UNIVERSIDAD DEL VALLE

CIENCIAS EMPRESARIALES Y SOCIALES

Dirección y Gestión de Microempresas

MATEMATICA FINANCIERA

LIC : MIGUEL VARGAS PONCE

NOMBRE : BORIS PAOLO HUANCA COLQUE

FECHA : 05 / 06 / 2023

LA PAZ – BOLIVIA
INTRODUCCIÓN

En este capítulo 2 se habla sobre la gestión financiera en el contexto de las microempresas. Se

enfatiza la importancia de acceder a fuentes de financiamiento tanto para iniciar como para
mantener la actividad de la empresa. A continuación, se mencionan algunas fuentes comunes de
financiamiento para las microempresas

DESARROLLO

LA GESTION FINANCIERA

Fondos propios: Muchas microempresas comienzan con el capital inicial proveniente de los
ahorros del emprendedor, su familia o personas cercanas. Los ahorros personales suelen ser una
fuente fundamental de financiamiento.

Crédito comercial: Implica obtener préstamos de instituciones financieras como bancos. Sin
embargo, financiar el capital inicial de esta manera puede ser arriesgado, especialmente si se
requiere garantía hipotecaria. Es importante tener en cuenta los riesgos y la capacidad de generar
ingresos suficientes para pagar los intereses del préstamo.

Inversores privados: Los “business angels” son individuos con dinero que están dispuestos a
invertir en nuevos proyectos empresariales. Estos inversores pueden proporcionar capital a cambio
de una participación en la propiedad de la empresa. Esta opción puede aliviar la carga de los pagos
de intereses, pero implica renunciar a parte de los beneficios futuros y, a veces, a la independencia
en la gestión.

Microcrédito: Es una fuente de financiamiento conveniente para los microempresarios que no

tienen suficientes fondos propios. El microcrédito es un préstamo de pequeña cantidad que
generalmente no requiere garantías ni avales. Sin embargo, se suele exigir un plan de negocio bien
elaborado y viable.

Subvenciones y ayudas públicas: Las administraciones públicas suelen ofrecer subvenciones y

ayudas para apoyar a los nuevos emprendedores. Estas subvenciones pueden ser una forma de
financiamiento a fondo perdido para fomentar ciertas actividades o lograr objetivos específicos.
Aunque el proceso puede ser complejo, es importante investigar las oportunidades disponibles.
Si la actividad de la empresa fuera más o menos estable en el tiempo, el capital circulante podría
financiarse del mismo modo que el capital inicial, con

Fondos propios o microcréditos, por ejemplo (y en algunos casos, sobre todo

En los inicios de la microempresa, no hay a menudo más remedio que hacerlo así). Sin embargo, en
realidad, la actividad de muchas empresas fluctúa

Considerablemente a lo largo del año (estacionalidad) o tiende a incrementarse cada año

(crecimiento). En estos casos, es conveniente tener acceso a

Fuentes de financiación más flexibles.

La contabilidad se puede llevar de manera manual o usando alguno de los Paquetes informáticos
disponibles en el mercado para las pequeñas empresas. Hay que destacar que la contabilidad para
la gestión no siempre coincide, en criterios, procesos y necesidades de información, con la
contabilidad

Financiera que exige la legislación mercantil (recogida en el Plan General

Contable vigente). Para complicarlo todavía más, la contabilidad que requieren las autoridades
fiscales, básicamente la Agencia Tributaria, implica también criterios sensiblemente diferentes a los
de la contabilidad financiera.

Por todo esto, y por la importancia de disponer de un buen sistema de contabilidad, en el caso de
que el microempresario no tenga suficientes conocimientos contables, es muy conveniente que
busque asesoramiento profesional externo o que siga algún curso de formación específico.

CONCLUSION

Además de obtener financiamiento, es crucial para los microempresarios controlar

adecuadamente los ingresos, gastos y flujos de efectivo generados por su actividad. La contabilidad
básica, que incluye el balance de situación y la cuenta de pérdidas y ganancias, es necesaria para
mantener un registro de la posición financiera de la empresa y sus operaciones económicas.

En resumen, la gestión financiera en las microempresas implica encontrar fuentes de

financiamiento adecuadas, controlar los ingresos y gastos, y mantener una contabilidad básica para
una buena administración de la empresa.