La psicología es una ciencia que 

se centra en el comportamiento humano. Si

bien la conducción es una actividad que implica mucho comportamiento humano,
también se considera una actividad práctica.

Según los expertos en psicología del tráfico, las personas tienden a conducir de
dos maneras diferentes: como si estuvieran siguiendo un algoritmo específico o
como si estuvieran creando el algoritmo ellos mismos. Los estudios muestran que
los conductores que son más conscientes de sus acciones mientras
conducen tienen más probabilidades de tener tasas de accidentes más bajas.

El futuro de la conducción utilizará la psicología y el uso de asistentes de

inteligencia artificial como Alexa y Siri para el reconocimiento de voz y el software
de reconocimiento de voz como IBM Watson, que puede ayudar a los conductores
a tomar decisiones en todas las situaciones.

La Psicología Aplicada a la conducción es una disciplina que abarca una gran

variedad de temas relacionados con la seguridad vial. Esta disciplina estudia cómo
la psicología puede ser aplicada para mejorar la seguridad vial y reducir el número
de accidentes de tráfico, lo cual es importante, ya que los accidentes de tráfico son
lamentablemente una de las principales causas de muertes alrededor del mundo.
Los conceptos básicos de la Psicología Aplicada a la conducción incluyen el
estudio del comportamiento humano y cómo este puede influir en la seguridad vial.
Esto incluye el conocimiento de la percepción, la memoria y otros factores
relacionados con el comportamiento, también ayuda a entender cómo los
humanos interactúan con el entorno para producir resultados seguros o peligrosos.
Cabe destacar que un elemento importante es que también estudia la motivación
que abarca el factor que motivan a los conductores a ser más seguros o menos
seguros y ayuda a comprender cómo los conductores se sienten motivados para
conducir de manera segura. Así mismo, también estudia cómo los factores
psicológicos pueden afectar la seguridad vial, como el estudio de la atención, la
toma de decisiones, el manejo de estrés y el comportamiento agresivo, ya que
todos estos factores pueden afectar a la seguridad vial, y estudiarlos ayudará a
comprender cómo prevenir los accidentes de tráfico.
Finalmente, la Psicología Aplicada a la conducción también estudia cómo mejorar
la educación vial y la formación para los conductores, incluyendo así el uso de
herramientas y tecnologías para mejorar el conocimiento de los conductores sobre
la seguridad vial, lo que ayuda a asegurar que los conductores estén bien
informados y sepan cómo conducir de manera segura.
En conclusión, la Psicología Aplicada a la conducción es una disciplina que abarca
una gran variedad de temas relacionados con la seguridad vial y que pueden ser
aplicadas para mejorar la seguridad y reducir el número de accidentes.