Está en la página 1de 52

Estrategias de atención

y acompañamiento frente
al consumo problemático
de bebidas alcohólicas
2023

2
Presidente de la Nación
Dr. Alberto Ángel Fernández

Vicepresidenta de la Nación
Dra. Cristina Fernández de Kirchner

Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación


Ing. Agustín Rossi

Secretaria de Políticas Integrales sobre Drogas


de la Nación
Lic. Gabriela Torres

Coordinación de elaboración del material

Subsecretario de Prevención, Investigación y


Estadísticas en Materia de Drogas
Rafael Villanueva

Directora de Prevención y Cuidado en Materia


de Drogas
Rosario Castelli

3
4
Índice

Introducción pág. 6

¿Qué es el alcohol? pág. 10

Consecuencias físicas
y sociales del consumo de alcohol pág. 13

¿Cómo intervenir? pág. 20

Promoción de acciones pág. 21

Prevención pág. 23
Atención y acompañamiento pág. 24
Propuestas de acción para equipos pág. 29
Herramientas de atención y acompañamiento pág. 34

Reflexiones finales pág. 47

Bibliografía pág. 49

5
Introducción

La Sedronar promueve un abordaje de las problemáticas que


se generan por los consumos de bebidas alcohólicas y/u otras
sustancias psicoactivas, desde un enfoque de Derechos Humanos y
la Ley Nacional de Salud Mental N°26.657, centrado en las personas
y sus comunidades.

Las bebidas alcohólicas son sustancias psicoactivas legales y son las


más consumidas en Argentina, las que provocan más morbimortalidad1
y, además, las de mayor acceso y disponibilidad. Su consumo atraviesa
todos los sectores y grupos etarios de la sociedad, y se encuentran
naturalizadas en prácticas culturales, festejos, rituales y tradiciones.
Además, el sentido que estos consumos tienen para cada persona,
se inscribe en lo singular, en su trayectoria de vida, y está enlazado
con su contexto sociohistórico y cultural.

Por lo tanto, los consumos de bebidas alcohólicas tienen que ser


abordados desde una perspectiva integral, contemplando las
dimensiones culturales, sociales, físicas y de salud mental de las
personas, su entorno afectivo y la comunidad y el territorio en el
que se encuentran.

Dado que estos consumos son una construcción social que atraviesa
lo subjetivo, se necesita ampliar las estrategias de cuidados en los
territorios junto con los municipios, sus instituciones, organizaciones
sociales, ONGs, comercios e integrantes de las comunidades.

1. Número de casos de enfermedad que comienzan o de personas que se enferman


durante un período dado en una población determinada.

6
La presente guía “Estrategias de Acompañamiento frente al
consumo problemático de bebidas alcohólicas” tiene como
objetivo brindar herramientas a equipos socio sanitarios frente a
las problemáticas que se generan por el consumo problemático de
bebidas alcohólicas.

Algunos determinantes sociales son: las condiciones de vida que


inciden en los procesos de la salud mental y física, las estrategias
de cuidado que desarrollan, el género, la clase social, el acceso a
derechos y las desigualdades sociales y económicas.

De los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones


Unidas, el objetivo 3.5 define: fortalecer la prevención y el tratamiento
del abuso de alcohol y otras sustancias psicoactivas.

Las sustancias psicoactivas son objetos que circulan, se negocian,


se padecen y se disfrutan en el marco de las relaciones sociales, en
esta sociedad de consumo, cuyos sentidos y normas son dadas por
los colectivos sociales en los que se usan. Son multidimensionales,
por lo que pueden generar diversos efectos y consecuencias.

Decimos, entonces, que para que un consumo se transforme en


problemático, lo primero que hay que analizar es qué tipo de vínculo
establece la persona con la sustancia psicoactiva. Siempre en clave
del contexto que ocupa esa persona con respecto a su clase social,
su edad, su identidad de género, el territorio en el que habita, las
instituciones por las que circula, el acceso a la salud, la noción de
cuidado propio y colectivo. Es decir, siempre teniendo en cuenta la
trayectoria de vida de la persona.

El enfoque del abordaje sociosanitario y comunitario, a través


del armado de una red de trama mixta entre los distintos niveles
del Estado y las organizaciones de la comunidad, propone pensar
estrategias colectivas de cuidado y atención. Esto implica poner

7
en escena los recursos disponibles en la propia comunidad. La
complejidad de esta problemática pone de manifiesto la necesidad
de cambiar la idea de la existencia de un modelo único de atención,
por la de un abordaje que lleve adelante una estrategia compleja
de acompañamientos en relación a las singularidades de cada
persona como así también, a las particularidades del territorio.

En este sentido, la red incluye espacios preventivos de participación,


reflexión, formación, disfrute, inclusión, deportivos, culturales, etc. Y de
asistencia como los de primera escucha y orientación, dispositivos
de día y centros barriales con prestaciones individuales, grupales
y acompañamiento de proyectos de vida, casas de abordaje
comunitario con convivencia temporal, dispositivos de atención a
situaciones más complejas de compulsión y una red sanitaria para
personas que necesiten una desintoxicación o alguna intervención
más compleja en el campo socio sanitario.

El abordaje de los consumos problemáticos de sustancias psicoactivas


requiere de estrategias diferenciadas que den cuenta de las particularidades
e imaginarios locales del consumo. Entendemos por Red Federal al
conjunto de las instituciones y organizaciones públicas y privadas
que trabajan en la investigación, la prevención, la atención, el
acompañamiento y el cuidado de las personas en relación con los
consumos problemáticos de drogas, a lo largo y ancho de nuestro
país. Esta red es mixta; esto quiere decir que incluye a la Sedronar
y a los ministerios nacionales y a representantes de cada una de las
24 jurisdicciones del país, así como a los gobiernos municipales, a las
organizaciones sociales, políticas y eclesiales, a las organizaciones
de la sociedad civil, las organizaciones de madres y familiares, a los
dispositivos de tratamiento, a las universidades, etc.

Cabe destacar que la implementación efectiva de las estrategias


de cuidado y acompañamiento en cada territorio implica un trabajo
conjunto y articulado con las áreas de salud, sistema de protección

8
de infancias, desarrollo social, género y diversidad, educación, trabajo,
juventud, deporte, arte y cultura. Por tal motivo, es conveniente
enfatizar la importancia de los acuerdos federales de trabajo
intersectorial, para garantizar el funcionamiento de dichas redes de
articulación, lo que genera el marco de posibilidad para un abordaje
integral de la problemática a nivel local.

En este encuadre se implementan los lineamientos para la atención


de las personas con los marcos legales vigentes que aborden todas
las dimensiones de la vida de estas.

9
¿Qué es el alcohol?

El alcohol etílico (etanol) es un componente importante de las bebidas


alcohólicas. Este tipo de alcohol, es utilizado en diferentes formas,
por ejemplo: se puede usar como limpiador, antiséptico o sedante.

Con las bebidas alcohólicas, puede ser ingerido y tolerado, dentro de


ciertos márgenes por el ser humano. Modifica, en todos los casos,
aspectos fisiológicos y psicológicos. Es una sustancia psicoactiva legal
y es la más consumida en Argentina y en otras partes del mundo.

Las bebidas alcohólicas se encuentran sujetas a las siguientes


regulaciones establecidas por la Ley Nacional 24.788 de Lucha Contra
el Alcoholismo:

La venta de alcohol se encuentra prohibida a personas menores


de 18 años.

La venta de alcohol se limita en determinadas franjas horarias


en algunas localidades. Por ejemplo, se puede vender bebidas
alcohólicas en determinadas franjas horarias según cada provincia.

Existen regulaciones en torno al manejo de vehículos a motor y


consumo de bebidas alcohólicas

Existen bebidas alcohólicas como la cerveza y los licores que


tributan impuestos internos al Estado Nacional, los cuales,
luego se distribuyen como coparticipación federal de impuestos
a las provincias.

