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Descartes elabora una teoría antropológica dualista es decir una concepción del ser humano
como un compuesto de las dos sustancias el pensamiento y la materia extensa como
sustancias independientes irreductibles entre sí. Esta teoría es defendida por racionalista La
cual defiende que la libertad del ser humano reside en el alma.
Es importante señalar que el alma y el cuerpo están estrechamente unidos según descartes y
también la gran insistencia de descartes en afirmar el alma como ser pensante, una sustancia
completamente diferente e independiente del cuerpo. Esta existencia no es gratuita, pues en
ella, cómo hemos dicho antes está en juegos la libertad.
En el cuerpo dentro de su concepción mecanicista todo está regido por leyes necesarias, y este
es un ámbito en el que no hay lugar para la libertad. El problema que tendría que afrontar
descartes como consecuencia de esa afirmación dualista, es la relación entre ambas
sustancias. Es el mismo problema que en su momento tuvo que afrontar Platón, para
descartes el problema es aún más agudo por dos razones. La primera, porque la separación
que establece es más radical Ya que poseen atributos distintos: el pensamiento y la extensión.
En segundo lugar porque es plenamente consciente de la estrechísima relación entre ambas.
Vemos esta relación por ejemplo cuando yo siento el dolor lo comprendo de verdad que están
relacionadas, pero cuando es otro el que sufre el dolor lo comprendo pero no lo siento ni lo
sufro.
¿ Pero como explicar esta estrecha relación? Descartes recurre a una explicación de tipo
fisiológico: nos explica que en el centro, en la parte más baja, del cerebro se encuentra la
glándula pineal, que es donde residiría el alma o al menos sería el punto de contacto entre el
cuerpo y el alma. Esta explicación es claramente insatisfactoria y está considerada como 1 de
los puntos más débiles de la filosofía cartesiana.
¿ Y cuál es la relación entre el cuerpo y el alma? Descartes nos dice que la relación entre alma y
cuerpo es como un combate entre los apetitos naturales y la razón y la voluntad. Las pasiones
son percepciones, sentimientos o emociones, pero cuyo origen es el cuerpo y se caracterizan
por ser involuntarias e irracionales. Por otro lado el alma tiene dos funciones: el
entendimiento y la voluntad. El entendimiento, es la facultad de pensar, de tener intuiciones
de las verdades claras y distintas y la voluntad por su parte es la facultad de afirmar o negar
que Descartes la identifica con la libertad. En definitiva la libertad es básicamente la capacidad
de elegir entre diversas opciones que se nos presentan.