Está en la página 1de 34

Poder Judicial de la Nación

TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL


CCC 39230/2020/TO1

Buenos Aires, 9 junio de 2022.-


Y VISTOS:
Para dictar los fundamentos del veredicto dictado el 2 de
junio de dos mil veintidós, en esta causa n° 6392 (lex nro.
39.230/2020), seguida a Denilson Iván YORKI CANO, DNI
94.618.142, paraguayo, nacido el 20 de junio de 1998 en la Ciudad de
Asunción, República del Paraguay, soltero, albañil, hijo de Andrés
Yorki y de Natalia Cano Yaquet, con domicilio en Luna 1427 del
barrio de emergencia 21-24 de esta ciudad, detenido en el Servicio
Penitenciario Federal; y a Guillermo Leonardo CASTILLO, DNI
43.873.088, argentino, nacido el 28 de febrero de 2002 en Capital
Federal, soltero, estudiante, hijo de César y de Verónica Alexandra
Molina, domiciliado en California 3500, manzana 7, casa 5 bis del
barrio de emergencia 21-24 de esta ciudad, actualmente detenido, y
domicilio real en California 3500, manzana 7, casa 5bis, detenido en
el Servicio Penitenciario Federal,
Intervinieron en el debate, en representación del
Ministerio Público, el señor Auxiliar Fiscal doctor Daniel Elía; a
cargo de la defensa del imputado Yorki Cano, el Defensor Público
Coadyuvante doctor Federico Larrain, y a cargo de la defensa del
imputado Castillo, la señora Defensora Oficial doctora Julieta
Matone.
Y CONSIDERANDO:
La Jueza Marcela Mónica Rodríguez dijo:
1º) El detalle de los hechos ventilados en el juicio.
La Fiscal Nacional en lo Criminal y Correccional, titular
de la Fiscalía Nro.16 requirió la elevación a juicio de la presente causa
y les imputo a Denilson Iván Yorki Cano y a Guillermo Leonardo
Castillo el siguiente hecho:
“A.-)… haber intentado apoderarse ilegítimamente,
mediante el empleo de una pistola marca Bersa, calibre 9x19mm, con
numeración suprimida, y junto a dos hombres no identificados, de

#35121680#330566147#20220609093940092
elementos de valor de Ricardo Julio Linares Galván Araujo, Romina
Haydée García y Hugo Daniel García.
Ello ocurrió el 10 de septiembre de 2020,
aproximadamente a las 16 horas, cuando los damnificados
circulaban en el vehículo Citroën Berlingo, dominio AB841PE, y se
detuvieron en el semáforo de la esquina de la avenida Iriarte y Luna
de esta ciudad, y se le aproximaron los imputados, uno de ellos
armados, ante lo cual Linares Galván Araujo, que conducía el
vehículo, tomó una pistola marca Glock modelo 17, cal 9x19 mm
número de serie RTC697 propiedad de su esposa, que se encontraba
en el compartimento de la parte superior del parasol del vehículo, y
efectuó un disparo que le pegó en la cara a Yorki Cano, quién cayó al
piso, y junto a él, el armamento que empuñaba, mientras que Castillo
y los otros dos hombres escaparon.
En forma inmediata, Romina Haydée García dio aviso a
personal de Prefectura Naval, y mientras se llevaba a cabo el
pertinente procedimiento, los vecinos comenzaron a increparlos, y a
arrojarles cosas, y allí Hugo Daniel García reconoció a Castillo
entre ellos, que fue detenido junto con Yorki Cano, que fue trasladado
a un hospital para ser atendido.
También se secuestró la pistola marca Glock modelo 17,
calibre 9x19mm número de serie RTC697 con dos estuches
cargadores -uno de dieciséis cartuchos y otro de quince cartuchos-,
utilizada por el damnificado Linares Galván Araujo, y de la pistola
marca Bersa calibre 9mm con numeración erradicada, con tres balas
en el cargador y una en recámara, utilizada por Yorki Cano, y una
vaina servida con inscripción en el culote 9x19 FLB2013.
B.-) Asimismo, se le imputa a Yorki Cano haber portado,
sin la debida autorización legal para ello, la pistola Bersa calibre
9mm, con numeración presuntamente erradicada, con tres balas en el
cargador y una en recámara, apta para producir disparos, que fue
secuestrada en ocasión del hecho “A”…”

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

2°) Algunas de las circunstancias que se ventilaron en


el juicio.
A.- La apertura del debate y la versión proporcionada
por los imputados.
Abierto el juicio y luego de que se diera lectura al
requerimiento de elevación a juicio que formulara la Fiscal de
Instrucción, a tenor de lo establecido por el art. 347 del Código
Procesal Penal de la Nación, en el que se les imputó la conducta
delictual mencionadas precedentemente, se convocó a los imputados a
presentarse ante el Tribunal, ocasión en la que luego de referirse a sus
condiciones personales, expresaron que era su deseo declarar.
Así, Leonardo Guillermo Castillo expresó que :” el día
que fui detenido, estaba en mi casa mensajeándome con Angie
Carabajal, que me iba a encontrar con ella, quedé en verla en la
casa; cuando salgo a buscar un remise, le mando mensaje; lo cruzo
a Iván Yorki sobre la misma vereda, le digo si me acompaña a buscar
un remise sobre Iriarte y Luna, me dijo que sí; cuando estábamos
cruzando se frena un coche y se escucha impacto de un tiro, veo que
cae en el piso; me voy corriendo asustado a llamar a la familia.
vuelvo al lugar del hecho; él estaba tirado en el suelo… yo no quería
cometer ningún delito… me acerco como si nada y me detienen; me
llevan a garita sobre Luna, me secuestran 1400 pesos, el teléfono, los
auriculares; la policía me decía que yo tenía un arma; nunca Iván
Yorki me dijo que tenía arma… le pido las huellas a los oficiales
porque yo no tenía nada que ver… Cuando estaba la garita me
sonaba el teléfono que me estaba llamando mi amiga Angie, sonaba
el teléfono… veía los mensajes… yo estaba tranquilo porque no hice
nada… tengo los mensajes para mostrar que me estaba mensajeando
con ella.”
Por parte, el imputado Yorki Cano manifestó que quería
decir lo mismo que Castillo que “en ningún momento tuvimos
intención de ir a robar…”

#35121680#330566147#20220609093940092
Ambos encartados hicieron saber que no contestarían
preguntas.
Durante el debate y de conformidad con lo solicitado por
las partes se escucharon a los siguientes testigos:
1.- Hugo García.
Refirió ser personal policial, Oficial Principal de la
Policía de la Provincia de Buenos Aires, con dieciséis años de
antigüedad. Recordó que el día del hecho “estaba en lo de mi amigo
Linares; me pidió que lo acompañe a buscar unas zapatillas para un
regalo porque era el cumpleaños de la madre… fuimos al puente
Alsina en la camioneta de Lineres, iba también su mujer que bajó a
retirar zapatilla…yo iba en la parte trasera… para volver puso GPS
y nos mandó por una zona que se notaba era un barrio de
emergencia; era cerca de las 16 horas; no recuerdo el nombre de la
calle pero sé qué era una avenida, no recuerdo bien; no conozco
Capital… le digo a Linares por dónde estábamos yendo…había dos
muchachos, uno que tenía el barbijo de la película ´El Guasón´… veo
que se vienen hacia el auto; me intento bajar pero no puedo, estaban
trabadas las puertas, él tiene una nena… Linares había agarrado el
arma de su mujer y había efectuado disparo. Ahí se reunió gente y
nos tiraban cosas hasta con un fémur de una vaca nos tiraron.
Linares y Romina se tuvieron que ir del lugar…”
Aclaró que “vi a dos personas en la entrada de un
pasillo; estaban en la vereda, ellos estaban entre en el cordón y el
asfalto cuando estábamos frenando en el semáforo; es un barrio de
emergencia, uno se pone inquieto; yo venía con el teléfono, lo dejé y
empecé a mirar para todos lados…y le aviso a Ricardo, le dijo ¿viste
a esos dos?… yo los tenía enfocados y se hacen un gesto como
´vamos´; el que tenía el barbijo del Guasón le hace el gesto al otro; el
del barbijo del Guasón saca el arma y se vienen hacia la camioneta,
ahí los pierdo de vista porque quiero bajarme de la camioneta y las
puertas estaban trabadas… “

