El Camino Hacia un Mundo Mejor en el Siglo XXI

Juan Diego Fernández Valderrama

El Informe Delors, también conocido como el Informe de la Comisión Internacional
sobre la Educación para el Siglo XXI, es un documento fundamental que se publicó en
1996 por la UNESCO. Este informe, dirigido por Jacques Delors, ex presidente de la
Comisión Europea, examina y analiza los desafíos y las tendencias en la educación
para el siglo XXI. El informe propone cuatro pilares fundamentales de la educación que
son esenciales para el desarrollo integral de los individuos y las sociedades. Estos
cuatro pilares son: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y aprender a
convivir.
Aprender a conocer, se centra en la importancia del conocimiento y la adquisición de
habilidades cognitivas. En este contexto, la educación no solo se trata de acumular
información, sino de aprender a pensar de manera crítica, a analizar y a resolver
problemas. La idea es que los individuos adquieran habilidades para aprender por sí
mismos a lo largo de toda su vida, lo que les permitirá adaptarse a un mundo en
constante cambio.
Aprender a hacer, se refiere a la importancia de la adquisición de habilidades
prácticas y técnicas. La educación debe preparar a los individuos para enfrentar
desafíos en el mundo laboral y la vida cotidiana. Implica el desarrollo de habilidades
prácticas, creatividad, emprendimiento y la capacidad de aplicar el conocimiento en
situaciones reales.
Aprender a convivir o a vivir juntos, se enfoca en la educación para la ciudadanía
global y la convivencia pacífica. En un mundo cada vez más interconectado, es
esencial que los individuos desarrollen habilidades sociales, la capacidad de
comprender y respetar las diferencias culturales, y la tolerancia hacia la diversidad. La
educación debe promover la paz, la cooperación y la resolución de conflictos de
manera pacífica.
Aprender a ser, destaca la importancia de la educación en el desarrollo personal y
ético de los individuos. La educación no solo debe centrarse en la adquisición de
conocimientos y habilidades, sino también en el desarrollo de la personalidad, los
valores, la autoestima y la capacidad de tomar decisiones éticas. Se busca fomentar la
formación de ciudadanos responsables y comprometidos con la sociedad.
El Informe Delors también enfatiza la importancia de la educación a lo largo de toda la
vida, destacando que el aprendizaje no debe limitarse a la infancia y la juventud, sino
que debe ser un proceso continuo a lo largo de toda la vida. Además, subraya la
importancia de una educación de calidad y accesible para todos, independientemente
de su origen socioeconómico o su ubicación geográfica.
En conclusión, el Informe Delors propone una visión holística de la educación que va
más allá de la transmisión de conocimientos y habilidades. Plantea la educación como
un proceso integral que busca el desarrollo completo de los individuos y la
construcción de sociedades más justas, democráticas y pacíficas. Estos cuatro pilares
de la educación siguen siendo relevantes en la actualidad y continúan influyendo en
las políticas educativas en todo el mundo.
Referencias:
 https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000109590_spa