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Para uso exclusivamente didáctico.

·'
Para uso exclusivamente didáctico.

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El so11ido

¿Qué es el sonido?

Todos t;enemos una idea de lo que se


llama sonido, puesto que a menudo ha-
blamos del "sonido de un piano", del
••sonido de una campana", etc. El sonido
es un fenómeno fisico percibido por el
oído. Pero, ¿cómo se produce? ¿Qué lo
produce? ¿Cómo se propaga?
Por lo pronto, si escuchamos un so-
nido pensamos que debe haber algo que
lo produce. Ese aJgo es relativamente
El sonido es pmducido por un movimie11to vi- fácil de encontrar. Si oímos el sonido de
bmtorio. una campana, sabemos que él proviene
de un golpe dado a la misma. Ese golpe
hace vibrar la masa metálica, cosa que
podemos comprobar si acercamos un
dedo y la tocamos con suavidad: senti-
mos un cosquilleo, que indica una rá-
.. r--
""
-. pida vibración.
¿Qué pasa si apoyando fuert;emente
nuestra mano impedimos que la cam-
pana siga vibrando? Todos hemos hecho
alguna vez esa experíencia y conocemos
el resultado: el sonido se apaga rápida-
mente. Es decir, parece que el sonido es
causado por la vibraci.ón, puesto que,
terminada la vibracwn, el sonido se
apaga.
Pensemos en otros casos, para ver si
podemos confirmar esta sospecha .
¿Cuándo se produce un sonido en nn ~
piano? Cuando apretando una tecla ha-
cemos que el pequeño martillo golpee la
cuerda y la haga vibrar. Del mismo

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:

Si hacemos funcionar un timbre eléc-
trico o un despertador dentro de una
campana de vidrio, se produce un so·
nido que se propaga por el aíre ence-
rrado en la campana. hasta alcanzar el
vidrio; luego se transmite a través d
éste y llega al aire exterior, y a nP
tros oídos. ·
Si hacemos el vacío dentro de la cam·
pana, no hay aire que propague el so·
nido desde el timbre hasta el vidrio, y a
pesar de que vemos al martillo gol-
peando en la campanilla, no oímos
nada.
-~ ..
ra hacer sonar una cuerda de
;:ru.:,; _ :-0
.,-~-:-~ o de violín hay que hacerla
• .;_, ;,: En todos los casos llegaríamos a
~ - •- · .:onclusión:

- ~ ...-; .:: ; .-=:: ..:~!:!:; ¡_:Jr u;; mo;.tirr.fcnto

--
Vacío

- "";= • El ronido 1t&'l.'Sita wr 1utdio n1aJe1ial para pro·


pagarse.

LOS LÍQUIDOS TRANSMITEN EL SONIDO

un nadador ¡:1uede ofr debajo del agua el golpe de dos


piedras, o el ruido del motor de un barco, o bien la conver-
sación de dos personas:

1 (.
' '
111< llllllll'I El sonido "" propo,gn a tnwts del <W"'-

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LOS SÓLIDOS TRANSMITEN EL SON IDO


Aplicando el oído sobre las vías del ferrocarril puede ~
cucharse la marcha de un tren distante . El oído apficado ar
suelo percibe el galope del caballo que aún no se alcanza a
divisar.
Los chicos suelen jugar con un "teléfono" construido con
un piolín tenso entre dos cajitas de lata: el piolín transmite
el sonido, con lo cual puede sostenerse una conversación
entre dos puntos alejados.
- .¡_"" ~
..
l
'
... '.- . --
""\.

p. .... •.·

:u
L - -,!"~
}uve11 escuchando so11ido co11 el
rJído pegatlo a la mesa.

