Está en la página 1de 2

Las Fronteras del Espacio

En el siglo XVII Europa había tomado el relevo a oriente medio como gran centro
mundial de las matemáticas, se había hecho grandes avances en la geometría de los
objetos fijos en tiempo y espacio.

Descartes nació en el 1556, se estableció en Holanda y se convirtió en uno de los líderes


de la nueva revolución científica que negaba la idea de que el sol giraba alrededor de la
tierra, una opinión que había causado graves problemas con el Vaticano hacia
científicos como Galileo.

Fundó el álgebra y la geometría para poder trabajar con las formulas y figuras, una
especie de diccionario entre los dos, este diccionario se publicó entre 1637 en Holanda.

En un espacio de dos dimensiones cualquier punto puede ser descrito por dos números,
uno indica una posición horizontal y el vertical cuando el punto se mueve alrededor del
círculo las coordenadas cambian, pero podemos escribir una ecuación que identifique
los cambios de valores de estos números, de cualquier punto de la figura. De pronto la
geometría se había convertido en álgebra y no hay duda de que Descartes fue uno de los
grandes de las matemáticas, su teoría de la conexión entre la geometría y álgebra
transformó para siempre las matemáticas

En el siglo XVII había un monje palestino que había ido a la misma escuela que
Descartes, veía las matemáticas como una ciencia que probada la existencia de Dios.
Fue un matemático de primer orden, uno de sus descubrimientos fueron los números
primos, llamados así en honor a él, pero también es famoso por su correspondencia,
desde su monasterio en parís Marín actuaba como una especie del servidor de Internet
del siglo XVII, recibiendo ideas y difundiéndolas, animó a la gente a que leyera el libro
de Descartes sobre la geometría y la publicidad a los nuevos descubrimientos de las
propiedades de los números, realizado por un matemático desconocido que apareció
para rivalizar con

Descartes como el mejor matemático de su época, Pierre Fermat la mayor contribución


a las matemáticas fue la teoría moderna de los números, incluyendo el último teorema
cuya demostración tuvo en jaque a los matemáticos durante 150 años.

Fermat extrañamente solo hacia matemáticas en su tiempo libre.

Su teorema de números primos, si tiene un número primo que al dividirlo entre cuatro
queda uno como consciente, Fermat demostró que se puede conseguir siempre ese
número mediante dos números al cuadrado. El teorema de Fermat tuvo una gran
aplicación muy seria, son los códigos de nuestras tarjetas de crédito en Internet, la
tecnología que confiamos actualmente proviene de los garabatos de los matemáticos del
siglo XVII. La utilidad de las matemáticas no es nada comparado con el gran
matemático que no es de Francia sino de Gran Bretaña, el gran Isaac Newton.

Newton cuando tenía 22 años, en dos años milagrosos desarrolló una nueva teoría de la
luz, descubrió la gravedad y el cálculo.
El cálculo de Newton nos enseña a comprender el mundo cambiante, a través del
cálculo podemos tener la precisión matemática del complejo y siempre cambiante
mundo natural. Pero también tenía un rival que poco tiempo después desarrolló su
teoría, Lenny, tenía 29 años cuando en dos meses desarrolló el cálculo diferencial y el
integral.

Lenny viajó por toda Europa representando sus intereses, e hizo contribuciones a la
filosofía y la lógica, también fue uno de los primeros en inventar máquinas de cálculo.
A contrario de Newton él quería presentar el cálculo a los demás matemáticos de
Europa, pero Newton lo acusó de plagio y le quitaron merito, murió en el 1716. Newton
murió 11 años después con honores, para las ironías de la vida fue que las matemáticas
de Lenny triunfaron más que las de Newton.

Gaus a los 12 años ya discutía la geometría de Euclides, a los 15 descubrió una nueva
pauta de los números primos que pasó por inadvertida durante 2000 años, a las 19
descubrió la construcción de una figura de 17 lados que nadie sabía que existiera y se
animó para escribir un diario en latín, el diario de gaus se adelantó 100 años. Es el
primer indicio de la teoría de la función eléctrica, en el siglo XVI Y XVII. Los europeos
imaginaron la raíz cuadrada de menos uno y le dieron el símbolo ‘i’, números
imaginarios,

Los números imaginarios han ayudado a entender las ondas de radio y a construir
puentes y aeroplanos son incluso la clave de la física cuántica, la ciencia del mundo sub
atómico.

‘‘La distancia más corta entre dos puntos si esto abre una superficie, no es una línea
recta, sino una curva de un triángulo. Y las distancias más cortas son una triangulo
de 180 grados’’.

También podría gustarte