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

Expresó -a preguntas- que “estábamos detenidos por el


semáforo…cuando me acomodo, se vienen, cuando se vienen me
quiero bajar; ahí le digo a mi amigo… yo no escuché el disparo, yo
quería bajar, cuando se destraba la puerta, me bajo y veo al
muchacho tendido en el piso y el arma al costado y el personal de
prefectura que venía corriendo, me doy a conocer como policía y le
expliqué lo que había pasado; el personal de Prefectura agarra
arma, yo le digo a Romina que llame 911, cierro la camioneta. …
retorno al lugar donde estaba Linares y veo que viene el otro
masculino con los familiares del herido que estaba en el piso… nos
tuvo que sacar la policía de la ciudad. Justo había ahí una
carnicería, rompen el parabrisa de la camioneta; a mí me separan, a
Ricardo lo sacan… al otro masculino que volvió lo reconocí porque
tenía ropa clara. después lo veo a él con esta ropa en TN, en las
filmaciones veo que de atrás de ellos salieron corriendo otros dos”
A preguntas de la Defensa de Castillo respondió que
“estaba sentado en el asiento trasero de la camioneta detrás del
asiento del acompañante; en el medio estaba, un poco al costado…la
camioneta tenía vidrios polarizados”.
A preguntas de la defensa del imputado Yorki Cano, el
testigo García respondió que “vi a una persona armada, entre la cinta
asfáltica y el cordón, en la puerta del pasillo, cuando se lanza para
acá venía con el arma, ahí es cuando me quiero bajar. Me focalice el
arma, ahí es cuando me quiero bajar; no escuché ninguna
manifestación; no escuché nada, no vi disparar a quien manejaba…”
Agregó “… yo no sabía de qué arma se trataba, después
cuando la veo en el piso sí…”
2.- Ricardo Linares Galván.
Refirió que “íbamos a la empresa Andreani, había
comprado un regalo para mi mamá por internet, íbamos en la
camioneta Citroën Berlingo que está a nombre de mi señora; yo
conducía, mi señora de acompañante, y Hugo atrás; vamos a buscar
el regalo, yo no conozco Capital y pongo el GPS; me hace ir por

#35121680#330566147#20220609093940092
Villa Zabaleta; ingresamos en la zona, llego al semáforo, serían las
15.00 hs. y detengo la marcha…yo venía en mi mundo, pensando en
mis cosas; en eso siento que Hugo me avisa ¡cuidado, cuidado¡ fue
muy rápido; veo por la ventana a dos personas que vienen de un
pasillo; el primero lo veo más cerca del espejo y le hace seña al
segundo, y los veo muy cerca a una distancia de un metro y medio;
vienen los dos a paso rápido hacia la camioneta … uno adelante,
más adelante que el otro, pero el otro levemente atrás, el primero que
se acerca al de atrás y con la mano le hace seña y el otro saca el
arma y me apunta y yo en forma inconsciente saco el arma de mi
señora y le disparo; suena la detonación el cae y el otro sale
corriendo; desciendo del vehículo y le dijo a mi señora que llame al
911; apareció una persona que dijo que era la hermana del que
estaba herido; llega Prefectura, incauta el arma; la gente se agolpa;
en eso escucho que, la hermana del herido le dice al otro sujeto que
se había ido y vuelto después ´por culpa tuya, por culpa tuya´”.
Explicó -además- a preguntas que “tengo experiencia con
armas; me iba a disparar directamente; sentí miedo, por mí y por los
que estaban en camioneta…yo tomo arma de mi señora que estaba en
el buche de la camioneta y disparo… el otro sale corriendo…viene
una persona que dice ser la hermana del que estaba herido, me dice:
´yo soy la hermana´; ella se quería acercar, intentó acercarse al
arma; yo le digo que se retire; se acerca prefectura y muestro donde
está el arma, y Prefectura la incauta… se acerca la gente, empiezan
las piedras; la hermana le dice al otro que salió corriendo ´por culpa
tuya por culpa tuya´, el otro sujeto había vuelto… ahí me comienzan
a pegar la hermana y otros; yo lo reconozco, prefectura lo detiene”
Recordó que “cuando García me alerta estaban bajando
de la vereda a la calle venían haciendo gestos, el que tenía el arma
venía haciendo gestos típicos para robar, uno lo interpretaba, yo fui
policía de la Provincia de Buenos Aires… el que portaba el arma
tenía barbijo, campera negra y un pantalón negro. El otro pantalón

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

negro, campera clara y pelo teñido. Había muchas personas


posteriormente”
A preguntas respondió que “me apunta y la amartilla...lo
mío fue instintivo, estiré la mano y tomé el arma de arriba del buche,
es un buche abierto… Hugo estaba atrás de mi señora, sé que se
movió porque intentó bajarse, pero no pudo por la traba de seguridad
de la camioneta. No le preste atención de qué lado se quiso bajar… la
camioneta tiene puerta de los dos lados, el cierre centralizado anda
mal de mi lugar, estaba rota la puerta”
Expresó que “el otro no recuerdo si tenía barbijo… el
que tenía el arma sí… uno mira las manos, lo peligroso son las
manos…no vi que tuvieran barbijo. Después veo que el otro tenía
cuando estaba en el piso… sí, los vidrios de camioneta son
polarizados… las ventanillas estaban bajas porque soy fumador, no
recuerdo si iba fumando en el momento.”
3.- Romina García.
Refirió: “soy policía desde hace 14 años, soy Subteniente
de la Policía de la Provincia de Buenos, mi marido venía manejando
de la camioneta, yo de acompañante, este chico que es amigo venía
sentado atrás, veníamos de Caballito, habíamos ido a buscar una
compra que efectuamos por internet, y mi marido tenía una entrevista
de trabajo, el GPS nos manda por Iriarte, cuando llegamos a
semáforo, me llega mensaje, entonces bajo vista y escucho uno
detonación, cuando la levanto, veo que sale corriendo una persona,
lo miro a mi marido a ver si estaba herido y me dice que llame al 911
y a la ambulancia; yo agarré el arma y la puse en mi cartera… vino
la ambulancia móvil y estaba Prefectura. …yo escuché que decían
entre ellos -García y mi esposo- : ¡mira, mira, mira¡…pasaron
segundos y vi a persona que se agachó y automáticamente se fue
corriendo, estaba con ropa oscura, gris oscuro, pantalón…no
recuerdo haberla visto nuevamente… Me llevaron a una oficina tipo
contenedor de Prefectura…Yo escucho que había alguien herido,
pero no llegué a verla… empezaron a tirarnos cosas a la camioneta y

#35121680#330566147#20220609093940092
nos sacaron enseguida de ahí… me pidieron documentación de
arma… era un arma personal mía, una Glock… estaba en una
especie de parante que tiene la Berlingo… siempre la pongo ahí… lo
único que me dijo -refiriéndose a su esposo- es que me tranquilizara,
yo estaba muy nerviosa... García se había quedado en lugar del
hecho, después lo llevaron”
4. Federico Alejandro Ruiz:
Refirió que “en el lugar trabajé 4 años, fui Cabo 2do,
ahora soy Cabo 1ero… esa vez fui interventor; cuando estaba
recorriendo con el móvil por la calle Iriarte, recibimos una alerta,
pidiendo prioridad, nos desplazamos y encontramos una persona
tirada y un Citroën y el conductor relató lo que había pasado… los
vecinos comenzaron a realizar tumulto y tiraron objetos hacia
nosotros…yo hice la consulta y realicé procedimiento. secuestré dos
armas”
A preguntas refirió que “si mal no recuerdo con el
primero que tomo contacto es con el conductor, estaba muy nervioso;
la Glock la entregan los ocupantes, la titular la entrega, era la
acompañante, no recuerdo su nombre; no vi de dónde la sacó, no
sabría decirle”

Finalizada la recepción de toda la prueba testimonial y


con la expresa conformidad de las partes también se incorporaron al
debate las siguientes piezas:

• acta de detención de Yorki Cano (fs. 4/5);


• acta de detención de Castillo (fs. 9/10);
• acta de secuestro (fs. 13);
• acta de implantación de consigna (fs. 16);
• acta de entrega (fs. 17/18);
• acta de la Unidad Criminalística Móvil (fs. 7/8 y
9/10);
• acta de lectura de derechos de fecha 10 de
septiembre de 2020;

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

• acta de reconocimiento médico (fs. 13);


• informe médico legal (fs. 8/9);
• informe social del imputado Castillo;
• informe social del imputado Yorki Cano;
• informe de la Agencia Nacional de Materiales
Controlados;
• informe pericial nro. 1485 del Gabinete Científico
Área II Sur;
• informe pericial nro. 1402/2020 (informe Pericial
Microscopia Residuos de Disparo)
• informe pericial nro. 1275-76-77/2020, el informe
pericial nro. 1381/20;
• acta de apertura de muestras (Microscopia);
• informe pericial nro. 1477/20 (adelanto Pericia
Revenido Químico);
• los certificados de antecedentes de Castillo y Yorki
Cano;
• croquis (fs. 19);
• las vistas fotográficas de documentación (fs.
22/25);
• las vistas fotográficas de Castillo y Yorki Cano;
• el video del Centro de Monitoreo Urbano obrante
en autos;
• la historia clínica aportada por el Hospital Argerich
del imputado Yorki Cano;
• el video y la constancia actuaria que da cuenta de
que ha se ha hallado el teléfono celular incautado en auto.

