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pasa lo qué le pasa? Aquí ya hablamos de el espacio que habita el niño, ese
espacio psíquico, a veces es físico también, como el cuerpo materno que está ahí
sostenido. Entonces, ¿en qué espacio-lugar se encuentra predominantemente ese
niño? Estos espacios son más que una dimensión espacial que alojan experiencias
subjetivas y que por ello implican las cualidades que tienen esas experiencias . La
zona intermedia de Winnicot nos habla de esos espacios de experiencias subjetivas,
el espacio potencial es un claro ejemplo de donde ocurre esa zona experiencial
subjetivante, la zona intermedia es ese “entre”, no es aquí ni allá sino que es en
el “entre” que se da en el aquí y el allá, es un lugar de las experiencias
compartidas, donde pasan cosas. Justamente los lugares de aposentamiento
de la subjetividad, se pueden pensar como la construcción de estas zonas
intermedias, por donde se va construyendo la subjetividad y por donde el niño debe
dejar sus huellas para que su subjetividad se constituya, son lugares casi donde hay
que pasar casi de manera obligada para que algo de la subjetividad surja allí.
Martina, llegó al consultorio con 18 meses de edad, sin caminar, sin hablar y
profiriendo gritos incontrolables. Desde la primera sesión quedó explicitado que
Martina era una niña difícil de llevar, gritaba sin que se la pudiera calmar cuyo
cuerpo estaba en estado de constante tensión. Por otro lado, la madre necesitaba
un trabajo de holding, al sentirse impotentizada por sus referentes familiares
femeninos, quienes en vez de sostenerla en su función la descalificaban.
Winnicott, nos habla de un estado simple de ser, con sus diferencias que no es
sujeto que va a estar determinado por el deseo del Otro, el sujeto de Winnicott es un
sujeto con gesto espontáneo que estar condicionado por todo eso que llamamos
mito familiar encarnado en un principio por la madre, entonces el trabajo de la fusión
no viene dado, hay que trabajar en construir la fusión, ya que no se da
naturalmente, madre-niño no vienen en una simbiosis, sino que hay que lograrlo.
Cuando ese trabajo de la fusión no está dado está desregulado, justamente eso fue
lo que sucedió con Martina y su madre, no lograron encontrarse, Martina se
arqueaba, la mamá entendió que la rechazaba.
Capacidad para estar a solas como una categoría según Winnicott que es la
posibilidad de empezar a vivir en su propio cuerpo, pero ¿cómo ocurre esto? En
presencia de la Otro, en este caso de la madre. El bebé empieza a jugar alrededor
de la mamá, necesita de la mamá como garantía de sostén de ese espacio, en este
caso Martina se queda con la analista y la mamá queda en la salita de afuera.
ya iremos viendo cuál va a ser el dique de contención para que surja la instalación
de la represión primaria, a partir de la instalación de la represión primaria es que
podemos hablar una división de instancias psíquicas, de un inconsciente que se va
a oponer a un preconsciente-consciente. Entonces cuando uno se encuentra una
patología tan temprana, un trastorno tan temprano lo primero que hay que revisar,
es cómo se viene dando la constitución psíquica. Ahora Silvia Bleichmar va
diferenciar síntoma de lo que es trastorno, dirá que el síntoma, en tanto formación
del inconsciente, es un producto transaccional entre los sistemas psíquicos. En
cambio, cuando hay un trastorno no encontramos un conflicto entre sistemas, ya
sea por su no constitución (como en el caso de Daniel, 5 semanas, ahí todavía no
ha dado lugar a esos momentos); o ya sea por el fracaso, total o parcial de esa
inscripción de los sistemas (como las producciones psicóticas).
