

Desorientado
Se refiere a la persona que se muestra confusa y desconcertada ante determinadas situac
iones.
Hipertonía
Alteración que consiste en un incremento del tono cuando se mueven de manera pasiva
los músculos
Somnolencia postictal
Período de tiempo inmediatamente después de una convulsión
Antipiréticos
Fármaco utilizado en el tratamiento de la fiebre
Hipoglucemia
Nivel bajo de Glucosa en la sangre, nivel bajo de azúcar en la sangre
Diselectrolitemias
Alteración en las concentraciones de electrolitos en la sangre, estas suelen producirse en
enfermedades renales o en trastornos de la conducta alimentaria.
Acido valproico
Conocido como valproato o valproato sódico o valproato de magnesio, es un fármaco
antiepiléptico y estabilizador del estado de ánimo
Fenobarbital
Fármaco perteneciente al primer grupo de ansiolíticos, se trata de un barbitúrico con
propiedades hipnóticas (inducen somnolencia y sueño), sedantes y anticonvulsivas o
antiepilépticas
Meningitis bacteriana
Es una enfermedad muy peligrosa que provoca la inflamación de las membranas que
rodean el cerebro y la médula espinal
Disturbio
Es una situación que quiebra la paz y la convivencia de forma temporal.
Auscultación
Consiste en escuchar de manera directa o por medio de instrumentos como el
estetoscopio (o fonendoscopio), el área torácica o del abdomen
Inspección
Método de exploración física que se efectúa por medio de la vista
Palpación
Procedimiento en el que se utiliza la presión de la yema de los dedos para determinar la
consistencia de los tejidos y la extensión de las lesiones.
Percusión
Técnica de exploración física que, mediante pequeños golpes con los dedos de las manos
sobre la superficie corporal del paciente, sirve para delimitar zonas de distinta sonoridad
REFERENCIAS

• Robles, G. A. L., Márquez, M. A. C., Martínez, L. M. C., Calix, I., & Zelaya, S.
(2018). Crisis Convulsivas Febriles: Revisión Integral. Acta Pediátrica
Hondureña, 8(2), 810-818.
• Beltrán Quintero, R. A. Crisis convulsivas febriles. Revista de la Facultad de
Medicina, 5(5).
• Ruiz-García, M. (2015). Convulsiones febriles. Acta pediátrica de México, 36(5),
424-427.
• Cristóbal, J. R., Díaz, Á. E. D., García, A. M., & Rebolledo, F. A. (2003). Las crisis
convulsivas febriles Plasticidad y Restauración Neurológica, 2(2), 153-158.
• Vergara, B. Q. (1989). Tratamiento profilactico de las crisis convulsivas
febriles (Doctoral dissertation, Universitat de València).
• Martínez López, A. L., & Sepulveda López, K. D. R. (2020). Factores de riesgo,
manifestaciones clínicas y terapeútica de las crisis convulsivas febriles (Doctoral
dissertation, Universidad de Guayaquil. Facultad de Ciencias Médicas. Carrera de
Medicina).
• Campos, C., Jaimovich, S., Wigodski, J., & Aedo, V. (2017). Conocimientos y uso
clínico de la metodología enfermera (NANDA, NIC, NOC) en enfermeras/os. Rev
Iberoam Educ Investi Enferm, 7(1), 33-42.
• Lic, A., & Acosta, C. (2009). PROCESO DE ATENCIÓN DE ENFERMERÍA.
• Frómeta Matos, M., Alba Igarza, M., Momblanch García, D., & Hernández Ernesto,
I. (2000). Modo de actuación en proceso de enfermería. Revista Cubana de
Enfermería, 16(2), 101-105.
• Herdman, H., & Kamitsuru, S. (2019). NANDA International. Diagnósticos
enfermeros: definiciones y clasificación. 2018-2020. Elsevier.
• Moorhead, S., Swanson, E., Jphnson, M., & Maas, M. L. (Eds.).
(2018). Clasificación de resultados de enfermería (NOC): medición de resultados
en salud. Elsevier.
• Bulechek, G. M. (2009). Clasificación de intervenciones de enfermería (NIC).
Elsevier Health Sciences.

También podría gustarte