Alegatos.
Tal como surge del registro fílmico del debate oral,
agregado como documento digital a la causa y de lo consignado en el
acta de debate, las partes formularon sus alegatos.

#35121680#330566147#20220609093940092
La Fiscalía.
Consideró el doctor Daniel Elía, Auxiliar de la Fiscalía
por los argumentos de hecho y derecho que expuso que “…ambos
encartados fueron responsables del delito de robo agravado por el
uso arma de fuego tentado, en calidad de coautores, en tanto
utilizaron el arma de fuego para amedrentar a los damnificados, lo
que constituye la violencia requerida por el art. 166 del C.P., en tanto
el arma resultó apta para el disparo y de funcionamiento normal.
Castillo, aunque no llevaba el arma consigo debe también responder
por el total complejo de la maniobra, lo que ocurre cuando lo
planeado es un robo con violencia o intimidación con uso de armas;
existió un acuerdo y fue convenida la acción que formó parte del
riesgo introducido por Yorki Cano y contó con el empleo de arma por
su parte para intimidar a las víctimas y su presencia potenció la
eficacia ofensiva de Yorki, debilitando aún más las posibilidades
defensivas de los ocupantes del auto, por lo que el empleo del arma
también le pertenece a Castillo”.
Sostuvo que “…el delito resultó tentado, pero
igualmente cabe analizar el momento consumativo, siempre es difícil
de establecer en el caso concreto, respecto al comienzo de ejecución
que supera los actos preparatorios y que permite considera que
ingresaron en la tentativa… la teoría objetiva individual, que indica
que la tentativa comienza con la actividad en que el autor, según el
plan delictivo se pone en relación inmediata con la realización del
tipo delictivo. Si la acción típica es la de sustraer, el autor, de
acuerdo al plan dispuesto, pone en actividad inmediata la realización
típica. Es importante que el principio de ejecución sea parte del plan
del autor. Sobre esta base, considera que el hecho superó la etapa de
los actos preparatorios y entró en el campo de la tentativa”.
Concluyó que “(l)as reglas de la lógica y la experiencia,
indican que dos sujetos que se acercan a un auto detenido, luego de
hacerse gestos y extrayendo uno de ellos un arma de fuego con la que
apunta al conductor, resulta suficiente para considerar que existe

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

comienzo de ejecución del robo. No se conocían, no tenían vínculos


víctima y victimarios, que fueron elegidos al voleo”
Así, solicitó “se condene a Yorki Cano y Castillo como
coautores del delito de robo agravado por el uso de arma fuego, en
grado de tentativa (arts. 42, 45, 166, inc. 2, 2do párrafo, del C.P.) y
Yorki Cano en concurso ideal con portación de arma de fuego de uso
civil condicionado, en calidad de autor (arts. 54 y 189 bis, inc. 2, 2do
párrafo del C.P.), y se les imponga la pena de 4 años y 2 meses de
prisión, accesorias legales y costas (art. 12 del C.P.).

Las defensas.
a. La defensa del imputado Denilson Iván Yorki Cano
solicitó la absolución de su asistido.
Considero el doctor Federico Larraín que la Fiscalía
“…tuvo por acreditado que el imputado intentó apoderarse
ilegítimamente con un arma de fuego de las de pertenencias de tres
personas que viajaban dentro de un rodado en la fecha y hora
indicadas, y consideró que Yorki se aproximó con Castillo y allí
Linares Galván toma el arma del buche y efectúa un disparo y cae en
el asfalto junto al arma que portaba con tres balas en su cargador y
una en recámara”. Y que para ello la Fiscalía había tenido en cuenta
“los testimonios de esas tres personas y el análisis detallado del
video y de la restante prueba reseñada”
Sin embargo, consideró que “… ambos imputados
explicaron las circunstancias por las que estaban en el lugar y que no
fueron a robarle a nadie”, tal como lo dijo su asistido. Y que “( l)a
prueba se asienta entonces en esos tres testigos, sin otra que ratifique
sus dichos, porque del video la defensa extraerá otras conclusiones,
diferentes a las que arribó la Fiscalía”.
Señaló que “los damnificados eran dos policías, una la
dueña del arma, y el otro, su marido, ex policía, todos de la provincia
de buenos aires. La dueña del arma no dio mayores precisiones y no
vio al marido tomar su arma del buche cuando estaba a su lado, por

#35121680#330566147#20220609093940092
lo que lo que estaba haciendo Romina García requería de una
concentración de importancia que no la dejó ver lo que ocurriera
mientras mensajeaba con el celular. Hugo García, que iba en el
asiento trasero, también policía amigo del matrimonio y compañero
de trabajo Romina, le avisa a Linares que dos personas se hacen
gestos y que van hacia el auto, uno con arma en mano.
Llamativamente un testigo con tanta experiencia no vio el momento
en el que su amigo Linares Galván toma el arma, tampoco escuchó el
disparo”
En esa línea apreció que las declaraciones de los testigos
no se corroboraban con el contenido del video que ilustraba en
momento del hecho.
Consideró que “la rapidez del suceso y las declaraciones
confusas de las víctimas, permiten concluir que no hubo inicio o
comienzo de ejecución y por ello peticiona la absolución, aunque más
no sea por la duda”
En subsidio, y entendió que no había dudas respecto
“(d)el secuestro del arma que llevaba su defendido pero, aunque el
fiscal modificó el modo concursal por el que fueron requeridos a
juicio, entiende que el concurso debe ser aparente. Se trata de un solo
hecho y debe ser enmarcado en una sola calificación y bajo una
única sanción penal conforme se estableció en los fallos “Batallan”
(rto. 3/6/98) y Guldurini (rto. El 22/10/04) por la Sala II de la
Cámara de Casación.”
Sin embargo, consideró que solo se había agregado
“… un adelanto de pericia … en donde se concluye que el arma fue
apta y de funcionamiento normal y el cartucho tomado al azar,
idóneo para sus fines específicos. Allí se consigna que el informe
completo en papel será elevado a la brevedad, informe que no fue
remitido o no fue agregado a la causa lex-100 por lo que se verifica
una errónea calificación, pues el tipo penal imputado requiere que el
arma sea apta y cuente con potencial lesivo, pero aquí no se

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

comprobó la aptitud de la munición del arma que llevaba Yorki y por


tanto no reúne los requisitos de la figura endilgada”
Entendió que “no pudo establecerse específicamente a
través de qué operaciones técnicas empleadas ni qué cartuchos se
usaron, si de la Glock o de la Bersa…ante la incertidumbre, debe ser
analizado a favor de su asistido y derivar en su absolución”
Sostuvo que la única “…conducta reprochable a Yorki
Cano, en consecuencia, es la de robo simple tentado y por ello la
pena no podrá alejarse del mínimo y de cumplimiento en suspenso
ante la carencia de antecedentes penales”.
Por lo dicho, solicitó la absolución de su defendido
Denilson Iván Yorki Cano; en subsidio impetró la absolución por
duda; y en caso de no compartirse su criterio pidió que se modificara
la calificación legal del hecho por robo simple tentado y se le
impusiera una pena en suspenso, ordenándose su inmediata libertad.
Hizo reserva de recurrir en casación y del caso federal.
b. A su turno, la doctora Julieta Mattone, con base en los
argumentos de hecho que desarrolló, consideró que “no hay prueba
suficiente para tener por acreditada la intención de sustracción y
subsidiariamente de no compartir el Tribunal su postura, estima que
no hubo prueba suficiente respecto a que Castillo tenía conocimiento
de lo que haría Yorki” y que “existieron dos fuentes información, la
prueba testimonial y las filmaciones…” y que las declaraciones
testimoniales de Hugo García y Linares Galván Araujo contradecían
las secuencias registradas en el video.
Argumentó que desde que los imputados Yorki Cano y
Castillo aparecían en la filmación hasta que Linares Galván disparaba
su arma transcurrieron cuatro segundos y en ese lapso acotado Linares
y García habían descripto “lo que sintieron y lo que creyeron haber
visto en ese tiempo” más no lo que mostraba el video.
Señaló que en primer término “… García y Linares
perciben señas diferentes en el mismo tramo de la caminata hasta que
se produce la lesión de Yorki” y que “…ambos describen acciones