·v elocidad de propagación

Para medir la velocidad de propaga- entre la producción d~l sonido en A y su


ción del &onido, se sitúan dos observa- llegada a B.
dores, separados por una distancia co- Recordando que una velocidad se ob-
nocida. El observador A hace un dis- tiene dividiendo una distancia por el
paro. El observador B, al ver el fogo-
nazo, .pone en marcha un cronómetro, y
tiempo empleado en recorrerla, v = ~,
en el instant.e de oír el ruido del disparo basta reemplazar los datos y se obtiene
detiene la marcha del mismo. El cro- la velocidad del sonido, que en el aire es
nómetro señala el tiempo transcurrido de aproximadament.e 340 m/s.

Cómo medi1· la vdocidad del sonido.

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Velocidad en el agua
y en los sólidos EJEMPLO
A los 6 segundos de ver un relám-
La velocidad del sonido en el agua pego se oye el trueno. Calcular a quli
dulce es de l 435 mis; en el agua de rli.<:.t:.nr.i~ .tt;A pmdujn.
mar, 1 500 m/s.
En el latón es unas 10 veces la veloci-
dad en ei aire, y en el hierro, unas 15 d = v i = 340 m/s · 6' ~ 2 000 m
veces.

; CÓMOOIMOS

Las ondas sonoras penetran en el oído por el canal audi·


tivo, que mide unos 25 mm, y al llegar a su extremo chocan
con el tímpano, que es una membrana delgadisima (de
aproximadamente 0.000 1 m), sujeta muy tensamente por
los huc~:o del erónco. Es como el parche de un tarnbor, y a
ello debe su nombre. Al llegar la onda sonora, el tlmpano
vibra, y esta •ibración se propaga hacia adentro, mediante
los huesecillos del oído, el primero de los cuales astá apo-
' yado en el tim~ano y el último en la ventana oval. por donde
1 la vibración pasa al laberinto.
No se sabe con certeza cómo es que ofmos, pero en el
laberinto hay una multitud de nerviecitos, que parecerían.
funcionar corro las cuerdas de un piano: cada uno de ellos
es sensible a un cierto sonido, y cuando es excitado, envía la
sensación al cerebro, el que elaborando todas las sensacio·
nes recibidas nos las hace percibir como sonidos.

llamaadol
»nJo 4\ldltlYO

E:squn11a dtl aparato


audífivo hun1ano.
-- -··- -
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Características
de un sonido

Hay un aparato sumamente sencillo


que nos permitirá averiguar bastante Las vibracÜJnes de un diapa-
acerca de los sonidos: es el diapasón. són pueden inscdbirse en una
Cuando se lo golpea entra en vibración, f qia de papel.
produciendo un sonido que llama la
atención, y ya veremos por qué.
Si en el extremo de una de sus ramas
colocamos una pequeña aguja, podre-
mos inscribir el movimient.o de la rama
sobre una hoja de papel, como lo indica
la figura. Se obtendrá -una curva lla-
mada sinusoide. Si se conoce la veloci-
dad de traslación del papel, se puede
calcular el tiempo que emplea la rama
del diapasón en realizar una oscilación
completa, es decir, el período T.
Observaremos que las dos sinusoides
Intensidad y altura tienen la misma amplitud, pero el so-
nido más alto ha inscripto una sinu-
Si ahora golpeamos el mismo diapa- soide más apretada, es decir que el so-
són con mayor fuerza, el sonido produ- nido de mayor altura tiene un período
cido sólo se diferenciará del anterior en menor. Como en acústica se habla de la
que es más intenso. ¿Cómo se refleja en frecuencia más que del período, diremos
la sinusoide esa mayor intensidad? (recordando que la frecuencia es la in-
Simplemente, la amplitud de la sinu- versa del período):
soide es ahora mayor, pues es mayor la
amplitud del movimiento vibrat.orio: A mayor frec uencia, sonído más alto (o más
agudo).
A mayor amplitud, sonido más rntenso.

