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Función biológica y caracteristicas fisicoquímicas

Los elementos esenciales para la vida y la salud de los animales. Los elementos
principales (sobre fondo rojo claro) son componentes estructurales de células y
tejidos y deben estar presentes en la dieta en cantidades diarias del orden de
gramos.

Las necesidades de oligoelementos (sobre fondo amarillo) son mucho menores:


en el caso del hombre son suficientes unos pocos miligramos al día de Fe, Cu, y
Zn, y todavía menos de los demás elementos. Las necesidades elementales de
las plantas y los microorganismos son muy similares a las aquí presentadas; son
variadas las formas en que adquieren estos ele-mentos.

Elementos principales:
Sodio (Na): El sodio es un elemento químico de aspecto blanco plateado con número
atómico 11. Su símbolo es Na y pertenece al grupo de los metales alcalinos y su estado
habitual en la naturaleza es sólido.
El sodio es un electrolito que forma parte del grupo de los minerales y tiene importantes
funciones en el cuerpo humano, como ayudar a lograr un adecuado equilibrio de los
líquidos corporales tanto dentro como fuera de las células y a regular el volumen sanguíneo
y la presión arterial. También participa en el equilibrio ácido-base, se necesita para la
generación y la transmisión del impulso nervioso, ayuda a que los músculos respondan
correctamente a los estímulos, ayuda a evitar calambres, ayuda a regular el ritmo del
músculo cardiaco, forma parte de los huesos y permite la absorción de nutrientes.

En cuanto a sus características físico-químicas, el punto de fusión del sodio es de 370,87


grados Kelvin o de 98,72 grados celsius o grados centígrados. El punto de ebullición del
sodio es de 1156 grados Kelvin o de 883,85 grados celsius o grados centígrados.

El sodio es un elemento químico que se encuentra en la naturaleza en forma de iones y es


un componente esencial para la vida. Una de las moléculas más importantes en las que se
encuentra el sodio es el cloruro de sodio (NaCl), también conocido como sal de mesa. El
catión sodio (Na+) tiene un papel fundamental en el metabolismo celular, por ejemplo, en
la transmisión del impulso nervioso (mediante el mecanismo de bomba de sodio-potasio).
La cantidad diaria recomendada de sodio varía según la edad y el estado de salud de cada
persona. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo diario
recomendado de sodio para adultos es de 2,000 miligramos al día, lo que equivale a 5
gramos de sal

Cloro (Cl): El cloro es un elemento químico de número atómico 17 situado en el grupo de


los halógenos (grupo VII A) de la tabla periódica de los elementos. Su símbolo es Cl. En
condiciones normales y en estado puro, es un gas amarillo-verdoso formado por moléculas
diatómicas, Cl2, unas 2,5 veces más pesado que el aire, de olor desagradable y venenoso.

En cuanto a su función biológica, el cloro permite el buen funcionamiento del hígado y


contribuye a la producción de los jugos gástricos. En conjunto con el sodio y el potasio,
ayuda a repartir el agua en nuestro organismo. Igualmente participa en mantener el
equilibrio ácido-base y favorece el transporte del CO2 en la sangre. Su función en el
organismo es regular junto al sodio, el equilibrio osmótico que es parte de un proceso a
nivel celular. También es parte importante de los ácidos gástricos que realizan la tarea de la
descomposición de las proteínas y grasas consumidas. El cloro junto con el sodio también
ejerce funciones en la regulación de la tensión sanguínea.

En cuanto a sus características físico-químicas, su punto de fusión es 171,6 K y su punto de


ebullición es 239,11 K.

El cloro es un elemento químico que se encuentra en la naturaleza en forma de iones y es


un componente esencial para la vida. Una de las moléculas más importantes en las que se
encuentra el cloro es el cloruro de sodio (NaCl), también conocido como sal de mesa1.
Cuando se agrega en pequeñas cantidades a agua de piscina o sistemas de agua industrial,
los átomos de cloro son hidrolizados del resto de la molécula, formando ácido hipocloroso
(HClO), que actúa como un biocida general, matando gérmenes, microorganismos, algas,
entre otros.

