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Russell

La teoría semántica de Russell es una teoría cuantificacional, que trata de explicar que los nombres propios
funcionan semánticamente como una descripción definida encubierta (es decir, cuando pienso que nombro a
“Agustín”, lo que verdaderamente hago es unir toda una serie de características y propiedades que, juntas, se
me presentan como lo que es “Agustín”), unida por cuantificadores los cuales denotan uno o varios
individuos, por lo que no hay referencia como en la teoría semántica de Frege y al no haber referencia no se
compromete metafísicamente con la existencia de los objetos a los que refieren explícitamente los signos
que expresan los nombres propios. Pero Russell busca mostrar que los hechos negativos efectivamente
tienen sentido y existen, y afirmarlos no implica ninguna contradicción (decir que “los unicornios no
existen” tiene completo sentido y, de hecho, es verdadera). Entonces, lo que lleva a cabo Russell es una
reducción al atomismo lógico a partir de dos problemas fundamentales ya mencionados: problema de
identidad (igual que Frege) y el problema de la verdad de los enunciados que niegan la existencia de lo
denotado. Esto lo hace a través de los siguientes conceptos:
- Proposición: solo tiene dos valores de verdad (V o F). Las proposiciones pueden ser:
a. Particulares:
b. Generales: dentro de este grupo están las proposiciones universales (todos) y las existenciales
(algunos) y, aunque parezca que unas son positivas y otras negativas, Russell dice que en ambas
se niega la existencia. Las proposiciones existenciales no afirman nada relativo al individuo, sino
sólo a la clase o la función.
- Función proposicional: son expresiones que contienen uno o varios elementos constitutivos e
indeterminados y se convierten en proposiciones una vez cambiados todos los elementos
indeterminados por contenido. Su verdad puede ser:
a. Necesaria (tautología): cuando todos los modelos la hacen verdadera
b. Posible (contingencia): cuando hay al menos un modelo que la haga verdadera y al menos uno
que la haga falsa
c. Imposible (contradicción): cuando no hay modelos que la hagan verdadera
- Variable o elemento constitutivo: son los elementos a los que se reduce cualquier función
proposicional (la “x” de Existe un x tal que…)
- Nombre propio: nombran, no describen. La mayoría de casos en los que planteamos nombres, en
realidad son descripciones.
- Descripciones: No son nombres porque los nombres son símbolos simples. Y pueden ser:
a. Ambiguas: un tal y tal (un hombre…) es indeterminado
b. Definidas: el tal y tal (el hombre de la mascara de hierro) es determinado (determinado no quiere
decir que exista)
- Distinción entre la mención y el uso de símbolos
- Hechos y existencia: la existencia es una propiedad de la función proposicional. Mientras que los
hechos pueden ser particulares o generales (como hay proposiciones generales, hay hechos generales
y estos no pueden ser deducidos de particulares)

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