En nuestro país hay regulaciones legales que impiden que las


bebidas alcohólicas se publiciten durante la transmisión de
programas infantiles

10
Para el Código Alimentario Argentino -compatibilizado con el
MERCOSUR- son bebidas alcohólicas aquellas que tengan un grado
de alcohol etílico mayor de 0,5% por litro de bebida.

En este sentido, existe una controversia sobre si son un alimento


o no, ya que figuran en el Código Alimentario Argentino2. Desde la
Sedronar nos ocupamos de prevenir el consumo excesivo de bebidas
alcohólicas y de trabajar sobre sus consecuencias físicas y sociales.

Las bebidas alcohólicas de mayor circulación en Argentina, tienen el


siguiente porcentaje de alcohol: destiladas hasta 50%, vinos hasta
10 %, cervezas hasta 5 % de alcohol puro por litro de bebida.

Se produce por la fermentación, destilación o maceración de


diversos elementos (frutos, cereales, agaves, leche, hierbas, etc).

El consumo de bebidas alcohólicas se encuentra entre los diez


factores de riesgo sobre la carga de enfermedad en las Américas,
2000. (OPS, Alcohol y Salud Pública en las Américas, 2007).

2. https://www.argentina.gob.ar/anmat/codigoalimentario

11
Dentro de los AVAD (años de vida ajustados por discapacidad) es el
factor más importante:

• Agua no apta para el consumo, sanidad y higiene 1 año


• Uso de drogas ilegales 1,3 años
• Inactividad física 1,3 años
• Baja ingesta de frutas y verduras 1,6 años
• Sexo sin protección 1,7 años
• Colesterol alto 2,3 años
• Hipertensión 4 años
• Sobrepeso y obesidad 4,3 años
• Uso de tabaco 6,9 años
• Uso del alcohol 10 años

Es el principal factor de riesgo de muerte prematura y discapacidad para


las personas de 15 a 49 años. Aumenta el riesgo de contraer ciertas
enfermedades transmisibles, además de producir considerables
efectos tóxicos sobre los sistemas digestivo y cardiovascular. Es
carcinógeno, ya que aumenta el riesgo de contraer varios tipos de
cáncer. Es neurotóxico y puede afectar el desarrollo del cerebro, lo
que deriva en posibles cambios estructurales durante la niñez y la
adolescencia y en un volumen cerebral reducido en la edad adulta.
Es una sustancia psicoactiva que puede causar dependencia por
sus propiedades de reforzamiento; su uso continuo e intenso
puede generar una elevada tolerancia, debido a los procesos de
neuroadaptación en el cerebro, y luego, generar dependencia.
(OPS - estrategia SAFER).

Para leer más sobre la estrategia SAFER pueden ingresar al


siguiente enlace:

https://iris.paho.org/bitstream/handle/10665.2/51867/9879275321959_spa.pdf?sequence=5&isAllowed=y

12
Consecuencias físicas y sociales del
consumo de alcohol
Las bebidas alcohólicas son un producto de consumo “no ordinario”
(https://iris.paho.org/bitstream/handle/10665.2/2836/El%20
Alcohol.pdf?sequence=1&isAllowed=y) que puede generar riesgos en
esta sociedad, tiene muchas dimensiones: alimento (acompañamiento
de comidas y refresco), sustancia psicoactiva (intoxicante) y objeto
cultural (instrumento de festejo o encuentro con el otro).

Además, es fundamental contemplar las siguientes variables:

¿Qué se consume? Procedencia del alcohol, calidad, pureza, modo


de preparación.

¿Quién consume? Aquí debemos contemplar diferencias por edad,


género, corporalidad, sector social. El sentido que tiene el consumo
de sustancias para una persona se inscribe en su historia singular y
en un determinado contexto

¿Cómo se consume? Para responder a esta pregunta hay que


tener en cuenta cantidad, frecuencia, intencionalidad (recreativa,
anestésica, desborde, etc), si existe combinación de bebidas u otras
sustancias psicoactivas, vía de administración (la mayoría es oral),
si la persona consumió alimentos o no.

¿Cuándo y dónde se consume? Los escenarios y lugares de ingesta


de alcohol condicionan material y simbólicamente los efectos, los
sentidos y las formas de vincularse con las bebidas alcohólicas y las
otras personas, variando según el tiempo y el espacio.

13
Estas dimensiones definen complejidades y problemáticas que
requieren diferentes cuidados y abordajes. Apenas las bebidas
alcohólicas son incorporadas al organismo de las personas, comienzan
a ser metabolizadas por el hígado y luego van al torrente sanguíneo
afectando luego al Sistema Nervioso Central: deprimiéndolo (es decir,
haciéndolo más lento), alterando las percepciones (sobre todo los
sentidos de la vista y el oído), la capacidad de respuesta motora y las
emociones.

Otra característica a tener en cuenta respecto a su consumo es la


absorción (equilibrio entre la ingesta y la eliminación). Es decir, si una
persona toma bebida alcohólica en una proporción igual a la velocidad
de eliminación, o sea 1 gr. por cada 10 kilogramos de peso por hora, la
concentración de alcohol en sangre será constante. Si esto no sucede,
la persona se intoxica, porque la ingesta de alcohol será superior a la
capacidad de eliminación del organismo humano.

Por otro lado, existen muchas personas que no hacen uso de bebidas
alcohólicas, denominadas abstemias, que en la cultura actual, sufren
discriminaciones y presiones sociales para consumir, ya que los
consumos, como hemos mencionado antes, se dan también en el
marco de prácticas de pertenencia e identidad de grupos sociales. Lo
que consumimos en esta sociedad de consumo, da cuenta de a qué
grupo pertenecemos (o no).

A continuación, enumeramos una serie de conceptos que son necesarios


considerar a la hora de pensar y diseñar estrategias de acompañamiento
frente al consumo problemático de bebidas alcohólicas.

En este sentido, nos parece importante hacer referencia al concepto


de “complejo alcohólico” que habla de las consecuencias negativas
ocasionadas directa o indirectamente por el consumo de bebidas
alcohólicas por parte de las personas. Se expresa a través de padecimientos
físicos, mentales y vinculares, así como una gama de consecuencias que

14
varían según el contexto cultural y económico-político de la persona.
(El alcohol: un producto de consumo no ordinario - OPS, 2010).

El uso problemático de bebidas alcohólicas implica tener en cuenta


las consecuencias que sufre la persona, su familia, referentes y el
barrio, al consumirlas, en alguna ocasión o periódicamente. Además
de todos aquellos hechos que pueden asociarse al uso de alcohol
(accidentes, violencias en cualquiera de sus formas, contagio de
infecciones, rupturas vinculares, pérdidas económicas, etc).

La etiología (origen) y el ciclo del consumo problemático (uso, abuso,


adicción), se encuentran en la combinación de factores fisiológicos,
subjetivos, familiares, ambientales y culturales.

El consumo de riesgo es un patrón de consumo que aumenta las


posibilidades de consecuencias adversas para la salud. La Organización
Mundial de la Salud (OMS) lo describe como el consumo regular de
20 a 40 g diarios de alcohol en mujeres y de 40 a 60g diarios en
varones. (Alcohol y atención primaria de la salud: Informaciones
clínicas básicas para la identificación y el manejo de riesgos y
problemas - OPS, 2008)

El consumo excesivo episódico o circunstancial, que puede resultar


particularmente dañino, implica el consumo, de por lo menos 60 g
de alcohol en una sola ocasión en menos de 3 horas. En Argentina,
este particular tipo de uso se da en momentos festivos o de fin
de semana como por ejemplo, los festejos por el UPD, el día del
estudiante y la primavera, las “previas”, entre otros eventos.

15
El consumo de bebidas alcohólicas en forma dependiente, adicción,
alcoholismo, es causa de diversos tipos de lesiones, trastornos
mentales, problemas gastrointestinales, cánceres, enfermedades
cardiovasculares, trastornos inmunológicos, enfermedades óseas,
trastornos reproductivos y daños congénitos.

