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La Historia es el estudio de todo lo que los seres humanos hicieron en el pasado. Durante
mucho tiempo el alcance de la Historia se limitaba a las grandes batallas, personajes
importantes, etc.
Con el correr del tiempo, los historiadores adoptaron nuevas formas de conocer la Historia.
Se incorporaron estudios sobre la economía, artes, antropología, sociología, entre otros
aspectos de la vida humana, con el fin de entender por qué los hombres hicieron lo que
hicieron; es decir, comenzaron a prestar cada vez más atención a las diferentes
manifestaciones culturales del pasado.
Por otra parte, entendieron que era indispensable trabajar en equipo con otros
profesionales. De ese modo, la Historia incorporó nuevas teorías y prácticas de otras
disciplinas. Así surgieron las Ciencias Sociales, que son las ciencias que tienen por objetivo
el estudio de la realidad.
ACTIVIDAD:
2. De sus padres deberán investigar la historia familiar, que tendrán que escribir en sus
carpetas, para comprender sus orígenes.
Objeto de estudio
La historia se dedica a analizar las sociedades humanas en el pasado. Para ello, es
indispensable utilizar herramientas conceptuales que permitan medir el tiempo y formas
de establecer el tiempo que es objeto del análisis. Pero la historia se dedica también a
estudiar y explicar los cambios que se producen a través del tiempo y, para ello, es
necesario analizar las diferentes razones o causas que provocan esos cambios.
Acontecimientos y procesos
La historia estudia acontecimientos y procesos. Un acontecimiento es un hecho puntual,
que ocurrió en un lapso corto de tiempo. Un proceso es un conjunto de acontecimientos
relacionados entre sí que ocurren durante un período.
ACTIVIDAD:
Tipos de fuentes
Actualmente, las fuentes históricas son muy variadas y pueden ser interpretadas de
muchas maneras. Algunas son arqueológicas (fragmentos de jarrones, huesos, puntas de
flechas); otras abordan al ser humano vivo, ya sea a través de trabajos antropomórficos o
de entrevistas orales; otras son libros, películas, folletos políticos, análisis psicológicos,
cuadros, esculturas, fotografías, invenciones científicas y hasta campos y ciudades. A todas
ellas se las conoce como fuentes primarias, ya que muestran un fragmento de Historia de
manera directa.
El historiador pone en juego, además, todo lo aprendido a través de los libros que otros
escribieron sobre el tema que se investiga. Ese material constituye otro tipo de fuente: las
fuentes secundarias.
ACTIVIDAD:
ACTIVIDAD:
1. Clasificar las siguientes imágenes teniendo en cuenta los tipos de fuentes: primarias y
secundarias, según corresponda.
a.C 0 d.C
ACTIVIDAD:
1. Realicen una línea de tiempo sobre. Para eso, sigan estos pasos:
Establezcan el período que comprenderá y calculen la longitud que tendrá la
línea. Para eso, dividan la longitud de la línea por el número de años que
quieran representar. Por ejemplo, si la línea mide 24 cm y quieren representar
12 años, deberán dividir 24 por 12. El resultado de esa cuenta, en este caso 2
cm, equivale a un año.
En el extremo izquierdo de la línea ubiquen la fecha en que nacieron y en el
derecho, alguna fecha reciente en la que haya sucedido algún acontecimiento
importante de sus vidas.
Completen el cuadro con cinco hechos de sus vidas que consideren
importantes y con el año en que sucedió cada uno de ellos.
AÑO HECHO
Vuelquen la información del cuadro en la línea. Tengan en cuenta que los hechos se
marcan con una rayita vertical sobre la línea.
Periodizaciones
Para ordenar el estudio histórico se establecen periodizaciones, es decir, señalan fechas y
sucesos que consideran representativos de grandes cambios, para distinguir diferentes
épocas.
Aunque la Historia no es una sucesión de hechos a través del tiempo, las líneas de tiempo
permiten organizar la información y situar los datos disponibles en tiempo y espacio en
forma diacrónica, es decir, en una sucesión de hechos a través del tiempo. Otra manera de
organizar la información histórica, es utilizar la sincronía, con el fin de observar qué sucedía
en un mismo momento en diferentes espacios.