Caso Daniel
Pediatra había descartado cualquier perturbación de tipo orgánico
CARICIA
PRÁCTICO 3
PRÁCTICO 4
El texto “Dibujos fuera del papel”, Rodulfo
¿Por qué caminos de constituye una subjetividad? es un texto que piensa lo
subjetivo desde lo físico corporal y lo psíquico, va a tratar de sortear esta dicotomía
mente-cuerpo, la subjetividad trata de que se puedan producir estos procesos
psicosomáticos de integración. El cuerpo es cuerpo subjetivado, erogenizado,
cuerpo con significado, con sentido, por eso, a la pregunta clínica de qué le pasa a
un niño que remite a una interioridad se le puede agregar, dónde le pasa lo qué le
pasa. será una deconstrucción de esa pregunta, ¿dónde viven los niños?, porque
incluye el espacio que habita el niño, ese espacio psíquico, a veces es físico
también, como el cuerpo materno que está ahí sostenido. Entonces, ¿en qué
espacio-lugar se encuentra predominantemente ese niño? Estos espacios son más
que una dimensión espacial que alojan experiencias subjetivas y que por ello
implican las cualidades que tienen esas experiencias . La zona intermedia de
Winnicot nos habla de esos espacios de de experiencias subjetivas, el espacio
potencial es un claro ejemplo de donde ocurre esa zona experiencial subjetivante, la
zona intermedia es ese “entre”, no es aquí ni allá sino que es en el entre que se da
en el aquí y el allá, es un lugar de las experiencias compartidas, donde pasan
cosas. Los lugares de aposentamiento de la subjetividad, bien lo podemos pensar
como la construcción de estas zonas intermedias, por donde se va construyendo la
subjetividad y por donde hay que pasar para que una subjetividad se constituya, son
lugares casi donde hay que pasar casi de manera obligada para que algo de la
subjetividad surja allí.
A la pregunta ¿A dónde vienen los niños? le podemos agregar que los niños viven
en tres lugares están en igualdad de condiciones, son: el cuerpo materno, el espejo
y la hoja en blanco o superficie de escritura. Estos lugares son lugares de
aposentamiento de la subjetividad, lugares construidos por procesos de
ocupación, por activos trabajos simbólicos de construcción del lugar. También se
puede decir lugares de aposentamiento de escritura corporal. Estos tres lugares no
vienen dados sino que se construyen pues han habido activos trabajos activos de
subjetividad para que eso ocurra. Entonces, una subjetividad tiene que anclarse en
tres lugares por igual si no aparecen patologías. Anclarse refiere a que uno no
puede salir de esos lugares sin dejar huellas, sin llevarse huellas, el ancla se lleva
restos y deja huellas. Los tres lugares no están desvinculados entre sí, por ejemplo,
para llegar al pizarrón hay que poder acarrear elementos extraídos de las otras
instancias. Si bien están dispuestos en una cierta diacronía para los lugares, el dejar
de habitar un lugar no implica dejar de habitar el anterior. El sujeto vive en estos
lugares de aposentamiento para estructurarse subjetivamente, existe una
diacronía sin embargo una vez que aparecen coexisten de por vida.
Por otra parte, no tienen una sola dirección, pues hay una dirección regrediente, es
decir, no se trata de llegar a la hoja y que luego no pasa nada en los lugares
anteriores sino que lo que pasa en la hoja va provocar en los espacios anteriores
algo; por ejemplo, provocar el cuerpo materno. Ej: el niño del dibujo, el niño sale
distinto después de dibujar, el dibujo arma cuerpo erógeno en ese niño que dibuja,
es decir, también le dará algo a la parte que se llama cuerpo materno.
Esta secuencia de los lugares de aposentamiento hay que pensarla con una
pregunta qué es: ¿cómo se va de una posición a otra? Y ¿ Qué condiciones
tienen que darse para que un niño pueda pasar de una posición a otra?
¿Por qué una niña se ha comido la tiza en lugar de escribir con ella? La
hipótesis de un déficit en los procesos de subjetivación o la hipótesis de una
subjetivación deficiente. Cuando la niña se dibuja en el espejo, nos revela que,
en el fondo que nunca se va al fondo, Un trazo es un trozo de carne. hay
efectivamente un trozo de carne que la niña no consigue, con toda su
insistencia, llevar y colocar en la espesura del pizarrón.
¿Qué hace un niño al dibujarse? dibujar es un nuevo acto psíquico afirma Rodolfo
pues se vuelve a plantear el tema de ligar el cuerpo, de ligarse a su cuerpo. Cuando
un niño dibuja vuelve a hacer todos los trabajos de ligadura con el cuerpo propio
que aparecían en el cuerpo materno.