Es un conjunto de fenómenos conductuales, cognitivos, emocionales


y fisiológicos, en los cuales el uso de bebidas alcohólicas se transforma
en prioritario y central para la persona, en contraposición con otras
actividades y obligaciones que, en algún momento, tuvieron mayor
valor. El alcoholismo es una enfermedad crónica con factores
genéticos, psicosociales y ambientales que influyen en su desarrollo
y manifestaciones, es a menudo progresiva y puede ser fatal. Cada
uno de esos síntomas puede darse de forma continua o periódica.

Se considera intoxicación al estado más o menos breve de


discapacidad funcional, psicológica y motriz inducida por la presencia
de alcohol etanol en el cuerpo, aún con un nivel bajo de consumo.

El síndrome confusional es cuando el cuadro de consumo presenta


obnubilación de la conciencia, desorientación temporal y espacial,
acompañado con trastornos de la memoria.

El concepto de agitación psicomotriz hace referencia al estado


de exaltación motora compuesto de movimientos automáticos
o intencionales, pero en general carecen de un objetivo estable
común, y se encuentra acompañado de un estado afectivo de
ansiedad, de enojo, de pánico o de euforia según el caso. Además
la persona puede presentar desinhibición verbal y falta de conexión
ideativa. La conducta puede ser impulsiva, negligente, desordenada
o arriesgada.

16
El concepto de delirium tremens hace referencia a la complicación
aguda del consumo de bebida alcohólica en forma crónica, que suele
desencadenarse ante estados de abstinencia abrupta de la ingesta,
sin que exista un seguimiento de la salud de la persona . Este cuadro
genera mucha temperatura y deshidratación, sudoración, taquicardia
y trastornos en la sensopercepción. Aparece, aproximadamente,
en la semana siguiente a la interrupción abrupta del consumo de
bebida alcohólica. Puede ser potencialmente mortal (muerte por
infecciones, colapso vascular, desequilibrio hidroelectrolítico, etc.)
si no se contiene con medidas de atención de la salud de la persona.

Por otro lado, es necesario mencionar que algunas de las personas


que habitualmente consumen bebidas alcohólicas tienen dificultades
para relacionar ciertos problemas que existen en sus vidas como
consecuencia de la ingesta, por lo que creen “poder seguir tomando”
sin necesidad de pedir ayuda. En algunas ocasiones, también
presentan impedimentos para mantener los estudios y/o el trabajo
o determinados vínculos afectivos; así como una dieta equilibrada
o surgen desórdenes de otro tipo como desinterés, abandono de sí
mismas en relación a su aspecto físico o aburrimiento.

Las personas dependientes, tienen mayores dificultades para


integrar, en su vida diaria, actividades físicas saludables o de
ocupación de su tiempo: esto implica la higiene personal, el cuidado
de la casa, actividades como cocinar o realizar compras, elegir
cómo vestirse, establecer y mantener actividades educativas,
ocupacionales y/o laborales. Diariamente presentan desajustes
en el patrón del sueño, que pueden incrementar sus consumos
problemáticos, generando así un estado de deterioro constante.

En muchos casos, también, se manifiesta una disminución de la


capacidad de aprendizaje, de resolución de problemas, de integrar
las crisis o conflictos personales como posibles elementos de
crecimiento personal, o directamente, problemas en los sentidos.

17
Se debe tener en cuenta que a medida que aumenta la edad y
se envejece, se incrementan los efectos de la bebida alcohólica con
menores cantidades de ingesta; porque se tiene menor cantidad
de agua en el cuerpo, se desarrolla más tolerancia (se necesita más
alcohol para producir el efecto inicial) y los órganos se encuentran
más deteriorados, lo cual significa que el alcohol etílico se acumula
a una concentración más alta y el cerebro siente los efectos más
rápidamente.

Es importante, para familiares y entornos afectivos, registrar si


se observan cambios pronunciados en la persona y en un corto
tiempo, en sus actitudes y/o sus vínculos, en relación con su
comportamiento habitual.

En el caso de una crisis por una intoxicación alcohólica, algunos de


los cambios que la persona puede experimentar son:

La persona expresa un discurso en el que no hay nexos


asociativos entre las ideas, es decir, es poco coherente en sus
expresiones

La persona puede presentar falta de coordinación motriz, es decir


en sus movimientos; eso se puede detectar particularmente en
sus movimientos al desplazarse.

La persona adopta una postura inestable; incluso le es difícil


permanecer de pie.

Se presentan movimientos rápidos e involuntarios de los ojos,


como por ejemplo, de un lado a otro o de arriba hacia abajo.

Puede existir alteración en la memoria y en la atención de la


persona; le es difícil localizar lugares previamente conocidos, y es
incapaz de seguir o comprender a un interlocutor en su discurso.

18
La intoxicación alcohólica podría llevar finalmente a un estado de
inconsciencia crónico y al coma. Siempre deberá descartarse otra
condición sanitaria que explique los síntomas dado que algunos
de los mismos pueden deberse a condiciones biológicas de otras
problemáticas de salud.

Si se compensa la crisis de la persona, hay riesgo de que se presenten,


posteriormente a la suspensión del consumo de alcohol (prolongado
o a niveles tóxicos), dos o más de los siguientes síntomas (en un
período de horas o pocos días):

• Hiperactividad autonómica como taquicardia y/o sudoración


• Temblor exagerado de las manos
• Insomnio (intermedio o despertar en la madrugada sin posibilidad
de volverse a dormir)
• Náuseas o vómitos
• Alucinaciones de carácter visual, táctil o auditivo
• Agitación psicomotriz
• Ansiedad
• Convulsiones físicas o de ausencias o lagunas mentales
• Desorientación

19
La persona también puede experimentar:

• Miedo y ansiedades incontenibles


• Irritabilidad, con gestos y lenguaje amenazantes con riesgo de violencia
hacia sí mismo o hacia terceros.
• Negativismo y actitud desafiante
• Dificultades en el control de los impulsos
• Deterioro cognitivo (memoria, comprensión, cálculo, capacidad de
aprendizaje y en el desarrollo del lenguaje)
• Disminución del sueño
• Fluctuación rápida de los síntomas en periodos cortos de tiempo

¿Cómo intervenir?

Para poder construir y llevar adelante una estrategia de intervención


y acompañamiento ante las situaciones ya mencionadas, es de suma
importancia aumentar la concientización de la comunidad, sobre la
magnitud de la problemática y desarrollar estrategias contenedoras
de los problemas asociados a los consumos de bebidas alcohólicas
por parte de las personas. Es fundamental promover acciones que
contribuyan a sensibilizar y desnaturalizar el consumo de bebidas
alcohólicas, como así también, generar herramientas y estrategias
que puedan dar respuesta asistencial a las personas que se
encuentran atravesadas por la problemática. Estas respuestas
deben gozar de aceptación y deben contemplar la cultura simbólica
de sus destinatarios.

Desde cada uno de los espacios de atención socio sanitarios se pueden


desarrollar herramientas de participación activa en sus comunidades,
además de brindar estrategias de transformación de los lazos

20
comunitarios hacia vínculos solidarios, constituyendo a la propia
comunidad como sujeto activo de transformación de realidades.
Es importante que la comunidad y la red disponible en el territorio
asuman el protagonismo en relación al cuidado de las personas.

En este sentido, las estrategias de acompañamiento incluyen


promoción de la salud, prevención y atención de las personas que
consumen bebidas alcohólicas y otras sustancias psicoactivas, así
como a sus familiares, entornos afectivos y a su comunidad, tanto
en los dispositivos en sí, como en los hogares y territorios.

Para profundizar esto, es necesario considerar tres herramientas


fundamentales a tal efecto: promoción, prevención y atención.

Promoción de acciones

En términos de acciones de promoción socio sanitaria se propone:

Ofrecer información acerca de los efectos de las bebidas alcohólicas


y de las repercusiones de los consumos problemáticos de alcohol (*).