Potasio (K): El potasio es un mineral que se encuentra en muchos alimentos y es esencial


para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. El organismo necesita potasio para
casi todo su funcionamiento, incluso para el buen funcionamiento del riñón y del corazón,
la contracción muscular y la transmisión nerviosa. Además, es también un electrolito, al
igual que el sodio y el cloro, que colabora en la presión y concentración de sustancias en el
interior y exterior de las células.

Una de las moléculas importantes en las que se encuentra el potasio es el cloruro de potasio
(KCl), que se emplea como fertilizante. Otras sales de potasio importantes son el bromuro,
cianuro, hidróxido, yoduro, sulfato y el clorato.

La cantidad diaria recomendada de potasio varía según la edad y el estado de salud de cada
persona. Según la información disponible, las recomendaciones diarias de potasio para
adultos son de 3,400 miligramos al día para hombres y 2,600 miligramos al día para
mujeres. Sin embargo, es importante tener en cuenta que muchas personas consumen más
potasio del recomendado, ya que este se encuentra en muchos alimentos procesados y
preparados. Por lo tanto, es importante leer las etiquetas de los alimentos y tratar de elegir
opciones bajas en potasio.

En cuanto a sus características físico-químicas, su punto de fusión es 336.53 K (63 °C) y su


punto de ebullición es 1032 K (759 °C).

Calcio (Ca): El calcio es un mineral esencial para el cuerpo humano. Es el mineral más
abundante en el cuerpo y es necesario para la formación y mantenimiento de huesos y
dientes fuertes. También es importante para la coagulación de la sangre, la transmisión del
impulso nervioso, la contracción muscular y la secreción hormonal.
Una de las moléculas importantes en las que se encuentra el calcio es el carbonato de calcio
(CaCO3), que se encuentra en diferentes minerales como la calcita, el mármol y la piedra
caliza2. Otros compuestos importantes del calcio incluyen el cloruro de calcio (CaCl2), el
hidróxido de calcio (Ca(OH)2) y el sulfato de calcio (CaSO4).

La cantidad diaria recomendada de calcio varía según la edad y el estado de salud de cada
persona. Según la información disponible, las recomendaciones diarias de calcio para
adultos son de 1000 miligramos al día para hombres y mujeres de 19 a 50 años, y 1200
miligramos al día para mujeres mayores de 51 años y hombres mayores de 71 años. Sin
embargo, es importante tener en cuenta que muchas personas consumen más calcio del
recomendado, ya que este se encuentra en muchos alimentos procesados y preparados. Por
lo tanto, es importante leer las etiquetas de los alimentos y tratar de elegir opciones bajas en
calcio.

En cuanto a sus características físico-químicas, su punto de fusión es 1115 K (842 °C) y su


punto de ebullición es 1757 K (1484 °C).

Oglioelementos:
Magnesio (Mg): El magnesio es un nutriente esencial para el cuerpo humano. Es importante
para muchos procesos que realiza el cuerpo, como regular la función de los músculos y el
sistema nervioso, los niveles de azúcar en la sangre y la presión sanguínea. Además, ayuda
a formar proteína, masa ósea y ADN (el material genético presente en las células).

Una de las moléculas importantes en las que se encuentra el magnesio es el cloruro de


magnesio (MgCl2), que se emplea como fertilizante. Otras sales de magnesio importantes
son el sulfato, hidróxido, carbonato y el citrato.

La cantidad diaria recomendada de magnesio varía según la edad y el estado de salud de


cada persona. Según la información disponible, las recomendaciones diarias de magnesio
para adultos son de 400-420 miligramos al día para hombres y 310-320 miligramos al día
para mujeres. Sin embargo, es importante tener en cuenta que muchas personas consumen
más magnesio del recomendado, ya que este se encuentra en muchos alimentos procesados
y preparados. Por lo tanto, es importante leer las etiquetas de los alimentos y tratar de elegir
opciones bajas en magnesio.
En cuanto a sus características físico-químicas, su punto de fusión es 923 K (650 °C) y su
punto de ebullición es 1363 K (1090 °C).