#35121680#330566147#20220609093940092
que no se ven en los registros fílmicos y la fiscalía dice que el video
ratifica los testimonios, cuando fue lo opuesto”
Así, analizó la filmación a la luz de las declaraciones
testimoniales de Hugo García y de Ricardo Linares y concluyó que
“…estos dos testigos no permiten tener por acreditado que Castillo
haya querido sustraer”. Señaló que la duda que provoca el confronte
entre sus dichos y las imágenes, imponía una decisión absolutoria.
En subsidio, y para el caso que el Tribunal tuviera por
acreditado que Yorki Cano exhibió un arma para sustraer elementos
del vehículo, solicitó su absolución por entender que el Fiscal no
había acreditado que su defendido hubiera tenido conocimiento de lo
decido por Yorki Cano.
En apoyo de su argumentación sostuvo que “Castillo
dijo que estaba en su casa y que se estaba mensajeando con Angie
Carabajal, que iba a tomar un remise para encontrarse con ella y que
tenía $ 1400 para pagar el viaje, que es lo que justamente le
secuestran a Castillo y fue con Yorki a tomar el remise para lo cual
cruzan la calle hasta que escucha el disparo y se va asustado y vuelve
con la familia de Yorki mostrándose asustado al verlo en suelo”.
Finalmente se adhirió al planteo de doctor Larraín en
cuanto a la no aplicación de la agravante arma de fuego, por “no
haberse acreditado en el marco del debate que el objeto secuestrado
fuera un arma de fuego conforme art. 3, inc. 1, del dec. 395/75” ya
que para ello dicho elemento debería estar en condiciones de ser
disparado en el caso concreto y para ello debió estar cargada, apta, al
igual que las municiones.
Solicitó que se calificara el suceso como robo, tentado y
se le impusiera de pena de cuatro meses de prisión, en suspenso atento
a las pautas de atenuación que ponderó.

3°) El hecho motivo de juzgamiento y el análisis de la


prueba incorporada durante el debate.

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

Se probó en autos que el día 10 de setiembre de 2020,


siendo aproximadamente las 15.25 hs. en momentos en que Ricardo
Julio Linares Galván Araujo conducía el vehículo marca Citroën
Berlingo, dominio AB841PE por la Avenida Iriarte en su intersección
con Luna, junto a su esposa Romina García -ubicada en el asiento
delantero derecho- y su amigo Hugo García -sentado en el asiento
trasero, parte media- detuvo su marcha por el semáforo. Fue en ese
momento en que Linares, advertido por Hugo García, observó por el
espejo que los imputados Yorki Cano y Castillo cruzaban la calle en
dirección al rodado, acercándose rápidamente, advirtiendo que el
primero de los nombrados, luego de una seña que le hizo el segundo,
extrajo un arma de fuego y lo apuntó. En segundos, y ante la clara
exteriorización del fin que los guiaba -desapoderarlos de las
pertenencias que llevaban consigo-, Linares tomó la pistola marca
Glock, modelo 17, calibre 9x19 mm, número de serie RTC697
propiedad de su esposa Romina García (Subteniente de la PBA) que
estaba colocada en el compartimento superior (“buche”) de la
camioneta y efectuó un disparo que impactó en el rostro de Denilson
Yorki Cano quien cayó en la calzada y, junto a él, el arma de fuego
que portaba -una pistola marca Bersa calibre 9x19mm, con la
numeración suprimida-. Ante esa situación el imputado Castillo fugó,
corriendo en la dirección al lugar de donde habían partido.
En forma inmediata Linares descendió del vehículo, le
indicó a su esposa Romina García que llamara a una ambulancia y, en
forma inmediata se hizo presente personal de Prefectura Nacional
dándose inicio al procedimiento de rigor.
Los vecinos del lugar comenzaron a agolparse alrededor
de los damnificados insultándolos y arrojándoles elementos
contundentes en clara actitud de repudio por lo ocurrido. Fue entonces
cuando Hugo García y Linares se percataron que el otro sujeto
-Castillo- que instantes antes junto con el herido había intentado
robarles, había regresado al lugar uniéndose al grupo de vecinos por

#35121680#330566147#20220609093940092
lo que avisaron a la autoridad la que procedió a detenerlo y, a
trasladar a Yorki Cano al Hospital Argerich para ser atendido.
El Prefecto Ruiz secuestró -además- las dos armas de
fuego: la pistola marca Glock, modelo 17, calibre 9x19mm, número
de serie RTC697 con dos cartuchos cargadores -uno de dieciséis
cartuchos y otro de quince- utilizada por Linares Galván y la pistola
marca Bersa calibre 9 mm. con numeración suprimida, con tres balas
en el cargador y una en la recámara y, una vaina servida con
inscripción en el culote 9x19 FLB2013, ambas aptas para el disparo y
de funcionamiento normal al igual que los proyectiles.
La materialidad del suceso y la intervención responsable
que les cupo a los encartados se acreditan con los dichos de Hugo
García, Ricardo Linares Galván y Romina García cuya veracidad y
verosimilitud no puede ponerse en duda pese a los esfuerzos que
efectuaron las defensas para descalificar sus dichos.
Parto de la base que ambos encartados admitieron su
presencia en el lugar del hecho y que Yorki Cano era quien tenía en su
poder el arma de fuego marca Bersa calibre 9mm con la numeración
suprimida cuando recibió el disparo que Linares efectuó con la pistola
marca Glock, propiedad de su esposa Romina García.
Así también lo entendió el doctor Larraín cuando en el
transcurso de su alegado puntualizó que no había dudas “sobre el
secuestro del arma que llevaba su defendido”.
El imputado Yorki Cano -sin embargo- expresó que “en
ningún momento” ni Castillo ni él habían tenido “intención de ir a
robar.”
Por su parte Castillo, luego de admitir que era él quien se
encontraba con Yorki Cano en el momento en que éste recibió el
disparo, manifestó que esa tarde “…lo cruzo a Iván Yorki sobre la
misma vereda, le digo si me acompaña a buscar un remise sobre
Iriarte y Luna, me dijo que sí; cuando estábamos cruzando se frena
un coche y se escucha el impacto de un tiro, veo que cae en el piso;

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

me voy corriendo, asustado a llamar a la familia”. Manifestó que


luego regresó al lugar y fue detenido.
Con base en las versiones que brindaron las defensas han
sostenido -con similares argumentos- la inocencia de sus asistidos
impetrando la libre absolución de ambos introduciendo una hipótesis
fáctica opuesta a la sostenida por la acusación en la que la crítica a los
testimonios de los tres damnificados -principalmente- el de Ricardo
Linares Galván Araujo y Hugo García fue el eje el torno al cual
giraron sus estrategias.
Sostuvieron que lo declarado por los testigos no había
sido corroborado por las imágenes que aquella tarde habían sido
captadas por la cámara de video instalada en el lugar, puntualizando
algunas diferencias en circunstancias que no resultaron esenciales, y
en otras que presentadas como “contradictorias” -en realidad- fueron
contradichas por hipótesis que -aunque posibles- de ningún modo
podrían ser verificadas en la causa por ser contrafácticas.
Preguntarse cuál fue la razón por la cual Linares Galván
Araujo, Hugo García y Romina García no actuaron de un modo
distinto al que lo hicieron al revestir dos de ellos la condición de
policías; o porque no sortearon la emergencia, retirándose del lugar
cuando podían hacerlo, son interrogantes que pueden sugerir un
sinnúmero de respuestas en el universo de lo posible.
Sin embargo, el caso traído a juicio tuvo ocurrencia en el
mundo de lo real, y como bien lo destacó la defensa de Castillo las
declaraciones testimoniales y el video son los dos principales
elementos de juicio con los que se cuenta y a ello habrá que atenerse.
Destaco -en primer término- que no se acreditó que el
vínculo de parentesco entre Linares y Romina García (marido y
mujer) y la amistad de ambos con Hugo García trasuntara un interés
particular de declarar del modo que lo hicieron para favorecer la
situación de Linares Galván Araujo.
Baste para ello recordar que la conducta de Ricardo
Linares Galván Araujo fue examinada y valorada por el magistrado de