A continuación, citamos ejemplos de esto:

- Las bebidas alcohólicas son sustancias psicoactivas

- No son un producto de consumo ordinario, cualquier tipo de


consumo modifica las capacidades físicas y conductuales
(haciéndolas más lentas, deshidratando, etc)

- Su consumo excesivo puede provocar accidentes, enfermedades


físicas y psíquicas, dependencia, ruptura de vínculos, conflictos
con la ley, deserción escolar y conflictos laborales, etc.

- Siempre hay diferencia entre la cantidad (es más) que se toma,


de la percibida (es menos).

21
- Genera enfermedades hepáticas y digestivas.

- El consumo de bebidas alcohólicas produce muchas calorías


(vacías) y puede potenciar la compulsión de comidas no
saludables.

- El consumo de alcohol genera trastornos del sueño: impide


dormir, o puede ingresar en la etapa de sueño profundo y
luego, en vigilia; es decir, que puede provocar insomnio.
Es fundamental comer antes de beber alcohol; de lo contrario,
el alcohol se absorberá más rápidamente por el aparato digestivo
y generará un nivel de alcoholemia mayor en menor tiempo.

Reforzar y acompañar a las comunidades en regulaciones comparadas


en relación a la publicidad local, a la disponibilidad y venta de
bebidas, horarios y lugares, manejo de maquinarias y consumo, etc.

Generar comunicaciones en los medios masivos locales frente


a los consumos problemáticos y el consumo en determinadas
personas y grupos etarios.

Desarrollar espacios donde la participación social de las personas


sirva como medio en términos de construcción de una
ciudadanía activa, de trabajo comunitario entre diferentes
grupos, impulsando y reforzando la autonomía de la persona,
reconstituyendo, de este modo, los lazos sociales.

Promover acciones coordinadas de todos los actores sociales


involucrados para poner en marcha el funcionamiento de la
red de recursos existentes en la comunidad, fomentando y
posibilitando el trabajo interinstitucional e intersectorial, y que,
a su vez, preserve y refuerce el vínculo de confianza que la
comunidad establece con quienes trabajan específicamente la
problemática.

22
Realizar actividades con la comunidad, con sus actores referentes,
que permitan reforzar el lazo con aquellos espacios que aborden
específicamente la problemática de consumos y que, de este modo,
las personas los conozcan y puedan acudir a ellos.

Prevención

Son todas las acciones que se llevan a cabo en RED con los dispositivos
de atención, organismos del Estado, comunidad y en el territorio,
para evitar los consumos problemáticos y sus consecuencias como
por ejemplo, las intoxicaciones, los consumos abusivos y las
dependencias. Para ello, es fundamental que quienes trabajen
abordando estas problemáticas puedan hacer una revisión
constante de sus prácticas a partir de la reflexión y la creación de
líneas de acción de continuidad de cuidados. Es importante que
puedan despojarse de sus prejuicios respecto del tema y que los
problematicen con la comunidad, a través de diversas herramientas
que también contemplen las particularidades de cada persona
acompañada.

Les presentamos algunas de las líneas de acción posibles:

Acompañamiento: para llevar adelante esta línea de acción es


fundamental pensar y trabajar en equipo y en red. Esto implica
que quienes se encuentren acompañando escuchen a quienes
se encuentran atravesados por la problemática y a su entorno
como al resto de la comunidad, que piensen acciones integrales
de acompañamiento, que dialoguen y construyan una estrategia
de cuidados basada en la escucha activa, la contención y la
comprensión.

Capacitaciones: Esta línea de acción implica armar espacios de


intercambio, sensibilización y debate con distintos actores de
la comunidad, desde los cuales puedan crearse estrategias de
cuidado para todas las personas.

23
Dinámicas recreativas y culturales: aquí se debe tener en
cuenta de qué modo los espacios de atención y acompañamiento
de esta problemática participan de la vidad de la comunidad
en la que se encuentran; para no ser un espacio institucional
aislado; sino un espacio que proponga, junto a otros actores
del territorio, acciones que habiliten a las personas a pensar
dinámicas saludables y de cuidado del cuerpo, reflexión sobre
sus prácticas cotidianas y armado de actividades recreativas o
culturales que estén centradas en el encuentro y el cuidado de
todas las personas.

Atención y acompañamiento

Las prácticas de atención y acompañamiento se construyen


centrándose en las trayectorias de vida de las personas acompañadas.
Es central poder revalorizar y construir esas prácticas en relación a
las capacidades de las personas, en el territorio donde viven, con
su historia, con sus proyectos y su relación con los consumos en
general y en particular con el de las bebidas alcohólicas y/u otras
sustancias psicoactivas.

Es fundamental conocer los vínculos que se establecen entre las


personas, minimizando los prejuicios que existen, con las ideas y
creencias sobre el lugar, desarrollar redes con las instituciones
existentes, generando y ampliando espacios.

24
En este sentido, nos parece importante mencionar la existencia
de lugares con un enfoque comunitario, territorial e integral de la
problemática. En los territorios donde trabaja la Red Federal de la
Sedronar encontramos una multiplicidad de espacios de atención.

Para comenzar a hablar de este modelo de abordaje, es importante


referirnos al concepto de comunidad. Podemos decir que la
comunidad no es solamente un grupo de personas que viven en un
mismo territorio, sino que es también el conjunto de lazos y redes
existentes entre las personas de ese lugar y la idea de identidad
común que hace que todos y todas puedan sentirse parte de ella.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que hay tantos conceptos
respecto de lo que es una comunidad como personas la compongan

El modelo de abordaje integral comunitario pone a la comunidad en


el centro de la escena como un actor fundamental en la construcción
de estrategias de acompañamiento y cuidado. Este modelo es
un conjunto de acciones, estrategias, intervenciones y procesos
que buscan como objetivo acompañar, transformar y mejorar la
vida de las personas que se encuentran en una situación de alta
vulnerabilidad en esa comunidad.

El enfoque comunitario implica diseñar estrategias que tomen en


consideración la voz y la experiencia de la comunidad contemplando
la diversidad. En este sentido, se diseñan acciones concretas que
respetan y acompañan las diferencias culturales; de este modo, se
recuperan y se valorizan prácticas y saberes de la vida cotidiana de
la comunidad. Es necesario y prioritario considerar las realidades
de cada comunidad, los sentidos atribuidos a sus prácticas, para
construir los diagnósticos y las estrategias de acompañamiento
desde un modelo participativo y comunitario, que tome en
consideración y respete las particularidades de cada contexto.
Atender a la complejidad y la heterogeneidad de una comunidad
implica una revisión de los encuadres de las propuestas teniendo en

25
cuenta la historia, la modalidad de vinculación, los sentidos diversos
de las acciones cotidianas y los lazos construidos en comunidades
específicas dentro de un mismo territorio, de un mismo barrio.

Si entendemos que los consumos problemáticos de sustancias


psicoactivas son un problema en el marco de una sociedad de consumo,
como ya mencionamos, entonces la propuesta del abordaje
comunitario supone pensar posibles salidas que consideren otras
dinámicas relacionales basadas en la organización colectiva y el
diálogo con la comunidad y el territorio como protagonistas. Esto
implica desafiar la mirada del problema de los consumos que señala
y estigmatiza a las personas de forma individual, sin contemplar
cómo la comunidad en relación con un Estado presente pueden
operar en el proceso de contención, cuidado y acompañamiento de
las personas.

Este abordaje ubica en el centro a las personas con sus trayectorias


de vida, con sus historias personales y también colectivas, desde un
enfoque de derechos donde el consumo problemático de sustancias
psicoactivas es puesto en relación con el contexto económico, político
y cultural en el cual se da.

