Sinopsis

Le gustan los pasteles rellenos de crema.

Bueno, juntos le daremos un relleno que nunca olvidará.

Leila es dueña de una panadería.

Tiene una creación de éxito que descubrió.

La gente está haciendo cola en bloques para probarlo.

Nosotros lo queremos. Y a ella.

Ella es todo lo que no somos.

Amable. Dulce. Gentil.

No como nosotros. Chicos malos hermanos billonarios que pintan la ciudad de rojo cada
noche.

Nuestro dinero nos da poder.

Nuestros cuerpos nos dan mujeres.

Y vamos a usar todos los trucos del libro para quitarle lo que queremos de ella.

Ya sabes lo que le vamos a hacer.

Puedes adivinar lo que vamos a amasar como masa.

Dónde pondremos la crema.

¿Pero su horno puede contener nuestros dos... bollos?

Le va a encantar.

Lo va a querer más y más.

Nuestro relleno va a cambiar su vida.

Hay una razón para ello.

No es porque sea dulce lo que lo hace tan bueno.

Sino por el hecho de que es salado.

 Capítulo 1
Leila
Ato mi largo pelo marrón en un moño y respiro profundamente por la nariz. Sintiendo
que soy todo pulgares, finalmente sé lo que ese dicho significa ahora que estoy
mezclando mis dedos en una pelota. Sacudo la cabeza, dejo caer mi pelo y empiezo de
nuevo.

"Van a ser increíbles, chica", dice Chase en un tono reconfortante. "No te estreses".

Me está leyendo otra vez. Ya es bastante bueno en eso. Mi mejor amigo me conoce
bien.

"Yo sé..."

Estoy mostrando mis nuevos conos rellenos de bollos de invento. Es súper emocionante,
pero aún estoy ansioso. Me encantan mis bollos, y espero que todos los demás estén de
acuerdo.

"Relájate, lo tienes, Leila. Todo es perfecto."

Chase es un gran tipo, un buen compañero de cuarto y el empleado perfecto. Y pensar

que casi no lo contrato. Bueno, para ser honesta, todavía quiero que se corte el pelo y la
barba, pero me preocuparé de eso más tarde.

Me meto el quinto -o es el sexto- bollo de mini- en la boca en lo que sólo ha sido media
hora, y digo, "¿Quizás debería probar otro?"

"No es que nos vayamos a quedar sin muestras, ¿verdad?" Se ríe, abriendo la puerta
principal.

Está bromeando, pero también hay verdad en sus palabras. Innumerables muestras ya
han pasado por mis labios, cada una de ellas verdaderamente deliciosa. ¿Por qué estoy
dudando tanto de mí mismo?.

"Espera", digo, arreglando la pantalla por última vez. "Bien. Estoy listo."

"¿Listo?"

"Sí". Sonriendo, digo: "Listo".

Chase hace la señal de "¡Estamos abiertos!" antes de que me saque las palabras de la
boca.

"¡Frijoles y más está abierto ahora!"

Estoy listo para este momento. Pero también me he estado preocupando mucho. Las
mañanas son sagradas para los clientes que disfrutan de mi café. Hoy no es diferente. La
gente inunda la tienda instantáneamente, haciendo cola para conseguir su dosis de
cafeína.

Chase pone todo su encanto. Sonríe y se ríe junto con los clientes mientras atiende la
caja registradora y la estación de café. Chase nunca muestra estrés bajo el fuego, le digo
a todo el mundo.

Parece tener las cosas bajo control, así que me cuelo en la trastienda muy rápido. Tengo
un pequeño plato de conos rellenos de bollos en miniatura para sacar. Cojo el plato y me
encuentro mirando mis productos horneados.

¿Es mi invento lo suficientemente bueno? ¿Le gustará a la gente? ¿Le gustará a la gente,
incluso le encantará? Ahora es el momento de averiguarlo. Sí, es ahora o nunca.

Caminando hacia el frente de la tienda, oigo el zumbido de los clientes. Realmente se

está llenando aquí. La gente está llenando el lugar. Pero aún así hago una pausa.

No dejaré que el miedo me detenga. No hoy.

Marchando con la cabeza en alto, puse la bandeja al lado de la caja registradora junto a
un pequeño cartel que dice "Muestras gratis".

"¡Oye, mira eso!" Chase dice, señalando. "¿Quién quiere muestras gratis de nuestros
nuevos conos rellenos de bollos?"

Me congelo. Literalmente me quedo quieto. De repente, la gente recoge los conos en

miniatura y se los come rápidamente, a un ritmo casi alarmante. Apenas puedo creer lo
que veo, y mucho menos lo que oigo: órdenes. La gente ya está haciendo pedidos de los
bollos.

"Mira", dice Chase, pasando a mi lado, su brillante sonrisa es un gran consuelo. "Te lo
dije, Leila. Te dije que esto sería un éxito".

Sonriendo, le digo: "Parece que tenías razón, Chase".

La multitud de la mañana se está acomodando, tomando sus asientos normales. Beans &
More es un refugio para los milenarios a quienes les gusta trabajar y estudiar fuera de
casa mientras disfrutan de una elegante bebida con cafeína y -esperemos- ahora un
bollo.

El clic-clac de las teclas del portátil es tan relajante como el fácil jazz que suena en el
estéreo. Por eso amar mi trabajo es tan fácil: la gente es feliz, y conseguirles lo que
necesitan también me hace feliz a mí. O al menos, casi feliz.
Mirando hacia arriba, veo a Dianna salir de la línea. Ella ha sido una amiga y cliente
leal desde el día de mi gran inauguración. Realmente valoro su opinión, así que le hago
un gesto a Chase para que le dé un bollo de peluche de detrás del mostrador.

"¡Hola, Dianna! ¡Oh, te has cambiado el pelo!"

La cara de Dianna se ilumina. Se lo ha cortado más corto, con un lado afeitado. Bendita
sea, está tratando de ser moderna.

"¡Sí, lo hice!"

"Se ve encantador".

"Gracias".

"Oye, Dianna, ¿podría tentar tu estómago con uno de nuestros nuevos conos rellenos de
bollos de bayas?"

Chase señala al mismo en la vitrina. Está haciendo su trabajo perfectamente.

"Te diré algo, te lo daré", Chase melodramáticamente pone su mano alrededor de su

boca para susurrar, "gratis, cariño". Todo lo que tienes que hacer es comértelo y
decirnos a mí y a la jefa lo que honestamente piensas."

"¿En serio?"

"Sí, pero este es el trato, es sólo para ti, porque sabes que eres mi favorito".

"Yo soy".

"Tú eres".

Chase le da el bollo. Observo y espero, conteniendo la respiración. Dentro, estoy

cantando, como, como, como...

La primera mordida de Dianna es cuidadosa. Lento. Ella lo prueba, por si acaso no le

gusta. Pero entonces, delante de mí, da un gran mordisco y su cara se ilumina.

"Oh Dios mío, esto es tan delicioso", dice, sonriendo ampliamente. "Realmente te has
superado a ti misma, Leila. En serio. Esto es tan bueno".

"¿Honestamente?"

"Honestamente", dice ella, sonriendo. "De hecho, ¿puedo llevarme una docena a casa?"

Una enorme sonrisa se dibuja en mi cara. "Por supuesto que puedes, nena".

Me siento cada vez mejor con esto. Mis bollos son un éxito. Este es el comienzo de un
buen... no, que sea un día fantástico.
 Capítulo 2
Leila
Miro hacia atrás y todo lo que puedo pensar es, Wow, realmente pasó volando. Trabajé
duro, y el día fue un gran borrón.

Estoy tan contenta de haber tenido un merecido descanso nocturno. Lo necesitaba.

Chase, por otro lado, salió de fiesta anoche. En serio, no tengo ni idea de cómo lo hace.

Es una hermosa mañana, de esas en las que el aire huele extra fresco, como si hubiera
un ramo de flores en ciernes cerca. Chase y yo caminamos hasta el café. Me está
contando una historia divertida sobre una de las personas que vinieron a la parada ayer
cuando de repente se queda callado y quieto.

Ya estamos en Beans & More, y lo que veo frente a mí es lo último que esperaba.

"¿Soy yo, o parece que hay una fila en nuestra puerta? Espera, ¿ha salido hoy el nuevo
Nintendo? ¿Vamos a vender el nuevo Nintendo? ¿Me has guardado uno? Sabes que
quiero uno," dice Chase.

"Eso no puede ser para la cafetería... ¿verdad?"

Pero a medida que nos acercamos, para mi total sorpresa, es obvio que esa larga fila
está, de hecho, esperando en mi puerta.

"Tal vez todas las otras tiendas están cerradas hoy. ¿Es un día festivo?" Chase sonríe.

Tengo claro que está un poco nervioso. Yo también lo estoy.

"Tal vez". Le devuelvo la sonrisa, pero por dentro tengo más que un poco de miedo.
¿Qué es lo que pasa?

Al pasar por la fila llena de gente, noto que todos están de buen humor y son cordiales.

"Denme un minuto y haré que abran el café inmediatamente", digo, saludando a la

multitud.

"Todavía faltan quince minutos para que abramos normalmente", me susurra Chase.
"Nunca se presentan tan temprano."

Abrir la tienda es la parte fácil. La mayor parte del trabajo de preparación se hace la
noche anterior. Así que estoy orgulloso de mí mismo cuando las puertas se abren en un
tiempo récord.
"¡Entra!" Chase llama a la multitud.

De pie detrás del mostrador, me ato el pelo en mi moño habitual. Escucho a los clientes,
viejos y nuevos, mientras hacen sus pedidos. Parece que todos en esa larga fila están
aquí para una cosa: mis nuevos conos rellenos de bollos.

"Y te dan un bollo. Y obtienes un bollo. Y obtienes un bollo". Chase imita a Oprah
mientras teclea en otro orden. "¡Todo el mundo recibe un bollo!"

"Estas cosas son geniales, Leila. ¡Sigue trabajando bien!"

"¡Sí! ¡Tan bueno!"

Los clientes me felicitan más rápido de lo que puedo decir gracias. Estoy en shock, no
espero este tipo de respuesta a mi creación; he soñado con ello, seguro, pero no a este
grado.

"Chase, creo que será mejor que empiece a hornear un poco más."

"Sea cual sea el número que estés pensando, Leila querida, duplícalo."

Miro la línea, luego mi vitrina, y rápidamente me doy cuenta de que sin duda me
quedaré sin bollos a este ritmo. Así que, haciendo un gesto para que Chase se aleje un
momento de la caja registradora, le doy nuevas instrucciones.

"Limitar a todos a seis".

"¿Seis por persona?" Me arquea la frente.

"Sí".

"Vale, quiero decir que podría causar un pequeño revuelo. Como, la mitad de estos
pedidos hasta ahora han sido para una docena."

"Empezaré a hacer más y los sacaré lo más rápido posible. Sólo deja que todos sepan
que vienen más".

"Lo haré".

"Gracias, Chase".

"No hay problema, jefe. Ahora vuelve a las minas de bollos".

Riendo y saltando en la trastienda, me doy cuenta de que Chase tiene razón, esto
requerirá doblar-no, hacer ese triplicado-mi salida habitual. Tal vez incluso
cuadruplicarla.
Los conos rellenos de bollos son un gran éxito. Yo soy un gran éxito. No podría estar
más feliz. Parece que mis sueños finalmente se están haciendo realidad.

***

A las diez en punto la multitud finalmente se está reduciendo. Tres horas seguidas de
clientes sin parar... estoy casi feliz de que esté terminando. Casi. ¿Cuándo ha sido así en
mi pequeño café? Espero que todos hayan conseguido lo que querían.

ANILLO. ANILLO. ANILLO.

"Lo tengo, Chase".

Contesto el teléfono. No reconozco la voz al principio, pero mientras hablan, empiezo a

darme cuenta de quién es... ¡El comensal residente de la estación de TV local!

Oh Dios mío, he estado viendo sus segmentos durante años. Es una de las pocas críticas
gastronómicas con alguna habilidad discernible.

"Me alegro de que hayas llamado", digo, apenas capaz de contener mi emoción.

"Esperaba presentar tus nuevos conos de peluche en mi programa", dice.

Por muy emocionantes que sean sus palabras, no me impiden corregirla. "Conos
rellenos de bollos".

"Conos rellenos de bollos, sí. Hice que un interno recogiera un lote esta mañana.
Deliciosos".

"Gracias. Significa mucho para mí, y sí, me encantaría que me presentaran".

"Genial, pronto estaremos en la tienda. Y entonces podremos establecer todos los

detalles. ¿Suena bien?"

"Suena genial. Gracias".

Mierda.

"¿Era ese quien creo que era?" Chase pregunta.

"Lo fue".

"De ninguna manera, el Presidente de los Estados Unidos va a venir a la tienda...

¿Quiere un bollo?"

Está bromeando, pero sé que sabe de quién fue realmente la llamada.

"No tienes que preocuparte por él. Yo soy el que te despedirá."

"¡Si, señor!"

"¡Es una noticia maravillosa!" dice una pequeña voz.

Me giro para ver a Dianna en la fila.

"Hola, Dianna", digo, sonriendo.

"Beans & More merece lo mejor. Se merecen una característica, bueno, dos
características", dice ella.

"Un doble rasgo", dice Chase, riéndose. "Bien".

"Sólo quiero decir que es hora de que recibas la atención que te mereces".

Asintiendo con la cabeza, respondo: "Lo es, ¿verdad?"

Sacando su teléfono de gran tamaño del bolsillo del pantalón, Dianna dice en voz alta,
"Oh, ¿has visto esto?"

Dianna me muestra la pantalla, una aplicación de medios sociales, una que rastrea las
respuestas. Aparentemente, el hashtag para los conos rellenos de bollos se está
volviendo viral. Dianna pulsa la pantalla hacia un lado y hay docenas, tal vez incluso
cientos, de fotos de mi café y los bollos.

"¿Esto es de verdad?"

"El realista", responde Deanna, ladeando la cabeza, tratando de parecer moderna.

Un repentino estallido de energía hace que envuelva mis brazos alrededor de Dianna y
le dé un gran abrazo. "¡Gracias!"

"No hay problema", dice, riéndose.

"Chase, Dianna... ¡Es hora de que nos destaquemos!"

Capítulo 3
Blake
Juego con el último aparato con mi mano derecha. Se llama girador de nervios. Maddie
me compró uno para evitar que mis dedos hagan otras cosas molestas. Desde entonces,
me he obsesionado y he comprado varios más. El que tengo ahora es un dragón de oro.

Hipnotizado, lo veo balancearse perfectamente en la punta de mi dedo, sus alas giran tan
rápido que no puedo ver su forma hasta que pierde su velocidad y comienza a disminuir.
El otro beneficio de este juguete es que puedo fingir que estoy escuchando la
conversación de Maddie por teléfono mientras mis pensamientos están en otra parte.

Un momento de desatención por mi parte hace que el girador se caiga de mi dedo. Me

agacho para recuperarlo. Al hacerlo, me apoyo en el mando a distancia y la televisión se
enciende.

Distraido por el color y el movimiento de la pantalla, cojo el mando y empiezo a

moverme por los canales. Mi mente está zumbando, las ideas pasan por mi cabeza como
un torbellino.

Maddie sigue al teléfono, pero ya no estoy segura de qué está hablando.

Ella ha estado conmigo desde que ascendí a la gerencia en el negocio familiar. No

quiero tirármela, y eso es un beneficio para un tipo como yo, que de otra forma pasaría
fácilmente por los asistentes.

Ella es una de esas diligentes asistentes con las que uno sólo puede soñar. Me conoce
mejor que la mayoría, pero no la llamaría amiga. Maddie no tiene problemas para
entender su papel. Yo, empleador; ella, empleada. Creo que a ella también le gusta así.

¿Quién quiere a su jefe deseando que le guste? Estoy seguro de que Maddie no. Si me
tomo el tiempo de mirarla lo suficiente, puedo ver algunos rasgos muy atractivos de
ella, pero no me tomo el tiempo de mirarla o de conocerla.

El personal es el personal. La amistad y el personal no se mezclan. Papá me enseñó esa

lección hace mucho tiempo, y me he mantenido fiel a ella. Si quieres ser mi amigo, no
trabajes para mí.

Cada canal al que acudo tiene una telenovela diurna. ¿El drama se ha apoderado de la
industria de la televisión sin que yo me dé cuenta?

¿Qué pasa con las noticias, los asuntos de actualidad o incluso un maldito programa de
cocina? ¿Dónde están? Por unos segundos pienso en un programa de cocina. ¿Tendría
potencial? ¿Debería conseguir a alguien que lo investigue por mí? Podría pedir
números.

Siempre pide números en cualquier negocio en el que pienses entrar, decía papá. Otro
consejo que me he tomado a pecho.

Una mujer hermosa aparece en mi enorme pantalla de televisión. Está agachada sobre
un banco de la cocina. Me paro a mitad de la película. Y luego me quedo mirando la
pantalla.

Hola...
Cada movimiento es grácil, deliberado y artístico. Sea lo que sea que esté haciendo, es
muy buena en ello.

Trato de seguir lo que está haciendo. ¿Alguien dijo algo sobre los bollos? Tal vez, pero
no puedo estar seguro porque todo lo que puedo hacer es observarla. Sus manos están
cubiertas de harina e incluso tiene un ligero polvo en sus mejillas y barbilla.

Jodidamente lindo.

La cámara se acerca mucho y me atrae el brillo de sus ojos. Ella le echa una mirada de
lado a la cámara. No puedo escuchar lo que dice. No tengo volumen y no soy bueno
leyendo los labios, pero no me importa. Mis ojos sólo beben en los exquisitos rasgos de
esta divina criatura.

Siento que algo me corre por la barbilla. ¿Estoy babeando? ¿Qué carajos?
Probablemente. Aparentemente alguien presionó el botón de pausa de mi cerebro y
delegó cualquier pensamiento a mi polla. Está en atención, listo para la acción.

"La quiero", murmuro. Ahora, estoy prácticamente jadeando. Quiero lamer ese polvo de
harina de su cara. Quiero espolvorearla con glaseado azucarado y luego lamerla.

Gruño suavemente. Hay tanto que quiero hacerle a esta diosa.

La voz de Maddie parece que se hace más fuerte y atraviesa mi estado mental de niebla.

Oigo algo sobre Beans & More y alguien que les hace una propuesta de negocios.
Brevemente, me pregunto quién carajo es Beans & More. ¿Quién se da un nombre tan
raro? Si hago algún trato con ellos, lo primero que sugeriría es cambiar el nombre.

Todo el mundo sabe que los negocios se tratan de un buen nombre, un nombre que
venda. Un negocio con un nombre tan loco nunca puede ser un éxito.

"Leila", dice mi asistente.

Me concentro en observar cada uno de los movimientos de esta encantadora mujer. Sus
dedos trabajan la masa como un artista. Ahora mi mente se pone en marcha mientras
imagino esos hábiles dedos agarrándome las pelotas.

"Hecho".

La mujer de mis sueños se ha ido. Maddie está de pie frente a la pantalla sonriendo
como un gato de Cheshire. La miro con indiferencia.

¿Qué se ha hecho?

No le he pedido nada en la última hora, no desde que volví de mi reunión de media

mañana con el dueño del pequeño café de la esquina.
Una total y jodida pérdida de tiempo, pero lo intenté. Todo lo que conseguí fue una
camisa manchada de tomate.

"¿Perdón?"

Maddie sonríe y camina hacia la mesa. Desafortunadamente, ahora hay un anuncio de

cuchillos para carne en la televisión.

"Hice una cita para que conozcas a Leila".

¿Por qué está hablando con acertijos de repente?

Maddie señala la televisión.

"Puedes conocer a Leila pronto".

"Um, vale..." Trato de darle sentido a las tonterías que dice Maddie. "¿Llamaste a la
chica? ¿Por qué?"

"Dijiste que la querías". Maddie sostiene un iPad frente a ella, con el lápiz táctil
flotando sobre la pantalla. "Asumo que quieres reunirte con ella para los bollos que
hace. La mujer y su producto celestial se han vuelto virales. Sin duda quieres discutir
una propuesta de negocios con ella."

La bombilla se enciende, y finalmente, entiendo lo que pasó. Sonrío.

"Sí, perfecto. Gracias", le digo a Maddie y me bajo del sofá. "Será mejor que me
consiga otra camisa antes de mi próxima reunión".

Maddie ya está de vuelta en el teléfono. No sé con quién está hablando ahora, pero no
importa. Sé que tiene las cosas bajo control. Incluso concertó esta cita mientras yo
todavía estaba flotando en la felicidad erótica. Es como si me conociera mejor que yo
mismo.

Silbo mientras me preparo. Este día está resultando ser jodidamente perfecto, después
de todo. No puedo esperar a conocer a mi ángel Leila en persona.

Chapter 4
Seth
Doy vueltas al whisky en mi vaso, me encanta cómo sube por el borde antes de volver a
bajar sin derramar una gota. Todo está en las muñecas. Miro fijamente por las grandes
ventanas de doble puerta de cristal.
Debajo de mí, puedo ver a la gente común haciendo sus negocios; gente montando sus
bicicletas, yendo a correr, o simplemente paseando por el parque.

En el piso veinticuatro, tengo una gran vista de la ciudad y del parque cercano. El sol de
mediodía está llegando directamente a mi oficina, pero no me importa. Si no puedo estar
afuera, puedo disfrutarlo adentro.

Hay un golpe en la puerta.

"Entra".

No necesito dar la vuelta para saber que es Russell. Su diferente aftershave lo delata
cada vez. Viaja delante de él. De vez en cuando, le he sugerido que lo cambie, pero me
ignora.

"Malas noticias", dice Russell, y ahora me doy la vuelta para mirarlo.

Mientras tomo un sorbo de mi whisky, levanto una ceja en cuestión. Generalmente, no

creo en las malas noticias. En lo que a mí respecta, son sólo noticias.

"Beans & More está totalmente reservado para el resto de la semana".

Frunzo el ceño. Russell tiene razón; son malas noticias.

"Necesito tener un cara a cara con ella. ¿Estás seguro de que has movido todos los
hilos?"

Russell no es alguien a quien se pueda despreciar a la ligera. Y sabe que si todo lo

demás falla, el dinero es la mejor forma de persuasión. Seguramente, debe ser capaz de
hacer su magia.

"Acabo de hablar por teléfono con ellos y me aseguran que no hay nada que se pueda
hacer. Completamente reservado".

Por alguna razón, enfatiza la última parte. Pongo los ojos en blanco.

"Russ, no necesito recordarte lo importante que es que pueda verla esta semana.
Necesitamos hablar con ella antes de que alguien más lo haga. Usa lo que sea necesario
para conseguirme una mesa".

Mi whisky sigue arremolinándose en el vaso, sólo que esta vez está peligrosamente
cerca de derramarse. Russell debería entender lo que quiero decir.

Asiente con la cabeza y cierra la puerta.

Sin mi asistente, miro la enorme pizarra blanca con una lista de cosas por hacer escrita
en ella. En el medio, he escrito en grandes letras negras: Hazte tiempo para ver a Leila
de Beans & More .

Junto a ella, he añadido "Fortes fortuna adiuvat" - la suerte favorece a los valientes. Que
la fortuna me favorezca con Leila, por delante de cualquier competidor.

Brevemente, mis pensamientos se dirigen a Blake. ¿Ya había hecho un movimiento?

Cruza los dedos, está demasiado ocupado follándose a una chica y ni siquiera ha oído
hablar de la última sensación que se está convirtiendo en viral.

Carpe diem, amigo mío. Necesito aprovechar el momento antes de que Blake me gane
en esto. Una cosa era ser competidores en la universidad y empatar con los honores
latinos. Otra cosa es que se meta en mi territorio. No me extrañaría que hiciera una
jugada con Leila y sus bollos.

Frustrado, puse mi vaso en el escritorio de caoba de mi oficina y tomé mi tableta.

Mientras me muevo detrás de mi escritorio para salir de la luz cegadora, abro el timbre.
Aquí es donde vi por primera vez a la exquisitamente deliciosa Leila horneando sus aún
más deliciosos bollos.

Su imagen llena la pantalla y me empapo de cada pedazo de ella. La foto se toma de

lado mientras ella se inclina sobre una bandeja de bollos. Parece que está poniendo la
última de su mezcla celestial en una bandeja de hornear. Se me hace agua la boca con
sólo mirarla.

Una pequeña hebra de sus oscuros rizos ha escapado de la red y el moño que sostiene su
cabello en su lugar. Necesitas ampliar la toma para verla.

Mis dedos juegan con la pantalla, ampliando diferentes partes de ella. Para mi deleite,
lleva una camiseta blanca ajustada con un cuello en v bajo, y puedo ver un poco de
encaje blanco de su sujetador. Ella es una bromista.

Mientras miro a esta diosa en la cocina, siento que mi polla se endurece. La quiere. La
quiere ahora. Necesito estar concentrado y no tener mi cerebro apagado por mi pene.

Paso a la siguiente imagen. En esta, Leila está sonriendo y a punto de meterse un bollo
en la boca. Sus labios están un poco separados y puedo ver la punta de su lengua. Esta
mujer ha sido enviada por el diablo para ponerme a prueba.

Los números de la esquina superior derecha de la pantalla confirman que faltan 30

minutos para que me corte el pelo en Antonio's. Eso me deja otros quince minutos para
babearme por esta zorra.
La última foto del artículo hace que Leila muestre una bandeja de sus bollos para que
todo el mundo los vea. Puedo saborearlos con sólo mirarlos. Russell había traído
algunos el otro día, y se derritieron en mi lengua. Era una mezcla de dulce y picante,
con un toque de vainilla y algo que mis papilas gustativas nunca antes habían
experimentado. Celestial es como yo las describiría.

Apuesto a que hay algo más realmente delicioso que Leila puede ofrecer, algo que mi
lengua quiere probar.

Concéntrate. Si este trato va a salir bien, necesito estar concentrado en los negocios
antes que en el placer.

La llamada a la puerta me saca de mis fantasías.

Russell saca la cabeza por el pequeño hueco.

"Hecho, jefe. Su asistente me ayudó a programar un horario para que veas a Leila esta
semana".

Yo sonrío. Buen hombre. Sabía que podía hacerlo. Con un suspiro y una última mirada
de anhelo en la foto de Leila, salgo del sitio.

Mientras salgo, imagino todas las cosas maravillosas que Leila y yo podríamos estar
haciendo. Mi imaginación está trabajando con el tiempo. Bollos en todos los cafés de la
ciudad, sin mencionar el sabor y la sensación de sabor que podemos crear juntos.

Y por supuesto, por último, pero no menos importante, la explosión de placer que
podemos crear en un frente completamente diferente.

Capítulo 5

Leila

Que dia. Que día tan asombroso.

Sé que Chase está de acuerdo. Nos sentamos en el gran sofá seccional de nuestro
apartamento y compartimos la botella de champán que él vio conveniente abrir. Gran
día.

Mi cabeza todavía está nadando con todo lo que está sucediendo. Es difícil de creer y,
sin embargo, todo es verdad.

"¿Viste a Shelly escabullirse de la tienda de 2nd Street?"

"Yo hice."
"Tenía el pelo en la cara e incluso susurraba, como si tratara de disfrazarse", dice Chase,
riendo. "¡Como si no la reconoceríamos!"

"Oh Dios mío."

"¿Yo se, verdad?"

“Creí haber visto a esa chica, la pelirroja alta del otro lado de la ciudad. Ella trabaja en
el drive-thru de esa franquicia ".

"Oh, lo hiciste", dice Chase, inclinando su vaso. "Ella es un espectador, ese. Sin
disimularla.

"No."

“Sabes, tal vez podríamos contratarla para que modele unos bollos. Podrías decorar su
cuerpo con ellos para una sesión de fotos.

"¿Oh si?" Respondo con una sonrisa.

"Podríamos decirle a los empresarios de la ciudad que es del tipo de triple relleno".

"¡Persecución!"

“Tengo que felicitarte por tu increíble trabajo. Chica, lo mataste hoy. Nunca tenemos
personas que vienen de fuera del estado. Pero hoy lo hicimos ".

"Creo que escuché algunos acentos divertidos de la trastienda".

Vuelve a llenar su vaso y el mío, luego levanta el suyo.

"A bollos y treinta y seis pre-pedidos".

Guau. No tenía ni idea.

"¿Treinta y seis?"

"Sí", dice con una gran sonrisa. "Quería sorprenderte".

"Me dijiste que me gustaban como veinte". Le doy un empujoncito juguetón.

“Como dije, Leila, quería sorprenderte. Esos dieciséis adicionales son para pedidos que
se recogerán la próxima semana. Todo está grabado en la tienda. Y apuesto a que
obtendremos más pedidos anticipados antes del final de la semana ".

"Guau."

"Si."

"Lo maté".
"¡Lo hiciste!"

Chase bebe su vaso y lo llena de nuevo.

"Tengo algo que decirte. Cometí un pequeño error.

Cuando Chase comete errores, su comportamiento cambia de ser feliz a golpear a un

perro. No me gusta verlo de esa manera, pero no me gustan los errores aún más.

"Chase", me quejo. "¿Qué hiciste?"

"Podría haber ... bueno, lo hice ... programar dos reuniones por accidente el mismo día
... a la misma hora ..."

Gimo antes de que termine.

"Lo siento."

Me siento derecho en el sofá y coloco mi vaso.

"¿Qué reuniones?"

"Bueno, olvidé tu reunión con Blake Jacobs, así que programé una con Seth McDaniel
al mismo tiempo".

Suspiro y propongo una resolución rápida. Realmente no estoy de humor para dejar que
nada estropee mi altura, así que no lo hago.

"Está bien. Solo tendré una doble reunión. No es gran cosa."

"¿Estás seguro?"

"Estoy seguro."

Chase vuelve instantáneamente a su estado de felicidad, arregla su slouchie rojo y gris y

toma otro trago.

"Esto es algo bueno".

"Lo guardamos para el momento correcto".

"Estoy de acuerdo. No hay mejor momento que este ".

"No".

"Entonces…"

Sé que algo viene.

"¿Qué?"
"¿Qué te vas a poner cuando conozcas a Blake Jacobs y Seth McDaniel?" pregunta
mientras me lanza una sonrisa maliciosa. "El Blake y Seth".

"No lo he pensado".

"Bueno, mejor". Se para de repente. "Tengo que correr al baño. Después de eso,
encuéntrame en tu armario. Vamos a probarnos algunos atuendos para esa reunión ".

El tiene razón. Es una reunión importante, y debería lucir lo mejor posible. Por mucho
que odie la idea de probarme ropa en este momento, sé que si no lo hago ahora, no lo
haré más tarde.

"Te veo ahí."

Lo veo salir corriendo al baño y reír. Se mueve como una jirafa borracha. De pie, me
encuentro con las piernas temblorosas. Hmm, tal vez también me muevo como una
jirafa borracha.

En mi pequeño vestidor cuelgo ropa de los últimos cinco años de mi vida. No compro
mucho, especialmente los últimos seis meses. Estoy demasiado ocupado, todo mi
enfoque está en los conos rellenos de bollos. Hay esa duda otra vez, creo. Fea y estúpida
duda. Sin embargo, recuerdo la última vez que necesitaba un atuendo bonito; Chase
estaba allí para ayudarme también.

"Oye, veamos qué tienes". Chase entra al estrecho espacio conmigo. “Cariño, ve a
sentarte en la cama. Sacaré algunas cosas que creo que funcionarán ".

“Fuiste a la escuela de arte; deberías haber ido a la escuela de diseño de moda, Chase.

"Nunca demasiado tarde."

"Supongo que no".

Chase revuelve mi ropa como un loco. Me pregunto si él está tan decepcionado por la
selección como yo. Pero él no dice nada. No hasta que chille.

"¡Oooh! No sabía que tenías este número sexy, Leila ".

Out vuela un vestido de cóctel negro que compré durante la universidad. Estaba
apretado entonces, e hizo que mis senos casi salieran de la parte superior. ¿Me podría
encajar ahora? No. Quizás ... No.

"Ese era mi vestido sexual favorito ... hace años".

"Puedo decir", dice. "¡Póntelo! ¡Póntelo! ¡Póntelo!"

Termino mi vaso y me digo a mí mismo, a la mierda. Por qué no?

Me quito el pijama y rápidamente saco el viejo vestido sobre mi cabeza. Todo va bien,
hasta que llego a mis senos.

"Aquí, déjame ayudarte", dice Chase, tirando de la parte inferior del vestido. "Tus
grandes tetas viejas están en el camino", se ríe.

"¡No siempre fueron tan grandes o tan viejos, Chase!"

Pero, Dios mío, este vestido: lo estiro, lo deslizo y lo aprieto. Y de repente, finalmente -
encaja. Bueno, en su mayor parte.

"Maldita mujer."

Ajuste mis tazas y miro hacia abajo. No puedo ver mis pies. Cuanto más miro, más
siento que podría caerme.

“Sí, subí una o dos tallas desde la última vez que me puse esto. Debe parecer horrible
para mí.

"Por el contrario", dice Chase con una gran sonrisa. "Creo que cautivaría a Blake y
Seth".

"¿De Verdad?" Respondo, devolviéndole la sonrisa. “¿El Blake? ¿El set?

“Un poco de maquillaje, algunas joyas, tal vez ese pequeño suéter blanco de manga tres
cuartos que acabo de ver hace un minuto. Sí ... si te ves así, Blake y Seth no serán nada
en comparación con la Leila.

El comentario de Chase calienta mi alma. Me gusta a donde está yendo esto.

Capítulo 6
Leila
El viaje en automóvil a Casa Dell’amore es rápido: rápido y corto, como diría Chase. Sé
que está en casa, esperando ansiosamente mis mensajes de texto. Le dije que lo
actualizaría más tarde.

Dijo que tenía plena confianza en mí. Él debería; Estoy listo. Estoy preparado.

Cuanto más organizado soy, menos dudas tengo.

Y hoy, no tengo dudas. Cero.

Estoy listo.
Salgo del taxi y me dirijo a la puerta principal del restaurante. Saludo al asistente, que
parece que está jugando un juego en su teléfono. Él se acerca, se levanta y me llama por
mi nombre. Supongo que me esperaban.

"Sígueme", dice, y hace un gran gesto.

"Gracias."

Yo sigo al joven. Me lleva al restaurante, un lugar magníficamente grande que está lleno
de estilo y clase.

Te debo una, Chase, creo. Estoy seguro de que me alegro de haberlo escuchado y estoy
usando mi vestido de terciopelo negro con este bonito par de tacones caros para
combinar.

Los acentos revestidos de oro del restaurante realmente me llaman la atención. Brillan,
y ¿a qué artista, culinario o de otro tipo, no le gusta un poco de brillo?

Cuando llegamos al comedor principal, se me ocurre que el restaurante está vacío y que
se ha instalado una mesa grande en el centro de la habitación. Aquí debe ser donde me
encuentro con los chicos. Qué manera de causar una primera impresión.

Blake y Seth están allí, discutiendo algún tipo de negocio. Tan pronto como me ven, se
ponen de pie, cada uno con una gran sonrisa en sus hermosos rostros.

"Leila, me alegro de verte".

"Bienvenidos."

"Hola." Sus trajes son exquisitos. Apuesto a que cuestan más de tres mil dólares.
Relojes de oro, zapatos de diseño ... Me pregunto si esos son Bally, o tal vez, Berluti.
Me río entre dientes mientras pienso, Chase ... realmente me estás contagiando.

Blake extiende su mano primero. Lo tomo y le doy un fuerte apretón de manos.

"Mi nombre es Blake Jacobs".

Sus ojos azules brillan tan brillantes como el oro que me rodea. Son casi irreales.

"Encantado de conocerte, Blake".

Seth no pierde el tiempo. Él también alcanza mi mano. "Seth McDaniel".

Mis ojos se centran en su anillo. Un anillo universitario, supongo. Lo miro, y luego a

sus ojos, y luego vuelvo a mirarlo.

Para que un hombre de unos treinta años todavía use un anillo de la universidad, debe
haber una gran historia allí. ¿Quizás es la tercera o cuarta generación que asiste a la
universidad? ¿Quizás la escuela tiene una biblioteca que lleva el nombre de su padre?
Tal vez, sacudo la cabeza y me digo que me concentre.

"Un placer conocerte también, Seth".

Miro. Estos dos tipos han salido directamente de las películas de Hollywood. Debo
parecer que estoy aturdido porque Blake sonríe y asiente con la cabeza a Seth antes de
saludar al asistente.

"Por favor tome asiento."

El asistente saca mi silla por mí. Este lugar es de clase.

Blake y Seth se sientan en la mesa frente a mí. Me recuerdo una vez más que estoy listo.

"He hecho los preparativos. Así que por favor, relájate y disfruta ", dice Blake.

"Oh. Gracias." Asiento con la cabeza. "Dime, ¿por qué el restaurante está vacío hoy?"

Blake responde encogiéndose de hombros. “Soy dueño del edificio. Los compré por el
día ".

Seth sonríe irónicamente. "Te dije que lo encontraría extraño, Blake. Mira, si fuera por
mí, estaríamos cenando en uno de los mejores de Nueva York. Un lugar lleno de gente,
todos celosos de nuestra compañía ".

"Bueno, si fuera por mí, te echaría del restaurante. Se suponía que era una reunión
privada.

Yo hablo. "Es culpa mía. Bueno, la culpa de mi asociado. Él doble reservado. Lo

siento."

"No, no, no", dice Seth y agita sus manos dramáticamente. "Sin preocupaciones. Blake
es solo ser un bebé.

“Lo siento, Leila. Disculpe Seth, él viene de una larga línea de paganos. Stock muy
grosero ”, agrega Blake.

Seth niega con la cabeza; sin duda ha escuchado eso antes. Pero para mí, esto se está
volviendo incómodo.

"Por favor. Ustedes dos." Alzo un poco la voz. "Por favor deje de."

Ellos paran. Pero aún puedo sentir la animosidad.

"No escucharé ninguna de sus propuestas hasta que ambos me digan lo que está pasando
aquí. ¿Por qué ustedes dos se hablan como un par de mocosos malcriados?
Eso debería poner las cosas en perspectiva. Al menos eso creo.

"Déjame explicarte", dice Blake. “Seth y yo, bueno, éramos rivales en la Harvard
Business School. Era un año menor que yo y me costó mucho estar a mi sombra ”.

"Tu sombra era gorda", se burla Seth. "Eclipó a toda la maldita escuela".

"Ver."

"Mira, es más que eso", explica Seth. “Mi familia ha tenido la desafortunada suerte de
estar en la misma industria que los Jacobs. Y estos jaco bs, obtienen las mejores
ubicaciones, las mejores ofertas. Ganan el dinero fácil por el que los McDaniels
tenemos que trabajar el doble de duro ”.

"Tal vez si McDaniels bebiera menos-" comenzó Blake.

"¡Jódete, Blake!" Seth grita mientras se levanta.

De pie también, señala Blake. Vete de aquí, Seth. Nadie te quiere aquí."

"¿Estas seguro de eso?" dice torciendo su anillo de la universidad. Míralo de cerca,

Leila. Miente y se escapa de la mierda.

Llego a mi límite para este infantilismo. Yo también me pongo de pie. Señalo a cada
uno de ellos y hablo en mi tono más autoritario.

"Siéntate. Ustedes dos. Esta extraña enemistad tuya se detiene ahora. Se detiene justo
ahora o salgo, ¿me oyes? ¿Quieres que me vaya? ¿Y tú, Blake?

"No", dice.

"¿Tú, Seth?"

Sacudiendo la cabeza, también responde: "No".

"Bueno. Muy bien."

Veo que Blake y Seth intercambian una mirada que no entiendo. ¿De que va todo eso?
Estoy a punto de decir algo más, para tratar de averiguar qué es ese intercambio
silencioso, pero la camarera llega con los aperitivos antes de que tenga la oportunidad.
La comida huele tan bien que pierdo el hilo de mis pensamientos.

"¿Vieiras envueltas en tocino y champiñones rellenos?" Termino diciendo. "Buenas

elecciones. Ahora estoy impresionado. Vamos a sentarnos y comer ".

Capítulo 7
Blake
Me aclaro la garganta y abro mi laptop. Maddie ha preparado una pequeña presentación
de diapositivas para mí.

Para mí está claro que si quiero ganarle a Leila, solo tengo una oportunidad. Con Seth
justo frente a mí, no puedo joder.

Mi dedo índice ligeramente tembloroso presiona la tecla de flecha lateral y aparece una
imagen de uno de esos bollos deliciosos que todos ansiamos. Le echo una rápida mirada
de reojo a Leila para evaluar su reacción, pero tiene una excelente cara de póker. No
puedo leerla en absoluto, al menos todavía no.

"De lo que realmente estoy hablando, Leila, es que el Imperio Jacobs compra los
derechos de tus bollos. Los llevaríamos a un nivel que nunca podrías alcanzar ". Mierda
. No suena tan impresionante como debería ser.

Siguiente diapositiva. Este es de gráficos, números y gráficos circulares.

Pongo los ojos en blanco. Esto no convence a Leila. Ni siquiera me está convenciendo.
¿Qué me pasaba hoy?

¿Dónde está el dueño de negocios, Blake? ¿Se ha ido de vacaciones? Sí, deja de sus
sentidos.

Encuentro su presencia un poco desconcertante. Su dulce perfume es embriagador.

“Comercializaremos su producto para que cada café que poseamos no solo almacene los
bollos, sino que los muestre en su ventana. De lo que estoy hablando es de exposición
frontal ".

Todavía no veo ninguna reacción visible de Leila. Por el contrario, parece un poco
aburrida por mi discurso. Es hora de aumentarlo, sacar la artillería.

Inclinándome un poco hacia ella, con la mano izquierda sobre su hombro, comienzo mi
discurso de venta.

"Imagina esto, Leila". Siento que tiembla un poco con mi toque, y sé que estoy en el
camino correcto. “Vallas publicitarias en toda la ciudad con tu foto, junto con esos
bollos celestiales. Todos y cada uno de los cafés que les sirven y les dan la máxima
exposición ".

La siento temblar un poco. ¿Lo he logrado? ¿Ya está comiendo de la palma de mi

mano?

Creo que ella se está enamorando de mí. La estoy barriendo en el momento. El impulso
necesita continuar.

"¿Si?" ella me sonríe Esa sonrisa podría derretir un iceberg.

“El producto seguirías siendo tú. Quiero decir que los llamaríamos Leila Scones ".

Leila Lo digo como si el chocolate suave se derritiera en mi boca. Cuando pronuncio su

nombre de esa manera, mi polla se pone dura como una roca. Por suerte para mí, ni Seth
ni Leila pueden ver abajo. Discretamente, dejo caer mi servilleta en mi regazo, solo para
asegurarme.

Esto es pura tortura. Si ese idiota Seth no hubiera arruinado mi reunión, los dos nos
apresuraríamos a una de las suites ejecutivas de este hotel para que pudiéramos
arrancarnos la ropa, y podría golpear mi polla en su coño.

"Entonces", Seth interrumpe y tose cortésmente. "¿Está sugiriendo limitar el éxito de

Leila a unos cuantos cafés y anuncios gigantes de vallas publicitarias?"

La sonrisa del pequeño pinchazo debería limpiarse de su cara. Se necesita todo mi

autocontrol para no golpearlo. Lo suficientemente malo es que está aquí arruinando lo
que debería ser la reunión de negocios perfecta; peor es que está haciendo comentarios
insultantes sobre mí y mi propuesta frente a la mujer que estoy tratando de impresionar.

Aprieto los dientes y trato de mantener algún tipo de cortesía. "¿Qué sugieres, Seth?"

Horrorizada, veo que Leila dirige su atención a mi enemigo mortal. La tuve! Joder,
estaba tan cerca.

Seth, que está sentado en una silla frente a nosotros, se acerca a Leila. Ahora es su turno
de poner su mano sobre su otro hombro.

"Leila", murmura, y puedo ver que sus ojos se iluminan con algo parecido al deseo.
“Piensa más allá de un tipo de bollo. No te limites ".

"Piensa en conquistar el mundo", continúa. “Con mi propuesta y respaldo, podrías

convertirte en la próxima superestrella en el mundo culinario. Juntos, podemos explorar
y viajar en el tren del sabor. El mundo se convertirá en nuestra ostra. No te vendas a
corto. Apuntar alto. Apunta al universo, y si tienes suerte, aterrizarás en las estrellas ".

Leila se ríe. Mi interior se retuerce cuando veo sus labios curvarse hacia arriba, un
pequeño hoyuelo en su mejilla derecha, y sus ojos brillan. ¿No me digas que el pinchazo
me va a superar?

Piensa, Blake, piensa.

"Leila". Me aclaro la garganta y ella se vuelve hacia mí, lentamente. Ella me mira, de
vuelta a Seth, y de nuevo a mí.

Mientras nos estudia a los dos, el tiempo parece haberse detenido. No se me ocurre nada
más que querer explorar esas curvas suyas con mis manos, lengua y polla. Mi pene
definitivamente ha tomado el control de la reunión; el cerebro renunció y se fue a casa.
Adiós.

Mis ojos miran sus suaves y deliciosos labios, con solo un toque de brillo labial en ellos.
Están rogando que los besen. Luego bebo en sus senos turgentes, e imagino lo que haría
con sus pezones.

"¿Perdón?" ella pregunta.

"Voy a ir a refrescarme", dice Leila, sacudiendo la cabeza, cuando ni Seth ni yo

respondemos. Mi rival y yo saltamos para ayudarla a salir de su asiento.

En nuestro apuro por impresionar a este ser exquisito, golpeo la mesa con la cadera. La
botella de vino comienza a balancearse precariamente de lado a lado.

Los reflejos del rayo de Seth alcanzan la botella, pero es una fracción demasiado tarde.

La botella cae a la derecha y rueda hacia el borde de la mesa. Allí se cierne durante
aproximadamente un segundo o dos, antes de que se vuelva chocando contra el suelo.
La metralla de vidrio rebota en todas las direcciones, y el vino tinto entra en erupción en
una fuente después de liberarse del vaso.

Al instante, la alfombra está absorbiendo el líquido.

Leila duda.

Un camarero se materializa con un equipo de limpieza, y ella se va.

Miro fijamente ese delicioso culo moviéndose de un lado a otro. Que asno.

Seth murmura algo y me giro hacia él.

"¿Perdón?" Pregunto esta vez

"Invicta", murmura y sonríe.

Prick tiene que mostrar su latín cada oportunidad que tiene. ¿Qué quiere decir sin
vencer? ¿Está ella invicta?

No por mucho más tiempo, y si no fuera por él, ya estaría en una habitación con ella,
conquistando lo que debería ser mío.

Es hora de ir al plan B y deshacerse de Seth.

 Capítulo 8
Seth
Mi pulgar mueve mi anillo de la universidad de lado a lado. Al mismo tiempo, miro a
Blake. Hace que los pelos de mi nuca se pongan firmes.

Lo que debería ser una reunión de negocios agradable se está convirtiendo en mi peor
pesadilla. No puedo creer que Blake no se dé cuenta del potencial de Leila.

Ella tiene mucho que ofrecer. Comprar los derechos de sus bollos es una propuesta
comercial muy miope en muchos niveles.

"¿A que estas mirando?" Blake me ladra y sonrío.

Hay un dicho sobre "un perro que se siente pisoteado". ¿Blake se siente amenazado?

Dejo de jugar con mi anillo y tomo un sorbo de agua.

"Solo estoy pensando en la difícil decisión que Leila tiene que hacer".

Blake levanta las cejas. Claramente no está impresionado. Probablemente ninguno de

nosotros sabe exactamente cómo terminamos aquí al mismo tiempo, pero ambos
estamos preparados para hacer lo que sea necesario.

Nosotros siempre tenemos.

"¿Elección? ¿Difícil? Esas dos palabras no van juntas cuando se trata de ti y de mí,
¿verdad? " Blake se estira en su asiento. "Quiero decir, mirate."

Apunta su mano derecha hacia mí.

Doblo mis brazos delante de mí. Blake debería hablar. ¿Cuándo fue la última vez que se
hizo un cambio de imagen? Al menos uso mi cabello rubio corto y hago que Jules se
ponga rojo para darle un aspecto más moderno.

"¿Qué pasa si ella no va a elegir entre nosotros?" Mantengo mi tono ligero y juguetón.

Se lanza el guante: McDaniel versus Jacobs, nuevamente, solo que esta vez las apuestas
son muy diferentes. No estamos compitiendo por una propuesta comercial, sino por la
atención de una diosa. ¿Quién saldrá ganador esta vez?

Blake frunce el ceño. Puedo ver su mente trabajando con el tiempo. Él está luchando
para enfrentarse a la realidad.

"¿No creo entender?"

¿Es eso un pequeño estremecimiento en su voz? ¿Quizás su seguridad en sí mismo se
está desmoronando un poco?

Me río. “Puede que tengas que compartir. Leila podría elegirnos a los dos, ¿has pensado
en eso?

Por unos segundos, Blake no dice nada. Sus ojos parpadean rápidamente. Luego se ríe.

Es la risa de alguien demasiado confiado, alguien que está a punto de descubrir por las
malas que las cosas podrían no salir bien.

"¿De verdad lo crees?"

"Podríamos necesitar aprender a compartir". Mi tono sigue siendo juguetón y ligero.

Blake niega con la cabeza.

Lo estoy observando de cerca. Está luchando por aceptar mis palabras. Lo conozco muy
bien.

"Esperas y verás cuando ella regrese", le digo.

La veo caminar por la habitación antes que Blake. Parece que hay un resplandor a su
alrededor cuando se acerca a nosotros, como una delicada flor que despliega sus pétalos
para que el mundo los vea. Parece haber un paso en su primavera que no había visto
antes.

Una vez que se sienta de nuevo, le sirvo más vino. Ella me sonríe y toma un sorbo.

"Lamento haber tardado tanto". Leila toma otro sorbo.

“No te preocupes, Leila,” digo rápidamente. "Blake y yo estamos avanzando como una
casa en llamas".

Leila se ríe y mira de mí a Blake.

"La mejor base de cualquier relación es la confianza", comienzo la conversación

nuevamente. Blake niega con la cabeza una fracción. Lo noto, pero no creo que Leila lo
haya hecho.

Ella toma un sorbo de su vino. Una vez que vuelve a bajar el vaso, su cabeza se inclina
un poco hacia la derecha.

