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FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD

ESCUELA PROFESIONAL DE NUTRICIÓN


ESCUELA PROFESIONAL DE PSICOLOGÍA

“El ser humano como ser social”

AUTORES:
Aldana Ayay Isabel Mardeli
Francia López, Karen Elizabeth
Ubillus Carranza, Johana Jesús
ASESOR:

Mg. MORGADO PÉREZ , LUIS ALFREDO

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN:

Salud Integral Humana

LÍNEA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL UNIVERSITARIA:

Trujillo - Perú

2023-II

EL SER HUMANO COMO SER SOCIAL


El ser humano nace , se desarrolla y actúa en un mundo de personas
agrupadas y organizadas socialmente y como tal posee un complejo tejido de
relaciones a nivel social. Por otro lado es de suma importancia para el
desarrollo de su existir como una manera de sobrevivir y a la vez adaptarse
de la misma especie.Tal es el caso de los llamados “primeros vínculos“ que
se implanta en los primeros días del nacimiento entre el niño y su cuidador
primario, y cuya consideracion de estudio reviste en que èstos pueden ser
resistentes en el establecimiento de posteriores vínculos. (Rivera,A.,1998)

Desde que se habla de los inicios del ser humano, se hace alusión que el ser
humano es un ser social, pero es importante tener en cuenta que todo parte
desde la evolución donde uno de los más grandes representantes de ella es
Darwin con su teoría de la evolución biológica por selección natural, pero
también existe otra que no es muy conocida,que considera el apoyo mutuo
como un factor de la evolución, esta es la Teoría del apoyo mutuo de Peter
Kropotkin, donde éste sostiene la existencia de un principio de ayuda mutua
tanto entre miembros de una misma especie, en incluso entre los que no lo
son, para Kropotkin, este principio se sobrepone incluso al principio de la
lucha sobre la vida, mejor conocido como “la ley de la selva” ejemplo, de ello
es la sociabilidad de abejas y hormigas.
Debemos considerar también que Kropotkin considera que el mundo no es
una lucha constante, donde la sociedad como la conocemos, surge de un
contrato social o de un pacto de no agresión, afirma incluso que antes de que
el ser humano exista, la sociedad ya lo hacía, y que la existencia y evolución
del ser humano, se dio gracias a su sociabilidad, el apoyo mutuo que recibió
de otras especies, así como de la convivencia permanente. (Mafla, 2019)

A su vez Aristoteles mencionó que “el ser humano es un ser social por
naturaleza”. Esto se justifica principalmente en una moral que es expresada
en sus acciones a sus semejantes y a su medio, sin los que no podría vivir.
Como ser racional, el ser humano transforma a la naturaleza y la sociedad en
relación a si mismo. El hombre aislado no puede alcanzar un desarrollo
óptimo, es dependiente de su entorno y de ahí la tendencia a agruparse
desde la época de las cavernas. (Sanabria, 2018)
Desde el principio de la vida, un ser humano reside y depende de una familia
para su bienestar, después del nacimiento, el apego directo con la madre es
el primer contacto de fraternidad y supervivencia. Además de ello, en la edad
preescolar comienza una vida social más marcada integrándose a la
sociedad naturalmente desde muy pequeño, ya que incluso la sola relación
con la familia no es suficiente para satisfacer las necesidades sociales del ser
humano. En el transcurso de su vida, la persona va creando subgrupos de
trabajo, ocio y de fraternidad cada vez más extensos. Se vuelve parte de una
red de conexiones que se forma a base de las interrelaciones. Son estas
interacciones las que también cumplen funciones en su vida, como
crecimiento laboral, espiritual, rango social, conexiones amorosas u
monetarias. (Mafla, 2019)

El ser humano también presenta una necesidad de sentirse uno con su


entorno, es parte de un bien psicológico que repercute en su vida. Hay
conciencia de el tiempo que debe de considerar y aportar para con los suyos,
además de ser consciente como parte de la supervivencia la importancia de
relacionarse. Una persona que presenta un sentimiento de soledad en su
vida, es probable que recaiga en depresión o suicidio. Se puede reflejar esto
en países como Japón donde el contacto físico y las relaciones están más
limitadas por las costumbres, es justamente en estos países donde se
presenta una alta tasa de suicidios y depresión. Recalcando la importancia de
relacionarse, como un factor de bienestar mental. Además, se ha demostrado
en pacientes con cáncer, como estos mejoraron cuando tenían el apoyo de
familiares y amigos, a comparación de los pacientes que se aislaron o no
contaban con familiares en su tratamiento. (Florez, 2018)