26
Cuando nos referimos a un modelo de abordaje integral, diremos
que la integralidad como concepto supone abordar a la persona y
a la problemática desde sus múltiples dimensiones, es decir, no se
centra exclusivamente en la problemática de consumo de sustancias.
El trabajo interdisciplinario busca abordar de manera simultánea
diversos ejes y elementos que componen el acompañamiento
y cuidado de la vida de las personas: la atención, los espacios
terapéuticos individuales y grupales, el cuidado de la salud y el cuerpo,
la identidad, organización comunitaria y territorial, educación, trabajo,
construcción y fortalecimiento de lazos afectivos, lo legal, lo habitacional,
entre otras. Este enfoque implica entender que las vidas de las
personas no son algo fragmentado, sino que, para que una estrategia
de acompañamiento se convierta en una posible respuesta, deben
contemplar la integralidad y complejidad de la vida de una persona
y su comunidad. Así mismo, el carácter dinámico implica que todos
estas dimensiones y aspectos deben abordarse en situación, en un
contexto particular.

Los equipos de trabajo de los dispositivos de atención deben estar


atentos a lo que sucede en el territorio en el que se encuentran,
para acercarse, para brindar sus capacidades y articulación con
otras instituciones que permitan trabajar en red y vincularse con
dispositivos de otras características. El término territorio, cuando
pensamos en las intervenciones comunitarias, significa mucho más
que un espacio o porción de tierra delimitada, incluye la identidad
cultural de quienes lo habitan y un sinnúmero de formas en que esta
identidad se desdobla, se tensiona o se fusiona. Intentar conocer
el territorio en su complejidad, sin idealizaciones ni prejuicios es
una actividad de primer nivel de importancia para los equipos que
trabajan en el mismo; permite pensar estrategias de prevención
e intervención más adecuadas y eficaces. Asimismo, conocer las
relaciones de poder de colaboración y de prestigio en el territorio
es fundamental para el armado de redes y para el acompañamiento
de las personas que se encuentran atravesando problemáticas

27
de consumo. Muchas veces las personas atravesadas por la problemática
de consumos de sustancias recorren diferentes dispositivos, espacios
de atención y acompañamiento en su proceso, otras tantas son
sostenidas por redes informales que pueden tener un alto grado de
densidad y complejidad; entender las dinámicas de estas relaciones
en el territorio se vuelve entonces fundamental a la hora de
acompañar a quienes están atravesados por la problemática.

Por eso, es fundamental hacer recorridas por el barrio, ir al encuentro


de las personas que están atravesadas por la problemática y/o
hablar con su entorno afectivo y ofrecer talleres, espacios lúdicos,
de descanso, de comida y espacios terapéuticos (personales y
grupales, para familiares / referentes y medicación).

Cada dispositivo tiene que tener consensuada su rutina de


funcionamiento de atención, visible al propio equipo de trabajo y
para las personas del territorio, además de contar con diferentes
instancias para el ingreso y permanencia de las personas, que
contemplen sus necesidades y demandas, y que desde allí se piensen
las estrategias de intervención. Cada persona tiene su propio
tiempo de proceso y desde este, aparecen diversas posibilidades de
replantearse cambios e ir incorporando las estrategias terapéuticas
y sociales acorde a sus posibilidades y capacidad de elección.

28
Los procesos de acompañamiento de las vidas de las personas
atravesadas por esta problemática son complejos y diversos.
Es importante consensuarlos, en la medida de lo posible, con la
persona pero también con su familia y /o entorno afectivo; si es
que lo hubiera. En este sentido, es necesario conocer cuáles son
los dispositivos o espacios por los que la persona afectada transita,
y con cuáles de esos tiene mayor afinidad para poder trabajar su
acompañamiento en red.

Entendemos que la propuesta de acompañamiento implica trabajar con


las habilidades de la persona, para constituir nuevas posibilidades
y vínculos. Además es necesario trabajar acerca de los significados
que adquiere el consumo de alcohol en su comunidad o grupo, para
poder problematizarlos, desarmarlos o resignificarlos.

Propuestas de acción para equipos

Los equipos de trabajo pueden llevar adelante múltiples acciones


de cuidado y acompañamiento, como por ejemplo:

Trabajar con el entorno afectivo de la persona, brindándole


herramientas que puedan utilizar para acompañar de forma integral.

Sostener espacios terapéuticos individuales y/o grupales donde


se generen acuerdos y se sostenga el respeto, la confidencialidad
y la posibilidad de expresar diversos aspectos cognitivos, afectivos,
vinculares, emocionales y relacionales. En dichos espacios tiene
que haber profesionales de la salud que puedan abordar la
problemática en conjunto con el resto del equipo de trabajo.

Coordinar, con la persona y/o familiares y/o entorno afectivo


y los recursos que hay en el territorio, evaluando las mejoras
posibles y articulando con otros para garantizar la continuidad
de los cuidados.

29
No podemos dejar de mencionar que la reticencia al pedido de
ayuda de algunas personas con problemas de consumo de bebidas
alcohólicas es una posibilidad frecuente y esperable. En algunos
casos, es motivada por vergüenzas, culpabilidades y/o temores a
perder vínculos y roles.

La negación tiene una extraordinaria fuerza, que se descubre


cuando la persona intenta “racionalizar o explicar o camuflar” el
porqué de su conducta de consumo y los problemas que ésta le
produce. Estos razonamientos, excusas y contradicciones, son
ejemplos de la racionalización usada para mantener la negación.
Muchas veces el consumo es percibido como una solución a dolores
físicos / psíquicos e inseguridades, entre otros.

Sin embargo, aún si la persona presenta ciertas resistencias al


acompañamiento, pueden pensarse algunas acciones posibles de
atención:

Primera Escucha:

Existen algunas herramientas que pueden ser útiles para lograr un


mejor acercamiento a las personas que sufren por los consumos
problemáticos de sustancias psicoactivas.

Se pueden realizar algunas preguntas en el marco de los primeros


diálogos de acercamiento. Son complementos en las entrevistas
iniciales de contacto entre la persona y algún integrante del equipo
del dispositivo. Las respuestas a estas preguntas pueden darnos
indicios de en qué situación se encuentra la persona, pero de todos
modos, no son respuestas que deban tomarse como absolutamente
determinantes. Además, la persona en cuestión podría evitar o
negarse a responder; y entonces, tendrán que llevarse adelante
otras estrategias de primer acercamiento, por ejemplo con su
entorno afectivo.

30
Estos cuestionarios son fundamentados en evidencia empírica,
para identificar situaciones de consumo problemático de bebidas
alcohólicas. Estas preguntas pueden ser realizadas por cualquier
miembro del equipo, también algunos cuestionarios pueden ser
autoadministrados. Es importante intentar lograr un clima de
confianza con la persona y no realizar juicios acerca de las respuestas
que ésta dé.

Les presentamos algunas opciones de cuestionarios:

AUDIT
h t t p s : // w w w.w h o . i n t / s u b s t a n c e _ a b u s e /a c t i v i t i e s /e n /
AUDITmanualSpanish.pdf

ASSIST V 3.0
https://www.who.int/substance_abuse/activities/assist_spanish.pdf

CAGE
h t t p s : // w w w.y u m p u .c o m /e s /d o c u m e n t /r e a d / 3 15 7 5 0 61 /
cuestionario-cage

31
Otra herramienta que puede orientar a los equipos de trabajo es
este cuestionario que permite indagar sobre diferentes aspectos
de la vida de las personas como, por ejemplo:

Figuras contenedoras Familia y/o entorno Recursos personales


afectivo
¿A quién llamás cuando ¿Cómo te describiría
estás mal? ¿Con cuántas personas un/a amigo/a?
convivís?
¿A quién podés ir a ver? ¿Cómo lo harías vos?
Cuándo hay un problema,
¿cómo lo resuelven? Pensá aspectos
positivos / negativos
¿Siempre lo hacen de la propios.
misma manera?

En las discusiones,
¿qué actitud asumís?
¿En tu familia existe
alguna persona que
consuma alcohol u otras
sustancias psicoactivas?
llamás cuando estás mal?

Socialización Conductas En la calle


transgresoras
¿En qué grupo estás? ¿Qué haces en un día
¿Cuál fue la situación más común? ¿Y dónde?
Podes describir un día desagradable y/o peligrosa
de tu semana y uno del en la que estuviste? ¿Si no estás en tu casa,
fin de semana. ¿Cómo le hiciste frente? en general, dónde estás?

