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individuales
y grupales de
orientación
para el empleo
(itinerarios de
inserción)
PID_00231942
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© FUOC • PID_00231942 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Índice
Introducción............................................................................................... 5
Actividades.................................................................................................. 53
Bibliografía................................................................................................. 54
© FUOC • PID_00231942 5 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Introducción
Motivación:�Análisis�de�un�caso
PERLA es una pequeña entidad social sin ánimo de lucro, ubicada en Barce-
lona y destinada a ayudar a las personas adultas, mayores de 30 años, con
especiales dificultades sociales y económicas. Desde siempre, esta entidad ha
desarrollado programas de carácter asistencial y comunitario, pero a raíz de la
crisis económica y del aumento flagrante del índice de desempleo, que afecta
en especial a las personas mayores de 45 años, la entidad ha decidido abrir
una nueva línea de intervención especializada en la inserción sociolaboral de
personas en situación de desempleo y que tengan 45 años o más.
Para esto, cuenta con un equipo formado por tres profesionales: Eulalia (psico-
pedagoga), Rosalía (pedagoga) y Marc (psicólogo), y con financiación pública
de 60.000 € para desarrollar acciones de orientación para el empleo durante
un periodo de un año, prorrogable en función de los resultados.
Cuestiones�que�podremos�responder�con�el�estudio�de�este�apartado
• CG4: capacidad para generar y proponer nuevas ideas que respondan sa-
tisfactoriamente a las necesidades y demandas de las personas, grupos y/
u organizaciones.
Para abordar con profundidad el tema que nos ocupa, es preciso que distinga-
mos de antemano los conceptos de orientación profesional y orientación pa-
ra el empleo respectivamente, y comprobar la relación que entrañan –a pesar
de no ser el objetivo de este apartado el análisis de las múltiples definiciones
dadas a lo largo del tiempo.
Lo cierto es que la orientación profesional abarca ámbitos que van mucho más
allá de las etapas transitorias de desempleo-empleo, de mejora de trabajo, o
del tránsito académico al mundo laboral. De hecho, se da cuando todavía no
ha surgido el problema de la necesidad inmediata o a corto plazo de inserción
o reinserción laboral/profesional y su carácter es procesual de un desarrollo
profesional. Sin embargo, la orientación para el empleo se centra precisamente
en estas etapas de transición, cuando la necesidad de «encontrar» de manera
más o menos urgente una ocupación o un empleo se hace evidente en la vida
de las personas.
Por otra parte, los destinatarios de la orientación para el empleo son personas
con necesidad de inserción laboral o profesional y con edad para trabajar, a
diferencia de la orientación profesional, que se destina a cualquier edad.
Ejemplo
Un ejemplo de servicio integral de orientación para el empleo, que incluye tanto acciones
para la búsqueda de empleo como acciones de orientación profesional, es el Servicio
Vasco de Empleo Lanbide, que ofrece los centros de orientación y los centros de empleo.
© FUOC • PID_00231942 9 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Estos cambios han repercutido en los contenidos del trabajo. Así pues, aparte
de los sectores tradicionales de actividad económica, como el primario –cen-
trado en la transformación de recursos naturales en productos primarios, por
ejemplo la agricultura, la ganadería o la pesca–, el secundario o industrial y
el sector terciario o de servicios, han ido desarrollándose otros sectores, como
el cuaternario o de la información (denominado el cuarto poder); e incluso
el sector quinario, relativo a los servicios sin ánimo de lucro y relacionados
con la cultura, la educación, el arte y el entretenimiento, transformando pro-
fesiones, provocando la desaparición de puestos de trabajo tradicionales, pero
también dando lugar a la emergencia de nuevas profesiones y ocupaciones, de
nuevos perfiles profesionales y nuevos retos.
«Los problemas sociales y de empleo siguen siendo agudos en la mayor parte de los paí-
ses emergentes y países en desarrollo. Más de la mitad de los trabajadores del mundo en
desarrollo, cerca de 1.500 millones de personas, se encuentran en situación laboral vul-
nerable. Estos trabajadores tienen menos posibilidades que los trabajadores asalariados de
acceder a modalidades de trabajo formales, contar con protección social, como sistemas
de pensiones o salud, o tener ingresos regulares. Tienden a encontrarse atrapados en un
círculo vicioso de ocupaciones de baja productividad, malas remuneraciones y capacidad
limitada para invertir en la salud y la educación de sus familias, lo que a su vez perjudica
el desarrollo general y las perspectivas de crecimiento, no solo de ellos mismos sino de las
generaciones futuras. En Asia meridional y el África subsahariana, por ejemplo, de cada
cuatro trabajadores, más de tres se encuentran en modalidades de empleo vulnerable,
estando las mujeres especialmente afectadas por esta situación en comparación con los
hombres.» (OIT, 2014, p. 4)
Por este motivo, las políticas de empleo destinan recursos específicos de orien-
tación para el empleo a aquellos colectivos que presentan mayor vulnerabili-
dad, mayor riesgo de exclusión sociolaboral.