La forma más tradicional de periodizar la Historia es a través de la marcación de grandes
épocas: Prehistoria, Historia Antigua, Historia Medieval, Historia Moderna e Historia
Contemporánea.
Hablar de estas edades de la historia es la forma elegida a través de un consenso para
nombrar diferentes períodos, ya que resultaba práctico dar un nombre a épocas que
atravesaron siglos enteros e involucraron a millones de personas.
ACTIVIDAD:
Proceso de hominización
Se denomina proceso de hominización al proceso a través el cual la especie humana se
formó y cambió hasta tener las características actuales. Comprende tanto cambios
biológicos, es decir, modificaciones físicas que gradualmente distinguieron a la especie
humana hasta llegar a la forma biológica actual.
De acuerdo con las investigaciones de los especialistas, la especie humana surgió a partir de
la evolución de una rama particular de los primates, llamado homínidos. El proceso de
hominización comenzó, hace unos cuatro millones de años, cuando los cambios climáticos
provocaron la reducción de las selvas y los bosques, en el territorio del actual continente
africano, al tiempo que se desarrollaron bosques más abiertos y sábanas, que son grandes
extensiones llanas sin árboles. Así, las condiciones naturales fueron cada vez menos
beneficiosas para los primates.
Los primitivos homínidos que habitaban esas sábanas sufrieron paulatinos cambios
biológicos que les permitieron adaptarse a las nuevas condiciones ecológicas. Primero,
asumieron una posición erguida (bipedismo), que les posibilitaba una mayor visibilidad
entre los pastizales altos y que liberaba sus patas delanteras, que se transformaron en
manos para manejar objetos. Así surgieron los primeros homínidos, que se diferenciaron
del resto de los primates porque, hasta entonces, ninguno había desarrollado una
anatomía que le permitiera andar erguido de manera constante
ACTIVIDAD:
HOMO HABILIS
HOMO ERECTUS
HOMO SAPIENS
5. A partir de la información desarrollada en clases anteriores, completar el siguiente
mapa conceptual con los conceptos, conectores y definiciones que faltan.
Las Edades arqueológicas
Para estudiar el pasado, los arqueólogos dividen la etapa ágrafa en distintas edades
arqueológicas, según los materiales que los seres humanos utilizaron para construir sus
herramientas. Esto es así porque los avances en la elaboración de los distintos
instrumentos fueron acompañados por cambios en la forma de vida.
En esta etapa histórica de la Humanidad, los arqueólogos distinguen entre la Edad de
Piedra y la Edad de los Metales.
La Edad de Piedra comenzó hace 2.000.000 de años, y se caracterizó por la aparición de
técnicas para elaborar útiles de caza y herramientas de piedra. Se divide en Paleolítico,
Mesolítico y Neolítico, según la técnica usada para trabajar la piedra. El Paleolítico se
caracteriza por el nomadismo itinerante del ser humano en busca de alimento y agua para
su supervivencia. En este período, los primero humanos vivían en cuevas. El Mesolítico
comenzó hace 10.000 años: el calentamiento de la Tierra por el final de la glaciación,
originó la desaparición de algunos grandes mamíferos y la adaptación de las herramientas
de caza a la nueva fauna. El Neolítico comenzó hace 9.000 años y se caracterizó por el uso
de la técnica de la piedra pulida, la aparición de los primeros poblados y el surgimiento de
la agricultura, la ganadería y la cerámica.
La Edad de los Metales empezó hace 7.800 años y se destacó por la utilización del metal en
la elaboración de herramientas. Así surgieron el arado tirado por animales, el carro y la
rueda. El cobre fue el primer metal utilizado por el hombre, ya que se encontraba en
estado natural en las primeras regiones pobladas, y reemplazó al uso de la piedra. La
aleación del cobre con el estaño en hornos de carbón vegetal, conocida como bronce,
reemplazó al cobre y permitió obtener herramientas más sólidas. Posteriormente, gracias a
su mayor dureza y disponibilidad, el hierro reemplazó al bronce.
