Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
VERBUM DÓMINI
1. Introducción
De acuerdo con la primera carta de san Pedro en la que retoma el profeta Isaías, “Dios en diálogo” se refiere a
una buena noticia: el Señor por medio de su palabra se comunica hoy con nosotros, su palabra de vida es
anunciada en el Evangelio, es Cristo que permanece para siempre a través del tiempo.
La XII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos fue celebrada en el vaticano del 5 al 26 de
octubre del año 2008 y tuvo como tema “La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia.
Como fruto del trabajo de esta reunión se retoma todo lo que en el sínodo se estudió teniendo en cuenta
documentos tales como: Lineamenta, el Instrumentum laboris, las Relaciones ante y post disceptationem,
textos de las participaciones hechas, leídas y presentadas in scriptis, las Relaciones de los círculos menores y
los debates hechos, el mensaje final dado a los fieles del pueblo de Dios y proposiciones que los padres
consideraron relevantes.
2. Para que nuestra alegría sea perfecta
El papa Benedicto XVI saluda a los fieles citando las palabras de san Juan en su primera carta que contiene el
mensaje del anuncio de la vida eterna junto al Padre y se nos fue manifestado su amor. Al mismo tiempo , el
papa exalta la importancia que menciona el Apóstol de oír, ver, tocar y contemplar la vida, al “Verbo de la
Vida” que se manifiesta en Cristo, participando en el encuentro con su palabra de manera personal y
comunitaria, hallando la vida misma de Dios “Trinidad de Amor” en alegría, pues se ha hecho presente entre
nosotros.
3. De la “Dei Verbum” al Sínodo sobre la Palabra de Dios
El papa relaciona esta Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos con la anterior, en la que el
tema Central fue la Eucaristía como fuente y culmen de la vida y de la misión de la Iglesia, luego afirma que,
hoy la Iglesia se funda en la palabra de Dios y que la fuerza que posee viene de ella, considerando que para la
comunidad eclesial, es un tema muy importante : la Revelación cristiana, la Tradición viva, la Sagrada
Escritura y los estudios bíblicos, se menciona el gran aporte con la promulgación de la Constitución
Dogmática “Dei Verbum” en el Concilio Vaticano II, sobre la divina Revelación que es en plenitud,
Jesucristo y el misterio de su vida, signos, milagros, muerte, resurrección gloriosa y el envío del Espíritu de la
verdad. Lo anterior para reforzar el llamado a retomar el tema de la Palabra Divina frente a las a los nuevos
retos que viven los cristianos.
4. El Sínodo de los obispos sobre la Palabra de Dios
De manera simbólica, durante la XII Asamblea sinodal, los Pastores asistentes al evento colocaron el texto de
la Biblia en el centro para que no se reste relevancia al hecho de que “Dios habla y responde a nuestras
cuestiones”. Sobresale la importancia de vivir en comunidad en un “nosotros” en la Iglesia, profundizando
nuestra relación con la palabra de Dios. Se describe que realizó su intervención un Patriarca ecuménico de
Constantinopla que dio un testimonio muy valioso sobre las Sagradas Escrituras judías, las cuales también
hacen parte de las Sagradas Escrituras de la Iglesia católica. Se resalta particularmente que se anuncia la
palabra de Dios en diversas culturas y lenguas dando cuenta de todo lo que abarca Dios en sus vivencias de fe,
en la riqueza de la humanidad. Conviene subrayar, que el papa hace énfasis en que es imposible no citar al
Apóstol Pablo quien daba cuenta de su actuar por el Evangelio anunciando sin timidez la salvación de Cristo.
5. El prólogo del Evangelio de Juan como guía
El papa enfatiza en que, con los resultados del sínodo de la Exhortación apostólica postsinodal desea que se
unan más estrechamente las Sagradas Escrituras y las personas con la vida de la Iglesia, que impacten en la
interpretación en la liturgia y en la catequesis teniendo en cuenta que la sagrada Biblia no es un texto antiguo,
sino que es Palabra viva hoy. El papa cita el prólogo del Evangelio de Juan que anuncia el inicio de la Vida y
la encarnación del Verbo que habitó entre nosotros, texto bello asegura, fundamento de la fe cristiana y
recalca los momentos en que el apóstol acompañó a nuestro Señor como testigo de la sangre y agua
(sacramentos) que brotaron del pecho del Salvador en su crucifixión y el Espíritu Santo que es necesario
invocar para que nos guíe en el acercamiento y amor hacia la Palabra de Dios.
Primera parte
VERBUM DEI
EL DIOS QUE HABLA
6. Dios en diálogo
El logos, la palabra meditada reflexionada o razonada, se presenta en el prólogo del apóstol Juan para
comunicarnos que desde el principio existía, por eso el evangelista describe que en el principio la palabra
estaba con Dios y era Dios, que por medio de su palabra fueron creadas todas las cosas y que, por el amor
infinito del Padre, (“Dios es amor” manifiesta el Apóstol) se hizo viva entre nosotros, Jesucristo encarnado y
el obrar del Espíritu Santo. El papa lo describe como un principio de carácter absoluto que nos muestra la vida
íntima de Dios. Realismo de la palabra de acuerdo con Colosenses habla de edificar la palabra y la propia vida
cambiando el concepto de realismo.
7. Analogía de la Palabra de Dios
Con esto en mente, los padres sinodales conversan sobre las distintas maneras en que se usa la expresión
“Palabra de Dios”. Ésta se presenta como una sinfonía, como una composición para ser interpretada por una
orquesta expresada de diferentes modos. La primera, como la manera de comunicación que Dios hace de sí
mismo y la segunda con un significado que varía de acuerdo con la reflexión teológica y el uso pastoral. En
efecto, se menciona que el Logos es el “Verbo Eterno”, una palabra divina que nos muestra la historia de la
salvación desde el misterio de su llegada a este mundo, pasión, muerte y resurrección. Enseguida expone el
papa, que también se ha manifestado por medio de los profetas tal como lo dice el Credo-Niceno
Constantinopolitano. Llegados a este punto, el papa da a entender por qué en la Iglesia católica se admira
tanto la Sagrada Escritura ya que en el Antiguo y el Nuevo Testamento está la palabra de Dios legitimada y
divinamente inspirada, no obstante, aclara que la fe cristiana no se reduce a “la religión del Libro” y que debe
ir estrechamente unida, acogida y vivida con la Tradición apostólica. Es significativo desde Benedicto XVI,
que al encontrarnos con la “Palabra de Dios” se haga necesaria una profundización en teología y una
educación a los fieles para que ellos puedan identificar sus diferentes significados y comprender tal sentido en
unidad la persona de Cristo como eje central.
