GENESIS 1:11.

Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba

verde, hierba que de semilla; árbol de fruto que dé fruto según
su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra, y fue así.

Estas plantas y árboles, se le dieron al hombre como alimento.

Desde el principio, la humanidad ha entendido el proceso de
sembrar y cosechar y lo ha puesto en práctica para su
beneficio.

OBJETIVO: Aprender COMO nos bendice Dios por medio de

la siembra y la cosecha.

SALMOS 126:5. Los que sembraron con lagrima, con regocijo

segarán.

La mayor parte de la Biblia fue escrita familiarizándose con el

trabajo de la tierra, el manejo del ganado y la producción de
cultivos.
Muchas de las parábolas de Jesús, se refieren a la vida
agrícola; por tanto, no nos extrañe que la Biblia contenga Dios utiliza la ley de la siembra y la cosecha para dar su
muchas referencias a la siembra y la cosecha. y este es uno bendición, la bendición de Dios alcanza a todo el mundo, ya
de los principios que aprenderemos. que envía el sol y la lluvia a justos e injustos.

Sembrar y cosechar, es una ley del mundo natural. En el MATEO5:45. Para que seáis hijos de vuestro Padre que está
tercer día de la creación, Dios ordenó a la tierra que produjera en los cielos, que hace salir el sol sobre malos y buenos, y
plantas vivas “con semilla”, y frutos con semilla. que hace llover sobre justos e injustos.
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 2 ministerio con la siembra, el riego con la cosecha, sugiere un
En algunos casos su bendición llega de manera más especial tiempo de espera. 3
a quien él elige, como, por ejemplo: a Isaac.
1ª CORINTIOS 3:6.
GENESIS 26:12. Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó
aquel año, ciento por uno; y le bendijo Dios.

El agradecimiento de Israel por la bendición anual de Dios se

expresaba en la Fiesta de las Primicias, cuando se traía al
Señor lo primero de la cosecha como ofrenda.

LEVITICO 23:10. Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando

hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies,
traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros
frutos de vuestra siega.

Sembrar y cosechar es también una ley del mundo espiritual.

Es más que un principio agrícola. Es una regla de vida que
cosechamos lo que sembramos.

GALATAS 6:7. No os engañéis; Dios no puede ser burlado;

pues todo lo que el hombre sembré, eso también segará.
Nuestras acciones tienen consecuencias, el mundo funciona
bajo la ley de causa y efecto. No hay manera de evitarlo; cada
vez que elegimos una acción, también elegimos las
consecuencias de esa acción.
El sembrar y cosechar, implica una espera: nada bueno crece
de la noche a la mañana. El agricultor debe ser paciente para
ver el fruto de su trabajo; cuando la Biblia compara el
Dios dará fruto para su gloria en su tiempo. Mientras tanto
nosotros trabajamos fielmente en su campo, sabiendo que a
su tiempo, segaremos, si no desmayamos.
GALATAS 6:9. No nos cansemos, pues de hacer bien; porque
a su tiempo segaremos, si no desmayamos.
Cosechemos lo mismo que sembramos que sembramos. Los
que plantan semillas de manzana deben esperar cosechar
manzanas, los que siembran ira deben esperar recibir lo que
la ira produce naturalmente. 5
4 El que siembra escasamente, también segara escasamente, y
GALATAS 6:8. Porque el que siembra para su carne, de la el que siembra generosamente, segara generosamente.
carne segara corrupción; más el que siembra para el Espíritu, 2ª CORINTIOS 9:6. Pero esto digo: el que siembra
segara vida eterna. escasamente, también segará escasamente; y el que siembra
generosamente, generosamente también segará.
Cada uno dé como propuso en su corazón; no con tristeza, ni
por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.

Cosechamos proporcionalmente a lo que sembramos. La regla

es que cuanta más semilla se planta, más fruto se cosecha. La
Biblia aplica esta ley a nuestra forma de dar. Los que
muestran generosamente, serán más bendecidos que los que R.F.T.S.
no lo hacen.
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