El Niño irá creando un cuerpo superficie, el niño tiene que auto inscribirse bajo la
forma de una superficie. Además, Rodolfo afirma que el bebé necesita ciertas
rutinas ya que estás suponen ciertas regularidades para un sujeto que está en un
mundo absolutamente nuevo. De esta forma, las rutinas irán fabricando superficies:
el Otro primordial ofrecerá a través de ellas los medios para armar una
cotidianeidad.
El tercer trabajo psíquico se realizará a través de la función del jugar que implica
encontrar el cuerpo en un estado de relativa continuidad como superficie y además
entubado a través de ciertas relaciones oscilatoria continente-contenido, que
insinúan el pasaje al volumen. La forma más sencilla para detectar a esta tercera
función del jugar es a través de juegos de escondite, algunas prácticas de aparición
y desaparición, aparece el goce en ocultarse y el desprendimiento trascendental de
la mirada del Otro y de su ligadura con el ser, Rodulfo dirá: “soy mirado, luego
existo”. Justamente, antes la desaparición causaba angustia en cambio ahora el
niño “se mata de risa” y reclama repetir la secuencia. A su vez, se despliegan una
multiplicidad de jugares, por ejemplo, aparece lo que Winnicott acuñó como “dejar
caer cosas”, primero soltándolas y luego cuando se alcance cierto dominio de la
motricidad junto a la simbolización aparecerá el placer de arrojarlas con fuerza.
También existe un tiempo de la constitución llamado como oral visual, ahora el niño
se “desteta de la mirada materna”, cuando un niño deja caer la mirada que lo
sostiene, escapa y reaparece con el goce duplicado del escondite y del reencuentro.
Rodulfo señala que se trata de un verdadero fenómeno de destete ya que está
produciendo una separación fundamental yo/no-yo, esta partición simbólica de la
que depende toda proliferación imaginaria sobre lo externo y lo interno
Movimientos de apertura
Los movimientos de apertura son esos primeros movimientos que van a dar
inicio al espacio transferencial, entre estos movimientos el analista debe tratar
de indagar sobre cuánto tiempo ha pasado desde la aparición de los primeros
síntomas y desde que se dio cuenta. Además, habrá que determinar cuáles
son los factores que hacen que la consulta se formule en ese momento y no
en otro, puntualizando tanto el motivo que traen los padres como el que
plantean los niños.
Piera Aulagnier hablará sobre movimientos de apertura, plantea que hay prestar
atención a las entrevistas preliminares para observar si un sujeto podría comenzar
un tratamiento o si es mejor derivarlo a un colega, también espera encontrar en las
entrevistas elementos que le permitan realizar un “diagnóstico”. Por otro lado, afirma
que el analista tendrá que decidir si tiene interés en proponer-se a este sujeto como
eventual analista, Piera afirma que el analista deberá hacer un“autodiagnóstico”
sobre su capacidad de investir y sobre la posibilidad de mantener una relación
transferencial no con la estructura psíquica sino con la singularidad del sujeto al cual
se enfrenta: estar atento a cómo cuenta los acontecimientos de su historia, indagar
sobre el mito familiar y así pesquisar lo que será una futura transferencia. En ese
sentido, las entrevistas previas deberán proporcionar un tiempo necesario para
efectuar este trabajo de autointerrogación. Esta autora propone la definición de
“analizabilidad”, ésta refiere a que con la experiencia analítica emerge el conflicto
inconsciente que está en la fuente del sufrimiento psíquico y de los síntomas que
muestran el fracaso de la solución que el sujeto había elegido. Sin embargo esta
condición no es suficiente ya que es preciso que las deducciones que se extraigan
de las entrevistas preliminares tengan como consecuencia que el sujeto sea capaz
de tomar este conflicto, se haga cargo de su dolencia y logre modificar su
funcionamiento psíquico.