"¿Entonces estás con alguien?" Realmente no me importa. Incluso si lo fuera, el chico

no tendría ninguna posibilidad contra mí. Entraría con todas las armas encendidas.
Nunca sabría qué lo golpeó: rosas, chocolates, lencería sexy, joyas caras, todo el cerdo.
Mímala podrida y trátala como a una reina. Quienquiera que sea el tipo que está viendo,
no podría mantenerse al día.

"Una chica como tú seguramente tiene un novio", Blake interviene ahora.

Una breve sombra pasa por su rostro.

“Mi último novio apenas merece una mención. Era un imbécil de dos tiempos y trampa.
Esta vez ella toma un gran trago de su bebida.

Reprimo mi risa. Que suerte para nosotros. No quiero herir sus sentimientos.

En cambio, me inclino hacia ella antes de decir: "Su pérdida es nuestra ganancia".

Me aseguro de enfatizar el nuestro y lanzar una mirada en la dirección de Blake.

Claramente, Blake no ha anticipado mi estrategia y es tomado por sorpresa.

Su cabeza se inclina aún más hacia la derecha. Siento su pierna rozar la mía debajo de la
mesa.

Mi polla se endurece al instante. Reprimo un gemido. La sonrisa diabólica de Leila se

ensancha aún más.

Sus delgados dedos de piano recogen un palito de pan. Ella lo mira como si fuera un
tesoro de gran valor. Luego, muy lentamente, se lo lleva a su cara. Allí ella envuelve sus
labios alrededor y lentamente lo chupa.

"Es bueno ver que ustedes dos están subiendo", Leila saca el palito de pan de su boca
para hablar y lo vuelve a poner.

La flor está floreciendo frente a nosotros. Lanzo una mirada en dirección a Blake, que
parece estar claramente divirtiéndose también.

"Sabes", Blake se inclina hacia nosotros. "Soy dueño de este edificio".

Leila parece estar pendiente de todas y cada una de sus palabras.

"Y podría conseguirnos una suite de lujo arriba". Hace movimientos con la barbilla
hacia arriba.

Casi salto de inmediato, pero me las arreglo para quedarme donde estoy, verificando la
reacción de Leila. Se ha comido su barra de pan y ahora se lame los labios. Me encanta
ver la punta de su lengua acariciar sus labios. Es una activación absoluta, no es que lo
necesitara.

Ya estaba duro como puede ser.

Blake se levanta y Leila y yo lo seguimos. Ella se pone a mi lado y yo me sumerjo en su
aroma, que es una combinación de dulce rosa y canela.

El personal del hotel se inclina cuando pasamos junto a ellos y subimos al ascensor.
Ahora estamos parados juntos en un espacio reducido cuando las puertas se cierran.

Mi mano toca la de Leila, y pequeñas ondas de choque eléctrico me atraviesan.

No puedo esperar para entrar en la habitación.

Capítulo 9
Leila
Mi mente está en otra parte. Blake nos invita a Seth y a mí a su habitación, pero apenas
registro el camino hasta allí. De repente estoy en la puerta.
Blake la abre con su llave y nos hace pasar. Echo un breve vistazo a mi alrededor.
Es exagerado y extravagante, al igual que el restaurante, y como todo lo que toca Blake,
según estoy aprendiendo.
Una vez que entramos, extiendo mis manos y agarro a ambos hombres. No estoy seguro
de que les guste. Y no estoy seguro de que me importe. Simplemente los agarro a ambos
y los acerco a mí hasta que puedo sentir sus cuerpos presionarse contra los míos.
¿Les gusto? ¿Es esto un error?
Las preguntas quedan en mi mente hasta que Seth besa mi cuello y Blake me toca el
pecho. Cierro los ojos y me derrito. Cuando los abro de nuevo, tanto Seth como Blake
me bañan con besos en el cuello y la mandíbula.
Seth se detiene. Siento que su aliento en mi cuello retrocede. “Estás tenso, cariño. ¿Hay
algo mal?"
No se que decir. "Tengo que confesar, no estoy seguro de por qué estoy haciendo esto".
Blake se ríe por lo bajo. No hubiera podido escucharlo si no hubiera estado tan cerca.
"¿Por qué hacemos algo, Leila?" él dice. "¿Por qué nos levantamos por la mañana, nos
acostamos por la noche?"
"YO-"
"No la confundas, Blake".
"No estoy confundido", digo, cuando realmente lo estoy. "Estoy solo ..." Totalmente
poco familiarizado con tener dos tipos listos para satisfacer todas mis necesidades a la
vez.
La mano grande de Blake me baja por el vestido y entre mis piernas, donde toma mi
palpitante coño y me abraza suavemente. Siento que me quedo sin aliento, y luego, sí,
mis bragas están empapadas.
Puede que no esté completamente seguro de por qué estoy haciendo esto, pero la mano
de Blake responde a otra pregunta: quiero esto. Estoy locamente atraído por los dos, y
quiero esto. Realmente quiero esto.
"Podemos parar", murmura Blake.
"No." Sacudo la cabeza "¿Quién dijo algo sobre detenerse?"
Empujo la mano de Blake debajo de mi vestido, para que pueda sentir lo mojado que
estoy por ellos. Luego le indico a Seth que me bese.
Después de un momento, me siento obligado a decir algo más. "Sé por qué estoy
haciendo esto".
"Está bien, ¿por qué?" Seth pregunta, y siento su sonrisa contra mi cuello.
“Estoy haciendo esto porque me siento atraído por ustedes. No puedo negarlo. Y ni
siquiera quiero hacerlo.
Seth se ríe cuando Blake comienza a despegar el lado derecho de mi vestido. "A los dos
nos gustas mucho también, ¿verdad, Blake?"
Blake está midiendo mi pecho mientras se derrama de mi vestido. "Hay mucho que
gustar".
Yo sonrío. Estoy muy feliz de escuchar eso. "Bien, bueno, hay más de donde vino
eso". Me quito el otro lado del vestido y ahora mis dos senos están libres.
Blake acaricia y lame mi pezón derecho, tirando de él entre sus dientes mientras Seth
habla el de la izquierda. Siento que mis piernas se debilitan.
Mi cuerpo tiembla tanto que no estoy seguro de poder aguantar mucho más. Envuelvo
mis brazos alrededor de ambos hombres. Sus grandes hombros se sienten como piedra
bajo mi toque.
No tengo que decir nada. Me sostienen, y me derrito más en ellos. Cierro los ojos y me
levantan sobre la cama, extendiéndome ante ellos.
¿Alguna vez una mujer ha sido tratada así? Quizás en el pasado, alguien como Marilyn
Monroe o Cleopatra.
Un tirón en mis bragas me abre los ojos. Los veo: dos hombres magníficos y
perfectamente formados, ansiosos por complacerme. ¡Yo!
Pero los despido. Quiero que se desnuden primero también. Necesito ver si sus cuerpos
son tan increíbles como creo que son.
"Quitate la ropa."
Mis instrucciones los pusieron a ambos en acción. Blake se desnuda con cuidado, dobla
su ropa y la coloca en montones ordenados.
Por el contrario, Seth se quita los pantalones como un salvaje y los patea a través de la
habitación. Su camisa va a continuación, arrojada hacia abajo como si estuviera
disparando una pelota de fútbol.
Yo sonrío. Qué espectáculo tan entretenido y sexy. Soy una dama con suerte.
"Espera", le digo a Seth, ya que está a punto de tirar de sus boxers. "Despacio."
"Ahh ... la mujer quiere un espectáculo, Blake", dice Seth.
Blake asiente y sonríe mientras desengancha su reloj. "Entonces dale uno."
"El gusto es mio."
Seth baja sus boxers lentamente. Pero la sonrisa astuta en su rostro no es suficiente para
quitarme la atención de su enorme y abultada polla. Estoy seguro de que hay una
expresión de shock total en mi cara.
Nunca en mi vida he visto una polla tan masiva.
"¿Te asusto?" él se burla.
"Nunca he ..." Mi voz se tambalea, y lamo mis labios involuntariamente.
"Oh no. No digas que nunca has visto uno tan grande antes, no hasta que hayas visto el
mío ", interrumpe Blake cuando termina de doblar sus calzoncillos.
Me da la espalda. Solo puedo maravillarme de su culo perfectamente redondo y
firme. Es decir, hasta que se da vuelta y revela su polla igualmente grande a la
habitación.
Joder, sé cómo elegirlos.
"¿Entonces, qué piensas?"
"Creo que voy a necesitar verlos de cerca".
Wow, ¿quién es esta chica que se ha convertido en una puta sucia para estos hombres
tan sexys? Me pregunto. Pero no puedo evitarlo.
Los quiero. Ahora.
Blake y Seth se acercan, parados uno al lado del otro. No hay forma de que sepa quién
es más grande; Ambos son locos enormes. Tomo un eje duro y palpitante en cada mano
y envuelvo suavemente mis dedos alrededor de ellos, acariciando.
Soy tímido al principio, temeroso de mirarlos a los ojos. Sin embargo, a medida que los
segundos pasan a minutos, empiezo a disminuir y mi mirada se levanta
lentamente. Quiero esto, y lo voy a aceptar.
"¿Te gusta que?" No estoy seguro de a quién le pregunto, ambos, supongo.
"Sí, eres jodidamente increíble, Leila".
"Joder, sí. Verdaderamente un jodido ángel de arriba.
Mi interior se agita: estoy caliente y sudando. Luego está el asunto más apremiante. ¿A
quién me pongo primero en la boca?
Me inclino hacia ambas pollas y dejo que mi aliento exhale sobre sus anchas
cabezas. Los veo a ambos estremecerse de anticipación. Siento que se ponen aún más
difíciles dentro de mis manos.
Siento que podría explotar; Solo puedo imaginar cómo se sienten.
Estoy listo para esto, repito por enésima vez hoy.
Cierro los ojos y aprendo hacia adelante, rozando mis labios contra uno y luego con el
otro. Mis labios son suaves, siempre lo son, pero no tan suaves como mi lengua.
No puedo esperar para probarlos, así que humedezco mis labios con mi lengua y luego
presiono un beso en la cabeza lisa de cada hombre.
"Me estás matando, Leila".
"Yo también."
"Tal vez quiero saborear el momento", murmuro.
Blake mira a Seth y él asiente. "Quizás necesites un poco de motivación".
Seth toma mi mano y, mientras me paro, Blake cae de rodillas, besando mi estómago
hasta debajo de mi ombligo.
"Vamos a quitarnos esto, ¿de acuerdo?"
Casi me ahogo mientras trato de hablar. "Bueno."
Blake tira de mis bragas al suelo con un tirón suave. Salgo de ellos, y antes de que
pueda parpadear, él me pasa la lengua por el muslo. Todo mi cuerpo tiembla.
“Acuéstate, bebé, y Blake te cuidará ... mientras tú me cuidas a mí. ¿Acuerdo?"
"¿Acostarse?" Repito. Nada tiene sentido en el momento. Mis nervios se disparan y mi
cuerpo grita por más. "¿En mi espalda?"
"Si."
Me recuesto y, apenas lo hago, Blake entierra su rostro entre mis piernas. Hasta
entonces, lo tomé como el hombre de precisión, el pensador, el cirujano, mientras que
Seth es el salvaje.
Pero no, la lujuria lo conduce como cualquier otro hombre. Está tan abrumado como el
resto de nosotros, ahora alimentado por la necesidad. Para mi.
Gimo cuando su lengua encuentra el lugar correcto. Giro la cabeza hacia un lado, para
enfrentar la polla que espera de Seth. Es grueso y abultado, temblando de
anticipación. Él cuelga esa polla gigante sobre mis labios, incluso la retira
juguetonamente cuando abro la boca, negándome el sabor que anhelo.
Pensé que yo era el que se burlaba de ellos. Ahora me está tomando el pelo.
Ahora soy yo quien lo quiere.
Desesperadamente.
"Dame eso", le ruego.
"No tienes que decirme dos veces".
Lo coloca en mi boca y mis labios se estiran para envolver su palpitante
circunferencia. Me llena por completo, golpeando la parte posterior de mi garganta.
Joder, es enorme. Me ahogaría si no se tomara su tiempo, dejándome adaptarme.
Relajo mi garganta y respiro por la nariz, queriendo que me llene con sus diez pulgadas
completas.
Ahora estoy listo Quiero más.
Agarro la parte posterior de sus piernas, y le insto a que vaya más rápido. Más fuerte. Su
ritmo cambia gradualmente, a diferencia de la lengua de Blake, que es rápida y furiosa
contra mis labios lisos.
Después de un momento, saco su pitón de mi boca y lo miro a los ojos. No estoy seguro
de por qué digo esto, pero lo hago.
"A la mierda mi cara".
Mis palabras prendieron fuego a sus acciones. Está de vuelta en mi boca y me perfora,
su polla golpea repetidamente la parte de atrás de mi garganta mientras empuja duro y
rápido.
Hago mi mejor esfuerzo para aplanar mi lengua, acariciar su eje mientras se desliza
hacia adentro y hacia afuera. Él está gimiendo ahora.
Debe sentirse increíble. Quiero que. Quiero hacer que se vuelva loco de placer.
Todo por mi culpa.
Un repentino aumento de éxtasis hace que mis piernas se disparen rectas, mi cuerpo
repentinamente en llamas. Blake me hará venir en cualquier momento.
"Más rápido", le digo, en el corto segundo que la polla de Seth está fuera de mi
boca. "Más."
Blake obliga.
Y vengo con tanta fuerza, de la nada, que es todo lo que puedo hacer para mantener la
polla de Seth en mi boca.
Sin embargo, creo que disfruta de la emoción, porque se sale de mi boca mientras
recupero el aliento y luego rocía esperma caliente y pegajoso sobre mis tetas. Joder, eso
es sexy como el infierno.
"¡Mierda!" Él gruñe.
"Oh Dios mío." No esperaba eso, pero me encanta. Mucho más de lo que hubiera
pensado.
Blake levanta la vista y se ríe. "¿Mi turno?"
"Sí, Blake", lloriqueo. "Tu turno."
Mientras yazco allí, los chicos intercambian posiciones. Ahora Seth se arrodilla entre
mis piernas mientras Blake se para sobre mi cabeza.
"Tienes un sabor increíble, tan bueno como tus golosinas", dice. "No es mejor."
Me siento calentar ante sus palabras. "Gracias. Te lo horneé fresco, Blake.
Él ríe.
"Ven aca." Le indico que me dé su polla. Lo quiero en mi boca ahora.
Pero él se hace a un lado.
"Cuelga la cabeza".
"¿Qué?"
"Cuelga la cabeza a un lado de la cama".
Me recoloco para acomodar su demanda. Sé lo que quiere. He visto suficientes videos
traviesos en línea en mi día.
Con mi cabeza boca abajo sobre el costado de la cama, él se acerca y me llena la boca
con un golpe rápido. Siento su circunferencia mientras empuja hacia mi garganta.
Mis ojos se humedecen levemente cuando él toma mi boca y mi garganta. Pero estoy tan
jodidamente cachondo que no puedo tener suficiente.
Siento la hábil lengua de Seth mientras me lleva a un segundo rápido y luego, mierda,
tercer orgasmo consecutivo. Me retuerzo en la cama, gritando continuamente FUCK
FUCK FUCK en mi cabeza, porque mi boca está ocupada con una enorme polla.
Blake me agarra las tetas y las aprieta mientras me clava en la garganta con otra docena
de empujes. Por la forma en que sus músculos se contraen, puedo decir que está
cerca. Verme venir debe llevarlo al límite.
Solo pensarlo me hace volver de nuevo.
Dios mío, esto es una locura. Nunca he venido tanto en mi vida.
Justo cuando ese pensamiento entra en mi cabeza, Blake sale de mi boca y estalla en
todo mi pecho y estómago. Él gruñe y se tambalea cuando termina.
Entonces no puedo resistirme. Tomo todo el semen de Blake y Seth que está por todo
mi cuerpo y giro mis dedos en él, mezclándolo y recogiéndolo para llevarlo a mi boca.
Quiero probarlos a los dos juntos.
Esto los vuelve locos.
La lengua de Seth se lanza a gran velocidad. Agarro las sábanas debajo de mí. Aguanto
la respiración; Voy a hacer que el próximo cuente.
Vengo como Blake, violenta y agresivamente, con un gruñido y un gruñido más fuerte
que el de cualquiera de mis chicos sexy.
Me miran deleitarme con mi éxtasis.
Con un suspiro, me derrito en la cama. Estoy gastado Esto es lo mejor que he sentido.

Capítulo 10
Blake
Mis ojos devoran el cuerpo desnudo de Leila tumbado sobre la enorme cama king
size. Mi interior casi se derrite cuando la miro. Ella es una zorra. He estado en un trío
antes, pero nada como esto.
Una especie de fiebre se apoderó de mí. Tengo calor, como si las llamas lamen dentro
de mí. Cuando la toco, las llamas se intensifican y cuando estoy lejos de ella, se apagan.
Necesito alimentar mi puto fuego. La bruja puede controlarme y me encanta ser
controlada por ella.
Un sonido sale de sus labios, algo parecido a un ronroneo o un gemido; Es difícil notar
la diferencia. Seth está acostado a su lado. Le llamo la atención. Los dos sonreímos. No
sé si él siente lo mismo, pero claramente también quiere más.
Quiero más, mucho más.
"Hola, mi pequeña puta puta", le digo, y Leila abre los ojos. Ella se ve gastada. Pero
tengo mis formas de revivir a una mujer. La llama dentro de mí parpadea.
"No has tenido suficiente, ¿verdad?" Sueno oscuro y feroz.
Ella sacude la cabeza. Sus ojos se ven un poco inseguros.
La agarro por las muñecas y la arrastro hasta el borde de la cama. Al instante, mi fuego
se quema sin control, y tengo que trabajar duro para no meter mi jodida polla en su coño
mojado.
En cambio, la beso. Dejé que mis labios se aplastaran contra los de ella y mi lengua
empujó su boca. Al mismo tiempo, mis manos aprietan y masajean sus tetas.
Es como si estuviera respirando vida en ella y avivando mis llamas de deseo. Lamen
mis bolas, mi jodida polla y mi espalda.
Cuando ella comienza a retorcerse de mi toque, me alejo de ella.
Rápidamente, levanto su cuerpo para que su mitad superior esté en la cama y su trasero
esté empujando en el aire, con sus piernas en el suelo.
"Empuja tus brazos", le gruño, y ella lo hace.
Veo a Seth ponerse en posición.
"Tómalo, de nuevo". Quiero verla dar vida a la enorme polla de Seth y asegurarme de
que reciba su parte de placer.
Leila se sostiene con una mano y usa la otra para agarrar las bolas y la enorme polla de
Seth.
Me paro detrás de ella y le acaricio la espalda y luego, rápidamente y sin previo aviso,
la palma de mi mano cae sobre su mejilla izquierda. Joder, esto se siente bien. Mientras
me conecto con su piel, olas masivas de sensaciones de hormigueo me bañan.
Leila chilla y mueve su puto culo hacia mí, invitándome, no, rogándome por más. Mi
mano golpea su mejilla derecha. Otro chillido y un gemido de Seth, cuya polla está
desapareciendo dentro de la boca de Leila.
¡Tortazo! Vuelvo otra vez y veo marcas rojas en su piel por lo demás perfecta.
Mi propia polla está cobrando vida y exige algo de atención. Sigo golpeando su trasero
hasta que la presión en mi propia jodida polla es demasiado que necesito hacer algo.
Muevo la punta de mi polla al palpitante y empapado coño de Leila. Aquí, juego un
juego de gato y ratón con ella.
La punta de mi polla se desliza un poco y luego la saco de nuevo. Permito que la punta
ahogue su jodido clítoris. Lo uso como mis dedos. Echo mi cabeza hacia atrás en
éxtasis.
Ahora está tratando de decir algo, pero tiene las bolas de Seth en la boca, así que todo lo
que puedo escuchar es un gruñido de algún tipo.
Joder, ella está buena. Su trasero sigue mordiéndome como una yegua fuera de control
esperando ser domesticada. No puedo evitar golpearlo de nuevo. Ella grita cuando un
gemido escapa de mis propios labios.
Agarro sus caderas con mis manos y detengo mi juego de burlas. Empujo lo más
profundo que puedo y me retiro antes de volver. Mi polla va por ella, como un pistón.
Joder, esto es jodidamente fantástico. Su apretado coño se envuelve alrededor de mi
polla en un agarre como un vicio, como si no quisiera soltarlo. Puedo sentir las paredes
de su coño latir contra mi polla.
Mi propio cuerpo está respondiendo en especie. Llamas azules, rojas y naranjas me
atraviesan mientras bombeo dentro y fuera de ella.
Solté sus caderas y alcancé esas deliciosas tetas suyas. Mis dedos juegan con sus
pezones. Los pellizco y jalo y los froto entre mis dedos.
El placer está jugando con mi cabeza. Veo a Leila alternarse con la polla y las bolas de
Seth. Su cara está retorcida por el jodido éxtasis y reduzco la velocidad de mis empujes.
No quiero venir todavía. Todavía hay más diversión para tener.
"Sigue adelante", le ruega Leila desde abajo.
"¿Maldita puta te atreves a exigirme?" Saco todos juntos y le golpeo el culo de
nuevo. Ella gime y Seth grita algo.
"Necesito que lo hagas", comienza, pero la golpeé en el trasero con más fuerza y ella se
cortó a mitad de la oración.
La veo prestar toda su atención a la polla de Seth cuando le golpeo el culo de nuevo. Mi
propia polla está casi lista para explotar.
Veo el cuerpo de Seth tensarse por todas partes. Sus músculos comienzan a tener
espasmos y él se retira de ella. Actúo rápido Empujo a Leila de cara sobre la cama para
que su culo esté ahora frente a la polla de Seth y él explote sobre ella.
Cuando termina, limpio su semen en sus mejillas rojas. Ella gime más fuerte.
"Por favor, Blake, fóllame", ruega.
La doy vuelta. "¿Quieres que haga qué?" Agarro sus manos sobre su cabeza. Ella no
puede escapar de mí. Me siento en sus muslos, mi polla solo toca su coño mojado.
"Fóllame Blake, por favor". Su voz es más aguda que la de un cantante de ópera.
Mis labios muerden su pezón y luego chupan su pecho. Ella se retuerce debajo de mí,
tratando de acercar su coño a mi jodida polla.
Jodida puta quiere hacerse cargo.
"No puedo oírte", le digo y dejo que mis labios se muevan entre sus senos, presionando
sus brazos contra la cama.
“Blake, jódeme, solo jódeme. Necesito sentir tu jodida polla dentro de mí. Sus ojos me
suplican.
Lentamente acerco mi polla a su coño. Puedo sentirlo palpitar cuando la punta de mi
polla lo toca.
Cuando dejo que solo la punta entre en su coño, me estremezco. Se siente como si me
golpearan ondas de choque eléctrico.
"¡Difícil! Empújalo con fuerza. Ella todavía me está suplicando. Su cuerpo
retorciéndose es poesía en movimiento. Mientras intenta liberar sus brazos de mi agarre,
sus tetas se balancean de lado a lado.
Permito que mi polla entre un poco más. Ahora empuja sus caderas hacia arriba para
encontrarse con las mías.
"Yo ..." ella comienza, y veo poco las ondas de placer se mueven a través de su
cuerpo. Ella se retuerce en éxtasis. Su coño se aferra a mi polla, no queriendo soltarlo.
Con un impulso rápido, estoy completamente dentro de ella. Ella grita de
placer. Encuentro los ojos y el movimiento de Seth para que él se haga cargo.
Él me entiende y la agarra por los brazos y sus labios comienzan a chupar esos pechos
turgentes.
Ahora le doy toda la atención a su coño. Puse mis manos debajo, agarrando su puto
culo, acercándola a mí. Luego, empujé dentro y fuera por todo lo que valgo.
Los ojos de Leila están fijos en los míos. Puedo sentir su cuerpo tensarse debajo de
mí. Su jodidamente delicioso coño late mientras mis bolas golpean su piel cada vez que
la golpeo.
Ella está empezando a gemir. Puedo sentir que está cerca de venir. Sus caderas se
mueven más para encontrarse con cada uno de mis empujes. Mis dedos cavan en su
culo.
A medida que su orgasmo aumenta, puedo sentir sus músculos espasmos alrededor de
mi polla. Joder, ella tiene un puto coño caliente.
Su cuerpo comienza a temblar y puedo sentir mi propio orgasmo a punto de
vencerme. Empujo más fuerte y más rápido.
"Blake", chilla y comienza a temblar violentamente. Sus piernas se enderezan debajo de
mí y puedo verla alcanzar su clímax.
Mientras cabalga la ola de placer, mi propia polla está a punto de disparar su
semilla. Salgo de nuevo justo cuando mi esperma rocía sobre las tetas donde Seth
todavía está chupando sus pezones.
Cuando termino, me desplomo en la cama junto a Leila. Su expresión es de total
satisfacción. Seth, por otro lado, es duro como una roca, listo para la acción.
Él lame sus tetas y limpia el desorden que hice allí. Sus ojos están muy abiertos de
asombro. ¿Cuánto tiempo más podemos seguir?
Seth suelta sus manos y lo veo irse y agarrar algo de un cajón en la habitación.
Cuando regresa, tiene una sonrisa en su rostro y los ojos de Leila son más anchos que
los platillos.
 Capítulo 11
Seth
Semper paratus. Siempre preparada.
Estoy preparado. Tengo esposas.
Rápidamente, antes de que pueda objetar, le puse las esposas alrededor de la muñeca y
le até los brazos al poste de la cama. Ahora está completamente a mi merced, bueno, tal
vez nuestra misericordia.
Sus ojos se abren con incredulidad, conmoción, anticipación y lujuria. Jodidamente pura
lujuria no adulterada está escrita en toda su cara.
Ella se retuerce.
"¿Qué coño?" ella dice, pero puedo ver que ella está dispuesta.
Blake no dice nada.
Me tomo mi tiempo Estoy jodidamente listo para explotar, pero quiero aprovechar al
máximo a esta pequeña zorra caliente.
Primero, dejé que mis labios se movieran sobre su cuello, hacia su pecho y luego sobre
su vientre. Mis dedos juegan con su coño mojado y con ganas. Mis dedos índices
empujan su clítoris y se alejan de nuevo.
Leila grita algo que no puedo entender. Mi mente está demasiado ocupada lamiendo la
intensidad del placer creciente.
Me quito la mano.
"Déjame tocar tu jodida polla", susurra, sus ojos rogando.
Sacudo la cabeza
"Tengo el control y voy a decir si puedes tocar cualquier parte de mi cuerpo y cuándo".
Ella cierra los ojos y gime. Puedo verla morderse el labio inferior.
Me arrodillo sobre ella y dejo que mi polla dibuje sobre su cuerpo. Es tan jodidamente
difícil y listo para entrar en su coño que apenas puedo controlarme. Mi polla da vueltas
alrededor de sus senos y puedo verla abriendo sus labios con anticipación.
Lentamente, me muevo hacia su lengua y su boca entreabierta. Justo fuera de mi
alcance, floto. Estira la cara lo más alto que puede, extendiendo la lengua como una
serpiente. Se lanza dentro y fuera de su boca. Cedo un poco y su lengua húmeda se
conecta con la punta de mi polla caliente.
Esta vez, gimo de placer. A medida que su lengua se lanza sobre mi polla, las ondas de
la descarga eléctrica comienzan en la base de mi cráneo y descienden por mi cuello y
espalda, hasta mis pies.
Jodida perra sabe cómo subir el calor.
Me rindo un poco y su boca chupa hambrientamente mi polla, su lengua obrando su
magia moviéndola.
Para mí, las ondas de placer de descarga eléctrica se convierten en explosiones, que
amenazan con abrirme desde el interior.
Mi polla se hunde aún más en su boca y baja por su garganta. Ahora su cuerpo se
retuerce de lado a lado, como un animal, rogando por más.
Justo cuando puedo sentir que mi orgasmo se acumula en lo más profundo, me retiro.
"No", grita ella.
Pero no quiero entrar en su boca. Y tengo más planeado.
Me acerco a la mesita de noche y recupero un pequeño recipiente. Me quito la parte
superior y rocio suavemente chocolate suave fundido en sus senos, vientre y hasta la
abertura húmeda de su coño.
Ahora es el momento de lamerlo todo. Mi lengua trabaja en movimientos lentos y
rítmicos. Mis manos juegan con partes no cubiertas de chocolate. Me aseguro de
tomarme mi tiempo.
Por el rabillo del ojo, veo a Blake arrastrarse hacia nosotros y comenzar a ayudarme a
limpiar el desastre que he hecho.
Mis dedos encuentran su coño y lo ahuecan. Dejé que mi dedo índice se deslizara sobre
su clítoris.
Leila no puede evitar que sus caderas se muevan. Ella está desesperada por ser
follada. Blake le pone las manos en la parte inferior del abdomen y la empuja
bruscamente hacia la cama. Él deja su mano allí, por lo que su movimiento está
severamente restringido.
Ella ahora está gimiendo. Casi termino de limpiarla.
Con unas pocas lamidas más, el chocolate se ha ido. Puedo ver sus músculos tensarse un
poco mientras mis dedos continúan jugando con su clítoris.
Le indico a Blake que la libere de las esposas.
Luego, ordeno: "A cuatro patas, puta puta", y ella obedece al instante. Sus mechones
oscuros caen sobre su espalda y caen sobre su hombro. Levanta la cabeza para volverse
hacia mí, con los ojos bien abiertos y esperando los placeres tortuosos que le esperan.
Ella me señala el culo y lo mueve de un lado a otro, invitándome a tocarlo.
Dejé que mis ojos se deleitaran al ver su coño abierto. Casi puedo ver sus jugos
goteando ya; así de mojada está.
Me atrae la boca, y me permito deleitarme con sus jugos. No estoy seguro de lo que está
haciendo Blake, pero a juzgar por la posición del cuerpo de Leila, él está chupando sus
tetas.
Ahueco mi boca sobre su jugoso coño y dejo que mi lengua entre y salga
rápidamente. Encuentro su punto dulce y empujo contra él.
Su trasero me está presionando mientras sigo chupando. Mis manos encuentran y
aprietan esas mejillas de ella. En mi propio cuerpo, un ardiente fuego de placer me
atraviesa, y me temo que podría derretirme con la intensidad.
Dejo de chupar y uso mis dedos para lubricar su gilipollas. Es hora de un puto muy
serio.
Raramente entro en el culo de una chica, pero esta mendiga que la lleven.
Lentamente, relajo mi polla ansiosa en ella, mis manos agarran sus nalgas y las
masajean. Echa la cabeza hacia atrás y mueve las caderas.
Empujo hacia adentro. Está jodidamente apretado, pero a mi jodida polla le
encanta. Suavemente, me muevo dentro y fuera.
"¿Es todo lo que tienes?" Leila gime, y una combinación de ira y lujuria me invade.
Mis dedos cavan en su carne y empiezo a embestirla como una cavadora de postes.
Ella está respirando con dificultad.
Blake se desliza debajo de ella y puedo ver su intención. Él quiere un poco de su puto
coño caliente.
Ayudo a bajar a Leila sobre la polla que espera de Blake. Es una sensación extraña
sentir su polla tan cerca de la mía, pero estoy tan jodidamente excitada que no puedo ni
quiero pensar en eso.
Blake mueve a Leila arriba y abajo sobre él sujetándola por las caderas. Sigo empujando
dentro y fuera.
No nos lleva mucho tiempo entrar en ritmo. Puedo sentirla arquear la espalda. Pequeñas
gotas de sudor se han formado en el hoyuelo que tiene justo encima de su delicioso
culo. El calor entre nosotros podría alimentar a una ciudad entera durante un año.
Blake gruñe y juzga por la forma en que sus músculos comienzan a tensarse. Puede que
esté casi listo para venir.
Leila también siente como si todos sus músculos comenzaran a tener espasmos en
anticipación de un orgasmo todopoderoso.
Sé que una vez que estos dos vengan, no me quedaré muy atrás.
"Joder, estás caliente", grita Blake y dispara todo su semen en su coño. Veo las uñas de
Leila clavarse en su espalda.
Ella ahora está montando su propio clímax. Su espalda se arquea más y sus caderas
empujan contra mí.
Mientras me empuja con todo su poder y poder, me caigo del precipicio y caigo al
abismo del jodido placer absoluto y total. Mi espasmo comienza en la base de mi
columna vertebral y se convierte en un poderoso crescendo mientras tiro mi carga en su
culo.
A medida que cada oleada de mi propio orgasmo me supera, apreto su trasero cada vez
más fuerte hasta que me paso.
Y aún así, no quiero salir de este lugar familiar. Siento que he vuelto a casa.
Por lo que puedo decir, Blake todavía está en su coño también.
"Joder, sabes cómo tener sexo", murmura Blake, y veo que la besa en los senos.
Finalmente, salgo de ella y me acuesto a su lado después de que ella sale de
Blake. Instintivamente, mis dedos encuentran su coño. Parece que todavía está
pulsando. Empujo su clítoris y disfruto de las pequeñas vibraciones que puedo
sentir. Leila está montando su ola orgásmica. Su cuerpo todavía está temblando por la
experiencia.
Su mano viaja hacia mi polla y la frota suavemente. Su toque es tan suave y tierno.
Me inclino para besarla. Me tomo mi tiempo Suavemente, mis labios presionan los
suyos y mi lengua sondea para entrar.
Nuestras lenguas se encuentran y se entrelazan. Utilizo mi mano libre para subir por su
espalda y empujarla hacia mí. Siento sus senos contra mi pecho, y me deleito en la
sensación de ardor desde donde su piel me toca.
El tiempo se detiene y todo lo que noto es su cuerpo desnudo contra el mío.
Es solo cuando Blake habla que recuerdo que todavía está con nosotros.
De mala gana, solté a Leila y la vi voltearse hacia Blake.
Podría haber dicho algo acerca de que era su turno, pero no lo sé. No estaba prestando
atención.
La veo besar a Blake y jugar con los mechones sueltos de su cabello que le caen por la
espalda.
Mientras comparto el tierno momento entre ella y Blake, me pregunto cómo terminará
esto.
Un Robertson y un McDaniel compitiendo por el mismo premio: la niña.
Tempus narrabo. El tiempo dirá.
 Capítulo 12
Leila
La limusina de Seth es de primera categoría y está completamente equipada. Me sirvo
un trago. Un escocés viejo del que estoy seguro que los entendidos pueden contar una
historia detallada. Raramente bebo cosas duras, pero estoy celebrando.
Estiro los brazos hacia el techo y encuentro y presiono el botón del techo
corredizo. Escucho los engranajes girando cuando la cosa se abre y se derrama aire
fresco sobre mí. Esta es la vida .
No quiero que la unidad termine, y considero preguntarle al conductor si daría la vuelta
al bloque varias veces, pero no lo hago; Tengo trabajo que hacer.
Beans & Moore está iluminado. Es después de horas, y Chase sin duda me espera
allí. Él va a decir que está allí para ayudarme a prepararme, pero sé que solo quiere
escuchar los detalles jugosos. Puedo darle un poco. No todo. Algunos.
La limusina se detiene frente a mi café. Termino mi bebida y respiro hondo. Me arreglo
el vestido, agarro mi bolso y me aseguro de que mi teléfono celular esté allí. Estoy listo,
creo. Decir ah. Eso es lo que me dije antes.
Chase me abre la puerta de entrada de la tienda antes de que esté a mitad de camino. Su
slouchie parece torcido en su cabeza. Lo hace cuando finge estar trabajando duro. Es
una sorpresa que no se haya rociado con harina también. Chase es un personaje así.
Intento no hacerlo, pero estoy sonriendo de oreja a oreja. Chase le devuelve la sonrisa.
Él sabe.
"Entonces…"
"¿Si?" Yo juego tímido.
"Bueno ... mírate. Parece que la pasaste bien en tu cita.
Chase, fue una reunión de negocios, ¿recuerdas? Lo reservaste. Simplemente resultó
estar en un buen restaurante, eso es todo. Con dos hombres increíblemente guapos.
"Es todo ...", dice, cruzando los brazos y lanzándome una mirada.
Repito. "Reunión de negocios."
"Claro", dice, sacando la palabra. "Claro que sí".
Yo me río. Él sabe. Y sé que él lo sabe.
“Necesito obtener los últimos lotes en el horno. Entonces podemos ir a casa, ¿de
acuerdo?
"¿Estás seguro de que no necesitas una ducha primero?"
"¡Persecución!"
Camino hacia la parte de atrás. Se siente divertido estar en la cafetería vestida así. Me
alegra tener un par extra de zapatillas de tenis aquí y muchos delantales. Se siente bien
salir de mis talones, y mientras froto mis arcos, recuerdos de la noche brillan en mi
mente.
Mi cuerpo comienza a hormiguear. Está claro que quiero más. Necesito más.
De pie, arqueo la espalda. No necesito una ducha Necesito un largo baño en un baño
caliente.
"Chase, ¿tenemos alguna aspirina por adelantado?" Yo grito.
“Claro, jefe. Te traeré un poco.
"Gracias."
Puse los bollos nuevos en el horno. Ni siquiera se siente como trabajo. Nada lo
hace. Estoy tan feliz que no puedo imaginar sentirme triste otra vez.
Ya veo a Chase. Él tiene un vaso de agua y mi Motrin. Él también está sonriendo. Este
sentimiento es contagioso.
"¿Estás bien?" él pide.
"Mejor que nunca."
"Excelente." Él mira a su alrededor. “El frente se ve genial. Limpio y listo para mañana
por la mañana.
"Excelente." Yo sonrío. “Estaré al frente en un momento para verificar todo. Mañana va
a ser un gran día ".
Chase se va y termino mi trabajo en la parte de atrás. Tan pronto como termine de
hornear, me puedo ir a casa. Pero esta es mi casa también. Este café, mi café, ocupa un
lugar especial en mi corazón, como ningún otro.
Yo camino al frente. Chase tiene razón. El lugar está impecablemente limpio. Yo
lloro. Estoy muy feliz
ANILLO. ANILLO. ANILLO.
"Hey, tu embrague está sonando, Leila", dice Chase, y lo señala vibrando en el
mostrador.
"Lo tengo", le digo mientras saco mi teléfono. "¿Hola?"
Es mi papa Normalmente no llama a esta hora de la noche.
“Cariño, acabo de llamarte para felicitarte. He estado escuchando y viendo tu nombre en
toda la televisión esta noche. Resulta que tus pequeñas golosinas son un éxito ".
"Sí, papá, mis pequeñas golosinas son un éxito". Sonrío mientras lo repito para
Chase. "Gracias."
“Estoy muy orgullosa de ti, Leila. Has trabajado duro y tu negocio está creciendo
debido a todo el esfuerzo que le has dedicado. Realmente tienes las cosas, chico.
"Gracias Papa." Aquí vienen esas lágrimas otra vez. Lucho contra ellos. Tengo mucho
que decirle a mi padre ... y Chase. “Hola, más noticias. Me reuní con Jacobs Worldwide
y McDaniel Corporation hoy. Ambos han ofrecido asociaciones. ¿Puedes creer eso,
papá?
Hay una pausa en la otra línea. Yo conozco a mi papa; el esta pensando. "Bueno, cariño,
debes tener cuidado".
"Lo sé."
“Pasé muchos años como contador. Solía ver este tipo de cosas todo el tiempo. Una
pequeña empresa se acuesta con una gran empresa y luego pierde todos sus derechos ”.
"No estoy en la cama con ellos".
Chase sonríe. Sé lo que está pensando, así que señalo y muevo el dedo hacia él.
“Bueno, en esta asociación, asegúrate de no perder tus derechos sobre tus bollos. Este
acuerdo podría llevarlo a perder la propiedad ...
Lo interrumpo allí. Primero te enviaré toda la documentación, papá. No firmaré nada
hasta que haya tenido la oportunidad de leerlo.
"Buena idea, cariño."
“De todos modos, te garantizo que ese no es su objetivo. Solo quieren apoyar mi
negocio y ayudarlo a crecer. Les aseguro que quiero lo mejor para este negocio y ellos
también.
"Espero que estes bien. Confío en tu juicio.
"Gracias Papa."
"Todavía…"
Yo sonrío. "Sí, prometo enviarte toda la documentación primero".
"Buena niña."
"Buenas noches, papá".
"Buenas noches, cariño".
Cuelgo el teléfono. Mi papá tiene buenas intenciones, pero mi mente está
decidida. Estoy listo.
Estoy a punto de embarcarme en una asociación con Blake y Seth. Las posibilidades son
ilimitadas.
 Capítulo 13
Blake
Mi mente no está en el trabajo.
Ella esta en todas partes.
Y mi polla definitivamente recuerda su coño. Su apretado y delicioso coño.
Ayer fue una de las mejores folladas que he tenido en mucho tiempo.
Maddie está escribiendo en la computadora, el ruido del teclado es una irritación
molesta en mi mañana por lo demás feliz.
En lugar de pedirle que se vaya, decido hacer una llamada telefónica.
"Leila aquí", su voz melódica es música para mis oídos, y siento que mi interior
comienza a arder de deseo. Joder, ella es excitada.
"Leila". Yo sonrío. "Qué lindo escuchar tu voz".
No estoy seguro, pero creo que Maddie levanta una ceja en un arco perfecto.
"Solo viendo cómo va tu día". Me estremezco ante mis propias palabras. ¿Cuándo
empecé a sonar tan cojo?
"Ocupado. Gracias." Ella suena sin aliento. "¿Qué hay de tí?"
Podría ser mejor, quiero decir, pero no lo hago. ¿Debo decir algo como mi polla te
extraña? Mis ojos miran a Maddie y descarto la idea como estúpida.
"Me preguntaba si te gustaría venir a verme más tarde hoy".
Hay una breve vacilación, antes de que ella responda. "Me encantaría."
"Excelente." Respiro un suspiro de alivio. Por un microsegundo, pensé que iba a decir
que no. "Enviaré un auto para que te recoja".
Cuando cuelgo, Maddie me está mirando con el ceño fruncido.
Me encojo de hombros y le doy mi inocente '¿Qué hice mal?' Mira.
¿Y tu ética de trabajo, Blake Jacobson? Su voz es severa, al igual que su mirada.
Con un gesto de mi mano derecha, rechazo su comentario. "La vida no puede ser todo
trabajo y nada de juego".
En lugar de una respuesta, cierra la computadora portátil y toma su bolso. "Supongo que
será de corta duración, como el resto de ellos".
Ay, justo debajo del cinturón. ¿Quién sabía que Maddie estaba llevando la cuenta?
"Este podría ser diferente", respondo y me froto las manos.
Esto solo me da otra mirada de ceja levantada. Esas cejas están realizando rutinas de
gimnasia esta mañana. Maddie debería tener cuidado o ella se tirará un músculo o algo
así.
"¿De Verdad?" Maddie enfatiza cada letra en la palabra. "Lo dudo, sobre todo porque
no creo que seas bueno para mantener relaciones, y este también es un trío".
¿Cómo había escuchado ya? El jodido personal debe haber parloteado sobre nuestra
reunión. ¿A quién necesitaré para despedir, al limpiador o al personal de servicio?
"Bueno, Maddie, puede que tengas que esperar y ver".
Descarto los pensamientos de despedir a cualquiera; estaba destinado a salir
eventualmente, de todos modos.
"Tengo trabajo que hacer". Maddie se dirige hacia la puerta, donde se vuelve hacia mí
por última vez. "A diferencia de algunos", dice ella, y luego se va.
Sacudiendo la cabeza, rebusco en mi escritorio. A la mierda con Maddie. Le mostraré lo
serio que soy sobre Leila.
Y sé cómo voy a malcriar a esa pequeña zorra y lograr que sea una jodida masilla en
mis manos.
Cuando encuentro el pedazo de papel manchado, ligeramente rasgado, lo guardo en mi
bolsillo y me dirijo a la puerta. Es hora de ir a las tiendas.
Quiero hacer lo correcto por Leila. Y si hay algo que impresionará a una chica a la que
le gusta hornear, es la receta secreta de mi abuela.
Primero, hago mis ñoquis. Preparo mi superficie de trabajo. Mientras vierto harina en la
canica, imagino el azúcar glas en la cara de Leila y mi polla se endurece.
Lamo mis labios mientras agrego el huevo, y cuando mis manos comienzan a mezclar
los ingredientes, mi mente se vuelve hacia el coño mojado de Leila, sus pezones erectos
y su culo deliciosamente suave.
Con los ojos entrecerrados, moldeo mi masa perfecta en bolas del tamaño de un
bocado. Mierda. La forma en que ella había chupado mis bolas la otra noche había
estado fuera de este mundo.
Rápidamente, corté el chorizo en trozos más pequeños antes de cortar los tomates. Estoy
babeando mientras estoy trabajando lejos.
¿Cuántos hombres habían seducido a la abuela con esta deliciosa comida? Me pregunto
mientras agarro mi sartén grande. Gracias a Dios, ella me dejó la receta.
El timbre me detiene a medio freír.
Camino para abrir la puerta, y soy recompensada cuando Leila me da un besito en la
mejilla antes de que entre. Las ondas de choque eléctrico me atraviesan.
Joder, esta chica realmente es otra cosa, creo. Quiero llevarla aquí y ahora.
"Algo huele bien", su delicada nariz se arrugó un poco, y pasó a mi lado. Mientras lo
hace, me tomo unos segundos para admirar su trasero e imaginar lo que mis manos y mi
polla le harán un poco más tarde.
La llevo a la cocina y le ofrezco un aperitivo.
"Para nosotros", brindo. Ella extiende su vaso y deja que tintinee con el mío.
Bebemos. Me estoy ahogando en esos ojos exquisitos.
"¿Sabes cómo hacer ñoquis?" Ella suena sorprendida y un poco asombrada. Me felicito
y envío un silencioso agradecimiento a la abuela.
Asiento con la cabeza. Vuelvo a dar los toques finales a la comida.
Los ñoquis necesitan ser colados y agregados a mi mezcla de chorizo y tomate en la
sartén. Por último, agregaré albahaca y queso recién rallado.
"¿Puedo hacer algo?" Leila pregunta y mira por encima de mi hombro.
Chupa mi polla que espera está en la punta de mi lengua, pero habrá tiempo para eso
más tarde.
“Coge el pan fresco del horno y sácalo en trozos. Tengo un poco de aceite de oliva que
puedes verter en un bol para acompañar el pan.
Ambos preparamos la comida, haciendo un trabajo rápido del plato que preparé
especialmente para ella.
Leila cierra los ojos y suspira suavemente después de su primer bocado de la comida.
"Oh, Blake", murmura. "Esto es delicioso."
Igual que tú, cariño.
Me pongo de pie y hago una pequeña reverencia.
"¿Cocinas a menudo?"
La veo tomar otro bocado de comida.
"Nop. Casi nunca. Pero para ti, podría convertirlo en un hábito.
Ella me recompensa una vez más con su sonrisa.
"Podría llevarte con eso".
Dios, ella es intoxicante.
"¿Has estado horneando mucho tiempo?" Creo que mi voz suena un poco ronca.
Leila se encoge de hombros. “Depende de tu definición de largo. Papá trabajaba largas
horas, y creo que comencé a hornear para hacerle golosinas para que me notara.
Sé cómo se siente ella. También soy el producto de padres exitosos que trabajan.
“Una vez que me puse en marcha, no pude parar. Me encanta crear comida deliciosa
con ingredientes relativamente simples ".
Para asegurarme de que no babeo abiertamente, cierro la boca. Mis ojos se sienten
atraídos por un poquito de salsa justo debajo de su boca.
Me inclino hacia ella y puedo ver en sus ojos que ella sabe lo que estoy a punto de
hacer. Sus labios se encuentran con los míos.
Ella es jodidamente deliciosa. Nunca he probado algo tan dulce en mi vida.
Mientras mi lengua se abre paso en su boca, me deleito con el gemido que escucho de
ella.
Mi polla me dice que siga adelante, y así lo hago.