Tomemos ahora dos diapasones que


produzcan sonidos diferentes, y obser-
~ -WJ- -·
- ... . - -
--
vemos las sinusoides que inscriben, - - -- - --
para ver la diferencia. Para simplificar,
h agamos que los~ dos sonidos tengan la A m D;mr .fi·ecw.•ncia (me1101· lo11gitud de onda),
misma intensidad. ma}'or altura del sonido o sea _sonido más
agudo.

- ~- ---~
~~

A ma,1'0r amplitud de la vi/Jradón, 111c~1·ur i11te11-


sidad del sonido.

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El rliapaSón emite
un sonido puro .....

En la hoja de papel en donde el día- ..


~n inscribe su movimiento, se ob-
><'l"'-a una sinusoide perfecta. Ello re-
~-ª que el sonido que produce el díapa-
!'G.:> e3 un sonido puro, es decir que no i..¡
e,;-.i mezclado con otros. En general, no
~tamos acostumbrados a 0$Cuchar soni-
¿..io; puro~. y por eso nos sorprende el

»
"
\
.
NO ido de un diapasón. Los instrumen-
:o> musicales no emiten sonidos puros. .
:tino que cada nota es un conjunto de ~·~.·"ii!i>:'l~.f.'.~
;onidos producidos simultáneamente.
f.I "Jtou,br1.· ,.,,,,,," P'ttvlt> of1· ,felxy'o del «$1t« t•I
ruido tUI 1J10UJ1· de un barco.

El ámbre ~ea on intensidad, ya sea en frecuencia.


El conjunto de sonidos que acompañan
Cna misma note musical, producida. al fundamental es lo que da el timbre.
¡:>Jr un piano y por un violm no suena Por el timbre reconocemos la voz de
i.gual. La diferencia se debe a que el una persona, de un cantante, por ejem-
;on1do fur1damental, si bien se halla plo, aun cuando otros produzcan las
pre:;ente en los dos casos, está acompa- mismas notas con la misma intensidad
ñado de otros, di stintos en cada caso, ya y con la misma frecuencia.

GAMA DE LOS SONIDOS PERCEPTIBLES


POR EL OÍDO HUMANO
El oido hurmno "61o puede percibir los sonidOG compren-
didos entre cie1:os límites de frecuencia. Fuera de ellos, el

,
oldo permanece sordo. El límite inferior esU. entr1! las 16 y
>..........

. '

7 ;¡¡;:;:;>'

Fot~n.fia de lo •'04' de t111 mr1rd~·


Ca.J'Q· U11u pel'~f.Jl1t1 110 ~ sus chi-
:idos ptro el oscilbgrafa 10$ r,...Ja.

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20 vibraciones por segundo. Es decir, el sonido más grave


que se puede oír está comprendido entre dichas frecuen-
cias. El límite superior, muy variable de una persona a otra,
se puede colocar en 20 000 oscilaciones por segundo. Más
allá de dicha frecuencia no se percibe ya sonido alguno. Sin
embargo, sonidos de frecuencia superior a aquella que el
oído humano es capaz de percibir, son captados por anima-
les como el perro.
Es muy curioso lo que pasa con los murciélagos. Mucho
antes que el hombre inventase el vuelo a ciegas, los murcié-
lagos lo realizaban con extrema eficacia. Se ha comprobado
que, en efecto, estos mamíferos voladores son capaces de
volar en cuartos absolutamente privados de luz. Al comienzo
se creyó que podían tener ojos superdotados para las mayo-
res oscuridades, pero una experiencia demostró que esta
hipótesis no era correcta: se taparon con tela adhesiva los
ojos de algunos murciélagos y se los soltó en habitaciones
llenas de obstáculos. Los animalitos volaron sin dificultad.
Entonces se pensó q1:1e quizá tuviesen un oído extrema-
damente fino. Y, en efecto, así era, pues cuando se los soltó
con los oídos tapados, perdieron su facultad de volar sin
tropezar en la oscuridad. Los físicos averiguaron enseguida
cuál era el mecanismo de estos pilotos nocturnos. Micrófo-
El timbre de un son ido eslá nos especiales revelaron que, durante el vuelo, emitían gri-
dado por el conjunto de soni- tos agudísimos, inaudibles para el hombre, pues llegaban a
dos que acomparian al sonido las 50 000 vibraciones por segundo. Estos ultrasonidos emi-
fundamentaL tidos por los murciélagos se propagan a unos 340 mis en
torno del animal; al llegar a un obstáculo cualquiera, las
ondas son reflejadas y vuelven hacia el murciélago, que se
informa así de los obstáculos que tiene delante. Como se ve,
un verdadero radar sonoro.