8. Dimensión cósmica de la Palabra
A esto se añade que el papa, habiendo citado no solamente el prólogo de Juan para reconocer el Logos divino
es el Verbo Eterno fundamento de la realidad, además cita la carta a los Colosenses donde se habla de Cristo
como primogénito de toda criatura, dice que todo fue creado por él y para él (1.16) y también nos menciona la
carta a los hebreos donde igualmente, está escrito que por la fe sabemos que la Palabra de Dios configuró el
universo. Así las cosas, el papa menciona que la Palabra para nosotros es liberadora, desde aquella razón
creadora que ordena y guía, las cosas existen por la palabra. Reflexionando sobre algunos de los salmos (-
19,33) invita a conocer el Creador del universo observando la creación que hizo.
9. La creación del hombre
Aquí, Benedicto XVI expresa el lugar que ocupa el hombre en la creación, el ser humano hecho a imagen y
semejanza de Dios, se resalta el valor del cuerpo, su razón y la libertad de la conciencia para obrar
apropiadamente haciendo el bien más allá de cualquier egoísmo.
10. Realismo de la Palabra
En este apartado se habla sobre cómo es importante edificar sobre cimientos sólidos un refugio, la Palabra en
la propia vida dando un giro al concepto de realismo, pues para quien sea realista, reconocerá en el Verbo de
Dios, el fundamento de todo, no quien ponga su esperanza en cosas efímeras.
11. Cristología de la Palabra
El papa subraya que Dios ha hablado a través de sus profetas en el antiguo testamento con Abrahán, Moisés,
el pueblo de Israel y también a través de su Hijo Encarnado, Cristo nacido de una mujer como lo menciona
Gálatas y nombrado heredero de todo como lo referencia en la carta a los Hebreos. Esto para que se considere
como obra de la Santísima Trinidad el Verbo divino que vive entre nosotros y sale al encuentro de cada
persona y con quién lo haga, habrá una nueva perspectiva de la vida, pues no se es la misma persona cuando
se conoce a Cristo, es una experiencia viva que está a nuestro alcance.
12.
El Hijo mismo es “la Palabra” menciona Benedicto XVI, el Logos que no solamente podemos oír, sino que
también tiene una voz y tiene un rostro: se trata de Jesús de Nazaret, el nuevo Adán, un hombre verdadero que
cumple siempre la voluntad del Padre y se manifiesta plenamente en el Misterio Pascual, la misión que
cumple mostrando el amor más grande que se puede dar, que es el amor por sus amigos tal y como lo
menciona el Apóstol san Juan. Jesús desde allí, se convierte en la Palabra de la Nueva y eterna Alianza hoy el
vencedor de la muerte, pues es la luz que brilla en las tinieblas y por el cual podemos vivir en la luz.
13.
De acuerdo con las Sagradas Escrituras, el papa cita a san Pablo que dice que Jesucristo murió por nuestros
pecados y que con su muerte Cristo, atestigua que la palabra de Dios se hizo carne y así fue partícipe de la
historia humana. Amplía, que su resurrección victoriosa tuvo lugar gracias al poder creador de la palabra de
Dios. Él se revela a sí mismo, destruye el mal, potencia el amor trinitario y se convierte en aquella Obra
cumbre del gran autor Creador.
14. Dimensión escatológica de la Palabra de Dios
Con respecto a la Iglesia, el papa comenta que se designa a Jesucristo como la palabra definitiva de Dios,
siendo el culmen de la Revelación como lo cita bellamente san Juan de la Cruz, quien también expresa
admirado esta verdad asegurando que, Dios al darnos a su Único Hijo, su Palabra, nos dio todo en Él y nadie
podría agregar algo más. A lo que, por consiguiente, el Sínodo ha recomendado el procurar que los fieles
tengan una distinción de la palabra de Dios aparte de las revelaciones privadas porque la Revelación
definitiva de Cristo es plena, mientras que la revelación privada, es un apoyo que no puede ir en contra de la
fe y para los fieles puede ser una forma en la que se puede profundizar y comprender mejor el Evangelio hoy.
15. La Palabra de Dios y el Espíritu Santo
El papa continúa su exhortación hablando de la misión del Espíritu Santo con la Palabra divina, acentúa en la
acción del Paráclito y la Sagrada Escritura, y menciona los momentos en que el Espíritu Santo por obra y
gracia se ha hecho presente durante la historia de la Salvación: en la vida de Jesús, y su concepción. Sobre
ello también, la forma en que la palabra de Dios puede llegar a ser expresada con palabras humanas
inspirando a los autores de las Sagradas Escrituras.
16.
Luego, el Espíritu Santo y la vida de la Iglesia, señala el autor de la exhortación, se deben hacer presentes en
los creyentes y en la Escritura, dado que todo esto se hace necesario para poder comprender las palabras del
Señor, especialmente, cuando se proclama la Palabra, cuando se explica a los fieles desde los textos litúrgicos,
cuando los sacerdotes invocan el Espíritu Santo, y piden para que las almas a quienes llegue el mensaje sean
tocadas por el Dios misericordioso. Benedicto XVI cita a san Juan Crisóstomo, y él también afirma que la
Escritura necesita de la Revelación del Espíritu para que sea provechosa, y san Jerónimo también, pues para
comprender la Escritura se precisa el Espíritu Santo dice, igual lo expresa Ricardo de san Víctor, quien apoya
que es imprescindible comprender el Texto Sagrado ilustrado por el Espíritu.