Capítulo 14
Leila
Cuando su lengua pelea con la mía, puedo saborear hierbas, tomate y queso, así como el
macho alfa Blake. Suspiro por dentro.
Cierro los ojos y conecto mis manos detrás de su cuello, mis pulgares acariciando la piel
suave allí.
Hace mucho tiempo que no disfruto tanto de una comida casera como de esta. Nadie
realmente ha podido acercarse a la cocina de mi madre. Ella ha sido el modelo a seguir
perfecto. Supongo que mis habilidades culinarias tenían que venir de algún lado, y no
provenían de papá.
¿Y quién hubiera pensado que el macho alfa Blake podría cocinar como él? Tanto
esfuerzo para mi.
Sus manos ahora viajan por mi espalda. En el camino, uno de ellos encuentra mis tetas y
las acuna. Joder, me estoy poniendo mojada y caliente.
Justo cuando una montaña de lava caliente estalla dentro de mi cabeza y viaja a través
de todos y cada uno de mis poros, Blake me libera.
Aturdido, intento concentrarme en sus rasgos divinos. ¿Hice algo mal? ¿Por qué se
detuvo? ¿Ha cambiado de opinión?
"¿Todavía tienes hambre, mi pequeña zorra?" susurra y su aliento caliente acaricia mi
mejilla, su rostro a solo centímetros del mío.
Mi mente se volvió gelatina. No puedo pensar con claridad. Quiero decir, ¿quién puede
cuando su jodido coño está desatando un torrencial torrente de jugos? Todo lo que
puedo pensar es una cosa.
Los dedos de Blake recogen un solo ñoquis de mi plato. Todavía estaba acostado en un
poco de salsa.
Mis ojos están pegados a la pequeña delicadeza a base de papa de forma ovalada en la
mano de Blake. Me lamo los labios. Su otra mano ha encontrado mi muslo.
Poco a poco, ambos trabajan independientemente uno del otro. El que tiene la pequeña
golosina se está moviendo hacia mi boca medio abierta. El otro está viajando por el
interior de mi muslo.
Si la lava fluía a través de mí antes, no estoy muy seguro de lo que le está sucediendo a
mi cuerpo ahora.
Las llamas, rojas, naranjas y amarillas, parpadean a través de mí. Es un incendio forestal
violento. Aumenta su intensidad a medida que el dedo índice de Blake empuja
suavemente mi clítoris. Involuntariamente, mi lengua sale disparada por la delicadeza
en su otra mano.
Cuando empuja suavemente los ñoquis de color crema entre mis labios, siento que se
derrite en mi lengua. Luego, quita su mano de mi coño mojado y me la lleva a la
boca. Unta un poco de mis propios jugos en mis labios ya húmedos.
El sabor provoca fuegos artificiales en mi cabeza. Respiro más rápido y más fuerte.
Quiero agarrar su mano y empujarla hacia mi coño. Joder, quiero agarrar su jodida polla
y embestirme todo el camino.
Brevemente, me pregunto qué pasó con la tímida niña de una pequeña ciudad rural con
padres apropiados. Padres ¿Qué diablos pensarían mis padres si me vieran ahora?
Deja de pensar, algo profundo dentro de mí dice. Sigue la corriente y disfrútala mientras
dure.
El dedo de Blake, que todavía tiene algunos de mis jugos, vuelve al plato. Allí, lo
sumerge en salsa antes de traerlo de vuelta a mi boca.
"¿Quieren más?"
Mierda. Por supuesto que sí.
Envuelvo mis labios alrededor de su dedo índice y empiezo a chuparlo. Suavemente, mi
boca se mueve hacia arriba y hacia abajo y mi lengua se curva alrededor. Mis ojos están
fijos en los suyos.
Blake sonríe.
Mis manos no pueden soportarlo más y me inclino hacia adelante, con la boca aún en su
dedo, para buscar el botón de sus pantalones. Quiero al menos sentir su jodida polla
descomunal en mis manos.
Todavía recuerdo nuestra última sesión de mierda. Al principio, no podía creer el
tamaño de la polla de Seth, y luego Blake reveló su monstruo. Ambos tipos querían los
máximos honores, pero habiéndolos tenido dentro de mi coño y culo, creo que ambos
son jodidamente masivos.
Solo pensar en su polla hace que mi coño duela y palpite. El deseo está brotando muy
dentro de mí.
Blake aleja sus dedos y se ríe.
"Parece que mi puta puta no puede tener suficiente de mi comida".
Mis dedos detienen lo que están haciendo. Mis ojos se ensanchan cuando abre sus
propios pantalones para liberar su enorme polla. Rebota como si se hubiera asfixiado en
un espacio reducido. Veo un poco de pre-cum brillar en la punta de su polla.
Lentamente, el dedo de Blake lo limpia, luego agrega más salsa y luego se me permite
volver a chuparlo.
Esta vez, soy más feroz en mi enfoque. Casi lo muerdo. Mis pezones son muy duros y
empujan contra el encaje de mi sujetador. Quieren ser liberados para unirse a la acción.
Como si leyera mi mente, Blake saca su dedo de mi boca nuevamente y, con un
movimiento rápido, me arranca la parte superior.
Empujé mi pecho hacia él, rogándole que cuidara mis tetas.
Le lleva menos de dos segundos desabrochar mi sujetador. Tan pronto como se retira el
material, rebotan hacia arriba y hacia abajo mientras me muevo hacia mi dios.
Toma más salsa y la limpia sobre mis pezones. Entonces, sus labios se mueven hacia
mí. Su lengua arremete, como una serpiente, para limpiarme. Gimo y me muevo hacia
adelante en mi asiento. Quiero que me chupe los pechos, no solo que me moleste.
Las llamas están creciendo en intensidad. Mi cuerpo se siente tan caliente que creo que
podría derretirme en cualquier momento. Puedo ver la punta de la polla de Blake
brillando con anticipación.
Intento alcanzarlo para tocarlo, pero Blake me golpea la mano.
"Todavía tengo hambre. Y es grosero dejar de comer cuando la otra persona todavía está
comiendo ".
Me arde la piel donde me abofeteó, como si me hubieran vertido agua hirviendo. Decido
desobedecerlo un poco más.
Pero antes de que pueda hacer algo más, Blake se pone de pie y se mueve detrás de
mí. Allí, él toma mis manos y las tira hacia mi espalda. Con movimientos rápidos, está
poniendo algo a su alrededor. Me lleva más o menos un segundo saber que me ha atado
los brazos a la espalda.
Estoy totalmente indefenso y no puedo tocar nada.
Él regresa y se para frente a mí. Su sonrisa se ha ido y, en cambio, está frunciendo el
ceño.
"Ahora", gruñe, "¿dónde estábamos?"
No dije nada. Todas y cada una de mis células nerviosas están gritando por su
toque. Sentada aquí frente a él, con mis senos expuestos y mi coño empapado, necesito
que me haga algo.
Lentamente, se quita los pantalones.
Su polla se está clavando en el aire. También quiere acción. Me lamo los labios.
"Así es." Blake da un paso hacia mí. Desearía poder mover mis manos y agarrarme a su
monstruosa polla.
"Todavía tengo hambre." Se inclina frente a mí y me sube la falda todo lo que puede. Él
arranca mi resbalón en un hábil movimiento. Me mira mientras echo la cabeza hacia
atrás.
Él abre mis piernas para que estén ahora a ambos lados de la silla. Sus dedos acarician
toda la abertura de mi coño. Tiene cuidado de no tocarlo.
Me retuerzo e intento empujar mis caderas hacia él. Solo quiero que toque mi puto
coño.
Sus manos agarran mis caderas y me impiden moverme. Me empuja con fuerza contra
el respaldo de la silla. Yo arqueo la espalda.
Finalmente su lengua lame mi clítoris. Suavemente se mueve a través de él, de lado a
lado, antes de dejar que se precipite hacia mí. Su cara está enterrada en mi coño. Sus
dientes encuentran mi abertura y comienzan a mordisquear. Luego, su boca está por
todas partes y comienza a chupar como si mi coño fuera un caramelo gigante.
Yo lloriqueo.
En lo profundo de mí, la intensidad del calor se intensifica. Los fuegos artificiales
explotan detrás de mis ojos y me temo que la pasión me abrirá por dentro. Desearía
poder clavarle los dedos en la espalda. Tal como están las cosas, apenas puedo
moverlos.
Blake está chupando más fuerte y puedo sentir que mis músculos comienzan a tener
espasmos. No pasará mucho tiempo antes de que yo venga. Puedo sentir la intensidad
abrumadora de mi orgasmo construir a un nivel creciente.
Mi cabeza se siente como si estuviera a punto de arder en llamas. Todas mis
terminaciones nerviosas se están ahogando en una ola de placer y mi jodido coño
tiembla en anticipación de lo que está por venir.
Blake, sintiendo mi inminente explosión, disminuye la velocidad un poco hasta que se
detiene por completo para mirarme.
“Joder, Blake, no pares. Por favor, no te detengas —gruño con respiraciones
superficiales.
"¿Quieres más de esto, no?"
Su lengua vuelve a mi clítoris. Solo toma unas pocas lamidas más suaves y estallo en un
orgasmo todopoderoso. Mis músculos se contraen y tiro mi cabeza aún más atrás. Las
estrellas explotan detrás de mis ojos.
Cuando finalmente dejo de temblar, Blake sonríe de oreja a oreja.
"Es hora de que tengas desierto", murmura y desata mis manos.

Capítulo 15
Blake
Tan pronto como la desate, la levanto.
Quiero follarla aquí, ahora mismo, pero todavía hay platos en la mesa, así que la llevaré
a mi guarida.
El león domesticará a la leona, pienso para mí, mientras la llevo a la habitación. Ella
tiene sus brazos envueltos alrededor de mí y me empapo en la expresión soñadora en
sus ojos.
Finalmente. No puedo creer que tuve que compartirla con el puto Seth. Seth, de todas
las personas, interviniendo en mi territorio. ¿No era suficientemente malo que siempre
intentara robar mis negocios, superarme en todo momento? No, tenía que empeorarlo al
interrumpir a mi chica.
Leila iba a ser mi puta chica.
Mía. Todo mío. Odio compartir Y en particular odio compartir cualquier cosa con ese
pinchazo, Seth. Pero aún así, no puedo ignorar lo increíble que fue compartirla la otra
noche.
Los labios de Leila plantan pequeños besos de mariposa en mi cuello y aumenta la
presión dentro de mi jodida polla.
La puta tentadora está jugando conmigo, como fuego con hielo.
Suavemente, la bajo sobre la cama king de gran tamaño. Ella me mira fijamente.
Me arrodillo sobre ella, planeando mi próximo movimiento.
Antes de que pueda hacer mi siguiente movimiento, Leila agarró mi polla y la empujó
entre sus senos. Ella agarra sus tetas para apretarlas fuertemente, envolviendo mi jodida
polla.
Su piel es suave, cálida y se siente jodidamente deliciosa contra mi palpitante
polla. Hábilmente, ella se mueve hacia arriba y hacia abajo. Me arrodillo a cada lado de
ella y muevo mis caderas en un movimiento rítmico, al mismo tiempo que ella.
Me tiemblan las entrañas y la calidez me envuelve como una capa. Quiero salir y
meterme en ese jodido coño apretado de ella, pero sus tetas me tienen atrapada. Ella los
rueda sobre mi polla. Puedo ver sus pezones duros asomando. Mis dedos alcanzan uno y
lo tiran.
Leila me mira mientras continúa acariciando y manteniendo mi polla encerrada dentro
de sus exquisitas tetas.
Me resulta difícil quedarme donde estoy. Mientras mi polla esté feliz, quiero más. Solo
quiero sentir ese coño apretado suyo. Quiero sentirlo todo por mi cuenta.
Brevemente, imagino la mirada en el rostro de Seth cuando descubre que Leila se ha
convertido en mi chica. Una vez que seamos un artículo, estoy seguro de que ella
también se registrará conmigo en el lado comercial.
Observo como pequeñas gotas de pre-cum gotean por el costado de mi polla. Si no hago
algo pronto, rociaré mi semen sobre su cara bonita.
Parte de mí no es reacio a la idea. Sería un castigo para ella tener su rostro cubierto en
mi semen.
Pero, tengo otros planes para mi polla.
Decido asumir el control.
La agarro por los hombros y la alejo de mí. Mi polla se desliza fuera de su cárcel con un
pequeño estallido.
Leila me mira con los ojos muy abiertos.
Levanto sus piernas y la acerco. Su espalda baja está fuera de la cama y sus piernas
están sobre mi hombro.
Esta vez se desliza fácilmente sobre mi palpitante polla.
Mis manos agarran sus caderas con fuerza y empiezo a martillarla.
He esperado tanto tiempo para sentirla; Estoy en riesgo de venir de inmediato. Necesito
reducir la velocidad.
Sigo golpeándola, pero relajo mi agarre en sus caderas. En cambio, me inclino hacia ella
y dejo que mis manos jueguen con esas tetas de ella. Mis dedos tiran de sus pezones,
pellizcando y apretando. Mis ojos se deleitan con el color rosado de ellos y lamen
cuando se vuelven rojos de mis dedos castigadores.
Leila está gimiendo y gimiendo. Ella está presionando contra mí con cada empuje que
hago.
Aumento mi intensidad de nuevo. Veo que los músculos de su abdomen comienzan a
contraerse. Ondas de placer viajan a través de ella.
Sus dedos me están agarrando y está tratando de acercarse. Sus caderas se doblan como
si fuera una yegua salvaje. Necesito domesticarla.
Me aparto de ella.
Ella me mira con los ojos muy abiertos.
Uso mis dedos para seguir follándola. Mi polla está a punto de explotar. Solo quiero
esperar un poco más.
Las llamas me desgarran como un tornado.
Incapaz de soportarlo más, la levanto y la levanto de la cama. Quiero follarla de pie.
La empujo contra la pared. Sus manos encuentran mi espalda y uñas afiladas se clavan
profundamente en mi carne.
Con su espalda contra la pared, la empujo, fuerte y rápido, como si tratara de
penetrarla. Quiero escuchar su grito de ayuda.
Ella arquea la espalda y murmura algo que no puedo entender.
Empujo mi boca sobre la de ella. Mis labios son duros y exigentes. Mi lengua vaga por
su boca. Mis manos encuentran su trasero y las agarro con fuerza.
Mi ritmo aumenta. Su cuerpo late y sé que está a punto de venir.
Sigo golpeando mi polla contra ella como un pistón. Más duro, más rápido y más duro
de nuevo.
Se siente como si fuera a empujarla y salir por el otro lado
Justo cuando estoy a punto de entrar en un orgasmo todopoderoso, me retiro. Joder, ella
está buena.
Leila grita.
"Joder, Blake", dice ella, jadeando. “No te detengas. Dámelo Que me jodan, por favor.
Su voz es aguda, casi histérica.
Yo cambio de táctica. La doblo. Quiero ver su trasero sin Seth aquí.
Mi mano cae con fuerza sobre sus nalgas. Se colorean de rojo al instante en el punto de
impacto. Leila grita pero empuja hacia mí.
La golpeé de nuevo, más fuerte. Y una y otra vez. Su culo ahora es de color rojo
brillante.
"Pleeease", es todo lo que puede gemir.
Mis dedos izquierdos encuentran algunos de sus jugos de su coño goteante, que unto
generosamente sobre sus deliciosas nalgas rojas.
Mientras estoy absorbiendo la vista, la agarro de nuevo por las caderas y le golpeo el
coño. Ella grita fuerte y fuerte.
Voy duro y rápido ahora. No podré contener mi propio orgasmo por mucho más
tiempo. Las granadas se disparan en mi cabeza y barriga. Puedo escuchar el sonido de
mis bolas golpeando su piel, mezclado con sus gemidos. Esos sonidos son música para
mis oídos.
Presiono mi dedo derecho contra su clítoris. Solo toma un poco de presión y Leila
estalla en un orgasmo gigante. Todos sus músculos se tensan antes de temblar y
espasmos.
Toma unos cuantos empujones más de mi parte antes de que yo también explote en ella
en una colosal ola orgásmica. Mi semen gotea de su coño mientras mi polla aún está
adentro.
Ahora se ha quedado sin fuerzas, así que la llevo a la cama.
La recuesto sobre su espalda antes de girarla. Ahora, su cabeza está al borde de la
cama. Ella tiene una mirada inquisitiva en su rostro.
"Recuerdo que aún no has tenido desierto", le explico y me paro sobre ella, mi polla
justo en frente de su cara.
Sus manos alcanzan mis bolas. Lenta y suavemente, ella comienza a masajearlos. Ya mi
polla vuelve a la vida.
Esto es jodidamente fantástico.
La punta de su lengua comienza a molestarme. Se lanza alrededor de la punta y
desaparece nuevamente. Ella repite este movimiento. Es suficiente para volverme
loco. Mi polla se endurece al instante.
Si ella no detiene esto, explotaré en cuestión de segundos.
Leila parece estar divirtiéndose. Mientras su lengua está torturando mi polla, sus manos
están masajeando mis bolas.
Yo gimo.
Mi interior se siente como si se hubiera derretido. El calor me está invadiendo y
necesito agarrar algo. Me inclino un poco hacia adelante para encontrar sus tetas. Ahora
al menos puedo masajearlos.
La provocación continúa. No puedo soportarlo más y dejo caer sus tetas y agarro su
cabeza.
Calculo mis movimientos, y cuando su lengua sale, empujo mi polla dentro de su
boca. Ella casi se atraganta cuando la empujo hacia ella. Puedo sentirme bajar por su
garganta. Eso es jodidamente mejor.
Ella recibe el mensaje. Ella sube y baja sobre mi polla, lentamente,
deliberadamente. Las manos todavía están agarrando mis bolas.
Ella cambia de rumbo ahora. Cuando sus labios alcanzan el fondo de mi eje, su lengua
sale y lame y juega en la base de mi polla. La sensación es similar a la de alguien
acariciando mi piel con una pluma.
No puedo tener ningún pensamiento apropiado y todo lo que quiero hacer es rociar mi
semen en su garganta y verla beber hasta la última gota.
La sensación de hormigueo en la parte posterior de mi vientre aumenta. Mis músculos
comienzan a tener espasmos. Puedo sentir la acumulación de mi segundo orgasmo y
empujo más y más profundamente en su boca. Leila responde apretando mis bolas más
firme y más rápido.
Ella inclina la cabeza un poco hacia atrás, preparándose para lo inevitable.
"Joder", grito en la parte superior de mis pulmones.
Mi interior se siente como si los estuvieran apretando con tanta fuerza, como si ya no
pudiera respirar. Cuando se libera la presión, mi semen se dispara hacia ella.
Sigue y sigue. Los músculos se contraen hasta que no me queda nada.
Leila traga hasta la última gota.
Cuando salgo de ella, ella sonríe.
"¿Te gustó el desierto?" Pregunto.
Ella asiente.
"¿Alguien se levantó por unos segundos?" ella se burla, y veo su propia mano bajar a su
propio coño.
Esta es una puta nena ardiente.

Capítulo 16
Leila
No estoy seguro de lo que me pasa.
No puede ser el vino. Se ha consumido poco alcohol. Blake tampoco había servido
ostras, por lo que tampoco hay afrodisíacos involucrados.
¿Puso alguna otra poción en esos ñoquis? ¿Algo que encienda mi instinto animal, algo
que me haga querer más y más de su enorme polla?
El pensamiento es tan absurdo que sonrío.
Tal vez Blake simplemente fue capaz de desatar una diosa del sexo latente en mí. El
pensamiento casi me hace reír. Cuando me considero una maldita diosa del sexo, siento
que me arden las mejillas.
Sin embargo, es cierto. Simplemente no puedo tener suficiente de él.
El otro día, no pude tener suficiente de Blake y Seth.
Solo pensar en tener dos jodidas pollas enormes dentro de mí me deja un cosquilleo en
el coño.
Los jugos fluyen de nuevo.
Necesito su polla De nuevo.
Mis manos se extienden hacia Blake. Se da vuelta y me da una especie de sonrisa de
satisfacción. Comienza en la esquina de sus labios y llega hasta sus ojos.
Solo mirar su cuerpo desnudo en todo su esplendor es excitante. El paquete de seis, sus
muslos bien musculados, los bíceps, el pecho y esos anchos hombros. Pero todo esto
palidece hasta la insignificancia cuando miro su polla.
Y no puedo dejar de mirarlo. Es tan jodidamente grande; No puedo creer que me quede
bien. Y, por supuesto, el otro día, tenía dos de esos en mí al mismo tiempo.
Mi coño gime, bueno, me duele que alguien lo toque. Lentamente, dejé que mis propios
dedos se arrastraran hacia su abertura húmeda. Juego un rato con mi clítoris,
lamiéndome los labios y mirando su polla.
Blake rueda sobre su costado. Ahora mi visión de su polla está impedida. Su dedo
dibuja círculos en mi cuerpo, mi cuerpo caliente y sudoroso. De repente, siento que algo
frío se extiende en mí.
"Ahora vuelvo", ronroneo y lo beso en la punta de su polla flácida. Sé que no se quedará
así por mucho tiempo. Acabo de recibir lo que me ordenó el médico.
Cuando vuelvo a la habitación, Blake está exactamente donde lo dejé.
En mi mano derecha, llevo un balde. Me acerco y saco algo.
"¿Sensación de calor?" Bromeo y dejo caer mi pequeña sorpresa en su ombligo.
"Joder", chilla y se sienta de golpe.
Me río y lo empujo hacia atrás. Luego me siento en la parte inferior de sus piernas y me
inclino hacia delante para lamer el cubo de hielo que acabo de dejar caer sobre él.
Puedo sentir mis pezones duros deslizarse sobre su polla. Al instante, cobra vida como
si alguien le hubiera dado una descarga eléctrica.
Mi propio cuerpo está hormigueando. Se siente como si una pluma acariciara mi piel en
los lugares más delicados. Temblo de anticipación.
Mi lengua se mueve alrededor de su ombligo. Escucho a Blake gemir. Mis tetas se
deslizan sobre su polla, adelante y atrás, arriba y abajo.
Joder, esto se siente increíble. El hormigueo está creciendo en intensidad, hasta el punto
en que se siente como una ola de calor que se extiende a través de mí desde la cabeza
hasta las uñas de los pies.
Una vez que el cubo de hielo desapareció, dejé que mi lengua siguiera un rastro
invisible hacia su vello púbico y su polla.
Me tomo mi tiempo
Blake tiene otras ideas.
Me empuja fuera de él y sobre mi espalda. Ahora le toca a él usar un cubito de hielo. No
me lo deja caer, oh no. En cambio, Blake toma un cubo y lo frota sobre mis pezones
ardientes.
Se endurecen aún más, lo que parece casi imposible. Empuja el cubo sobre mis tetas y
lentamente se derrite por el calor de mi cuerpo. Luego deja que su lengua siga el rastro
del agua.
Mis caderas y mi culo se levantan hacia él. Él está en una posición donde la punta de su
polla me toca en lugares al azar. A medida que su lengua encuentra más y más rastros
de agua, su polla me pincha al azar. Quiero más.
Agrega otro cubito de hielo y lo empuja desde el espacio entre mis senos hacia mi coño
goteando.
Allí, masajea el cubo en mi humedad, empujando con fuerza contra mi clítoris.
La sensación de hielo en llamas es abrumadora y me temo que podría venir ahora. Pero
entonces, el cubo se ha derretido y en su lugar está la tierna lengua caliente de
Blake. Me azota dentro y fuera de mi coño mojado.
Siento como si me hubiera vuelto loco. Mi mente no es más que un revoltijo
desordenado de crudos e intensos sentimientos de placer y siento que nunca tendré otro
pensamiento normal en mi vida.
Ninguna de mis extremidades obedece las órdenes que les doy y todo lo que puedo
pensar es que necesito la polla de Blake dentro de mí.
Justo cuando creo que no puedo soportarlo más, Blake se aleja de mí.
Me siento como una niña cuyo juguete favorito ha sido tomado. Al principio no puedo
registrar lo que está sucediendo, pero luego empiezo a entender el movimiento de
Blake.
Se dio la vuelta y volvió a mi coño. La diferencia es que ahora tengo acceso completo a
su polla.
No pierdo el tiempo usando las manos y la boca para ir al trabajo.
Mis manos acarician su polla, mientras mi boca chupa una de sus bolas, antes de
cambiar.
Mis dedos apenas se ajustan a la longitud de esta magnífica polla. Los trabajo arriba y
abajo suavemente.
Luego cambio y dejo que mis dedos jueguen con sus bolas mientras mi boca toma toda
su polla. Al principio creo que podría tener náuseas, pero con un pequeño ajuste, siento
que su longitud baja por mi garganta.
Jodidamente asombroso.
Mientras trato de darle mi atención a Blake, él está trabajando en mi coño. Sus dedos
están en la entrada ahora. Se burlan y empujan y tiran. Intento mover mis caderas para
encontrarme con ellos, pero esto hace que me golpee con fuerza en mi coño. El ardiente
dolor ardiente me atraviesa
Lo intento de nuevo y me doy otro golpe en el coño.
Esto me hace chupar más fuerte y más rápido su polla.
"Jodida puta", gruñe antes de que sienta sus labios succionar mi clítoris.
Su lengua da vueltas alrededor y me empuja profundamente. Nuevamente, levanto mis
caderas para encontrarme con él. Quiero más de él en mí.
Siento sus dientes mordisquear mi coño y luego sus dedos empujan y se unen a su
lengua. No puedo decirlo, pero estoy seguro de que tiene al menos dos dedos
jodiéndome. Empuja fuerte y profundo. Luego los acurruca y encuentra un lugar que
nunca supe que tenía. Esto debe ser lo que llaman el punto óptimo.
El éxtasis que siento es tan intenso que casi muerdo su polla.
"Perra", grita y saca los dedos.
No, quiero gritar, pero justo en ese momento, los golpea contra mí y empuja contra mi
punto dulce nuevamente.
El mundo pierde su enfoque y siento que estoy nadando en un jacuzzi caliente. El techo
parece estar dando vueltas y pierdo cualquier sentido de dirección.
Ahogándome en puro placer y éxtasis, aumento mi ritmo en su polla. Trabajo duro.
El placer sigue ondulándome.
Y luego, así como así, Blake se detiene.
Saca su polla de mi boca y se da la vuelta.
"Quiero follarte bien esta vez".
Nubes oscuras recorren su rostro. Su humor melancólico envía pequeños espasmos de
placer a través de mi cuerpo.
Me acerco y lo abrazo
Lo monté a horcajadas. Mientras lo hago, deslizo mi coño mojado y esperando sobre su
palpitante polla gruesa.
Mis brazos están envueltos alrededor de su cuello y me inclino hacia atrás, mis senos
asomando en su pecho.
Empiezo a montarlo como un animal salvaje.
Mientras reboto arriba y abajo, sus manos se aferran a mis caderas.
Más rápido y más rápido lo monto. Puedo sentir su polla penetrar profundamente en mí
y encontrar el punto dulce que despertó su dedo minutos antes.
"Más rápido, maldita perra", ordena. "Más rápido."
Yo lo obligue.
Su polla se siente tan apretada y las paredes de mi coño se contraen, agarrando su
polla. Cuanto más duro y rápido lo llevo, más siento que el fuego arde dentro de mí.
Blake suelta mis caderas y agarra mis tetas. Sus dedos tiran de mis pezones. Son tan
sensibles que el toque envía ondas de choque eléctrico a través de mí.
Si esto continúa por mucho más tiempo, el fuego se convertirá en una explosión gigante
dentro de mí.
Siento que mi orgasmo aumenta.
Puedo sentir su polla pulsando en mi coño. No puede estar lejos de venir. Salto más
fuerte, chocando contra él cada vez que bajo. El sonido de mi piel caliente y sudorosa
golpeando contra él es música para mis oídos.
"Jodida puta", grita y puedo sentir su polla desatar su semen dentro de mí.
Los dedos de Blake pellizcan mis pezones y yo también soy superado por un explosivo
orgasmo. Me contraigo y me da un espasmo en el pecho, abrumado de puro placer. Mi
coño se aprieta alrededor de su polla y le exprime hasta el último trozo de semen.
Ambos nos derrumbamos sobre la cama en un montón, nuestros cuerpos calientes
cubiertos de sudor y jugos.
Se estira para quitarme un mechón de pelo suelto de la cara.
"Eres jodidamente increíble", dice con una sonrisa.
He caído bien y verdaderamente bajo el hechizo de Blake Jacobs.

Capítulo 17
Seth
Estaciono mi Aston Martin al otro lado de Beans & More. Camino hasta la entrada de la
cafetería e ignoro a las personas que salen al sendero.
Todo de negocios, escaneo el frente de la cafetería. El letrero es bastante ordinario y
podría cambiar. Es mi naturaleza estudiar críticamente un negocio.
"Hey", alguien se queja de la cola de la gente, pero los ignoro. En cambio, examino el
escaparate. De buen gusto, pero carente de algo un poco diferente.
La mayoría de los cafés tienen el 'aspecto de flores marchitas', como lo llamo. La
mayoría de ellos son tan antaño. Fiel a la forma, esta necesita una renovación.
Con una respiración profunda, empujo a varias personas para entrar por la puerta
principal. Solo ahora presto atención real a la cantidad de clientes potenciales que hacen
cola para el producto de Leila.
Me rasco la barbilla. Ella obviamente está en algo.
"Oye, amigo, la línea está aquí", llama alguien. Los ignoro. También ignoro los otros
insultos que me gritaron.
Cuando estás en mi línea de trabajo, desarrollas una piel gruesa y aprendes a ignorar los
insultos.
Cuando miro al hombre detrás de la caja registradora, me detengo, horrorizado. Joder,
¿qué acaba de pasar? ¿Acababa de atravesar un portal de algún tipo?
Parece que este tipo pertenece a un club nocturno o algo así, no en un café, y
especialmente no en un café propiedad de Leila.
Está cubierto de tatuajes y piercings en el cuerpo, coronado por un cabello despeinado y
con forma de yeti. coronado por uno de esos gorros de punto multicolores.
Decido que es lo primero que Leila necesitará cambiar sobre el lugar. Si estuviéramos
juntos en el negocio, ella necesitará personas que parezcan adecuadas para trabajar para
ella. Esto ... esta persona no se ve bien.
"¿Si?"
Para mi sorpresa, su sonrisa es bastante desarmadora.
"Estoy aquí para ver a Leila". Mantengo mi voz un poco helada.
Mi actitud no lo desanima. Entrecerro los ojos un poco para distinguir el nombre de su
placa de identificación.
Persecución. ¿Es ese incluso un nombre real?
"Seguro bro." Él termina lo que ha estado haciendo y me presta toda su atención. “Está
en la cocina, horneando. La traeré para ti.
Sacudo la cabeza
"No. Está bien, Chase, gracias. La encontraré yo misma.
Chase asiente y señala, luego se dirige al siguiente cliente.
Me abre paso entre las mesas y recojo fragmentos de conversación.
"Estos son divinos", dice una joven a su amiga, que asiente.
"Necesitas probar estos bollos", murmura un hombre mayor detrás de un menú. "Me
han dicho que están fuera de este mundo".
Yo sonrío. Esa es mi Leila. Ella es una diosa que hornea bollos celestiales.
Con mi aportación, conquistaremos el mundo culinario. No puedo esperar
Cuando llego a las puertas dobles que conducen a la cocina, me tomo un momento para
mirar por la ventana redonda de vidrio. Desde aquí, puedo ver a Leila trabajar en una
bandeja de bollos.
Empujo la puerta y camino hacia ella. Ella me da la espalda y claramente no me escucha
ni me ve venir.
Su expresión está fija en la masa frente a ella. Al igual que en una de sus fotos, tiene un
poco de blanco en la mejilla. Podría ser harina o azúcar glas, no lo sabré hasta que mi
lengua explore el área y tenga una prueba de sabor.
Joder, ella está buena.
Mi polla palpita y me exige que tome alguna acción.
Yo me quedo mirándola. Con forma de mariposa, sus dedos dieron los toques finales a
una bandeja de bollos. Sin duda los pondrá en el horno para hornearlos en breve.
Ella está inclinada sobre el espacio de trabajo en la cadera. Sus senos están justo encima
de la bandeja, y si doy un pequeño paso a la derecha, podría vislumbrar el espacio entre
sus tetas si deja un botón extra desabrochado en su blusa.
La anticipación se está acumulando dentro de mis pantalones. Solo puedo esperar que
nadie entre ahora. La veo lamer sus propios labios, la delicada punta rosada de su
lengua se desliza por su labio inferior, de un lado a otro, antes de repetir el
procedimiento en el labio superior.
Joder, ella es tan buena. No tiene ni idea de qué efecto tienen sus acciones en un chico.
Brevemente, pienso en la mierda con ella y Blake la otra noche. Tengo que reprimir un
gemido cuando las imágenes de Leila desnuda pasan por mi mente.
"Hey, sexy", finalmente logré decir, y me di cuenta de que mi propia voz suena un poco
ronca.
Se gira hacia mí y veo sorpresa en su rostro. Es obvio que no tiene idea de que la he
estado observando. Su inocencia es tan jodidamente excitante; Tengo que reprimir mi
deseo abrumador de follarla aquí, ahora mismo.
Jugueteo con la noción de sexo en la cocina por unos breves segundos. Ella parece
ocupada. Tal vez en otro momento.
"Hola, Seth". Ella sonríe y estoy segura de que está contenta de verme.
"Para ti", le doy el ramo de rosas que he estado escondiendo a mis espaldas.
Ella respira hondo y luego aplaude. La harina se lanza en todas las direcciones.
"Son preciosas". Ella me los quita y entierra su nariz en ellos.
"No es tan hermosa como tú", respondo y veo que sus mejillas se tiñen un poco.
Ahora mi polla amenaza con estallar a través de mis pantalones. Es hora de actuar antes
de que mi cerebro se apague por completo.
"¿Me pregunto si estás libre por el resto del día?"
No puedo quitarle los ojos de encima. Ella está intoxicando cada parte de mí. Necesito
poseerla, meter mi polla en su coño y escucharla gritar por más.
Mis pensamientos están cayendo sobre sí mismos.
"¿Perdón?" Creo que ella respondió a mi pregunta, pero mi mente estaba en otra parte.
"Soy libre", repite ella. "¿Tienes algún plan?"
Su sonrisa es sabia y perversa.
"Puedes apostar", susurro y la veo poner este lote en el horno y recuperar un lote
terminado.
"Sígueme", dice ella, y yo lo hago.

Capítulo 18
Leila
Me siento un poco fuera de lugar sentado en el Aston Martin de Seth con un par de
jeans y un viejo suéter. Sin embargo, también siento que algo de mi incomodidad está
disminuyendo.
Este ramo de flores, nunca había visto algo así. No tus rosas, claveles o tulipanes
normales; estos son raros y claramente seleccionados a mano. Seth tiene un gusto
exquisito en flores. Y ahora, tal vez, soy uno de ellos.
El sol apenas comenzaba a ponerse cuando dejamos Beans & More. Ahora el cielo se
vuelve negro de repente. Estamos fuera de la ciudad yendo a ... bueno, no tengo idea de
a dónde vamos. Considero preguntar, pero eso arruinaría la sorpresa. Estoy seguro de
que es eso, una sorpresa.
Miro a Seth mientras conduce. Sigo pensando en mis bollos. Realmente he ganado el
premio gordo con ellos. Su éxito hasta ahora ha superado mis sueños más
salvajes. Estoy sonriendo ... sonriendo como un niño el día de Navidad. Seth se da
cuenta y me muestra su propia sonrisa.
"Casi estámos allí. De hecho, es esta vuelta adelante ", dice. "Justo más allá de los
árboles".
"Oh. Bueno."
"Creo que te va a encantar este lugar, Leila".
"Estoy seguro de que lo haré."
En la oscuridad, es difícil saber qué tan grande es este lugar. Todo lo que puedo decir es
que es enorme. Busco en mi cerebro la palabra correcta.
¿Es un castillo? No. Manor? Si eso es.
Mientras miro el lugar desde adentro del auto, trazando sus líneas con los ojos, Seth
sale, camina a mi lado y abre la puerta.
"Qué caballero", le digo, sonriendo.
Él se inclina. "Lo intento."
Seth me acompaña dentro. El lugar está poco iluminado y escucho el crepitar de un
fuego en un hogar y huelo la leña quemándose. Juro que escucho los sonidos distantes
de las personas caminando, pero antes de que pueda preguntar algo, Seth me lleva a la
primera habitación, una llena de una araña gigante de cristal y una gran escalera que me
deja alucinado.
"Seth ... esto ... esto es increíble".
"Decir ah. Sí lo es. Tiene mucha historia también. ¿Creería que el mismo hombre que
diseñó la gran escalera del Titanic diseñó esta?
Las arrugas de mi frente. "¿De Verdad?"
"Sí, de verdad".
"Pensé que me resultaba familiar", le digo y me río. "He visto esa película algunas veces
... unas cientos de veces".
Seth asiente, coloca su mano en la parte baja de mi espalda y me lleva a la habitación
contigua.
“Este es el salón. Bueno, uno de ellos.
"Guau. Hermoso."
Agita su mano hacia las sillas que se sientan cerca de la chimenea y dice: "¿Puedes
verte sentado aquí, con una taza de té en una mano y uno de esos deliciosos conos
rellenos de bollos en la otra?"
"Yo puedo." Asiento con la cabeza. "Tal vez leer un libro o escuchar algo de música".
Seth señala el viejo fonógrafo sentado en una mesa. “Tengo una buena colección para
que elijas, Leila. ¿Te gusta el jazz o la música clásica?
"Un poco de todo, supongo".
"Bueno. Sígueme. Lo que quiero mostrarte es de esta manera.
Continúo siguiéndolo a través de su increíblemente hermosa casa. Este es el tipo de
espacio en el que podría acostumbrarme a vivir.
Por un conjunto de grandes puertas dobles, Seth se detiene y levanta los
brazos. "Mirad."
Es un invernadero.
"¡Oh, Dios mío, Seth!" No tengo más palabras.
Es increíble.
La luz de la luna pinta la habitación con una manta de luz amarilla. Hay una vieja
cabaña rústica en la parte trasera de la habitación con un futón para sentarse. Un jardín
zen me llama la atención. Siempre he querido ver uno en persona.
"Yo pensé que podría gustarte."
En la mesa al lado del futón hay una gran fiesta, casi como una cena de Acción de
Gracias para diez.
“Todo se ve y huele muy bien aquí. Toda esa comida, ¿eso es todo para nosotros?
"Está."
"Seth, me muero de hambre, pero eso es suficiente comida para alimentarnos a mí y a
mi compañero de cuarto durante una semana o dos".
"Me aseguraré de enviarte a casa con una bolsa para perros", se ríe. "O tres".
Me doy la vuelta y tomo todo lo que hay para ver.
“Observe los elementos de diseño japoneses. Mi padre y yo pasamos un año en Japón
cuando era más joven. La cultura te contagia. Nunca me había sentido tan en paz como
cuando vivía allí ”.
"¿Dónde en Japón?"
"Chiba. No muy lejos de Tokio.
Camino hacia la comida; Todo esto es tan abrumador pero tan increíble. "Yo nunca he
estado allí."
“Dijiste que tenías hambre. Yo también. Sentémonos."
Me siento en el futón y Seth se une a mí. Huele tan bien como la comida.
“Todo lo que ves frente a ti proviene de mi invernadero, mis jardines y mis granjas. Las
especias utilizadas para hacer esta cena, bueno, están a solo cien pies de distancia.
"Todo natural." Asiento en agradecimiento. "Eso es maravilloso. Me encantaría poder
comer limpio todo el tiempo ".
“Prefiero todo natural. Comer limpio es fácil cuando tienes los recursos adecuados y
sabes cómo hacerlo ”.
"Obviamente tienes ambos, Seth". Sonrío y tomo su mano por un momento. "Muchas
gracias por esto. Puedo decir que esta será la mejor comida que he comido en años ".
—De nada, Leila.
Comemos por varios minutos. La comida es increíble, claramente preparada por los
mejores chefs. Me pierdo en el momento y ni siquiera me doy cuenta de lo tranquilo que
es hasta que él comienza a hablar de nuevo.
“Leila, debo admitir que estaba muy interesado en tus conos rellenos de bollos. Aun lo
estoy. Pero ahora que nos hemos conocido, y he tenido la oportunidad de conocer a la
persona detrás del bolígrafo, yo ... bueno ... me interesé mucho más por ti. Eres mucho
más increíble que tus bollos por mucho.
Yo me río y él también se ríe.
"Eso no salió como lo dije en serio".
"Entiendo lo que estás diciendo, Seth".
Le sonrío. Es toda la aprobación que necesita. Se inclina y coloca un pequeño beso en
mis labios. Aprovecho el momento y lo sigo con uno aún más grande y profundo.
Sus manos me tiran más fuerte. Mi temperatura sube y empiezo a sudar.
Dios mío, este hombre es sexy. No puedo esperar para ver a dónde conduce la noche.

Capítulo 19
Leila
Pequeñas ondas de descarga eléctrica se disparan a través de mis brazos, piernas y
abdomen. Pequeños fuegos artificiales explotan en mi cabeza en una variedad de rojos,
verdes y amarillos. Son similares a los de fuente que admiro cada Nochevieja.
Yo suspiro.
Seguramente está mal deleitarse con tanto placer.
Comenzó con sexo increíble con los dos. Entonces, Blake y yo lo hicimos hace unas
noches. Ahora, aquí estoy con Seth, otro dios del sexo.
¿Cuánta suerte puede tener una mujer?
Al crecer, me encantaba escuchar a mi padre leerme cuentos de hadas. Quería ser
Rapunzel, con el cabello largo y rubio, que encuentra un príncipe o Cenicienta o
cualquiera de esas hermosas princesas, pero sabía que incluso en ese entonces no todas
las chicas eran princesas y encontraban a su príncipe.
Desde que conocí a Blake y Seth, entré en mi propio cuento de hadas. No, espera; Esto
es mucho mejor que cualquier maldito cuento de hadas. Blancanieves no puede joder a
los siete enanos, ¿verdad?
El pensamiento trae una sonrisa a mi cara.
"Eres tan jodidamente hermosa", susurra Seth y cepilla mis mechones sueltos detrás de
mi oreja.
Ante sus palabras, algo aprieta mi pecho suavemente y con cuidado. Cómo he deseado
que un hombre use esas palabras y aquí tengo dos.
Joder, Leila, pienso para mí misma. ¿Cómo tienes tanta suerte? Tendrás que elegir uno
de ellos. Sabes eso, ¿no?
La maldita voz interior debería callarse.
¿Realmente tengo que elegir uno? ¿No puedo tener los dos?
En los cuentos de hadas, la princesa tiene su final feliz. ¿Qué pasa si mi final feliz es
dos jodidos dioses del amor?
Deja de pensar, me digo. Disfrutar.
Seth se levanta del futón. Sus ojos brillan a la luz de la luna y siento que me ahogo en
ellos.
Miro con la boca abierta mientras él se levanta muy lentamente la camisa por encima de
la cabeza. Lo gira varias veces antes de lanzarlo en un amplio arco a su derecha.
Me río.
Una pequeña llama roja comienza a parpadear en la boca de mi estómago al ver su
paquete de seis y su amplio cofre. Seth funciona; muestra.
Mis ojos se comen hasta la última parte de él. Casi involuntaria, mis piernas se
separaron un poco. Afortunadamente, no estoy usando una falda.
Ahora sus dedos están trabajando en el botón de sus jeans. Estoy tentado de saltar y
ayudarlo, pero me quedo donde estoy.
Una vez que sus jeans están desabrochados, los empuja más allá de sus
caderas. Mientras lo hace, los balancea de lado a lado antes de darse la vuelta.
Me río cuando lo veo balancear su trasero de izquierda a derecha.
Deja caer sus jeans y sale de ellos.
Me lamo los labios.
¿Era este desierto? Jodidamente espero que sí.
Ahora todo lo que lleva puesto son sus boxers. Por lo que puedo ver, su polla ya está
dura y lista para salir.
Ahora está de pie a mi lado. Suavemente, sus dedos índices se enganchan en el elástico
de sus boxers y los empujan hacia abajo. Mi corazón comienza a latir un poco más
rápido.
Aflora su jodida polla enorme. Es más grande de lo que recuerdo. Jadeo cuando lo veo
de nuevo.
La luz de la luna capta su expresión, que me parece llena de pura lujuria primaria. Pero
mis ojos se sienten atraídos por su enorme polla.
Mi boca se abre un poco con anticipación y mi coño está mojado.
Joder, necesito hacer algo.
Seth camina, completamente desnudo como él, al otro lado de la habitación. Su sombra
es un reflejo de su cuerpo perfecto, hasta su enorme polla jodida sobresaliendo en el
aire.
La música llena la sala.
En lugar de caminar de regreso, Seth baila hacia mí. Su cuerpo se mueve en perfecto
ritmo y armonía con los suaves tonos de flauta de pan que provienen de cuatro altavoces
diferentes.
Apenas puedo respirar.
Ha sido capaz de transformar la noche en algo fuera de este mundo. No me sorprendería
encontrar repentinamente unicornios voladores en la habitación o ver estallar fuentes de
chocolate frente a mí.
Mi respiración se vuelve corta y superficial a medida que Seth gira y gira frente a mí. Su
jodida polla sobresale como una varilla de aligeramiento.
Lentamente, me levanto, la música me guía.
Con mi ropa poco halagadora, simplemente me quito la blusa antes de hacer lo mismo
con mis pantalones.
Ahora con mi bata y sujetador, me uno a los movimientos lentos del cuerpo de Seth. Se
desliza detrás de mí y, con un rápido movimiento del dedo, desata el broche del
sujetador, que luego cuelga en su mano derecha. Lo gira sobre su cabeza como un
precio.
Después de arrojarlo a su derecha, engancha sus dedos en la cintura de mi
deslizamiento. Con un movimiento hábil, los tira hacia abajo alrededor de mis
tobillos. Con gracia, salgo de ellos.
Observo mientras Seth se los acerca a la cara y entierra la nariz en su entrepierna. Ya
están tan mojados por mi coño ansioso. Parece dispuesto a absorber mis jugos.
Para no ser superado por él, me balanceo de izquierda a derecha frente a él. Nuestros
ojos se encuentran y se bloquean.
Los suyos están llenos de lujuria depredadora y posesiva, con los músculos tensos, listos
para saltar.
Yo, por otro lado, estoy abrumado con una combinación de puro deseo sexual y
sentimientos de amor.
¿Cómo puedo tener sexo jodidamente fantástico fuera de este mundo con dos tipos
diferentes en unos días?
¿Por qué había hecho mi vida tan complicada?
Cuando sus dedos se deslizan sobre mis tetas, es como si tuvieran electricidad. Mi piel
arde y hormiguea al mismo tiempo.
Pensar se vuelve cada vez más difícil.
¿Qué coño importa si me gusta follar a dos chicos? Si no me importa, no debería
importarle a nadie más, ¿verdad?
Ahora su cuerpo está tan cerca del mío que puedo sentir la punta de su polla
arqueándose hacia mi coño goteante.
Joder, Leila, deja de pensarlo todo.
Él usa su mano derecha en mi espalda baja para empujar mi cuerpo balanceándose hacia
él, y su polla se desliza sobre mi coño. Cualquier último vestigio de poder de
pensamiento se va por la ventana.
No sé cómo lo hace este jodido dios del sexo, pero ya no puedo funcionar como un ser
humano adecuado con las cosas que le está haciendo a mi cuerpo.
Mis caderas presionan contra él, pero él da un paso atrás.
Un gemido escapa de mis labios.
A medida que avanzamos por la habitación como uno solo, puedo ver nuestras sombras
a la luz de la luna. Se ve jodidamente mágico.
Realmente estoy en mi propio cuento de hadas. Y si ese es el caso, debería tener un final
feliz.
Una brisa fresca viene de algún lado, acariciando mi piel desnuda. Combinado con el
cuerpo caliente de Seth, la sensación me deja ardiendo por dentro y con ganas de más.
La música es intoxicante, como lo es Seth. Cada vez que doy un paso hacia él, se aleja
de mí, pero solo un poco.
Un juego de gato y ratón se produce entre nosotros. Intento tocar su polla. Deja que mis
dedos lo acaricien antes de moverse a mi izquierda y detrás de mí.
Lo siento presionar mi espalda. Sus manos descansan sobre mis caderas y nos
balanceamos de un lado a otro al unísono.
Joder, estoy tan mojada y caliente. Me temo que podría llegar en cualquier momento
antes de que incluso me golpee la polla.
Seth planta besitos de mariposas en mi cuello. Él mordisquea mis oídos. Sus manos se
deslizan hacia mi cintura y luego descansan sobre mis tetas.
Mis pezones están tan duros que se sienten listos para explotar. Sus dedos los jalan y los
pellizcan, y un placer extremo me atraviesa como una mina terrestre.
Descanso mi cabeza contra su pecho. Oigo latir su corazón y cierro los ojos.
¿Me estaba enamorando de Seth? ¿Ya me había enamorado de Blake?
Mis manos se acercan y encuentran lo que realmente quiero en este momento, su
enorme polla.
Lentamente, mis dedos se envuelven alrededor de su polla y se deslizan por su eje. En la
parte inferior, mis dedos encuentran sus bolas.
Ahora le toca a Seth gemir.
"Eres tan jodidamente caliente", susurra en mi oído.
Si no me folla pronto, creo que me desmayaré por puro éxtasis.
Las manos de Seth dejan mis tetas y continúan su exploración. Siguen un rastro
invisible por mi abdomen y encuentran mi coño saturado.
Sus dedos permanecen en mi apertura.
Continúo frotando y masajeando esa jodida polla suya, deseando que sus dedos hagan
algo más que simplemente presionar contra mi coño.
Mientras trato de empujarme sobre sus dedos, se ríe.
"¿Estás buscando algo, mi pequeña zorra?"
En respuesta, simplemente aprieto sus bolas.
"Por eso", gruñe, "tendrás que ser castigado".