¿Qué haces en tu ¿Te hacés cargo de tus


tiempo libre? actos?

¿Con quién habitualmente ¿Qué te pasa al otro día?


te reunís?
¿En qué casos fuiste
criticado por tus
decisiones y/o acciones?

¿Tuviste alguna causa


judicial?

32
Estudio / trabajo Con grupo de pares En su comunidad

¿Estudiás, trabajás o qué ¿Qué hacés cuando no ¿Realizás alguna actividad


hacés? ¿Desde cuándo? trabajas / estudias? con tus vecinos/as?
¿Y antes qué hacías? ¿Participas en alguna
¿Desde cuándo conocés organización barrial?
¿Cómo te llevás con tus a tus amigos? ¿Dónde (club /parroquia/ sociedad
compañeros/as de la los/as conociste? de fomento/ etc).
institución/ empresa/ etc?
¿Cómo resuelven sus
¿Cómo planificás tus problemas y diferencias?
actividades en la escuela / ¿Y qué actividades
trabajo / etc? los/as unen?

Recreación Edad de inicio: Frecuencia

¿Cómo combinas lo que ¿Cuándo o a qué edad ¿Cuántas veces consumiste


te gusta hacer con tus empezaste a tomar en el último mes?
responsabilidades? alcohol?
¿Consumiste alguna
¿Haces algún deporte o ¿Alguna vez te excediste sustancia en la última
actividad cultural? en el consumo de alcohol? semana?
¿Tenés algún hobby?
¿Consumiste o consumís
alguna otra droga? ¿A
qué edad y dónde fue?

¿Fue solo/a o en grupo?

¿Mezclas alcohol con


otras drogas?

Ciclos de uso Consecuencias de la


intensidad del uso
¿Crees que podés controlar
el consumo? ¿Cómo? ¿Qué cosas podrías hacer
(autopercepción). antes de consumir? y
¿Cuáles haces ahora?
Si atravesaste
intoxicaciones ¿Notaste cambios en tu
frecuentes, ¿Cuánto cuerpo / carácter /
tiempo pasó entre una rendimiento / en tu relación
borrachera y otra? con las demás personas?

¿Está relacionado con


algún hecho en particular?

33
Herramientas de atención y acompañamiento
Una vez definida la situación inicial de la persona, así como la necesidad
de recibir cuidados y atención, se proponen distintas herramientas
terapéuticas para contener y acompañar, en un proceso. Es importante
tener en cuenta que no hay recetas únicas para intervenir en
esta problemática y es necesario trabajar con cada persona para
acordar un plan y favorecer su autonomía, en el proceso de toma de
decisiones sobre cómo quiere ser acompañada.

1. Consejería

Es un inicio de acercamiento que se puede desarrollar en el dispositivo,


en la casa o en el barrio. La capacidad de escuchar y mostrar empatía
deben ser parte de la base de la escucha. La posibilidad de proponer
la transformación de algunas prácticas de vida de la persona, debe
ser complementada con otras técnicas más específicas.

Los dos principales objetivos de la consejería son:

Ayudar a las personas a lidiar mejor con sus problemas y a desarrollar


recursos no utilizados.

Incentivar a que las personas se ayuden a sí mismas o que puedan


recurrir a su entorno afectivo, en caso de necesitarlo, en su vida
cotidiana.

Posibles intervenciones ligadas a la prevención:

Es importante saber que el consumo de bebidas alcohólicas


deshidrata, por eso hay que beber agua e ingerir alimentos.

Es posible llevar adelante prácticas recreativas sin consumir


sustancias psicoactivas o sin que el consumo de estas sea el
centro de la actividad en cuestión.

34
Ante la necesidad o la demanda de encontrar un espacio de
contención o de escucha se puede recurrir a los espacios que
aborden la problemática de consumos existentes en el territorio.

Es recomendable tener conciencia sobre cuánto se consume,


a qué velocidad, en qué momentos del día sucede, cómo nos
sentimos antes, dónde estamos y con quiénes.

Es recomendable tomar agua o bebidas sin alcohol entre cada trago.

Se recomienda apoyar el vaso en la mesa entre sorbo y sorbo.

No beber alcohol si se es persona menor de 18 años, si se está


cursando un embarazo o amamantando, ni cuando se conduce
o se va a conducir un vehículo o una maquinaria.

Es muy bueno definir metas semanales para la reducción del


consumo de bebidas alcohólicas. Pero siempre planteándose
metas que puedan ser realistas y adecuadas a cada persona,
según el momento en el que se encuentra.

Conocer cuáles son las situaciones que disminuyen el consumo


y cuáles lo facilitan.

Transmitir que los procesos de atención y acompañamiento de


esta problemática llevan tiempo y hay que tener paciencia y
mucha voluntad personal, además de intentar crear o reforzar
vínculos afectivos para sentirse acompañado.

Es muy importante poder hablar con alguien de confianza


sobre el consumo de alcohol y sobre qué le sucede a la persona
con eso.

35
2. Entrevista motivacional

Para posibilitar la motivación necesaria para cambiar ciertas


dinámicas problemáticas de vida, explorando y problematizando
contradicciones, se propone que descubra motivos para pensar
desde otros lugares más saludables por medio de entrevistas
motivacionales, que estarán centradas en la persona, poniendo
énfasis en que el cambio de ciertas prácticas cotidianas es voluntario
y que es ella misma la que tiene la responsabilidad de las decisiones
y de los resultados del cambio.

En este sentido, se sugieren tres procesos generales mediante los


cuales pueden lograrse distintas modificaciones en la vida cotidiana
de la persona:

• colaboración
• evocación
• autonomía

Una relación de colaboración entre el equipo de trabajo y la persona


afectada por la problemática y el entorno afectivo, es un elemento
crucial de la entrevista motivacional. En esta relación es central el
respeto entre las partes, y no la intención de coaccionar o persuadir
al otro de cambiar sus prácticas de manera forzada; sino que más
bien, hablamos de un espacio de reflexión y diálogo.

El recurso de la evocación refiere al papel que cumple el equipo de


trabajo para proponer recursos y motivar a la persona para llevar
adelante ciertas dinámicas más saludables para sí.

En relación a la autonomía puede decirse que nos referimos a


la independencia y responsabilidad de la persona afectada y su
entorno afectivo, sobre aquellos cambios en su vida que puedan
ser acompañados por el equipo de trabajo del dispositivo.

36
Existen cuatro principios fundamentales que tienen que estar presentes
en la entrevista motivacional:

• expresar empatía
• desarrollar discrepancia
• aceptar la resistencia
• apoyar la autoeficacia

Un estilo empático de abordaje es una característica fundamental y


definitoria de la entrevista motivacional.

Se considera a la empatía como el elemento sobre el que se apoya


la entrevista motivacional: la expresión de la empatía se refiere a
una actitud de aceptación y respeto hacia la persona afectada por
la problemática e incluye reflejar las preocupaciones de esta sobre
el consumo perjudicial de bebidas alcohólicas y/u otras sustancias
psicoactivas.

La noción de “desarrollar discrepancia” está dirigida a esclarecer con


la persona las metas de vida más importantes para ésta e invitar a
pensar y dialogar sobre las consecuencias de seguir bebiendo que
entran en conflicto con esas metas.

Aceptar la resistencia está relacionado con evitar discusiones con la


persona afectada que son contraproducentes. Más bien, se puede
reformular la resistencia con nuevas ideas, para crear el impulso al
cambio.

El concepto de autoeficacia, se refiere a la confianza de la persona


en sus capacidades para realizar tareas específicas y al lograrlas,
visualizar que puede cambiar ciertas dinámicas perjudiciales para
su vida y la de su entorno afectivo.

37
3. Entrenamiento en habilidades

Es una forma de intervención que implica enseñar habilidades sociales


que pueden ser de utilidad para funcionar sin el uso de bebidas alcohólicas.