#35121680#330566147#20220609093940092
la instrucción y mereció el encuadre jurídico de una acción justificada
en los términos del art.34, inc.6 de CP. Ese decisorio fue alcanzado
por el efecto de la cosa juzgada pues las partes no interpusieron
recurso alguno.
Tampoco la condición de policías de la Provincia de
Buenos Aires que revistió Linares en otro tiempo y la que -hoy día-
tienen Hugo García y Romina García podría ser considerada como
una circunstancia de demérito como pareció entenderlo la defensa de
Castillo.
El dato estadístico que trajo la doctora Mattone publicado
-según dijo- por el CELS en el año 2021 y obtenido de la página
violencia policial.org.ar indicativo de que se habrían registrado en el
año 2021 veintitrés (23) muertes de civiles en enfrentamientos
policiales, y que la policía de la Provincia de Buenos Aires figuraba
en el primer puesto de este ranking, no fue relacionado -en modo
alguno- con el hecho de esta causa.
De ahí que no es posible advertir -porque no lo explicó-
la incidencia que tal información podría tener en la ponderación de los
testimonios que pretende descalificar.
Descartada -entonces- la existencia de circunstancias que
obliguen a tacharlos por alguna inhabilidad, examinaré los reparos
que efectúan al contenido de esas declaraciones las que pueden
sintetizarse en una frase utilizada por la doctora Mattone durante el
alegato referida a que Linares Araujo y Hugo García “no hablaron de
lo que vieron sino de lo que creyeron haber visto, porque lo que dicen
haber visto, no se vio en el video”
Sin embargo, la detenida observación del video
incorporado al debate proyectado en cámara lenta (velocidad 0,25)
deja sin sustento las argumentaciones de las defensas ya que surge con
claridad que tanto Linares Galván Araujo como Hugo García relataron
con veracidad aquello que cada uno percibió a través de sus sentidos,
desde la distinta ubicación que ambos tenían en el vehículo y con

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

diferencia de fracciones de segundos -primero García y luego Linares-


de una brevísima secuencia.
Veamos.
Hugo García fue quien advirtió -según dijo- que el GPS
los estaba introduciendo en un barrio de emergencia, la Villa
Zabaleta, y que estaban en la intersección de Avenida Iriarte y Luna;
que por ello se inquietó. Así lo expresó en la audiencia cuando explicó
que “yo venía con el teléfono, lo dejé y empecé a mirar para todos
lados”; “vi a dos personas en la entrada de un pasillo; estaban en la
vereda”; “uno tenía el barbijo de la película ´El Guasón´; le aviso a
Ricardo, le digo ¿viste a esos dos?… yo los tenía enfocados y se
hacen un gesto como diciendo ´vamos´; el que tenía el barbijo del
Guasón le hace el gesto al otro”; el del barbijo del Guasón saca el
arma y se vienen hacia la camioneta, veo que se vienen hacia el auto;
me intento bajar, pero no puedo, estaban trabadas las puertas”
Del relato de García surge que fue el primero que detectó
la presencia de los imputados en la entrada del pasillo, sobre la
vereda, y quién los “focalizó”. Así vio que se hacían un gesto
(movimiento de cabeza) “como diciendo, vamos”. Este fue el primer
gesto que dijo García haber visualizado. Agregó también que
enseguida los sujetos se dirigieron hacia la camioneta; y precisó que el
que tenía el barbijo del “Guasón” -Yorki Cano- sacó un arma de
fuego.
Recuérdese que la propia defensa de Yorki Cano admitió
que su defendido -Yorki Cano- la tenía consigo.
Hugo García no mintió.
Por su parte, Linares Galván Araujo (el conductor) de la
Berlingo recordó -al igual que su amigo- que el GPS los había llevado
a la Villa Zabaleta; que él venía inmerso en sus pensamientos cuando
escuchó que Hugo García le dijo “¡cuidado, cuidado!” y que miró por
la ventanilla de su vehículo -que estaba baja- y vio a dos personas que
caminaban hacia la camioneta a paso rápido, “los veo a una distancia
de un metro y medio” “al primero lo veo más cerca del espejo y le

#35121680#330566147#20220609093940092
hace señas al segundo”. Aclaró que uno venía “más adelante que el
otro” pero el otro estaba levemente atrás. Así precisó que “el
primero que se acerca con la mano le hace señas y el otro saca el
arma y me apunta y yo en forma inconsciente saco el arma de mi
señora y le disparo”
La descripción que ambos testigos hicieron de esta breve
secuencia resultó -en esencia- concordante puesto que el primer gesto
observado García no fue captado por la filmación ya que la cámara los
enfoca recién cuando los imputados cruzaban la calle y no en la
entrada el pasillo como indicó el testigo García.
Ese tramo no fue captado por la cámara, más de ello no
puede inferirse –como pretende la defensa- que aquel gesto no se
produjo. El testigo dio cuenta de ello.
Repárese que el video muestra en primer término la
circulación de los vehículos por la Avenida Iriarte; luego el
desplazamiento y la detención de éstos por el semáforo, lo que
provoca la formación de una fila quedando en primer lugar un camión
de porte, un auto particular, la camioneta Berlingo conducida por
Linares Galván Araujo y otros dos vehículos más atrás.
Este tramo comienza en el minuto 0:00 y se extiende
hasta el 0:08, instante en el que todos los vehículos se detienen por el
semáforo, quedando la camioneta Berlingo atrapada en esa línea de
rodados. Y es recién en el segundo 0:14, en el que la cámara filma la
aparición de los imputados. Los capta en altura y desde atrás. Y tal
como lo indicó Linares al primero que visualiza es el que camina más
adelante (Castillo) que el otro (Yorki Cano); que cuando Castillo se
ubica a la altura del espejo de la camioneta (0:16) hace un movimiento
con la mano -la seña a la que se refirió Linares- y Yorki Cano
extiende su brazo derecho hacia adelante y en dirección a la ventanilla
de la camioneta, apuntándolo. Y en ese preciso instante Yorki Cano
cae por el impacto del disparo que efectúa Linares (0:17). Castillo
quien estaba a la izquierda de Yorki sale corriendo (0:18) en dirección
al lugar desde donde había comenzado la cámara a filmarlos.

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

Linares afirmó en el debate que el imputado Yorki Cano


lo apuntó con el arma de fuego. No fragiliza esta conclusión la
circunstancia de que el arma no haya podido ser visualizada en forma
nítida en la filmación. Se ve el instante en que Yorki Cano extiende su
brazo hacia adelante y en dirección a la camioneta y Linares efectuó
un disparó con la pistola Glock que su esposa había dejado en la parte
superior del compartimento (“buche”). Como consecuencia del
impacto Yorki Cano cayó herido y junto a él cayó la pistola Bersa que
en forma casi inmediata fue incautada por personal de Prefectura.
Repárese que Yorki Cano quedó tendido a la altura de la
puerta de la camioneta y ello se observa cuando Linares desciende y
como relató, la pistola Bersa calibre 9x19 estaba allí tirada (0:23 y
sgtes.). Castillo ubicado a la izquierda de Yorki y “levemente”
adelante y más cerca del espejo de la camioneta, se agacha y sale
corriendo, dejando tendido a su compañero.
En las circunstancias descriptas, la acción conjunta y
previa de los encartados de aproximarse rápidamente, en forma
sorpresiva a la camioneta detenida por el semáforo, en medio de una
fila de vehículos -sin posibilidad inmediata de escape-, y extraer uno
de ello -a instancias del otro- un arma de fuego y apuntar con el brazo
extendido al conductor a una distancia de un metro y medio, implicó
en forma inequívoca ponerse a realizar el plan de una acción
destinada al apoderamiento ilegítimo y violento de algunos o todos
los objetos de valor que tenían los ocupantes del rodado.
Este tipo de apoderamientos violentos ejecutados en la
vía pública en perjuicio de ocasionales conductores que detienen la
marcha de sus vehículos por el semáforo y son abordados
-sorpresivamente- aprovechando la momentánea indefensión en la que
se encuentran, se caracterizan por la rapidez con la que se ejecuta la
acción sustractiva. Y si a ello se adiciona la inmediata reacción del
damnificado que neutraliza la acción sin que se produzca el resultado,
como en el caso, el cuestionamiento referido a si medió comienzo de
ejecución no puede resolverse sino a partir de la valoración de