Hoy día, ante la situación de crisis profunda en la que se encuentran los países
europeos, fundamentalmente podríamos pensar que es difícil diferenciar qué
colectivos de personas desempleadas tienen mayores dificultades de inserción
laboral, pues se comprueba que estas dificultades también las padecen las per-
sonas con niveles altos de cualificación, por ejemplo. Sin embargo, a pesar de
las dificultades generalizadas para encontrar empleo, las estadísticas demues-
tran que cuanto mayor es el nivel de formación, más posibilidades de inserción
laboral tiene la persona, aunque no sea para ocupar, precisamente, el puesto
© FUOC • PID_00231942 11 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Tabla 1
Así pues, debemos admitir que entre la misma población desempleada, en-
contramos colectivos que presentan mayores dificultades de acceso y mante-
nimiento en el mercado laboral, que merecen especial atención y cabe tener
muy en cuenta en el ámbito de la orientación para el empleo.
–que se han visto especialmente afectados por la crisis–, personas con cuali-
ficaciones bajas o básicas y personas desempleadas en riesgo de exclusión o
pobreza (personas con discapacidad, inmigrantes y minorías étnicas).
Así pues, observamos que variables como edad, sexo, nivel de formación y de
cualificación; periodo de duración en estado de desempleo; nivel de riesgo de
exclusión social y de pobreza u origen; o las distintas etapas de transición al
empleo en las que se encuentran los demandantes de empleo (por ejemplo,
etapa de formación-trabajo, de reincorporación al trabajo después de largos
periodos de inactividad laboral o de cambio de empleo en situación de activi-
dad laboral) son las que dan lugar a la diferente tipología de grupos de desti-
natarios de los servicios y programas de orientación para el empleo.
Ejemplo
• Mujeres.
• Personas discapacitadas.
• La intervención directa.
• La intervención indirecta.
• La intervención a través de medios tecnológicos.
• 1. Identificación de un problema.
• 2. Diseño de un plan de acción.
• 3. Ejecución del plan de acción y evaluación del mismo.
• 4. Indicaciones y sugerencias al consultante para afrontar la función de
consulta.
3)�La�intervención�a�través�de�medios�tecnológicos�o�modelo�tecnológico.
Este tipo de modelo parte de la base de utilizar en el proceso orientador un
medio tecnológico que actúa entre el orientador y la persona orientada, lo cual
permite proyectar la acción orientadora en un escenario que va mucho más
allá del contexto donde se ubica, facilitando el intercambio de información
en todos los agentes participantes del proceso orientador, dotándoles de au-
tonomía. Este modelo solo tiene sentido si se vincula a uno o más modelos
de intervención, pero no debemos confundirlo reduciéndolo a la mera utiliza-
© FUOC • PID_00231942 18 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
• 7. Implementación de la intervención.
Dado que la realidad sobre la que se tiene que intervenir es muy variable, múl-
tiple y heterogénea, es muy frecuente el uso de la combinación de modelos
básicos en un modelo mixto que se ajuste mejor a las necesidades de un con-
texto determinado, y es poco frecuente encontrar un modelo básico utiliza-
do de manera exclusiva. Los modelos mixtos pueden recibir denominaciones
concretas, por ejemplo el modelo psicopedagógico, el modelo sistémico o el
modelo holístico, entre otros.
© FUOC • PID_00231942 19 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
«Una palabra que abarca más cosas que la más moderna “personalidad”, un término re-
ferido a deseos y sentimientos que pueden existir dentro de nosotros sin que nadie más lo
sepa. El carácter se centra en particular en el aspecto duradero, “a largo plazo”, de nues-
tra experiencia emocional. El carácter se expresa por la lealtad y el compromiso mutuo,
bien a través de la búsqueda de objetivos a largo plazo, bien por la práctica de postergar
la gratificación en función de un objetivo futuro. De la confusión de sentimientos que
todos vivimos en un momento cualquiera, intentamos salvar y sostener algunos; estos
sentimientos sostenibles serán los que sirvan nuestro carácter. El carácter se relaciona
con los rasgos personales que valoramos en nosotros mismos y por los que queremos ser
valorados.» (R. Sennett, 1998, p. 10)
La llegada del capitalismo flexible ha dado lugar a una nueva economía con
valores cambiantes, caracterizados generalmente por la inmediatez, el cambio
continuo, comportamientos a corto plazo, débiles grados de lealtad y de com-
promiso en el tiempo, siendo más útiles las formas de relación fugaces que
unos vínculos sólidos creados a largo plazo y que ya no son tan convincentes.