ACTIVIDADES:
1. Relacionen los conceptos con las oraciones, escribiendo en los casilleros la letra que
corresponda.
a. Evolución
b. Eras geológicas
c. Prehistoria
d. Eras arqueológicas
e. Hominización
ACTIVIDAD:
ACTIVIDAD:
ACTIVIDAD:
ACTIVIDAD:
ACTIVIDAD:
PUEBLOS CAZADORES-RECOLECTORES
En el Paleolítico En la Actualidad
Obtención del
alimento
Organización de la
comunidad
División sexual del
trabajo
Tipos de
herramientas
Características de las
viviendas
El período Neolítico
Llamamos Neolítico al período que comienza hacia el año 9.000 a.C. y se extiende hasta el
4.000 a.C., durante el cual se produjeron grandes cambios en la forma de vida de los seres
humanos. Durante este período, el ser humano comenzó a dominar el medio que lo
rodeaba.
La primera actividad productiva fue la domesticación de plantas y animales. La
domesticación consistía en la cría de animales para su uso como alimento o como ayuda en
las tareas agrícolas y el cultivo de vegetales, que hasta el momento crecían en forma
silvestre. Para realizar estas tareas, los hombres y las mujeres debieron asentarse de
manera permanente en un territorio. Así, los grupos humanos iniciaron un modo de vida
sedentario y construyeron viviendas sólidas y espaciosas para albergar a una población que
crecía constantemente, gracias al aumento en la cantidad de alimentos.
La primera región donde se encontraron indicios de comunidades con estas características
fue la llamada Media Luna Fértil, en el suroeste de Asía. Esta zona se denomina así porque,
si la observamos en un mapa tiene forma de luna en cuarto creciente. Este territorio reunía
una serie de condiciones ambientales propicias para el desarrollo de las primeras
actividades productivas y formas de vida humanas: el cultivo y el pastoreo de ganado,
cambios en la organización del trabajo y sedentarización.
El surgimiento de la agricultura
Los primeros cultivos, por varias razones, fueron cereales. En primer lugar, se trata de
plantas que crecen en abundancia de manera silvestre, y su siembra, cuidado y recolección
es relativamente sencilla. En segundo lugar, los granos se pueden almacenar por un período
de tiempo mayor que otros alimentos, como frutas u hortalizas, que se pudren más
rápidamente. En tercer lugar, cereales de distintos tipos como el trigo y la cebada, pueden
intercalarse en su producción a lo largo del año, lo que permite una disponibilidad de
alimentos casi constante. Por último, los cereales son una importante fuente de proteínas e
hidratos de carbono. Una cantidad determinada de cereales cubre mejor las necesidades
alimentarias de las personas que la misma cantidad de frutas y hortalizas.
A principios del Neolítico, se cultivaba en forma muy diferente a como se hace en la
actualidad. Primero, se despojaba una parcela de tierra de los árboles y plantas silvestres
que hubiera en ella. Luego, se cultivaba y se cosechaba. Como después de varias siembras la
tierra perdía su fertilidad, se la dejaba descansar y se pasaba a cultivar en otro lugar. Cuando
sucedía lo mismo con la segunda parcela, se volvía a la primera, que ya había recuperado
sus nutrientes.
La domesticación de animales
Es difícil precisar cuando la humanidad comenzó a practicar la reproducción y cría de
animales para la alimentación como una actividad económica precisa. Los restos de
animales encontrados en campamentos y aldeas pueden corresponder a la caza y no son
indicios seguros de domesticación.
Los especialistas creen que los inicios de la ganadería pueden haber sido accidentales. Es
probable que esta actividad haya comenzado cuando los hombres empezaron a atraer a
animales medianos como ovejas o cabras, hacia los campamentos, donde seleccionaban,
entre los machos o los más viejos, a los que iban a matar para alimentarse, protegiendo a las
hembras y a los jóvenes para que se reprodujeran. Mas tarde, comenzaron a cuidar los
rebaños, poniéndolos a salvo de otros depredadores y promoviendo su reproducción. Es
posible que, en ese momento, además de la carne, comenzaran a aprovecharse la leche y las
pieles de los animales.