Capítulo 20
Seth
Mi lobo interior está desatado. Quiero rasgar su carne blanca, escuchar su aullido de
piedad y golpear mi jodida polla hasta que esta urgencia ardiente esté satisfecha.
Estoy cerca de babear, y puedo ver que se siente de la misma manera. Esta mujer me
hechiza.
No estoy seguro de qué se trata Leila, pero ella saca el animal que hay en mí. Nunca
antes había sentido la necesidad de dominar a una mujer como yo quiero dominarla.
La lujuria, una lujuria animal pura me agarra, me posee y no me deja ir hasta que la
haya follado. Y no solo quiero follarla normalmente, quiero follarla como nunca antes
había follado a ninguna chica.
Bailar desnudo a la luz de la luna casi me ha llevado al límite. Siento como si estuviera
parado cerca del borde de un acantilado y estoy a punto de caerme. No soy de los que
hacen poesía o cosas así, pero casi espero que un soneto brote de mis labios.
Bastante jodido baile, tiempo para la acción.
La arrastro a un chabutai original, una pequeña mesa de café de Japón.
Ha tenido muchos usos desde que lo compré e importé, pero nunca se ha utilizado como
una ayuda para follar a una mujer. Si la mesa de la cena aún no estuviera llena de platos,
probablemente la usaría. Pero tengo suficiente poder de pensamiento para darme cuenta
de que romper la vajilla no será bueno.
En mi apuro por ponerla en posición, Leila tropieza. En lugar de detenerla y ayudarla a
ponerse de pie, la sigo arrastrando por las muñecas. Pero en lugar de protestar, escucho
gemidos placenteros. Ella parece estar excitada por mi manejo brusco.
No esperaba que fuera una chica a la que le gusta que la traten con rudeza. Parece que
estoy equivocado.
En la mesa, la empujo sobre ella. Ella detiene su movimiento extendiendo sus
manos. Esto la pone exactamente como la quiero.
Al ser solo una mesa baja significa que su trasero ahora me está apuntando. Está
rogando que lo tomen. Esa lujuria del lobo me ha agarrado bien y de verdad.
"¿Qué?", Ella está volviendo la cabeza hacia mí, "¿qué vas a hacer?"
Sus ojos están bien abiertos y veo emociones mezcladas en ellos. Hay un poco de
miedo, un poco de emoción y mucho jodido deseo.
Joder, ella es tan buena. La forma en que sus mechones caen sobre sus hombros y baja
por su espalda desactiva cualquier habilidad de mi parte para pensar con claridad.
"Lo descubrirás", gruñí y le di una palmada en el culo.
Sus mejillas se tambalean un poco y ella chilla.
Me alejo para conseguir algo que haga que esto sea mucho más interesante.
"No muevas un músculo," le ordeno.
Cuando regreso, ella trata de ver qué es lo que tengo en la mano.
"Mira a la mierda", le digo y luego golpeo sus atractivas mejillas con mi cinturón de
cuero.
Deja una marca roja justo en su mejilla.
Leila grita, un grito agudo de sorpresa y dolor. Pero ella empuja su puto culo hacia mí.
"Oh, así que quieres más, ¿verdad, puta puta?"
En lugar de una respuesta, sus nalgas se mueven de izquierda a derecha,
Mi jodida polla palpita de emoción al verlo.
Whack, el cuero golpea su piel nuevamente, y una segunda marca roja aparece junto a la
primera.
"¿Como es que?"
Ella gime.
Después de dos golpes más con el cinturón, mis dedos encuentran su coño mojado. Ella
esta goteando. Me deslizo por la abertura húmeda y recojo algunos de sus jugos. Luego
los froto sobre su puto culo caliente. Lentamente, mis dedos extendieron el líquido frío
sobre las ronchas rojas.
"Oh Seth", está murmurando, "Por favor, cógeme ... por favor".
Mi jodida polla está tan lista para complacer, pero quiero prolongar este juego de poder
tanto como pueda.
Alejo mi mano y la miro a la cara.
“¿Qué mierda acabas de decir? ¿Intentas decirme qué hacer?
Ella sacude la cabeza y vuelve a gemir.
"Si estás tratando de decirme qué hacer, necesitarás otro azote como este".
Esta vez, uso mi mano desnuda para golpearla con fuerza en la mejilla del culo
derecho. El sonido de mi piel desnuda golpeándola es música para mis oídos. Tengo
ganas de rugir.
Grrr.
"Tócame ..." su respiración es superficial y rápida. Ella está tratando de empujar su
trasero contra mí. "Por favor ..."
"Jodida zorra exigente, ¿verdad?"
La golpeé de nuevo. No he terminado aún.
Después de cinco palmadas más, mis dedos son visibles en su trasero.
"¿Vas a ser bueno ahora?"
Estoy a centímetros de su cara y mi cuerpo está presionado contra el de ella. Donde
nuestra piel se toca, siento una sensación de ardor. Las llamas lamen mi interior. Las
ondas de choque eléctrico me atraviesan. Me siento en riesgo de explotar desde adentro.
"Sí", susurra y se empuja hacia mí.
La tomo por las caderas y entro en su jodido coño mojado y apretado.
En lugar de embestir mi polla palpitante con fuerza y rapidez, me tomo mi tiempo. Al
principio, solo dejo que mi punta entre en su abertura y luego la saco de nuevo. Mis
pulgares presionan su espalda baja.
Cuando me retiro, ella trata de seguirme empujando sus caderas hacia mí.
Mi polla palpita con anticipación. Cada vez que entro en ella, quiere poseerla. Tengo
que usar cada onza de autocontrol no solo para golpearla.
Eventualmente, el deseo se hace cargo y no puedo mantener mi burla por más
tiempo. La agarro con fuerza y empujo profundamente en su apretado coño
mojado. Joder, ella es apretada y caliente.
Leila grita de placer. Siento que pierdo la capacidad de pensar con claridad. Las
emociones me invaden y siento que me ahogo de placer.
La música se ha detenido, y todo lo que puedo escuchar es mis bolas golpeando contra
su piel, es música para mis oídos. Me dice que estoy a cargo.
Solté las caderas de Leila y me incliné hacia adelante para agarrar sus tetas
rebotando. Mis dedos tiran y pellizcan sus pezones duros. Ella está gritando en éxtasis
ahora. Los giro entre mis dedos.
Joder, esto es asombroso.
Más rápido y más duro, mi polla se clava en ella. El mundo que me rodea parece perder
su enfoque y todo lo que puedo pensar es descargar mi carga masiva en el apretado coño
de Leila.
Puedo sentir las paredes de su coño contraerse. Con cada empuje, ella se vuelve más y
más apretada, apretando a mi alrededor. Ella debe estar cerca de venir.
Puedo escucharla jadear. Ella echó la cabeza hacia atrás y estoy esperando a que grite.
Mis dedos sueltan sus senos y mi mano derecha encuentra la abertura de su coño. Mi
dedo índice empuja contra su clítoris.
"Joder", grita Leila y puedo ver que los músculos de su espalda comienzan a tener
espasmos.
Mi dedo empuja y frota contra su clítoris mientras mi otra mano está agarrando la carne
de su trasero.
En ese momento, la luna llena está en su punto más alto en el cielo y puedo verla por
encima de nosotros. Ahora estoy aullando como un lobo.
Estoy jodiendo a mi perra. Soy lobo alfa
"Más fuerte", grita Leila sobre mi aullido y aumento mi velocidad. No sé dónde
encuentro la energía para seguir adelante.
Y luego las paredes de su coño comienzan a agarrarme la polla y apretar y relajar y
apretar de nuevo. Ahora también está aullando y su orgasmo sigue y sigue.
Las llamas que comenzaron en mi barriga han crecido en proporciones enormes y estoy
abrumado por el calor dentro de mí. Los fuegos artificiales explotan en mi cabeza,
espalda y abdomen, consumiendo todo mi cuerpo.
Siento que mi músculo se contrae antes de que yo también comience a montar la ola de
mi orgasmo. Disparo mi carga en ella. Ella todavía tiene espasmos alrededor de mi
polla.
Y todavía estoy aullando.
Cuando termino, me quedo dentro de ella, solo para sentir el calor de su coño y dejar
que mi cuerpo sienta el de ella.
Ella se queda sin fuerzas en mis brazos, y ambos terminamos en el suelo. Le saco la
polla y ella sonríe.
Se acurruca contra mí y acaricia su cabeza contra mi pecho. Su cabello roza mi piel
desnuda y me envía pequeñas ondas de descarga eléctrica.
Sus dedos siguen un rastro invisible desde mi ombligo hasta mi vello púbico y mi
polla. Ella usa los jugos para acariciar mi ahora flácida polla de vuelta a la vida.
Echo la cabeza hacia atrás, deleitándome con la sensación de lo que está haciendo.
Ninguna de las mujeres a las que he follado antes ha tenido este tipo de efecto en
mí. Traigo mi cabeza hacia atrás y empiezo a mordisquearle la oreja. Mis manos
recorren su cuerpo, explorando como si nunca la hubieran tocado antes.
"Entonces", susurra contra mi pecho, "¿estás listo para más o has tenido suficiente?"
Su tono es juguetón, sugerente y acogedor.
En lugar de responder directamente, levanto su cabeza hacia mí. Mis labios encuentran
los de ella y mi lengua fuerza la entrada en su boca. Encuentro su lengua y duelo con
ella.
Ella responde.
Parecemos atrapados en este beso durante horas. Nuestros cuerpos están bañados por la
luz de la luna y la brisa fresca acaricia nuestra piel.
Me entrego a las sensaciones y pierdo todo sentido del tiempo.

Capítulo 21
Leila
Echo la cabeza hacia atrás y disfruto la sensación de mi largo cabello suelto contra mi
propia piel. Como una pluma, me acaricia.
Seth me está mirando. Mis dedos se mueven hacia arriba y hacia abajo por su largo y
grueso eje.
Cada vez que miro su enorme polla, no puedo creer que encaje dentro de mí. Y parece
que no puedo tener suficiente de él.
Ya quiero sentirlo en mí otra vez. Es como si me hubieran lanzado un hechizo.
Sigo jugando con su polla como si fuera un instrumento musical. Varío de
deslizamiento a golpeteo como si tocara la flauta. Y luego envuelvo mis dedos alrededor
y veo cómo no encajan completamente en la polla más grande que he visto.
"Entonces", ronroneo y me inclino hacia él, "no has respondido a mi pregunta".
Mis pezones rosados son erectos y duros, rogando que me toquen. Me estoy apoyando
contra Seth, y cuando muevo mis tetas rozan su piel desnuda, la sensación envía ondas
de choque eléctrico a través de mi cuerpo.
Los ojos de Seth están un poco vidriosos. El sonrie.
Su mano derecha comienza a jugar con mi cabello. Mis tetas desean que las
alcance. ¿Qué necesitaba, una puta invitación escrita para empezar a chuparme los
pezones?
Lo gira alrededor de sus dedos y lo observa mientras cae de nuevo contra mi piel.
"¿Cuál era la pregunta otra vez?"
Su voz es ronca. Todos los aullidos deben haber hecho algún daño a sus cuerdas
vocales. Ojalá sea solo temporal.
Amo su voz profunda y melódica. Envía escalofríos por mi columna vertebral.
Muevo mis dedos de su polla y los paso por su pecho. Dejan pequeñas huellas húmedas
en su viaje.
Mientras hago esto, mi propio gatito se está poniendo caliente y listo. Siento una
sensación de hormigueo justo en el centro, que viaja hacia afuera, como una onda.
Me imagino una piedra arrojada a un lago quieto y las ondas que la piedra hace en el
agua.
"¿Estás listo para más o has tenido suficiente?" En lugar de mirarlo a los ojos, miro a
otro lado por completo.
Realmente no tiene que responder. Su polla palpitante vertical es suficiente respuesta.
Por ahora mi dedo índice está trazando el contorno de sus labios. Abre un poco la boca
y deja que su lengua se enrolle alrededor de mi dedo. Entonces sus dientes lo agarran.
Lo golpeo en la muñeca.
"Perrito malo", gruño, y su sonrisa se ensancha.
Se inclina hacia adelante y me muerde los pezones. Al instante se endurecen un poco
más, si eso es posible.
"¿Qué tal esto?"
Agarro su cabeza, pero él está unido a mis tetas. Sus dientes muerden y sus labios
chupan.
Joder, esto se siente bien.
Se detiene y me mira.
"¿Soy un buen chico ahora?"
Mis manos descansan sobre su hombro.
"Solo si contestas mi pregunta y te acuestas".
"He olvidado la pregunta otra vez", me molesta, pero se acuesta.
En lugar de mis dedos, mi lengua ahora está explorando su cuerpo. Sigue un camino a lo
largo de su abdomen y baja hasta su vello púbico. Aquí se mueve a la base de su polla.
No me lo llevo a la boca. En cambio, dejé que mi lengua trabaje alrededor de la base y
sus bolas.
Muevo mis piernas sobre él para que mi trasero esté en su cara. No pierde el tiempo y
comienza a frotar sus dedos alrededor de la abertura de mi coño que gotea.
En lugar de ahogarme en mi propio placer, trato de concentrarme en él y su enorme
polla.
Mi lengua está sondeando todo alrededor de su polla y juega con sus bolas.
Mis dos manos están acariciando su eje.
Es difícil concentrarse. La lengua de Seth ahora está haciendo su magia en mi
coño. Expertamente, está entrando y saliendo de mi apertura.
Sus dedos están masajeando mi trasero. Están apretando y amasando, como si estuviera
trabajando en masa.
Siento como si alguien hubiera soltado fuegos artificiales dentro de mí. Gimo de
placer. Joder, es bueno.
Nadie ha podido acercarme tanto al orgasmo tan rápido. Intento avanzar un poco para
asegurarme de que aún no he venido. Pero Seth no me deja escapar. Su agarre se tensa,
pero su lengua se ralentiza. Suavemente, ahora explora mi humedad.
He dejado de explorar su base y levanto la cabeza. Por unos minutos solo miro su
enorme polla.
Puedo ver un poco de pre-cum brillante en su punta. Una pequeña gota se posa justo en
la punta. Si inclino un poco la cabeza, puedo ver la luna reflejada en ella.
Lamo mis labios como si estuviera a punto de devorar un manjar.
Y luego llevo toda su enorme polla a mi boca. Al principio siento como si tuviera
náuseas, pero luego la sensación se fue y se reemplazó con placer.
Me muevo arriba y abajo sobre su eje. Llego a un ritmo y dejo mis dedos para seguir
amasando sus bolas.
Creo que puedo escuchar a Seth gemir, pero no estoy seguro. Todas las funciones
normales de mi cuerpo se han apagado, solo las vitales, como el latido de mi corazón,
siguen funcionando.
Arriba y abajo en un ritmo lento y constante, muevo la cabeza a lo largo de toda su
polla. Es jodidamente asombroso. Lo siento crecer en mi boca con cada movimiento.
No pasará mucho tiempo antes de que esté listo para disparar su carga nuevamente. Por
mucho que me guste tragar su carga, tengo otros planes.
Es hora de cambiar de posición.
Mi boca deja su polla y muevo mi cuerpo hacia adelante. No me doy la vuelta. Me
quedo de espaldas a Seth.
Cuando mi coño está en su polla, me bajo sobre su polla que espera. Como un
pararrayos, apunta directamente hacia el cielo nocturno. Tan pronto como lo monte,
siento como si hubiera sido alcanzado por un rayo.
Empiezo a montarlo lentamente. Mis senos se mueven un poco hacia arriba y hacia
abajo, y empiezo a tener un ritmo.
Mis nalgas golpean su piel cada vez que bajo, el sonido es similar a las nalgadas que me
dio antes.
Para ayudarme a montarlo, apoyo mis manos en la parte superior de sus muslos.
Siento que me agarra las caderas.
Mientras reboto arriba y abajo sobre Seth, echo la cabeza hacia atrás. Estoy
completamente perdido en el momento. Puedo ver la luna llena y me pregunto si me voy
a quemar.
Recuerdo haber leído sobre una pareja que folló bajo la luna llena y el tipo se quemó la
luna.
Por supuesto, esto podría haber sido inventado.
Incluso si voy a sufrir una quemadura lunar, no me importa. Este es el mejor sexo de
mierda que he tenido. Siento como si estuviera saltando de nube en nube en el cielo sin
preocuparme en el mundo.
"Más rápido." Los dedos de Seth están cavando en mí. Me está ayudando a montarlo
más fuerte y más rápido empujando y levantando.
Su polla crece con cada empuje. Me estoy volviendo más y más fuerte.
De repente quiero darme la vuelta. Quiero mirarlo cuando venga.
Me detengo y me bajo de él.
Está respirando con dificultad. Puedo ver su pecho subir y bajar rápidamente.
"Qué ..." comienza, pero se detiene cuando ve y siente que lo monto de nuevo.
Ahora mis tetas le cuelgan en la cara y sus labios las alcanzan.
Cuando comienza a chuparlos, cierro los ojos y pierdo lo último de mi capacidad de
pensar con claridad.
Llamas de placer lamen mis entrañas. Mi cerebro se convirtió en papilla. La intensidad
del calor está aumentando.
Como una yegua indómita, monto en mi semental salvaje. Más fuerte y más rápido voy
hasta que siento su polla pulsando en mí. Las paredes de mi coño se han agarrado a él y
no quieren dejarlo ir.
Su orgasmo es salvaje y explosivo. Puedo ver los músculos de su espasmo en el pecho y
siento que me dispara.
Todavía no he llegado allí. Seth deja mis senos y acerca sus dedos a mi clítoris. Allí
comienza a empujar y frotar, y en segundos siento que vengo.
Comienza a acumularse en mi centro y se extiende a todas y cada una de las celdas. Es
salvaje, es explosivo y hace temblar la tierra.
Brevemente, todo lo que puedo ver son estrellas. El placer me desgarra y amenaza con
destrozarme.
Cuando finalmente termino de montar mi ola orgásmica, me derrumbo sobre Seth.
Yacemos allí, los rayos de luna acariciando nuestra piel, los cuerpos presionados,
nuestra respiración lentamente volviendo a la normalidad.
Puedo sentir los dedos de Seth acariciar mi espalda y sonrío. La satisfacción total me
está envolviendo, y no puedo creer lo afortunado que soy.
Y no puedo creer cómo me he enamorado de dos increíbles dioses griegos.
Me pregunto qué me deparará el futuro.
Es difícil imaginar una vida con dos hombres, pero eso es exactamente lo que quiero.
Decido apartar de mi mente pensamientos de este tipo. ¿Por qué arruinar el momento
perfecto?
¿Cuál fue esa canción? ¿Algo sobre que sera sera? ¿Lo que será será?
Con un suspiro, cierro los ojos y me deleito en ser sostenido por Seth y poder escuchar
los latidos de su corazón.
La vida es jodidamente fantástica en este momento.

Capítulo 22
Leila
Faltan dos horas para abrir y estoy llegando a casa. Entro en nuestro apartamento y
huelo bollos horneados.
"¿Persecución?" Yo llamo
Me apresuro a la cocina. Tal como lo imaginé, Chase está recogiendo mi holgura. La
cocina es un desastre. la harina llena el aire mientras que los ingredientes y los platos
sucios yacen por todas partes. Chase está horneando fervientemente.
"Persecución. ¡Oh Dios mío! Gracias —digo mientras dejo las llaves en la esquina de la
mesa. “No tenía idea de que me iría tanto tiempo. Olvidé el tiempo Debería haber
llamado, solo ... lo siento.
Él no responde al principio; Él solo se encoge de hombros. Se ve enojado. Yo también
lo estaría si fuera él.
“En serio, Chase, gracias por hacer todo este trabajo. Estaría muy lejos si no lo hubieras
hecho —digo mientras camino y le doy un fuerte abrazo desde atrás.
De nuevo, se encoge de hombros.
"¿Qué pasa?"
"Solo detente", dice, retorciéndose libremente. "Yuck. No quiero tus sucios segundos
descuidados de un abrazo.
No puedo creer lo que estoy escuchando. "¿Segundos mal Echos?"
“Sí, ve a darte una ducha, niña. Tienes al hombre sobre ti. Bruto."
Sacudo la cabeza en un intento de despejar la vergüenza. "¿Espere? ¿Qué? ¿Cómo lo
supiste, Chase?
"¿Cómo lo supe?" él repite en un tono mocoso.
"¿Si?"
Chase se ríe. “En serio, Leila, sería una mejor amiga inútil si no lo supiera. ¿Derecha?"
"Supongo que sí. Si. Por supuesto." Suspiro largo y duro. “Chase, estoy realmente
confundido. Me refiero a realmente confundido. No se que hacer. Tengo dos ofertas
diferentes de dos de los chicos más simpáticos y atractivos que he conocido ".
"¿Son comparables las ofertas?" él pide.
Pienso por un segundo y respondo: "Son prácticamente lo mismo".
"¿Y los hombres son comparables?" El sonríe. "Cariño, mataría por tener los problemas
que tienes".
Me siento en la única silla que no está cubierta de harina, ollas y sartenes. Sonrío y
asiento. El tiene razón. Chase tiene razón. "Sé que sé…"
“En serio, debes limpiarte antes de que vayamos al café. Tal vez una ducha caliente y
humeante te ayude a despejarte la cabeza.
"Tal vez."
Solo me siento allí. Calculo qué oferta me da qué y luego lo agrego a lo que cada uno de
los hombres trae a la mesa personalmente.
"Persecución…"
Se da vuelta, derramando huevos al suelo. "¿Todavía estás aquí?"
"Si. Solo desearía que hubiera una manera de separar a los chicos y sus ofertas. De esta
manera podría tomar una mejor decisión ".
Chase deja el tazón que sostiene y desliza la basura de otra silla para que pueda
sentarse. “¿Qué trato beneficia mejor al café? ¿No tú, sino el café, el negocio en sí?
"No estoy seguro."
"Bueno, ese es el que elegiría".
Asiento de nuevo. "Entiendo."
"Bueno. Ahora ve a limpiarte. Estaré listo aquí en una hora.
"Gracias, Chase".
"Vamos."
Al salir de la cocina, pienso en los tratos una vez más. Realmente no puedo elegir. Esto
es imposible. Tal vez Chase tenga razón, tal vez una ducha caliente humeante ayudará.

Capítulo 23
Leila
La multitud a la hora del almuerzo está llegando. Se perfila para ser otro gran día en la
cafetería. Chase me bromeó antes de que era hora de darle un aumento. Si las ventas
continúan así, podré darle el doble de lo que quiere.
Pongo un nuevo lote de conos rellenos de bollos cuando veo a Blake por el rabillo del
ojo. Tiene un gran ramo de rosas en la mano, probablemente tres docenas. Escucho a
Chase chillar.
"¡Para mi!" él dice. "No tenías que hacerlo".
Me acerco a la caja registradora. Blake es el siguiente en la fila.
“Me gustaría cambiar estas tres docenas de rosas por tres docenas de bollos. ¿Es un
comercio justo? bromea.
"Cariño, me tienes en-"
"¡Persecución!" Yo interrumpo. “No intercambiamos aquí. Lo siento. El jefe es un
verdadero ...
"Perra", susurra Chase. "Suena como."
"Oh, escuché que es dura", dice Blake. “Una empresaria despiadada con la que no se
puede jugar. Simplemente espero que este regalo rompa su fachada helada ".
"Oh, creo que lo hará", le digo con una pequeña sonrisa.
"Sé que estoy todo caliente ahora", agrega Chase mientras se aleja.
Blake me entrega las flores y luego se inclina para besarme. Le doy mi mejilla. Presiona
sus labios y yo me sonrojo. Por mucho que quisiera un beso, no sería profesional
besarlo en los labios frente a todos los que están aquí en mi tienda.
"Chase, ¿crees que podría robar a Leila por el día?"
"¿De Verdad?" Chase dice, cruzando los brazos.
"¿Te importa? Apuesto a que no ha tenido un día libre en semanas.
"Sí ..." Chase gime. "Semanas…"
"¿Persecución?" Pregunto.
Chase despliega sus brazos y sonríe. "¡Vamos! Vayan a divertirse, niños locos. Pero me
quedo con el cien por ciento de los consejos de hoy ... y ayer ... "
"¡Gracias, Chase!"
"Sí, gracias, Chase". Blake toma la mano de Chase en un firme apretón.
Aunque estaba cansado hace una hora, estoy completamente revitalizado y listo para
partir ahora. "Déjame guardar mi delantal y obtener mi bolso y chaqueta".
"Tome su tiempo."
Me lanzo a la parte de atrás. No puedo creer mi suerte. Dos días. Dos hombres. Dos
descansos del trabajo. Me estoy echando a perder.
Me apresuro a regresar al café y tomo a Blake del brazo que me ofrece.
"¿Debemos?" él pide.
Yo sonrío. "Deberíamos."
Justo cuando estamos a punto de llegar a la puerta, Seth entra, cargando otro lote de sus
exóticas flores silvestres. Veo sus ojos entrecerrarse al ver a Blake. Sin embargo, estoy
seguro de que no habrá una pelea. Los hice resolver su competencia sobre mí hace días.
Aún así, estoy al borde.
Por si acaso.
Seth camina directamente hacia nosotros. Oigo a Chase acercándose por detrás.
"Hola, Seth".
"Leila".
Me da sus flores, pero ya tengo a Blake en la mano. Por suerte para mí, Chase es rápido.
"Déjame tener esos", dice Chase y los arrebata. “Animarán la encimera por aquí. Todos
los amarán ".
"Gracias, Chase". Asiento a Chase.
Él sonríe de oreja a oreja. Él ama este drama. Estoy seguro de que lo escucharé más
tarde.
Cuando me enfrento a Seth de nuevo, puedo ver que él y Blake están mirando a los
ojos. Tiré del brazo de Blake para que se moviera, pero no se movió.
Oh, mierda. Aquí vamos…

Capítulo 24
Blake
Verlo ha quitado los vientos de mi vela. Fuera de mi zona de confort, estoy un poco
desconcertado. ¿Por qué el pinchazo sigue apareciendo cuando no está invitado?
No quiero tener que competir por la atención de Leila con él. Quiero poseerla, follarla
yo misma y poseerla. Quiero todo de ella, y no estoy interesado en compartir.
"McDaniels", le digo con los dientes apretados y quiero golpear al cabrón teñido de
naranja en la cara, lo que dice mucho ya que no soy del tipo violento.
Me sonríe. Hace que se me ponga la piel de gallina. ¿Cómo podría olvidarme de él?
Estaba disfrutando tanto de la compañía de Leila que me olvidé por completo del
pinchazo. Suspiro por dentro.
"Jacobs", Seth le devuelve el saludo y mantiene las manos en los bolsillos de sus
pantalones.
Rechino los dientes. No puedo soportarlo cuando hace esto.
Una cosa es que él se precipite en un negocio y me lo arrebata, como lo ha hecho en el
pasado. Es otro entrar y reclamar a mi diosa.
He pasado un tiempo increíble con ella, sin la tercera rueda del carro llamada Seth. ¿Por
qué no puede ir y molestar a alguien más?
"Hola, Seth". Leila en realidad se acerca a él y le da un beso. Por supuesto, Seth le
devuelve el beso. Mi temperatura sube varios grados.
Parece que Seth estará cerca por un tiempo. Cuando Leila nos pidió el otro día enterrar
nuestras hachas, pensé que no duraría mucho. Seguramente, ella no hablaba en serio
sobre salir con los dos.
Parado aquí junto a ella en este momento, tengo la sensación de que ambos significamos
algo para ella. Parece un poco surrealista estar con una mujer que quiere tener dos tipos
al mismo tiempo.
Seth la libera. Él debe haber dicho algo gracioso porque ella se ríe y se sonroja al mismo
tiempo.
Necesito recuperar algo de control. Seth no puede simplemente valsar aquí, arrojar su
peso y pensar que es el dueño de la articulación o ella.
"Si vamos a hacer el almuerzo, cariño, será mejor que nos vayamos", digo tan
suavemente como puedo y le rodeo la cintura con el brazo. Al mismo tiempo, doy unos
pasos hacia la puerta principal.
Desafortunadamente, Leila se pone rígida en mi agarre y siento su renuencia. Rechino
los dientes. ¿Ahora que?
Si nos hubiéramos ido hace diez minutos, no nos habríamos topado con Seth. Parte de
mi ego no se ha recuperado del último negocio que me arrebató.
Estaba tan cerca de cerrar el trato.
¿Y qué debería pasar? Seth, eso es lo que.
Leila frena su paso. Lucho con mi ser interior.
"¿Te importa si voy?"
Sus palabras son como una daga puntiaguda que me atraviesa.
Leila, por otro lado, se detiene y se da vuelta para mirarlo.
"¿Podrías?"
Por supuesto, Seth asiente.
"Eso sería encantador". Ella es todo sonrisas.
Me rompe el corazón verla tan eufórica.
"¿Estás bien, viejo amigo?"
Incapaz de hablar, solo asentí. El chico no lo entiende. Él interrumpe mi tiempo con
Leila.
¿No fue suficiente que me sacara de un negocio de un millón de dólares el año
pasado? ¿Por qué no puede simplemente irse y encontrar a otra chica caliente para follar
y luego dejarme esta?
"Excelente." Seth sonríe y nos indica que sigamos caminando.
Los enormes ojos de Leila me miran. Ella sabe cómo presionar mis botones. Forzo una
sonrisa en mi rostro y espero que se vea genuina.
Cuando la escucho respirar aliviado, sé que lo he logrado. Mentalmente, pateo a Seth en
las espinillas. Una cosa era ser rivales de negocios; era completamente diferente ser
rivales sobre esta exquisita criatura en mi brazo.
Nada de eso significa que me rendiré sin luchar. A la mierda con él. A la mierda con
todos ellos. Leila pudo haber hablado hoy, pero mañana es otro día.
Mientras caminamos para salir del café, siento su presencia, y siento a Leila contra
mí. Sus suaves curvas se derriten en mi cuerpo. Somos un ajuste perfecto.
Mi mente está trabajando horas extras. ¿Cómo diablos puedo deshacerme de Seth? Debe
haber una forma.
Leila saluda a Chase cuando salimos del café. Al menos él tampoco es un rival.
Seth pregunta: "¿Trajiste un auto?"
No estoy seguro de si me está tomando el pelo. Apunto al otro lado de la carretera hacia
la limusina negra. La sonrisa de Leila se ensancha.
"Wow", murmura, y estoy contenta de que sea yo quien proporcione el modo de
transporte hoy. Deja que Seth te acompañe.
Una vez que estamos en la limusina, abro la puerta y ayudo a Leila a subir al vehículo
de lujo. En el proceso, mi mano descansa brevemente sobre su trasero antes de
liberarla. Ella me sonríe y se sienta en el cuero blanco. Rápidamente, entro tras ella y
cierro la puerta. Un sentimiento satisfactorio me invade. Fui más astuto que el pinchazo.
El plan es simple, y ahí es donde reside su genio: en su simplicidad.
Los ojos de Leila se ensanchan, la forma en que los ojos de un ciervo se ensanchan
cuando los brillantes faros brillan directamente hacia ellos. Incluso podría haber
lágrimas brotando de ellos. Su dolor es genuino.
De repente, me siento como un pinchazo sin corazón y con un suspiro abro la puerta de
nuevo. Brevemente, me pregunto si se fue; pero para mi consternación, él está parado
exactamente donde estaba antes de que le cerrara la puerta en la cara.
Sus ojos dicen mucho. Chispas están saliendo de ellos.
«Jódete», dicen. Estoy seguro de ello.
Le sonrío y extiendo mi mano. Mis propios ojos dicen 'Sé genial, hermano, ¿no puedes
tomar una broma?'
"Lo siento, Seth", le digo y lo ayudo a entrar. "Solo una pequeña broma entre viejos
colegas".
No lo está comprando, y puedo ver la recuperación de la deuda escrita en toda su cara.
Mejor me cuido la espalda.

Capítulo 25
Seth
Estoy un poco sorprendido cuando la limusina se detiene frente al aeropuerto privado de
la ciudad. Blake se encoge de hombros.
"Sorpresa."
Todos caminamos hacia el último juguete de Blake, un jet privado. Parece que tendré
que criar mi propio juego para seguir el ritmo.
Los ojos de Leila son más grandes que los platillos cuando se acerca al avión que
espera.
En el interior tiene aire acondicionado y nos conducen a la suite privada con sillones de
gran tamaño. Hay tantos botones para controlar las cosas, que es difícil incluso resolver
los controles básicos.
Un hombre de mediana edad en uniforme nos ofrece una bandeja de bebidas.
Leila se ríe.
"Por lo general, no tengo alcohol a esta hora del día".
Asiento entendiendo. El mundo de los negocios es un mundo diferente.
"Salud." Blake levanta su vaso. Puedo ver las burbujas bailar e intentar rebotar en su
área confinada.
"Saludos", repite Leila, y me uno.
Sin preguntar, Leila elige el asiento en el medio, lo que significa que tenemos que
sentarnos a cada lado de ella. Blake hace una mueca.
Tengo la clara impresión de que esta chica sabe lo que quiere, y parece que nos quiere a
los dos. Me pregunto si Blakey Boy podrá compartir.
Leila es como una niña pequeña en la tienda de juguetes, y trata todas las diferentes
posiciones de su asiento. Cuando se desliza hacia atrás, me da una sonrisa malvada.
"¿No quieres saber las diferentes posiciones?"
Joder, ella es un pequeño demonio.
"Seguro hazlo." Sonrío y la miro. Mis ojos están fijos en el punto entre su pecho. Puedo
ver un poquito de carne. Su blusa está desabrochada un poco más de lo habitual, y me
deleito con lo que es visible para mis ojos.
Me imagino abriéndole la camisa y abriéndose los botones en todas direcciones antes de
que mis labios se apoderen de sus pezones.
Su mano se desliza a lo largo de mi pierna. Ella mira mi reacción.
"Se siente bien en esta posición", ronronea.
Jodida puta. Su otra mano está en la pierna de Blake. Tiene los ojos cerrados. Estoy
jugando con dejar que mis propios dedos se suelten para vagar cuando el host de aire
está de regreso.
Leila deja sus manos donde están.
"¿Otra bebida para alguien?"
"Scotch on the rocks", croé, y Blake levanta la mano.
"Haz eso dos".
"Voy a tener otro de estos". Leila levanta su mano de la pierna de Blake y las manos
sobre su vaso vacío.
Para cuando aterricemos, estoy jodidamente listo para follarla. Ella también tiene calor
y Blake tendrá masilla en sus manos.
Cualquier reserva que tenía sobre la locura del jet privado se ha ido. Qué idea tan
jodidamente fantástica había sido de Blake. Nunca me había divertido tanto en un vuelo
antes.
Un taxi nos lleva a The Royale, un resort de lujo de cinco estrellas en las
Bahamas. Tengo que dárselo a Blake. Cuando decide impresionar, realmente
impresiona. Por supuesto, fue una gran excusa para usar su nuevo juguete.
"Un gusto verlo, Sr. Robertson", saluda el asistente detrás del mostrador a Blake. Leila
está parada a mi lado. Puedo sentir su emoción mientras respira rápido y
superficial. Apostaría mi fortuna a que nunca ha tenido una cita tan emocionante para
almorzar como esta.
No estoy muy seguro de cuál es la conversación entre Blake y el hotelero, pero estoy
empezando a preocuparme. ¿Estaba Blake tratando de meterme en otra habitación? Si
fuera yo, lo haría.
Justo cuando estoy a punto de decir algo, Blake se vuelve hacia nosotros.
"Reservé la suite presidencial y me dijeron que no hay otra habitación aquí para que la
tomemos".
Nos da unos segundos antes de agregar el golpe asesino.
"Parece que tendrás que quedarte en otro lado".
Antes de que pueda decir algo adecuadamente insultante, Leila habla.
“Una suite presidencial me suena como un departamento de hotel muy grande. Estoy
seguro de que todos podemos compartirlo ".
Emociones mezcladas destellan en el hermoso rostro de Blake. Pobre bastardo. Sé lo
que preferiría estar pasando.
"Por supuesto que compartiremos", dice, recuperándose rápidamente. "Ahora, ¿por qué
no pensé en eso como una solución?" Todas sonrisas, se vuelve hacia el hombre detrás
de la recepción.
Porque eres un bastardo y no quieres compartir, creo, pero mantengo la boca cerrada.
Con jodidamente excelente espíritu, me dirijo al ascensor. Mi brazo derecho envuelve a
Leila de una manera ligeramente posesiva. Instintivamente, ella se acurruca en mí.
Quiero follarla ahora. Lanzo una mirada en dirección a Blake, cuya expresión es difícil
de distinguir. ¿Está tan desesperado como yo? ¿Podríamos saltearnos el almuerzo e ir
directamente de postre?
En el primer nivel, salimos y nos recibe otro miembro del personal. Nos acompañan a lo
largo de una larga pasarela. Nos arrastramos por un paseo marítimo de madera y
salimos a una terraza. Aquí, nuestro guía nos conduce por unas escaleras de nuevo hacia
una choza nipa.
Tiempos de Leila, en emoción creo.
Ante nosotros se encuentra una de las cabañas nipa más exóticas y caras que he visto. A
medida que avanzamos, veo una pequeña piscina en el nivel inferior y una lujosa zona
de descanso en el nivel superior.
Leila se aleja de mí y salta a la piscina y sumerge su dedo del pie. Su expresión es pura
delicia. Echo un vistazo a Blake, que sonríe con aire de suficiencia. Se siente como el
ganador. Pero bueno, todavía estoy aquí, todavía no se deshizo de mí.
"¿Listo para comer?" Blake se encuentra al pie de las escaleras.
"Esto es hermoso", chilla Leila y viene hacia nosotros.
Arriba nos enfrentamos con una mesa redonda de madera elaboradamente tallada. Saco
una silla y Leila se sienta. Prácticamente escucho los dientes de Blake rechinar de
frustración.
Me siento a su derecha y Blake a su izquierda.
"Usted ordena". Leila se vuelve hacia Blake y le golpea los párpados.
Blake apenas mira el menú antes de ordenar.
Me siento y me relajo. Mi mano izquierda descansa sobre el hombro de Leila y juega
con mechones sueltos de su cabello. Ella deja que su mano descanse sobre mi muslo.
La vida es buena, la vida es jodidamente perfecta en este momento.

Capítulo 26
Leila
"¡Bueno! ¡Esto tiene que parar! Les grito a los dos. He tenido suficiente. "¡Ahora
mismo!"
"Leila", comienza Blake.
"Las Bahamas. El Real. Este, este hermoso lugar. Solo estoy sentado a cenar,
Blake. ¡¿Alguno de ustedes cree que este es el momento o el lugar para actuar como un
par de recién casados luchadores ?!
"Bueno, apuesto a que muchos recién casados están aquí ahora y ..."
"¡Cállate, Seth!"
Los miro a los dos. Me veo duro Estoy tan jodidamente frustrado. No puedo creer que
alguna vez pensé que una relación de ningún tipo funcionaría con rivales tan
amargos. ¿Qué estaba pensando?
Respiro hondo y me siento. "Ya sabes, para un par de hombres varoniles, realmente no
eres mucho más que un par de niños mimados".
"Leila, yo-"
“No quiero escucharlo. Puede o no darse cuenta de esto, pero sé lo que ambos
quieren. Sé que están compitiendo por mi receta. Y ninguno de ustedes lo
conseguirá. Nunca lo conseguiré.
Blake se sienta a mi derecha e inmediatamente toma mi mano. “Lo has entendido todo
mal; bueno, al menos me has entendido mal.
Seth se sienta a mi izquierda y toma mi otra mano. “No me importa tu estúpida
receta. Solo me importas tu."
"No estamos peleando por las palabras garabateadas en una tarjeta de tres por cinco",
dice Blake con dulzura. “Estamos peleando por ti. Tú, Leila.
"Sí, tú, Leila", Seth está de acuerdo con Blake. "A la mierda la maldita receta".
Escucho sus palabras Hacen que mi estómago se revuelva y mi carne se convierta en
fuego. Estoy seguro de que me sonrojo cuando finalmente hablo.
“Deberías saber, aún no me he decidido. Todavía tengo mucho en qué pensar. Ni
siquiera puedo decir cuándo lo sabré.
"Entonces comamos", sugiere Blake, aligerando el estado de ánimo. "Este es uno de mis
lugares favoritos en la isla".
"Mío también." Seth asiente. Buena idea, Blake. Estoy hambriento."
"¿Has comido el cangrejo aquí antes, Seth?" Blake pregunta civilmente.
"Yo tengo. Jodidamente bueno."
"Jodidamente bueno." Blake sonríe. "Creo que tendré un poco esta noche".
“Puedo unirme a ti. No te importa que te copie, ¿verdad, viejo amigo?
“Lo he estado haciendo durante años, ¿por qué debería empezar a preocuparme
ahora? ¿Derecha?"
Los muchachos se ríen. Se me ocurre. Si los mantengo hablando, parece menos
probable que peleen. Tal vez queda algo de esperanza después de todo. Quizás pueda
tener todo lo que quiera.
"¿Hay algo más que ustedes dos sugieran aquí?" Pregunto.
"La langosta de roca", dice Blake casualmente, sonando como si esperara que Seth
estuviera de acuerdo.
"El souse", declara Seth. "Fantástico aquí".
“¿El souse? ¿Seriamente?" Blake niega con la cabeza.
"Chicos ..." Digo, mi voz se eleva lo suficiente como para demostrar mi
punto. "Ordenemos."
Comemos como si estuviéramos muertos de hambre. No sé lo que nos pasa. Disfruto de
una orgía culinaria y me encanta. Pruebo las comidas de Blake y Seth, ambas
variaciones de cangrejo al horno. Les digo que me gustan por igual, incluso cuando sé
qué comida es claramente mejor. Solo desearía poder elegir a qué hombre con la misma
facilidad.
El desierto es igual de bueno. Una crema brûlée que hace que mis dedos se doblen. Mi
goloso encuentra satisfacción total. Los chicos se mantienen civilizados y las cosas
comienzan a sentirse tranquilas y agradables nuevamente. Me relajé con otra copa de
vino mientras miraba los músculos de Blake y las grandes manos de Seth. Los quiero a
los dos.
Los quiero a los dos ahora.
"Voy a tener que correr una milla extra mañana", dice Blakes. "Tal vez dos".
Seth asiente. “Estaré allí contigo, viejo. Estoy lleno."
"¿No demasiado relleno, espero?"
Coloco mis palmas sobre los hombros de ambos hombres y dejo que mis manos corran
por sus musculosas espaldas. Cuando en sus cinturas, acaricio sus vueltas y paso mis
dedos sobre cada una de sus pollas.
“¿Por qué no vamos todos arriba? Imagina toda la diversión que podemos tener en
nuestra suite ".
"Gran idea."
"Estoy totalmente de acuerdo."
"Perfecto", le digo con una sonrisa.
No estoy en llamas Soy fuego y me estoy quemando de pies a cabeza.
¿Pueden extinguir mis llamas? ¿O prenderlos aún más calientes?
Supongo que tendré que averiguarlo.

Capítulo 27
Leila
Cuando llegamos a la habitación, empiezo a reírme. La anticipación me está matando.
Blake recupera la llave de la habitación de su bolsillo y la muestra a Seth y a mí, como
si fuera una tarjeta de crédito de platino. Lo agita un poco y luego lo desliza.
En el momento en que la luz roja en la puerta se vuelve verde, Seth la abre con su
propio gran gesto. Sonrío y pienso: trabajan muy bien juntos cuando su objetivo es
complacerme.
"Qué hermoso par de mayordomos hacen ustedes dos".
"Después de usted, señora", dice Blake.
"Muy bien, señora", juega Seth.
Entro en la habitación y enciendo las luces. Casi olvido lo grande que es.
Decorado finamente en un tema tropical, el espacio es fácilmente tres veces el tamaño
de mi apartamento, tal vez incluso más grande que la casa entera de mis padres. No
puedo decirlo Tiene tantas habitaciones y salen disparadas en todas las direcciones.
Una persona podría perderse aquí.
"¿Cuántas habitaciones hay aquí?" Pregunto, incapaz de ocultar mi curiosidad.
Blake parece que está contando en su cabeza. “¿Dormitorios o habitaciones en
general?”
"Sorpréndeme."
"Cuatro habitaciones y diez, no, doce habitaciones en total", responde.
"Cada habitación tiene su propio baño privado", agrega Seth.
"Asombroso." Sacudo la cabeza
Blake toma mi mano y me muestra una de sus encantadoras sonrisas. "Hay más. De
hecho, hay una sorpresa para ti en tu habitación.
"¿Un cachorro?" Bromeo, a lo que ambos se ríen.
"Ven, déjame ― nosotros ― mostrarte".
Camino de la mano con Blake, siguiendo a Seth, a mi habitación en la suite
presidencial. Cuando entramos, Seth enciende la luz y mis ojos dan la bienvenida a una
vista como nunca antes la había visto.
Al otro lado de mi cama tamaño queen hay una docena o más de mini y maxi vestidos
de diseñador. También hay al menos la misma cantidad de bikinis y trajes de baño en
una colección de colores brillantes. A los pies de la cama, cuento no menos de dos
docenas de alpargatas.
Chase moriría, creo.
"¿Son para mí?" Pregunto.
"Sí", responde Blake.
Me giro y miro a Blake y Seth. "¿Todos ellos?"
"Si." Dice Seth.
"¿Mantener?" Apenas puedo contenerme. "¿De verdad?"
Ellos ríen.
"Vas a necesitar un avión más grande para volar todo esto de vuelta", bromeo, para
calmar mis nervios.
“Solo un pequeño regalo. Espero que lo disfrutes."
"Elegí los zapatos", dice Seth con un gesto orgulloso. "Las mujeres necesitan buenos
zapatos".
"Gracias. Gracias a los dos."
"Bueno ..." Blake saluda a la pila, indicando que debería comenzar.
Debe haber sabido que me estaba muriendo por sumergirme en la pila de ropa. "Oh,
Dios mío, no puedo esperar para probarlos".
"Disfrutar."
Tomo un traje de baño y de repente quiero ir a nadar. “Ustedes vayan a cambiarse a sus
trajes. Quiero ponerme uno de estos y mojarme ”.
"Suena como un plan perfecto", Seth se ríe con un brillo en sus ojos.
"Sabes a lo que me refiero."
"Vamos, amigo", dice Seth, aplaudiendo con la mano en la espalda de Blake, que me
está mirando de una manera que me hace querer arrodillarme y devorar su polla que
puedo ver tensándose contra sus pantalones.
"Sí claro. Bueno."
Los chicos se van y yo cierro la puerta detrás de ellos. Bueno. Quiero probar algunos de
estos y quiero asegurarme de que luzco lo mejor posible antes de que me vean.
Mi primera elección: una camiseta sin mangas negra. Me aprieto en él. Hace
exactamente lo que espero: muestra mi ... ¿cómo debo describirlos?
Ah sí, mis pechos generosos. Yo me río.
Ajustando las copas, incluso las balanceo hacia arriba y hacia abajo. Si este top no hace
que los chicos sean duros, no sé qué lo hará.
Entonces pienso, espera, sé lo que hará. Recojo un fondo de corte
brasileño. Normalmente, no me atrevería a usar algo tan pequeño, no con mi culo
curvilíneo. Sin embargo, esta noche, esta noche quiero ser exactamente lo que quieren
los jóvenes cachondos: tetas y culo.
Me meto en el fondo y los levanto. Apenas existen.
Perfecto.
Considero no mirarme en el espejo. Quizás no quiero saberlo. Quizás sea mejor no
mirar.
Pero lo hago. Todavía miro.
"Maldición ..." digo en voz alta. "Luciendo así, maldita sea, me cogería".
"¿Cómo te va allí?" Blake llama desde la sala principal.
"Lo estoy haciendo bien", le devuelvo la llamada. "¡Gracias!"
Saco mi túnica de crochet de malla blanca de mi maleta. Estoy tan contento de haberlo
traído. Me lo pongo. Me cubre ... pero, ¿de verdad?
Mis senos se están derramando, y mi trasero, en todo su esplendor, está
explotando. Aún así, usar la túnica me hace sentir un poco más preparado para abrir la
puerta.
"Está bien, estoy listo".
Abro la puerta de mi habitación y encuentro a Blake y Seth esperándome. La visión de
ellos, en topless en sus pantalones cortos, me quita el aliento.
"Joder", jadeo ligeramente.
Parece que están pensando exactamente lo mismo.
"Leila, te ves excepcional".
"Un verdadero ángel nos da la bienvenida, Blake".
Siento que me estoy mojando ya. Mi sed crece. Mi hambre continúa.
Quiero abordarlos a ambos en el acto. Quiero que llenen todos mis agujeros. Pero no
digo nada; Me detengo y dejo que mi fuego se convierta en un verdadero infierno
furioso.
"¿Estás lista para ir a la playa, hermosa?" Seth pregunta.
Blake se acerca y extiende su mano. "Ella se ve lista para mí, Seth".
Yo sonrío. "Oh, estoy listo".

Capítulo 28
Blake
Lucho con mi ser interior. Maldito bastardo está arruinando la escapada perfecta que
organicé solo para Leila.
Mierda. Mierda. Mierda.
Ya es bastante malo que el pequeño hijo de puta estuviera vivo, y ahora está aquí.
"Tenemos tres motos de agua disponibles para usted, Sr. Robertson".
Forzo una sonrisa en mi cara. Asiento con la cabeza. Tres motos de agua es.
Juro un poco más por lo bajo y apenas escucho nada de lo que me dice el tío a cargo del
alquiler.
Tengo muchas ganas de mostrarle a Leila mi cala secreta en la isla, y la única forma de
hacerlo rápido es ir en moto acuática. Si el puto Seth no hubiera aparecido, habría
llevado a Leila a la parte trasera de mi moto de agua.
Por la forma en que Leila adora el suelo sobre el que camina Seth, dudo que comparta
un esquí conmigo. Si solo consigo dos esquís, ella podría compartir con Seth.
Joder, lo juro de nuevo. Esto realmente me irrita los nervios.
Mientras me alejo, todavía tengo la tentación de regresar y cambiar mi alquiler a dos
motos de agua. ¿Hay algo malo en llevarla en mi moto acuática?
Siempre podría insistir en que venga conmigo. Mis vacaciones, mi decisión. Si el
pinchazo no hubiera aparecido
Descarto mis pensamientos. No hay punto de mierda.
Blake, me digo, relájate y aprende a compartir.
"Entonces", me acerco a Leila y Seth, que están esperando al borde del agua, "tres
motos acuáticas nos llevarán al paraíso".
"No lo sé." Seth le guiña un ojo a Leila "Creo que ya he llegado al paraíso".
Lechón viscoso, pienso para mí mismo. Leila, por supuesto, se ríe e incluso se sonroja
un poco.
Gracias a la mierda llegan los esquís de surf, y me he ahorrado una respuesta.
"Hoy, te llevaré a un lugar especial". Abordo mi esquí para no tener que escuchar otro
comentario inteligente de Seth. Maldito bastardo.
Volamos a través del agua. Por un tiempo, solo disfruto de la fresca corriente de agua
que salpica suavemente en mi cara.
Jodidamente fantástico. Es tan bueno que olvido brevemente que somos tres en lugar de
dos.
A medida que nos acercamos a una parte rocosa de la isla, disminuyo la velocidad. No
queda mucho más por recorrer.
Conozco este lugar como el dorso de mi mano. Muchos recuerdos felices fueron creados
aquí mientras crecía.
Leila mira las dos rocas con un hueco en el medio.
"Mira el color del agua", dice, un poco sin aliento. "Nunca había visto una mezcla tan
sorprendente de azul y turquesa".
Mi corazón late un poco más rápido en mi pecho. Lo he hecho bien. La puta tercera
rueda que nos acompaña no ha arruinado totalmente mi sorpresa perfecta.
Leila está disfrutando cada minuto.
Estoy a punto de sugerir que dejemos las motos acuáticas para nadar hasta la orilla
cuando escuche un chapoteo. Solo veo la parte posterior de las piernas sexy de Leila
desaparecer en el agua. Segundos después, ella resurge.
Sus cerraduras ahora están mojadas, y ella les sacude el agua.
"Hey", grita ella. "¿Qué están esperando ustedes dos caracoles?"
No para ser superado por Seth, salto. Desafortunadamente, él me ha derrotado. Me meto
en el estilo libre y los alcanzo rápidamente.
"Mira este lugar". Leila está totalmente asombrada de la caverna en la que ha nadado.
"Espera hasta que nades en tierra", le digo, y lanza miradas venenosas en dirección a
Seth. Parece no darse cuenta. "La arena es muy fina y la serenidad increíble".
Leila ladea la cabeza un poco hacia la izquierda.
"Bueno, ¿qué estamos esperando?"
Con el desafío hecho, ella despega. Estoy a punto de hacer lo mismo, como Seth.
"Hey", le grito. ¿Por qué no agarras el maldito refrigerador? Está en tu moto de
agua. Hazte útil.
Si esperaba una reprimenda de algún tipo, no vendrá. Sin decir una palabra, Seth nada
de regreso al esquí. Se ve relajado, a gusto con el mundo.
Joder, lo odio.
No me atrevo.
Llego a la playa mientras Leila se sienta en la arena. La veo recoger puñados de arena y
luego dejarlos escapar de nuevo.
"Esto es perfecto."
La playa en la que estamos está en una caverna, y hay un poco de luz que entra por una
ruptura en la roca de arriba. Los rayos dorados de la luz del sol serpentean a lo largo de
la arena.
Leila me mira. Le devuelvo la sonrisa.
Mi polla se queja. Quiere acción Tranquilo, amigo, le susurro. No puedo hacerlo aquí y
ahora. Seth está a punto de unirse a nosotros.
"Hola, hombre", dice Seth en señal, y mi interior se retuerce. La ira brota dentro de mí.
Quiero golpear al bastardo.
Estoy plagado de pensamientos negativos. Hay muchas maneras diferentes en las que
me gustaría lastimar a Seth.
Brevemente, creo que sería bueno que viniera un tiburón y se lo comiera. Aunque Leila
podría estar un poco molesta.
Leila
Mierda. A ella le gusta él. A ella le caen bien los dos.
Despacio, muy despacio, me pregunto qué pasará si ella no elige.
"¿Quieres una cerveza?"
Me giro para mirar a Seth.
La ira se convierte en admiración, por un segundo o dos. Seth no se ha quejado ni ha
dicho nada negativo cuando le ladré para que enfriara. Y aquí está, ofreciéndome una
cerveza fría.
Me desplomo en el suelo y en la arena cálida.
"Gracias", murmuro y abro mi lata. Tomo un gran trago del líquido frío. Cierro los ojos
y saboreo el momento. Joder, hombre, cambia tu actitud, pienso para mí mismo.
Abro los ojos de nuevo y veo a Seth mirar a Leila.
Se ha quitado la parte superior del bikini para revelar sus senos turgentes y sus pezones
duros. Echa la cabeza hacia atrás y se apoya en los brazos.
La polla de Seth está tan erguida como alguna vez lo estará, y al ver a la pequeña zorra,
mi polla también se destaca.
Leila se ríe. Se gira hacia Seth y se lame los labios.
Casi me ahogo con mi cerveza.