Vanadio (V): El vanadio es un oligoelemento que puede estar presente en pequeñas


cantidades en los seres vivos y tanto su ausencia como su exceso puede ser perjudicial para
el organismo. Aunque todavía se está debatiendo en la comunidad biomédica si el vanadio
es un oligoelemento esencial, si nuestros cuerpos lo necesitan, lo necesitamos en cantidades
muy pequeñas[^10^]. La persona promedio consume naturalmente una pequeña cantidad de
0.01 mg-2 mg por día de vanadio, ¡pero esto se considera más que suficiente![^10^]

El papel del vanadio en los sistemas biológicos ha despertado el interés de la comunidad


científica debido a varios hechos extraordinarios. Existen organismos exóticos que lo
acumulan en cantidades excepcionales como las ascidias y los hongos alucinógenos del
género Amanita². Además, se encuentra en la nitrogenasa de Azobacter vinelandii
formando parte del cofactor FeVco, componente organometálico responsable de la
"fijación" del nitrógeno atmosférico; también se presenta en las enzimas vanadio
haloperoxidasas, las cuales intervienen indirectamente en el agotamiento del ozono
atmosférico².

En cuanto a sus características físico-químicas, el vanadio es un metal blanco que da un


catión de valencia 5 y raramente da cationes bi, tri y cuadrivalentes.

Cromo (Cr): El cromo es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. Este mineral
desempeña un papel importante en el metabolismo de las grasas y en el metabolismo de la
insulina, lo que ayuda a mantener los niveles correctos de azúcar en la sangre. También
estimula la síntesis de ácidos grasos y colesterol y ayuda a mantener la presión arterial
adecuada1.

En cuanto a sus características físico-químicas, el cromo es un metal de transición duro,


frágil, gris acerado y brillante. Es muy resistente frente a la corrosión. Su estado de
oxidación más alto es el +6, aunque estos compuestos son muy oxidantes. Los estados de
oxidación +4 y +5 son poco frecuentes, mientras que los estados más estables son el +2 y
+3.

El cromo es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. Este mineral desempeña un


papel importante en el metabolismo de las grasas y en el metabolismo de la insulina, lo que
ayuda a mantener los niveles correctos de azúcar en la sangre. También estimula la síntesis
de ácidos grasos y colesterol y ayuda a mantener la presión arterial adecuada1.

Una de las moléculas importantes en las que se encuentra el cromo es el picolinato de


cromo, que es una combinación de cromo y ácido picolínico. Esta molécula se utiliza como
suplemento dietético para mejorar la absorción del cromo en el cuerpo.

Manganeso (Mn): El manganeso es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. Este


mineral desempeña un papel importante en el metabolismo de los carbohidratos, las grasas
y las proteínas, así como en la formación de huesos y tejidos conectivos. También es
necesario para la producción de hormonas sexuales y para el funcionamiento normal del
sistema nervioso.

En cuanto a sus características físico-químicas, el manganeso es un metal de transición de


color blanco plateado. Es un elemento químico con número atómico 25 y símbolo Mn. Es
un metal duro y muy frágil, difícil de fundir, pero fácil de oxidar.
El manganeso es un oligoelemento que es el componente o el activador de numerosas
moléculas implicadas en reacciones químicas que permiten aportar a las células la energía
que necesitan, en especial a partir de los glúcidos y los lípidos, así como en la formación
del cartílago y el hueso, la cicatrización (regulación de la síntesis de colágeno), la síntesis
de arginasa, una enzima que interviene en el ciclo de la urea (permite al organismo eliminar
el amoniaco, que es neurotóxico) y la protección antioxidante.

Hierro (Fe): El hierro es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano. Este mineral
desempeña un papel importante en la producción de hemoglobina, una proteína en los
glóbulos rojos que transporta el oxígeno desde los pulmones hasta los tejidos del cuerpo.
También es necesario para la producción de mioglobina, una proteína que almacena
oxígeno en los músculos, y para la producción de ciertas hormonas y tejidos conectivos.