Interpretación
En primer lugar, Winnicott afirma que el bebé es incapaz de valerse por sí mismo sin
ayuda de otro, sin embargo irá desarrollándose con el cuidado del Otro primordial, a
comienzo el niño no es una unidad; para que pase del principio de placer al principio
de realidad es necesario que cuente con una madre lo “suficientemente buena”,
quien llevará a cabo la adaptación activa a las necesidades del niño pues las irá
disminuyendo poco a poco, de esta manera, se darán los procesos de
ilusión-desilusión: la madre ofrece al bebé la oportunidad de crearse la ilusión de
que su pecho es parte de él, después, el bebé crea el pecho una y otra vez lo cual
provoca en el infante la “ilusión” de que es él mismo quien crea y se abastece. La
omnipotencia es casi un hecho de la experiencia, la tarea posterior de la madre será
la de ir desilusionando al bebé paulatinamente. Justamente, entre estos procesos de
ilusión y desilusión es que emergen los fenómenos transicionales, que representan
las primeras etapas del uso de la ilusión. Winnicott llamó “objetos transicionales” a
los objetos que poseen un valor especial para el bébe, por ejemplo un peluche al
momento de dormir. El hecho de recurrir al objeto transicional le permite al niño
realizar la transición en el pecho materno y la verdadera relación con los objetos.
Estos fenómenos pertenecen al campo de la ilusión, esa zona intermedia de
Winnicot refiere a esos espacios de de experiencias subjetivas, el espacio
potencial es un claro ejemplo de donde ocurre esa zona experiencial
subjetivante, la zona intermedia es ese “entre”, no es aquí ni allá sino que es
en el entre que se da en el aquí y el allá, es un lugar de las experiencias
compartidas. Justamente, Winnicott para asignar un lugar al juego postuló la
existencia del espacio potencial entre el bebé y la madre, este espacio es una
creación de la madre, donde puede comenzar a realizarse el juego. Este espacio no
es interno ni en la madre ni el niño, pero tampoco es externo, justamente es un lugar
donde puede empezar una separación, sobre el que puede soportarse el símbolo de
una ausencia. En el espacio potencial se admite un momento de ilusión, a la vez, se
introduce un elemento que soportará la ausencia de ella, de este modo en ese
espacio se irá configurando el juego.
Piera
En primer lugar,
El niño es tan acariciante como acariciado, no sólo por los acariciar es que ya
antes emite de modo explícito sino también por las manifestaciones
intensamente libidinales con que el niño acompaña las caricias que le hacen,
El cuerpo materno, primer lugar de aposentamiento no está dado para el niño sino
que él deberá construirlos con los materiales de su constitución biológica sumados a
los materiales ofrecidos por el mito familiar a través de las funciones materna y
paterna.
1) Explique las funciones del jugar y las modalidades que adquieren las mismas en
la infancia-la niñez y la adolescencia. Ejemplifique cada una de ellas (tanto las
funciones como las modalidades en cada etapa) con casos clínicos observados en
el espacio de prácticos y teóricos.
2) Desarrolle las conceptualizaciones de Ricardo Rodulfo en relación al concepto de
Series Suplementarias e indique cuáles son las derivaciones que se desprenden de
ello en la clínica con niños.
3) Explique por qué la clínica de púberes y adolescentes es una clínica de riesgo,
tenga en cuenta para la explicación los trabajos puberales y adolescentes.
segundo parcial
1) De acuerdo a lo expuesto en las clases sobre el tema, comente y sostenga la
afirmación de D.W.Winnicott: "el jugar no es una sublimación de las pulsiones
sexuales".
Actividad clase Nº 1
Seleccione la opción de respuesta que considere correcta y justifique su elección. Puede
responder en un comentario en línea o subir un archivo de documento.
b. Porque desde que son bebés, no sólo responden o reaccionan frente a las propuestas del
otro sino que a su vez pueden proponer cosas que ya han aprendido.
c. Porque no están atrapados en el deseo del otro o en el lugar que los coloca mito familiar
sino que habrá que ver, espontaneidad de por medio, qué proponen o cómo responden.