Capítulo 29
Seth
Jodida puta es solo una burla. Justo cuando Blake y yo nos metemos en eso, ella salta y
corre hacia el agua. Allí ella chilla cuando sus pies salpican agua sobre su propio
cuerpo. Ella gira y gira, y nos dejan mirar con las mandíbulas en el suelo.
Sacudo la cabeza y tomo otra cerveza. Estoy tentado a poner la lata en mi polla para
enfriarlo, pero no lo hago.
Blake se ve tan conmocionado como yo. Puedo ver su polla abultada
Ambos miramos a Leila flotar en el borde del agua para volver a ponerse la parte
superior antes de sumergirse en el agua azul como la tinta.
Ella salpica, patea y gira en el agua. Nuestra diosa nos está llevando por mal camino.
"¿Estás renunciando al hombre?" Me vuelvo hacia Blake.
Él ríe. Su pie izquierdo juega en la arena.
"Tienes que estar bromeando".
Yo debería haber sabido. Blake era muchas cosas, pero no se daba por vencido. Es mi
turno de sonreír. El partido está encendido. Es posible que nos hayamos retirado
brevemente a nuestros rincones, pero ahora estamos de vuelta, bailando, ligeros y
ágiles. Que gane el mejor.
Me mira y también toma otra cerveza.
Miro a Leila. Como una niña pequeña, está jugando en el agua. De vez en cuando,
estalla a través de la superficie haciendo que su pecho se mueva hacia arriba y hacia
abajo.
Un par de veces se le cae la parte superior. Por lo que a mí respecta, ella podría dejarlo,
y su trasero también. Me gusta el aspecto de su trasero.
"¿Estás renunciando?"
Sacudo la cabeza Vete a la mierda, hombre. Estoy empezando a calentar.
"Al igual que tú, ¿no?", Comienza Blake y se acerca un poco más. "Siempre tienes que
estar en mi cara de mierda".
Finjo que no tengo idea de lo que está hablando.
"¿Qué quieres decir?"
Blake me da una palmada en la espalda.
“Joder, hombre. Siempre estas ahi. Hueles un buen negocio a una milla de distancia. La
nariz de un sabueso podría aprender de ti.
Los dos nos reímos.
"Puedes hablar." Sacudo la cabeza “No estás mejor. Giro a la izquierda y tú estás allí,
giro a la derecha y estás allí. Todas mis ofertas nunca son seguras porque eres el gato
merodeador ".
"Ay." Blake hace una mueca. "Eso no es muy agradable. Gato."
“Nadie dijo que iba a ser amable. ¿Y cuándo has sido bueno Blake
Robertson? Imagínese pisoteando mi territorio planeando un viaje sorpresa a las
Bahamas para Leila. Hombre, realmente trabajas horas extras para este ".
Blake sonríe.
"Necesitas mejorar tu juego, Seth, si quieres echar un vistazo. Creo que podría tener su
gancho, línea y plomada".
"Vete a la mierda", murmuro.
Por un tiempo nos sentamos en silencio.
"Gracias por prestarme algo de tu ropa", le digo y trato de sonar genuino. Había sido
amable de su parte.
"Ya era hora de que usaras algo de ropa decente, hombre, y no esas bufandas y esa
mierda mamby".
A la mierda con él. No respondo
“¿Cuándo vas a hacer tu movimiento? Parece que estás jugando el segundo violín.
Blake me está acosando. Lanzó el anzuelo y estoy listo para tomarlo. De hecho, me lo
trago entero.
“Joder, hombre. Esperas mi próximo movimiento. Su sorpresa se convertirá en
insignificancia. Ni siquiera sabrás lo que pasó. Y con un poco de suerte, no estarás cerca
cuando suceda ".
"Es lo que pensaba. ¿Y mira quién ha venido?
Me recuesto en la arena, con los ojos fijos en Leila.
"¿Recuerdas a Patrice?"
Blake echa la cabeza hacia atrás.
¿Me acuerdo de Patrice? ¿Eres de verdad jodido? Ahora había una zorra.
Por unos segundos no decimos nada. No sé sobre Blake, pero estoy pensando en
Patrice. De tetas grandes, rubia Patrice. Patrice, cuyo coño era tan jodidamente jugoso y
caliente, podría follarla todo el día. ¿Están los pensamientos de Blake en la misma
línea?
"Los dos la perseguíamos, ¿recuerdas?"
Blake asiente. Su expresión soñadora confirma dónde están sus pensamientos en este
momento.
"La querías mucho y yo la quería aún más", le digo y sonrío. Ambos habíamos sido
mucho más jóvenes entonces. Puedo recordarnos a los dos haciendo cosas tontas para
impresionarla.
La había llevado con el Porsche que conducía en un viaje por carretera. Blake, por otro
lado, la había llevado a una isla tropical. Supongo que la actuación pasada de Blake
debería haber sido una advertencia para mí.
Necesitaré mejorar mi juego.
"Ella me eligió", le digo después de una larga pausa.
Blake niega con la cabeza.
"Pero te engañé conmigo". Señala su pecho. Los dos nos echamos a reír.
"Ella valió la pena", suspiré.
Me pregunto qué le pasó a Patrice. La conocimos en nuestros días uni. Ella estaba
haciendo artes. Probablemente felizmente casado con hijos por ahora.
"¿Sabes lo que le pasó a ella?" Blake pregunta y sacudo la cabeza.
"No puedo creer que lo volvamos a hacer", dice Blake y aparto brevemente mis ojos de
Leila.
La luz que entra por la grieta atrapa fragmentos de su cuerpo mientras salta por el
agua. Ella se ve tan perfecta. Tan jodidamente caliente y perfecto.
“La pregunta es, amigo mío”, empiezo y lo miro, “¿estás preparado para el desafío sin
ningún truco sucio? O ... Dejo la segunda pregunta pendiente. Y mis ojos vuelven a
encontrar a Leila.
Desearía que ella se quitara la blusa como antes. Me encanta ver cómo sus pechos se
mueven hacia arriba y hacia abajo e imaginar lo que mis manos y labios les harán más
tarde.
Joder, ella es tan buena. Mi polla está a punto de explotar en mis bañistas.
Me pregunto cómo le va a Blake. Le tiro una mirada de reojo. Parece estar molestando
mi pregunta. El conflicto está escrito en toda su cara.
"Hombre", comienza y se detiene. Ambas manos rastrillan su cabello. Pobre bastardo no
está haciendo frente.
Vuelvo a mirar a Leila.
Prácticamente babeo mientras ella sale del agua y camina hacia nosotros. Hay un
propósito en su paso.
¿Seremos recompensados los dos por nuestra paciencia?
Jodidamente espero que sí.

Capítulo 30
Leila
Pateo y retozo en el agua salada como un niño. No recuerdo la última vez que estuve en
el océano. Mi piel se eriza cuando el sol seca el agua salada.
Este lugar es magnífico. Hay una gama de azules y turquesas reflejados en la luz del
sol. El color es tan hermoso que me hace desear poder pintar. ¿Qué tan maravilloso
sería sentarse y pintar este exquisito paisaje?
Mis ojos buscan en la playa.
Puedo ver a Blake y Seth sentados uno al lado del otro en el sol. Tomaron la
provocación bien antes. Estaba probando el agua un poco antes para ver hasta dónde
puedo empujar el sobre.
Había habido un poco de tensión entre ellos durante el viaje, la competitividad entre
ellos palpable.
Pero ahora parece que ambos podrían estar listos para el desafío. Casi esperaba que me
siguieran al agua, pero han optado por mirar desde la seguridad de la playa.
Todavía no puedo creer que estoy en las Bahamas. Y vine aquí en jet privado. ¿Qué tan
increíble es esto?
¿Quién hubiera pensado que una chica como yo se codearía con los ricos y famosos?
Cuando Blake vino a almorzar por sorpresa, no tenía idea de que iría a tantos problemas
y gastos. Casi esperaba una hamburguesa y papas fritas en el camino desde la cafetería.
Por supuesto, Blake no esperaba que Seth viniera. Pero estaba emocionado con su
sincronización. Me hubiera decepcionado si se lo hubiera perdido.
La expresión de nube tormentosa de Blake me dejó preguntándome qué tan sabio había
sido mi movimiento para pedirle a Seth que se uniera a nosotros, pero por lo que puedo
ver, parecen estar avanzando como una casa en llamas.
Es hora de condimentar un poco las cosas. Justo en mi centro, estoy hormigueando con
anticipación.
No puedo esperar Me lamo los labios al pensar en lo que estoy a punto de hacer.
Lentamente, salgo del fresco del agua. Mientras lo hago, me deleito con los pequeños
nadadores apretados que usan los niños y siento que mi interior se calienta.
Estaba seguro de haber escuchado a Blake decirle a alguien que no quería ser molestado
en esta pequeña cala hoy. Y entiendo por qué. Y me conviene para lo que tengo
planeado.
Una vez que salgo del agua, sacudo la cabeza. Las gotas de agua rocían en todas las
direcciones. Brevemente, captan la luz del sol, y puedo ver pequeños arco iris saliendo
de ellos.
Qué día verdaderamente mágico es este.
Mientras camino hacia Seth y Blake, mis dedos encuentran la parte de atrás de mi
blusa. Para cuando estoy cerca de ellos, lo he deshecho y cae a mis pies.
Ambas mandíbulas tocaron el suelo.
Sin pensar en lo que estoy haciendo, doy otro paso hacia ellos. Mientras lo hago, agarro
mis tetas y las empujo hacia arriba. Mis pulgares acarician mis pezones.
Blake y Seth no necesitan más aliento.
Seth agarra mis hombros y fuerza sus labios sobre los míos. Él es dominante,
empujando su lengua más allá de mis labios y explorando. Su fuerza me ha tomado por
sorpresa.
Los dedos y las manos de Blake encuentran mis senos.
Mis pezones rosados están tan apretados que sienten que van a explotar si él continúa.
Los gemidos de placer escapan de mis labios. Están amortiguados con la boca de Seth
todavía sobre la mía.
Los labios de Seth me dejan, y él me mira. Intenso. Animalista Lujuria.
Sus ojos son un mar de emociones.
Con mis labios libres, Blake se posesiona de ellos.
Su beso es más tierno. Su boca acaricia la mía, y su lengua es más suave, casi pidiendo
permiso. Siento que mi cuerpo se derrite en el suyo.
Seth se dejó caer frente a mí y está explorando mi coño. Estoy salado, sudoroso y
mojado.
La combinación de agua salada y sudor hace que mi piel se sienta tensa y caliente. La
lengua de Seth trabaja en mi muslo interno, alrededor de mi área púbica y en mi coño
caliente y húmedo.
Mis rodillas se convertirán en gelatina. Siento que podría desmayarme por placer en
cualquier momento.
No estoy seguro de si los niños están leyendo mi mente, pero ambos dejan de hacer lo
que hacen al mismo tiempo.
Una abrumadora sensación de pérdida me envuelve.
"¿Qué tal si cambiamos de posición?"
Me lleva unos segundos darme cuenta de lo que sugiere Blake. Sin decir una palabra,
me subo al suelo. No estoy seguro de a quién tomar primero en mi boca.
Este es un placer para mis ojos. Dos pollas increíblemente enormes, todo para mí.
La mayoría de las mujeres sueñan con tener una de esas pollas en su vida, y aquí puedo
tener dos.
Me lamo los labios. El interior de mi coño está lleno de placer.
Mis dedos se envuelven alrededor de la enorme polla de Seth y comienzan a masajearla
mientras mis labios y lengua exploran a Blake.
Joder, esto es muy bueno.
Mi coño ya comienza a gotear y late con anticipación.
Ambas pollas crecen mientras trabajo mi magia con ellas. Blake está en mi boca y Seth
está en mi mano.
Cuando tomo Blake's por primera vez en mi boca, siento que va a ser demasiado grande.
Siente mi inseguridad y disminuye la velocidad. Sus movimientos son gentiles. Y luego
todo él está en mi boca; Puedo sentirlo deslizarse por mi garganta.
La euforia se propaga a través de mí. Las mariposas se desatan dentro de mí,
acariciándome con sus alas. A medida que se abren paso a través de mí, sus alas se
vuelven más intensas.
Es hora de cambiar.
Libero la enorme polla de Blake y dejo que mi boca abrace a Seth. Mis dedos se
mueven arriba y abajo del eje de Blake.
La polla de Seth se expande y crece con cada empuje en mi boca.
Es Seth quien sale de mi boca y me empuja a la arena.
Luego sus labios viajan a lo largo de mi pecho, flotando sobre mis pezones antes de
continuar su viaje hacia abajo.
Cuando llega a mi vello púbico, siento un escalofrío en mi columna. Mi coño está tan
húmedo y listo que quiero sentir su polla dentro de mí ahora mismo.
Mientras tanto, Blake se acerca a mi lado y agarro su polla para volver a ponerla en mi
boca.
Los labios y la lengua de Seth están haciendo estragos con mis sentimientos. Está
chupando, mordiendo y mordisqueando mi abertura húmeda. Sus manos acarician mi
carne a cada lado de mi coño, y solo quiero que me folle.
"Seth, por favor cógeme", le ruego, y él se ríe.
"Todo a su tiempo, mi princesa", murmura en mi coño.
La rugosidad de la arena contra mi espalda contrasta totalmente con la suave y suave
caricia de los dedos y la boca de Blake y Seth.
Seth hunde sus dedos profundamente en mí, lo que me hace chupar más fuerte la polla
de Blake. Lo siento latir dentro de mi boca.
Aumento mi intensidad, pero es difícil concentrarme en lo que estoy haciendo con Seth
haciendo magia en mi coño.
Sus dedos me empujan y se enroscan un poco una vez que están adentro, donde se
desata mi sudor. Al mismo tiempo, sus labios y lengua trabajan en mi clítoris.
Toda la experiencia es similar a flotar en uno de esos tanques de flotación. Mi mente
está vacía y los sentimientos de éxtasis y placer me invaden. Creo que podría explotar
en cualquier momento, y aún no he tenido una polla dentro de mí.
Para evitar que venga todavía, me alejo de Seth y libero a Blake. Quiero disfrutar de
esto y sacarlo el mayor tiempo posible.
Antes de que cualquiera de ellos tenga la oportunidad de quejarse, empiezo a chupar la
polla de Seth y le presento a Blake el culo.
Estoy a cuatro patas.
Soy consciente de la arena en mis manos y rodillas. La arena en mi espalda se ha
desprendido en algunos lugares, y siento que la mano de Blake barre el resto. Esta
acción suave me deja sin aliento.
Seth se agarra de mi cabeza y me guía en mi movimiento de meneo.
Un fuerte golpe en el culo me hace llorar. Por supuesto, la polla de Seth en mi boca
amortigua mi llanto.
Blake me golpea una y otra vez. Luego frota arena sobre mi piel ardiente, la sensación
irritante alimenta mi deseo lascivo.
Joder, estos tipos saben cómo mojar y preparar a una chica.
Blake tiene su polla ahora en mi abertura húmeda. En lugar de seguir follándome, se
toma su tiempo. Frota la punta de su polla contra mí, sin entrar, sino burlándose.
Libero a Seth y echo la cabeza hacia atrás. Se está poniendo demasiado para mí. El
placer se acumula en lo profundo de mí y amenaza con estallar como una fuente
gigante.
"Venga." Seth está de vuelta, separando los labios de mi coño.
Intento concentrarme, pero la polla burlona de Blake es demasiada distracción.
Cuando él me empuja, caigo un poco hacia adelante con los brazos doblados por la
fuerza.
Se estrella contra mí rápido y duro.
Alcanzo la polla de Seth con una mano. Y luego, una vez que Blake tiene un ritmo,
envuelvo mis labios alrededor de él nuevamente.
Justo cuando siento que mi orgasmo se acumula en lo profundo de mí, Blake sale de
mí. Está respirando fuerte y rápido, y puedo ver el sudor brillando en su pecho.
"Es hora de cambiar de posición, cariño", gruñe, y veo a Seth tomar la invitación y
moverse hacia mi trasero.
Él sonríe de oreja a oreja.

Capítulo 31
Seth
Deleito mis ojos con su desnudez. Si no tengo cuidado, podrían derretirse.
Ella es tan jodidamente caliente. Hay pequeñas manchas blancas salpicadas sobre su
piel perfecta donde la sal se ha secado.
Lamer su piel ha sido asombrosamente lasciva. Es la sensación de sabor perfecta de
sudor y salado. Como superestrella culinaria, sé estas cosas.
Si intentaras recrear algo tan delicioso como esto, no podrías hacerlo.
Mi mirada viaja a sus tetas balanceándose de lado a lado mientras toma la enorme polla
de Blake en su boca. Ella le está prestando toda su atención.
Puedo ver que está apreciando cada detalle. Los músculos de su pecho y abdomen se
contraen. Sus ojos han perdido su expresión sombría.
La euforia está escrita por todas partes.
El pulso en mi palpitante polla me recuerda que es mi turno de follarla por detrás.
Lentamente, me acerco a ella por detrás. Sus piernas están separadas, y puedo ver sus
jugos brillar a la luz del sol.
Hay un poco de pre-cum manchado en el interior de sus piernas, y puedo sentir mis
propios músculos en mi abdomen tensarse en anticipación de lo que está por venir.
Ella es mi yegua salvaje y necesita domesticación.
Me dejo caer en la arena detrás de ella.
Su cabeza se mueve hacia arriba y hacia abajo sobre la polla de Blake, y puedo
escucharla gemir de placer.
Una parte de mí solo quiere meter mi jodida polla directamente en ella y seguir adelante
hasta que ella esté rogando por piedad. Al mismo tiempo, quiero poder saborear el
momento, hacer que dure tanto como pueda.
Aquí a la intemperie, toda la experiencia parece más animal.
Mis dedos agarran sus nalgas y las amasan. Mis pulgares caen y trato de alcanzar
algunos de sus jugos. Creo pequeños círculos entre sus piernas.
Menea sus nalgas y me empuja hacia atrás, como si tratara de decirme algo. Es sobre
ahora que mi cerebro se despide y deja todo a mi jodida polla.
No quedan pensamientos coherentes en mí, y todo lo que puedo hacer es actuar por
instinto, mi instinto animal.
He pasado suficiente tiempo burlándose de ella; Es hora de una acción increíblemente
jodida.
Mis dedos agarran mi propio eje grueso y lo guían hacia su coño que espera. La veo
soltar la polla de Blake y echar la cabeza hacia atrás.
Inmediatamente la agarra del cabello y la empuja hacia adelante nuevamente.
Entro lentamente, deliberadamente. Para domesticarla, necesito poseerla. Ella está
tratando de mover las cosas y está presionando sus caderas contra mí.
Mis manos la detienen con una rápida y dura palmada en ambas mejillas. En lugar de
hacer que se detenga, aumenta su insistencia. Y para empeorar las cosas, se menea de
lado a lado, llevándose mi jodida polla con ella.
Su jodido y apretado coño ya está haciendo su magia en mi enorme eje mientras
lentamente empiezo a montarla.
Cada vez que la empujo, mi jodida polla se engrosa y las paredes de su coño me agarran
con fuerza. Si no supiera nada mejor, me preocuparía que pudiera romperme la polla en
dos.
La sensación de puro placer enciende un fuego dentro de mi vientre, un fuego que se
propaga rápidamente y se intensifica a medida que me atraviesa.
Puedo ver los músculos faciales de Blake tensarse y preguntarme si está a punto de
venir.
Mis dedos se arrastran por su espalda, y puedo ver la piel de gallina seguir donde mis
dedos han estado.
Luego los dejé caer sobre sus pezones de color rosa como un capullo de rosa. Puedo
verlos desde este ángulo y quiero pellizcarlos y tirar de ellos hasta que estén de color
rojo brillante. Se balancean hacia arriba y hacia abajo y ruegan que se lesionen.
Mis dedos los encuentran y los aprietan.
Veo que la boca de Leila aumenta de ritmo en la polla de Blake. Sus manos están
agarrando su cabeza. Sus caderas la empujan.
Sigo follando a Leila por detrás. Mi jodida polla se siente como si fuera a explotar
pronto.
Blake sale de ella, y veo su polla dispararse cum en un arco gigante sobre la cara de
Leila y su frente. Ella está tratando de atrapar algunas con la boca abierta.
La escena es tan jodidamente erótica que me hace aumentar mi propio ritmo, y mi polla
la golpea más fuerte y más rápido.
"Más fuerte, fóllame más fuerte, Seth", grita Leila, y ella arquea la espalda.
Le dejo los senos y uso mis manos para darme un impulso extra en sus caderas. La
agarran con fuerza y los uso para empujarla directamente hacia mí.
Cada vez que mis bolas chocan contra su piel, siento que se disparan más fuegos
artificiales dentro de mi cabeza. El placer es tan intenso que me temo que podría ser
arrancado por dentro.
Más rápido y más rápido, metí mi polla gruesa en su coño palpitante y sé que no podré
evitar que venga.
La ola de mis orgasmos comienza justo en la parte posterior de mi ombligo. Me
atraviesa como granadas de mano y me lleva al límite. Exploto en ella, justo cuando ella
llega al clímax también.
Su coño se aferra a mi polla, y siento que no puedo salir de ella. Siento que las paredes
de su coño vibran y estallan. Mi polla está descargando su carga, y grito de placer.
Parece que estoy montando mi ola orgásmica para siempre, pero probablemente solo
dura unos minutos. Ella todavía va cuando la mía desaparece.
Me derrumbo sobre ella y dejo mis manos descansando sobre su coño. Me gusta girar
mis dedos en las mezclas de mi propio semen y sus jugos.
Blake se está moviendo hacia nuestra visión.
"Bueno", comienza, y Leila se pone de pie.
Mientras está sentada allí, sonriéndonos, no puedo creer mi suerte. ¿Quién hubiera
pensado que encontraría a esta exquisita diosa?
"¿Cómo te sientes?" Ella se vuelve hacia mi. Hay un brillo distintivo en sus ojos.
"Genial", digo y miro de ella a Blake.
"¿No demasiado desgastado?" Ella me está retando.
Sacudo la cabeza Cualquiera que sea el desafío que está presentando, definitivamente
estoy preparado para ello.
"Bueno." Ella sigue sonriendo. Ella se lame los labios.
"Entonces, ¿qué estás esperando?"
Y con eso, ella pone sus labios sobre mi polla. Está lamiendo su base y todo alrededor
de mis bolas, como si me estuviera limpiando.
Blake está mirando. Toma menos de un minuto antes de que mi jodida polla vuelva a
estar dura como una roca.
Me pregunto qué tiene planeado.
Ahora que mi polla está lista para la acción, deja de limpiarme y mira a Blake.
"¿Y tu? Ya has tenido suficiente, ¿o tienes ganas de más?
Blake cae de rodillas y alcanza sus tetas. Encajan perfectamente en sus manos,
derramándose sobre ellas un poco. Él sonríe de oreja a oreja.
"Bien", ronronea Leila. "Justo como pense.
Su mano derecha juega con la polla de Blake y la izquierda con mis bolas.
Lo que sea que haya planeado, no puedo esperar.

Capítulo 32
Blake
Las palabras de Leila son música para mis oídos. Por supuesto que disfruté follando su
cara, pero también quiero un poco de su puto coño. Una cosa es descargar una carga
completa sobre ella, otra completamente distinta entrar en ella.
Los celos amenazaron con apoderarse de mí cuando me di cuenta de que Seth iba a
entrar en ella antes que yo.
Pero, por supuesto, no hay nada que pueda hacer al respecto. Estoy seguro de que una
rabieta no hubiera ido bien. Después de todo, ya no tengo cinco años.
Si no hubiera aparecido el jodido pinchazo, no estaría arruinando mi jodido almuerzo
sorpresa.
Ahora que Leila deja que sus dedos se deslicen hacia arriba y hacia abajo por mi eje, es
difícil seguir pensando con claridad. De hecho, pensar y follar con Leila son palabras
que simplemente no van juntas.
Mi maldito cerebro está de permiso, y mi polla está liderando el camino. En este
momento está apuntando en la dirección de Leila, y exigirá la entrada en ese jodido
coño apretado de ella.
Seth es claramente un hombre tit. Él está ocupado con esos pezones rosados de ella. Lo
vi darles un trabajo completo mientras la estaba follando por detrás; siguen siendo más
rojos que su rosado habitual.
Soy más un hombre de coño y gilipollas. Si consigo follarle el culo aquí, estaré en el
séptimo cielo.
Como si leyera mi mente, ella se vuelve hacia mí.
"Entonces, Blake", ronronea, "¿alguna petición?"
Está arrodillada en la arena en su gloriosa desnudez. Detrás de ella veo el océano y la
forma en que la luz entra en esta caverna, una sombra de su cuerpo se refleja a su
derecha. Sus ojos brillan y casi me siento poética.
Si no hay acción de mierda pronto, podría ponerme de pie y recitar poesía o joder a
Shakespeare. Aunque todo lo que puedo pensar es en la línea que dice algo así como
'Romeo, Romeo, ¿por qué eres tú, Romeo?'
Tal vez podría decir algo como 'Leila, jodidamente caliente Leila, ¿por qué eres tú,
Leila? '
Jodidamente cojo, lo sé, pero en realidad no soy de los que recitan poesía u otra
mierda. Soy un hombre de negocios despiadado.
Me estremezco ante la idea y vuelvo mi atención a Leila.
Se está sacando los senos y arqueando la espalda. Puedo ver los labios de su coño y
sentir mi polla rebotando involuntariamente.
"¿Qué pasa, muchacho grande?" Su cara se mueve hacia mi polla. "¿Se te acabaron las
ideas?"
Su aliento caliente se siente como ondas de descarga eléctrica en mi ansiosa
polla. Puedo sentirlo crecer, si eso es posible.
Seth se ríe entre dientes.
Lo fulmino con la mirada.
"¿Qué tal si dejas de hablar y sigues con eso?" Gruño, y los ojos de Leila se abren un
poco.
Mis manos la agarran con fuerza y la ponen de pie. Luego la alejo de mí para que esté
frente a Seth.
Ahora está tan cerca de mí, mi polla ya está intentando follarla.
Ella se inclina hacia mí. Quiero follarla por detrás, pero puedo ver en los ojos de Seth
que él también espera que se la deje entrar.
"A cuatro patas de nuevo", ladro y la empujo hacia la arena.
Leila está en el suelo antes de que termine de hablar.
Sus brazos están separados al ancho de los hombros, y extiendo sus piernas. Quiero
tener una vista completa de su coño.
Mis dedos trazan un camino desde su culo hasta su coño y vuelven a subir.
Seth ha tomado posición frente a ella. Ella está hambrientamente chupando de él.
Para asegurarme de sacarle el máximo provecho, empiezo a explorar todo alrededor de
su gilipollas. Mi lengua entra en su área más privada, y me deleito con la sensación de
sabor. La sal del mar le da un toque agradable a su delicioso sabor a sudor.
Mis dedos están cavando en ambas mejillas, y puedo sentir mi propio fuego brillando
dentro de mí. Joder, me encanta un buen pedazo de culo.
Para asegurarme de que pueda tomar mi enorme polla en su culo apretado, uso mis
dedos para recoger algunos de sus propios jugos para lubricar su trasero un poco más.
Ella es tan jodidamente caliente que casi no puedo esperar.
Su cabeza se mueve hacia arriba y hacia abajo sobre la polla de Seth, y uso mis manos
para llevar la punta a su apretada abertura.
Suavemente, lo empujo. Al principio es solo la punta de mi polla, pero Leila exige más.
Ella está lista, dispuesta y capaz, y está presionando contra mí.
Agarro la invitación y clavo mi caña en ella. Sigo yendo y viniendo hasta que siento que
podría salir del otro lado.
Ella es tan jodidamente apretada que mi polla apenas cabe.
Lentamente, me deslizo dentro y fuera y calculo su reacción. Seth se alejó de ella y
arqueó la espalda con la cabeza echada hacia atrás.
“Joder, Blake. Solo jódeme ”, grita ella, y yo lo complazco.
Encuentro mi ritmo y aumento mi ritmo.
La posición cambiante de Seth. No estoy seguro de lo que tiene planeado, y realmente
no me importa. Todo lo que me importa es follar el culo de Leila. Bombeo fuerte y
rápido. Es bueno que haga ejercicio en el gimnasio; de lo contrario, no creo que esté
preparado para esto.
Seth parece deslizarse debajo del cuerpo de Leila.
Lo sabía; Es un jodido hombre de tetas.
Sin embargo, una vez que está debajo de ella, me doy cuenta de lo que tiene en mente.
Tira del cuerpo de Leila sobre el suyo.
Hombre, el pinchazo realmente está empujando los límites.
Me veo obligado a reducir la velocidad para permitir que su polla se deslice en su
coño. También necesito usar mis manos para estabilizarme a cada lado de ella.
Puedo sentir la polla de Seth deslizarse dentro de su coño mojado y comenzar a
golpearla. Mi respiración es superficial y rápida.
Pequeños fuegos artificiales comienzan a explotar en mi cabeza y abdomen. Esto es
jodidamente asombroso.
Si me hubieras preguntado, no habría pensado que me excitaría follar a una mujer con
otro hombre, pero ahora que puedo sentir la polla de Seth, estoy tan caliente como
puede estarlo.
Leila está gimiendo y gimiendo al mismo tiempo.
"Fóllame más rápido". Ella esta jadeando. "Más duro y más rápido".
Lo hago y puedo sentir que Seth hace lo mismo. Parece que trabajamos bien como
equipo, moviéndonos al mismo ritmo.
Los dedos de Leila están cavando en mi espalda baja y empujándome más fuerte contra
ella.
Estoy mirando más allá de ella y afuera sobre el agua. Esta es una experiencia fuera de
este mundo; No me sorprendería ver a los delfines saltar del agua con las alas en la
espalda, pero no lo hacen.
Cada empuje hace que mi polla crezca en longitud y anchura.
"Joder, Leila", grito y siento que mi polla palpita con anticipación.
"Más rápido, fóllame más rápido".
Agarro sus caderas y la empujo hacia mí mientras la empujo.
Puedo sentir cómo se construye mi orgasmo, y sé que estoy a punto de venir. Mis
músculos comienzan a tener espasmos violentos y mis dedos cavan en su carne desnuda.
Al mismo tiempo, puedo sentirla tensa y montando su ola orgásmica. Una onda de
emociones que la estremece la invade. Sus músculos se contraen y su cuerpo tiembla.
"Ohhhhhhh fuuuuuuck", grita ella.
Seth también está explotando dentro de ella y gruñendo de placer.
Mi polla pulsante está desatando su poder, y siento que entro en su culo apretado. Mi
semen brota de ella como si se desbordara.
Y sigo montando mi ola y pierdo todo sentido del tiempo. Parece que me voy para
siempre.
Cuando termino, me derrumbo sobre ella.
Al igual que Seth todavía está en su coño palpitante, me quedo en su puto y delicioso
gilipollas. He tenido pocos imbéciles, pero ninguno tan bueno como el de Leila.
Solo cuando el último de mis temblores ha disminuido y la sensación de explosiones
gigantes que estallan dentro de mí ha disminuido, me deslizo fuera de ella.
Ruedo sobre la arena y los miro a los dos.
Siento una oleada de ternura a pesar de haberla compartido con Seth.
A los ojos de Leila, puedo ver el intenso placer que acaba de experimentar. Y en el
fondo, para mi propia consternación, me doy cuenta de que Leila probablemente no
elegirá entre nosotros.
Mis dedos recorren su brazo. Seth ahora también se aleja de ella, y me deleito con su
jodido cuerpo caliente.
Ella mira de uno a otro y sonríe. Lentamente se sienta y luego se pone de pie.
"Entonces", dice mientras se pone las manos en las caderas. "¿Qué tal un baño
refrescante?"
En mi opinión, ya estoy imaginando el tipo de cosas que podríamos hacer en el agua,
pero eso podría tener que esperar otro día.
Veo a Leila saltar hacia el azul profundo y ponerse de pie.
Seth me mira y sonríe.
"¿Correrte?" desafía, y sacudo la cabeza y me río.
Jodido imbécil no puede evitarlo.
Corremos de lado a lado. Me adelanto y levanto los brazos en señal de victoria. Seth, sin
embargo, me empuja y me hace perder el equilibrio. Con los brazos agitados, voy
navegando hacia adelante y me enfrento primero al agua.
Splash
Debería haber sabido que el pinchazo no puede jugar limpio.
Cuando mi cabeza sale de debajo del agua, veo la mano de Seth extendida de una
manera conciliadora.
Lo agarro y él me pone de pie. El esta riendo.
"Veni, vidi, vici", dice, y me río.
"En tus sueños", bromeo. "Creo que es justo decir que ambos vinimos, vimos y
conquistamos".

Capítulo 33
Leila
Desde mi habitación en la suite, llamo al teléfono celular de Chase. Él levanta y me
saluda alegremente, como siempre.
"Hola bebé. ¿Cómo es la vida en el paraíso?
"Persecución. ¡La vida es fantástica!
Él ríe. “Es bueno escucharlo. Es bueno escucharlo.
“Entonces, llamé para decirte, bueno, sinceramente, para advertirte. Mira, podría
quedarme un poco más en el paraíso —digo con cautela. No quiero molestarlo. “Se te
pagarán horas extras y más. Entonces, no te preocupes allí. Solo quería asegurarme de
que estás de acuerdo con que yo esté fuera por un tiempo ".
“Puedo retener el fuerte un poco más. No te preocupes Te mereces esto."
Me calienta el corazón escucharlo decir eso. "Gracias."
De todos modos, contraté a esa chica de la otra tienda. ¿El que te dije que me iba a
vestir con bollos y desfilar por el café? Sí, ella trabaja en el mostrador mientras yo
trabajo en la trastienda como un jefe ".
Estoy más que un poco sorprendido de escucharlo decir que contrató a alguien,
especialmente un bombón como este. "¿La contrataste?"
"Temporalmente."
"¿Cuando?"
"El día que te fuiste", dice con naturalidad.
No puedo entender mis palabras. "¿Seriamente? ¿El día que me fui?
“Sí, y ella está haciendo un gran trabajo. Ah, y ahora tenemos a toda la fuerza policial
entrando por café y bollos ”.
"¿Esperar lo?"
“Sí, aparentemente estos policías solteros y no tan solitarios la siguen de tienda en
tienda. Donde quiera que ella trabaja, ellos van ".
Bueno, ¿no es gracioso? A decir verdad, estoy totalmente de acuerdo con esto. Oye, si
ayuda a los negocios ... "Bueno, entonces. Suena bien para mi."
"Deberías verla en el bikini scone que diseñé para ella".
"¡Persecución!"
Chase se ríe, y cuando termina, me golpea con un puñetazo uno-dos. “Entonces, ¿has
decidido qué trato quieres? ¿Qué tipo querías?
"Guau."
"¿Bien?"
“Quizás no tenga que decidir. Tal vez pueda tener ambas, ”bromeo.
Chase chilla. "¿De Verdad? Sí, ve a buscar el tuyo, niña.
"Voy a."
“Leila, mejor me voy. Mucho trabajo por hacer. Quédate a salvo.
"Voy a."
“Y avísame antes de que vuelvas a casa, ¿de acuerdo? A-Dios."
"Adiós."
Yo conseguiré el mío.
Veo uno de los nuevos maxi vestidos rosados, el que tiene un escote profundo. Ese es el
vestido que usaré para cenar esta noche. Entrar en el vestido maxi que fluye es fácil. Y
las únicas cosas adicionales que requiere son un par de bragas y un collar, que ya estoy
usando.
Renuncio a usar un sostén esta noche. Dele a los niños, y bueno, a cualquiera que se
vea, un regalo. Me encanta dar golosinas a los hombres.
Blake y Seth están listos y esperando en la sala principal, respondiendo correos
electrónicos en sus teléfonos celulares. Sus camisas de vestir perfectamente
confeccionadas, enrolladas para mostrar sus antebrazos musculosos, y sus pantalones
cortos se ven excepcionales en ellas.
"¿Quién está listo para comer?"
Miran hacia arriba cuando llego.
"Whoa ..." Seth dice.
"Creo que podríamos estar mal vestidos, ¿eh, Seth?"
"No. De ningún modo. Acabo de lanzar este. Literalmente —digo con una sonrisa.
Blake se pone de pie y camina hacia el espejo más cercano para observarlo. "Estoy listo
para irme".
"Yo también. Ni siquiera tiene que comprobarlo como este pavo real que se acicala —se
burla Seth, a lo que Blake se ríe.
"Ambos se ven geniales", le digo. "Vamonos."
***
La cena va bien. Blake y Seth me cuentan chistes de su tiempo juntos en la escuela. Me
río y comparto con ellos historias sobre mis días en la escuela culinaria.
Estamos pasando un gran rato; solo me demuestra que esto funciona mejor como una
tríada. No quiero que este sentimiento termine nunca, pero suena el teléfono de
Blake. Se excusa de la mesa, dejándonos a Seth y a mí solos.
“Seth, ahora que tenemos este momento, tengo que preguntar. ¿Por qué odiaste tanto a
Blake antes?
“No siempre lo hice. De hecho, todo lo contrario ", dice. “Lo admire. El era como un
hermano para mi."
"¿Esperar lo?"
“No estoy orgulloso de admitir esto. Son mis propias malditas inseguridades,
supongo. Es por eso que empecé a odiarlo. Yo quería ser él. Quería que me respetara
como lo respetaba. Como si aún lo respetara. Joder, probablemente sostengo a ese tipo
con más respeto que nadie en este maldito planeta ".
“No puedo creerlo. Quiero decir que sí. Pero no puedo ...
“Siempre quise trabajar con Blake. Él y su familia tienen los mejores lugares, los más
ideales, para los negocios. Mi familia, tenemos el equipo de última generación para que
coincida con sus mejores ubicaciones. Imagina lo que sucedería si uniéramos
fuerzas. Seríamos jodidamente imparables.
"¿Qué pasaría si me uniera a ti, vendiéndote mis bollos, Seth?"
Seth sonríe. “Bueno, podrías usar mis instalaciones para continuar expandiéndome y
encontrar más variedad para tus bollos. Eso es lo mejor que puedo ofrecerle: libertad
para crear y evolucionar. Pero realmente, Leila, no es una gran preocupación para mí en
este momento. Me eliges ... eliges a Blake. No importa el acuerdo que firmes, porque
Blake y yo estamos más preocupados de que seas feliz.
Guau. Que respuesta.
Sintiéndome lo mejor que puedo, sonrío y apoyo mi cabeza sobre su hombro.
"Gracias, Seth".
 Capítulo 34
Leila
Otro día en el paraíso .
Miro la pila de ropa que me compraron los chicos y me maravillo al pensar que apenas
he arañado la superficie al probarme tan poco. Ajuste las correas del vestido de verano
que llevo puesto. Es otra oportunidad para hacer alarde de mis senos, pero llevo un
bikini debajo.
No necesito que todos me miren hoy. Realmente solo quiero relajarme. Quiero
mezclarme. Quiero estar libre de preocupaciones.
Salgo al área común, una gran vereda en el hotel donde puedes tomar una copa, sentarte
y hablar, o leer un periódico de Gran Bretaña o Estados Unidos.
Veo a Blake y Seth de inmediato. Están sentados uno frente al otro, con las
computadoras portátiles apagadas, los teléfonos celulares hasta las orejas. Parece que
ambos están en medio de hacer negocios serios.
Estoy asombrado, realmente asombrado. Respeto el ajetreo extra, siempre lo he
hecho. Tal vez sea porque mi negocio siempre lo requiere de mí. Doy doscientos por
ciento, y me encanta ver cuando otras personas también lo hacen.
"Trabajando de forma remota, ¿eh?" Digo mientras me acerco a ellos.
Blake es el primero en levantar la vista y verme allí. Termina su llamada y pregunta:
"¿Están listos?"
"Sí lo soy."
Blake cierra su computadora portátil y sonríe. "Yo también, entonces."
Blake se levanta y toma mi mano entre las suyas. Su mano es cálida, casi caliente al
tacto. Nos dirigimos a la puerta, cuando para mi sorpresa, Blakes se vuelve hacia Seth.
"Hola, Seth. ¿Vas a sentarte allí o te unirás a nosotros para el desayuno?
Seth cubre su teléfono y responde: "Me pondré al día con usted en un momento, solo
necesito terminar esta llamada y atender otros asuntos".
"No tardes demasiado ahora".
"Te seguiré en poco tiempo".
"Bueno."
Nos dirigimos al restaurante. Me muero por una mimosa y una buena tortilla de jamón y
queso.
Sin embargo, me siento un poco culpable. No estoy listo para tomar una decisión, pero
estoy empezando a sentir presión. Mientras nos sentamos, me tomo un momento para
recuperarme y hacerle a Blake una pregunta que he querido hacer.
“Blake, tenía curiosidad. Si decido asociarme contigo, ¿qué me ofrecerías?
Blake toma su servilleta, la despliega y la coloca en su regazo. Toma un sorbo de agua y
se aclara la garganta suavemente antes de responder.
“Bueno, un fuerte reconocimiento de marca para comenzar. Dado que sus bollos de
firma serán expuestos a una exposición importante a través de mis conexiones de
muchos establecimientos. Pero, para ser honesto, no importa el acuerdo que firmes,
siempre y cuando sientas que es el camino correcto para ti ".
Me agrada escucharlo decir eso. Me siento cálido por todas partes, como cuando me
envuelvo en mi manta favorita. Me siento seguro con Blake y espero que él lo sepa.
Coloco mi mano sobre su rodilla y sonrío antes de darle un beso rápido en los labios.
Sobre todo, estoy feliz de ver que los niños finalmente han dejado de lado sus
diferencias y se están centrando en un objetivo común ... y lo están haciendo todo por
mí.

Capítulo 35
Leila
Es difícil volver a la realidad, muy difícil. Un minuto he estado flotando en la nube
sesenta y nueve, y al siguiente mis pies golpean el suelo con un ruido sordo.
Quiero decir, ¿quién puede volar a las Bahamas, pasar unos días increíbles allí y volver
a la realidad con solo mover un dedo?
Respiro hondo No se ha discutido nada mientras hemos estado fuera de lo que deparará
el futuro.
Me muerdo el labio inferior cuando el avión escupe sus ruedas y mi cuerpo se sacude
ligeramente hacia adelante cuando el caucho choca con el asfalto. ¿Era este el final de
mi cuento de hadas?
"¿Vas a volver a la oficina?" Blake se está volviendo hacia Seth, quien asiente.
“Tengo algunas reuniones. ¿Usted?"
Es el turno de Blake de asentir.
"Pero puedo llevar a Leila a casa primero".
Ahora están hablando de mí como si no estuviera aquí.
"Está bien", los interrumpo rápidamente. “Puedo llevar la limusina a casa, ¿no? Quiero
decir, ustedes dos pueden volver al trabajo. No es que no tenga trabajo al que ir ”.
Trato de mantener mi tono ligero. Tengo trabajo que hacer, y de repente la culpa me
invade. Ni siquiera he llamado a Chase para ver cómo van las cosas.
"Pero", comienza Blake, y sacudo la cabeza.
"No realmente. Tengo que llegar a casa para ver cómo van las cosas. Tengo un negocio
que dirigir ".
Seth se encoge de hombros. "Si estás seguro".
Asiento con la cabeza. Por supuesto que estoy seguro. Tienen trabajo que hacer, y yo
también.
En la limusina juego con mi móvil. ¿Debo llamar a Chase ahora? Pero descarto la idea.
No tiene sentido interrumpirlo durante el trabajo. Estaría en casa dentro de un rato, y
entonces puedo arreglar las cosas con él.
Distraídamente, juego con el botón de la ventana polarizada. Mis ojos recorren el
interior de este increíble vehículo de lujo. Los insectos parecen habitar la boca de mi
estómago y dan a conocer su presencia.
¿Había actuado de manera irresponsable al dejar Beans & More por capricho para pasar
un tiempo lejos con dos jodidamente hermosas balas?
Sé la respuesta, pero no quiero aceptarla. A una chica se le permite divertirse, ¿no?
La ventana ahora está baja y la brisa tira de mi cabello. Miro afuera a los autos que
pasan, las personas que caminan por el sendero y el comercio de los cafés que pasamos.
Todos están trabajando, excepto yo.
Una vez que el conductor de la limusina se detiene fuera de mi apartamento,
prácticamente salgo corriendo del auto y subo las escaleras. Apenas digo gracias y
adiós, y estoy dentro de la puerta.
Lo atravesé y el silencio me saludó.
Oh no, esto fue malo, muy malo.
Chase generalmente tiene la música tan alta que los vecinos se quejan de vez en
cuando. ¿Chase me ha abandonado?
Arrojo mis llaves sobre la mesa del pasillo y me apresuro a la sala de estar. Mis ojos
escanean la habitación en busca de una nota. Seguramente me dejaría una nota.
Hay una forma extraña en el sofá, pero no me doy cuenta al principio. Al azar, hojeo la
pila de correo que Chase me ha dejado sobre la mesa, probablemente todas las facturas.
Parece que hay al menos una docena de sobres sin abrir. ¿Cómo puede haber tanto
correo en un lapso de tiempo relativamente corto?
Y aún no puedo ver una nota.
¿Dónde está la maldita nota? Mi corazón ahora late más rápido, y escaneo la habitación
una vez más, prestando atención a cada detalle.
Concéntrate, Leila, mando y luego me doy cuenta de lo que pasó.
Me acerco de puntillas al sofá y exhalo un profundo suspiro de alivio. Al mismo tiempo,
me siento terriblemente avergonzado.
Chase está profundamente dormido, con un temporizador en la mano.
Pobre Chase ha estado trabajando a toda máquina.
Perra despiadada, mi voz interior se afloja y reprimo las lágrimas. He sido tan
irreflexivo como irreflexivo. Yo no era una princesa; Era más como la malvada
madrastra o la malvada bruja.
Me agacho y aparto suavemente el temporizador de su mano. No es demasiado difícil,
ya que sus dedos solo lo sostienen sin apretarlo.
Luego marcho a la cocina. Me pongo el delantal y me pongo a trabajar. Es hora de que
empiece a tirar de mi peso por aquí.
Cuando el temporizador se apaga, saco un lote de bollos del horno y los coloco
suavemente en la rejilla para enfriar.
Con un lote hecho, pongo otro en el horno.
Luego tomo dos rebanadas de pan de masa madre espesa. En la nevera busco un poco
de queso y tomate. No me lleva mucho tiempo poner mi creación en la parrilla.
Me tarareo a mí mismo. Prometo pasar más tiempo trabajando y menos tiempo jugando
desnudo con Seth y Blake.
Me he divertido, pero es hora de centrarme en el negocio.
Con mi mente decidida, regreso a la sala de estar. Estoy llevando un sándwich de queso
fundido. La sustancia amarilla está goteando por el costado del pan grueso, y me lamo
los labios.
Una imagen de esperma color crema rociándome en la cara y lamiéndolo invade mis
pensamientos. Me concentro en el sándwich de queso.
Esto es comida reconfortante. Si sé algo sobre Chase, es que no se cuida cuando
trabaja. Se ve totalmente envuelto en lo que está haciendo y se olvida de comer.
Si tengo que poner dinero, diría que no ha comido desde el desayuno.
Antes de alcanzarlo, se sienta de golpe.
Nuestros ojos se encuentran. El bosteza.
"La princesa ha vuelto", bromea, pero no sonrío.
Estoy seguro de que hay una acusación mezclada en su voz.
"Lo siento", murmuro, y no sé qué más decir.
Chase se encoge de hombros.
"¿Que te diviertas?"
Jodidamente divertido, pero no quiero presumir.
Me encojo de hombros.
"Espero que sí", dice Chase, y ahora sonrío y asiento.
"Entonces", empiezo y me siento a su lado. "Parece que has estado ocupado?"
"Jodidamente", responde y bosteza de nuevo.
"He terminado de hornear", le digo, y él pone los ojos en blanco.
"Ya era hora de que empezaras a jalar tu peso por aquí".
Estoy seguro de que solo me está tomando el pelo, pero no puedo evitar mi culpa.
"Mira", empiezo y busco las palabras correctas. "Te debo. Sé que realmente te debo por
saltar y dejar que me divierta un poco.
Chase se inclina hacia adelante y me besa en la frente.
“Juramento sangriento que me debes. Y puedes comenzar dándome el sándwich de
queso a la parrilla antes de que tenga que matarte por eso.
Los dos nos reímos.