Esto significa trabajar con la persona sobre:

• La capacidad de entender y escuchar a los otros


• Reconocer las emociones y comunicarlas
• Pensar soluciones reales a diferentes problemas y saber negociar
• Poder conversar e intercambiar opiniones
• Poder pedir ayuda
• Capacidad para tomar decisiones

4. Comportamiento autoguiado

Involucra una serie de estrategias como:

• auto-monitoreo,
• establecimiento de límites de consumo,
• manejo de los detonantes del inicio del consumo
• identificación de situaciones problemáticas
• autorecompensas por haberse limitado en el consumo

38
5. Estrategias psicosociales y de prevención

Las estrategias psicosociales funcionan igualmente bien en varios


entornos de tratamiento y en sesiones grupales o individuales.
Son estrategias de atención integral, que conjugan acciones subjetivas
con otras comunitarias, encaminadas a la recuperación de la autonomía
y del restablecimiento de los derechos de las personas que hacen
un consumo problemático de bebidas alcohólicas.

Comienzan cuando se evalúan las causas de los problemas y se actúa


sobre los factores perjudiciales, para minimizar su recidiva. Si los
problemas generados por el consumo de bebidas alcohólicas
persisten, se trata de evitar su cronificación por medio de varias
actividades, como:

• Buscar referentes o tutores/as para personas con consumo


problemático de alcohol

• Desarrollar estrategias educativas en relación a cuidados socio


sanitarios para las niñeces y adolescencias locales

• Hacer promoción de empleos e iniciativas de inserción laboral o


creación de otras propuestas de trabajo alternativas

• Brindar a la población adolescente y joven herramientas preventivas


que impliquen pensar el diálogo y el cuidado entre pares.

39
• Ampliar las estrategias de participación en acciones comunitarias

• Brindar espacios locales donde se desarrollen estrategias de


meditación, relajación, yoga, etc, para comenzar a manejar las
tensiones de otra forma.

• Ofrecer espacios grupales al entorno afectivo de la persona, para


brindar herramientas de autoayuda, de contención y de nuevas
formas de ver la perspectiva en la que se encuentran.

• Buscar lugares en la comunidad que promuevan estrategias


creativas para estimular nuevas formas de ver la realidad.

• Llevar adelante acciones que se centren en el aquí y ahora.

La prevención de la vuelta al consumo consiste en poner en práctica


técnicas para identificar situaciones de alto riesgo, entrenando
habilidades de resistencia para situaciones de riesgo de consumo,
conociendo estrategias para afrontar las ansias intensas e irrefrenables
que conducen a la persona a querer abandonar los cuidados y
generar pensamientos negativos asociados al consumo.

Las técnicas son las que enseñan, capacitan y empoderan a la persona


que consume alcohol para entender las recaídas como parte del
proceso de cambio, como un modo de ir creciendo en capacidades.

Es importante aclarar, sin embargo, que no está clara la duración óptima


y la intensidad de la prevención y puede variar de una persona a
otra según los diferentes problemas y necesidades.

40
Dado que la vuelta al consumo es uno de los problemas más importantes
para quienes intentan superar el consumo problemático de bebidas
alcoholicas, resolver dicho problema es un aspecto esencial del tratamiento
y aquél que plantea las dificultades más importantes en el campo
de la dependencia. Por eso, proponemos:

• Informar a la persona que las recaídas son posibles.

• Diferenciar una caída (una sola vez) de una recaída (volver a


cierto consumo).

• Asumir la responsabilidad y no la culpa en el proceso.

• Analizar los factores que le han llevado.

• Entrenar en habilidades específicas de afrontamiento ante situaciones


de alto riesgo.

• Entrenar en la toma de decisiones hacia el no consumo en situaciones


de alto riesgo.

• Entrenar en estrategias de nuevos estilos de vida para mantenerse


en cuidados.

• Pedir ayuda siempre

• Nunca quedarse solo y buscar participar en actividades sociales

• Recordar las metas propuestas

41
6. Terapia comportamental

Se trabaja sobre cómo los pensamientos influyen en los estados


de ánimo, con técnicas para aumentar pensamientos positivos,
descubriendo actividades placenteras y elaborando estrategias
diarias de sostén.

Se consensuan metas en relación a proyectos, teniendo en cuenta


las capacidades y los estados de ánimo que se experimentan.

Se trata de elegir más en el quehacer diario e identificar alternativas


para tener mayores posibilidades.

Se trabaja sobre las relaciones interpersonales, cómo afectan los estados


de ánimo y cómo ampliar la búsqueda del apoyo social, identificando
grupos de apoyo.

Se practica la comunicación asertiva y el desarrollo de destrezas


que permitirán el establecimiento de relaciones satisfactorias.

Se modelan conduc tas entre pares, prac ticando destrezas


interpersonales y comunicacionales, dando y recibiendo retroalimentación,
y usando refuerzos positivos.

Se trabaja con los pensamientos, emociones y conductas, buscando


equilibrios y nuevos estilos de vida para nuevos proyectos. Sobre las
creencias y pensamientos automáticos relacionados con la bebida.

42
En el comienzo, se trabaja sobre la recepción de la persona, sus familias
y referentes, con:

• Empatía, intentando aumentar la voluntad y autoestima, bajando


las actitudes de desconfianza y miedos.

• Estrategias para que se identifique con las otras personas,


sintiéndose cómodo con las otras personas, conectándose y
reconociendo las emociones de ellos.

• Atención al tono, postura, expresión, mirada y silencios.

• Evitación de juicios de valor y discusiones, es decir, se postergan


para otro momento las diferencias.

• Realizar preguntas acerca de cómo está, cómo se siente, qué necesita


y si puede proponer y responsabilizarse de algo en las actividades
dentro del dispositivo.

Luego se trabaja sobre la visualización de las consecuencias negativas


del consumo de bebidas alcohólicas, informando y consensuando
cuáles son los riesgos frente al consumo, como dependencia,
enfermedades crónicas, accidentología, rupturas vinculares, costos
económicos, desmotivación laboral o educativa, debilitamiento
del sistema inmune, desajustes cardiovasculares y cerebrales,
alteración del humor, efectos negativos sobre los embarazos,
ansiedad e insomnio.

Se buscan motivaciones para el cambio en prácticas de su vida


cotidiana que consisten en indagar compromisos subjetivos,
mediante la capacidad de manifestar anhelos y sentimientos y
tratar de generar acciones posibles para concretarlos, visualizando
las resistencias y dificultades como forma de evasión; apoyando
cada gesto positivo de disminución de riesgos; definiendo metas
progresivas y cortas, además de brindar información sanitaria.

43
Se trata de visualizar las habilidades y cualidades: físicas, mentales,
espirituales, de calidad de vida (reconocimiento, autonomía, contacto
con los demás), consigo mismo y con otros, hablando sobre los Ideales
socio culturales, la red vincular, como desarrollar su creatividad,
mejorar la comunicación; además del manejo de ciertos conflictos
vinculares y programando actividades de diversión y al aire libre.

Se buscan metas en relación a los consumos de bebidas alcohólicas


y/u otras sustancias psicoactivas, en relación con los días, cantidad,
horarios, las ingestas de comida, la velocidad, que cosas o situaciones
hacen que no consuma.

Además, se puede indagar en relación con otros temas, como retomar


acciones postergadas, reencuentros, renovación de vínculos, inicio de
perfeccionamientos, autocuidados, alimentación, higiene y descanso.

Se busca consensuar cuáles son las situaciones de riesgo, como


ser: las ansiedades, momentos negativos, que diversión estimula
las ganas de consumir, que lugares, horarios o personas provocan
la necesidad de consumir.

7. Examen clínico general

Se recomienda lograr que la persona afectada pueda realizarlo


en la red sanitaria local, con pruebas de laboratorio que incluyan
hepatograma.