#35121680#330566147#20220609093940092
aquellos datos objetivos de los que inequívocamente pueda concluirse
que ambos imputados estaban decididos a realizar el hecho, es decir a
la realización total de su plan de acción.
Los distintos actos que ambos imputados realizaron a
partir del momento en que Hugo García “los focalizó” configuraron
una acción común que marcó el punto de referencia de ponerse
inmediatamente a realizar el tipo penal de robo.
En efecto. El gesto que Yorki Cano le hizo a Castillo
cuando estaban en la entrada del pasillo para arremeter en dirección a
la camioneta; seguido -a su vez- de la seña que con su mano Castillo
le devolvió para que sacara el arma de fuego que portaba cuando
ambos estaban a una distancia de un metro y medio del rodado y,
finalmente la acción de Yorki Cano de apuntar contra Linares con su
brazo derecho extendido empuñando la pistola Bersa cal.9x19mm., se
erigieron en datos de relevancia jurídica para que determinar que la
conducta que estaban llevando a cabo -apreciada en su faz objetiva y
subjetiva- era la “inmediatamente previa” dirigida a realizar el robo,
cuyo resultado no se produjo por circunstancias ajenas a su voluntad
(la reacción justificada de Linares) .
En este contexto de comunidad probatoria que involucra
a ambos imputados de igual modo, tampoco podrá tener favorable
acogida el planteo -en subsidio- efectuado por la doctora Mattone en
cuanto a la falta de conocimiento de su asistido de la acción que Yorki
Cano habría intentado, según sostiene, en soledad.
Las razones alegadas por Castillo para justificar su
presencia en el lugar del hecho (dirigirse a una remisería para tomar
un taxi e ir a un encuentro planeado de antemano con una joven), no
modifican ni fragilizan la prueba de cargo que se estructura en su
contra. Aun cuando el encuentro con Yorki Cano pudo haber
resultado casual, lo cierto es que su primigenia intención de visitar a
una amiga apareció reemplazada por la decisión de ambos de ejecutar
el hecho aquí juzgado. La prueba testimonial valorada y el video
incorporado así lo prueban. Medió entre ambos un lenguaje gestual

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

indicativo de una connivencia dolosa para actuar en dupla en su


ejecución,
Por otra parte, destaco que Linares Galván Araujo
recordó en el debate que cuando Yorki Cano yacía herido con el arma
de fuego a su lado, se hizo presente un familiar (una mujer) quien le
recriminaba a Castillo que “por su culpa” Yorki Cano se encontraba
en esa situación.
Este reproche, en el contexto de lo ocurrido, refuerza mi
convicción respecto de la intervención responsable del Castillo en el
suceso.
Repárese que pese a que Linares había sido el autor del
disparo, el familiar de Yorki Cano lo responsabilizaba a Castillo por
lo ocurrido.
Por lo expuesto considero que ambos imputados resultan
ser coautores del hecho traído a juicio, es decir del intento de
apoderamiento ilegítimo armado que sufrieron Linares, su esposa y su
amigo Hugo García.
De un modo subsidiario, las defensas consideraron que
el hecho debía ser calificado como robo simple.
Consideraron que la aplicación del art. 166, inc.2°,
segundo párrafo del C.P. no resultaba procedente pues no se había
acreditado que el objeto secuestrado fuera un arma de fuego conforme
art. 3, inc. 1, del decreto 395/75. Señalaron que se había producido lo
que indicaron como “un adelanto de la pericia” y que no había sido
agregado el informe completo.
Así entendieron que “el hecho de tomar un cartucho al
azar idóneo, nada permite afirmar puesto que no surge qué
municiones fueron peritadas con el arma Bersa” y que siendo
necesario -según señalaron- acreditar que dicho objeto conformó el
peligro previsto por la figura, tal como lo ha resuelto la Sala 3 de la
Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional en el
fallo “Díaz” (reg. 390, del 01/09/15, votos Jantus y Días) el hecho
debía ser calificado como robo simple.

#35121680#330566147#20220609093940092
Probado que los encartados utilizaron el arma de fuego en
la ejecución del ilegítimo despojo, el que no se consumó por
circunstancias ajenas a su voluntad, corresponde abordar la cuestión
planteada por las defensas.
Se encuentra glosado el informe elaborado por la
División Criminalística Área II Sur, mediante el cual se
individualizaron las armas de fuego incautadas en el lugar, con sus
respectivas municiones y las condiciones en que fueron encontradas
En lo que aquí interesa, se consignó que “…DE LÁ
INSPECCIÓN LLEVADA A CABO EN AVENIDA IRIARTE N° 3450
(VIA PÚBLICA), SE LOGRÓ: LA FIJACION MEDIANTE VISTAS
FOTOGRÁFICAS Y CROQUIS ILUSTRATIVO DEL LUGAR; SE
ACONDICIONÓ UNA (01) VAINA SERVIDA CON INSCRIPCIÓN
EN SU CULOTE 9X19 FLB 2013, IDENTIFICADA COMO N°1... SE
REALIZÓ EL ACONDICIONAMIENTO DE: -UNA (01) PISTOLA
MARCA GLOCK MODELO 17 GEN 4, CALIBRE 9X19MM., CON
NUMERACIÓN RTC 697 JUNTO CON DOS (02) ESTUCHES
CARGADORES, EL PRIMERO CONTENÍA DIECISÉIS (16)
CARTUCHOS CALIBRE 9X19 MM., Y EL SEGUNDO ESTUCHE
CARGADOR CONTABA EN SU INTERIOR CON QUINCE (15)
CARTUCHOS 9X19MM. -UNA PISTOLA MARCA BERSA
CALIBRE 9X19 MM., LA CUAL PRESENTABA LA
NUMERACIÓN UBICADA EN CORREDERA, CAÑÓN Y
ARMAZÓN CON SIGNOS DE ERRADICACIÓN. EL ARMA SE
ENCONTRABA CON SU ESTUCHE CARGADOR CON TRES
(03) CARTUCHOS CALIBRE 9X19MM., Y UN CUARTO
CARTUCHO DE SIMILARES CARACTERÍSTICAS, SEÑALADO
COMO EL QUE SE ENCONTRABA ALOJADO EN LA
RECÁMARA AL MOMENTO DEL DESARME…”
También obra incorporado al juicio, el informe titulado
“Adelanto de Informe Pericial DB. Nro.1275-76-77/2020” de fecha
17 de setiembre de 2020, firmado por la Licenciada en Criminalística,
Sabrina Belén Acosta en el que se consignó que “(e)l arma de fuego,

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

de puño o corta, del tipo Bersa modelo TPR9 calibre 9x19mm con
numeración erradicada por métodos abrasivos, en las condiciones
en que fuera recibida y al momento de las pruebas periciales, resultó
“APTA PARA PRODUCIR DISPAROS, DE FUNCIONAMIENTO
MECÁNICO NORMAL” -el resaltado no corresponde a la
transcripción-
También se indicó que “(l)os DOS (02) cartuchos,
calibre 9x19mm tomados al azar del total recibido con la pistola
Glock y el cartucho, calibre 9x19mm, tomado al azar del total
remitido con la pistola Bersa, resultaron “IDÓNEOS PARA SUS
FINES ESPECÍFICOS”
Las defensas impugnaron que la circunstancia de haberse
tomado un cartucho al azar y constatar que era idóneo, no permitía
saber cuál de los cartuchos había sido peritado con el arma Bersa, lo
que obstaba a la aplicación de la agravante.
Considero que probada la aptitud para el disparo de la
pistola Bersa y la idoneidad para sus fines específicos de uno de los
cuatro cartuchos incautados (3 en el cargador y 1 en la recámara) no
hay lugar a dudas respecto de su capacidad vulnerante.
Repárese que de la lectura de los dos informes surge que
las municiones incautadas con cada una de las armas secuestradas
constituyeron material de peritación separado y distinto. No cabe
asignarle otra interpretación a la frase consignada en cuanto a la
cantidad de (2) cartuchos “tomados al azar del total recibido con la
pistola Glock y del utilizado (1) también “al azar” del total recibido
con la pistola Bersa”
De manera que la pistola marca Bersa apta para el
disparo, cargada con un proyectil en la recámara y tres en el cargador
–uno de ellos peritado-, portada y utilizada en la comisión de un robo,
reúne los requisitos legales exigidos por la norma para tener por
configurado el tipo penal de portación de arma de fuego de uso civil,
por un lado y –además- habilita la aplicación del párrafo segundo del
art. 166, inc.2 del C.P.