17. Tradición y Escritura
Aquí, se habla de la palabra divina y la forma definitiva en que el anuncio de la salvación se comunica para
siempre y en todas partes desde que nuestro Señor Jesucristo envía a los apóstoles a predicar el Evangelio a
los hombres y se comunica una verdad salvadora inspirada por el Espíritu Santo. De esto, la importancia
esencial de la Tradición para la santa Iglesia y su crecimiento.
18.
Benedicto XVI hace constar la importancia nuevamente de educar y formar al pueblo de Dios de acuerdo con
las Sagradas Escrituras, la relación con la Tradición viva de la Iglesia y la guía del Magisterio, pues en ellas,
está el Dios vivo. Posteriormente, el papa cita la Constitución Dogmática “Dei Verbum”, donde se manifiesta
que la palabra del Eterno Padre asumió nuestra condición débil y humana para hacerse semejante a nosotros,
revelarse y transmitirse en Cristo de generación en generación, sin duda un testimonio de la fe.
19. Sagrada Escritura, inspiración y verdad
Según el papa, para la comprensión de la palabra de Dios, se recalca que la sagrada escritura nace en el seno
de la Iglesia por obra e inspiración del mismo Espíritu Santo. La importancia de la inspiración radica en que,
si esta se debilita, lo que se lee más bien, es un suceso histórico. La verdad de las escrituras es que tienen un
valor útil para enseñar reprender, corregir e instruir en la justicia, señalando que la reflexión teológica debe
considerar siempre la inspiración para una correcta hermenéutica eclesial de las Sagradas Escrituras y así dar
frutos para la ciencia bíblica y la vida espiritual de los fieles.
20. Dios Padre, fuente y origen de la Palabra
Desde Benedicto XVI, en la revelación, Dios se manifiesta como Padre del Hijo, el logos hecho carne, y el
Padre es quien entrega al Hijo del don del Paráclito (cf. Jn 14,16).
21.
El papa pone de manifiesto la cruz de Cristo, su dolor en obediencia. Enfatiza en que Dios habla en el silencio
del a oscuridad que también es un misterio.
La respuesta del hombre al Dios que habla
22. Llamados a entrar en la Alianza con Dios
El autor exterioriza que, Dios se da a conocer por medio del diálogo, esta relación entre Dios que llama con su
palabra y el hombre que responde. Explica que el hombre es un destinatario interpelado y llamado, invitado al
intercambio amoroso a través de su respuesta libre. Esto nos recuerda dice el papa, que somos convocados por
gracia para ser uno con Cristo, Hijo del Eterno Padre y ser de igual manera, transformados en Él.
23. Dios escucha al hombre y responde a sus interrogantes
Prosigue, cuando dialogamos con Dios llegamos a dar respuesta a las cuestiones más profundas del corazón
para la salvación del hombre, para dar vida, dado que podemos encontrar palabras de Vida Eterna y tener
igualmente la vida eterna. Cita a san Buenaventura, desde las Sagrada Escrituras se llegar a la plenitud, la
felicidad eterna.
24. Dialogar con Dios mediante sus palabras
En este momento, el papa invita a pensar de manera especial en el libro de los Salmos donde se encuentran
todos los sentimientos que el hombre experimenta en su vida y se ven de manera sabia delante de Dios.
Expresiones que se integran en este diálogo mencionado anteriormente y que se realiza con Dios que nos
comunica y al tiempo nos escucha, nos llama y nos mueve la vida.
25. Palabra de Dios y fe
Benedicto XVI a este punto, presenta su pensamiento frente a la Palabra de Dios, señala que la respuesta del
hombre es la fe. La fe para recibir aquella revelación, para la que el hombre debe mostrarse dispuesto en
mente, corazón para que el Espíritu Santo le permita comprender la palabra de Dios en las sagradas escrituras.
Entonces, hay un encuentro con Cristo Jesús, que se presenta en la historia en su cuerpo que es la Iglesia y allí
el acto de fe, personal y eclesial.
26. El pecado como falta de escucha a la Palabra de Dios
Se enfatiza en el pecado como un no prestar oído a la Palabra, no escuchar, como ruptura de la Alianza al
estar en una actitud de quien se mantiene excesivamente firme en sus ideas, intenciones u opiniones, sin tener
en cuenta otras posibilidades. Desde las Sagradas Escrituras, se vislumbra el pecado como la desobediencia y
no escucha, de allí la invitación de papa a abrir el oído y acoger en Jesús, Verbo de Dios, nuestra salvación.
27. María “Mater Verbi Dei” y “Mater fidei”
El papa Benedicto XVI, habla de la virgen María quien con su “Sí” a la palabra de la Alianza, la cumple de
manera perfecta. Es la alianza y la vocación divina de la humanidad lo que se resalta en la figura de María
desde la Anunciación hasta Pentecostés. Ella siempre tuvo la disponibilidad de hacer la voluntad de Dios, es
decir, fue dócil a la Palabra divina guardando todos estos acontecimientos en su corazón.
28.
Prosigue el papa, la relación de María de Nazaret y la escucha creyente de la Palabra divina, visibiliza una
escucha activa de la Madre. Por ello, resplandece en el Magníficat, donde habla y piensa con la palabra de
Dios y se convierte en Madre de la Palabra que fue encarnada. Benedicto XVI presenta a María como un
modelo a seguir dejándonos formar por la obra de Dios.
