¿Cuál es la naturaleza de la Teología, su identidad y propósito?

Damián Stiven Sierra Chacón

Seminario Mayor La Providencia, I de Teología
Introducción a la Teología
Pbro. Giovanni Aguirre (ThD)
26 de mayo de 2023
 ¿Cuál es la naturaleza de la Teología, su identidad y propósito?

La Teología es un tema bastante amplio de abarcar, incluso, darlo a conocer dentro

de los ámbitos eclesiales como también fuera de ellos, sobre todo, en atención a su

contenido: la Revelación y los distintos medios que usa para su trasmisión, medios, que, en

muchas ocasiones, no son propicios para llegar a cualquier persona o grupo de la sociedad.

Sumado a lo anterior, vemos el desarrollo que ha tenido la teología desde sus inicios, desde

la experiencia de fe de las comunidades cristianas, desarrollado en las Sagradas Escrituras,

hasta el progreso sistemático de una teología posterior al Concilio Vaticano II, atravesando

por los grandes periodos que han marcado un desarrollo teológico importante, sin hacer

juicio valórico1, ni tomando una postura radical, vemos el periodo patrístico con las

catequesis acerca de temas teológicos específicos; luego, la escolástica y todo el desarrollo

sistemático de la teología en los comentarios, sentencias y sumas: posteriormente, la

contrarreforma del Concilio de Trento ante la reforma protestante y toda la doctrina referida

a las Sagradas Escrituras y Sacramentos; luego, el Concilio Vaticano I y toda la respuesta

de la Iglesia ante el modernismo y el racionalismo que llevo a postular criterios firmes e

incuestionables sobre Dios, su conocimiento y todo lo que pueda desprender de él. Y por

último, llegamos a la teología actual que se desprende del Concilio Vaticano II, y todo el

“aggiornamento”2 que provocó en la teología a nivel integral pero, sobre todo, el carácter

pastoral (por ser categorizado como Concilio Pastoral) que influyó en el acercamiento a

todo el Pueblo de Dios.

1
Componente que distingue la evaluación de una descripción o de un proyecto de investigación.
2
Movimiento de renovación y modernización de algunas de las posturas de la iglesia católica después del
concilio Vaticano II (1962-1965). Aggiornamento es un término italiano utilizado durante el Concilio Vaticano
II y que los papas Juan XXIII y Pablo VI «popularizaron como expresión del deseo de que la Iglesia católica
saliese actualizada del Concilio Vaticano II».
 A partir del desarrollo superficial de algunas cuestiones teológicas mencionadas,

podemos preguntarnos sobre ¿Cuál es la naturaleza, identidad y propósito de la Teología?

A lo primero, queda de manifiesto su naturaleza, partiendo de su misma palabra. Su

etimología destacará claramente lo que expresa en su sentido profundo, pero esencialmente

más simple, la Teología que tiene su raíz en el griego: θεος (Dios) y λογος (estudio,

tratado), cuya realidad no se puede separar del ámbito de su desarrollo, comprensión e

investigación o estudio; ahora bien, se puede decir que su fundamento radica esencialmente

en el dato Revelado, es decir, directamente de la Sagradas Escrituras; pero, va mucho más

allá de ellas, implica una experiencia de Dios, un encuentro íntimo con el Ser, un

conocimiento más profundo, una vivencia en su vida íntima: la Trinidad. Pero también, no

menos importante es, un encuentro con el otro (llamado prójimo) en la sociedad donde se

encuentra (el cosmos, la creación).

A propósito de lo mencionado sobre la Sagradas Escrituras como base de la

Revelación y, en consecuencia, el objeto propio de la Teología, cabe observar

objetivamente como dato histórico, que la escritura del A.T data aproximadamente hacia el

período del éxodo (1400 a.C) y la monarquía (587 a.C); en símil, el N.T: fue escrito entre

los años 65 al 110 d.C, posterior a la muerte de Jesús de Nazaret, figura fundante y central

de la redacción del mismo3. A partir de esto, la persona de Jesús (Jn 14, 6) se convierte en

la experiencia fundamente de las primeras comunidades con Dios, en la Gracia del Espíritu

Santo, quien procede de la promesa hecha por Dios y su Hijo desde el A.T, que se

manifiesta en la Encarnación del Verbo (Lc 1, 26-38), en la muerte de Jesús en la Cruz (Jn

19,30), concretizada y llevada a plenitud en el día de Pentecostés (Hch 2,1-13), este último

3
Sabiendo que los primeros textos encontrados son los de San Pablo, y el relato de la Pasión que se
convierte en la trama de los Evangelios.
que sirvió como impulso necesario de la fuerza de Dios para la trasmisión del testimonio de

los Apóstoles, mandado por el mismo Jesús en el Evangelio de Marcos 16, 9-15, hasta

nuestros días.