Capítulo 36
Leila
Me deslizo en el asiento al otro lado de Dianne. Ella tiene su habitual delante de ella:
una taza de blanco fuerte y plano con leche de soja y sin azúcar y dos de mis bollos
característicos.
Su computadora portátil está sobre la mesa y su atención está en la pantalla.
Ella asiente con la cabeza un saludo breve mientras me siento.
Me duelen los pies. Realmente necesito un mejor par de zapatos; estos no hacen nada
por mi espalda baja. Después de una hora de estar parado en el piso de la cocina, siento
que he estado parado por días.
Mis labios descansan en mi taza, y tomo un sorbo de mi espresso triple shot. No dormí
bien y necesitaré toda la cafeína que pueda meterme para estar remotamente con ella.
Hay algo diferente sobre Dianne esta mañana. Frunzo el ceño.
¿Qué es? No es como si yo no fuera capaz de señalar de inmediato un cambio en una
persona que conozco bien.
"Me encanta tu cabello, Dianne". De repente me golpea como si alguien me hubiera
abofeteado. "El rojo te queda bien".
Dianne levanta la vista y sonríe.
Su mano involuntariamente alcanza su cabello recién coloreado.
"Gracias." Ella hace una pausa. "Parecía una buena idea en ese momento, pero ahora no
estoy tan seguro"
Puedo sentir su inseguridad.
"Realmente lo hago". Sonrío para tranquilizarla.
Vuelvo a tomar mi café. Chase está en la cocina, esclavizándose. Empecé unas dos
horas antes que él. La mayoría de los pedidos anticipados para el día han sido
empacados y están listos para ser entregados.
"¿Perdón?"
Creo que extrañé lo que Dianne me acaba de decir.
"Dije que sus magdalenas han llegado oficialmente a lo grande".
Arrugo la frente.
"¿Qué quieres decir?"
Dianne gira la pantalla de su computadora hacia mí.
"Mira, literalmente todo el mundo está festejando con estos pequeños retoños
deliciosos".
Con los ojos muy abiertos, miro quién es quién de las celebridades que muerden y
babean sobre mis bollos. Yo trago.
Guau. Esta fue una buena noticia.
“Felicidades, Leila. Creo que es justo decir que has llegado a lo grande ".
Le sonrío a Dianne. Sus palabras son música para mis oídos, pero sé que aún no estoy
en el gran momento.
Dianne me está mirando y siento que está buscando una respuesta.
"Eso es genial", le digo y miro hacia la cocina. Me pregunto si Chase ha visto estas
imágenes. "Creo que tenemos un largo camino por recorrer antes de que realmente
seamos parte del gran momento".
Tirones inquietos en la boca de mi estómago. Por supuesto, es genial ver a las
celebridades comer mis bollos, pero ¿a dónde ir ahora? Ni Blake ni Seth han dicho nada
más sobre hacer negocios conmigo.
¿Se habían salido de la idea? ¿Simplemente me había convertido en su juguete y ahora
terminaron conmigo? ¿Estoy solo?
Cuanto más lo pienso, más me preocupa.
Y luego me golpea como un tren a toda velocidad sin frenos, chocando contra una pared
de ladrillos.
"Mejor volver al trabajo". Tomo mi café y vuelvo la computadora hacia Dianne. “El
café no funcionará solo”.
Dianne está ocupada escribiendo en su móvil y solo asiente.
Armado con mi taza, me dirijo detrás del mostrador y hacia la cocina. Como tengo mi
café en mi taza especial, lo lavo para volver a colocarlo en su lugar especial.
Oigo que se abre la puerta y veo a un hombre elegantemente vestido entrar al café.
En lugar de dirigirse al mostrador, camina hacia la parte trasera del café y se detiene
frente a Chase.
Antes de que pueda preguntar qué quiere, el extraño habla con Chase.
"Buen día, querido señor." Él habla con una voz muy elegante, y me pregunto si este es
uno de los amigos de Chase que le está jugando una broma.
Chase ha dejado de hacer lo que está haciendo y está mirando al hombre con su
expresión habitual de "relajémonos".
"Seth McDaniels me envió a preguntarle si puede pedirle prestado a Leila por unas
horas".
Ante esta noticia, mi corazón inmediatamente da un vuelco varias veces.
Chase me mira.
Aplaudo y le doy mi mejor "oh, por favor, Seth, déjame ir, prometo que te lo
compensaré".
El fiel Chase pone los ojos en blanco.
Él es tan blando. Realmente lo amo.
"Si es necesario", comienza, y yo grito de emoción.
Le abrazo y le doy un beso en la mejilla.
"Gracias, cariño", le susurro, y él me mira.
"Me debes mucho, magdalena", dice, y yo asiento.
"Sé que sé. Te prometo que te lo compensaré.
Libero a Chase y sigo al chofer fuera de la cafetería. Dianne tiene la cabeza gacha, pero
la veo sonreír de oreja a oreja.
Chase se queja de algo, pero no puedo escuchar lo que dice. No importa. No se enfadará
conmigo por mucho tiempo.
Nos alejamos demasiado. Y, por supuesto, lo compensaré.
Justo en la parte delantera, hay una de esas enormes limusinas estiradas en la zona de no
estar de pie. En lugar de negro, este es blanco.
El Sr. Chauffeur me abre la puerta y, cuando entro, se inclina.
Me podría acostumbrar a esto.
Con un suspiro, me siento en los asientos de cuero negro y miro a mi alrededor. Hay
una televisión incorporada y minibar.
Cuando salimos al tráfico, presiono el pequeño botón del intercomunicador.
"¿Puedes decirme a dónde vamos?"
¿Qué sería esta vez? La última vez que una limusina vino a recogerme, fuimos a las
Bahamas. Me siento como una niña esperando a Santa Claus.
"Señor. McDaniels me pidió que no te lo dijera. Quiere sorprenderte.
Guau. El hormigueo comienza detrás de mi ombligo y se extiende a través de mí como
chocolate fundido.
Yo suspiro. Abro el minibar y me sirvo una copa de champán. Luego enciendo la
música y me siento en mi asiento para deleitarme con el lujo y el sueño de lo que me
espera.

Capítulo 37
Seth
Tomo un bocado de queso y disfruto de los sabores fuertes de mi lengua.
"¿A qué hora se debe?"
Me encojo de hombros
"Tal vez en unos diez". Mi dedo toma una galleta y le pone más queso. Jodidamente
delicioso. Si el conductor no entrega a Leila pronto, mi plato de galletas y quesos podría
haber desaparecido.
"¿Medianamente raro?" Blake señala el filete. Asiento con la cabeza.
Ha estado limpiando la barbacoa durante los últimos quince minutos más o
menos. Todavía me sorprende que esté aquí. Cuando lo invité, había habido una clara
vacilación. Estoy seguro de que solo está aquí para asegurarse de que no pase tiempo
solo con Leila.
Ahora que está aquí, debo admitir que estoy disfrutando de su compañía. Hasta ahora,
no ha dicho nada insultante. Incluso se ofreció voluntario para asar la carne.
Con mi vaso rojo, disfruto escuchando el silbido y el escupir de la carne mientras se
pone en la parrilla y los jugos gotean sobre la llama abierta.
Tomo un sorbo del audaz vino. La sensación de especias y vainilla son una delicia para
mi paladar y complementan perfectamente el queso.
"¿Quieres probar el queso y el vino?"
"Voy a dar vuelta la carne".
Más escupir y silbar, como un dios de la carne enojado quejándose de ser molestado en
su sueño en el fuego abierto.
No hay nada como cocinar en una llama real.
Cuando Blake se acerca, le sirvo una copa de vino y le tiendo el plato de queso.
Toma un sorbo y asiente con la cabeza apreciativamente antes de probar el queso y las
galletas.
“Este es un montón de problemas a los que has ido, McDaniels. Estoy impresionado. No
haces las cosas a la mitad.
"Mi, mi Blake", me reí. "Parece que me estás haciendo un cumplido". Destaco la
palabra yo.
"Me gusta este lugar, Seth". Él gesticula de izquierda a derecha. “Lujoso pero rústico,
nada demasiado elaborado. Y la comida que has preparado esta noche es excepcional ".
"Míranos, ¿quieres?" Le digo a Blake. Me mira con curiosidad.
“Estamos avanzando. Por una vez, no estamos luchando ni compitiendo ".
Una sonrisa se extiende por su rostro.
“El poder de una mujer. Un domador de leones, una bruja, una diosa; nuestra Leila
realmente es algo especial ".
"Sin mencionar, una mierda increíble", agrego y le guiño un ojo a Blake. Él ríe a
carcajadas.
La puerta se abre y Leila se une a nosotros.
Salto y la saludo con un beso antes de Blake. Un poco de competitividad no hace daño.
Mis manos agarran sus caderas antes de que una de ellas encuentre la parte posterior de
su cuello y la atraiga hacia mí. Duro y contundente, mis labios se aplastan sobre los de
ella. Mi lengua empuja dentro de su boca y entabla un duelo con el de ella. Mi otra
mano vaga por su trasero. Aquí apreto y masajeo cada nalga a su vez.
"Hey", grita Blake y me alejo. Estoy respirando un poco más rápido que antes.
Doy un paso atrás e invito a Blake a hacer lo mismo. Duda por una fracción de segundo
antes de que él también vaya por un beso apasionado. Cuando la suelta, le entrega un
ramo de flores.
Leila entierra su nariz en ellos antes de ponerlos en el jarrón que le dejé en el aparador.
Joder, esto se siente bien.
Es hora de que le entregue a mi invitada su copa de vino.
Como un verdadero conocedor del vino, lo huele antes de tomar un sorbo.
"Wow", murmura y bebe un poco más.
"¿Pinot Noir?" ella pregunta e inclina su cabeza hacia un lado, como siempre lo hace
cuando está pensando. La hace ver jodidamente sexy.
Asiento con la cabeza.
"¿Conoces tus vinos?" Blake pregunta, aunque es más una declaración que una
pregunta.
"Un poco", responde Leila y toma otro sorbo. “Me gusta el Pinot Noir. Es mi rojo
favorito, así que aprendí un poco sobre las variedades francesas ”.
Aplaudo para anunciar que la cena está lista.
Blake atiende la carne y llevo a Leila a la mesa donde saco su silla.
"Realmente amo este lugar, Seth", murmura en mi oído. Su voz es música para mis
oídos. “Nunca he estado realmente dentro de una cabaña de troncos. Este es
simplemente increíble ".
"Gracias", respondo y espero a que Blake venga y se una a nosotros.
No nos lleva mucho tiempo caer en una conversación fácil. La belleza de Leila es que
puede conversar sobre la mayoría de los temas.
"Seth". Blake me abofetea en la parte de atrás del hombro. “Lo has hecho tú mismo. La
comida es jodidamente fantástica ". Se da vuelta para mirar a Leila. "Perdón por el
idioma".
Leila se ríe.
"Tienes razón. Esta ha sido una de las mejores comidas que creo que he tenido. La
ensalada y los panes eran divinos ".
"Blake trabajó su magia en la carne". Siento que necesito dar crédito donde se debe.
Blake agita su mano izquierda de manera despectiva.
"Esta noche es todo Seth", responde. "Un lugar increíble, una comida increíble y un
vino increíble se deben a mi hombre, McDaniels".
Me pregunto si estoy escuchando correctamente. Blake me felicita? Eso es nuevo.
Leila se recuesta en su silla y cruza las manos delante de ella. Quiero levantarme y
recogerla para llevarla arriba a mi cama extragrande.
Una vez allí, solo quiero atarla a los postes de la cama y luego chuparle el coño hasta
que me ruegue que la folle y la folle duro.
Miro a Blake y me pregunto qué está pensando. ¿Está pensando en follarla
también? ¿Habíamos llegado a un acuerdo mutuo?
"Esta es una de mis primeras casas que compré y reconstruí", les digo a los dos. “Estaba
en muy mal estado, pero pude ver que alguien una vez lo amó. Pensé que merecía ser
restaurado a su antigua gloria ".
Leila descansa su cabeza sobre su mano derecha y suspira. Creo que podría ahogarme
en esos ojos suyos.
"Deberías estar orgulloso de lo que has hecho", dice Blake y ahora me pregunto si ha
bebido demasiado.

Capítulo 38
Blake
No estoy seguro de si es ese vino que Seth me dio a beber, o si puso algo en la comida,
pero siento una abrumadora necesidad de decirle al hombre qué trabajo increíble ha
hecho al preparar esta cena en esta exquisita casa en el país. También siento la
necesidad de ser amable. No es como yo y, por lo tanto, sospecho que Seth podría
haberme envenenado.
"Seth". Puse mi mano sobre su hombro. “Esto ha sido jodidamente fantástico. Lo digo
en serio."
Seth me está sonriendo.
"Ya lo has dicho".
Asiento con la cabeza. Sé que tengo Sigo y sigo al respecto. Debe ser el jodido vino o el
veneno. ¿Se me había ido a la cabeza? ¿Estaba arrastrando mi discurso? ¿Me
desmayaría?
Entonces me golpea. El jodido pinchazo estaba tratando de deshacerse de mí, para que
él pueda follarla solo. De ninguna manera.
"Así de increíble es el hombre", repito y quito mi mano.
"¿Te gusta tu cocina?" La suave voz de Leila me interrumpe.
Lentamente, mi cabeza se mueve en su dirección.
"Es más que cocinar, bebé", responde Seth. “La mayoría de lo que comiste ha sido
producido por mí y la familia. Creo en el enfoque holístico. Cultive lo que come y, por
lo tanto, coma lo que está en temporada ”.
Asiento con la cabeza. Nunca había sabido que Seth fuera tan sabio.
Leila asiente y cuelga de cada una de sus palabras.
“La mayoría de la gente no sabría qué fruta o verdura hay en la
temporada. Simplemente compran basura congelada en el supermercado ".
Leila se ríe.
"Afortunadamente, en el negocio de la panadería no tengo que preocuparme tanto por la
temporada".
Ahora es mi turno de admirar a Leila. Aquí hay una mujer que sabe lo que quiere y está
dispuesta a perseguirlo. Mi proceso de pensamiento parece un poco más lento de lo
habitual.
"La belleza de los postres horneados", concuerda Seth.
"Es una pena que la mayoría de la gente ni siquiera disfrute su comida", continúa Leila,
y la miro fijamente.
Creo que solo los escucharé. Me encanta escuchar la voz de Leila. Es como los ángeles
cantando. No es que haya escuchado a los ángeles cantar, pero así es como me imagino
que suenan.
Debo revisar este vino tinto cuando mis pensamientos no están tan confusos. Malditas
cosas fuertes, a menos que, por supuesto, Seth haya usado veneno.
"Realmente ha sido una noche perfecta", ronronea Leila y pone su mano sobre mi
muslo. Pequeñas ondas de descarga eléctrica me atraviesan.
"Todavía no ha terminado", anuncia Seth y me obligo a mirar en su dirección. ¿Puedo
ver dos de él o realmente hay dos de él? Es un jodido genio, no me sorprendería si
hubiera más de uno.
"No creo que pueda comer más", se queja Leila y se frota la barriga.
Ella ha movido su mano de mi muslo. Ponlo de nuevo, quiero ordenar, pero por alguna
razón, el habla y los pensamientos no funcionan al unísono en este momento.
"No estreses a mi amor", responde Seth. "No es más comida".
Ok, si no es más comida, ¿qué podría ser? La realización amanece lentamente. Una casa
tan grande como esta tendría un dormitorio, probablemente varios dormitorios, pero
solo necesitamos uno.
Le sonrío a Seth, una sonrisa omnisciente.
“La semana pasada, instalé una bañera de hidromasaje. Hasta ahora no ha sido probado
". Una pausa deliberada. "Creo que deberíamos probarlo ahora".
En lugar de una respuesta, Leila empuja su silla hacia atrás y se levanta. Lenta y
deliberadamente, sus dedos agarran la parte inferior de su camiseta antes de tirar del
material y moverlo sobre su cabeza.
Con un movimiento de muñeca, arroja la prenda sobre el sofá. Yo silbo Mi boca esta
seca. Quiero envolver mis labios alrededor de sus senos. Mis manos casi
involuntariamente alcanzan su sostén y lo sueltan. La parte de encaje del material cae al
suelo.
Se baja la falda y me deleito con su desliz. Y luego está desnuda.
Hay un brillo en sus ojos.
Miro a Seth. Sus dedos tiemblan con los botones de sus jeans, su top ya no está.
Como no quiero quedarme atrás, me arranco la ropa.
Tres segundos después, todos estamos en la bañera de hidromasaje. Mis pensamientos
son un poco más claros. Cualquier efecto del vino parece haberse disipado. Y me doy
cuenta de que Seth no me ha envenenado.
Leila se sienta entre nosotros.
Accidentalmente toco su pierna. Ella toma mi mano y la acerca a su pecho. Miro con la
boca abierta mientras toma la mano de Seth y la lleva a su coño. Esta mujer
definitivamente sabe lo que quiere y no tiene miedo de hacerlo.
Mis dedos aprietan sus pezones y masajean su pecho. Ha echado la cabeza hacia atrás y
ronronea, como un gato.
Cuando me muevo a su posición para poder chupar esos pezones, su mano encuentra mi
polla. Crece en su mano y ella comienza a masajearlo.
Joder, esto se siente bien.
Mi boca se pone a trabajar en esos senos. Mis manos se mueven hacia su trasero. Sé que
las manos de Seth están ocupadas con su coño. No estoy seguro, pero creo que la otra
mano de Leila está jugando con la polla de Seth.
Chupo, jalo y muerdo su carne. Al mismo tiempo, los dedos de Leila están trabajando
su magia en mi polla. Ella frota y masajea y aprieta mis bolas. Mi polla está tan
jodidamente lista que parece que está a punto de explotar.
Pero hay mucho más que quiero hacerle. Quiero que me chupe la polla antes de
golpearla. Quiero que le chupe la polla a Seth antes de que llegue su turno.
Miro hacia el cielo nocturno. Puta vista impresionante. La luna llena está sentada como
un queso redondo gigante en la oscuridad de la noche con millones de estrellas a su
alrededor.
Leila ha soltado mi polla. Ella está cambiando de posición. Seth está gimiendo.
Miro hacia el cielo nocturno otra vez mientras los suaves labios envuelven mi polla.
Agarro su cabeza y busco a Seth. Él tomó posición detrás de ella. Como un asado, Leila
está entre nosotros.
Cierro los ojos y disfruto follando la boca de Leila.

Capítulo 39
Leila
Mientras mis labios se curvan alrededor de la palpitante polla de Blake, no puedo evitar
pensar en cuánto me encanta tener estos dos aquí conmigo. Seth preparó una comida
increíble y un postre perfecto. Literalmente no podría estar más feliz en este momento.
Estoy tan emocionado de que Seth también haya trasladado esto a la bañera de
hidromasaje. Nunca he follado en uno antes. Honestamente, el agua caliente sola es
suficiente para que mi coño se moje, como si ya no estuviera con estos hombres sexys.
Mierda, estoy empapado.
Tienen cuerpos tan grandiosos; son aún más sexys desnudas y mojadas de lo que podría
haber imaginado. He estado tan hambriento por sus pollas toda la noche que he tenido
que mantener la boca ocupada solo comiendo comida para distraerme. Pero ha llegado
el momento, y ahora tengo a Blake a mi antojo.
Blake es uno de esos hombres que sientes que verías en la portada de una revista
playgirl. Su cuerpo es fenomenal y parece que ha sido retocado frente a tus ojos. Es tan
perfecto que quiero derramar una lágrima por siquiera mirarlo.
Tener su polla en mi boca me hace estremecer. Su polla es tan gruesa y tan dura que
siento que mi lengua podría lamerla arriba y abajo por millas.
Mis labios están apretados alrededor de su polla, y me muevo la cabeza hacia arriba y
hacia abajo sobre él, lamiendo el eje de su polla con cada movimiento. El sabor de su
piel es francamente adictivo. Tengo que tener cuidado conmigo mismo.
A medida que su polla sube y baja, mis tetas entran y salen del agua caliente y
expulsada. A medida que se sumergen en la bañera de hidromasaje, se calientan
instantáneamente y se enfrían inmediatamente cuando vuelven a salir mientras mi boca
encuentra la punta de la polla de Blake.
Mis pezones han estado duros desde que entramos por la sensación de cambio de
temperatura. Como estoy enfocado en Blake, casi lo extraño. Pero maldición, ¿cómo
podría realmente extrañar ese toque?
Seth tiene su mano en mi espalda, justo encima de mi trasero, ya que estoy inclinado a
chupar a Blake. Su caricia es suave y calmante, pero su mano tiene mi mitad inferior
completamente bajo su control.
Es un pequeño sándwich divertido en el que me encuentro. Estoy alimentando la polla
de Blake mientras Seth está detrás de mí, solo cargando para follarme.
Me trago la polla de Blake. Puedo escucharlo jadear mientras toda su polla está envuelta
en mi boca y garganta, tan profundo como puede llegar.
Lo miro y le lanzo una pequeña sonrisa sexy. Es necesario cuando eres una puta para
mostrarle a la persona que estás sexuando con cuánto te estás divirtiendo.
La polla de Seth se abrió paso entre mis piernas, provocando mis muslos internos, y aún
más significativamente, los labios de mi coño. Estoy tan mojado y mi clítoris está tan
hinchado.
Ahora la polla de Seth está presionando mi botón de amor mientras mi boca está en
Blake, y estoy perdiendo el foco. Me estoy divirtiendo mucho aquí. No quiero que
termine tan pronto.
Necesito burlarse de ellos más fuerte. ¿Qué mejor momento que ahora?
Hrm. ¿Cómo hago esto? Cuando la polla de Seth se posiciona en la entrada de mi coño,
levanto la boca de la polla de Blake y me levanto.
La polla de Seth roza mi trasero en lugar de deslizarse dentro de mí. Levanto mi mano
detrás de su cuello, y sus manos encuentran mis tetas y las aprieta mientras besa mi
cuello.
Oh joder, eso se siente bien. Cierro los ojos y alejo la cabeza, dejándolo acurrucarse en
mi clavícula.
Tiré de su cabello juguetonamente antes de alejarlo. Me alejo de los dos.
"Vuelvo enseguida", le digo mientras doy mi primer paso fuera del jacuzzi.
"Espera, ¿a dónde vas, hermosa?" pregunta Seth, preocupado.
"Pensé que recién estábamos comenzando aquí", agrega Blake.
"No se preocupen, muchachos. Prometo que ya vuelvo ", le digo mientras envuelvo una
toalla alrededor de mi cuerpo.
Les mando un beso y me dirijo a la casa, de regreso a la cocina. Busco algo en los
mostradores ... interesante.
Casi abro la puerta del refrigerador, pero luego la encuentro. Miel. Cosechado
localmente, en gran medida un producto de Seth para la casa.
Levanto la tapa de la jarra y rocio miel sobre mis tetas y mi torso, e incluso dejo que me
salga algo del coño. Viaja por los labios de mi coño y gotea hasta mis muslos internos
también. Perfecto.
Vuelvo a colocar la jarra en el mostrador. Me doy cuenta de que la toalla no puede
volver a mi cuerpo, así que la llevo en la mano a mi lado. Los encuentro a los dos
todavía en la bañera de hidromasaje.
"Estoy de vuelta, amores", le digo. Les poso a la luz de la luna. La luz brilla de la
manera correcta contra mi cuerpo pegajoso y cubierto de miel.
"Oh, joder. Mira en lo que alguien se metió ”, exclama Seth. Prácticamente se empujan
mutuamente para llegar a mí.
Dejo caer la toalla, levanto mis brazos a ambos lados y dejo que me lamenten. La
lengua de Seth está en mi teta izquierda, lamiendo con fuerza la miel. Blake está a mi
derecha, besando y chupando mi pezón, su lengua moviendo la punta.
Ambos se sienten encantadores, y no puedo decidir cuál me gusta más. Puse mis manos
sobre sus cabezas y gemí mientras bajaban por mi estómago.
Seth se sumerge y me lame el coño, chupando fuerte mi clítoris. Gimo y agarro el
cabello de Blake. Lo jalo a mi cara y lo beso apasionadamente mientras me sacan el
coño.
Esta noche es jodidamente gloriosa. Toda la atención está en mí, y no puedo tener
suficiente.
Después de Seth Cuando termina de sacar miel de mi cuerpo, volvemos a la bañera de
hidromasaje. El agua caliente y burbujeante nos saluda nuevamente mientras
sumergimos nuestros cuerpos en los asientos empotrados. Seth está sentado a mi
izquierda. y Blake está a mi derecha.
Sin perder tiempo, me vuelvo hacia Seth y le meto la lengua en la boca. Él mueve la
punta de su lengua contra la mía, y nos detenemos en la pasión del otro.
Mientras me beso con Seth, tomo la polla de Blake en mi mano y la agarro con fuerza,
acariciándolo lentamente y burlonamente. Lo escucho gemir y siento que empuja sus
caderas hacia mi mano cuando llega a la base de su polla.
Me encanta sentir que un hombre experimenta placer. Cuando una polla se endurece o
palpita en mi mano o boca, me vuelve loca.
Seth y yo rompemos nuestro beso, y giro la cabeza hacia Blake y me beso con él. Ahora
estoy acariciando la polla de Seth. Maldita sea, esto es muy divertido.
Blake se levanta y se pone detrás de mí. Mientras su polla busca mi coño, miro a los
ojos de Seth.
Ahora estamos en la configuración exactamente opuesta a la que teníamos antes. Esta
vez, estoy listo.
Seth se levanta y lleva su polla sobre la superficie del agua. Su mano llega a la parte
posterior de mi cabeza y la empuja hacia él.
Acepto su polla entre mis labios felizmente. Mi lengua gira alrededor de su polla
mientras mi cabeza viaja hacia abajo.
Sin tiempo real para prepararse, su polla está en mi garganta. Me lo trago y Seth gime
fuerte, como si no lo estuviera esperando.
Muevo la cabeza hacia arriba y hacia abajo sobre él. Mi mano masajea sus bolas
mientras chupo su enorme polla palpitante. Estamos jodidamente acalorados, y sé que él
está tan en el momento como yo.
Gimo en voz alta, y simultáneamente, después de provocar el agujero, Blake empuja su
polla dentro de mi coño dolorido.
Empujo hacia atrás contra su polla, llevando toda la longitud de su enorme polla dentro
de mí. Estoy lleno de polla, me siento increíblemente cachonda, y no lo haría de otra
manera.
Los chorros de la bañera me hacen cosquillas en el clítoris mientras chupo y me follan.
No espero que pueda pasar mucho más tiempo antes de explotar por todos los
movimientos sexys que me han estado haciendo.

Capítulo 40
Blake
Leila es jodidamente perfecta. Maldita sea, maldita sea. Su coño estaba prácticamente
hecho para mi polla.
Ella arqueando su espalda, forzando mi polla dentro de ella aún más ... Simplemente no
lo esperaba.
Su coño también está muy apretado. No puedo dejar de mirar esas curvas sexy que
conducen a su perfecto culo y coño mientras empiezo a bombear lentamente mi polla en
su coño.
Puedo escuchar a Leila gemir, su voz sonaba por primera vez, amortiguada por la polla
de Seth y por ser empujada con mi jodida. Hay algo tan malditamente sexy en una
mujer que se inclina hacia ti.
Coloco mis manos en las caderas de Leila que están inclinadas hacia afuera para mí.
Mis manos ahuecan sus costados perfectamente. Su piel lisa brilla con gotas de agua, y
no hacen nada más que acentuar sus ya prominentes curvas.
Mientras guío sus caderas, encuentro su coño y mi polla, empujándolas una contra la
otra, escucho a Leila quejarse a través de su garganta mientras la polla de Seth ocupa su
boca.
Sus caderas comienzan a empujarse hacia abajo en el agua. Ella los balancea
rítmicamente, y muevo mis manos hacia su espalda y me mantengo empujada con
fuerza en su coño.
Ella joroba en el agua que se ve obligada a atravesar los chorros de la bañera de
hidromasaje mientras mi polla está en ella. Ella gime fuerte y su pie se levanta hacia mi
espinilla, y siento que sus dedos se curvan.
Aprovecho la oportunidad para agarrar sus tetas y tocarla con fuerza antes de empujar
mi polla con fuerza contra su cuello uterino y follarla hasta que ella se deja caer sobre
mi polla.
Ella gime y gime en mi polla en voz alta y se vuelve más tranquila mientras baja de su
clímax. No dejo de empujar. Estoy bien jodido allí.
Esta chica caliente en mi polla me tiene lista para explotar. Y antes de darme cuenta, mi
polla explota dentro de su coño, cubriéndolo con mi propio semen.
Gimo y empujo las yemas de los dedos hacia sus caderas, no con fuerza pero con
firmeza, y disminuyo mis empujes hasta que termino de llegar. Mis ojos vuelven a mi
cabeza y dejo escapar un gran suspiro, satisfecho.
Espero ver a Leila todavía yendo duro a la polla de Seth. Qué pequeña zorra dedicada es
esta. Ella también tiene una boca talentosa. Me sorprende que se mantenga tan bien.
Ah, ahí vamos. Seth coloca su mano en la parte posterior de su cabeza y empuja sus
caderas hacia ella.
Cuando él bombea su polla contra sus labios, puedo ver en su rostro que está llegando
directamente a su garganta.
Ella gime fuerte, gorgoteando cum mientras exclama. Leila levanta la cabeza y se lleva
una mano a la boca, secándose el semen de la comisura de los labios.
Leila se vuelve hacia mí. “Bueno, maldición, muchachos. Tendría que decir que nunca
antes había comido un ... postre tan abundante ", dice y guiña un ojo antes de volverse a
su lado para dirigirse a los dos al mismo tiempo.
"¿Quién dice que el postre ha terminado?" Seth interpone.
"Oh mi. ¿Qué más tienes en mente, sexy? ella pregunta.
Seth se adelanta y tira de Leila por las caderas más cerca de él. Antes de darme cuenta,
ella está en su regazo, a horcajadas sobre su polla.
"Oooh, me encanta jugar al vaquero", dice ella. Ya dije que es perfecta un millón de
veces para mí, pero maldita sea, es perfecta.
Leila gime cuando la polla de Seth entra en ella recientemente coño cubierto de semen.
Su brazo se eleva hacia su hombro, dándole un poco de influencia para comenzar a
saltar hacia arriba y hacia abajo sobre su polla.
Mientras tanto, me encuentro bombeando mi propia polla, observando, esperando hacer
un movimiento propio. Verla trabajar una polla es fascinante.
"No seas tímido, Blake. Ven aquí y únete a la diversión ", dice mientras joroba la polla
de Seth.
Me acerco a ellos y agarro sus tetas nuevamente por detrás. Son tan flexibles, tan suaves
y tan alegres. Giro sus pezones hacia adelante y hacia atrás ligeramente entre mis
pulgares e índices.
Mis manos viajan hasta su pequeña cintura. Mis brazos la envuelven por completo. Mi
polla dura se frota contra su espalda y su culo.
Dejo de maniobrar mi polla cuando la punta encuentra su gilipollas. Me coloco allí
correctamente y lentamente me dirijo hacia el pequeño agujero apretado.
Mientras empujo mi polla dentro de ella, ella deja escapar un suave gemido, uno que es
un jodido precum que sale de la cabeza de mi polla.
Joder, esta chica va a ser la muerte para mí. Mi polla se desliza más en su culo. Mientras
ella está follando a Seth, saltando sobre su polla, los mismos movimientos se replican
por mi cuenta.
Las manos de Seth se apoderan de sus caderas mientras las mías viajan de regreso a sus
hermosos senos. Empujé mi polla por su culo mientras ella bajaba sobre la polla de
Seth. Nuestro ritmo es impecable.
Mis manos viajan nuevamente hacia abajo, admirando su cuerpo. Ahueco sus nalgas en
mis manos y admiro la gran masa redonda que es su trasero. Ella podría modelar ese
trasero y ser un maldito millonario.
En mi enamoramiento con el culo de Leila, empujé tan profundo y duro como pude.
Ella aúlla y empuja su gilipollas, tomando la mayor cantidad de mi polla como puede ...
todo.
Me mantengo en la misma posición, dejándola balancear sus caderas contra la polla de
Seth, disfrutando del inevitable balanceo contra mi polla también. Puedo decir que Leila
ama la atención. Puedes sentir la emoción a través de sus movimientos.
No puedo decidir qué parte de Leila es mi favorita. Besé, chupé y jodí lo que parece
cada centímetro, pero siempre quiero más. Toco sus tetas un poco más mientras me
inclino hacia adelante y beso su cuello y hombros.
Quiero expresar la mayor gratitud posible a esta diosa que está rebotando en mi polla.
Envolví mis brazos alrededor de su cintura nuevamente.
La dejo congelada en su lugar cuando empiezo a follarle el culo con fuerza. Empujé
dentro y fuera de ella rápida y vigorosamente.
Seth hace lo mismo y la folla fuerte debajo de ella. Ambos la estamos llenando y
follando tanto que no sabe qué hacer consigo misma.
“Puedes sentarte así, hermosa. Quiero complacerte, muñeca, ”le digo.
"Sí, cariño. Permítanos mostrarle un buen momento también ”, agrega Seth.
Ella grita de placer, y veo sus manos hundirse profundamente en los hombros de Seth.
Ella está a punto de venir por nosotros.
Echa la cabeza hacia atrás, se lleva las manos al cuero cabelludo y se agarra el pelo
mientras tiene un orgasmo. Observo su pecho subir y bajar y noto sus pezones duros;
Para ser honesto, no puedo evitar notarlo.
Cuando cae cojeando, envuelve sus brazos alrededor de Seth y deja caer su cabeza
contra su hombro. Bombeo con fuerza en ella, y mi polla se retuerce dentro de su culo.
Lo siento dolorido y pulsante antes de disparar una carga de esperma en su pequeño
culo apretado.
Solté un fuerte gemido y empujé varias veces más, empujando más esperma dentro de
ella con cada punzada. Al mismo tiempo, Seth revienta su propia carga dentro de su
coño, donde había venido hace poco.
Ella está completamente llena de los dos, y cuando salimos de ella, veo una superficie
de esperma en la bañera de hidromasaje. Leila lo ve, lo toma en su mano y lo vierte
sobre su pecho. El agua vuelve a caer al jacuzzi, pero el semen persiste en sus tetas,
dejando una pequeña insignia maravillosa de su zorra.
"Mierda, Leila", le digo. "Eres malditamente perfecto. Tu coño es fantástico y tu trasero
es jodidamente de primera categoría. ¿Hay algo mal contigo?
"Se me ocurre una cosa", responde rápidamente. Mi pregunta era retórica, pero soy todo
oídos. "Simplemente no sé cuándo parar".
Ella toma mi polla en su mano y comienza a acariciarla, sus dedos se envuelven
alrededor del eje de mi polla. Vuelvo a crecer con fuerza en su mano y le sonrío,
ansioso por arar ese pequeño y hermoso cuerpo de nuevo.

Capítulo 41
Seth
Justo en frente de mí, Leila comienza a acariciar la polla de Blake. La iniciativa y el
deseo sexual de esta mujer es increíble y desconcertante. Todo el tiempo es refrescante.
Me gusta verla de esta manera.
Observo su brazo levantarse y bajarse en el agua. No puedo verlo exactamente, pero
puedo imaginar esa mano moviendo su polla arriba y abajo, tal como ella lo hace por
mí. Joder, esta chica es talentosa. Cada movimiento que hace con cualquier parte de su
cuerpo es perfecto.
Veo que sus labios se superponen con los de Blake. Sus ojos están cerrados y se está
dejando liderar con pasión ciega. Estar tan desinhibido es asombroso.
Blake lleva a Leila al lado de la bañera de hidromasaje donde se encuentra con el patio.
Sus manos viajan arriba y abajo de su cuerpo mientras caminan descuidadamente hasta
el borde del jacuzzi.
La rodilla de Leila salta a la superficie del agua una vez que han encontrado t Al lado de
la bañera de hidromasaje. Se balancea en el agua, como si estuviera tratando de
mantenerlo allí y tiene problemas para hacerlo.
Los brazos de Leila salen del agua y los arroja sobre los hombros de Blake. Ella está
empezando a jadear en lugar de respirar. Puedo decir con eso que sus dedos están dentro
de ella.
No puedo evitar agarrar mi polla con la mano y reconocer mi sed por esta mujer. Sus
tetas, sus curvas, sus caderas, su trasero, todos son malditamente perfectos. Tengo una
profunda necesidad de follarla de nuevo.
Pero es cierto que por el momento, verla follar con el dedo por Blake es jodidamente
caliente. Verla derretirse ante alguien, tener los dedos frotándose contra su punto G,
simplemente inclinarse hacia ellos es sexy como el infierno.
Les dejo tener un momento antes de subir las escaleras. Salgo de la bañera de
hidromasaje en silencio y salgo al patio.
El aire es fresco en comparación con la tina de vapor. Gotas de agua caen de mi cuerpo
con cada paso que doy a lo largo de la corta caminata.
Viajo hacia donde la cabeza de Leila descansa contra la madera, y me arrodillo, mi polla
flotando sobre su rostro.
Ella abre los ojos y mira mi polla. Ella sonríe ampliamente antes de abrir la boca y sacar
la lengua.
Ella lame mis bolas, cubriéndolas con su saliva. Levanta un brazo de Blake y comienza
a masajear mis bolas y pasa a baba por debajo de mi polla.
Blake mueve su rostro hacia el cuello de Leila, acariciando suavemente su piel mientras
sus dedos se hunden profundamente dentro de ella. Ella deja escapar un gemido corto y
empuja la cabeza de mi polla dentro de su boca y la chupa con fuerza mientras sigue
masajeando mis bolas.
Sus ojos se abren y escupe mi polla involuntariamente mientras Blake desliza su polla
dentro de su coño. Ella gime más intensamente y me sonríe.
Leila pone su mano sobre mi polla y la guía de vuelta a su boca, lamiendo todo lo que
puede desde su ángulo. Sus labios se envuelven alrededor de la cabeza de mi polla y ella
chupa con fuerza mientras sus dedos agarran el eje de mi polla y lo acarician.
Ella mueve mi polla al ritmo de los empujes de Blake dentro de ella. Cada vez que
empuja la punta de su polla contra su cuello uterino, ella la aprieta más fuerte por un
momento.
Suavemente muevo mi polla fuera de su boca y me doy la vuelta para estar de rodillas
en la parte superior de la bañera de hidromasaje. Mi polla está justo en su cara.
Empujo mi polla en su boca y ella se abre de par en par y gira su lengua mientras saluda
la parte posterior de su garganta. Traga saliva y yo me deslizo hacia su garganta.
Empiezo a jorobarle la cara. Escucho su respiración agitada debajo de mi pelvis y me
tiene tan alterado.
Quiero sentir más de ella. Saco mi polla de su boca y me bajo contra su pecho. Ella sabe
exactamente lo que quiero.
Leila junta sus tetas y hace un agujero entre ellas y deslizo mi polla dentro de ella.
Mientras Blake está follando su coño, yo estoy follando su escote.
Sus tetas se sienten muy bien contra mi palpitante y dura polla. Ella gime cuando la mía
y las pollas de Blake la empujan, solo disfrutando de las sensaciones en su coño y
contra su piel.
"Mmmm, Seth", ella pronuncia.
"¿Qué pasa, bebé?" Pregunto, mi polla aún presionando entre sus tetas.
"Entra y folla mi trasero", dice ella.
Salgo por un momento, y Blake los saca de la pared, dejándome deslizarme hacia abajo
en la bañera de hidromasaje, sumergiendo mi cuerpo con el de ellos.
Los retiro y empujo mi polla en el culo de Leila. Blake levanta ambas piernas de Leila y
empujamos con fuerza su coño y su culo al mismo tiempo.
Ella nos grita de placer. Mi polla palpita con fuerza en su culo y las fugas pre-cum de la
punta de mi polla dentro de ella.
"Espere. Espera —dice Leila, jadeando. “Quiero probar tu semen esta vez. Es postre
después de todo, ¿verdad?
Blake y yo nos miramos y asentimos. Salimos de ella y todos dejamos el jacuzzi. Me
acuesto en el patio y Leila se pone en cuclillas sobre mí.
Ella se sienta en mi polla, empujando toda su longitud en su culo. Blake se acerca y su
polla dura está a la altura de los ojos de ella mientras ella salta sobre mí. Al mismo
tiempo, ella comienza a jugar con su clítoris justo encima de mí.
Joder, ella se siente increíble. Cuanto más rápido rebota, más rápido se frota el clítoris.
Ella gime fuerte encima de mí antes de que su coño filtre su semen en mi estómago.
Jodidamente caliente Es difícil no volar mi carga en su culo aquí, ahora mismo.
Blake comienza a acariciar su polla en la cara. Ella toma su boca y envuelve sus labios
sobre la cabeza de su polla, chupando fuerte mientras él se masturba con ella.
"Ya voy", dice Blake. Leila empuja su mano y se balancea violentamente contra su
polla, extrayendo cada gota de esperma que puede de él. Ella pone sus manos sobre sus
caderas y lo aprieta con fuerza mientras acepta su carga en su boca.
Cuando termina, él saca su polla de su boca y se agacha y acaricia su cabello. Mi polla
todavía está en su culo, follándola, ella baja su rostro hacia ella y lo besa con su semen
en la boca.
Casi puedo imaginarme el semen viajando de una boca a la otra, de un lado a otro.
Después de unos pocos chapoteos, sus labios se separan y ella se traga su semen. Ella
limpia las esquinas de su boca con su dedo y lo mete en su boca y lo chupa limpio.
"Delicioso", dice ella.
Una palabra, esa palabra. Es lo que me lleva a la cima.
"Voy a venir, Leila", le alerté.
Rápidamente se baja de mi pene y rápidamente lo engulle en su boca. Ella empuja toda
mi polla directamente en su garganta.
Ella mueve la cabeza hacia arriba y hacia abajo, follando su propia garganta con mi
polla. Siento mi polla latir y contraerse en su garganta. Gruño y gimo en voz alta.
Ella envuelve sus dedos alrededor de la base de mi polla y deja que el semen salga a
chorros en su lengua. No dejó que ninguna gota de esperma se desperdiciara.
Cuando el semen deja mi polla, ella la empuja en su boca con su lengua. Se gira hacia
mi cara y acerca sus labios a los míos y empuja su semen dentro y fuera de mi boca.
El sabor de su saliva y su culo mezclado con el semen es increíblemente caliente.
Felizmente paso el sabor de ida y vuelta con ella. Después de jugar hockey de lenguas
por un momento, ella guarda el semen en su propia boca y se lo traga.
Ella se para y respira hondo. Ella cierra los ojos por un momento y se encoge de
hombros y exhala.
"Mis felicitaciones a los chefs", dice con astucia.
"El placer es todo nuestro". Blake y yo decimos, simultáneamente. Es inquietante, casi
como lo ensayamos. Pero absolutamente no lo hicimos. Que cursi. Estoy molesto.
Independientemente de la incomodidad que nos dio a Blake y a mí, Leila se ríe.
"Vamos muchachos. Volvamos adentro. Me estoy congelando ", dice ella.
Ella lidera, balanceando esas caderas perfectas en nuestras caras y la seguimos
rápidamente a la casa.

Capítulo 42
Leila
Tomo un sorbo de mi humeante taza de rico café negro fuerte. Es delicioso y da en el
clavo. Después de nuestra noche de sexo jodidamente increíble, necesito un fuerte golpe
de cafeína.
Blake y Seth se están preparando para irse.
Esta experiencia ha sido increíblemente surrealista. Me llevaron para tener una comida
fantástica y el mejor sexo de mierda con no solo uno sino dos tipos increíbles. Dos tipos
que saben cómo tratar a una mujer.
Mi cuento de hadas es jodidamente increíble.
En algún lugar profundo dentro de mí, el miedo intenta aferrarse. Nunca te jactes de tu
suerte, o algo así, mi abuela siempre me había enseñado. Recuerdo claramente estar tan
emocionado cuando gané un concurso de belleza organizado por el periódico local para
niñas de sexto grado.
La abuela me había despertado por jactarse. Ella había dicho que aquellos que
sucumben a la arrogancia, o se jactan, tienen que cuidar sus espaldas porque Némesis
estaría a la vuelta de la esquina lista para atacar y luego mi suerte cambiaría, así como
así. Y en las últimas tres palabras había chasqueado los dedos.
Esas palabras se han quedado conmigo.
¿Estaba sucumbiendo a la arrogancia? Frunzo el ceño. ¿La jactancia interna significaba
que estabas sucumbiendo a la arrogancia? ¿Y se estaba deleitando con su suerte o
placer?
Suspiro y tomo otro sorbo de mi bebida caliente.
"¿Listo para ir, magdalena?" Blake está detrás de mí y me doy la vuelta.
"Vaya, qué expresión tan seria, mi flor de loto". Seth se materializa junto a él y sonríe.
Me obligo a relajar mis músculos faciales y parecer menos tenso.
"Quejas?" Seth suena preocupado.
Sacudo la cabeza
"No", trato de mantener mi voz ligera. "Solo pensando en lo grandiosa que es la vida".
Y eso es lo que he estado pensando.
"Bien entonces." Blake hace sonar las llaves de su auto. "Si están listos para partir de
este pequeño pedazo de cielo, todos pueden subir a mi auto.
Al menos ahora sé cómo estoy llegando a casa.
"Concedido." Él hace una pequeña reverencia frente a mí. "No es tan rápido como una
limusina, pero sigue siendo un viaje cómodo".
Eso me hace reir.
"No necesito viajar en una limusina todo el tiempo".
Una vez que estamos todos sentados y atados al auto, Blake se marcha. Miro a mi
alrededor para echar un último vistazo a la increíble cabaña de troncos. Sonrío al
recordar la noche anterior y no puedo deshacerme del bulto que se asienta en la boca de
mi estómago.
Cuando estamos cerca de mi apartamento, siento como si las hormigas se arrastraran por
mi piel. Algo estaba mal. Podía sentirlo en mis huesos.
Mientras pasamos por Beans & More, noto el cartel cerrado en la entrada. Mi corazón
late un poco más rápido.
¿Que esta pasando?
Blake me deja en mi departamento y ambos ofrecen venir conmigo.
"Estoy bien. Realmente ", les aseguro y prácticamente hago un corredor.
Les doy un beso de despedida en la mejilla y corro hacia la puerta principal. Ni siquiera
miro hacia atrás.
Cuando entro en mi sala de estar, el aroma de los bollos horneados me golpea de
inmediato. Al menos Chase estaba vivo. Me detengo y respiro aliviado.
"Hola amigo", lo llamé y bajé las llaves. "¿Que esta pasando?"
Chase apenas se da vuelta para mirarme. Está balanceando dos bandejas de bollos. Una
es una bandeja horneada y la otra aún no se ha horneado.
Me acerco y lo libero de uno.
"¿Te conozco?"
Intenta mantener su voz ligera y juguetona, pero el trasfondo grave no se me escapa.
Echo mis ojos hacia abajo.
He estado montando una jodida ola de placer descomunal y no he estado pensando.
Destrozado, lo golpeo en el brazo.
"Bueno. Así que desaparecí ayer, pero eso no explica por qué el café está cerrado hoy ".
De alguna manera lo superaré esta vez. Encontraré una solución y todo estará bien.
"El café está cerrado porque no puedo hacer todo Leila". Chase está ocupado haciendo
otro lote de masa.
"Yo—" empiezo pero él me interrumpe.
“La gente quiere bollos, quieren que los sirvan y los bollos necesitan ser horneados. La
realidad es que, a menos que sepa cómo clonarme, no puedo hacer todas esas cosas al
mismo tiempo ".
Deja de hacer lo que está haciendo y cruza los brazos frente a su pecho.
La culpa me supera.
Nemesis ha golpeado.
Chase se mete la mano en el bolsillo y saca su móvil.
"Y los clientes se quejan".
Abre un sitio de redes sociales y me muestra los comentarios.
"No te molestes en probar los bollos de Beans & More, ya no están".
“Esperé dos horas solo para que no me dijeran más bollos. Tal vez deberían cambiar su
nombre a Scones No More.
Después de leer cuatro o cinco de los comentarios, me alejo. Las lágrimas brotan de la
esquina de mis ojos y me muerdo el labio inferior.
No quiero llorar delante de Chase.
"Deberías haberme llamado", murmuro en voz baja y voy a sentarme en el sofá.
¿Y decirte qué? ¿Traes tu puto trasero de vuelta aquí?
Avergonzado, me siento en mi sillón y levanto las rodillas debajo de mí. Descanso mi
mentón sobre ellos y pienso.
Qué tonto he sido.
¿Quién deja sus asuntos solos para ir y perseguir su propio placer? Un maldito tonto, mi
voz interior se eleva.
¿He mordido más de lo que puedo masticar? Claro que tengo. Estoy persiguiendo mi
propia felicidad, en lugar de centrarme en dirigir un negocio. Además, estoy
persiguiendo a dos tipos. No uno, sino dos.
Una mano me toca en el hombro.
Miro hacia arriba y veo una Chase borrosa. Esas malditas lágrimas venían después de
todo.
"No te preocupes. Mañana es otro día. Lo haremos mejor mañana ".
Le sonrío.
Qué suerte tengo de tener un asistente tan increíble. Si no fuera por Chase, no habría
bollos en absoluto.
Respiro hondo Tengo que tomar algunas decisiones difíciles.
Pero tal como dijo Chase, mañana es otro día. Mañana es un día para tomar esas
decisiones difíciles y ejecutarlas.