Hermenéutica de la Sagrada Escritura en la Iglesia
29. La Iglesia lugar originario de la hermenéutica de la Biblia
Este es un gran tema al que se refiere el papa, el tema de la interpretación de la Sagrada Escritura en la
Iglesia, ya que explica que, por el vínculo entre la palabra y la fe, solamente se puede llegar a una auténtica
interpretación de la Biblia en la fe Eclesial. Enfatiza en el criterio siguiente: que el lugar originario de la
interpretación de las escrituras es la propia vida de la Iglesia. Se destaca el sí de María como elemento
importante para la interpretación de la Sagrada Escritura en la iglesia, el vínculo entre Palabra y fe, la
auténtica hermenéutica de la Biblia como lo señala San Buenaventura, es necesaria la fe para el acceso al
texto sagrado. De acuerdo con esto, la gracia de la fe en Cristo es la guía de toda la Escritura. También lo dirá
el papa citando a santo Tomás de Aquino y san Agustín, sobre la necesidad de la gracia para que la fe sea
sanadora. Cabe mencionar desde Benedicto XVI, que los teólogos y los exegetas se acerquen a la palabra de
Dios según lo que realmente es, una Palabra que se dice a través de palabras humanas. El papa retoma a San
Agustín, quien refuerza la creencia en el Evangelio justamente por la autoridad de la Iglesia Católica ya que la
Biblia es el libro de la iglesia y de allí brota su verdadera hermenéutica.
30.
También, el papa cita a san Jerónimo, en términos de quien no conoce las escrituras, no conoce a Cristo y que
sólo en la fe de un pueblo, el pueblo de Dios, se encuentra la tonalidad adecuada para entender la Escritura.
por eso el autor afirma que la interpretación veraz de la Biblia siempre ha de estar en armonía con la fe de la
Iglesia Católica para así mismo, leerla en la fe de la vida eclesial misma. Se acentúa que la escucha de la
Palabra de Dios, aumenta la comunión eclesial de aquellos caminantes en la fe. Se menciona que aquellos que
quieran aproximarse a los textos sagrados, pero lo hacen sin fe, se pueden detener solamente en la estructura
del texto y sus formas, pero sus intentos interpretativos serán incompletos.
31. Alma de la teología
Desde el sínodo, se señala la importancia en el estudio de las Sagradas Escrituras, ya que son el alma de la
teología. Donde los Padres también reconocieron que a lo largo de los últimos decenios muchos exegetas y
teólogos han contribuido de manera significativa a la profundización del sentido de las Escrituras. Por ello, el
Papa manifiesta sincera gratitud a los miembros de la Pontificia Comisión Bíblica, al hacer frente a las
cuestiones que surgen de la reflexión de la Sagrada Escritura y sus aportes.
32. Desarrollo de la investigación bíblica y Magisterio eclesial
Se reconoce el beneficio que aporta la exégesis histórico-crítica a la vida de la Iglesia, así como también otros
métodos serios de análisis de texto que se han desarrollado recientemente, dado que la sana Tradición Eclesial
siempre ha tenido amor por el estudio de la “letra” y en particular en la lengua, el comprenderla en su
estructura y en el modo de expresarse. El papa dice que nos acercamos más al amor por la Palabra y al Dios
que está en camino hacia nosotros y nosotros hacia él.
33.
Es importante resaltar que el magisterio de la Iglesia es a quién le corresponde interpretar auténticamente la
palabra de Dios, oral o escrita. El Papa cita, en particular las Encíclicas Providentissimus Deus del Papa León
XIII y Divino, afflante Spiritu del Papa Pío XII. De acuerdo con este trabajo, se ha podido proteger la
interpretación católica de la Biblia de los ataques del racionalismo y de una exégesis llamada mística
respectivamente. Se enfatiza en la gran responsabilidad que tienen los exegetas católicos quienes nunca deben
olvidar que interpretan la palabra de Dios, pues la meta de su trabajo se consigue cuando dilucidan el
significado de textos bíblicos como palabra actual de Dios.
34.
Frente a la exégesis católica, el papa habla de la Constitución dogmática “Dei Verbum” que señala 3 criterios
elementales para tener en cuenta la dimensión divina de la Biblia, el primero, interpretar el texto
considerando, la unidad de toda la Escritura. A lo que se llama exégesis canónica. Segundo, tener presente la
Tradición viva de toda la Iglesia. Y tercero, observar la analogía de la fe. Añade que sólo donde se aplican
los dos niveles metodológicos, el histórico-crítico y el teológico, se puede hablar de una exégesis adecuada a
este libro.
35. El peligro del dualismo y la hermenéutica secularizada
Señala el papa, hay un grave riesgo de dualismo al que se puede llegar cuando se abordan las Sagradas
Escrituras y recuerda algunas de las consecuencias que se deben evitar.
a) La primera es que sí la actividad exegética se reduce al primer nivel, a escritura se convierte en un texto el
pasado y no transmite la Tradición viva de la Escritura.
b) La segunda, es que, por la falta de una hermenéutica de la fe, hay una hermenéutica secularizada y
positivista que aleja a Dios de la vida humana.
c) La tercera, que este modo, perjudica la vida de la Iglesia poniendo en duda los misterios fundamentales del
cristianismo y su valor histórico.
d) Como consecuencia, se crea una hendedura dejando a la teología sin fundamento. De aquí, el papa
considera que se deben tener más presentes las indicaciones dadas por la Constitución dogmática “Dei
Verbum”.
36. Fe y razón en relación con la Escritura
El papa emérito alude al Papa Juan Pablo II en la Encíclica. fides et ratio, Hoy, sobre el peligro de. Utilizar
una sola metodología Para llegar a la verdad de la Sagrada Escritura. Mostrando la necesidad de una correcta
exégesis que permita ampliar y comprender el sentido pleno de los textos. En compañía de toda la iglesia.
Hoy advierte, aquí el Papa. Que la hermenéutica secularizada. Viene de la razón. Que se cierra la posibilidad.
Para que Dios entre en la vida del hombre y le hable con palabras humanas. Es importante que se. Trabajé en
armonía entre la fe y la razón.
37. Sentido literal y sentido espiritual
El papa menciona que, como se ha afirmado en la Asamblea Sinodal, los padres de la Iglesia muestran una
teología de gran valor dado que el centro de su estudio son las Sagradas Escrituras en su integridad pues con
su ejemplo se puede enseñar a los exegetas modernos y se acerquen de modo religioso a la sagrada Escritura.
comulgando con la experiencia de la Iglesia que camina a través de la historia y está guiada bajo el Espíritu
Santo. El autor cita a Santo Tomás de Aquino, articulando los sentidos literal y espiritual de la escritura, la
búsqueda de la realidad de fe, contenidos de la fe, la moral y la tensión escatológica siguiendo las reglas de la
justa interpretación.