Esto implica que haya una evaluación sobre el aspecto general, el


estado mental, los signos vitales, el peso y altura, postura, marcha y
piel, si es adolescente o joven evaluar qué tipo de crecimiento tiene
en relación a la altura y peso, cómo viene la persona a la consulta
en relación a su aspecto y vestimenta, cómo es su tono de voz y si
es coherente en sus expresiones, o generalizado o confuso durante
la conversación.

44
Evaluar también cómo presenta su cabeza, cuello, tórax, abdomen,
aparato genitourinario, sus extremidades; si hay dolores, que
temperatura y pulso tiene, cómo son sus tonos musculares y
movimientos.

8. Tratamiento psicofarmacológico

En cuanto a los trastornos relacionados con las bebidas alcohólicas, es


importante aclarar que en muchos casos es aconsejable acompañar
las estrategias sociales y psicológicas con las farmacológicas.

Estas han adquirido una mayor relevancia en los últimos años en


un intento de prevenir recaídas y aumentar la calidad de vida de
las personas. Todos los medicamentos requieren ser recetados
y controlados por médicos/as psiquiatras y tener familiares o
referentes cercanos que acompañen el suministro.

9. Familia y entornos afectivos

Para el equipo de trabajo del dispositivo, es de suma importancia


contar con personas cercanas que se sumen al acompañamiento y
sostén de la persona que consume. Esto implica brindar espacios
para el manejo de las responsabilidades, la resolución de conflictos,
la participación en otras instituciones y organizaciones locales.

Además es necesario trabajar la coherencia entre el decir y el


accionar, con la posibilidad de poner límites sin romper el vínculo.

Para aquellas personas que presenten dependencia frente al


consumo de alcohol y padecen complicaciones severas con evidencia
de comorbilidad física o psiquiátrica grave se requerirá interconsulta
con los Servicios de Salud Mental más cercanos para diagramar en
conjunto estrategias de intervención y acompañamiento.

45
10. Estabilización

En este apartado, presentamos algunas medidas básicas dirigidas


a llevar a la persona intoxicada con bebidas alcohólicas hacia cierto
estado de equilibrio homeostático (es decir, lo vinculado con su
temperatura, respiración, presión):

En muchos dispositivos llegan personas que están intoxicadas, en


general con bebidas alcohólicas, o familiares que nos piden ayuda
para acompañar a la persona intoxicada..

Se sugiere:

• Ponerse en contacto con el servicio de emergencia sanitaria.

• Siempre acompañar a la persona, no dejarla sola.

• Brindar hidratación constante, en lo posible, agua y no café u


otras infusiones.

• Mantener la temperatura corporal normal (abrigo o enfriamiento).

• Mantener la sonoridad y luminosidad del espacio en equilibrio, es


decir, que la persona no se encuentre sobreestimulada por el
ambiente.

• Vigilar la posibilidad de regurgitación por el riesgo de broncoaspiración,


para esto, hay que colocar a la persona de costado.

• No provocar vómitos.

46
Reflexiones finales

El desarrollo de estrategias de prevención y cuidado, en el marco


de las políticas públicas, implica una práctica sistemática, requiere
priorizar el estar presente, y no sólo llegar antes. Desde el Estado,
nuestro eje central es el acompañamiento y el cuidado de las
personas, desde todos los niveles y junto a la comunidad organizada,
con las instituciones, ongs, organizaciones sociales, cultos, clubes
deportivos y comercios, para poder juntos interrogarnos sobre
cómo queremos vivir, interpelar las prácticas y representaciones
sobre los consumos y en especial, el de bebidas alcohólicas.

Es fundamental que, desde todos los ámbitos, se impulsen espacios


de sensibilización y capacitación, con el fin de fortalecer las redes
locales en la conceptualización y el desarrollo de estrategias preventivas
y de cuidados. Así mismo, entendemos como central la participación
en mesas locales, que nos permitan avanzar sobre temas como la
desnaturalización de los consumos y la construcción de consensos
para la acción.

Se resalta la importancia y disposición de acompañar a la persona


afectada por la problemática y su entorno afectivo, orientando nuestra
intervención siempre situada y contextualizada en un tiempo y lugar
concreto. Es necesario comprender cómo viven y cómo desean vivir
todas las personas, en diálogo con sus redes afectivas y en todo el
territorio.

Las políticas de cuidados deben estar atravesadas por la perspectiva


de género, ofreciendo alternativas posibles acordes a las situaciones
de las personas y su entorno, capaces de tener en cuenta las
condiciones particulares.

47
Para acompañar mejor a las personas es esencial conocer nuestros
límites y saber cuándo derivar de forma adecuada, para lo cual, es
importante conocer todos los recursos de atención: legales, sociales,
médicos, psiquiátricos y psicológicos, culturales, a disposición de las
personas en nuestra comunidad. Derivar (continuidad de cuidados)
significa reconocer que hay temas específicos que precisan del
abordaje de otros actores institucionales. Nuestra modalidad de
trabajo debe ser continua en el tiempo y compartida con nuestra
red, para llegar mejor con un abordaje integral a todas las personas.

Todas las estrategias presentadas en esta guía constituyen


propuestas, ideas, herramientas concretas que deben ser adecuadas
a la realidad de cada espacio socio sanitario y trabajadas en función
del proceso que se realiza en el acompañamiento de cada persona.

48
Bibliografía

Alcohol y Salud Pública en las Américas - OPS - página 16. 2007


https://www.who.int/substance_abuse/publications/alcohol_
public_health_americas_spanish.pdf

El alcohol: un producto de consumo no ordinario - OPS - 2010


https://iris.paho.org/handle/10665.2/2836

Uso nocivo de alcohol, página 47, Programa de Equipos comunitarios


- Msal - 2011 http://iah.salud.gob.ar/doc/Documento181.pdf

Alcohol y atención primaria de la salud: Informaciones clínicas


básicas para la identificación y el manejo de riesgos y problemas
- OPS- 2008 https://www.who.int/substance_abuse/publications/
alcohol_atencion_primaria.pdf

Manuales de autoayuda https://www.who.int/substance_abuse/


activities/assist_selfhelp_spanish.pdf
http://www.cop.es/colegiados/gr02556/objetivolibertad2.htm
https://vivirsinbeber.com/
https://aa.org.ar/

Bibliografía complementaria

Glosario de términos de alcohol y drogas - OMS - 1994


https://www.who.int/substance_abuse/terminology/lexicon_
alcohol_drugs_spanish.pdf

Glosario de términos en reducción de la demanda de drogas -


COPOLAD - http://sisco.copolad.eu/web/uploads/documentos/
COPOL AD_I_Glosario_de_terminos_en_reduccion_de_la_
demanda_de_drogas.pdf

49
Prevención de alcohol - Sedronar
https://www.argentina.gob.ar/jefatura/sedronar/prevencion-y-
cuidado/consumo-de-alcohol

Prevención de alcohol - Msal.


https://www.argentina.gob.ar/salud/mental-y-adicciones/alcohol

Lineamientos para la atención del consumo episódico excesivo de


alcohol en adolescentes - Msal - 2012
http://www.ms.gba.gov.ar/sitios/tocoginecologia/files/2014/02/
L i n e a m i e n t o s - p a r a - l a -a t e n c i % C 3 % B 3 n - d e l - C o n s u m o -
epis%C3%B3dico-excesivo-de-alcohol-en-adolescentes.pdf

Atención Primaria de Calidad, Uso y abuso de alcohol - Dr Francisco


de la Torre. 2001.
h t t p s : // w w w. m s c b s .g o b.e s /a l c o h o l J ove n e s /d o c s /
guiaBPCusoabusoAlcohol07.pdf

Alcoholismo Guia clinica - Serecigni Josep - 2008


https://socidrogalcohol.org/wp-content/Pdf/publicaciones/
manuales-guias/guia-clnica-alcohol-segunda-edicion-2008.pdf

Lineamientos Normativos para la Atención Integral de la Población


frente al Consumo Excesivo de Alcohol y otras Sustancias
Psicoactivas. Msal - 2010
https://www.srmcursos.com/archivos/arch_5cab5bd71b008.pdf

50
51

También podría gustarte