En cuanto a sus características físico-químicas, el hierro es un metal de transición de color


gris plateado. Es un elemento químico con número atómico 26 y símbolo Fe. Es uno de los
elementos más abundantes en la corteza terrestre y es el cuarto elemento más común en la
Tierra por masa.
La cantidad diaria de hierro que una persona necesita varía según la edad y el sexo;
dependerá también de si su alimentación consiste principalmente en productos de origen
vegetal. A continuación, se indican las cantidades diarias promedio de hierro recomendadas
en miligramos (mg)2:

Bebés hasta los 6 meses de edad: 0,27 mg


Bebés de 7 a 12 meses de edad: 11 mg
Niños de 1 a 3 años de edad: 7 mg
Niños de 4 a 8 años de edad: 10 mg
Niños de 9 a 13 años de edad: 8 mg
Adolescentes (varones) de 14 a 18 años de edad: 11 mg
Adolescentes (niñas) de 14 a 18 años de edad: 15 mg
Hombres adultos de 19 a 50 años de edad: 8 mg
Mujeres adultas de 19 a 50 años de edad: 18 mg
Adultos de 51 o más años de edad: 8 mg
Adolescentes embarazadas: 27 mg
Embarazadas: 27 mg
Adolescentes que están amamantando: 10 mg
Mujeres que están amamantando: 9 mg

Cobalto Co: El cobalto es un oligoelemento que forma parte de la vitamina B12, y también
participa en numerosos procesos fisiológicos como la síntesis de la eritropoyetina, el
metabolismo de la metionina, entre otros. Su deficiencia puede causar fatiga, desórdenes
digestivos y también neuromusculares.
En cuanto a sus características físico-químicas, el cobalto es un metal de transición de color
gris plateado. Es un elemento químico con número atómico 27 y símbolo Co. Es uno de los
elementos más abundantes en la corteza terrestre y es el cuarto elemento más común en la
Tierra por masa.

El cobalto es un oligoelemento esencial para el cuerpo humano y para el metabolismo


celular. Es un componente importante de la cobalamina, o vitamina B12, cuya contribución
al organismo consiste en producir glóbulos rojos y formar mielina1. Su principal función es
que integra la molécula de la vitamina B12, también para el trabajo de las células rojas ya
que interviene en el metabolismo de hierro y hematopoyesis, por lo que es altamente útil
para tratar la anemia en mujeres embarazadas por medio de la estimulación de los
reticulocitos.

Se calcula que la media de cobalto que deberíamos consumir al día es de 11 µg. Los
huevos, lácteos y carnes son los alimentos que nos pueden aportar este mineral
indispensable para el ser humano.

Niquel (Ni): El níquel es un oligoelemento que se encuentra en pequeñas cantidades en el


cuerpo humano. Este mineral desempeña un papel importante en el metabolismo de los
carbohidratos, las grasas y las proteínas, así como en la formación de huesos y tejidos
conectivos. También es necesario para la producción de hormonas sexuales y para el
funcionamiento normal del sistema nervioso.

En cuanto a sus características físico-químicas, el níquel es un metal de transición de color


blanco plateado. Es un elemento químico con número atómico 28 y símbolo Ni. Es uno de
los elementos más abundantes en la corteza terrestre y es el quinto elemento más común en
la Tierra por masa.
El níquel es un oligoelemento que forma parte del 87 % de las hidrogenasas, enzimas
esenciales en el metabolismo microbiano. Actúa como biocatalizador, participa en el
crecimiento y defensa del organismo, favorece la absorción de hierro y estabiliza las
membranas celulares.

Cobre (Cu): Las necesidades diarias de cobre están por debajo de 1 mg, en torno a los 900
μg (microgramos) para los adultos. Entre las funciones del cobre, es necesario para la
formación de glóbulos rojos, para la síntesis de importantes neurotransmisores, como la
epinefrina, la histamina o la serotonina, y forma parte de muchas enzimas, sobre todo de
óxido-reducción como la citocromo c oxidasa. También es un elemento anti-inflamatorio
muy utilizado en el reumatismo, facilita la absorción del hierro y se puede utilizar en ciertos
casos de anemias.