38. Necesidad de trascender la “letra”
El Papa manifiesta que es importante comprender el paso de la letra, al espíritu, la comprensión de la palabra
de Dios que no está únicamente presente en la literalidad del texto, sino que también está, en el Espíritu que
da vida dice San Pablo, el espíritu es Cristo y Cristo es el Señor que indica el camino…
39. Unidad intrínseca de la Biblia
Enseguida, se refiere a tener presente la unidad de toda la Escritura en el paso de la letra al Espíritu dado que
la palabra de Dios llega a nuestro corazón y nos llama la conversión, interpretándola como un camino que nos
lleva a Cristo. Aquí el Papa evoca a San Víctor que afirma que “Toda la Divina escritura es un solo libro y
este es Cristo porque la escritura habla de Cristo y también se cumple en Él”.
40. Relación entre Antiguo y Nuevo Testamento
Considerando el anterior punto de la unidad intrínseca de la Biblia, Hoy se debe hacer claridad que el nuevo
testamento. Reconoce el Antiguo testamento como palabra de Dios. Y acepta. Las Sagradas Escrituras del
Pueblo judío. Y más adelante, cita a San Pablo. Que asegura que Jesús de Nazaret fue un judío. Y que esta
revelación. También es válida para nosotros los cristianos. En las Sagradas Escrituras. No solamente la vida
de la muerte, sino también la resurrección de Cristo. Encuentra en las Sagradas Escrituras su máximo
cumplimiento. Una continuación, de un Antiguo y nuevo Testamento
41.
En cuanto al Antiguo Testamento, el autor destaca el plan divino de Dios quien ve su obra desde la antigua
alianza y prefigura a Dios en plenitud, en su hijo encarnado, Su Revelación. El Antiguo Testamento es
profecía del nuevo Testamento y hay una relación entre los dos como lo aseveraba San Gregorio Magno,
Donde se da la promesa que sea ha de cumplir.
42. Las páginas “oscuras” de la Biblia
En el Sínodo se afronta el tema de algunas páginas de la Biblia que resultan difíciles y oscuras debido a la
violencia y cierto tipo de inmoralidades que contienen durante la historia que obedece a un contexto propio,
histórico dado en etapas sucesivas. Una revelación con una previa. preparación del pueblo hacia el Evangelio.
El Papa Benedicto XVI precisa que en el momento de abarcar estos textos hermenéuticamente se debe contar
con una formación adecuada y acercarse a los textos en su contexto literario y siempre desde una perspectiva
cristiana en la que se ha de ver cumplido el nuevo mandamiento de Jesús, en el misterio Pascual.
43. Cristianos y judíos en relación con la Sagrada Escritura
De acuerdo con la unión del Antiguo y del Nuevo Testamento, Benedicto menciona a san Juan Pablo II
marcando que el pueblo judío son nuestros hermanos en la fe de Abraham, nuestro patriarca, en nuestras
similitudes y lo que podemos hacer juntos, fraternidad y humanidad con el pueblo judío junto con la
colaboración recíproca que permita favorecer el estudio de las Sagradas Escrituras...y cita a San Pablo, quien
manifiesta a que nuestro alimento procede de las mismas raíces espirituales.
44. La interpretación fundamentalista de las Escrituras.
Dentro del Sínodo se acentuó el argumento de la Pontificia Comisión Bíblica en el documento que habla
sobre la interpretación de la Biblia en la Iglesia. Se llama la atención sobre aquellas lecturas que promueven
interpretaciones subjetivas y arbitrarias, un cierto “literalismo” de una lectura fundamentalista que puede abrir
camino a interpretaciones anti-eclesiales, de las mismas Escrituras, señalando que, además, no tiene en cuenta
el carácter histórico de la revelación bíblica. Lo anterior, lo contrapone a una “lectura creyente de la Sagrada
Escritura”. Ésta se practica desde la Antigüedad en la tradición de la Iglesia. y encuentra la salvación para la
vida de todo fiel y para la misma Iglesia. No ignora la mediación humana del texto, inspirado en sus géneros
literarios, sino que, por la misma palabra, el Logos, invita a conocer su misterio a través de la realidad de una
historia humana.
45. Diálogo entre pastores, teólogos y exegetas
En este punto, los padres Sinodales recomiendan que exista más comunicación entre pastores, teólogos y
exegetas ya que te como resultado de esta unión, se cooperará en beneficio de toda la Iglesia. Tal y como lo
recomienda la Constitución dogmática “Dei Verbum” para que con esfuerzo y la vigilancia del magisterio, se
pueda ofrecer al pueblo de Dios el alimento de la Escritura.
46. Biblia y ecumenismo
De acuerdo con el fundamento del verbo de Dios hecho carne en Cristo, el Sínodo puntualiza en el diálogo
ecuménico, para que todos estén juntos, escuchen y mediten las Escrituras a través de un diálogo de la caridad
y practiquen la lectio divina de la Biblia, escuchar y entrar en comunión. El papa se refiere a encontrar
reunión en la fe y volvamos a estar juntos desde el trabajo de estudio y oración.
47. Consecuencias en el planteamiento de los estudios teológicos
Este se refiere a tener una adecuada formación exegética y teológica en los candidatos al sacerdocio desde los
criterios indicados en la Constitución dogmática “Dei Verbum” el estudio de las lenguas en las que ha sido
escrita la Biblia y los métodos interpretativos adecuado que buscan que estos estudiantes tengan una profunda
vida espiritual, desde el estudio de la palabra de Dios, escrita y transmitida con un Espíritu eclesial, la
asistencia del Espíritu Santo y las intervenciones del Magisterio.