No obstante, es importante tener en cuenta también que es importante


evidenciar la otra parte, lo que existe detrás, ya que existen también
argumentos que cuestionan la premisa de la temática
Aunque el nacimiento de las redes sociales fue una forma creada para
comunicarnos y convivir, su rápida expansión ha hecho que los otros seres
humanos sean menos indispensables en nuestra vida. Dando incluso mayor
importancia a una conversación que no se mantiene en persona que con una
persona de nuestro entorno. También, las redes han desensibilizado al ser
humano, quien ha perdido empatía con su medio y ante las tragedias que
suceden. Parece que la globalización nos individualizo en lugar de unirnos,
pues cada suceso es visto desde una pantalla como un hecho aparte, y en
una mirada más crítica, con un desinterés hacia el mismo. ( Trijueque, 2016)

El hecho de extraer todo tipo de recursos naturales, sin preocuparnos por la


relación de respeto y cuidado a quien nos provee de todo cuanto
necesitamos y utilizamos: la naturaleza también es una falta de empatía al
entorno. Nuestras relaciones con el medio terminan siendo reflejo de las
relaciones entre nosotros mismos. Si no nos importa lo que le sucede a
nuestro vecino, (si pasa por una situación económica, social o familiar difícil),
menos nos va a competer si se ensucia, destruye o contamina la quebrada, el
parque o bosque que se encuentra cerca de nuestra casa o en nuestro barrio.
(Vásquez, 2017).

Según Aristóteles, el ser humano es naturalmente social, siendo dependiente


de otros seres de su entorno desde el principio de los tiempos para su
permanencia, también pone como ejemplo a las hormigas y a las abejas,
quienes son incluídas como animales políticos que existen socialmente, es
aquí que Hobbes incluye esta última postura en el capítulo XVII del Leviatán
para señalar que esto no es así en la humanidad, pues, los hombres
compiten consciente y determinadamente por el honor y la dignidad,
provocando sentimientos de odio y envidia, teniendo como resultado una
lucha permanente entre los habitantes. Además, es necesario mencionar que
los objetivos que los hombres tienen son propios y no comunes, por lo que
emplean un análisis en donde hallan la forma y medios de alcanzar dichos
objetivos, mientras que, en los animales ocurre algo muy distinto, pues no
utilizan la razón para realizar sus acciones. También, es necesario mencionar
que los hombres pueden modificar sus acciones de acuerdo a sus intereses y
darle la apariencia que decidan darle haciendo uso de la razón. Es entonces,
que estos argumentos nos señalan que el hombre no es un ser social por
naturaleza o porque necesita compañía, sino que, busca mostrar su sabiduría
para sobreponerse sobre otro ser humano que de alguna manera considere
competencia de acuerdo a sus intereses personales, siendo capaz de
defender un bien, buscar medios y medir habilidades, capacidades y fuerza.

En conclusión, al realizar nuestra búsqueda sobre información referente al


tema, del ser humano como un ser social, hallamos mucha más información
que sustenta y valida que más allá de sus limitaciones al interactuar como
puede evidenciarse en la antítesis para algunos individuos,el ser humano ha
subsistido, gracias a su sociabilidad, incluso esta ha sido un factor clave en
su evolución, la sociedad no se ha creado unicamente a base de lucha
constante, sino que se basa en la interacción, en la ayuda mutua, el ser
humano depende de su entorno, y la interacción con este, por ello a manera
de conclusión debemos quedarnos con dos ideas importantes: La sociedad
ha existido incluso antes de que exista el individuo y como nos dice
Aristóteles “El ser humano es un ser social por naturaleza”.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Mafla.D.(2019).EL ANIMAL HUMANO UN SER SOCIAL Y SOLIDARIO.
https://repository.unicatolica.edu.co/bitstream/handle/20.500.12237/1773/ANIM
AL_HUMANO_SER_SOCIAL_SOLIDARIO.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Sanabria González, H. J. (2018). El ser humano, modelo de un ser. Educere, 12(42),


471–480.
https://ve.scielo.org/scielo.php?pid=S1316-49102008000300007&script=sci_arttext
Mafla, D. (2019). EL ANIMAL H
UMANO UN SER SOCIAL Y SOLIDARIO. Repository.unicatolica.edu.co.
https://repository.unicatolica.edu.co/handle/20.500.12237/1773
Flórez-Garay, A., Caro-Pacheco, F. L., Pérez-Ureña, M., Forgiony-Santos, J., &
Rivera-Porras, D. (2018). El afrontamiento y la familia como factores protectores y
terapéuticos en la adherencia al tratamiento de pacientes con cáncer de mama.
Revista AVFT-Archivos Venezolanos de Farmacología Y Terapéutica.
http://bonga.unisimon.edu.co/handle/20.500.12442/2495
Vásquez, M. (2017). La relación del ser humano con su entorno. Dimensión ética y
social. Studiositas, 2(1), 56–60.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2553766
Gallego Trijueque, S. (2016). Redes sociales y desarrollo humano. Barataria.
Revista Castellano-Manchega de Ciencias Sociales, 12, 113–121.
https://doi.org/10.20932/barataria.v0i12.142

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