Actividad Clase Nº 2
Invitamos a responder alguna de las preguntas enunciadas a continuación para encarar la
consulta por Daniel, bebé de cinco semanas , que “no dormía nada”. Les ofrecemos más
abajo tres constelaciones conceptuales que pueden acompañarlos en su articulación.
3- ¿Qué relación tiene la estrategia terapéutica propuesta con el modo en que Bleichmar
concibe el funcionamiento psíquico precoz?
4- ¿Cómo define Bleichmar el tipo de trastorno de Daniel, un bebé de tan sólo cinco
semanas?
Para abrir esta clase, tomaremos “Serie y suplemento”, de Ricardo Rodulfo. Aunque
el autor refiere haber reformulado el dispositivo de las series complementarias de
Freud porque no sería pertinente aplicarlo sin más a niños y adolescentes, se trata
de uno de esos textos que conviene tener siempre a mano, ya sea que estemos
trabajando con un niño, un adolescente o un adulto.
Actividad Clase Nº 3
Seleccione la respuesta que considere correcta y justifique su elección. Envíe un archivo de
documento con su escrito.
¿Qué consecuencias en la clínica le parece a Ud. traería considerar las series en tanto
suplementarias?
2- Se podrían atender a niños y adolescentes mientras que con las series complementarias
no.
Trabajaremos los capítulos 1 al 3 del libro "Dibujos fuera del papel" de Ricardo Rodulfo.
A través de una serie de materiales clínicos, el autor va a proponer una serie de
lugares/espacios en los cuales el sujeto deberá aposentarse/habitar para realizar las
diferentes escrituras / dibujos / marcas, a través de las cuales se irá subjetivando.
4) Trabajaremos los capítulos 1 al 3 del libro "Dibujos fuera del papel" de Ricardo Rodulfo.
A través de una serie de materiales clínicos, el autor va a proponer una serie de
lugares/espacios en los cuales el sujeto deberá aposentarse/habitar para realizar las
diferentes escrituras / dibujos / marcas, a través de las cuales se irá subjetivando.
El proceso originario
Piera Aulagnier.
Una primera puntuación antes de empezar con Aulagnier:
Vamos a presentar una serie de ideas que se ocupan de las primeras
operaciones que fundan la constitución subjetiva.
Abordaremos la temática desde distintos autores . Cada uno con
diferentes concepciones acerca de éstas primeras operaciones.
Para lo cual proponemos que se permita al menos dos cosas;
ACLARACIÓN IMPORTANTE:
Se trata de un modelo teórico que presenta de entrada algunas
paradojas con las que tendremos que convivir para avanzar en
nuestro recorrido.
DOBLE ENCUENTRO
¿Por qué doble?
VIOLENCIA PRIMARIA
EL PROCESO ORIGINARIO
PICTOGRAMA
Es un modo específico de representar en la psique la
información (recordemos, siempre libidinal) que funda y
constituye el aparato psíquico.
cuerpo.
Al grabar ese afecto a su vez liga ese cuerpo, permitiendo que
pase gradualmente al territorio psíquico.
Si el afecto que predomina en las experiencia sucesivas de
encuentros está asociado al placer se inscribirán:
PICTOGRAMAS DE FUSIÓN
PICTOGRAMAS DE RECHAZO
Recordemos……
La inscripción PICTOGRAMATICA, no diferencia afecto de
representación. LA REPRESENTACIÓN ES EL AFECTO y EL
AFECTO LA REPRESENTACIÓN.
HAY QUE LOGRAR QUE CONSIGA OCUPARLO, QUE SE VUELVA HABITABLE PARA
ELLA. HABITAR UN LUGAR, ES PONER COSAS PROPIAS ALLÍ.
NIÑA DE LA TIZA
¿Qué condiciones tienen que darse para que un niño vaya, migre, de
una posición a otra?
¿y qué tiene que acarrear para eso, tal como la niña lleva la tiza en la
mano?
Nuestro propio cuerpo, una vez que lo hemos adquirido, significado como
tal, es un heredero, una derivación, un injerto de ese lugar denominado
como madre. Lo de “madre” se injerta en nuestro cuerpo. EL ACARICIAR
PARECE CUMPLIR UNA FUNCIÓN DE ESCRITURA DEL CUERPO EN TANTO
SUBJETIVIDAD. JUEGO DE INTERCAMBIOS MADRE-NIÑO EN TANTO ESCENA
DE ESCRITURA.