48. Los santos y la interpretación de la Escritura
Se enseñan distintos testimonios de quienes han creído la palabra de Dios, santos como: san Basilio Magno,
san Antonio Abad, san Benito y su Regla (norma rectísima para la vida del hombre), san Francisco de Asís,
santa Clara de Asís, santo Domingo de Guzmán, santa Teresa de Jesús, san Ignacio de Loyola, san Juan
Bosco, san Juan, María Vianney, san Pío de Pietrelcina, san José María Escrivá, santa Teresa de Calcuta….
Entre otros. Todos ellos se dejaron moldear por la palabra de Dios en la escucha, la lectura y la meditación.
49.
El papa emérito menciona también, que representa una hermenéutica de la Escritura la santidad de la Iglesia
dada por el Espíritu Santo que, inspirando autores sagrados ha animado a tantos santos a dar su vida por el
Evangelio. Se describen algunos de los santos que fueron canonizados en la plaza de san Pedro el 12 de
octubre y se les pide a ellos su intercesión para que en la Asamblea sobre la palabra de Dios se produzcan
frutos de santidad.
Segunda parte
VERBUM IN ECCLESIA
LA PALABRA DE DIOS Y LA IGLESIA
50. La Iglesia acoge la Palabra
Esta segunda parte, inicia desde el prólogo de Juan, en el que se menciona que hubo por parte de algunos un
rechazo de la Palabra Divina… aquellos que no la recibieron y no lograron configurarse con el Logos siendo
el verbo mismo. Pero un hombre que, al contrario, viéndose frágil y pecador busqué de corazón, el encuentro
de Cristo encuentra en Él, su propia transformación. Recibir al mismo Verbo y configurarse con Él.
51. Contemporaneidad de Cristo en la vida de la Iglesia
De acuerdo con la relación entre Cristo, la Palabra del Padre y la Iglesia, la Palabra de Dios se encuentra entre
nosotros y como lo expresaría San Juan Pablo II, y su Cuerpo vivo en la Iglesia. Nuevamente se destaca que
desde la Constitución dogmática “Dei Verbum” se habla de un diálogo nupcial en los términos bíblicos donde
la Esposa de Cristo escucha y dice, con fe: habla, Señor. La iglesia no vive de sí sino del Evangelio y en el
Evangelio, también se encuentra su orientación, en el caminar, Jesús también se une hoy a cada uno de
nosotros, cada día cuando la palabra de Dios es proclamada y escuchada, y Él también Está presente en los
sacramentos para ser nuestro.
LA LITURGIA, LUGAR PRIVILEGIADO DE LA PALABRA DE DIOS
52. La Palabra de Dios en la sagrada liturgia
El Papa menciona que todo acto litúrgico ya está impregnado de la Sagrada Escritura. De acuerdo con la
Constitución Sacrosanctum Concilium, la importancia de la Sagrada Escritura en la liturgia es máxima. De
hecho, de ella se toma las lecturas que se explican en la homilía, los salmos que se cantan, las presas y las
oraciones, cantos litúrgicos. Todo tiene su aliento y su inspiración. De allí salen los significados de lo que se
hace y los signos. Cristo mismo se hace presente en su Palabra, habla cuando se lee en la Iglesia la Sagrada
Escritura a la luz del Espíritu Santo. De allí, la importancia del trabajo pastoral y los agentes de pastoral. En el
esfuerzo hacia la educación de los fieles, a llegar al profundo sentido de la palabra de Dios. Que se despliega
en la liturgia.
53. Sagrada Escritura y sacramentos
El eje central es la liturgia de la Palabra, es primordial en la celebración de los sacramentos de la Iglesia,
enfatizando que corresponde a los sacerdotes y los diáconos la administración de estos, ya que forman unidad
la Palabra y el sacramento en el ministerio de la Iglesia y la expresión hebrea “dabar” indica dentro de la
liturgia, que la palabra realiza lo que dice, Dios dice y hace, ese es su carácter performativo.
54. Palabra de Dios y Eucaristía
En cuanto a la celebración eucarística, el papa marca la unión íntima entre la Palabra y la Eucaristía poniendo
como ejemplo las Sagradas Escrituras del evangelio de Juan, donde Jesús se revela como el “Pan de vida” y
nos alimenta haciéndose carne pan y dándonos a beber su sangre en el misterio Pascual. Algo más que añadir,
en el relato de san Lucas, el pasaje de los discípulos de Emaús hay una reflexión sobre la unión entre la
escucha de la palabra y partir el pan, fue allí en instante en el que los discípulos comenzaron a mirar de nuevo
las Escrituras y lo reconocieron cuando tomo el pan, lo bendijo, lo partió y se los dio.
55.
De acuerdo con el papa, la escritura misma ayuda a entender esa unión indisoluble con la Eucaristía, por eso,
es que es importante que la eucaristía nos ayude a entender la Sagrada Escritura, así como la Sagrada
Escritura a su vez, ilumine y explique el misterio eucarístico ya que sin el reconocimiento de alguna de ellas,
la comprensión de la Escritura quedaría incompleta. El papa refuerza la importancia de reunirse para leer lo
que se refiere a Cristo en toda la escritura ejerciendo su obra de salvación por medio de su memorial y de los
sacramentos.
56. Sacramentalidad de la Palabra
Durante el Sínodo se habló acerca de la sacramentalidad de la palabra, se traen a colación los relatos de san
Juan Pablo II quien habla del horizonte sacramental de la revelación y se centra en el signo eucarístico donde
presenta que (dice literalmente el documento) “la unidad inseparable entre realidad y su significado permite
captar la profundidad del misterio”. Benedicto habla de la palabra de Dios que se hace perceptible a la fe
mediante el signo como Palabra y gesto humano y que este horizonte sacramental indica la modalidad
histórico-salvífica con la cual el verbo de Dios entra en el tiempo y en el espacio y de esta forma se convierte
en interlocutor del hombre que está llamado a acoger su don en la fe”. El papa asocia la sacramentalidad de la
Palabra con la presencia real de Cristo bajo las especies del pan y del vino que se encuentran consagrados. El
autor evoca a san Jerónimo quien expresa que, cuando leemos las Sagradas Escrituras, se piensa que el
Evangelio es el cuerpo de Cristo y que las Sagradas Escrituras son su enseñanza. El papa se refiere también al
ministerio carismático el Cuerpo de Cristo y su Sangre, realmente la palabra de la escritura es la enseñanza de
Dios. se resalta en este apartado la importancia de no distraerse durante la Sagrada Eucaristía mientras tiene
lugar la palabra de Dios que se vierte en nuestros oídos siendo la carne y la sangre de Cristo.