En cuanto a sus características físico-químicas, el cobre es un metal de transición de color


rojizo y brillo metálico. Es un elemento químico con número atómico 29 y símbolo Cu. Es
uno de los elementos más abundantes en la corteza terrestre y es el quinto elemento más
común en la Tierra por masa.
Zinc (Zn): El zinc es un oligoelemento esencial para el funcionamiento del organismo.
Interviene en el metabolismo de proteínas y ácidos nucleicos, por lo que se considera que
cumple una función muy importante en el embarazo y el desarrollo fetal. Promueve la
actividad de muchas enzimas. Además, actúa como cofactor de diferentes funciones de
crecimiento, inmunidad y de la cicatrización de la piel. Sintetiza proteínas, lípidos y
carbohidratos, además de ayudar al crecimiento y desarrollo del sistema nervioso central.
También actúa como catalizador en muchas reacciones del organismo.
El zinc es un oligoelemento esencial para el funcionamiento del organismo. Interviene en el
metabolismo de proteínas y ácidos nucleicos, por lo que se considera que cumple una
función muy importante en el embarazo y el desarrollo fetal. Promueve la actividad de
muchas enzimas. Además, actúa como cofactor de diferentes funciones de crecimiento,
inmunidad y de la cicatrización de la piel. Sintetiza proteínas, lípidos y carbohidratos,
además de ayudar al crecimiento y desarrollo del sistema nervioso central. También actúa
como catalizador en muchas reacciones del organismo.

La cantidad diaria recomendada de zinc varía según la edad y el género. En general, los
adultos necesitan entre 8 y 11 mg de zinc por día. Las mujeres embarazadas o en período de
lactancia pueden necesitar más zinc, hasta 12 mg por día. Es importante tener en cuenta que
estas son recomendaciones generales y que las necesidades individuales pueden variar.

Selenio (Se): El selenio es un oligoelemento esencial para el funcionamiento del


organismo. Es un micromineral antioxidante, función que comparte con la vitamina E. Por
su capacidad antioxidante, se le considera un elemento antienvejecimiento celular. En la
actualidad, estos compuestos están siendo ampliamente estudiados por su posible relación
en enfermedades muy frecuentes: cardiovasculares, cáncer, etcétera.

Desde un punto de vista químico, el selenio es un elemento químico de la tabla periódica


cuyo símbolo es Se y su número atómico es 34. Es un no metal con propiedades
intermedias entre los elementos calcógenos. Es poco abundante en la corteza terrestre y se
encuentra en algunos minerales como la eucairita y la crooksite.

Molibdeno (Mo): El molibdeno es un oligoelemento esencial para el funcionamiento del


organismo. Ayuda a que la xantina-oxidasa (enzima responsable del metabolismo del
hierro) funcione correctamente. También interviene en una correcta función sexual en el
hombre y es necesario para la producción del ácido úrico, que encontramos en la sangre y
la orina.

Desde un punto de vista químico, el molibdeno es un elemento químico de la tabla


periódica cuyo símbolo es Mo y su número atómico es 42. Es un metal de transición y se
encuentra en varios estados de oxidación. Es un elemento esencial en pequeñas cantidades
para las plantas y los animales. En su forma iónica, cataliza más de cien reacciones
enzimáticas y es un constituyente de las membranas plasmáticas donde lleva a cabo un
papel antioxidante, contribuyendo a estabilizar la estructura de la bicapa lipídica.

Yodo (I): El yodo es un oligoelemento fundamental para todas las etapas de la vida de un
ser humano, pues es de los elementos más importantes para la formación de las hormonas
tiroideas como la tiroxina y triyodotironina.
En cuanto a sus características fisicoquímicas, el yodo es un metaloide halógeno que
participa en la elaboración de las hormonas tiroideas (del que es el principal constituyente)
y en la actividad del metabolismo basal del organismo. La disponibilidad inmediata del
yodo obliga a investigar las distiroides de yodemia elevada, que son las únicas
contraindicaciones a su administración repetida, incluso en dosis catalíticas.

Wolframio (W): El wolframio es un elemento químico de número atómico 74 que se


encuentra en el grupo 6 de la tabla periódica de los elementos1. Es un metal escaso en la
corteza terrestre, pero se encuentra en determinados minerales en forma de óxidos o sales.

En cuanto a sus características fisicoquímicas, el wolframio es el elemento químico con el


puesto número 74 de la tabla periódica y el más pesado de los metales. Se encuentra en la
naturaleza en el suelo, en dos tipos de minerales conocidos como Scheelita y la Wolframita,
en una proporción de 1,38 ppm. El wolframio produce los estados de oxidación más
estables de los elementos entre 2+ a 6+

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