En la niña de la tiza el pizarrón permanece impenetrable, inanimado. Sin
el júbilo de un “yo” que venga a alojarse en su seno. La referencia a un
espacio posible de animarse al ser habitado se vincula a la categoría de lo
transicional en Winnicott.
El juego es por si mismo una terapia. Conseguir que los chicos jueguen es una
psicoterapia de aplicación inmediata y universal, e incluye el establecimiento de una
actitud social positiva respecto del juego, hay que considerar a los juegos como
parte de un intento de precaverse contra los aspectos aterradores del jugar, cuando
los niños juegan tiene que haber personas responsables cerca, pero ello no significa
que deban intervenir en el juego. El juego es una experiencia siempre creadora, y es
una experiencia en el continuo espacio – tiempo, una forma básica de vida La
interpretación fuera de la madurez del material es adoctrinamiento, y produce
acatamiento. El juego tiene que ser espontáneo, o de acatamiento o aquiescencia,
si se desea avanzar en la psicoterapia.
Resumiendo:
• Para entender la idea del juego es útil pensar en la preocupación que caracteriza
el jugar de un niño, el contenido no importa, lo que interesa es el estado de casi
alejamiento, afín a la concentración de niños mayores y adultos.
• Esa zona de juego no es realidad psíquica interna, se encuentra fuera del individuo
pero no es el mundo exterior.
• En ella el niño reúne objetos de la realidad exterior y los usa al servicio de una
muestra derivada de la realidad interna.
• Al jugar manipula fenómenos exteriores al servicio de los sueños
• Hay un desarrollo que va de los fenómenos transicionales al juego
• El juego implica confianza y pertenece al espacio potencial entre el bebe y su
mama
• El juego compromete al cuerpo
• La excitación corporal en las zonas erógenas amenaza a cada rato al juego
• El juego es satisfactorio
• El juego llega a su propio punto de saturación que corresponde a la capacidad
para contener experiencias
• El juego es intrínsecamente excitante y precario
Movimientos de apertura
Los movimientos de apertura son esos primeros movimientos que van a dar
inicio al espacio transferencial, entre estos movimientos el analista debe tratar
de indagar sobre cuánto tiempo ha pasado desde la aparición de los primeros
síntomas y desde que se dio cuenta. Además, habrá que determinar cuáles
son los factores que hacen que la consulta se formule en ese momento y no
en otro, puntualizando tanto el motivo que traen los padres como el que
plantean los niños.
Piera Aulagnier hablará sobre movimientos de apertura, plantea que hay prestar
atención a las entrevistas preliminares para observar si un sujeto podría comenzar
un tratamiento o si es mejor derivarlo a un colega, también espera encontrar en las
entrevistas elementos que le permitan realizar un “diagnóstico”. Por otro lado, afirma
que el analista tendrá que decidir si tiene interés en proponer-se a este sujeto como
eventual analista, Piera afirma que el analista deberá hacer un “autodiagnóstico”
sobre su capacidad de investir y sobre la posibilidad de mantener una relación
transferencial no con la estructura psíquica sino con la singularidad del sujeto al cual
se enfrenta: estar atento a cómo cuenta los acontecimientos de su historia, indagar
sobre el mito familiar y así pesquisar lo que será una futura transferencia. En ese
sentido, las entrevistas previas deberán proporcionar un tiempo necesario para
efectuar este trabajo de autointerrogación. Esta autora propone la definición de
“analizabilidad”, ésta refiere a que con la experiencia analítica emerge el conflicto
inconsciente que está en la fuente del sufrimiento psíquico y de los síntomas que
muestran el fracaso de la solución que el sujeto había elegido. Sin embargo esta
condición no es suficiente ya que es preciso que las deducciones que se extraigan
de las entrevistas preliminares tengan como consecuencia que el sujeto sea capaz
de tomar este conflicto, se haga cargo de su dolencia y logre modificar su
funcionamiento psíquico.