y el sonido producido es así mucho más


Resonancia intenso.
Con el piano es sencillo realizar una
experiencia de resonancia: se pisa una
tecla, por ejemplo la correspondiente a
Si hacemos vibrar un diapasón y lo la nota do, tan lenta.mente que el marti-
colocamos frente a la boca de W1 tubo llo no alcance a golpear la cuerda, y se
con agua, cuando la columna alcanza la mantiene apretada; luego se van to-
cierta altura el sonido se hace más in- cando otras notas, cada una con un
tenso. Esto se debe a que la columna de golpe seco. Se observará que cuando se
aire del tubo se pone a vibrar, y sus tocan cierta.s notas, aquella cuya tecla
oscilaciones, de frecuencia igual a la del tenemos apretada comienza a sonar, sin
diapasón, refuerzan las de éste, aumen- que la hayamos tocado. El sonido es
tando su intensidad. La columna de aire máximo cuando tocamos los otros <loes.
del tubo vibra por resonancia. El fenómeno de resonancia no sólo se
Los diapasones llevan cajas de di- produce con ondas sonoras, sino con
mensiones adecuadas, de modo que toda clase de vibraciones. Cuando una
cuando los hacemos vibrar la columna tropa de soldados marcha sobre un
de aire de la caja vibra por resonancia, puente, se les hace (Cromper el paso" para

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evitar que la frecuencia del movimiento


rítmico de la tropa pueda coincidir con
la frecuencia de la vibración propia del
puente. Cuando ello ha ocurrido, los
efectos siempre han sido terribles: al
entrar en "resonancia" el puente, vibra
con frecuencia doble a la propia y se
destruye.

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r U1 ji·c·r:tu.·J1cit' t!S 1uu,1vr ,.,, lo que ri.L•Jtt.' ltll'"º"
El sonido del dúi-
1
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11-anra. Es nlU.1' tJ.til estudiar las ondas e1r super.
fa:ies liquidas.
pastln se ..- r<for-
:.odo al alca11zar
tl aguA un deter-
nrbiado 11lveL Reflexión del sonido
En resumen: un cuerpo vibra por re-
sonancia cuando a él llegan vibraciones Si arrojamos una piedra en un estan-
de frecuenc.ia igual a la propia de vibra- que, se producen ondas que se propa-
ción del cuerpo. gan; al llegar a las paredes se reflajan y
vuelven en sentido contrario. De un
Fi~rus"ó.S a la vez curiosas}' lu·11uosas forniada.s modo semejante, las ondas sonoras se
ottr 1·¡1>ro1·if11u·:-: r/1• unn Sltf')('t:ficii· ( /{· ,' {lict:r i u11.
reflejan cuando encuentran una super-
ficie dura en su camino. Colocando un
reloj e.n el fondo de un tubo, sobre obje-
tos blandoo, no puede escucharse su
marcha a cierta distancia del mismo. Si
en la boca del tubo colocamos un plano
como índica la figura, el sonido se refle-
jará en él y podrá ser escuchado.

'
Rrjle.ri6'1 dr ondas "' •I agua.
Para uso exclusivamente didáctico.
Eco

Una persona que emita un grito a


cierta distancia de una pared vuelve a
percibir el mismo instantes después.
Esto se debe al eco, que es la repetición
de un sonido causada por su reflexión.
Al emitir un sonido en las montañas,
sobre todo en ciertos lugares, se escucha
el eco no una, sino varias veces, por las
. sucesivas reflexiones en las laderas.
Refle.r:ión de ondas
sonoras.