Ante esta situación, aparecen algunos interrogantes, tal y como se cuestiona
R. Sennett:
Ayer, las cualidades de un buen trabajo eran las cualidades de un buen «ca-
rácter»; hoy día, no son coincidentes. La vida profesional ya no sirve como
modelo exclusivo de comportamiento ético en nuestra sociedad.
– Las modalidades de empleo que se van imponiendo distan mucho de satisfacer las
aspiraciones fundamentales de la persona; son vías incompletas de acceso a la ciudadanía.
sino como situaciones que forman parte del itinerario vital y profesional de
toda persona, y como tales, deberían considerarse como etapas que también
contribuyan a fomentar el desarrollo personal y profesional.
No obstante, para que esto sea posible, ha sido necesario contar ciertos recur-
sos, y sus consiguientes medidas�de�apoyo�que�estén�al�alcance�de�todos,
que sean útiles y eficaces para abordar las situaciones de desempleo cuando
sea necesario.
Las políticas activas de empleo se centran en hacer frente a las posibles causas
del desempleo. Cabe reconocer que ha sido en los países europeos donde se
han desarrollado e implementado con más intensidad desde los años noventa,
pero también se aplican en distintos países, como por ejemplo Estados Unidos,
Canadá o Australia.
Los factores y las variables que explican las causas del desempleo han ido evo-
lucionando con el tiempo, según los distintos escenarios socioeconómicos, y
a su lado, las políticas activas de empleo.
Para esto, nos centraremos en describir cómo se implantaron las políticas ac-
tivas de ocupación en España hasta nuestros tiempos.
En España se dio una primera época, muy temprana, la de los años ochenta,
en la que se atribuía como únicas causas del desempleo la falta de formación
del desempleado –a causa de la evolución del mercado de trabajo– y su actitud
(«quien pudiendo trabajar no trabaja, es porque no quiere»), contemplando
a la persona como única protagonista responsable de la situación que tenía
que resolver por sí misma, sin tener en cuenta otros factores, ni el contexto
cultural, ni los problemas sociales existentes.
© FUOC • PID_00231942 23 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Por otra parte, a principios de los años noventa se constató que la formación,
pese a ser muy importante, no era la vía suficiente que garantizaba la inser-
ción. En todo caso, se trataba de una alternativa válida para la mejora de la
empleabilidad, pero de ningún modo una vía exclusiva, tal y como se había
considerado años atrás. En esta etapa, se evidenció que las causas del desem-
pleo no solo eran la falta de formación de las personas y su movilización ante
los procesos de búsqueda de empleo, sino también la necesidad de desarrollar
en las mismas unas determinadas habilidades y actitudes favorecedoras de la
inserción laboral.
res, jóvenes, personas discapacitadas, etc.), que convivían con los servicios de
orientación de tipo «generalista» –como los servicios públicos de empleo o
los servicios locales de ocupación– destinados a la población desempleada o
empleada con necesidad de mejorar de empleo. Había distintos recursos, pero
se constataba una falta de racionalización en el uso de estos, un déficit en la
articulación de los itinerarios de inserción de las personas desempleadas y la
inexistencia de un itinerario de empresa, a la que hasta entonces no se había
considerado como destinataria de las políticas activas de empleo.
Podéis ver el documento completo: BOE 191 de 11 de agosto del 2015. Resolución del
Ministerio de Empleo y Seguridad Social, de 29 de julio de 2015, de la Secretaría de Estado
de Empleo, por la que se aprueba el Plan anual de política de empleo para el 2015, según
lo establecido en el artículo 4 ter de la Ley 56/2003, de 16 de diciembre, de Empleo.
des, conocimientos útiles para relacionarse tanto con el entorno como consi-
go misma y para desenvolverse en la vida. Así pues, el itinerario tiene, per se,
un carácter pedagógico. También el itinerario supone movimiento y cambio,
ya que permite a la persona resolver dificultades que van surgiendo durante
el proceso, aportando el desarrollo y la mejora de competencias, mejora del
autoconcepto (percepción que tiene la persona de sí misma) y de la autoestima
(valoración de la propia persona).
