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17 de septiembre de 2023

LAS LEJES ACCIONES DEL DERECHO ROMANO Y EN LA INJUSTICIA


ROMANA.
Las acciones de la ley son el primer sistema procesal romano, tipificado,
formalista y solemne que reglamentó nuevas acciones sobre la ley de las XII
tablas de Roma. El sistema de las acciones de la ley se remonta al origen mismo
de Roma, este sistema procesal estaba recogido por la ley de las XII tablas.
Este sistema implica una cierta forma de procedimiento, en las que las partes
debían pronunciar palabras solemnes, modeladas en los términos de la ley, entre
sus características son las declaraciones solemnes de que el ordenamiento
jurídico prescribe a los particulares para la defensa de su propio derecho.
Uno de los tipos de acciones son las ordinarias, las más habituales por que
otorgan derechos económicos y políticos, como el derecho a votar en la
asamblea, donde cada acción tiene derecho a voto.
En la ley de las XII no estaba regulada la organización política del estado romano
ni la constitución judicial, lo único que queria el legislador era el “Ius Civile”, esta
delimitación tenía como finalidad otorgar seguridad al ciudadano romano.
Las acciones de ley son el primer sistema procesal como lo habíamos dicho
antes, denominan de la ley con referencia a la ley de las XII tablas, que
reglamentó el procedimiento sobre las bases consuetudinarias anteriores y
posiblemente introdujo nuevas acciones.
Las lejis actiones, al ser el primer sistema procesal romano forma el orden de los
juicios privados. Gayo en su comentario dice: “las acciones que usaron los
antiguos se llamaban acciones de la ley, bien por que surgen de las leyes, pues
entonces existían los edictos del pretor que introdujeron muchas acciones, o bien
por que estando acomodadas mismo de la ley, era tan invariables y tan
observadas como ellas”.
Las acciones de ley persistieron en vigor desde los orígenes de roma hasta la
lex aubutia, que dio entrada al procedimiento (per formulam). Este procedimiento
esta caracterizado tanto por ser oral como por solemnidad de sus formas, y
también por la ventaja que se daba a las partes sobre el magistrado. Es rasgo
distintivo del mismo la división del procedimiento en dos fases, in iure y apud
iudicem, desarrollada la primera ante el magistrado y la segunda ante un juez
particular elegido por las partes o designado con intervención del magistrado.

PULIDO LÓPEZ DIEGO

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