57. La Sagrada Escritura y el leccionario
El papa hace énfasis en la importancia del leccionario, el cual muestra las lecturas del Antiguo y del Nuevo
Testamento centradas en Cristo y su misterio pascual, denota también la unidad intrínseca de toda la Biblia,
en las lecturas que se proclaman en la asamblea en su totalidad.
58. Proclamación de la Palabra y ministerio del lectorado
A este respecto, la Asamblea sinodal dice el papa, pide un alto cuidado en la proclamación de la Palabra de
Dios. Así, el Evangelio lo proclama el sacerdote o el diácono y la primera y la segunda lectura las puede
proclamar un lector encargado hombre o mujer, (es importante tener una preparación seria para el ejercicio de
este ministerio laical) con una formación que debe ser tanto bíblica y litúrgica como técnica ya que apunta a
que los lectores estén capacitados para percibir el sentido de las lecturas en su propio contexto, de entender a
la luz de la fe el núcleo centrado del mensaje revelado de acuerdo con la estructura de la liturgia y las razones
de la conexión entre liturgia de la palabra y la liturgia eucarística.
59. Importancia de la homilía
En la homilía los fieles escuchan y meditan la Palabra, es un ministerio de obispos presbíteros y diáconos.
Previamente en la exhortación apostólica post sinodal Sacramentum caritatis, Benedicto XVI, recordó la
necesidad de mejorar la calidad de la homilía relacionada con la importancia de la Palabra de Dios teniendo
presente que su fin es favorecer una mejor comprensión y eficacia de la palabra de Dios en la vida de los
fieles y también en la propia vida desde la meditación y la oración para predicar con convicción y pasión en el
anuncio que llegue a dar fruto en la Palabra escuchada.
60. Oportunidad de un Directorio homilético
El autor se refiere aquí a la importancia de predicar de modo apropiado de acuerdo al leccionario para
desempeñar mejor la tarea de la homilía teniendo por ejemplo un Directorio sobre la homilía y que esto
conduzca como lo decía san Jerónimo, a que en el sacerdote de Cristo la mente y la palabra sean concordes.
61. Palabra de Dios, Reconciliación y Unción de los enfermos
El papa indica aquí el sacramento de la Reconciliación o de la Penitencia ya que, en la Sagradas Escrituras, Él
reconcilia consigo todas las cosas. Dice que la palabra de Dios le permite al cristiano ser iluminado para que
conozca sus pecados y busque la conversión confiando en la misericordia del señor en la Unción de los
enfermos donde recibe de la Palabra de Dios una fuerza sanadora de parte de un Dios cercano al sufrimiento y
un Verbo encarnado que comparte nuestros dolores y padeció por nosotros por amor.
62. Palabra de Dios y liturgia de las horas
A este propósito, el papa pone de relieve el contacto a los fieles y a las comunidades de vida consagrada con
la Sagrada Escritura y la Tradición viva de la Iglesia a través de la liturgia de las horas, ya que estas formas de
oración exaltan la Sagrada Escritura y constituyen una forma privilegiada de escucha de la palabra de Dios
poniéndola en contacto con sus vidas particularmente la recitación de Laudes y Vísperas.
63. Palabra de Dios y Bendicional
El papa emérito hace hincapié en uso el bendicional para la proclamación, escucha y explicación de la Palabra
de Dios, tomando la bendición como un signo sagrado en el máximo sentido y eficacia en la proclamación de
la Palabra de Dios.
64. Sugerencias y propuestas concretas para la animación litúrgica
El papa se refiere así, a estas recomendaciones dadas por los Padres sinodales con el fin de favorecer más en
el pueblo de Dios una familiaridad de unión con la palabra de Dios en los actos litúrgicos.
a) Celebraciones de la Palabra de Dios
65.
Los Padres sinodales exhortan la celebración de la Palabra en ocasiones en las que se privilegie el encuentro
con el Señor. De acuerdo con esto, describe el papa, se pone de relieve la preparación de la Eucaristía
dominical con el fin de proclamar, escuchar, orar y meditar las Sagradas Escrituras alimentando la fe de los
creyentes, particularmente en tiempos litúrgicos destacados como el Adviento, la Navidad, la Cuaresma y la
Pascua.
b) La Palabra y el silencio
66.
Sobresale aquí el valor del silencio con relación a la Palabra de Dios y la forma en que los creyentes lo
reciben en sus vidas interiores y en la meditación. Según Benedicto, es significativo que los pastores
fomenten momentos de recogimiento con ayuda del Espíritu Santo y tomando como ejemplo la santísima
virgen María, mujer de la Palabra del silencio se desarrolle una escucha genuina Verbo crescente, verba
deficiunt.
c) Proclamación solemne de la Palabra de Dios
67.
Otra sugerencia dada durante el Sínodo relata su santidad, fue la utilización del Evangeliario llevado en
procesión durante los ritos iniciales y su traslado al ambón para ser proclamado por el diácono o sacerdote
particularmente durante solemnidades litúrgicas relevantes. Enfatiza en el canto al final de la lectura en el cual
al decir: “Palabra del Señor”, se recalca la importancia de lo que se acaba de leer.
d. La Palabra de Dios en el templo cristiano
68.
Es relevante, menciona el papa que no se descuiden los medios que pueden ayudar a los fieles a una mayor
atención de la Palabra de Dios, se habla del lugar adecuado para la proclamación de la Palabra, la meditación
y la celebración Eucarística teniendo especial cuidado con el ambón desde donde se proclama la Palabra de
Dios, y la atención de los fieles. El ambón se encuentra durante la liturgia de la Palabra doblemente en
concordancia con la mesa de la Eucaristía y sugiere un lugar en el cual se pueda colocar la Sagrada Escritura
fuera de la celebración sin ocupar el centro que sería para el Santísimo Sacramento.
e. Exclusividad de los textos bíblicos en la liturgia
69.