El eco es debido a la refle-


xión del sonido.

ABSORCIÓN DEL SONIDO

Si arrojamos una pelota contra el suelo duro, rebota. El


suelo devuelve el golpe. En cambio, si arrojamos la pelota
sobre una cama ésta absorbe el golpe, y la pelota no rebota,
no se refleja.
Lo mismo ocurre con las ondas sonoras. Si encuentran
superficies duras, se reflejan en ellas; si encuentran corti-
nas o materiales a prueba de sonidos, son absorbidas. La
propiedad de ciertas sustancias a prueba de sonidos es
aprovechada en los teatros y cines modernos para evitar la
reverberación o producción de ecos múltiples.

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FE • <

Sala tkl Ro}"11 Frsti"'21 HuU, w,,d,..,..


Transmisor Receptor
Polioulo
r uante de de ~=o
ei"'t•~,c.,.Det.eotor
!mpul.<>8
-1t raaónicoa
LAS ONDAS ULTRASÓNICAS

Haces Las ondas ultrasónicas tienen muchísimas aplicaciones


/.-J-;;:::fr•fl.j prácticas. Ya en la guerra del 14 se las empleó para d escu·
jadoe bri r la presencia de submarinos. Se las apica lambién en la
detenninación del lugar preciso donde está un barco hun·
dido, en la medición de profundidades, en ubicar un cardu·
men, resultando así un exc~' P.ntP. ~1. ~il iar para la pesca.
Uno de los medios de producir ondas ultrasónicas es
aprovechar el fenómeno piezoeléctrico: cuando los lados
opuestos de una lámina de cuarzo están sometidos a un
voltaie eléctrico, la lámina se contrae o se dil ata levemente.
Si se aplica un voltaj e alternado, la láltina se dilatará y
contraerá tantas veces por segundo como cambie el voltaje,
F'onde del lingote y así entrará en vibración. Se comprende, en tonces, que si
1 se aplica un volta¡e alternado, de unas 10 000 vibraciones
Cdmo .uscub1ir fal/a.s .., las por segundo, se escuchará un zumbidO; pero si se aumenta
bamu mctcllit:o.s mtlliank ,... el número de vibraciones, por ejemplo a 60 000 por se.
fe.z:ldn .U ondM ultnisorronis. gundo, se habrá producido un ultrasonido.
Se los utiliza mucho en la industria, para descubrir fallas
en los metales. Al efecto, se produce una :J11da ultrasónica,
que se transmite a través del metal, hasta llegar a la cara
opuesta, donde se refleja y es captada por el detector. SI en
..J el camino encuentra una falla, la onda se refleja en ella , y el

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eco llega al detector, donde se aprecia la diferencia, por el
eco producido en la cara opuesta.
Qtras de las aplicacione~ de las ondas ultrasonoras es la
de matar microorganismos: al enfocar sobre ellos un haz
ultrasónico, los hace entrar en rapidísima vibración, con lo
cual mueren. También se las utiliza para fabricar emulsio-
nes. Por ejemplo, un haz ultrasónico elimina la superficie de
separación entre el aceite y el agua , a causa de la rápida
vibración, formando una emulsión de gotas pequeñísimas.
También se ha experimentado con el calentamiento produ-
cido por los ultrasonidos: un ratón sobre el que se enfocó un
haz, llegó a aumentar su temperatura hasta los 113º C.
Otra aplicación muy importante es en la eliminación del
humo que sa le por las chimeneas de las fábricas. Cuando el
haz ultrasónico incide sobre el humo, las pequeñísimas par-
tículas en vibración se agrupan entre sí, formando pa rtícu-
las más grandes, que caen rápidamente.

Superficie de fael oíl sometida a vibraciones su-


pe1·sónicas en los laboratorios de Esso.

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