#35121680#330566147#20220609093940092
Parto del criterio establecido por nuestro más Alto
Tribunal en cuanto a que la ley penal debe ser interpretada
indagándose su verdadero alcance mediante un examen de sus
términos que consulte la racionalidad de la norma, y no de una manera
aislada o literal (doctrina de Fallos 3311:2091 y 3515:285, entre
otros), sino computando la totalidad de sus preceptos de manera que
guarden la debida coherencia (Fallos 310:550, 2674, 311:2223 y
314:1717, entre otros).
Y en esa línea considero que el concepto de “arma de
fuego” es un elemento normativo que requiere para su cabal
comprensión de una remisión a la reglamentación de la Ley Nacional
de Armas y Explosivos Nro.20.429 –decreto 395/75-. En su art. 3°
dispone que se entiende por arma de fuego: “aquella que utiliza la
energía de los gases producidos por la deflagración de pólvoras para
lanzar un proyectil a distancia”.
Con base en este concepto se estructuran las acciones
previstas en el art. 189 bis del C.P., con exigencias legales diferentes
para la configuración de los tipos penales allí previstos. Su examen
permitirá verificar que los proyectiles o municiones no se consideran
parte integrante del objeto o instrumento denominado “arma de
fuego”.
Así, como puede apreciarse la operatividad del arma de
fuego para su uso específico, es decir con carga de proyectiles y
aptitud para el disparo ha sido considerada necesaria para la
configuración del delito de portación de arma de fuego y no así para la
tenencia ilegítima de arma de fuego de uso civil, lo cual resulta lógico
desde el punto de vista jurídico penal y más en los delitos de peligro
abstracto, en tanto se hace recaer la distinción en la actividad
desarrollada por el sujeto activo (cargar el arma con munición
adecuada) y no en las condiciones del objeto, lo que a su vez explica y
justifica la agravación de la pena –por el mayor peligro que se deriva
de esa acción- en los casos de portación de arma de uso civil prevista

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

en el tercer párrafo, del mismo artículo y apartado del Código Penal


(confr. Fallos 329:1324)
De ello que es posible colegir -entonces- que el concepto
de técnico jurídico de “arma de fuego” que brinda la norma no incluye
la munición o los proyectiles como una parte integrante del
instrumento. De lo contrario se concluiría erróneamente que todas las
acciones previstas en el art. 189 bis sólo podrían concretarse y serían
punibles en tanto el arma de fuego fuera idónea para el disparo y se
encuentre cargada. Conclusión inconsistente desde una correcta
hermenéutica.
En esta línea, en el tipo penal previsto por el art. 189 bis,
apartado segundo, tercer párrafo del C.P., la exigencia de la capacidad
operativa del arma de fuego –aptitud para el disparo- y que se
encuentre cargada con munición adecuada o en condiciones de
inmediato uso, se erigen en los recaudos legales exigidos los que,
junto a la ausencia de autorización legal para su uso, configuran el
tipo penal de referencia. Todos estos recaudos, en el caso, se
encuentran probados.
Sin embargo, y pese haber sido vencida en mi postura
referida a la posibilidad de enlazar en forma ideal -en este caso- dicha
figura con la del robo (cfr. causa nro.3867 “López Rodríguez, Víctor
Hugo” resuelta el 13/2/2014”) ninguna duda cabe que Yorki Cano y
Castillo intentaron cometer un robo mediante el empleo de un arma de
fuego –la pistola marca Bersa calibre- apta para el disparo, la que se
encontraba cargada con un proyectil en la recámara y tres en el
cargador uno de los cuales -elegido al azar- resultó idónea para su fin
específico.
No resulta lógico –en el orden normal de las cosas- que
en las condiciones en las que se encontraba el arma y su munición, y
luego de la peritación se ponga en crisis la capacidad vulnerante del
arma por la sola circunstancia de que ha criterio de las defensas no se
acompañó el informe final de la pericia balística.

#35121680#330566147#20220609093940092
De adverso, nada les impidió a los defensores solicitar la
remisión y de considerarlo pertinente articular la prueba referida a los
restantes proyectiles incautados con relación a la pistola marca Bersa,
modelo TPR9, calibre 9x19mm.
No se probaron ni alegaron causas de inimputabilidad,
justificación o inculpabilidad respecto de ambos encartados (art.34 del
C.P. “a contrario”). Tampoco existen informes que hayan determinado
en los imputados, afecciones psiquiátricas, neurológicas o de
cualquier otro tipo, que hayan podido impedir que comprendieran la
criminalidad del hecho o dirigir sus acciones.

4). Calificación legal


El hecho que probado configura el delito el delito de robo
agravado por el empleo de arma de fuego, en grado de tentativa por el
que deberán responder Denilson Iván Yorki Cano y Guillermo
Leonardo Castillo en calidad de coautores (arts. 45 y 166, inc.2,
segundo párrafo en función del 42, del CP)
Los imputados Guillermo Leonardo Castillo y Denilson
Iván Yorki Cano con el claro fin de apoderarse ilegítimamente de los
efectos de valor y pertenencias de Ricardo Linares Galván Araujo,
Hugo García y Romina García comenzaron la ejecución de la acción
de despojo acercándose a la camioneta conducida por el primero de
los nombrados y para intimidarlo, Yorki Cano extrajo la pistola marca
Bersa Calibre 9x19mm que portaba (apta para el disparo, cargada con
munición idónea) y lo apuntó. Sin embargo, la acción delictiva no se
perfeccionó por la rápida reacción de Linares que efectuó un disparo
que impactó en el rostro de Yorki Cano produciéndole lesiones de
consideración.
5) La pena a imponer.
Para graduar a adecuar la sanción a imponer a la luz de
las pautas mensurativas de los arts. 40 y 41 del C.P. tengo en cuenta la
naturaleza de la acción desarrollada por los encartados tal como surge
de la descripción de materialidad del hecho de la que surge como

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

pauta de agravación la actuación en dupla como una circunstancia


facilitadora de la acción delictiva intentada y el aprovechamiento de
la objetiva situación de indefensión de los damnificados detenidos
por el semáforo en el interior de un vehículo.
Como pauta de atenuación respecto de Denilson o Iván
Yorki Cano se tiene en cuenta su pertenencia a un núcleo familiar de
“estrato social bajo”; el insuficiente grado de instrucción -secundario
incompleto- que registra; su condición de padre de dos hijos: y la
precaria situación económica y laboral que lo obliga a concurrir a un
comedor comunitario de la parroquia de su barrio donde le proveen de
alimentos y viandas, lo que le permite cubrir mínimamente sus
necesidades básicas.
Respecto de Guillermo Leonardo Castillo se computa su
pertenencia a un grupo familiar “complejo” con carencias afectivas y
materiales; su insuficiente grado de instrucción -estudios secundarios
incompletos- y su pertenencia a un estrato socio-cultural bajo; y su
estado de salud en cuanto surge del informe socio- ambiental el
padecimiento de una enfermedad renal congénita que exigía chequeos
médicos constantes.
Para ambos se computa la falta de antecedentes penales.
En este contexto, los parámetros punitivos establecidos
como mínimo y máximo para el tipo penal en el que corresponde
encuadrar la conducta de los encartados –art.166, inc.2, segundo
párrafo en función del art. 42 del C.P.) delimitan una escala penal
mínima de tres años y cuatro meses de prisión y una máxima de trece
años y cuatro meses de prisión.
Así estimo justa y adecuada imponer a los nombrados la
pena de cuatro años y dos meses de prisión, accesorias legales y
costas.
6) Cómputos de pena.
Que, los imputados Denilson Iván Yorki Cano y
Guillermo Leonardo Castillo fueron detenidos el 10 de septiembre de
2020 y permanecen en tal situación hasta el presente, por lo que –de

#35121680#330566147#20220609093940092
prosperar mi voto- las penas vencerán el nueve de noviembre del año
dos mil veinticuatro (09/11/2024) a las 24 hs., debiéndose hacerse
efectiva la libertad de los encartados a las 12.00 hs. de ese mismo día
-art. 77 del C.P.- y caducarán a todos los efectos legales el nueve de
noviembre del año dos mil treinta y cuatro (09/11/2034) -art. 51 del
C.P.-.
7) Destino de los efectos.
Corresponde decomisar la pistola marca Bersa, calibre
9x19mm, con numeración suprimida (art. 23 del C.P.) y remitirla a la
Agencia Nacional de Materiales Controlados en los términos del art. 7
de la ley nro. 25.938, atento la orden de secuestro que surge en autos.
Respecto de la pistola marca Glock, modelo 17 GEN 4,
calibre 9x19 mm., con numeración RTC697, deberá ser remitida a la
Agencia Nacional de Materiales Controlados en los términos del art. 6
de la ley nro. 25.938.
Por todo lo dicho propongo al acuerdo que:
1.- se condene a Denilson Iván YORKI CANO, como
coautor penalmente responsable del delito de robo, agravado por el
uso de arma de fuego, en grado de tentativa, a la pena de cuatro años y
dos meses de prisión, accesorias legales y costas procesales (art. 5, 12,
29 inc. 3º, 40, 41, 42, 45, y 166 inc. 2º, segundo párrafo del C.P. y 530
y 531 del C.P.P.N.).
2.- se condene a Guillermo Leonardo CASTILLO como
coautor penalmente responsable del delito de robo, agravado por el
uso de arma de fuego, en grado de tentativa, a la pena de cuatro años y
dos meses de prisión, accesorias legales y costas procesales (art. 5, 12,
29 inc. 3º, 40, 41, 42, 45, y 166 inc. 2º segundo párrafo del C.P. y 530
y 531 del C.P.P.N.).
3.- se decomise la pistola marca Bersa, calibre 9x19mm,
con numeración suprimida (art. 23 del C.P.) y se remita a la Agencia
Nacional de Materiales Controlados en los términos del art. 7 de la ley
nro. 25.938, atento la orden de secuestro que surge en autos. También
corresponderá remitir la pistola marca Glock, modelo 17 GEN 4,

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

calibre 9x19 mm., con numeración RTC697, a la Agencia Nacional de


Materiales Controlados en los términos del art. 6 de la ley nro. 25.938.
4.- se declare que la pena impuesta a Denilson Iván Yorki
Cano vencerá el nueve de noviembre del año dos mil veinticuatro
(09/11/2024) a las 24 hs., debiéndose hacerse efectiva su libertad a las
12.00 hs. de ese mismo día -art. 77 del C.P.- y caducará a todos los
efectos legales el nueve de noviembre del año dos mil treinta y cuatro
(09/11/2034) -art. 51 del C.P.-.
5.- se declare que la pena impuesta a Guillermo Leonardo
Castillo vencerá el nueve de noviembre del año dos mil veinticuatro
(09/11/2024) a las 24 hs., debiéndose hacerse efectiva su libertad a las
12.00 hs. de ese mismo día -art. 77 del C.P.- y caducará a todos los
efectos legales el nueve de noviembre del año dos mil treinta y cuatro
(09/11/2034) -art. 51 del C.P.-.