Capítulo 43
Leila
Puede que no tenga ganas de sonreír brillantemente, pero me obligo a hacerlo.
"Disfrute de sus bollos", le digo en un tono alegre y le entrego al cliente una bolsa de
papel con media docena de mis deliciosos bollos.
No hay respuesta La persona tiene sus auriculares puestos y me pregunto qué está
escuchando y qué tan difícil podría ser sacarlos incluso por un tiempo e interactuar con
el mundo que lo rodea.
"¿Estás bien en el frente?" Chase ha salido de la cocina.
Le doy el visto bueno. Me mira por unos segundos y trato de leer su expresión.
Desconfianza. Eso es lo que es. No confía en mí para quedarme todo el día en la
cafetería.
Por supuesto. ¿Quién puede culparlo? No he sido exactamente la Sra. Reliable en los
últimos días.
De hecho, si fuera mi empleador, me habría despedido varias veces.
Yo suspiro. No más. Atención. Estoy cien por ciento enfocado en el negocio. El placer y
la vida personal deben quedar en segundo plano.
En ese momento, la puerta se abre y familiar después de afeitarme asalta mis sentidos.
No no no.
Repito esas palabras como un mantra en mi cabeza.
Cualquiera que sea el plan para hoy, la respuesta será no.
No puedo simplemente escapar cada vez que uno de ellos silba. No soy una perra en
celo. Estoy tratando de ser una mujer de negocios exitosa.
"Hola preciosa". Seth aparece detrás del mostrador, ignorando a los clientes que han
hecho cola y están esperando que me sirvan para darme un beso.
Me alejo No tengo tiempo para esto.
Mi cuerpo me está gritando. Que mierda estas haciendo Queremos sentirlo.
Ignorando mis propias protestas, me dirijo a la siguiente persona que espera en la fila.
"Una docena de bollos, por favor".
Una vez que he completado el pedido y tomado su dinero, me dirijo al Seth expectante.
"¿Entonces eres libre?"
Hay un brillo distintivo en sus ojos. Travesura es lo que tiene planeado.
Sacudo la cabeza
Por el rabillo del ojo, veo a Chase flotando en la entrada de la cocina. Puedo sentir sus
ojos clavados en mí.
Seth no está listo para rendirse.
"¿Cuándo vas a almorzar?"
Se produce una lucha interna. Almuerzo. ¿Sería un error aceptar ir a almorzar con él?
Sí lo haría, grita mi voz interior.
Por qué, contrarresta mis emociones.
Porque no solo irías a almorzar, explica mi voz interior. Porque encontrarías una
habitación u otro espacio y te harías una tontería por el resto de la tarde, es por eso.
Espero no haberme vuelto rojo brillante como un tomate.
"No puedo, Seth", le digo con los dientes apretados.
Necesito volver a servir a los clientes. La fila de personas que esperan está creciendo a
cada minuto. ¿Qué estaba pensando, dejando que Chase se las arreglara solo?
Me golpea, como si alguien me hubiera abofeteado, qué egoísta he actuado desde que
conocí a Blake y Seth.
Simplemente me fui y busqué mi placer personal sin pensar cómo mis acciones
afectarían al pobre hombre.
Espero que me perdone.
"No puedo ser como tú y Blake". Espero que mi voz suene más fuerte y más decidida de
lo que siento. “Ustedes se mudan a un mundo diferente al mío. Si no estoy aquí para
administrar mi negocio, simplemente dejará de funcionar todos juntos ".
Seth no dice nada. Me sigue sonriendo.
Si esperaba que se fuera como un niño mimado al que le habían dicho que no podía
jugar con su juguete favorito, me equivoqué. Aunque al mismo tiempo, él no trata de
persuadirme.
Para mi propia consternación, me siento decepcionado de que él simplemente acepte mi
decisión. Quizás nuestro tiempo juntos no había significado tanto para él como para mí.
Cuando me alejo de él, veo que Chase todavía me mira.
Es con gran pesar que vuelvo a servir a los clientes.
En realidad, decirle a Seth que no estoy en su liga deja un sabor agrio en mi boca. Una
cosa era pensarlo, otra decirlo en voz alta.
Con una lágrima en el ojo, empaco una docena más de bollos. Solo quedan ocho.
"Solo veré qué tan lejos está el próximo lote nuevo", le explico al cliente y siento que el
alivio me invade ante la oportunidad de tener un minuto más o menos para
recomponerme.
Cuando regreso con dos bandejas de bollos recién horneados, Seth se ha ido.
Mierda.
La vida apesta.
No había esperado que Seth aceptara el cepillo como él lo hizo.
Me pregunto si Blake intentará llevarme a algún lado y cómo lidiará con un no. Me
gustaría pensar que es el tipo más persistente, el tipo que no acepta un no por respuesta.
A medida que avanza el día, mi espalda baja comienza a doler y me duelen los pies.
Desearía haber podido llevar a Seth a una cita para almorzar.
Por alguna razón, la línea de clientes parece salir por la puerta principal y seguir y
seguir para siempre. Llevo horas sirviendo sin fin a la vista.
Yo suspiro. Todavía no puedo creer Seth acaba de aceptar su destino.
Sin querer, saco mi móvil y lo miro. Casi esperaba una invitación para cenar, pero no
hubo ninguna de ninguno de ellos.
Un sentimiento de soledad se apodera de mí.
¿Seth le había contado a Blake sobre mi cepillo y es por eso que no he tenido noticias de
Blake?
Por más que lo intenté, no puedo sacar ninguno de mis pensamientos.
"Pedí dos docenas de tus bollos, no uno", me grita una mujer mayor molesta.
"Mi error." Intento sonar de disculpa. Vaca . "Te conseguiré otra docena".
Cuando me doy la vuelta me doy cuenta de que nos hemos quedado sin bollos.
"Permítanme entrar en la cocina para ver cuánto tiempo antes de que esté disponible el
próximo lote".
"No te molestes", sisea la mujer y agarra su bolso. "Estoy apresurado. La próxima vez
pare, sueñe despierto cuando esté trabajando ".
Me muerdo el labio inferior. Este no es mi día.

Capítulo 44
Seth
Sé estrés cuando lo veo. Después de haber estado en el negocio desde que tengo
memoria, no es difícil hacer ejercicio cuando alguien está estresado.
Leila está estresada. No, está más que estresada, está muy estresada.
En lugar de ofenderme por su cepillado, doy un paso atrás y miro. Mirar a alguien puede
ser una mejor manera de aprender sobre ellos en lugar de preguntar. Las acciones,
después de todo, hablan más que las palabras.
La gente tiende a decirte lo que quieres escuchar y no lo que realmente está sucediendo.
Mirándola, puedo tener una idea bastante buena de lo que necesita y lo que necesita el
negocio. El lenguaje corporal no miente.
Después de unos minutos, es hora de actuar y me voy.
De vuelta en mi auto, saco mi teléfono. Solo lleva segundos presionar la marcación
rápida. Debería estar disponible, a menos que esté en una reunión. Tamborileo con los
dedos en el volante.
"Hola, Blake, mi hombre", saludo la voz familiar, y puedo escuchar sorpresa en la suya
cuando responde a mi saludo.
"¿En que andas?" pregunta, pero ignoro la pregunta. No es una pequeña charla lo que
busco, sino una propuesta comercial que debemos discutir. El tiempo es la esencia.
"¿Donde estas?"
"Oficina." Blake parece entenderme y sigue el punto.
"Estaré allí en breve".
Es una declaración y Blake no discute ni me engaña. Siente la importancia.
Mientras conduzco por la ciudad hasta el Imperio Robertson, juego con diferentes
soluciones y planes de negocios.
Leila necesita ayuda. Su producto es sobresaliente, pero como cualquier otra pequeña
empresa, enfrenta grandes obstáculos antes de llegar a lo grande.
Quince minutos después, estaciono mi auto deportivo en uno de los lugares VIP del
parque y subo las escaleras a la entrada de dos en dos. Por encima de la puerta principal
envalentonada de doble latón hay una señal masiva: Jacobs Worldwide. La imagen de
un globo terráqueo con un avión dando vueltas alrededor completa la imagen.
No es de mi gusto, pero es mejor que otros que he visto.
De la nada, un caballero mayor con un traje negro y guantes blancos sale delante de mí
para abrir la puerta. Sonrío y le agradezco. El asiente.
Como nunca he estado en la oficina de Blake, me detengo en el directorio y encuentro
su nombre cerca de la parte superior de la lista.
Tomo el ascensor hasta el sexto piso. Tan pronto como se abre la puerta, una mujer, que
supongo que es Maddie, me saluda.
"Bienvenido, Sr. McDaniels".
Su voz suena un poco más melódica en persona que por teléfono. Me pregunto si ella
canta en un coro.
"Buenos días, Maddie". Le estrecho la mano.
Ella me lleva a una sala de espera y me invita a tomar asiento. Me quedo cerca de su
espacio de trabajo y miro su tipo a una velocidad vertiginosa.
¿Cuánto tiempo llevas con Blake ahora? ¿Deben estar cerca de diez años? Si bien no he
conocido a Maddie cara a cara, le he hablado por teléfono muchas veces antes.
"Seis años." Ella levanta la vista brevemente con una sonrisa. Cuando la miras desde un
lado, apenas puedes notar las cicatrices.
"Debes ser una mujer paciente", observo. En silencio, me quito el sombrero ante Blake
por haber contratado a Maddie. Habría tenido dificultades para encontrar trabajo con las
cicatrices. Pero Blake obviamente había podido mirar más allá del exterior.
Maddie deja de escribir, brevemente.
“Sí, seis años. Era un poco escéptico al respecto primero ". Veo una ligera sombra
oscurecer sus suaves ojos. “Pero Blake creía que yo era perfecto para el trabajo. No le
gusta mezclar negocios y placer. Le resultaba difícil encontrar a alguien que no quisiera
meterse en sus pantalones ".
Me río. Maddie es el verdadero negocio.
"¿Está en una reunión?"
Ella asiente.
"No debería estar mucho más tiempo", responde ella, y sus manos vuelven a volar sobre
el teclado. En lugar de tomar asiento, paso por la habitación. Me detengo a admirar
algunas obras de arte, antes de mirar por la ventana y volver a caminar de nuevo.
Me parece que no puedo quedarme quieto si mi mente está trabajando horas extras.
La puerta se abre y me giro hacia ella. Una mujer en traje de negocios abandona la
oficina de Blake. Nuestros ojos se encuentran y él me sonríe.
Sigo su invitación a su oficina.
"Maddie, por favor tráenos dos cafés fuertes".
Sin decir una palabra, Maddie deja su posición. Blake cierra la puerta.
Se vuelve hacia mí con una mirada que quiere decir: "¿qué coño estás haciendo en mi
oficina?"
"Bueno, bueno", digo y miro a mi alrededor. "Quién hubiera pensado que visitaría la
oficina de la oposición".
Blake se ríe. Me da palmaditas en la espalda.
"Los tiempos están cambiando", responde y va a sentarse en el sofá.
Maddie entra con café.
"Y todo debido al poder de una mujer increíble". Hay un brillo en sus ojos.
Me uno a Blake en el salón y señalo una de sus fotos en la pared.
"¿Es una fotografía o una pintura?"
Es el ojo de un animal y desde que puse un pie aquí, sentí que me miraba. Blake sigue
mi dedo.
"Un fotografo." Él suena desconcertado. "¿No te gusta?"
Sacudo la cabeza
"Por el contrario, me encanta". Hay algo surrealista en el ojo y te hace sentir como si la
criatura estuviera mirando directamente a tu alma. No podías decir una mentira con un
ojo tan poderoso como este mirándote todo el tiempo.
El asiente.
"Yo también." Ambos lo miramos por un momento en silencio.
"Ahora bien", comienza Blake y rompe el silencio primero. "Me siento muy halagado
de que hayas venido a verme a mi reino, pero tengo que preguntarme ¿qué trae un
McDaniels hasta aquí?"
Me río y me pregunto por qué no nos hemos aventurado juntos en los negocios. Sentado
aquí, en esta modesta oficina con imágenes increíbles, una vista para morirse y un
hombre con sentido del humor en la línea mía, siento que formaríamos un equipo
jodidamente poderoso.
"Blake, mi amigo", empiezo, y lo miro a los ojos. "Tenemos un problema."

Capítulo 45
Blake
"No cuadra. Le ha ido bien y a los clientes les encantó su producto. Y luego llegamos, y
las cosas se ponen en forma de pera ”.
Juego con mi fidget spinner, un juguete plateado de hoja ninja, y escucho. La repentina
visita de Seth me ha inquietado un poco.
"Todos sabemos que tiene un talento increíble", comienza a decir Seth.
"Puedes decir eso otra vez," murmuro por lo bajo y me pregunto si Seth me escuchó.
"―Pero no tiene la mente empresarial, ni la infraestructura o el personal para
desarrollar su talento".
Seth hace una pausa y bebe un sorbo de café. Maddie está escuchando y escribiendo en
la computadora. Estoy escuchando y girando.
“La cuestión es que el delirio se ha convertido en una queja y todos sabemos lo que
sucede cuando los clientes comienzan a quejarse. Los clientes insatisfechos recurren a
aquellos sitios web en los que todos y cada uno se convierten en expertos revisores. Las
personas que no pueden deletrear dejarán comentarios negativos, y antes de que te des
cuenta, Leila y sus bollos estarán en la calle ", dice Seth.
"Vi un café exitoso pasar de un tiempo de espera de almuerzo de tres horas a quebrar en
cuestión de semanas debido a las críticas negativas en algunos sitios de redes sociales",
agrega. "No quiero ver a Leila fallar. Así que creo que debemos hacer algo juntos para
ayudarla ".
Estaba tocando mi pie mientras escuchaba el resumen de Seth, mi ceño fruncido. Pero
ahora, al final, asiento.
Estoy de acuerdo. No quiero ver a Leila fallar tampoco. Un poco de culpa se filtra a
través de mí. ¿Había estado demasiado ocupado tratando de superar a Seth y conquistar
a Leila para mí misma, en el proceso perdiendo contacto con cuál era el objetivo
principal de la reunión inicial con ella?
"¿Estás seguro de que es tan malo como parece?"
No es que no confíe en Seth, tiene un gran sentido comercial. Pero Leila lo engaña y el
jodido sexo increíble que hemos estado teniendo. No me sorprendería si estuviera
pensando con su polla y no con su cerebro.
"Maddie". Me dirijo a mi fiel asistente. "¿Tienes algunas cifras sobre esto?"
Maddie gira la pantalla de la computadora de gran tamaño hacia nosotros.
Abre un par de sitios y lee algunos de los comentarios. No son exactamente
halagadores. Luego cierra Internet y abre otro programa. En cuestión de segundos, nos
muestra un gráfico de algún tipo.
"Esto muestra el rendimiento del negocio", explica Maddie y señala la pantalla.
Hay diferentes líneas de colores que se arrastran por la página. Uno es morado, el otro
es naranja y un tercero es negro. El morado es el más activo.
“Esta línea constante se refiere a la popularidad del negocio, antes de sus bollos. Luego
aumenta dramáticamente con la venta de los bollos increíblemente deliciosos ". Ella
señala la línea que cae drásticamente. "Y entonces es cuando ella se fue a las Bahamas
contigo, hasta ... ahora". El dedo de Maddie ha estado siguiendo la línea púrpura.
La caída es obvia, incluso para alguien que no entiende de negocios. No dije nada.
“Mira, te lo dije. Tenemos un problema." Seth está de pie y comienza a pasearse por la
habitación. Camina arriba y abajo, café en una mano.
Aún no digo nada. No tiene sentido enojarse, estar en desacuerdo o echarle la culpa.
Encontrar a alguien a quien culpar no soluciona el problema. La gente suele echar la
culpa rápidamente y rara vez acepta la responsabilidad de sus propias acciones.
Por el bien de Leila, tenemos que solucionar el problema. Y rápido.
Veo a Seth caminar por el suelo como un tigre enjaulado. Al verlo así, se me ocurre que
somos más parecidos de lo que he estado dispuesto a admitir.
Yo suspiro.
"Parece que somos la causa de la disminución", digo, más para mí mismo y más para
decir algo que para obtener una respuesta real.
Seth se detiene y asiente. "Me siento jodidamente horrible, hombre", responde y
comienza a caminar de nuevo.
"Sí, también me siento mal", permito. "Pero sentirse mal no ayudará a Leila. ¿Qué
hacemos para solucionar el problema?
Maddie murmura algo sobre ética de trabajo, pero la ignoro.
Seth se detiene frente a mi pizarra. Toma una pluma y se vuelve hacia mí.
"¿Puedo frotar esto?"
Asiento con la cabeza.
Cuando el pizarrón está todo blanco, escribe el nombre de Leila en el medio en letras
grandes. Luego, agrega mi nombre y el suyo a cada lado. Él conecta los tres nombres.
"Necesitamos resolver lo que funciona para todos nosotros". Se vuelve hacia mi. "Los
dos queremos a Leila, y queremos ayudarla a hacer crecer su negocio a uno de brillantez
culinaria".
Ahora que Seth lo ha explicado, se me ocurre. Si quiero a Leila, tengo que compartir. Y
tendré que unirme a Seth en esta empresa, tanto en los negocios como en privado.
Yo trago. Compartir no es mi fuerza, nunca lo ha sido.
"¿Qué necesita hacer ella para darse cuenta de la brillantez de su producto y hacer que
crezca a su máximo potencial?"
Veo mi fidget spinner dar vueltas y vueltas en la parte superior de mi dedo índice.
"Dinero, tiempo, personal, locales". Digo algunas de las cosas que me vienen a la
mente. “El dinero es el obvio. Cada negocio puede crecer con una inyección de capital;
Leila no será una excepción a la regla ".
Seth escribe aquellos en la pizarra debajo del nombre de Leila. Se detiene frente a su
mapeo, y luego lo veo agregar el nombre del café debajo de su nombre.
"Para que esto funcione", comienza Seth mientras se vuelve hacia acépteme,
“necesitamos trabajar juntos en un plan de negocios. No podemos simplemente tirarle
dinero. Primero, creo que debemos analizar las instalaciones, la dotación de personal,
los salarios y luego cuánto costará todo ”.
Lentamente, asentí. Me siento como un no nadador arrojado al océano muy lejos del
mar. Es un territorio desconocido, y no estoy seguro de si me gusta.
"Para Leila, tenemos que resolver esto juntos".
Yo suspiro. Sé que tiene razón. Joder, duele admitir esto.
"¿Tienes todo eso, Maddie?"
Mi fiel asistente asiente y sonríe.
"Se lo enviaré por correo electrónico a los dos en breve".
Cuando ella deja la oficina, Seth se acerca a mí y me tiende la mano.
Lo sacudo y él dice: "A los socios".
Lentamente, asentí y me hice eco: "A los socios".

Capítulo 46
Leila
Me recuesto en el enorme cojín del sofá. Chase está sentado frente a mí con las piernas
en el asiento. Cualquiera que nos mire pensaría que somos la pareja perfecta.
"No deberíamos estar haciendo esto", digo entre bocados de comida.
Chase levanta una ceja de esa manera cuestionable en la que es tan bueno.
Su aspecto es "de qué mierda estás hablando, estamos comiendo deliciosa comida para
llevar sin tener relaciones sexuales".
Pongo los ojos en blanco y estoy tentado a tirar un cojín, pero me detengo. Si participo
en una actividad tan infantil, podría volcarme sobre los contenedores para llevar en el
proceso y luego tendré que limpiar el desorden. Y he hecho suficiente limpieza en los
últimos días.
Mi cuerpo ya está desgastado más allá del punto de agotamiento, no tiene sentido
empujarlo más allá de sus límites.
"Mi madre creía que la comida para llevar nunca le hacía daño a nadie", me dice Chase,
y vuelvo a poner los ojos en blanco.
"Probablemente porque tu madre no podía cocinar", le respondo y Chase se encoge de
hombros.
"Cualquiera sea la razón, ella probablemente tenía razón".
Asombroso el tipo de basura que las personas se dicen y en realidad creen.
"La comida sana es lo que deberíamos comer".
Por supuesto, deberíamos comer buenas comidas saludables a partir de alimentos
naturales. Pero para hacerlo, uno de nosotros tendría que cocinar. Al final del día, solo
tenemos energía para usar nuestros dedos para marcar el punto de venta de comida para
llevar más cercano y pedir una cena nocturna.
Si sigo a este ritmo, estoy obligado a aumentar de peso.
Durante unos minutos me permito revivir la exquisita cena que Seth me preparó; se me
hace agua la boca solo de pensarlo.
Por supuesto, al mismo tiempo, recuerdo el jodidamente fantástico sexo que tuvimos
esa noche. Cómo bailamos desnudos juntos a la luz de la luna, cómo me cogió por
detrás y cómo le di una mamada fantástica.
Veo los rayos de luna arrastrándose por el suelo y el cuerpo divino de Seth y su enorme
polla. Esos fueron los días.
"¿Estás bien?" Chase me está mirando, su expresión burlona.
Sacudo la cabeza No estoy jodidamente bien.
"Me duelen los pies".
"No los estoy frotando". Chase levanta la mano en un gesto de "no lo pienses".
"Como si" murmuré y metí más fideos en mi boca. La comida rápida grasosa es comida
para el alma. "Creo que debemos pensar en contratar a alguien más", le digo una vez
que termine este bocado.
He estado reflexionando sobre esto por un tiempo ahora. El hecho es que el trabajo es
demasiado para Chase y para mí. Durante los últimos dos días hemos vuelto a casa
totalmente destrozados después de nuestros turnos de más de catorce horas.
No sé sobre Chase, pero no podré seguir a este ritmo por mucho más tiempo. Si algo no
cambia pronto, estaré agotado y superaré mi fecha de caducidad.
Para mi sorpresa, Chase no dice nada. Él no está de acuerdo ni está en desacuerdo. Esto
me deja un poco incómodo. ¿Que esta pasando?
Chase no es alguien que se contenga con sus opiniones, en particular sobre las cosas que
importan, y habría pensado que el funcionamiento del café le importaba.
¿Me he equivocado? ¿Chase no está tan comprometido con esto como pensaba? Tenía
otros hierros en el fuego del que no estaba al tanto.
Mi imaginación comienza a funcionar con el tiempo. Estoy empezando a imaginar todo
tipo de proyectos en los que Chase está interesado. ¿Podría haber sido tan ciego?
Realmente tenía mi mente en el lugar equivocado últimamente.
"Entonces", comienza Chase, y mi corazón late un poco más rápido.
¿Está a punto de renunciar a mí? ¿Lo perderé como perdí a Blake y Seth? Aunque si soy
sincero conmigo mismo, realmente no perdí a esos dos, simplemente no podría seguir el
ritmo de su estilo de vida.
Pero no puedo permitirme perder a Chase. Mi mente está trabajando horas extras
tratando de encontrar algo que decir para evitar que me abandone.
"¿Has visto a Blake o Seth últimamente?"
Al principio, solo escucho palabras y el significado no tiene sentido.
Chase dijo algo sobre Blake y Seth y nada sobre él dejando el negocio y yo estando
solo.
"¿Entonces?" Chase dibuja la "o" en sí.
Sacudo la cabeza, el alivio me invade. No sé qué haría si Chase me dejara. Me perdería,
eso es lo que sería.
"No, y es mejor así".
Chase me da otra mirada de ceja levantada, la que significa ‘sí, maldita sea, dile a
alguien que te cree. "Lo ignoro.
"Creo que me iré a la cama", me dice, y yo asiento.
Tenemos otro largo día por delante. Probablemente sea hora de que los dos tengamos un
sueño reparador.
Lo miro desaparecer en su habitación antes de que yo también me levante del sofá y
limpie nuestra cena. La belleza de la comida para llevar es que no hay que lavarse.
Una vez que la sala está razonablemente ordenada, me dirijo a mi propia cama.
Enterrada entre mis mantas sedosas, suspiro.
Con mi cuerpo cerca del agotamiento al final de cada noche, no puedo detenerme en
Seth o Blake. Claro, pienso en ellos de vez en cuando, pero tan pronto como lo haga,
deje de lado esos pensamientos y ocúpeme en las tareas en cuestión.
Si quiero triunfar en el mundo culinario, necesito mantener la concentración. Cada vez
que he estado con cualquiera de ellos, o con ambos, no he podido mantener la tarea.
Para tener éxito permanecer en la tarea es todo.
Suspiro y me acurruco más cerca de mis mantas.
¿Qué bueno sería tener otro ser humano en la cama conmigo, acurrucarse y tener su
brazo alrededor de mi cuerpo? Más concretamente, ¿qué bueno sería si Seth y Blake
estuvieran aquí para consolarme, abrazarme y, por supuesto, joderme?
Concéntrate, me recuerdo y cierro los ojos. Trato de pensar en bollos, pero por alguna
razón mi mente se desvía hacia pollas enormes y sexo jodidamente increíble.

Capítulo 47
Leila
Algo está zumbando alrededor de mi cabeza. Odio los ruidos molestos, especialmente si
no puedo determinar de dónde vienen o qué son.
Esta no es una de esas moscas feas con ojos de insecto, ni es un martillo neumático.
¿Podría ser un teléfono?
Por alguna razón, mi cerebro simplemente se niega a ponerse en marcha.
Estoy en ese delicioso estado de solo despertar. El mundo se siente perfecto mientras
me acurruco en mi almohada de plumas.
De repente, mientras mi mente registra el ruido molesto cuando suena el teléfono, me
siento en posición vertical. Noto la luz que entra en mi habitación a través de las
cortinas mal cerradas. Con la cantidad de luz solar que entra, debe estar bien y
verdaderamente después de las seis de la mañana.
Frenéticamente, mis dedos alcanzan mi móvil. Ha dejado de sonar.
La pantalla muestra ocho llamadas perdidas de un número que no reconozco.
Es el momento que me tiene gimiendo.
Mierda. Me he quedado dormido
Decido saltarme la ducha y agarrar la ropa de ayer. Nadie se dará cuenta. Una vez que
me pongo el delantal, nadie puede saber lo que llevo puesto. Justo cuando abrocho la
blusa, el teléfono vuelve a sonar.
"Hola." Aprieto el móvil entre la oreja derecha y el hombro.
Todo lo que puedo escuchar son ruidos extraños. Podría ser alguien caminando por un
piso de mármol.
"Hola", intento de nuevo y cambio de lado mientras me pongo los zapatos.
La llamada se desconecta.
Solo lleva unos segundos y vuelve a sonar.
"Leila aquí", intento, y escucho una vez más.
"¿Eso es querido?"
La voz suena familiar. Frenéticamente, mi cerebro intenta colocar la voz apagada.
"Querido ... es ... encantador", son las únicas palabras que puedo entender.
"¿Mamá? ¿Papá?" Parece que mamá y creo que puedo escuchar a papá gritando algo en
el fondo. ¿Es ese el sonido de un avión despegando?
Sacudo la cabeza y miro la pantalla, que muestra "llamada finalizada".
"Joder", murmuro por segunda vez.
Mis dedos tiemblan con el teléfono y cae al suelo. Gracias a Dios por la alfombra, lo
último que necesito ahora es un teléfono roto.
Cuando lo levanto de nuevo, presiono volver a marcar.
Su llamada no se puede conectar; ¿Quieres intentarlo de nuevo?
Lo juro por la pantalla del teléfono. Por supuesto, no tiene la culpa, pero eso no
significa que no pueda culparlo.
¿Es hoy el primero de abril? ¿Me he perdido algo, un aniversario o un cumpleaños
importante? Mi mente se pone en blanco.
Abro la puerta de mi habitación y me detengo en seco cuando veo a Chase sentado en el
salón comiendo pizza de queso.
Incluso desde esta distancia puedo decir que es queso.
"Qué—" empiezo pero el resto de las palabras se atoran en mi garganta.
"¿Pizza?" Chase me extiende una pieza.
Mi garganta se siente repentinamente muy apretada, apretada como si alguien tuviera
sus manos alrededor y me está exprimiendo hasta el último aire.
El mundo comienza a girar, mis rodillas se sienten débiles y no estoy seguro si podré
seguir de pie por mucho más tiempo.
Chase se encoge de hombros.
"Más para mí."
"¿Que esta pasando?" Finalmente logro croar y alcanzar el reposabrazos en el sofá.
"¿Por qué no estás en el trabajo?" ¿Los dos nos quedamos dormidos?
"Hipocresía."
Los pensamientos me molestan la cabeza. ¿Qué quiere decir?
"¿Qué?"
¿Le pasa algo? ¿Descubriría que se está muriendo? No recuerdo que me haya dicho
anoche, ni el día anterior ni en ningún momento anterior que no esté bien. ¿No nos
acostamos en los términos en que dormiríamos bien antes del duro trabajo de hoy?
Las cosas se mueven demasiado rápido para mí. Estoy confundido.
Chase se encoge de hombros. Parece una imagen de relajación, no como alguien que ha
tenido noticias devastadoras.
"Te lo dije, no puedo". Toma otro bocado de pizza.
Cualquiera que sea la enfermedad, no está afectando su apetito.
"No entiendo." Me resulta difícil mantener mi voz bajo control y mis pensamientos en
cualquier tipo de orden.
"Está cerrado."
Ahora el mundo gira muy rápido a mi alrededor. Estoy colgado en el sofá. Cerrado. Las
palabras dan vueltas y vueltas en mi cabeza, pero no puedo entender lo que significan.
"¿Qué quieres decir con cerrado?"
Chase pone los ojos en blanco hacia a mi yo.
"¿Qué parte de cerrado no entiendes, Leila? CERRADO."
Cerrado. Alguien cerró mi café. Siento la vida inyectada en mí y agarro mi bolso y
prácticamente salgo corriendo por la puerta.
Me lleva menos de diez minutos llegar al café. Estoy respirando con dificultad
Cuando llego allí no puedo creer lo que veo. Se colocan andamios en el exterior de la
cafetería y hay una señal para decirles a los clientes que Beans & More se mudó.
Tomo mi celular y marco el número de mi casera.
"Te desalojaron", me dice en su mal inglés.
Sin dar más detalles ni explicaciones, ella cuelga.
Brevemente, miro alrededor. ¿Era algún tipo de broma? ¿Alguien saltaría y me gritaría
algo así como 'me atrapé' y trataría de reírme por eso?
Pero nada de eso sucede.
En cambio, los peatones continúan su camino y los automóviles avanzan a toda
velocidad por la carretera. La vida es normal.
Con la cabeza baja y los hombros caídos, regreso a mi departamento.
No puedo entender por qué Chase se ve tan relajado sobre todo el asunto. Siento como
si alguien me hubiera pateado las tripas con una bota reforzada con cemento extra
grande.
Una voz de la cocina me hace girar sobre mis talones.
Seth
Realmente es Seth parado en mi cocina.
¿Qué demonios está haciendo aquí?
"Hola preciosa". Es todo sonrisas pero no puedo sentir ninguna alegría al verlo.
"¿Qué estás haciendo aquí?" Trato de sonar cortés. Todo lo que quiero hacer es correr a
mi habitación y gritar. Mi vida se estaba yendo al baño y en uno parece importarme.
"He venido a darte esto". Él sostiene un pedazo de papel negro del tamaño de un sobre
de tamaño comercial.
En él, en letras doradas, están escritas las palabras "Invitación".
"Tengo una sorpresa para ti", dice Seth mientras me lo da.
Apenas puedo contener mis lágrimas.
"No estoy de humor para sorpresas", murmuro con los dientes apretados y alejo su
mano.
"Confía en mí, cariño, te encantará este".
Capítulo 48
Blake
Regreso con los padres de Leila con bebidas en la mano.
"No estás tratando de emborracharnos, joven, ¿verdad?" Suzanne, la madre de Leila, me
dice y me da una gran sonrisa.
Sacudo la cabeza
"No le haría eso a una mujer tan importante como tú", protesté.
Ella se ríe y toma su bebida.
"Bajo en alcohol, te lo puedo asegurar, Suzanne".
"Leeroy", me dirijo al padre de Leila, "¿echas de menos trabajar como contadora o la
jubilación es buena para ti?"
Siempre me pregunto qué hacen los jubilados todo el día. No puedo verme en la
jubilación, nunca. Pero entonces eso es probablemente lo que otros jubilados dicen antes
de jubilarse.
"La esposa me mantiene ocupado, joven". Me guiña un ojo mientras contesta mi
pregunta, y los tres nos reímos.
"Como si", protesta Suzanne.
Él pone su brazo alrededor de la cintura de su esposa y la mira a los ojos. Hay un
montón de amor allí.
"Si no fuera por esta encantadora mujer, estaría perdido".
Es un momento conmovedor. Yo sonrío. Brevemente, me pregunto cómo será la vida
para nosotros tres, si de verdad vamos a ser tres.
"Leila tiene suerte de haberte conocido". Las palabras de su padre interrumpen mis
pensamientos y le sonrío. Tuve que contarles el secreto y espero que mantengan la boca
cerrada cuando llegue Leila.
"Espero que encuentres esta suite cómoda mientras te quedas en la ciudad", le digo para
pasar el tiempo.
"Es más de lo que esperábamos", dice la madre de Leila.
"Es más de lo que realmente podemos pagar", murmura su padre.
"Por favor." Levanto mi mano para detener más protestas. "Es lo menos que podemos
hacer para asegurarnos de que nuestra sorpresa para Leila se dispare sin problemas".
Ambos me sonríen. Es conmovedor ver cuán agradecidos están. Se ha invertido mucha
planificación y trabajo duro en nuestro plan y ambos queremos que sea perfecto.
"¿Hace mucho que conoces a Leila?" Suzanne pregunta y tengo que hacer algo de
cálculo mental.
"Todo depende de tu definición de largo", respondo, y me pregunto si realmente solo ha
sido cuestión de semanas. Se siente mucho más tiempo para mí.
Suzanne se ríe de nuevo.
"Tienes toda la razón. A veces, de todos modos, pensamos demasiado en el tiempo.
Leeroy y yo supimos en el momento en que nos conocimos que estábamos enamorados.
Cuando anunciamos nuestro compromiso una semana después, la gente pensó que
estábamos enojados ".
Leeroy se ríe entre dientes.
“Y tenían razón. Estamos locos."
Nerviosa, miro mi reloj. Seth y Leila deberían estar aquí en cualquier momento. Ya los
habría esperado. ¿Había pasado algo?
Pequeños trozos de duda me arrastran.
¿Seth me había traicionado dos veces? ¿Me había arrullado con esta falsa sensación de
seguridad y seguido este elaborado plan, solo para frustrarme en el último minuto? Sería
como él, el astuto hombre de negocios que es. ¿Y si hubiera hecho un corredor con ella?
Me quedaría aquí con los padres y en Leila. Yo suspiro.
"Simplemente iré a ver si todo va según lo planeado". Me disculpo
Cuando estoy a mitad de camino por la habitación, la puerta se abre y entra la mujer
más exquisita que he visto. Brevemente, ella me sonríe hasta que sus ojos se abren con
incredulidad.
Sus mechones cuelgan sueltos de su espalda, pero se apartaron de su rostro. Un vestido
negro ajustado sin tirantes muestra sus hombros y curvas. Mi polla también la ve y hace
evidente su aprecio por ella.
Una vez que ve a sus padres, se dirige directamente hacia ellos. Crucemos los dedos,
mantendremos el estomago.
Veo a esta diosa deformar sus brazos alrededor de su padre y desearía que fuera yo.
Estoy seguro de que pronto sentiré su cuerpo, pero desearía que fuera ahora. Miro la
reunión familiar unos segundos más antes de unirme a Seth.
En lugar de entrar en la habitación, Seth se queda junto a la puerta. Me uno a él y nos
damos la mano.
"Ella se ve increíble". Sé que mi respiración es un poco corta y laboriosa. Seth rie.
"¿Como es ella?"
Seth vuelve a salir por la puerta conmigo.
"Confuso. Asustado. Sospechosa y desconsolada, su café ha sido cerrado ".
Asiento con la cabeza.
Esta es la peor parte del plan; sin decirle exactamente lo que estaba pasando. Sin
embargo, si le dijéramos, estropearíamos la sorpresa y, por lo tanto, debemos dejarla
sufrir, solo un poco.
"Odio las sorpresas", le digo a Seth cuando entramos en el estudio.
Me mira sorprendido con las cejas arqueadas.
"¿De Verdad? ¿Por qué?"
"No me gusta ver a Leila molesta. Sería mejor si la dejáramos participar en el plan ".
Seth rie.
"Hombre", me golpea suavemente en el brazo, "¿quién sabía que Blake es un gran
blando bajo ese duro exterior?"
"Vete a la mierda", gruñí pero me uní a él en su risa.
"¿Estamos todos listos para proceder?" Le pregunto a Seth y me siento detrás del gran
escritorio de caoba. Abro mi pequeña computadora portátil y escaneo los correos
electrónicos.
"Sí, todos los sistemas funcionan". Seth asiente.
"Llamaré a Maddie y le diré que ponga los toques finales al plan".
"¿Crees que los padres de Leila se lo dirán?"
Sacudo la cabeza
"Nop. Creo que están tan emocionados por su hija que no dirán nada. Ensayé con ellos
un par de veces lo que deberían decir cuando ella les pregunta por qué están aquí ".
Seth toma mi spinner inquieto y trata de hacerlo girar, sin éxito. En lugar de girar, el
dispositivo cae de su dedo. Lo intenta de nuevo.
"¿Cuál es el jodido punto de esto?"
Se lo quito y le doy una demostración.
"Es para relajarme, mantener mis dedos ocupados y ayudarme a pensar", explico.
Seth se ríe entre dientes.
"Follar a una chica hace lo mismo que sabes".
Le frunzo el ceño.
"Mis días de follar con cualquier chica han terminado".
El asiente. Agradezco que ambos estemos en la misma página en esta opinión.
"Esperemos que nuestra sorpresa sea un gran éxito y ambos seremos recompensados
adecuadamente", dice Seth, y yo asiento.
No puedo esperar.

Capítulo 49
Leila
Los veo en el momento en que cruzo la puerta. Son como pequeñas islas en una
pequeña ciudad natal, algo fuera de lugar y cerca uno del otro para tranquilizarse. Aun
así, por alguna razón, se ven cómodos estando aquí en este lugar de lujo extremo.
Sé los trajes que llevan puestos. Los he visto cada vez que hay una ocasión
especial. Mamá está en su conjunto gemelo sensible, el que la hace desaparecer entre la
multitud, pero si la estudias lo suficiente, ves que a pesar de los años, ella lo usa
cómodamente. Todavía tiene un ajuste perfecto.
Papá lleva su chaqueta, la que tiene los codos de cuero sensible para que nunca se
desgaste. Su collar está abierto, pero todavía parece que podría ponerse manos a la obra
en cualquier momento.
Puede que sean el tipo de gente que se ve lo que ves es lo que obtienes, pero veo
orgullo, trabajo duro y amor en ellos.
Entonces, ¿cómo es que estos dos están en una suite de negocios en el centro donde
ocurren todas las grandes jugadas financieras? Los pasillos de la iglesia, las reuniones
de la ciudad y los eventos de voluntariado son las únicas multitudes en las que he visto a
mis padres. Y lo único que recuerdo de la oficina de papá fue lo práctico que era, con la
única inclinación a la comodidad de la criatura que era su enfriador de agua y su
cafetera sin fondo .
Han volado aquí. Incluso el entrenador de vuelo sería algo que habrían considerado con
mucho cuidado, tal vez durante meses, y luego habrían hecho provisiones. Pero aquí
están, en una decisión espontánea, en un lugar en el que ninguno de nosotros había
estado antes.
Puede que tenga mil preguntas, pero hay demasiadas emociones en este momento. Hago
una doble toma cuando los veo, un poco sorprendido de que estén aquí. También siento
que mis entrañas se convierten en una sustancia sin esperanza. Miro como la cara de
mamá se ilumina como un árbol Yuletide. Siento que otra ola de emoción me invade.
Es como si estuviera de vuelta en tercer grado, mi madre me esperaba en la parada del
autobús. Ella tira sus brazos. Solo hay un lugar donde quiero estar.
Lanzo una rápida mirada en dirección a Blake, pero toda mi energía se centra en las dos
personas más importantes que veo en la sala en este momento.
Me pongo a trotar y, cuando me apresuro, noto que la cara de mi padre se ilumina como
un nuevo amanecer sobre las llanuras en casa. Casi no puedo creerlo. Solo soy su niña
envuelta en el abrazo más cálido, sin importar que esté en una oficina en lo alto. No hay
nada más aquí excepto mamá y papá. Estoy en casa.
Pero luego retrocedo cuando mil preguntas surgen.
“¿Qué haces aquí? ¿Por qué tan de repente? ¿Que esta pasando?"
Todas las preguntas surgen y se derraman tan urgentemente que no tengo tiempo para
pensar cómo ordenarlas, mucho menos esperar una respuesta.
"Nosotros ..." Papá comienza, pero sus palabras chocan con las de mamá cuando dice:
"Se trata del trato ..."
Ella dice esto y luego se detiene. Luego, ambos comienzan a hablar juntos de nuevo, sus
palabras caen una sobre la otra otra vez y no tienen sentido.
"Tú primero, cariño", mi papá, siempre el caballero, arrastra las palabras.
"Se trata del trato que estás a punto de cerrar", dice mamá.
"¿Que trato?" Pregunto.
“Bueno, no podemos decirlo. Nadie puede. Todo lo que sabemos es que es con los
Jacobs o los McDaniels. Eso es todo lo que Blake pudo decirnos antes de decir que
teníamos que venir aquí y unirnos a las celebraciones ”.
"Espera un segundo", le digo.
Mi padre, el hombre más cauteloso y financieramente responsable que haya nacido, y su
esposa, que ganaría el primer premio en cualquier competencia de frugalidad, acaban de
subirse a un avión para venir a ella tal vez ... ¿Qué está pasando?
"Ahora es mi turno", dice papá, más como una pregunta mientras mira a mamá para
pedirle permiso.
“Hemos tenido tal aventura. Sí, querida, tienes el piso ", dice mamá, sus ojos se
iluminan como un niño al que le acaban de decir que todos los días del próximo año
será su cumpleaños.
"¿Qué tal esto, Pequeña L?", Dice papá, llevándome de vuelta a mis días de infancia,
"este tipo aparece con la limusina más grande, negra y larga que puedas imaginar y
viene justo afuera de nuestro lugar y dice que es nuestro conductor. No podemos abrir o
cerrar una puerta de nuestro lugar al aeropuerto. Luego nos lleva de vuelta, hasta un
avión con una de esas escaleras y bajando hacia el asfalto. Un jet privado, ¿puedes
creerlo?
"Qué ..." Me las arreglo para salir, pero él no se ha detenido y sigue hablando.
"Por supuesto, una vez a bordo se nos ofrece champán ..."
"Por supuesto", se burla mamá como si saltaran en jets ejecutivos y bebieran champán
todos los días.
"Pero", lo interrumpo, "a esta hora?"
"Por supuesto", dice mamá, rodando los ojos y continúa. "Así que tuve que decir, 'Por
supuesto'".
Papá se ríe de la memoria y ahora está en el ritmo de las cosas. “Y, por supuesto,
cuando aterrizamos, otra de esas grandes limusinas negras nos está esperando. Está al
pie de las escaleras y no hay que esperar, ni abrir ni cerrar las puertas, y aquí estamos ”,
termina y extiende los brazos.
"Wow", es todo lo que puedo decir porque ahora me estoy convirtiendo en la hija de mi
padre. ¿Que esta pasando? ¿Por qué todos estos gastos y espectáculos involucran a mis
padres? Mis antenas suben. ¿Es esta una de esas veces que debería tener mi ingenio
sobre mí?
¿Que demonios? En este momento, mis padres están aquí delante de mí. Solo voy a
dejar que todo esto suceda y absorber este regreso al centro de la ciudad. Los he
extrañado tanto y nada, ni siquiera mi precaución heredada, lo va a estropear. Si tan solo
este momento durara para siempre.
Pero no lo hace. Las puertas dobles se abren de golpe y está Chase, el maestro de la gran
entrada.
"Señorita Leila", regaña, "no se quede con este hombre un momento más".
"¿Que? Que quieres decir?" Pregunto.
"La fiesta, Seth, ¿lo recuerdas?"
"Oh claro ... pero es esta noche".
“Sí, y te vas a vestir como solo Chase puede vestir a una mujer. Ven, querida.
Papá y mamá se unen mientras me dan un besito en cada mejilla.
"Corre", dice mamá. "Escuchaste al hombre".
"¿A dónde vamos?" Le pregunto a Chase.
"Querida, esta es una tarea estrictamente de la Quinta Avenida".
"Por supuesto", agrega mamá.

Capítulo 50
Leila
Como un niño pequeño que espera a Santa, siento que la emoción aumenta. Claro, he
estado en algunos paseos en limusina antes, pero eso no significa que se hayan
convertido en parte de mi repertorio diario. Todavía es lo suficientemente nuevo para mí
como para ser estimulante.
En el momento en que estoy adentro, lucho con la tentación de jugar con todos los
botones. Sin embargo, acepto la flauta de champán que me entregan y disfruto de las
burbujas frías que bailan en mi lengua. Me podría acostumbrar a esto.
Estiro los pies y le sonrío a Chase. Su expresión facial es indiferente.
La limusina se desliza junto al pavimento y el portero abre mi puerta en el momento en
que se detiene. Se inclina la gorra y nos tiene dentro de la exclusiva boutique que Chase
ha elegido para nosotros.
Me alegro de haberlo traído conmigo. Es natural en un lugar como este.
"¡Oh, cariño positivo!" le dice a la señora que nos está esperando adentro con una
bandeja de copas de champán. A este ritmo, estaré borracho antes del final del viaje de
compras.
Chase levanta su brazo en una carrera teatral y toma una de las bebidas. Con el meñique
extendido, toma un largo sorbo antes de exclamar: "¡Oh, excelente, simplemente
excelente!"
La señora me da una mirada que puede describirse como curiosidad o crítica. Difícil
saber cuál.
"¿Señora?" ella pregunta y extiende la bandeja con la flauta restante.
No estoy seguro, no solo sobre el champán sino también sobre muchas otras
cosas. Disfruté la bebida en la limusina, pero ¿dos en tan poco tiempo?
"Oh, vamos", dice Chase. "Mira todas esas burbujas que se desperdician".
Sonrío y tomo el vaso para un pequeño sorbo. Es bueno, realmente bueno y, según
decido, realmente peligroso. El champán tan bueno se cae tan fácilmente, y antes de que
te des cuenta, sentirás que estás en la nube nueve. Me detengo en ese sorbo.
La señora se presenta y dice que es nuestra asistente personal para lo que llama la
"experiencia de compra total".
"Ven por aquí", dice ella y nos lleva más adentro de la boutique.
"No lo entiendo", le digo a Chase mientras lo seguimos.
"¿Qué no hay que conseguir?" Chase pregunta. "Estas son las compras que estamos
experimentando".
“No, esto no. Esta es una pequeña celebración, ¿verdad? Digo, dibujando citas aéreas.
"Una pequeña", dice Chase. “Solo una pequeña celebración”. Él usa su dedo índice y
pulgar para hacer el punto.
"Estamos aquí para una experiencia de compra", continúo, "y mis padres fueron
trasladados aquí en un jet privado y luego conducidos en una limusina". Eso me dice
producción de Hollywood en lugar de una pequeña celebración ".
"Ahora, cariño, es obvio", dice Chase, chasqueando los labios después de beber de su
vaso. "Todo esto", dice agitando el vaso, "el avión, las limusinas, la celebración es un
cambio suelto para esos muchachos. El gasto para usted es Hollywood, pero para esos
tipos ni siquiera se registra. Apuesto a que esos muchachos están prestando más
atención a lo que hay para almorzar que esto ".
Toma otro sorbo largo y toma aire. Está calentándose con el tema.
"Y en cuanto a ti, cariño, estás pensando lo suficiente para toda la ciudad hoy, pensando
demasiado".
"Pero…"
El asistente desliza una tarjeta para abrir una puerta a un estudio lleno de luz con
espejos por todas partes, ricas sillas de cuero y una botella de champán enfriándose en
un cubo plateado.
Se escucha música muy suave. Dejé mi champán y dejé que las burbujas se
apagaran. Aquí es realmente donde una niña puede perder la cabeza. Chase levanta su
vaso y lo vacía antes de dejarlo junto al mío.
"¿Pero?" Chase pregunta mientras el asistente vuelve a llenar su vaso.
"El café. ¿Te acuerdas de ese lugar? Es donde tú y yo nos ganamos la vida. Resulta que
todavía está cerrado. El negocio se irá al baño a este ritmo. No entiendo por qué ese es
el caso.
"Tal vez olvidamos el alquiler", dice Chase. “No es problema. La casera nos echó.
La bombilla se enciende en mi cabeza. El tiene razón. He estado tan preocupado
últimamente que el día del alquiler vino y se fue sin que me diera cuenta.
Estamos tan atrasados que eso es exactamente lo que habría sucedido. No estoy seguro
de por qué, pero miento sobre esto.
“Pero solo han pasado dos días. Seguramente no habría trabajado tan rápido.
El champán ha tenido efecto en Chase. Está a un millón de millas de preocuparse por
nuestro alquiler. Ahora que tiene una explicación y funciona para él, el problema está
resuelto.
“Dos días, ¿eso es todo? Ni siquiera un problema. Ni siquiera un poco grande. La
llamaré y se lo diré. Tal vez vea la razón tan pronto como solucionemos eso.
Él vuelve a la champaña.
Nuestro asistente presiona un botón y los espejos a cada lado se deslizan para revelar un
estante de ropa de mujer en un lado y una colección de ropa de hombre en el otro.
"Wow", Chase exclama. "¡Wow wow wow!" Deja el vaso y se acerca a su estante.
"¿Tengo un presupuesto aquí, cariño?" le dice a nuestro asistente.
"No señor. El estante es tuyo para elegir. Todo ha sido preordenado.
Chase comienza a cantar como un niño pequeño.
"Feliz cumpleaños para mi. Feliz cumpleaños para mi."
Su cumpleaños fue hace semanas.
Luego se detiene y se da vuelta. "Houston tenemos un problema", dice.
"¿Señor?" el asistente pregunta.
"No no no. No contigo, cariño. Estás haciendo un trabajo excepcional. Es la señorita
Grouch por allá. ¿Tiene un presupuesto?
"Ciertamente no", dice el asistente. "Todo lo que tiene que hacer es tomar una decisión".
"Y relájate", dice Chase, prácticamente regañándome. “Vamos, Leila. Me estás
posponiendo aquí. No te haría daño bañarte en esto. Mira todo el esfuerzo que se ha
hecho para hacerte feliz. Deja de llover, ¿quieres? Es hora de que respires, respira y
báñate, bebé. Respira y báñate.
Chase tiene razón. Cuadro mis hombros, me pongo de pie y respiro
profundamente. Funciona. Una sonrisa estalla en mi cara. Tomo mi vaso y camino hacia
el estante para hacer algunas compras serias.