En efecto, como vemos, es la experiencia de vida la que condiciona el ámbito

religioso de cada hombre en la historia, en consecuencia, es la experiencia personal y

comunitaria de Dios la cual va dando sentido a la Teología y todo su desarrollo ya que, la

teología como ciencia, implica el dato revelado, pero, a la vez, implica todas las ciencias

auxiliares o complementarias que nos permiten hacer una interpretación y exposición del

estudio de Dios. Sin embargo, no significa que se condicione la imagen de Dios, sesgando

su amor y limitándolo simplemente a una experiencia personal o a un conocimiento

meramente racional, es mucho más que eso, es ese plugo del Ser que quiere revelarse a los

hombres en un dialogo de amor en la escucha (Fides Ex Auditi), en la aceptación de su

reinado (Assensus Fidei) de parte de los hombres, y la comprensión en la experiencia

razonal y vivencial (Intellectus Fidei) de Dios que, como decía Platón en la Republica, llega

por medio del intelecto, ascendiendo desde el mundo sensible hasta el inteligible (Teología

natural o Razón natural), aunque sin olvidar nunca el Sensus Fidei, algo muy destacado en

el Concilio Vaticano II, que es fruto de la gracia de Dios y acción del Espíritu Santo que

actúa sobre el creyente y la comunidad para que comprenda y crea en el único Dios

Verdadero manifestado en el hoy y en el mañana del hombre, en fin, en su realidad.

Conviene subrayar que otro medio para acercarse a esa experiencia de Dios, que es

la identidad propia de la teología, parte del diálogo con ese Ser en la realidad personal y

natural de cada hombre (Ex 33, 11), es a través de la celebración litúrgica, por ejemplo, que

el hombre pone de manifiesto su fe y creencia ante la presencia verdadera de Dios; ya que,

por medio de los signos y símbolos sensibles, del acto celebrativo, el hombre evoca su

trascendentalidad, es decir, que la dimensión expresiva innata en él, podrá realizar un acto

significativo, ritual y festivo dentro de un lugar y de un tiempo concretos, participando así

de la dimensión espiritual personal y comunitaria como comunicación de un realidad

extrasensorial dentro de ámbitos sensoriales (Misterio); partiendo de un hecho concreto

desde el aspecto cristiano: Jesús de Nazaret, en su misterio Pascual.

Por otra parte, se puede inferir que son necesarios los métodos y las ciencias que se

han gestado en el tiempo, en especial el método trascendental, que es el primer postulado

de la Teología, que parte de la experiencia sensible a una realidad que va más allá de lo

comprobable, pasando por el método científico, para llegar así al Hermenéutico que analiza

la Revelación dada en la creación y la historia. También, es menester que se use el método

histórico-crítico, que, tomando las Sagradas Escrituras en su contexto, analiza específica y

críticamente en quien está su fundamento (Jesucristo).

A pesar de todo esto, hoy, según Rolheiser (2018), el ámbito Teológico de creer en

Dios, es bastante ingenuo, porque se convierte en creer en algo surrealista 4, imaginario,

como Papá Noel y el Conejito de Pascua, pero no en algo real, concreto, que permanece en

el tiempo a base de la fe arraigada en cada persona con una profunda experiencia del

encuentro; además, que nos permita instruirnos en la realidad divino-espiritual de una

manera adulta y responsable, en otras palabras, con madurez y compromiso. En

consecuencia, el propósito de la Teología, a parte de una comprensión de las verdades de fe

reveladas por Dios, a la luz de la razón natural de cada hombre, es que cada teólogo pueda

incentivar, ayudar y madurar en este conocimiento del encuentro con Dios, encuentro que

4
Según la Rae, que es irracional o absurdo.
abarca desde la realidad más intimada del hombre (alma) hasta la realidades más

superficiales (sensible), abriendo paso a la gracia de Dios que permite que cada hombre, al

conocer la vida íntima de Dios, pueda llegar a la contemplación gozosa de ella, siendo

consciente de que día a día se va desarrollando el conocimiento en vía a la perfección del

hombre que se traduce en la bienaventuranza.

Referencias
Rolheiser, R. (03 de 06 de 2018). El Horizonte la verdad como es. Obtenido de Ron Rolheiser|
Misericordia, verdad y práctica pastoral:
https://www.elhorizonte.mx/opinion/editorial/misericordia-verdad-y-practica-pastoral/
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