Podéis ver el texto completo en la Ley 13/2015, de 9 de julio, de ordenación del sistema de
empleo y del servicio público de empleo de Cataluña (BOE, 9141, 14 de agosto del 2015).
Fundación SURT
i)�Servicios�comunitarios�y�actividades�culturales�y�de�ocio. facilitadores de
la inclusión social y la participación en la vida colectiva. Este tipo de activi-
dades contribuye al desarrollo de competencias y del grado de empleabilidad
de las personas.
Una contribución importante para tener en cuenta en la temática de los iti- Lectura complementaria
nerarios de inserción y la calidad del proceso de orientación ha sido la de la
Se sugiere consultar el proce-
Fundación Pere Tarrés (2007), que mediante el proyecto InserQual aportó un so circular de itinerario de in-
cambio de forma del proceso de acompañamiento en la inserción laboral, de- serción que propone la Fun-
dación Pere Tarrés en Inser-
jándolo de considerar lineal y ordenado, tal y como se concebía clásicamente, Qual, así como el proyecto
completo.
y sustituyéndolo por un proceso circular, abierto y flexible, más adecuado a
las necesidades y realidad de cada persona. Representan el itinerario en forma
de rotonda, donde solo mantienen un orden establecido la fase de acogida
y de finalización del proceso. La persona tiene la posibilidad de pasar única-
mente por aquellas fases que se consideren necesarias del proceso y según el
orden que le sea más favorable. Coincidimos plenamente en esta concepción
de modelo de itinerario.
«El diagnóstico para la inserción tiene como objetivo ayudar y asistir a las personas para
poder hacer frente a las exigencias sociales y profesionales que plantea el acceso al mer-
cado de trabajo, desde los comienzos en la preparación para incorporarse a la vida activa,
pasando por la exploración del mundo profesional, la inserción y adaptación al primer
empleo, los reajustes que se ocasionan en la vida profesional –despido, abandono, nueva
búsqueda de trabajo–, y los reajustes en los roles vitales-profesionales motivados bien por
los propios roles, bien por situaciones laborales.
Sin embargo, ¿cuáles son las variables que hacen posible que las personas ten-
gan mayores posibilidades de desarrollarse profesionalmente y de emplearse,
que deberíamos medir en un proceso de orientación para el empleo?
Merece especial atención describir algunos de estos factores, dado el tema que
nos ocupa.
© FUOC • PID_00231942 35 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Por otro lado, hay unos constructos básicos de carácter personal que en mayor
o menor grado sí pueden ser modificados, y que están relacionados con la
empleabilidad.
1)�La�satisfacción�laboral,�los�valores�y�el�significado�del�trabajo
2)�Las�expectativas�de�control
© FUOC • PID_00231942 36 Acciones individuales y grupales de orientación para el empleo...
Hacen referencia al grado de percepción del control que la persona cree tener
sobre su entorno. El locus de control interno en búsqueda de empleo hace re-
ferencia a aquellas creencias que sustentan la idea de que los resultados ob-
tenidos en las actividades de búsqueda de empleo están directamente relacio-
nados con la conducta propia desarrollada en esta dirección. Cuanto mayor
sea el esfuerzo que haga la persona para encontrar empleo, más probabilida-
des tendrá de encontrarlo. En cambio, el locus de control externo centra las
creencias en la influencia que tienen los factores ajenos al control del sujeto
en la consecución de un empleo (se parte de la idea de considerar que el hecho
de encontrar trabajo depende de la decisión de terceras personas o del azar,
factores sobre los cuales la persona no tiene influencia).
3)�La�disponibilidad�para�el�empleo
4)�El�estado�de�decisión�y/o�indecisión�profesional
5)�La�motivación�hacia�el�trabajo,�los�niveles�de�aspiraciones�o�ambición
profesional
6)�Los�intereses�profesionales
Los intereses podrían definirse como aquello que agrada, preocupa o mueve la
curiosidad. Se hacen patentes por las actividades que la persona lleva a cabo,
por las cosas que se valoran, por los temas sobre los que discute o por sus
pautas conductuales.
7)�Las�capacidades
8)�La�madurez�vocacional,�objetivo�y�proyecto�profesional
9)�La�autoestima
Juicio evaluativo que un sujeto emite sobre las percepciones que tiene sobre sí
mismo. Encontramos varios instrumentos de medición de la autoestima, como
la escala de autoestima de Rosenberg (1965) o el cuestionario de autoconcepto
Forma 5 (AF-5) de F. García y G. Musitu (2014).