Capítulo 51
Leila
Miro el diamante y noto que la luz juega y se refracta a través de sus ángulos. Esta es
una pieza de joyería que exige más que una simple inspección. Esta es una pieza para
saborear. Lo camino hacia donde la luz es mejor y le doy toda mi atención.
Luego revela lo inteligente que es. Me parece que el diamante baila y embruja mientras
que las otras joyas se contentan con deleitarse con sus hermosos colores. Saben
coquetear con los ojos.
Esta pieza está delicadamente elaborada y es una alegría para la vista. El oro fluye a su
alrededor en curvas sensuales para crear un estado de ánimo: delicioso, rico y
seguro. Cuán perfectamente se han dispuesto ese metal y las piedras para crear esos
sentimientos que he llegado a conocer tan bien.
Toco la pieza a través de mis manos, disfrutando cada aspecto de ella. Esto, decido, es
joyería en su máxima expresión, cada pieza ensamblada y hecha a mano para crear
placer.
Hay un suave golpeteo en la puerta. No podía tener nada que ver conmigo, así que lo
ignoro, concentrándome en las joyas que revelan un nuevo truco, una nueva faceta y un
nuevo hormigueo de placer con cada movimiento de mis dedos.
Pero luego hay otro golpe en la puerta, esta vez acompañado de una tos suave y un
movimiento de pies. Me rindo y abro la puerta.
"Señora", dice un chofer de disculpa, curvando los dedos y llevándose el puño a la boca
para sofocar un poco de tos que ha fabricado.
“Es hora de irse, si no te importa. Entonces, ¿no podemos hacerte llegar tarde? Y el
tráfico en este momento ... Levanta los ojos cuando dice esto y sopla una pequeña
corriente de aire en su inexistente mechón.
"Claro", digo y recojo mi embrague y acerco mi envoltura.
No puedo hacer esperar a un hombre que trabaja, decido y cada viaje con chofer de hoy
ha sido un sueño hecho realidad.
Este chofer se pone en marcha a un ritmo inteligente, su forma de decir que tenemos un
poco de prisa. Lo persigo porque he decidido que este día se ha desenrollado tan bien
porque he hecho lo que me dicen.
Como para confirmar esto, el chófer me lleva a bordo en poco tiempo antes de que sea
experto en la corriente de tráfico, empujando y avanzando hacia el centro.
La mano de obra de la joyería vuelve a mí. Por sí misma, cada joya y la pieza de oro son
hermosas, pero lo que las eleva de la belleza al placer es la mano de obra y la forma en
que cada pieza se coloca juntas. Y aquí está la cosa; Es como Blake y Seth.
Yo hago bollos. Los mejores bollos del mundo, sin duda. Luego está el diamante de la
pieza. Tan fantástico, que es una pequeña joya en sí misma, pero no es una joyería, no
es una creación y nadie lo sabe. Lo que necesita es una base para que suceda.
Entonces el punto es obvio cuando lo pienso. Un anillo de diamantes no es un anillo sin
la banda de oro. Eso es exactamente lo que Blake es para mí. Él es el oro para mi
diamante, y con él detrás de mí, debajo de mí, a mi alrededor ...
Sacudo la cabeza cuando me doy cuenta de que estoy pensando de manera
equivocada. Debería volver al modo de negocios. Volviendo a mi punto, con su capital
y mis bollos tenemos una pieza de joyería.
Una pieza de joyería que decido, pero una pieza bastante común. La vida es más que un
gran negocio. Tiene que dar placer. Seth es un genio creativo. Él sabe cómo tomar algo
exquisito y convertirlo en algo que es puro placer.
Imágenes de cuerpos desnudos, pollas gigantes y sexo excitante se deslizan en mi mente
consciente.
Ahí voy de nuevo. Tengo que revisarme a mí mismo. Cada vez que pienso en esos dos,
mi mente se vuelve loca por placer. Esto es sobre negocios. Y mi mente tiene que volver
a tambalearse.
¿Es eso todo el universo: yo en el medio e intentando averiguar cómo puedo lograr que
otros hagan mi vida placentera y rica? Todo mi intelecto y conciencia me dice que esto
es tan egoísta.
Pero cuando sostengo todo esto a la luz, es como las joyas. Si esto va a funcionar, si
realmente voy a avanzar, no hay forma de salir de eso. Tengo que aceptar esto como
parte de mi vida ahora.
Está exactamente en línea con todas las leyes naturales y la mano de obra que hacen que
una pieza de joyería sea exquisita, placentera y mucho más que una simple colección de
metal y piedras. Si quiero que este sea el mejor negocio que puedo hacer, los necesito a
ambos.
Me recuesto en la tapicería de la limusina y cierro los ojos.
Por ahora, tengo que dejar que el conductor me lleve a donde sea que esté. Es joyería,
decido, pero realmente me gustaría que viniera un maestro joyero y trabajara en algo
exquisito.
Ahí voy de nuevo. Simplemente tengo que cerrar todo esto fuera de mi mente. Cada vez
que pienso en manos y cosas trabajadas para un placer exquisito, veo a Blake, Seth,
Blake, Seth. Incluso mi gemido al pensar en todo eso me lleva a lugares que no tienen
nada que ver con los negocios.
La limusina se ralentiza, así que miro hacia arriba para ver dónde estamos. Es un
parque. Nos deslizamos hacia Central Park y la limusina es tan lujosa, tan bien diseñada
y tan bien conducida que el parque se desliza como si fuera una película en movimiento.
Hay una isla de luz brillante en el medio. Es un restaurante y lo estamos haciendo
directamente. A medida que nos acercamos, veo que la luz se ha derramado sobre el
lago, de modo que el suave golpe y las ondas de su superficie la convierten en otra pieza
de joyería.
La limusina se detiene fuera, y un hombre con abrigo, gorra y guantes blancos está en la
puerta. Él la abre y yo salgo al fresco de la noche, con cuidado de encontrar mis pies
antes de levantarme. Mis ojos se alzan. Lo veo, pero en un día lleno de sorpresas, aquí
hay algo que todavía no puedo creer que esté sucediendo.
Mi corazón late tan rápido ahora, me temo que podría desmayarme.
¿Dónde están Blake y Seth para sostenerme cuando los necesito?

Capítulo 52
Seth
Semper paratus. Siempre preparada. Esta noche estoy preparado. Tengo que ser. La
preparación lo es todo.
Aunque ahora la preparación ha terminado, el tiempo será esencial. Necesito hacerlo
perfecto. Si se acabó el tiempo, toda la sorpresa se arruinará.
Blake y yo lanzamos una moneda para decidir quién haría el anuncio. Habia
ganado. Ahora, con mil millones de insectos arrastrándose a través de mí, desearía que
lo hubiera hecho. No recuerdo la última vez que había estado tan nervioso.
Mis ojos barren la habitación. Camareros de corbata negra con bandejas de bebidas en
sus manos, cheque. Luces encendidas y funcionando, verifique. Música suave que suena
en el fondo, verifique. Mesas decoradas con manteles blancos y esas bandejas de
muffins con lágrimas como piezas centrales, compruebe. Bandejas llenas de los bollos
de firma, cheque.
Aquí y allá, las personas están sentadas mientras que otros están parados en pequeños
grupos, hablando. Miro hacia atrás El letrero, que llegó esta mañana, está cubierto con
una enorme tela negra.
Las mariposas se multiplican en la boca del estómago mientras me pregunto por
centésima vez si cada palabra se ha escrito correctamente. ¿Qué tan horrible sería si
alguien descubriera un error en la presentación?
No es que no lo haya comprobado. Por el contrario, lo he corregido tantas veces que
podía recitarlo mientras dormía. Sin embargo, todavía tengo el presentimiento de que
podría estar equivocado. Quiero asegurarme.
Blake y yo pasamos un poco de tiempo en el diseño. Incluso discutimos sobre el
esquema de color. Al final, Maddie fue quien emitió el voto decisivo.
Y cuando llegó el letrero, parecía perfecto. Fondo morado claro con letras doradas,
terminado con un diseño de lágrima para los bollos, que también se hicieron para que
parecieran naturalmente cremosos.
Echo un vistazo a mi reloj de pulsera para ver la hora. Por lo general, confío en mi
teléfono, pero decidí usar un reloj para asegurarme de no tener que seguir sacando mi
pequeño móvil de mi bolsillo.
Solo quedan unos minutos antes de que ella llegue. No puedo esperar Estoy empezando
a sentirme como un niño pequeño esperando a Santa. ¿Cómo será su cara? ¿Y cómo nos
recompensará? La recompensa será la mejor parte; Solo puedo sentirlo en mis huesos.
Mis ojos ahora están fijos en la puerta principal. Recibo una señal, es decir, la limusina
se está deteniendo. En mi cabeza, cuento hasta cinco.
Camino lentamente desde el auto hacia la puerta de entrada en pequeños pasos. Sé que
cualquier creación que Leila vaya a usar esta noche será exquisita y estará fuera de este
mundo. Y, por supuesto, sé que ella no dará grandes pasos.
"Bienvenidos, damas y caballeros", le digo cuando se abre la puerta. "Bienvenido a la
noche de apertura de Beans & More, la última y mejor del mundo del café".
Sus ojos encuentran los míos cuando hago mi anuncio. Veo una miríada de emociones
aparecer en su rostro. Conmoción, incredulidad, placer y emoción.
Ella se dirige directamente hacia mí y me permito absorber todos y cada uno de nuestros
Leila.
El vestido es perfecto. El rojo le queda bien. Su cabello ha sido peinado en la parte
superior, con un mechón perdido cayendo aquí y allá. Alrededor de su cuello, los
diamantes brillan, atrapan la luz y la esparcen por el suelo. Puedo ver un brazalete a
juego en su mano derecha.
Aguanto la respiración y la veo deslizarse hacia mí. Aplausos la siguen. Me pregunto si
ella se siente como la estrella que es.
La he observado lo suficiente, así que me dirijo hacia ella. Cuando me alcanza, me
abraza. Su dulce aroma a pétalos de rosa hechiza mis sentidos. Mi polla se agita al
instante.
"Dios mío", susurra en mi boca mientras sus suaves y deliciosos labios plantan un beso
en mi mejilla.
La sensación de su piel suave es tentadora por mi cuenta. Tengo que contenerme de
agarrarla y arrancarle la ropa aquí y ahora.
"¿Contento?" Le murmuro al oído. Soy muy consciente de todos los ojos sobre
nosotros.
"Pensé que era la apertura de tu café, no la mía".
Ella da un paso atrás. Tomo su mano y la llevo a sus padres.
"Mamá", chilla. ¡Tienes un vestido nuevo! Te ves ", vacila, abraza a su madre antes de
terminar su frase," sexy ".
Puedo ver a su madre sonrojarse.
"Y papá, te ves positivamente peligroso con tu traje negro y corbata".
Doy un paso atrás y veo a la familia abrazarse e intercambiar cumplidos. Es suficiente
para llevar una lágrima a mi ojo.
"Semper paratus", Blake me susurra al oído y me pasa un pañuelo.
Mis dedos alcanzan el material blanco almidonado y me río.
El pequeño pinchazo competitivo tiene que superarme a cada paso, ¿no?
"Entonces", la voz de Leila interrumpe nuestro pequeño momento de tranquilidad,
"pensé que era la noche de apertura de Seth, pero el letrero dice Beans &
More". Todavía no estoy seguro de lo que está sucediendo ".
Sus ojos de cierva suplican respuestas. Se ve tan vulnerable, tan deliciosa, y solo quiero
sofocarla en besos.
"Lakeside Property es propiedad de Blake", explico. "Y pensamos que era el lugar
perfecto para lanzarlo a usted y su producto al estrellato culinario".
Sus ojos se han ampliado aún más, si eso es posible, y ella mira de mí a Blake.
"Felicidades, niña", la voz de su padre resuena, y su madre le da otro abrazo.
"Su proyecto es el primero en la empresa comercial de Blake-Me".
Blake pone un brazo alrededor de Leila y el otro alrededor de mí.
"Lo que realmente está tratando de decir es que Lakeside Property aquí es nuestra, y
tuya, mía y suya".
Pongo los ojos en blanco.
"El mundo culinario es ahora tu ostra, Leila", agrego con una sonrisa.
"Y, por supuesto, será el primero de muchos proyectos en los que se aventurará esta
nueva asociación".
"Wow", respira Leila, y yo no podría haberlo dicho mejor.
Sic vita est: así es la vida.

Capítulo 53
Leila
El bullicio alrededor de la habitación es surrealista. Dondequiera que miro, reconozco
pequeños grupos de personas a las que solo estoy acostumbrado a ver en revistas
brillantes. No estoy seguro, pero creo reconocer a un par de estrellas de Hollywood.
Mi corazón late violentamente en mi pecho.
¿Esto realmente estaba sucediendo o estaba soñando? Tengo ganas de pellizcarme para
asegurarme de que todo esto sea real.
No me sorprendería si los unicornios comenzaran a volar por la habitación, seguidos de
cerdos en tutús.
Cuando era niña, siempre había imaginado cómo sería ser el centro de atención de
todos. Ahora aquí estoy, el centro de atención de todos.
A mi alrededor, la gente come mis bollos y se acerca a mí para felicitarme por una
experiencia de sabor increíble.
Seth y Blake se aseguran de que estén cerca. Casi tengo ganas de aferrarme a ellos
como apoyo.
Han sido absolutamente asombrosos. ASOMBROSO.
Mis ojos buscan a Chase. Está al otro lado de la habitación hablando con un grupo de
mujeres jóvenes. No estoy seguro de si está coqueteando con ellos o de lo que está
haciendo. Hay muchas risas y me alegro de que se esté divirtiendo.
Nuestros ojos se encuentran y él sonríe antes de darme la señal de aprobación.
Me di cuenta de que Chase había estado sorprendido. No es de extrañar que hubiera
estado tan relajado con el cierre del café.
Espera hasta que estemos solos, lo dejaré tenerlo.
Por supuesto que no lo haré. Chase es mi mano derecha. Chase gestionará este café
oficialmente a partir de ahora. Blake y Seth han delineado un plan de negocios y una
estructura administrativa, pero no creo que se haya hundido por completo.
Estoy seguro de que en los próximos días lo repasaremos y todo tendrá sentido para mí.
Mis ojos vagan hacia mi mamá y mi papá.
Se ven geniales. Mamá parece totalmente a gusto en esta gran multitud de personas de
alto vuelo.
Está involucrada en una conversación bastante animada con un anciano. Parece muy
familiar, pero no puedo ubicarlo.
Papá está sentado en su silla, examinando la escena. Su mano descansa sobre el hombro
de mamá. Veo total amor y dedicación en sus ojos.
Al ver su felicidad total, siento un nudo en el fondo de mi garganta. ¿Terminaría tan
feliz como ellos, con Blake y Seth?
¿Podría una chica realmente terminar con dos tipos?
Yo suspiro.
"Y ahora, damas y caballeros, permítanme presentarles al dueño de Beans & More, y
creador de estos increíbles bollos, Leila".
De repente, todos los ojos están sobre mí. Siento calor, mucho calor.
"Tengamos una ronda de aplausos mientras ella sube al escenario y nos da algunas
palabras".
¿Un discurso? Nadie dijo nada sobre un discurso.
La gente está aplaudiendo y gritando, haciéndome subir al escenario para un discurso.
Al principio, mis pies se niegan a moverse. Es como si hubiera crecido raíces. Solo
cuando Seth me empuja suavemente hacia el escenario me muevo.
"Ve por ello", me susurra Blake al oído.
Mis pies se sienten como si estuvieran llenos de plomo. Parece que lleva horas caminar
desde donde he estado hasta el centro de la habitación donde se ha erigido el escenario.
El maestro de ceremonias me da el micrófono. Me sacudo un poco mientras lo tomo.
Resisto el impulso de salir corriendo del café y vomitar. Hablar en público no es mi
fuerte.
"Gracias", empiezo y dudo.
Ser el centro de atención de repente es abrumador.
Respiraciones profundas Leila, solo respira hondo, me digo y empiezo de nuevo.
"En primer lugar, quiero agradecerles a todos por venir y por apoyarme a mí y a mi
equipo".
Ahí, eso no fue tan malo.
“Al igual que cualquiera que haya tenido éxito, también tengo muchas personas que me
han apoyado en el camino a las que debo agradecer. Por supuesto, mis padres han sido
mis mayores y más fieles seguidores desde que tengo memoria ".
De repente, todos frente a mí están tomando una apariencia borrosa. Las lágrimas
amenazan con derramarse. Los parpadeo un par de veces. Si lloro, mi máscara se
arruinará.
La gente está aplaudiendo, y puedo ver a mamá y papá sonreír.
“Mamá, papá ... gracias por creer en mí y gracias por enseñarme a seguir mis
sueños. Gracias a su orientación y apoyo, aprendí a probar cosas y no temer las
consecuencias ".
Más aplausos.
“A continuación, tendré que dar las gracias a Chase, quien será el gerente de Beans &
More. Sin Chase, mi idea de negocio no habría despegado y ”. Trago saliva, recordando
cómo lo he decepcionado en las últimas semanas. "Sin su paciencia, no estaría parado
aquí en este momento".
Chase hace una pequeña reverencia ante los estruendosos aplausos.
“Todo esto comenzó con un pequeño experimento en nuestra cocina. No puedo creer
cómo todos ustedes se han llevado a los bollos y nos han ayudado a mí y a Chase a
llegar a donde estamos ahora. Nunca imaginé que los bollos despegarían como lo han
hecho ".
Echo un vistazo alrededor de la habitación. Mis ojos encuentran a Seth y Blake. Están
parados uno al lado del otro. Mis dioses griegos
“Por último, pero no menos importante, debo agradecer a Seth y Blake. Sin ellos y su
respaldo, tampoco estaría donde estoy esta noche ".
Más aplausos. Ambos hacen una pequeña reverencia.
“Es fácil tener un sueño, pero siempre es mucho más difícil hacer que el sueño se haga
realidad. Seth y Blake me han ayudado a hacer realidad mi sueño ".
Ahora todos están de pie y aplaudiendo.
"A Leila y sus bollos", gritan Blake y Seth, levantando su vaso.
"A Leila y sus bollos", hacen eco los invitados y levantan su vaso.
Le devuelvo el micrófono al maestro de ceremonias y salgo del escenario.
Seth y Blake me dan un beso en la mejilla.
"Gran discurso", susurra Blake y deja su brazo alrededor de mi cintura.
Ansiosamente, miro a Seth. El esta sonriendo.
"Y ahora, Leila", murmura en mi oído. "Tenemos otra sorpresa para ti, si estás
preparado".
Me reí entre dientes. "Siempre estoy para una sorpresa, particularmente en lo que
respecta a ustedes dos".
Los dedos de Blake acarician mi cintura a través del material de mi vestido, y siento que
el deseo me recorre.
Si la sorpresa es lo que creo que es, no puedo esperar.

Capítulo 54
Leila
Tan emocionado como estoy de experimentar la fiesta de lanzamiento de mi nuevo
negocio, estoy más emocionado de ver lo que Seth y Blake tienen reservado para mí. El
toque de Blake en la fiesta me hizo recordar todas las veces que hemos compartido
juntos.
Dios, todavía no puedo creer que esto esté sucediendo. Alguien podría pellizcarme en
cualquier momento y todo esto terminaría. Me despertaba, sin haber conocido a Blake o
Seth. Si ese es el caso, no quiero despertarme.
Camino detrás de Seth hacia la limusina, y parece que lleva una eternidad, pero me doy
cuenta de que solo han pasado unos segundos. Seth se sube y yo lo sigo.
Me asomo. Sentado al lado de Seth está Blake, que se desliza más adentro. Me siento
entre los dos. Mis hombres favoritos Ugh, ¿por qué son tan perfectos?
¿Cómo me sorprendieron con todo un negocio ... completo con un plan de
negocios? ¿Cómo lo hicieron todo sin mi ayuda? Supongo que cuando sabes dinero, lo
sabes, ¿verdad?
"¿Como estas preciosa?" pregunta Blake. "¿Estás aquí ahora?"
"Jaja, sí. Estoy un poco desprevenido, se podría decir. Pero definitivamente estoy aquí
”, respondo. “Gracias a los dos, muchísimo. No sabes lo agradecido que estoy ".
"Oh, estoy seguro de que lo hacemos", interrumpe Seth. "Leila, este negocio te llevará a
lugares y queremos estar contigo en cada paso del camino".
"Así es", dice Blake. “Pero solo ... tomemos un descanso de los negocios por un
momento. Leila, te ves increíble hoy. ¿Cómo puedo mostrarte cuánto quiero decir con
eso?
"Jeje, bueno, ese no es un objetivo difícil de lograr", respondo.
La mano de Blake toca la parte superior de mi muslo antes de correr lentamente hacia
mi rodilla. Me estremezco ante su toque, extasiada por la atención.
Me recuesto, relajándome, mientras la mano de Seth encuentra mi otro muslo. Los dos
se acercan tanto a ... ir a por ello. Pero se detienen cada vez, burlándose de mí.
"¿Estás bien allí, Leila?" Seth. Él está sonriendo y mordiéndose el labio mientras
escanea mi rostro en busca de aprobación.
“Oh, sí, soy espectacular. Verdaderamente sobre la luna. Estaría mintiendo si no dijera
que quiero que los dos me follen la mierda aquí mismo. He estado tan caliente todo este
tiempo y mis bragas muy bien podrían estar empapadas ”, admito.
Antes de que termine mi oración, Blake ha dejado su asiento a mi lado y está jugando
con mi pierna, empujándola hacia un lado y apoyando mi pie en el asiento del otro lado
de la limusina.
Me deslizo hacia abajo, dejando mi coño justo fuera del borde del asiento, empujándolo
directamente en la cara de Blake. Lo veo sonreír, y él lleva sus dedos a mis caderas
desnudas, deslizando mi falda hacia arriba y poniendo las yemas de sus dedos debajo de
los costados de mi tanga.
Sus dedos separan mi tanga de mi piel y luego me la quitan. Literalmente estoy
goteando de emoción. Me duele el coño con el deseo de sus labios y su lengua.
Él apoya su cara en mi coño, su nariz presionando contra mi clítoris. Su aliento acaricia
mi coño y me estremezco con anticipación.
Saca la lengua y lame desde la entrada de mi coño hasta mi clítoris. Gimo suavemente y
puse mi mano en su cabello.
Su lengua es mágica. Su punta rodea mi clítoris y clavo los dedos en los asientos de
cuero. De alguna manera me hundo más abajo mientras él da vueltas en mi coño.
Blake arroja mis piernas sobre sus hombros y empuja su cuerpo contra el mío,
dejándolo empujar su cara aún más en mi coño. Sus manos están curvadas alrededor de
mis caderas, sus dedos presionados en los huesos de mi cadera.
Él sacude su cara contra mi coño y lo baña por todas partes antes de mover su mano
para burlarse de mi coño con su dedo. Lo trae entre los labios de mi coño y luego lo baja
para empujarlo dentro de mí.
Abro mucho los ojos y agarro el asiento, jadeando. Cuando giro mi cabeza hacia un
lado, veo la polla de Seth, dura y rasgando sus pantalones desabrochados.
Sonrío y lo agarro con la mano. Se estremece ante mi toque. Mientras el dedo de Blake
se frota con fuerza contra mi punto G, acaricio a Seth lenta y seductoramente,
construyéndolo.
Blake saca su dedo. Ahora me está tomando el pelo con dos dedos a cada lado de mi
clítoris, solo frotando la punta de sus dedos contra él. Empujé hacia él con hambre.
Traza los labios de mi coño, empapándose de toda su obra, antes de hundir uno en mi
coño y deslizar uno en mi culo apretado. Jadeo y me lanzo hacia Seth.
Mis labios se envuelven alrededor de su polla y él gime audiblemente y agarra mi
cabeza para empujarla contra su polla con más fuerza. Él palpita en mi boca.
Giro mi lengua por toda la parte inferior de su polla y balanceo mi cabeza hacia adelante
y hacia atrás mientras Blake trabaja mi coño y mi culo debajo de mí.
Estos dos hombres son lo más espectacular que me ha pasado. ¿Con qué frecuencia
encuentras a dos tipos que no quieren nada más que complacerte, sin competencia entre
ellos?
No sé cómo tuve tanta suerte con ellos. Tomo la polla de Seth en mi garganta como
muestra de mi agradecimiento. Él gime en voz alta.
Seth sostiene mi cabeza en su lugar y comienza a empujarme en la boca, follando mi
cara mientras mi coño y mi culo se follan con los dedos. Si. Joder, si. No te detengas
nunca.
Todo mi cuerpo se calienta, las sensaciones de hormigueo se acumulan sobre mí. Estoy
elevado a una nube de placer. Gimo una y otra vez ante su toque hasta que estoy tan
contenida que no me queda nada más que liberar mi éxtasis.
Gimo salvajemente, pero estoy amortiguado por la polla que me baja por la
garganta. Empujé mis caderas hacia arriba mientras Blake me tocaba con fuerza. Jorobo
el aire y el clímax en la punta de sus dedos.
Mi semen brota a través de mi coño y se filtra en los dedos de Blake. Seth saca su polla
de mi garganta y sale de mi boca mientras me ve derretirme con las yemas de los dedos
de Blake.
Me calmo, jadeando y sonriendo. Miro primero a Blake y luego a Seth.
“Joder, ¿ya no hicieron suficiente, comenzando una compañía completa para mí? ¡Lo
menos que puedo hacer es sacarte primero! Yo insisto.
"Jaja, Leila, eres demasiado adorable", dice Blake con una sonrisa. ¿Por qué demonios
dejaría pasar la oportunidad de sacarte primero? Así es como siempre va a ir. Verlo
retorcerse ante mi toque no tiene precio. Nunca lo cambiaré por nada.
"Tendría que estar de acuerdo", interrumpe Seth.
Cada uno reclama su lugar a cada lado de mí.
"Oh, pero ahora es mi turno", insisto. Alcanzo los pantalones de Blake y los desabrocho,
sacando su polla.
Me siento y acaricio cada una de sus pollas, girando hacia arriba y hacia abajo,
bromeando. De vez en cuando me quito las manos de encima para tocar las bolas y
frotarlas con fuerza por los pantalones.
Ambos están respirando profundamente y flexionando sus abdominales mientras los
acaricio. Es lindo cómo todavía intentan tanto impresionarme cuando me tienen
enganchado.
Cuando voy a meter la polla de Seth en mi boca, la limusina se detiene. Hemos llegado
a nuestro destino; donde está, es desconocido para mí.
Miro por la ventana para ver que estamos en la mansión. Mientras estoy ocupado
preocupándome por dónde estamos, Blake y Seth vuelven a poner sus pollas en sus
pantalones. Qué lástima.
El chofer abre la puerta y Blake lidera saliendo primero del auto. Seth me sigue y salgo
al final, agarrando mis bragas del piso de la limusina antes de salir.
Los tres nos quedamos juntos en la puerta y yo miro hacia el edificio. Me estremezco
ante la idea de entrar con los dos. Una vez más, estoy goteando de emoción.

Capítulo 55
Seth
Leila es tan jodidamente linda. Está prácticamente aturdida al ver la mansión. Se
necesita un esfuerzo real para atravesarla porque está muy distraída con sus fantasías, o
recuerdos, de nosotros aquí.
Envolví mi brazo alrededor de su cintura, y Blake y yo caminamos con ella por la puerta
principal. Nos detenemos adentro en la puerta, quitándonos los zapatos. Sostengo su
mano mientras tira un talón a un lado seguido por el otro.
Todos nos miramos y la llevo escaleras arriba mientras Blake me sigue. Lucky Guy
tiene la mejor vista. Él puede ver ese culo balanceándose y ese paso emocionado
mientras nos dirigimos hacia el dormitorio principal.
Llevo mi mano a la manija de la puerta, la giro y empujo la puerta hacia la
habitación. Detrás de esa puerta se encuentra una habitación grande, completa con una
lámpara de araña estilo luna de miel, un baño principal grande con tocador doble y
bañera de hidromasaje, una pared que realmente tiene ventanas de casi el piso al techo y
una enorme cama diseñada a medida.
Me he estado preparando para hoy. Este sexo con Leila va a ser el mejor sexo de
nuestras vidas hasta la fecha, y no quería que nada quedara en el camino. No hay piedra
sin remover. Hay velas encendidas por toda la habitación, y hay pétalos de rosa
esparcidos por el suelo.
Es lo que imagino que está en su mente como la sorpresa perfecta. Incluso hay una
canasta de sus bollos en la cómoda en la esquina.
"Seth, yo ... no sé qué decir", dice Leila mientras camina por la puerta. Sus ojos están
llorando.
“No tienes que decir nada, Leila. Solo relájate y disfruta, ¿de acuerdo? Yo respondo.
Lo digo en serio. No quiero que quede atrapada en sus palabras. Tenemos una hermosa
oportunidad aquí solo para pasar un buen rato y quiero que aprovechemos al máximo.
Ella asiente con la cabeza furiosamente mientras ella y Blake caminan más adentro de la
habitación. Se sienta al borde de la cama mientras Leila camina por el perímetro del
espacio. Ella está realmente asombrada.
Me acerco a ella en silencio y la abrazo por detrás. Empujo su cabello a un lado y
empiezo a besar la base de su cuello. Ella estira la cabeza hacia un lado invitándola.
Mis manos viajan por su torso y ahueco sus pechos turgentes y perfectos a través de su
ropa. Mientras acaricio su piel, nos balanceamos hacia adelante y hacia atrás juntas, con
cada movimiento que ella se mueve cada vez más hacia la comodidad.
Ella levanta su brazo y pone su mano detrás de mi cabeza, empujando sus senos. Le
desabrocho la camisa y la guío fuera de ella.
Muevo mi mano sobre la parte superior de sus senos, admirando sus curvas y su escote
profundo, y pongo mi otra mano detrás de ella, desabrochando su sostén. Mis manos se
deslizan debajo de las copas de la ropa interior y la alejo de su cuerpo, dejando que las
correas se deslicen de sus brazos.
La abrazo por detrás, mis brazos se deslizan suavemente contra sus senos. Ella inclina la
cabeza hacia atrás y me besa suave e íntimamente.
Su boca es absolutamente intoxicante. Sus labios son perfectamente suaves y
regordetes, y se ajustan perfectamente a los míos. Podría besarla sin cesar.
Se da la vuelta, su pecho desnudo presionado contra mi camisa de vestir, sus pezones
duros y rozando mi piel a través de mi ropa.
Me arranco la camisa del cuerpo y me tiro la camiseta por la cabeza. Quiero estar
desnudo con ella, compartir nuestros cuerpos, disfrutar del calor del otro.
La acompaño a la cama. Da pasos lentos y cuidadosos hacia atrás mientras la beso
apasionadamente con mis manos alrededor de sus caderas.
Me detengo mientras ella se baja sobre la cama y me lleva encima de ella, su mano
presionada en mi hombro tirando de mí hacia abajo.
La abrazo y la beso, mi lengua explorando su boca mientras ella hace lo mismo con la
de ella. Cuando digo que podría besarla para siempre, lo digo en serio. Ella es el mejor
beso que he probado o experimentado en mi vida.
Ella separa mis labios de los suyos para inclinar la cabeza hacia un lado y respirar. Ella
abre los ojos y le sonríe a Blake. Está completamente desnudo y salta a la cara de ella.
Ella extiende una mano y envuelve sus dedos alrededor de su polla dura. Él le gime y
ella lame la punta de su polla mientras miro desde arriba.
Me alejo de ella y rápidamente me quito los pantalones y los boxers. Empujo mi cara
contra su coño mojado y empapado. Hay tantos jugos allí abajo que es como si una
botella entera de lubricante acabara de exprimirse por todo su coño.
Me encanta. Trazo los labios de su coño con mi lengua y asimilo su exquisito
sabor. Disfruto del sabor picante y dulce contra mis papilas gustativas y entro más
fuerte, queriendo más.
Ella gime cuando sumerjo mi lengua en su coño. Giro la punta de mi lengua alrededor
del agujero antes de apartarlo y bajarme más a su apretado culo.
La escucho jadear cuando mi lengua le hace cosquillas en su pequeño agujero
arrugado. Muevo toda mi cabeza de un lado a otro, follando ligeramente su culo con mi
lengua.
Lanza sus piernas al aire, dándome más acceso a su trasero. Ella gime, pero es más
difícil de escuchar ya que la polla de Blake está llenando su boca.
Le toco el trasero a tientas mientras le sacudo la lengua, y llevo un dedo al agujero
cuando ha sido agradable y cubierto de babas. Deslizo mi dedo y miro su rostro. Sus
ojos se abren y toda su cabeza se echa hacia atrás. Joder, eso está de moda.
"Dime lo que quieres, Leila", le digo.
Ella escupe la polla de Blake
"Jódeme el culo, Seth".
Como música para mis jodidos oídos.
Escupo sobre mi polla dura y la presiono contra su gilipollas. Lenta y suavemente, me
deslizo dentro de ella. Su culo tan apretado contra mi polla ya me tiene predispuesto.
Cuando toda la longitud de mi polla llena su trasero, empiezo a bombear mis caderas
contra su cuerpo, y ella gime en mis empujes. Maldita sea, es sexy. No podría pedir más
con esta chica.
La escucho intercambiar algunas palabras con Blake en el centro de la cama, pero
honestamente no puedo decir que estoy prestando atención a lo que se dice. De repente,
siento que Leila saca mi polla de su culo.
Ella se pone de rodillas y él se acuesta. Ella se sube sobre él y lo monta a
horcajadas. Ella coloca su polla en su coño. Ella gime fuerte, arquea la espalda y se
inclina hacia atrás.
Ella estira la mano y encuentro mi mano con la de ella. Ella me tira hacia adelante y me
subo a la cama. Me pongo de rodillas y la inclino hacia adelante.
Coloco mi mano sobre el hombro de Leila mientras empujo toda mi polla de nuevo en
su culo, metiendo toda su mitad inferior entre Blake y yo.
Ella grita de placer, disfrutando cada momento de estar tan llena de nuestras pollas. Ella
toma pollas con tanta gracia y tanta sensualidad. Me vuelve jodidamente salvaje.
Sostengo sus caderas con mis manos y empujo duro y rápido dentro de ella. Ella grita de
emoción a nuestras pollas. Siento que Blake coincide con mi ritmo y la estamos
llenando de placer.
Levanta la mano y agarra sus propias tetas y las aprieta con fuerza cuando siento su culo
apretarse alrededor de mi polla.
"¡Ya voy! ¡Ya voy! ¡No te detengas! ella llora.
Joder como si no hubiera un maldito mañana. Se arroja al pecho de Blake mientras gime
y gime, explotando con orgasmo en nuestras pollas. En poco tiempo, nos encontramos
en el mismo bote y disparamos semen en su coño y su culo.
Eyaculo con tanta fuerza que puedo sentir el semen saliendo de mi pelvis. Santa mierda
de mierda.
Dejo de follarle el culo cuando el último de mi semen entra en ella. Me siento de
rodillas y saco mi polla de su culo y le dejo un momento para recuperar el aliento.
"Th-gracias, chicos. Como siempre, eres tan divertido ”, dice Leila, dirigiéndose a los
dos como fugas de sus agujeros.
"El placer es todo mío", dice Blake.
Asiento furiosamente de acuerdo, incapaz de hablar. No estoy seguro de que me haya
pasado antes, pero en lugar de joder a Leila estúpida, creo que me jodió
estúpida. Maldita sea
Sacudo un poco la cabeza, solo tratando de agarrarme. Vuelvo a mis propios sentidos
otra vez y suavemente hablo.
"Bueno, todavía no has terminado, ¿verdad?" Le sonrío, y ella me devuelve la cabeza y
me devuelve la sonrisa.
Tan hambrienta como siempre, gira el resto de su cuerpo y envuelve su boca alrededor
de mi polla. Creo que eso responde la pregunta.
 Capítulo 56
Blake
Veo a Leila arremeter contra la polla de Seth. Ella es tan jodidamente caliente. Todo lo
que hace, cada movimiento que hace. Jesucristo, simplemente no puedo manejarlo.
Con solo ese movimiento, sus labios ahora se curvan alrededor de su polla y veo su
cabeza desde atrás, viendo la parte posterior de su cabeza moviéndose hacia arriba y
hacia abajo ante el movimiento, balanceándose sobre la polla de Seth.
Él coloca su mano en la parte posterior de su cabeza, guiándola hacia arriba y hacia
abajo, marcando el ritmo para ella. Conozco esa boca y sé lo bien que me puede hacer
sentir. Es tan difícil no exagerar tan pronto como sus labios se presionan contra ti. Se
está controlando a sí mismo, puedo verlo.
Al instante, siento mi propia polla temblar, y me doy cuenta de que estoy duro,
palpitante y queriendo más del cuerpo de Leila. Su culo sobresale, justo en frente de mí,
invitador. Incluso me está balanceando las caderas, animándome.
"¿Qué quieres de mí, Leila?" Pregunto.
Levanta la cabeza de la polla de Seth y me dice que quiere que la sorprenda.
Bueno, mierda, ¿qué sorpresas quedan? La he cogido por todos lados, pero en diagonal,
en este punto. Miro alrededor de la habitación antes de que mi cara se detenga en Seth,
que está tratando de llamar mi atención sutilmente. Echa la cabeza hacia un lado y
señala el armario.
Me levanto suavemente de la cama y abro la puerta del armario. En el piso hay una
bolsa de lona negra. Lo descomprimo y el contenido me hace sonreír. Busco en la gran
bolsa de juguetes que empacó para Leila y encuentro un huevo controlado a distancia.
Lo agarro y el control remoto, y lo pruebo. Presiono el botón de encendido y siento un
zumbido fuerte en la palma de mi mano donde está el huevo. Perfecto.
Regreso a la cama y asiento con la cabeza a Seth y le enseño el juguete. Él asiente de
vuelta, con aprobación.
Escupo el juguete y lo froto alrededor del plástico, dejándolo bonito y
lubricado. Presiono la punta contra su coño antes de empujarlo suavemente dentro de
ella, mi dedo lo sigue para asegurarme de que permanezca adentro, agradable y
profundo.
La escucho jadear. Maravilloso. Disfrútalo, bebé.
Escupo sobre mi polla, frotándola un poco antes de presionarla contra su culo. Mientras
me deslizo dentro de ella, enciendo el huevo y la escucho chillar de alegría.
Ella retrocede, insertando toda mi polla en su culo. Joder, mujer. Siento las vibraciones
del huevo en la parte inferior de mi polla, y goteo precum directamente en su pequeño
culo apretado.
Ella se pone de rodillas y abre las piernas, lo que me permite aprovechar mejor su
trasero. Empujé lentamente, entrando y saliendo, provocando su dulce y pequeño
agujero mientras mi polla palpitaba con fuerza contra ella.
Mientras está de pie, tomo mis manos y la recuesto contra mi pecho y empiezo a
masajear sus tetas. Sus alegres y redondas tetas son perfectas, y sus pezones son lo
suficientemente duros como para cortar diamantes. Tomo sus pezones entre mis
pulgares e índices y los giro, haciendo que se mueva más fuerte sobre mi polla.
Muevo una mano hacia abajo sobre su coño y presiono mi dedo medio contra su
clítoris. Ella joroba mi mano con fuerza, haciendo que su clítoris fuera agradable y
estimulado mientras mi polla se estrella contra su culo.
Seth baja la cara hacia su coño, ya que ahora es perfectamente accesible para él. Se
recuesta boca arriba y se coloca entre sus piernas. Ella se sumerge y joroba en su rostro.
Sin darse cuenta, su molienda sobre él hace cosas increíbles para mí. Mi polla se
extiende completamente en su culo y está disfrutando de la sensación de balanceo
profundo, profundo en su culo.
Froto su cuerpo hacia arriba y hacia abajo, admirando sus magníficas curvas mientras la
aro por detrás. Escucho sus gemidos cada vez más intensos, más apasionados.
Ella arquea la espalda con fuerza y se clava las uñas profundamente en los
muslos. Puedo verlo en cada centímetro de su cuerpo y escucharlo en cada
respiración. Ella esta cerca.
Acerco mi boca a su oído y le susurro.
"Ven por nosotros, Leila".
Ella jadea y apoya su cabeza contra mi hombro y joroba fuerte y rápido contra mi polla
y la cara de Seth.
Me agarra el pelo con fuerza y veo que todo su cuerpo se flexiona y se contrae mientras
se suelta por completo. Ella llega directamente a la cara de Seth y él le da un sorbo a
cada gota de su dulce néctar mientras inunda su boca de su coño.
Él llega hasta su boca, después de haber sacado un poco de su semen de los labios de su
coño y empuja su dedo entre sus labios para que pueda saborear el delicioso sabor de
sus propios jugos.
Él se retira de debajo de ella, y escucho un PLOP en la cama. Ella debe haber venido tan
fuerte que sacó el huevo de su coño. Jeje.
Saco mi polla de su culo. Sin perder el ritmo, Leila gira y empuja su boca sobre mi
polla. Mierda, mujer. Si. Mierda. Ese. No te detengas
Veo a Seth tomar posición detrás de ella, y deslizar su polla dentro de su coño, todavía
empapada de su orgasmo hace unos momentos. Ella gime fuerte en mi boca.
Ella abre más las piernas y arquea la espalda. Dios, me encanta cómo toma la polla. Ella
muele sus caderas contra el cuerpo de Seth mientras su polla está enterrada dentro de
ella.
Él gime y la agarra por las caderas, manteniéndolas en su lugar mientras le folla el coño
sin piedad. Todo su cuerpo está revuelto mientras está siendo embestida.
Su boca rebota mi polla dentro de ella, incapaz de lograr un equilibrio sólido mientras
está siendo follada. No me estoy quejando. Ni siquiera por un segundo.
Tomo su cabeza y la sostengo en su lugar cuando empiezo a empujar con fuerza en su
boca y deslizo mi polla en su garganta resbaladiza y apretada. Ella gime fuerte, y yo
miro su rostro, sonrojado de intenso placer.
Nunca he visto una puta tan perfecta. Ella lo tiene todo, y siempre me sorprende con lo
que quiere y lo que puede manejar.
Siento que mi cuerpo se calienta. En solo unos segundos, mi polla palpita y le duele en
la boca.
"¡Leila, ya voy!" Yo gruño.
Ella gime, haciendo vibrar mi polla en su garganta, y yo inundo su garganta y boca con
mi semen cremoso. Ella me mantiene en su boca, chupando fuerte, tirando cada gota de
semen que puede en su lengua.
Ella gira su lengua alrededor de la cabeza de mi polla mientras está cubierta de esperma,
deslizándola agradable y resbaladiza. Me estremezco ante ella en respuesta y flexiono
mis caderas por última vez en su boca antes de sacar mi polla de sus labios.
Me siento en la cama y encuentro mi cara con la de ella, presionando mis labios contra
los de ella. Ella empuja el semen en mi boca. El sabor de su semen está insinuado en el
mío y compartimos un beso descuidado y apasionado mientras intercambiamos semen
de ida y vuelta entre nuestras bocas.
Ella separa nuestros labios y se traga el semen en su boca. Ella me mira mientras Seth
continúa empujando su polla en su coño. Está radiante de orgullo por tener la capacidad
de hacer que los dos seamos tan locos por ella que no podemos evitar follarla.
Seth gime y grita.
"¡Estoy a punto de venir!"
Leila se da vuelta rápidamente y se pone directamente debajo de su polla. Se tira de la
polla y se corre con fuerza contra la cara de Leila.
Nadie puede balancearse tan bien como esta chica, lo juro. Su boca está bien abierta, y
sus ojos están cerrados cuando el semen de Seth cubre su rostro. Aterriza en su frente y
sus mejillas, y una cantidad significativa llega a su boca.
Ella saca la lengua y agita el semen en su boca cuando él termina de arrojar su carga
sobre su cara. Ella toma sus dedos y toma el semen en sus pómulos altos y lo empuja
hacia su boca y hace lo mismo para el resto de su rostro.
Ella se sienta y trae a Seth a la cara y lo besa, tal como lo ha hecho conmigo, cambiando
su semen directamente de su boca a la de él. Después de un momento, ella se aleja y
traga.
Se gira hacia un lado para mirarnos a los dos y se lame los labios.
"Delicioso", dice ella.
"Sí, sí lo eres", vuelvo.
"Diré", dice Seth.
"Ustedes dos son demasiado", dice Leila. Ella hace una pausa y sonríe. "No es que me
esté quejando". Ella guiña un ojo, se levanta de la cama y se acerca a la ventana.
Veo esas caderas sexy balancearse hacia el otro lado de la habitación, y me pregunto
cómo llegué a estar con una mujer tan tentadora.
Nada podría ser más perfecto que nosotros tres.
Excepto tal vez una pequeña adición. Me detengo, sorprendido por lo mucho que me
gusta la idea. Parece que podríamos necesitar rellenarla de una manera completamente
nueva.

Capítulo 57
Leila
Alcanzo la sábana pero solo siento carne, carne suave y desnuda.
Gimo de placer cuando las imágenes de la noche anterior se reproducen en mi
mente. Seth me folla duro por detrás, y Blake parado frente a mí, para que pueda darle
una mamada. La posición de asado asado, se ha convertido en uno de nuestros favoritos.
Suspiro y abro los ojos. Por un momento me quedo aquí mirando a los dos hombres en
mi cama.
Mi cuento de hadas está teniendo un final feliz. Blake, Seth y yo nos mudamos juntos.
Ha pasado un mes desde la apertura de los nuevos Beans & More, y el negocio está en
auge. Los bollos salen por la puerta más rápido de lo que podría imaginar.
Con un vistazo a la hora, decido levantarme. Antes de hacerlo, beso a cada uno de mis
hombres en la frente.
Mientras camino al baño, me detengo en esas palabras. Mi hombre.
Los muevo en mi boca. Suenan bien, y chico saben aún mejor.
Me reí entre dientes.
¿Por qué una mujer no debería tener dos hombres? No es inusual que los hombres
tengan más de una mujer, miren las otras culturas y sus harenes.
Una vez que me visto, salgo a nuestro balcón. Dejo que mis manos descansen sobre mi
estómago, aún planas, y sonrío para mí. No le he dicho a Blake o Seth todavía.
Sé que estarán tan emocionados como yo. No tengo idea de cuál de ellos me sorprendió,
pero demonios, podrían ser ambos. Así es, son gemelos. Ahora estoy doblemente lleno,
con sus bebés.
Respiro el aire fresco y fresco de la mañana y marco el número de Chase.
"Buenos días, bella durmiente"
Me río.
"Apenas. Todavía es temprano, ya sabes.
“Quizás para algunos. Pero para aquellos de nosotros en el mundo laboral real, ya pasó
el té de la mañana ”.
El viejo Chase, nunca pierdas una oportunidad.
"Sé que recién comenzaste a trabajar hace aproximadamente media hora, así que no
exageres, Chase", le recuerdo, y él se ríe.
"¿Qué hay en la agenda hoy?" Me siento y veo el mundo despertarse debajo de mí.
El tráfico está comenzando a aumentar, y veo a los peatones pasar por debajo camino al
trabajo.
Agradezco a mis estrellas de la suerte.
“Tenemos algunos pedidos grandes que completar. Hay alrededor de cinco docenas de
bollos ordenados para un evento de negocios por la tarde en el centro. Y lo de siempre.
Sé que Chase tiene todo bajo control, pero me gusta saber qué está pasando.
"¿Amy se presentó a trabajar hoy?"
Amy es nuestra nueva aprendiz de panadero. Tiene un poco de experiencia, pero Chase
me asegura que esto será bueno para ella. No estoy muy seguro de dónde la encontró,
pero Chase es así, dispuesto a ayudar a aquellos que necesitan ayuda.
"Ella lo hizo, diez minutos antes de que su turno comenzara".
Impresionante. Suena hasta ahora tan bien.
"¿Algo más que deba saber o preocuparme?"
Chase se ríe.
"Depende de tu definición de preocupación".
Que muy cierto Por suerte para mí, sé que puedo confiar en Chase.
"No, todo bien, Leila". El hace una pausa. "Entonces, ¿vienes hoy?"
Mis dedos juegan con la cuerda de mis pantalones de chándal y dejo que mi mano
descanse sobre mi vientre nuevamente. Me muerdo el labio inferior. ¿Voy a ir a trabajar
hoy o hay otras cosas que hacer?
"¿Me necesitas?"
"Siempre", bromea y los dos nos reímos.
"Mentiroso, y no muy bueno". Bromeo con Chase.
"Arrestado." El está deacuerdo. "Siempre puedo llamarte si surge algo".
"Suena bien para mí." Estoy de acuerdo y termino la conversación.
Tengo planes para hoy, pero no tengo planes de ir al café.
Con una última mirada a la calle debajo de mí, vuelvo a entrar. En la cocina, me pongo
el delantal y preparo una taza de café.
Hay mucho que hacer
Después de mi primer golpe de cafeína y sin sentir ningún movimiento desde la
habitación, me pongo a trabajar.
Saco harina, azúcar y una variedad de otros ingredientes. Mi bloc de notas está cerca y
garabateo en él a medida que avanzo.
La mejor parte de ser una súper estrella culinaria es que puedo experimentar con nuevas
recetas. Sé que mis bollos son un éxito, pero siento que es hora de desarrollar algo más.
Ayer probé con las magdalenas. Triple chispas de chocolate y plátano. Blake pensó que
estaban fuera de este mundo, pero Seth no estaba tan seguro.
Seth pensó que faltaba algo, algún ingrediente secreto.
Después de una gran cantidad de compras ayer, hoy estoy armado con una gran
variedad de especias y aromas. Mi plan es hacer varios lotes diferentes para que haya
muchas muestras para probar.
Si no puedo hacer las magdalenas correctamente, sé cuál será mi próximo proyecto.
Pero estoy decidido a hacer que funcionen.
Dado que Seth cree en los ingredientes naturales y en el cultivo de sus propias cosas,
creo que el ingrediente que falta es vainilla, canela o alguna otra especia exótica.
Un ruido me hace girar.
Seth aparece en la cocina. Está completamente desnudo.
"¿En que andas?" pregunta y se frota los ojos.
"Experimentando", respondo mientras dejo que mis ojos viajen sobre su magnífico
cuerpo. Simplemente no puedo tener suficiente de él.
"¿Magdalenas?"
Asiento con la cabeza.
"¿Tan temprano?"
Me río.
"En el mundo de la repostería es tarde".
Él entra a la cocina.
Siento que mi ritmo cardíaco aumenta y mi respiración se vuelve rápida y superficial.
Cuando está a centímetros de mí, murmura en mi oído.
"¿Necesitas ayuda para experimentar?"
Instintivamente, mis manos alcanzan su carne desnuda.
Él da otro paso hacia mí. Su polla ya es gruesa y dura.
"¿Estás ofreciendo?" Susurro y lamo mis labios.
Sus labios caen sobre los míos y su mano derecha me impulsa hacia adelante, así que
estoy presionada contra él. Siento su polla palpitante a través de mi delantal. Mi coño
comienza a gotear.
"¿Qué demonios está pasando?"
Puedo ver a Blake en la puerta de la cocina.
"Leila está experimentando", explica Seth, cuyas manos están masajeando mis nalgas.
"¿Sin mi?" Él suena indignado.
Antes de que pueda detenerlo, Seth agarró el chocolate y lo untó a lo largo de mi pecho
y hacia el espacio entre mis senos.
"Nunca es tarde para unirse", responde Seth, y Blake acepta la invitación deshaciendo
las cuerdas de mi delantal.
Con un suspiro, me rindo ante lo que está por suceder.
Inventar una nueva receta increíble para muffins de plátano con triple chocolate tendrá
que esperar hasta un poco más tarde. Por ahora, entrar en este momento con mis
hombres es todo lo que realmente importa.