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Ensayo sobre la situación económica de

1922 a 1930
VIANCA MAITTE JIMENEZ
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Durante el periodo de 1922 a 1930, la economía de la República Dominicana experimentó


altibajos significativos. Durante la mayor parte de este periodo, la economía dominicana
dependía en gran medida de la producción y exportación de azúcar, que era el principal
motor económico del país.

Sin embargo, durante esos años, la República Dominicana enfrentó desafíos económicos y
políticos que afectaron su estabilidad económica. La caída de los precios internacionales
del azúcar y los desastres naturales, como huracanes y sequías, tuvieron un impacto
negativo en la producción de azúcar y en los ingresos del país.

La economía dominicana apuntaba hacia el exterior, sin embargo, no podía suplir las
necesidades de alimentación de su población. En 1927 las importaciones ascendieron y
con esas ganancias se compraron alimentos.

Cuando Horacio Vásquez llego al poder en 1924 la situación económica del país tenía
muchas dificultades. Lo precios de los artículos de exportación que habían bajado
considerablemente en 1920 no habían logrado recuperarse completamente.

Durante los primeros 5 años del régimen de Vásquez se puede decir que la economía
mejoró, ya que esta se reflejó en los ingresos del estado.

En 1930 cuando Rafael Leónidas Trujillo se juramentaba como presidente de la república,


la crisis mundial que estallo en los estados unidos había entrado en su fase más aguda, ya
que se había extendido en todo el mundo. Haciendo estragos muy profundos en nuestro
país, cuya economía era absolutamente dependiente de la norteamericana.

A finales del 1930 la crisis económica que azotaba el país había llegado al fondo. El
hambre golpeaba fuertemente en los pueblos, el cierre por quiebra de los comercios y de
talleres artesanales era cuestión cotidiana, y así mismo, la pérdida de cosechas que no
encontraban salida.

Además, la inestabilidad política y los cambios de gobierno también afectaron la economía


dominicana. Hubo una falta de continuidad en las políticas económicas y la incertidumbre
política generó un entorno poco favorable para la inversión extranjera y el desarrollo
económico.
En resumen, la situación económica de la República Dominicana de 1922 a 1930 estuvo
marcada por dificultades causadas por la caída de los precios del azúcar, los desastres
naturales y la inestabilidad política. Sin embargo, hacia el final del periodo, se observó una
recuperación gradual impulsada por el aumento de los precios del azúcar y los esfuerzos
para mejorar la productividad y diversificar la economía.

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