De nómades a sedentarios
La introducción de la agricultura y ganadería produjo que, lentamente, cambiaran los tipos
de asentamiento poblacionales. El cuidado constante de animales y plantas llevó a los
hombres del Neolítico a establecerse de manera permanente o semipermanente en un
mismo lugar, dando inicio así al sedentarismo. Con el tiempo, la ocupación permanente de
un espacio llevó a que aparecieran las aldeas.
Una aldea estaba formada por varias familias, cada una de las cuales tenía su propia
vivienda y su propia tierra agrícola y rebaños, que trabajaban individualmente, mientras que
cooperaban entre sí para algunos trabajos más complejos.
Estos asentamientos se ubicaron, por lo general, en lugares fértiles, con acceso a cursos de
agua y a bosques. La calidad de los suelos y la cercanía del agua eran fundamentales para el
desarrollo de la agricultura y la ganadería. Las reservas naturales de madera eran muy
importantes ya que este material se usaba para construir herramientas y viviendas, y como
combustible. La agricultura y la ganadería no desplazaron completamente la caza y la
recolección de frutos silvestres. Los hombres siguieron realizando prácticas depredadoras
en la pesca, la búsqueda de leña y la caza.
El poblamiento de América
El poblamiento de América es el proceso por el cual se diseminó el homo sapiens en el
continente americano. Se puede afirmar que no hubo población autóctona, sino que el
poblamiento fue el resultado de sucesivas migraciones.
En el continente americano, los períodos Paleolítico y Neolítico tuvieron características
similares al resto del mundo. El poblamiento americano siguió patrones y rutas similares a
las del poblamiento del resto del planeta. La agricultura americana, por otro lado, fue un
foco original que no tuvo relación con el proceso originado en el Cercano Oriente.
La región mesoamericana: es una región muy extensa que comprende los territorios del
centro y sur de México, Belice, Guatemala, El Salvador y parte de Honduras. Se trata de un
espacio que presenta una gran diversidad geográfica, climática, vegetal y animal, contando
dentro del área con zonas tropicales, templadas y desérticas.
Se cultivaron diferentes variedades de maíz, adaptadas a diferentes espacios geográficos; la
yuca, especialmente en el sur y el cacao. Una peculiaridad mesoamericana es que no
existían especies animales aptas para la ganadería. Las proteínas de carne que
complementaban la dieta vegetal se obtenían por medio de la caza de venados, patos y
serpientes, y de la recolección de tortugas, moluscos, insectos y gusanos.
La región andina: comprende los territorios del centro y sur de la Cordillera de los Andes y
se extiende a lo largo de los actuales países de Ecuador, el Perú, Bolivia, norte de Chile y
norte de la Argentina. Esta región también presenta una fuerte diversidad geográfica,
climática, vegetal y animal en sus diferentes zonas: la costa, la sierra y la selva.
Se desarrollaron culturas sedentarias que domesticaron plantas y animales de la región,
combinando su producción con la recolección de moluscos y peces en las zonas costeras, y
la explotación de madera en las zonas serranas. La variedad climática de la región, producto
de la altura, hizo que las aldeas agrícolas tuvieran la forma de asentamientos dispersos. Esto
significa que distintas familias, unidas por vínculos de parentesco, habitaban distintos
espacios climáticos y así conseguían proveerse para su supervivencia de elementos
producidos en los distintos espacios.
En la zona costera se producían ajíes, tomates, calabazas, frijoles y se abastecían de peces y
moluscos. En la zona de montaña, se cultivaban maíz, frijoles y coca (en la sierra) y papa y
quinoa (en la puna). Allí también se cuidaban rebaños de llamas y alpacas, utilizadas para el
transporte y la provisión de lanas, más que para alimento. En la zona de la selva, los cultivos
eran coca, algodón, yuca, maní y frutas.
En ambos espacios, los primeros pasos hacia la domesticación de plantas y animales datan
de hace siete mil años aproximadamente.
En la región andina es probable que la domesticación de animales haya sido anterior a la
agricultura, ya que allí la calidad del suelo y el clima son más adversos. Como es una zona
montañosa, la variación de temperatura entre el día y la noche es muy brusca; solo en los
pequeños valles es posible el cultivo de cereales. En la región mesoamericana, los primeros
indicios de agricultura se localizaron en la zona templada del valle de México.