El juez Guillermo Enrique Friele dijo:


Adhiero al voto de la doctora Marcela Rodríguez, con la
siguiente salvedad.
Como ha sostenido la mayoría de este Tribunal en
reiterados casos, entre la figura de portación de arma de uso civil o de
guerra sin la debida autorización legal, en su relación con otras figuras
en las que se la ha utilizado, se verifica un concurso aparente porque
opera la relación de subsidiariedad tácita. Ello, porque los previstos en
el art. 189 bis, 2, párrafos 3° y 4°, son delitos de pura actividad y de
peligro abstracto, considerado este como aquel peligro que la ley
considera como necesariamente derivado de ciertas situaciones, de
ciertas acciones y del empleo de ciertos medios, conforme a la
definición de Sebastián Soler. En términos más sencillos, la punición
del delito que nos ocupa se basa no sólo en el riego de que las armas
puedan dispararse por descuido o imprudencia, o incluso por defectos
de sí mismas, sino en que la portación o tenencia del arma por sí sola,
puede significar la preparación de un delito, o la creación de las
oportunidades para cometerlo.

#35121680#330566147#20220609093940092
Y es por ello que sobre la tenencia y la portación de
armas, se establece un estricto control administrativo, que permite que
sólo puedan llevarlas o tenerlas en su poder, aquellas personas que
reúnan ciertas condiciones y que justifiquen la necesidad de su
posesión.

Consecuentemente, (tal como se ha afirmado en otros


pronunciamientos en que se trató la cuestión) el delito de robo con
armas de fuego, al concretar el peligro o riesgo que el legislador quiso
evitar, desplaza al de la portación del arma, existiendo entre ambas
figuras, sólo un concurso aparente. Porque el peligro que configuraba
la portación de que con el arma se cometiera un hecho ilícito, se
equipara a la punibilidad del acto preparatorio, que cede ante la
punibilidad del acto ejecutivo. Del mismo modo, las normas que
tipifican los delitos de peligro abstracto, no son más que un adelanto
de punibilidad que deja de tener sentido independiente, frente a la
efectivización del riesgo. En otras palabras, estas conductas típicas
son subsidiarias por su relación, con las figuras de lesión que siempre
desplazan a las de peligro, tal como ocurre con la tentativa respecto de
los actos preparatorios autónomamente punibles, y con la
consumación respecto de la tentativa.
Por lo demás, durante la comisión de un delito, la
ausencia de legitimación para poseer un arma, no parece que pueda
fundar una necesidad de represión autónoma, pues aun cuando se la
tuviera legítimamente o se la portara con permiso, el sólo hecho de
usar el arma en la comisión o intento de una conducta penalmente
tipificada, vuelve ilegítima su tenencia o portación (conf. Ziffer,
Patricia, “El concurso entre la tenencia de arma de guerra y el robo
con arma”, Cuadernos de Conferencias y Artículos N° 5, Universidad
Externado de Colombia, 1996) y por lo tanto, subsidiaria.
Ahora bien, mantener el arma luego de consumado el
delito en el que se la ha utilizado, podría hacer recobrar la vigencia
penal de su ilegitimidad, y entonces nada obstaría a que sí pueda

#35121680#330566147#20220609093940092
Poder Judicial de la Nación
TRIBUNAL ORAL EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL NRO. 30 DE LA CAPITAL FEDERAL
CCC 39230/2020/TO1

admitirse la posibilidad de un concurso real. Pero ello ocurrirá


siempre y cuando se impute y se verifique la efectiva independencia
fáctica y temporal de los hechos, y se impute concretamente esa
portación o tenencia posterior.
Esta es la posición que la mayoría de este Tribunal viene
sustentando al respecto y así entiendo que debe aplicarse, condenando
en consecuencia a los imputados únicamente como coautores
penalmente responsables del delito de robo agravado por su comisión
con arma de fuego en grado de tentativa (arts. 42, 45 y 166 inc. 2°
segundo párrafo del C.P.).

El juez Luis María Rizzi dijo:


Adhiero al voto del doctor Guillermo Enrique Friele, por
compartir sus razones y fundamentos.

Que, en atención a ello,


SE RESUELVE:
I.- CONDENAR a Denilson Iván YORKI CANO, de
las demás condiciones personales mencionadas “ut-supra”, como
coautor penalmente responsable del delito de robo, agravado por el
uso de arma de fuego, en grado de tentativa, a la pena de CUATRO
AÑOS Y DOS MESES DE PRISIÓN, ACCESORIAS LEGALES
Y COSTAS PROCESALES (art. 5, 12, 29 inc. 3º, 40, 41, 42, 45, y
166 inc. 2º, segundo párrafo del C.P. y 530 y 531 del C.P.P.N.).
II.- CONDENAR a Guillermo Leonardo
CASTILLO, de las demás condiciones personales mencionadas “ut-
supra”, como coautor penalmente responsable del delito de robo,
agravado por el uso de arma de fuego, en grado de tentativa, a la pena
de CUATRO AÑOS Y DOS MESES DE
PRISIÓN, ACCESORIAS LEGALES Y COSTAS
PROCESALES (art. 5, 12, 29 inc. 3º, 40, 41, 42, 45, y 166 inc. 2º
segundo párrafo del C.P. y 530 y 531 del C.P.P.N.).

#35121680#330566147#20220609093940092
III.- DECOMISAR la pistola marca Bersa, calibre
9x19mm, con numeración suprimida (art. 23 del C.P.) y remitirla a la
Agencia Nacional de Materiales Controlados en los términos del art. 7
de la ley nro. 25.938, atento la orden de secuestro que surge en autos y
REMITIR la pistola marca Glock, modelo 17 GEN 4, calibre 9x19
mm., con numeración RTC697, a la Agencia Nacional de Materiales
Controlados en los términos del art. 6 de la ley nro. 25.938.
IV.- DECLARAR que la pena impuesta a Denilson Iván
Yorki Cano vencerá el nueve de noviembre del año dos mil
veinticuatro (09/11/2024) a las 24 hs., debiéndose hacerse efectiva su
libertad a las 12.00 hs. de ese mismo día -art. 77 del C.P.- y caducará
a todos los efectos legales el nueve de noviembre del año dos mil
treinta y cuatro (09/11/2034) -art. 51 del C.P.-.
V.- DECLARAR que la pena impuesta a Guillermo
Leonardo Castillo vencerá el nueve de noviembre del año dos mil
veinticuatro (09/11/2024) a las 24 hs., debiéndose hacerse efectiva su
libertad a las 12.00 hs. de ese mismo día -art. 77 del C.P.- y caducará
a todos los efectos legales el nueve de noviembre del año dos mil
treinta y cuatro (09/11/2034) -art. 51 del C.P.-.
Tómese razón, regístrese y firme o consentida, hágase
saber a las víctimas en los términos del art. 12 de la ley 27.372,
comuníquese a quienes corresponda, y oportunamente archívese.-

Signature Not Verified Signature Not Verified Signature Not Verified Signature Not Verified
Digitally signed by JOSE Digitally signed by MARCELA Digitally signed by GUILLERMO Digitally signed by LUIS MARIA
MARCELO ARIAS MONICA RODRIGUEZ ENRIQUE FRIELE RIZZI
Date: 2022.06.09 10:20:08 ART Date: 2022.06.09 10:32:48 ART Date: 2022.06.09 10:53:40 ART Date: 2022.06.09 11:46:40 ART

#35121680#330566147#20220609093940092

También podría gustarte