El sínodo reitera que según lo establecido por normas litúrgicas de la iglesia nunca se podrá sustituir por otros
textos las lecturas tomadas de la sagrada escritura ya que ninguno de estos textos podrá alcanzar el valor y la
riqueza contenida en la sagrada escritura que es la palabra misma de Dios. señala conveniente que los salmos
se puedan cantar.
f. El canto litúrgico bíblicamente inspirado
70.
Con el fin de rendir honor a la palabra de Dios durante la celebración, se conviene valorar los cantos de la
tradición de la Iglesia como el canto gregoriano, cantos inspirados en la Biblia y que logren armonizar las
palabras, la música y la belleza de la Palabra divina.
g. Especial atención a los discapacitados de la vista y el oído
71.
Se pretende dar atención a quienes por su condición particular tienen algún problema para participar
activamente de la liturgia. Desde el papa y los Padres, es un llamado para ayudar con instrumentos adecuados
a los hermanos y hermanas que tengan dificultades y así ellos también puedan tener un contacto vivo con la
Palabra de Dios.
LA PALABRA DE DIOS EN LA VIDA ECLESIAL
72. Encontrar la Palabra de Dios en la Sagrada Escritura
Frente a este punto, el papa menciona que los santos recomiendan conocer la escritura para crecer en el amor
a Cristo, se cita a san Jerónimo quién consagró su vida al estudio de la Biblia y dejó su traducción latina
llamada Vulgata y menciona que es un instrumento con el que Dios habla día a día los creyentes.
73. La animación bíblica de la pastoral
En este punto, el Sínodo reitera la importancia de la pastoral en las comunidades cristianas dado que la vida
cristiana se caracteriza por el encuentro con Jesucristo que nos llama a seguirlo y así permitir que florezca un
deseo de mayor amor a la Sagrada Escritura para el conocimiento de la persona de Cristo quien muestra al
Padre y la plenitud de la Revelación divina. El papa menciona, además, que es importante afrontar algunos
problemas pastorales vinculados a la proliferación de sectas que puedan entender y difundir lecturas
distorsionadas, se hace un llamado a la formación y a que se promueva también la oración y el conocimiento
de la Biblia según la fe de la Iglesia.
74. Dimensión bíblica de la catequesis
El papa recuerda el modelo de del evangelista Lucas desde el encuentro de los discípulos de Emaús como
decía antes, con Jesús y donde hay una catequesis en la explicación de las Escrituras, es decir, un
acercamiento que solo Cristo da y habla notablemente de seguir el Directorio general para la catequesis, el
Catecismo de la Iglesia Católica y la Sagrada Escritura como palabra de Dios en la Tradición viva de la
Iglesia como fundamentos para la enseñanza de la fe con autoridad.
75. Formación bíblica de los cristianos
Para el papa es importante prestar atención al apostolado bíblico pues en el Sínodo los Padres recomiendan
establecer centros de formación para laicos y misioneros donde se pueda comprender, anunciar la Palabra de
Dios, así como también institutos con mayor especialización donde se pueda llevar a cabo una comprensión
teológica y adecuada.
76. La Sagrada Escritura en los grandes encuentros eclesiales
El papa sugiere que en los encuentros que se hagan en diócesis a nivel nacional o internacional se destaque la
importancia de la Palabra de Dios de la escucha y lectura creyente y orante de la Biblia también en las
Jornadas Mundiales de la Juventud y que se proporcione también, un mayor espacio para celebraciones de la
Palabra y momentos de formación de carácter bíblico.
77. Palabra de Dios y vocaciones
Se realza el llamado personal que hace Cristo. Palabra de Dios entre nosotros para nuestra relación personal
con el Señor Jesús y nos pide respuesta a la santidad mediante opciones asumiendo tareas y ministerios para
corresponder a su amor y así edificar la Iglesia.
a) La palabra de Dios y ministros ordenados
78.
Dice Benedicto XVI, la palabra de Dios es necesaria para formar el corazón de un buen pastor, por ello se
requiere estar en contacto con la Biblia.
79.
El Papa menciona la Exhortación Apostólica Post Sinodal del Papa Juan Pablo II, Pastores gregis de la que
resalta que la oración y la meditación de la Palabra siempre deben estar en primer lugar para alimentar y hacer
progresar la vida espiritual de los que han sido llamados al episcopado.
80.
Aquí el papa y rememora las palabras del papa Juan Pablo II en la Exhortación apostólica post sinodal
Pastores dabo vobis en la cual, el sacerdote es ministro de la palabra de Dios, ungido para anunciar el
Evangelio del Reino. De esto se desprende que, el sacerdote se involucre con la palabra de Dios no solamente
en el aspecto lingüístico o exegético, sino también que la Palabra llegue a su corazón a sus pensamientos y
sentimientos siendo un sacerdote de la Nueva Alianza, Jesucristo mismo.
81.
Posteriormente el papa también menciona a quienes están llamados al diaconado teniendo presente el
directorio para el diaconado permanente el cual da una identidad con una espiritualidad específica en el
servicio teniendo como modelo a cristo siervo un mensajero certificado que cree firmemente lo que proclama
y vive lo que enseña con el estudio y la oración.
b) Palabra de Dios y candidatos al Orden sagrado
82.
El papa menciona que el Sínodo toca en particular la cuestión de la vida espiritual de los candidatos al
sacerdocio ministerial, quienes deben tener amor por la Palabra de Dios porque en ellos dice, la Escritura debe
ser el alma de su formación teológica, una relación profunda especialmente con la lectio divina, la cual
alimentará su vocación, orientado a los candidatos hacia una vida de oración y estudio bíblico.
dando a entender que se trata la expresión palabra de Dios en la persona de Jesucristo hijo eterno del padre
hecho hombre.
Presentación de la estructura General del Documento;
El Dios que habla
haciéndose carne.