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Impresión QUIÉN VIENE A CENAR
Impresión QUIÉN VIENE A CENAR
CABALLOS:
VACAS:
Las vacas no son tan selectivas y no comen tan cerca del suelo como caballos y ovejas
Usan su hábily largalengua para introducir el pasto en su boca donde lo hacen rodar y
luego se lo tragan.
Más tarde, regurgitan y mastican su alimento para lograr una digestión adecuada.
Las vacas puede causar daños por pisoteo si el pasto está mojado o si existe suelo desnudo
A menudo pisotean una senda a lo largo de las cercas donde buscan mejor alimento en las
pasturas vecinas.
OVEJAS:
Las vacas y las ovejas solo tienen dientes en la mandíbula inferior y una almohadilla en la
superior, pero las ovejas pueden acercarse más al suelo porque tienen labios muy diestros
Dado que las ovejas pesan menos que las vacas o los caballos, es más probable que dañen
la pastura al cortar las hierbas muy abajo en lugar de pisotearla.
CABRAS:
Las cabras tienen labios increíblemente selectivos y un gusto especial por partes leñosas.
Raramente causan problemas de pisoteo, pero pueden ocasionar situaciones bastante
inusuales.
Finalmente, los cercos juegan un papel crítico en el mantenimiento de pasturas saludables y
productivas.
Hasta hace poco, el cerco era permanente, costoso y generalmente servía solo para uno o dos
tipos de ganado a la vez.
Hoy en día, los cercos eléctricos portátiles ofrecen una opción completamente nueva.
Se pueden usar en casi cualquier lugar, es duradero y económico. Por lo general, funciona con
baterías o paneles solares y pueden usarse para todo tipo de animales. Esta flexibilidad brinda a
los ganaderos más control sobre los hábitos de pastoreo de su ganado y ayuda a mantener las
pasturas exuberantes y saludables.
Es importante respetar las alturas de pastura que faciliten la cosecha por parte del ganado. Por
ejemplo en vacunos ofrecer pasturas de aproximadamente 15 cm de altura y respetando un
residuo mínimo de 5 cm.
Comprender los hábitos alimenticios de nuestros animales y aplicar ese conocimiento al manejo
del pastoreo puede conducir a mejorar la salud animal, pasturas más productivas y el uso
responsable de la tierra.
Recuerda, serás el “Vocero del pasto” siempre que primero preguntes: ¿Quién vendrá a cenar?