10)�La�autoeficacia�profesional
11)�La�personalidad
12)�La�cualificación�profesional
• Competencias técnico-profesionales.
• Competencias instrumentales básicas.
• Competencias transversales.
13)�Competencias�de�inserción�laboral
1)�Tests�de�capacidades,�de�aptitudes,�de�inteligencia�y�de�rendimiento
Las posibles aplicaciones de los datos obtenidos en las pruebas de aptitud men-
tal en orientación profesional son:
2)�Los�inventarios�de�intereses�profesionales
Super (1964) aportó una clasificación de los intereses que aún hoy día está
vigente. Los clasificó según el tipo de información que se reciba de los mismos:
Se pueden usar los inventarios de intereses incluidos en programas com- El test de intereses
prehensivos de planificación profesional o proyectos profesionales. Estos mo- profesionales
autoaplicado
dos de intervención personalizada incluyen pruebas de aptitudes, de valores,
de madurez vocacional o de personalidad. Podéis ver, por ejemplo, una
interesante y práctica herra-
mienta para la orientación pro-
fesional: El test de intereses
Algunos inventarios de intereses son: profesionales autoaplicado,
que ofrece Barcelona Activa,
organización ejecutora de las
a)�Cuestionario de intereses profesionales (CIPSA) (1985), de J. L. Fernández y F. políticas de promoción econó-
mica del Ayuntamiento de Bar-
Andrade, TEA. celona.
• ACT Career Planning Program (CPP) (1980), con cuatro partes: inventario
de intereses, inventario de experiencias, autoevaluación de las aptitudes,
varios tests de aptitudes. Publica American College Testing Program (ACT).
3)�La�estimación�de�la�personalidad�y�del�concepto�de�sí�mismo
• Inventarios de valores.
• Inventarios de autoestima y autoconcepto.
• Inventarios de ocio y bienestar.
• Otros inventarios de personalidad.
4)�Medidas�de�decisión/indecisión,�información�profesional,�actitudes�an-
te�el�trabajo,�conducta�exploratoria,�educación�para�la�carrera,�etc.
Esta metodología es muy útil para el colectivo de personas adultas y contempla Web de interés
acciones individuales y en grupo. Su estudio es realmente imprescindible para
Para más información sobre
la orientación para el empleo. La extensión de este módulo no nos permite balance de competencias, po-
desarrollarla a fondo. Por esta razón, recomendamos consultar las fuentes bi- déis consultar la Federación
Europea de Centros de Balan-
bliográficas recomendadas. ce y Orientación Profesional.
El orientador debe ayudar a las personas a descubrir los distintos canales para
la búsqueda de empleo, y entrenarlas para utilizarlos. Esto incluye la elabora-
ción de currículo y todas sus dimensiones; conocer y utilizar mecanismos de
presentación profesional y marketing personal, así como los procesos de se-
lección y las entrevistas de trabajo; conocer y saber utilizar los intermediarios
del mercado laboral; estimular el uso de las redes de contactos, ya sea por la
vía tradicional o las que ofrecen las nuevas tecnologías de la información y de
la comunicación; la captación de ofertas de trabajo; y la aplicación de técnicas
de planificación y evaluación del propio proceso de búsqueda de empleo.
• El contexto.
• La entrada (input).
• El proceso.
• El producto.
Diputación de Barcelona
Actividades
1. ¿Qué influencia tiene hoy día la Unión Europea en la orientación para el empleo?
Competencias implicadas:
3. Indicad tres situaciones en las que se requiera intervenir mediante el modelo de servicios,
de programas y de consulta, respectivamente.
Competencias implicadas:
• CG4. Capacidad para generar nuevas ideas que respondan satisfactoriamente a las nece-
sidades y demandas de las personas, grupos y/u organizaciones.
• CE6. Diseñar, desarrollar y evaluar proyectos orientados a la intervención en el ámbito
laboral, con objetivos plausibles que atiendan a las demandas de personas, grupos y or-
ganizaciones.
4. Identificad en la red y valorad las características de una política activa de empleo centrada
en el ámbito de la orientación.
Competencias implicadas:
5. Marge Simpson (personaje ficticio de la serie de televisión de dibujos animados Los Sim-
pson) ha decidido buscar empleo y ha solicitado hora en el Servicio de Empleo. Analizad el
grado de empleabilidad de Marge y proponed su posible itinerario de inserción.
Competencias implicadas:
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